Está en la página 1de 3

Organización Social Inca en el Tahuantinsuyo

La Organización social Inca durante el periodo del incanato tuvo varios sistemas que los incas utilizaron para tener una civilización
ordenada y agrupada de acuerdo a su origen. En la organización social de los Incas, el primer lugar lo ocupaba el Inca,
seguidamente la nobleza de sangre, la nobleza de privilegio, el pueblo, los mitimaes y los yanacunas.

Este post te ayudará a comprender mejor que los incas, no sólo eran increíbles arquitectos, sino eran muy hábiles y organizados en
el Tahuantinsuyo.

¿Cómo era la organización social inca?


La sociedad en tiempo de los incas era rígida y jerárquica. Estaban constituidas por una pirámide donde el inca se encontraba en la cabeza.
 El Ayllu
El ayllu fue el elemento fundamental en la organización social Inca. Era el trabajo comunitario hecho por familias, una parte de la producción era
destinada a la construcción de los templos, y la otra parte al abastecimiento del estado y la sobrevivencia de la población.
El ayllu era la agrupación de familias o una comunidad semejante a los clanes, unidas por vínculos de sangre, poseedoras de territorios, donde vivían y
trabajaban colectivamente. Gobernados políticamente por un solo jefe, el curaca.
La organización social de los incas era clasista
La sociedad incaica fue clasista, quiere decir que estuvo dividida en diferentes clases sociales.
Jerarquía social en tiempo de los Incas
Existieron 3 clases sociales básicas: la realeza, la nobleza y el pueblo.
1.. La Realeza Imperial
Estuvo conformada por la familia real del inca:
El Inca, era la máxima autoridad del Tahuantinsuyo. Era el encargado de ser el nexo entre los pobladores y el universo de dioses y ancestros.
Administraba los recursos y establecía alianzas con otros pueblos.
El Auqui, era el hijo del inca. Podría ser el primogénito o sus demás hijos. Todos los posibles incas pasaban a ser Auquis mientras el inca vivía.
La Coya, era la esposa principal del inca y pertenecía a su misma panaca, por eso se la consideraba su “hermana”.

2.- La Nobleza
Estuvo formada por algunas familiares y allegados del monarca. Eran los dueños de las mejores tierras, y a su vez se dividían en 4 clases:
Nobleza cusqueña, formada por toda la parentela familiar imperial reinante, cuyo distintivo consistía en deformarse las orejas por medio de
pendientes (aretes), a quienes los españoles los llamaron “orejones”.
Nobleza por asociación, estaba formado por los habitantes dentro de un sector geográfico bien definido. Esta gente eran considerados nobles.
Nobleza local, constituido por los curacas y sus familiares. Los curacas era los jefes locales y tribales de los pueblos conquistados. Una vez que éstos
conocían al inca, eran considerados nobles pero de menos jerarquía.
Nobleza de privilegio, eran las personas que, por su valiente labor en la guerra, eran incorporados a la nobleza por el inca.
3.- El Pueblo
Era la base del sistema social inca, constituido por el hatun runa y el yanaoca:
Hatun runa, eran los hombres campesinos de los sectores populares. Vivían en zonas rurales, en pequeños poblados y eran cuidadosamente
controlados por la administración estatal incaica. Sólo tenían derechos derivados de la organización comunal.
El yanaoca, quienes eran considerados súbditos directos del inca. Gran parte de ellos eran llevados al Cusco para utilizarlos en el servicio personal
del inca, de nobles, en la limpieza de los palacios, en las ocupaciones inferiores de la administración; otros se quedaban en diferentes partes del
Imperio al servicio de los principales.
Normas en la organización inca
En el Tahuantinsuyo todo era regido por normas y leyes; no estaban compilados en forma escrita en un código, eran más bien un derecho impuesto
por la costumbre; por lo que eran claras, precisas y poco numerosas. Cada uno sabía lo que debía y lo que no debía hacer.
AMA SUA              No seas ladrón.
AMA LLULLA      No seas mentiroso
AMA QUELLA         No seas perezoso
La conducta moral reposaba en estos tres principios, es decir, la honradez, la veracidad y el trabajo; constituían la base y el patrón de toda la legislación
en el orden jurídico y moral de los incas. El incumplimiento de estas normas, era considerado un delito en tiempo de los incas. Por lo tanto
la cultura Inca era muy organizada socialmente.
ADMINISTRACION DEL TAHUANTINSUYO La Burocracia.
 El imperio contaba con una organización administrativa, un conjunto de funcionarios designados por el Inca para colaborar con el manejo y
administración del Estado.
Funciones
a.-El tocricuc, que era el encargado del gobierno de una región;
b.-El tucuyricuc, que era un funcionario que viajaba por todo el territorio a manera de inspector, con autoridad para resolver problemas y
conflictos locales.
c.-El quipucamayoc, que era el especialista en el manejo de los quipus.
d.-El Cápac ñan tocricuc, que era el encargado de construir y mantener los caminos imperiales.
d.-Collcacamayoc, que era el administrador de los depósitos.
Quipus
El "Quipu" es en esencia un procedimiento menemotécnico perfeccionado conformado por una especie de cordeles de varios colores con nudos
cuya disposición permitía una lectura ideográfica
Sistema Vial
 Se denomina red vial incaica o la gran carretera de piedra, al entramado de caminos que conformaban el sistema vial del imperio incaico. Se
emplean los términos de: Capac Ñan y Qhapaq Ñan (en quechua: ‘camino real’ o ‘camino del Inca’) tanto para la totalidad de esa organización
de rutas como para el camino principal
 
Chasqui era el mensajero personal del Inca, que utilizaba un sistema de postas. El término no significa literalmente «mensajero», ya que solo
eran llamados así los embajadores o emisarios enviados por autoridades menores del Tahuantinsuyo, llamados (cachaq o cachaj) era un
funcionario de la Organización Inca (Inca).
ORGANIZACIÓN POLÍTICA DE LOS INCAS.
LA DIARQUÍA.- El sistema de gobierno diárquico supone la existencia de dos gobernantes que ostentan el mando a la vez. hanan y urin
I.- AUTORIDADES CENTRALES.
EL INCA.- Las crónicas identifican al inca como el gobernante supremo, a semejanza de los reyes europeos. Sin embargo, como se señala
líneas arriba, se piensa que el poder fue compartido y que el acceso a éste no tenía que ver con la herencia al hijo mayor, sino con la elección
del mejor de los candidatos al cargo. Las aptitudes físicas y morales del pretendiente eran sometidas a rigurosas pruebas, cuya superación se
interpretaba como una designación divina. Tales pruebas iban acompañadas de un complejo ritual a través del cual el Sol nominaba a quien
debía asumir el cargo de inca. En esta selección participaba no sólo el inca saliente sino las panacas y los sacerdotes. Aunque esto no
disminuía los enfrentamientos y rivalidades entre las panacas por la búsqueda del poder.
FUNCIONARIOS.- A la par que crecía el Tahuantinsuyo se fue haciendo cada vez mayor el número de funcionarios encargados de la
administración del territorio. Como es de suponer, los cargos de mayor responsabilidad y jerarquía estuvieron en manos de los parientes del
inca y de aquellos asimilados a la elite (incas de privilegio). Estos funcionarios realizaron múltiples tareas como controlar los ingresos del
estado, velar por el correcto almacenamiento de los bienes acumulados, organizar la fuerza de trabajo exigida a los curacas, además de saber
cuánta gente podía ser levada en cada región para la formación de los ejércitos. Los administradores debían ordenar la construcción de rutas,
puentes, tambos y centros administrativos. Estos funcionarios, al ser reconocidos como representantes del inca, gozaban de
inmensa autoridad y prestigio.
El Sapa Inca.-El sapa inca era considerado el supremo señor del mundo andino, máxima autoridad política, hijo del Inti e intermediario entre
él y los hombres, lo que lo convertía en un personaje divino. Este heredaba el poder a su hijo más capaz, llamado auqui. El poder del Sapa
Inca era como de un rey o soberano despótico esclavista. Según la historia tradicional, los incas fueron catorce, y conformaban una relación
histórica denominada capaccuna, la cual estaba dividida en dinastías: Urín Qosqo y Hanan Qosqo.
El Tahuantinsuyo Camachic o Consejo Imperial del Cosco.- Órgano de asesoría política del Sapa Inca, formado por representantes de
los cuatro suyos (Apocunas o jefes), uno de cada suyo; doce Consejeros de los grupos Hanan y Urín: cuatro para los grandes suyos,
(Collasuyo y Chinchaysuyo) y dos para los pequeños (Contisuyo y Antisuyo). También podían ser convocados como asesores los Apuquispay o
jefes militares y los Quipucamayoq, para que informen sobre cuestiones bélicas o de contabilidad, respectivamente.
Los Apunchik.- Fueron autoridad político – militar judicial designados por el Sapan Inca para administrar una provincia o wamani,
controlando, así, la producción y el régimen tributario en defensa de los intereses estatales: persiguieron los delitos mayores y organizaron los
empadronamientos de personas y tierras. Todo lo actuado por ellos debía ser transmitido al Suyuyoc Apu correspondiente.
Los Tucuy Ricoq.- Eran inspectores de la nobleza cusqueña en los huamanis y ayllus, para ejercer el control eficaz de las fuerzas
productivas y controlar, también, a las autoridades locales en beneficio del Estado. Su jerarquía autónoma y plenipotenciario lo facultaba para
aplicar sanciones penales (Taripa) e incluso, para decidir concubinatos y matrimonios (warmiqoqo). Era una autoridad de confianza del Sapa
Inca.
Las Autoridades al Interior del Ayllu.
Los Curacas: Eran los jefes de cada ayllu, quienes servían de intermediarios entre el Estado Inca y las etnias, para asegurar la producción y
la disposición de la mano de obra de los hatunrunas en la mita. Gozaban de multiples beneficios, en especial los Hatún Curaca (señores de
toda una nación), cuyos hijos eran educados en el Yachaywasi junto con la nobleza del Cusco; pero debían mostrar subordinación total del
Estado.
Los Pureq o Puriq: Eran los jefes de cada familia, y responsables de asegurar el trabajo comunal de la familia.
Collanas o Sinchis: Eran los asistentes del curaca en las faenas agrícolas y militares, respectivamente, según turno. Los sinchis eran
guerreros jóvenes que asumían la administración de su comunidad cuando era necesario como, por ejemplo, en momentos de guerra.

LOS CURACAS.- Los curacas eran los jefes étnicos tradicionales entre cuyas funciones se encontraba la administración de los bienes
comunales (sapsi) y el control de la energía humana empleada con finalidad redistributiva. Fueron mantenidos en sus posiciones
de responsabilidad por el Tahuantinsuyo, con la intención de utilizarlos en una especie de “gobierno indirecto”. El poder del curaca se
sustentaba en su capacidad para organizar a la población en una serie de tareas que iban desde la obtención de recursos en áreas lejanas o
ecologías diferentes, hasta la construcción de caminos y limpieza de las acequias. La población no entregaba de lo que producía para su uso;
lo que el curaca recibía era energía humana para hacer cosas específicas. Los miembros de la comunidad destinados a trabajar en las colonias
proporcionaban al grupo los recursos necesarios para el consumo ritual, así como un excedente destinado a la redistribución ejercida por el
curaca entre sus sujetos o con los señores vecinos.
EJÉRCITO.- El ejército fue una institución muy importante cuya principal tarea fue la conquista de nuevos territorios para
anexarlos al Tahuantinsuyo, aunque también tuvo un rol destacado en mantener bajo el dominio del Cuzco a los grupos
étnicos recientemente conquistados y en evitar cualquier tipo de incursión de pueblos fronterizos. En los documentos
y crónicas se encuentran referencias a que el mando del ejército inca era dual, es decir, a la cabeza estaban dos jefes
representantes de las mitades hanan y urin.

También podría gustarte