Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Nicolás Copérnico fue un astrónomo, matemático y economista polaco que desarrolló
la teoría heliocéntrica (centrada en el Sol) del sistema solar en una forma lo
suficientemente detallada como para hacerla científicamente útil.
Copérnico nació en el año 1473 en la ciudad de Toruń, Polonia.
Copérnico tenía diez años cuando murió su padre, un rico empresario y comerciante de
cobre, y poco se sabe de su madre salvo que se llamaba Bárbara Watzenrode. Su tío
materno, Lucas Watzenrode, sería el encargado de criarle junto a sus tres hermanos tras la
muerte de su padre.
En 1491 Copérnico ingresó en la Universidad Jagiellonian, donde descubrió el encanto de
la astronomía por primera vez gracias a su maestro Albert Brudzewski y quedó fascinado.
Después de cuatro años se mudó a Italia, donde estudió derecho y medicina en las
universidades de Bolonia y Padua, siendo su tío el encargado de financiar su educación.
Mientras estudiaba en Ferrara, Copérnico conoció a su maestro Domenico Maria Novara
de Ferrara, un famoso astrónomo, y siguió sus lecciones fielmente convirtiéndose en su
discípulo y asistente.
Al poco tiempo Copérnico volvería a Italia para terminar sus estudios, y se cree que fue
en Padua donde obtuvo acceso a pasajes de Cicerón y Platón sobre la opinión de los
antiguos sobre el movimiento de la Tierra, obteniendo así el primer contacto que daría
forma a su teoría.
A lo largo de su vida Copérnico realizó observaciones y cálculos astronómicos, pero
siempre en su tiempo libre y nunca como profesión, ya que trabajó como gobernador
administrando impuestos, repartiendo justicia y en labores diplomáticas. Otros de sus
cargos fueron: gobernador, astrólogo o médico.
En 1514 puso a disposición de sus amigos su “Commentariolus”, un breve texto escrito a
mano que describe sus ideas sobre la hipótesis heliocéntrica. A partir de ahí continuó
reuniendo evidencias para hacer un trabajo más detallado.
Su teoría sobre el Sol como el centro del sistema solar, dando la vuelta a la teoría
geocéntrica tradicional (que colocó a la Tierra en el centro del Universo), se considera uno
de los descubrimientos más importantes de la historia y es el punto de partida fundamental
de la astronomía moderna.
Copérnico sostuvo que la Tierra es otro planeta que gira alrededor del sol fijo una vez
al año, y que gira sobre su eje una vez al día. Llegó al orden correcto de los planetas
conocidos y explicó el movimiento de los equinoccios correctamente. También dio una
explicación clara de la causa de las estaciones, asegurando que el eje de la Tierra no es
perpendicular al plano de su órbita.
En definitiva, podemos decir que el estudio y el trabajo de Copérnico, que dio forma a sus
teorías, tuvo y sigue teniendo una relevancia extraordinaria en la historia del conocimiento
humano.
Galileo Galilei nació el 15 de febrero de 1564 en Pisa, Italia, en el seno de una familia de
comerciantes. Sus primeros años de educación fueron en casa. Sus padres se encargaron de
que estudiara hasta los 10 años.
Llegado a esta edad, se mudó con sus padres a Florencia, pero, debido a la falta de tiempo
de estos, se quedó bajo el cuidado de un vecino, un hombre muy religioso. Fue él quien
hizo que Galileo ingresara en un convento para seguir sus estudios.
Sin embargo, su padre, que no era religioso, no aprobó esto y lo sacó del convento. Por ello,
en 1581, Galileo fue inscrito en la Universidad de Pisa para estudiar medicina.
Un tiempo después, en 1592, Galileo se mudó a Padua y empezó a trabajar como profesor
de astronomía, mecánica y geometría en la universidad de esa misma ciudad. Permaneció
en Padua durante 18 años, hasta 1610. Fue durante este tiempo que realizó la mayoría de
sus descubrimientos más importantes.
Uno de los puntos cúspide de su carrera profesional llegó en 1609, año en el que inventó el
telescopio. Partiendo de objetos similares, Galileo los mejoró y empezó a estructurar lo que
hoy conocemos como telescopio.
Disponer de esta herramienta le permitió observar el cielo y los cuerpos celestes como
nadie lo había hecho hasta entonces. Gracias a ello, Galileo se dio cuenta de algo que
cambiaría para siempre nuestra concepción de nuestro papel en el Universo: no somos
el centro.
Galileo pudo confirmar la teoría que Nicolás Copérnico había formulado años atrás, en la
que decía que la Tierra no era el centro de todo. Sus observaciones con el telescopio le
permitieron demostrar que los cuerpos celestes no giraban alrededor de la Tierra, sino que
los planetas giraban alrededor del Sol.
En 1611 fue a Roma a presentar sus hallazgos, en los que rechazaba la teoría geocéntrica y
comprobaba la heliocéntrica. Estos descubrimientos despertaron el asombro de muchos
científicos pero también la animadversión por parte de, especialmente, el sector religioso.
Galileo estaba atentando contra uno de los pilares de la Iglesia.
Finalmente, en 1642, a los 77 años de edad, Galileo Galilei falleció dejando tras de sí un
legado que se mantiene intacto a día de hoy, casi cuatro siglos después de su muerte.
1. Teoría heliocéntrica
Galileo Galilei fue uno de los principales responsables del divorcio entre Iglesia y
Ciencia. Con sus observaciones, demostró que la teoría de Copérnico que defendía que la
Tierra giraba alrededor del Sol era cierta.
La teoría heliocéntrica fue una de las mayores revoluciones científicas de la historia, pues
supuso un inmenso cambio de paradigma. El hombre no era el centro del Universo, pues la
Tierra era un cuerpo celeste más que giraba alrededor de una estrella.
3. Metodología científica
Que Galileo Galilei sea considerado uno de los padres de la ciencia moderna y una de las
mayores figuras científicas de la historia es, en parte, gracias que desarrolló el método
científico.
Galileo fue el precursor de las leyes del movimiento postuladas años después por Isaac
Newton.