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UNIVERSIDAD TÉCNICA DE

MANABÍ
Facultad de Ciencias Humanísticas y sociales.
Escuela de Psicología.

Análisis: Qué tipo de dependencia (social, psicológica


y física) causa más impacto en el individuo.

Alumna:
Alcívar Almeida Lady.

Materia:
Psicología de las Adicciones.

Docente:
Mg. Terán Espinoza Juan Daniel.

Carrera:
Psicología.

Semestre:
Octavo Semestre.

Periodo Académico:
Mayo 2023 – Septiembre 2023
Qué tipo de dependencia (social, psicológica y física) causa más impacto en el
individuo.

Hablamos de dependencia cuando el estado físico y mental patológico de una persona


necesita un determinado estímulo para lograr una sensación de bienestar. Es así que
entendemos a la dependencia cuando una persona tiene una necesidad compulsiva de alguna
sustancia para experimentar sus efectos o para aplacar el malestar que surge por su privación.

En el caso de la drogodependencia esta se caracteriza por: el deseo dominante e


irresistible de consumir drogas y obtenerla de cualquier forma, la tendencia a desarrollar el
síndrome de tolerancia y por último por el desarrollo de la dependencia física y psíquica con
presencia del síndrome de abstinencia por retirada de la sustancia (Mazo, Botta, Lahens,
Perelló y González, 2008 como se citó en Mendoza, Y, y Vargas, K, 2017). De otra forma la
drogodependencia es, el estado físico y psíquico que resulta de la interacción con una droga.
Se caracteriza por modificaciones del comportamiento y cuando se establece una
dependencia no es solo el organismo el que adopta un papel activo en el control del consumo,
pues la mente también se implica en este proceso, debido a que crea pensamientos
irracionales marcados por el autoengaño. Más allá de la necesidad de consumir, estos
pensamientos crean imágenes, creencias y recuerdos enfocados a buscar nuevos consumos.

Podemos encontrar diferentes tipos de dependencia que alteran las conductas de los
individuos, estas pueden ser: Dependencia física, dependencia psicológica y dependencia
social, las cuales serán explicadas más adelante, las tres tienen en común la conducta final del
dependiente “obtener y consumir droga”, y no pueden considerarse como parcelas separadas,
sino complementarias e interactuantes en una misma persona.

Dependencia Física o neuroadaptación: Es la necesidad de mantener determinados


niveles de una droga en el organismo. Tiene dos componentes: tolerancia y síndrome de
abstinencia aguda, por ejemplo, sustancias depresógenas (alcohol, opiáceos, hipnóticos y
sedantes). Tolerancia, es la necesidad de cantidades crecientes de una sustancia en busca del
efecto deseado o disminución del efecto ante una misma dosis. Y el síndrome de
abstinencia aguda son las manifestaciones clínicas, psíquicas o físicas que se producen por
el cese de la administración de una droga y desaparecen con la administración de la droga
(Día del Mazo, L., Vicente, B., Arza, M., Moráquez, G, y Ferrer, S, 2008).

Cuando se consumen drogas, el cerebro modifica su estructura y termina


acostumbrándose al consumo, y se crea la necesidad de funcionar bajo los efectos de la
sustancia. Cuanto más se consume, mayor tolerancia desarrolla el cerebro hacia esta sustancia
y es por eso que cuando el consumo se descontrola los consumidores aumentan su dosis,
debido a que no consiguen los efectos que la sustancia provocaba al principio, y se aumenta
el consumo tratando de lograr ese objetivo. Y cuando se desarrolla tolerancia y dependencia
física hacia la sustancia, el organismo se acostumbra a funcionar bajo los efectos de dicha
sustancia. Si se interrumpe el consumo, aparece el síndrome de abstinencia provocando una
sensación de malestar en el organismo, que desaparece si se vuelve a consumir.

Los estudios realizados con morfinómanos indican una elevación del estado de ánimo
y una sensación placentera de bienestar asociada a su consumo. Al tiempo que es un
analgésico eficaz también es un potente depresor de los centros respiratorios y de la tos.
Produce un intenso estreñimiento y la característica miosis o constricción pupilar. La heroína
tiene efectos similares a la morfina, salvo que con una dosis diez veces menor de heroína se
obtienen efectos comparables. Ambas sustancias son muy adictivas; desarrollan rápidamente
tolerancia y dependencia. Algunos autores llegan a afirmar que una simple dosis de morfina
puede producir dependencia física y, en ciertas circunstancias, también psicológica, aunque
en este último caso resulta fundamental la posibilidad de la autoadministración (Becoña, E.,
Cortés, M., Arias, F., Barreiro, C.,Berdullas, J., Iraurgui, I., Llorente del Pozo, J., López, A.,
Madoz, A., Martínez, J., Ochoa, E., Palau, C., Palomares, A, y Villanueva, V, 2010).

Dependencia psicológica: es el deseo irresistible (estado de ansia o anhelo [craving])


de repetir la administración de una droga para: a) obtener la vivencia de sus efectos
agradables, placenteros y/o evasivos (sedación, euforia, alucinaciones) y/o b) evitar el
malestar que se siente con su ausencia. Por tanto, son las actividades de búsqueda de la droga
por parte de la persona y la asociación de patrones de consumo patológico las que
condicionan la dependencia (Martín del Mora, M, y Lorenzo, P, s.f). Por ejemplo, sustancias
psicoestimulantes (anfetaminas, cocaína, nicotina) y alucinógenos.

Cuando se consume por primera vez, el cerebro experimenta una sensación muy
satisfactoria que necesita repetir de nuevo. Al quedar afectado el cerebro, cuando la persona
interrumpe el consumo éste demanda la sustancia mediante impulsos. Cada vez más se irá
creando una necesidad de conseguir y consumir la sustancia para repetir ese placer sentido al
principio o para evitar los efectos del síndrome de abstinencia. Aquí es donde empieza a
surgir el autoengaño. El cerebro comienza a buscar excusas, justificaciones vagas y
manipulaciones para conseguir que se realice el acto de consumir. Los efectos del síndrome
de abstinencia serán visibles hasta que la mente no consigue lo que está intentando mediante
el envío de señales engañosas, es decir, el cerebro aprende a funcionar bajo los efectos de la
droga, sin eso, no cumple sus funciones correctamente.

Por ejemplo, en el caso de un individuo dependiente a la nicotina, cada inhalación


produce un efecto de satisfacción primaria (biológica) por la acción de la nicotina, y al mismo
tiempo una satisfacción secundaria por la asociación con el evento mismo (ambiental). Todo
esto se archiva en la memoria afectiva de los fumadores, así como las vivencias asociadas con
la conducta de fumar, y de esta manera se percibe al cigarro como un objeto deseado y a la
actividad de fumar como placentera. Cuando el fumador se enfrenta a una situación que
percibe como amenazante de su estabilidad emocional, recuerda de forma inmediata el
cigarro y activa la sensación irresistible de volver a fumar. Esta dependencia se ve reflejada
cuando el fumador está dejando de fumar utilizando un tratamiento con nicotina, y aun así
presenta deseos intensos por fumar (Espinosa, A, 2004).

Dependencia social: está determinado por la necesidad de consumir la droga como


signo de pertenencia a un grupo social que proporciona una clara señal de identidad personal.
El abandono del consumo de la sustancia puede generar en el drogodependiente graves crisis
de relación capaces de provocar la reanudación de su consumo con el objeto de restablecer el
equilibrio social en el que se encontraba confortable (Martín del Mora, M, y Lorenzo, P, s.f).

Conclusión.

El consumo de sustancias psicoactivas esta medida e influenciada por diversos


factores como lo son los familiares, individuales, psicológicos y sociales que pueden actuar
como medios de protección o de riesgo para el desarrollo de las conductas adictivas. La
drogodependencia es una situación patológica en sí misma, razón por la cual puede producir
la aparición de síntomas característicos de distintos trastornos psiquiátricos y cuando esto
sucede se lo denomina como trastorno psiquiátrico inducido por sustancia.

En cuanto a la dependencia que genera el abuso de sustancias psicoactivas, estas


causan gran impacto en la vida de la persona que consume la droga, pero considero que tanto
la dependencia física como la psicológica causan mayor impacto en la persona
drogodependiente, debido a que estas están muy relacionadas, y pues la dependencia
psicológica es tan destructiva como la física, aunque es más difícil de superar y es la que
puede llevar a la recaída después de muchos años de abstinencia.
Bibliografía.

Espinosa, A. (2004). ¿Cómo se genera la adicción?: dependencia física y psicológica.


Ciencia.
https://www.revistaciencia.amc.edu.mx/images/revista/55_4/como_genera_adiccion.pdf

Martín del Moral, M. y Lorenzo, P. (s.f.). Conceptos fundamentales en


drogodependencias.
https://web.vocespara.info/comparte/2017_vcs/Drogodependencias_y_adicciones/
OK_Terminos_en_adiciion.pdf

Becoña, E., Cortés, M., Arias, F., Barreiro, C., Berdullas, J., Iraurgui, I., Llorente del
Pozo, J., López, A., Madoz, A., Martínez, J., Ochoa, E., Palau, C., Palomares, A, y
Villanueva, V. (2010). MANUAL DE ADICCIONES para psicólogos especialistas en
psicología clínica en formación. Socidrogalcohol.
https://www.fundacioncsz.org/ArchivosPublicaciones/270.pdf

Moral de la rubia, J. (s.f.). Avances en la investigación sobre dependencia de


sustancias. Universidad Autónoma de Nuevo León.
https://respyn.uanl.mx/index.php/respyn/article/download/157/139/277

Día del Mazo, L., Vicente, B., Arza, M., Moráquez, G, y Ferrer, S. (2008).
Drogodependencia: un problema de salud contemporáneo. MEDISAN, 12(2).
https://www.redalyc.org/pdf/3684/368445247019.pdf

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