El sonido ambiente (sonido-territorio)

CHION MICHEL .(1990) La Audiovisión; Introducción a un análisis conjunto de la imagen y el sonido, Barcelona, España, Paídos.

El sonido ambiente se define como el conjunto de elementos u objetos sonoros que

interactúan entre sí en un determinado lugar de forma envolvente, de tal manera que la
localización donde transcurre la narrativa deje de ser un interrogante, las olas del mar o
los motores de automóviles marcan un lugar o un espacio particular con presencia
continua y extendida por todo el paisaje sonoro de la escena.

Lugar del sonido y lugar de la fuente

Las asociaciones entre la fuente y el sonido determinan que este segundo proviene del
lugar donde se ubica el objeto o fuente sonora dando a entender de una única ubicación
en el espacio o lugar donde el sonido es emitido, pero esta asociación puede variar
debido a los fenómenos acústicos y a  la misma forma y/o topología del entorno donde
transcurren las acciones visuales,

Por ejemplo, el ruido de un tacón que golpea el suelo en una habitación muy
reverberante tiene una fuente muy puntual, pero en cuanto sonido, como aglomerado de
diversos reflejos sobre diferentes paredes, puede llenar tanto volumen como contenga la
habitación en la que resuena.

Mientras que la fuente de un sonido puede, en efecto, localizarse aunque no siempre lo

sea, el sonido en sí mismo es por definición un fenómeno que tiende a extenderse, como
un gas, a todo el espacio disponible. 

Fuera de campo activo y fuera de campo pasivo

Para comprender la diferencia entre el sonido fuera de campo activo y sonido fuera de
campo pasivo en la definición propuesta por el autor es necesario comprender y asimilar
el término de “acusmática- acusmático” que hace referencia a la escucha de un sonido
sin la visualización de su fuente pero que se tiene la capacidad de entender el mensaje
que transmite.

Michel Chion define al sonido fuera de campo activo como aquel sonido que plantea las
interrogantes ¿qué es? ¿qué sucede? incitando la búsqueda y dirigir la mirada hacia su
causa, de tal forma que se encuentre respuesta a los acontecimientos que se
desencadenan posterior a su escucha, básicamente el sonido fuera de campo activo se
compone de una fuente puntual o que corresponde directamente a objetos los cuales
pueden ser visualmente fáciles de localizar o que son mostrados después de la escucha.

Se llamará fuera de campo pasivo, por el contrario, a aquel en el cual el sonido cree un
ambiente que envuelva la imagen y la estabilice, sin suscitar en modo alguno el deseo
de ir a mirar a otra parte o de anticipar la visión de su fuente y de cambiar , pues, de
punto de vista. El fuera de campo pasivo no contribuye a la dinámica del montaje y del
découpage, sino por oposición, puesto que sitúa para el oído un lugar estable (el
conjunto de un rumor urbano), lo que, de repente, permite al découpage volar libremente
por el decorado, multiplicar los planos cercanos, etc., sin que el espectador se quede
espacialmente desamparado. Este fuera de campo pasivo está esencialmente
constituido por sonidos- territorio y por elementos de decorado sonoro.