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Contexto histórico[editar]
Vicente I Gonzaga de Mantua, empleador de Claudio Monteverdi.
Claudio Monteverdi, nacido en Cremona en 1567, fue un prodigio musical que estudió
con Marc'Antonio Ingegneri, el maestro de capilla (jefe de música) en la catedral de Cremona.
Después de formarse en canto, cuerdas y composición, Monteverdi trabajó como músico
en Verona y Milán hasta que, en 1590 o 1591, consiguió un puesto como suonatore di
vivuola (tocador de viola) en la corte del duque Vicente Gonzaga en Mantua.4 A través de la
habilidad y el trabajo duro, Monteverdi se convirtió en el maestro della musica (maestro de
música) de Gonzaga en 1601.56
La particular pasión de Vicente Gonzaga por el teatro musical y el espectáculo surgió de las
conexiones de su familia con la corte de Florencia. Hacia finales del siglo XVI, los innovadores
músicos florentinos estaban desarrollando el intermedio —una forma de interludio musical
establecida desde hace mucho tiempo que se inserta entre los actos de los dramas hablados
— en formas cada vez más elaboradas.5 Liderados por Jacopo Corsi, estos sucesores de la
renombrada Cameratac fueron responsables de la primera obra generalmente reconocida
como perteneciente al género de la ópera: Dafne, compuesta por Corsi y Jacopo Peri y
representada en Florencia en 1598. Esta obra combina elementos de
canto madrigal y monodia con baile y pasajes instrumentales para formar un todo dramático.
Sólo existen fragmentos de su música, pero varias otras obras florentinas del mismo período
—Rappresentatione di Anima, et di Corpo de Emilio de' Cavalieri, Eurídice de Peri y la obra
homónima de Giulio Caccini— sobreviven completas. Estas dos últimas obras fueron las
primeras de muchas representaciones musicales del mito de Orfeo tal como se relata en Las
metamorfosis de Ovidio, y como tales fueron precursoras directas del Orfeo de Monteverdi.89
La corte de Gonzaga tenía una larga historia de promoción del entretenimiento dramático. Un
siglo antes de la época del duque Vincente, la corte había representado el drama lírico La
favola di Orfeo de Angelo Poliziano, al menos la mitad de la cual era cantada en lugar de
hablada. Más recientemente, en 1598, Monteverdi había ayudado al establecimiento musical
de la corte a producir la obra Il pastor fido de Gian Battista Guarini, descrita por el historiador
del teatro Mark Ringer como una «obra teatral decisiva» que inspiró la moda italiana por el
drama pastoril.10 El 6 de octubre de 1600, mientras visitaba Florencia para la boda de María de
Médici con el rey Enrique IV de Francia, el duque Vincente asistió al estreno de Eurídice de
Peri.9 Es probable que sus principales músicos, incluido Monteverdi, también estuvieran
presentes en esta actuación. El duque reconoció rápidamente la novedad de esta nueva forma
de entretenimiento dramático y su potencial para brindar prestigio a quienes estaban
dispuestos a patrocinarlo.11
Creación[editar]
Libreto[editar]
Entre los presentes en el estreno de Eurídice de Jacopo Peri en octubre del año 1600 estaba
un joven abogado y diplomático de carrera de la corte de los Gonzaga, Alessandro Striggio,12
hijo del bien conocido compositor del mismo nombre. El joven Striggio era él mismo un músico
talentoso; cuando tenía 16 años, había tocado la viola en las festividades de la boda del
duque Fernando de Toscana en 1589. Junto con los dos hijos pequeños del duque
Vicente, Francisco y Fernando, era miembro de la exclusiva sociedad intelectual de Mantua,
la Accademia degli Invaghiti, que proporcionó la salida principal para las obras teatrales de la
ciudad.1314 No está claro en qué momento Striggio comenzó su libreto para Orfeo, pero el
trabajo ya lo había emprendido en enero de 1607. En una carta escrita el 5 de enero,
Francisco Gonzaga le pedía a su hermano, entonces destinado en la corte florentina, que
obtuviera los servicios de un castrato de alta calidad de entre el personal del Gran Duque,
para una «obra con música» que se preparaba para el Carnaval de Mantua.15
Las principales fuentes de Striggio para su libreto fueron los libros 10 y 11 de la Las
metamorfosis de Ovidio y el libro cuarto de las Geórgicas de Virgilio. Estos le proporcionaron
el material básico, pero no la estructura para un drama escénico; los acontecimientos de los
Actos I y II están cubiertos por apenas trece versos en Las metamorfosis.16 Para ayudar a la
creación de la forma dramática, Striggio recurrió a otras fuentes: la obra de Poliziano del año
1480, la de Guarini Il pastor fido y el libreto de Ottavio Rinuccini para la obra de
Peri Eurídice.17 El musicólogo Gary Tomlinson señala las muchas similitudes entre los textos
de Striggio y Rinuccini y señala que algunos de los discursos en el Orfeo «se corresponden
estrechamente en contenido e incluso en locución a sus correspondientes en la Eurídice».18 La
crítica Barbara Russano Hanning escribe que los versos de Striggio son menos sutiles que los
de Rinuccini, aunque la estructura del libreto de Striggio es más interesante.13 Rinuccini, cuya
obra había sido escrita para las festividades de una boda de los Médici, se vio obligado a
alterar el mito para proporcionar un «final feliz», adecuado a la ocasión. En cambio, debido a
que Striggio no estaba escribiendo para una celebración formal de la corte, podía ser más fiel
al espíritu de la conclusión del mito, en el que Orfeo resulta muerto y desmembrado por
enfurecidas ménades o «bacantes».17 De hecho, optó por escribir una versión algo atenuada
de este sangriento final, en el que las bacantes amenazan con la destrucción de Orfeo, pero
su destino final se deja envuelto en duda.19
El libreto se publicó en Mantua en 1607 coincidiendo con el estreno e incorporó el ambiguo
final de Striggio. Sin embargo, la partitura de Monteverdi publicada en Venecia en 1609
por Ricciardo Amadino muestra una resolución totalmente diferente, con Orfeo transportado a
los cielos a través de la intervención de Apolo.13 Según Ringer, el final original de Striggio se
usó casi con certeza en el estreno de la ópera, pero no hay duda de que Monteverdi creía que
el final revisado era estéticamente correcto.19 El musicólogo Nino Pirrotta señala que el final de
Apolo formaba parte del plan original para la obra, pero no se representó en el estreno debido
a que la pequeña sala que albergó el evento no podía contener la maquinaria teatral que
requería este final. La escena de las bacantes fue una sustitución; las intenciones de
Monteverdi se restauraron cuando se eliminó esta restricción.20
Composición[editar]