Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Los empujes laterales que el suelo ejerce sobre los muros de contención pueden
clasificarse en:
3
Y el diagrama de carga es triangular. La resultante Eo se ubica a 2/3 de la altura,
según se indica en el esquema. Los valores de K o se indican para algunos tipos de
suelos, según Terzagh:
Tipo de suelo Ko
Arenas densas 0.4 a 0.45
Arenas sueltas 0.45 a 0.50
Arcillas firmes 0.8
Arcillas blandas 1
𝜎hmin= 𝜎a
Y representa el empuje activo sobre el muro.
4
❖ Empuje pasivo: Cuando el movimiento del muro se produce hacia la
masa del suelo contenido, manteniendo el esfuerzo 𝜎v constante, se define el estado del
empuje pasivo, correspondiente a un haz de circunferencia de radio gradualmente
creciente, hasta poder ser tangente a la envolvente de falla de Morh. El esfuerzo
principal máximo es 𝜎p
𝜎hmax= 𝜎p 𝜎v tg2 (45o + ∅/2)
5
condiciones de borde para un prisma elemental que se encuentra dentro de una masa
semi-infinita.
Las condiciones de borde impuestas por Rankine para determinar la relación
entre tensiones principales en cada estado, fundamentalmente son:
1- Masa semi infinita y homogénea.
2- Superficie horizontal del terreno.
3- Superficie vertical del borde que admite desplazamiento.
4- Tensiones de corte nulas en el contacto entre la superficie que se desplaza y el
suelo.
6
En la figura 4 se indican para el mismo diagrama las inclinaciones para las cuales se
producen los estados límites. En el estado activo, la línea de rotura forma un ángulo de
(45° +f / 2) con la horizontal. En el estado pasivo, las líneas de rotura en toda la masa
que se encuentra en estado de equilibrio plástico, forman también un ángulo de (45° +f /
2) pero con la vertical.
Se ha demostrado experimentalmente que la deformación para alcanzar el estado
límite activo es bastante pequeña; basta un leve desplazamiento del paramento que
contiene a la masa de suelo para que ésta, entre en el estado límite de empuje activo, en
cambio, para llegar al estado límite de empuje pasivo de Rankine, es necesario un
desplazamiento mucho mayor, alrededor de 10 veces el que se necesita para llegar al
estado límite de empuje activo.
Se han representado las variaciones de los coeficientes Ka y Kp para distintas
condiciones de densidad relativa del material (arena), en función del giro del paramento
vertical que lo contiene.
Se puede observar en dicha figura la gran deformación que se debe producir para
generar Kp, que en el caso de las arenas densas tienen un pico máximo mientras que en
el caso de las arenas sueltas dicho pico no se alcanza y la pendiente de crecimiento es
muy débil.
Por lo expuesto en los párrafos anteriores se aconseja para el cálculo del empuje
pasivo, dividir el valor de Kp por un coeficiente de seguridad, ya que en la mayoría de
los casos, las estructuras no pueden aceptar la gran deformación que se necesita para
generar el empuje pasivo máximo.
Por el contrario, se puede apreciar que en el caso del empuje activo Ka las
deformaciones necesarias para alcanzar el valor mínimo de Ka son muy pequeñas.
7
cualquier forma. Introduce la superficie de rotura plana, y estudia el problema como el
equilibrio de una cuña del suelo que falla, limitada de un lado por el paramento, y del
otro por una superficie plana.
La resolución es por tanteos, buscando cual de todas las superficies planas
posibles conduce por ejemplo el empuje activo máximo que constituye el valor más
desfavorable.
Supongamos, que la cuña que desliza es la limitada por las rectas OA y OC.
Dicha cuña tiene un peso W que podemos calcular y representar con su dirección y
sentido en una escala adecuada.
Esta fuerza de gravedad deberá estar equilibrada por un lado, por la reacción P
que se genera en el plano OC y que está inclinada un ángulo d = f con respecto a la
normal al mismo, ya que el deslizamiento es entre suelo y suelo, el empuje activo EA
que tendrá una inclinación d con respecto a la normal al plano OA, que dependerá de la
naturaleza del muro, especialmente su rugosidad, y del suelo.
En los casos de suelos cohesivos tendremos que considerar también la resultante
de la fuerza que se origina por adherencia en el plano OA y en el OC. Estas fuerzas
están representadas por Ca y por C y se obtienen multiplicando el valor de la cohesión
“C” por la superficie del plano en el que actúa, en el caso del plano OC y multiplicando
a la cohesión por el área del plano OA y por un factor de reducción que depende de la
naturaleza del muro, es decir:
C = c * OC
Ca = c * OA * F
8
❖ Empujes de suelos cohesivos: Las teorías procedentes de Coulomb y
Rankine no incluyen la cohesión de la determinación de los empujes laterales de tierra.
Cuando se le toma en cuenta los empujes activo y pasivo pueden obtenerse de las ecs.
Que permiten escribir los esfuerzos en suelos mixtos secos:
𝜎a = 𝛾 H Ka – 2 c√Ka
𝜎p = 𝛾 H Kp – 2 c√Kp
Las ecs corresponden a empujes de suelos que poseen cohesión y fricción
interna c≠0 y ∅ ≠0.
✓ Empujes de suelos cohesivos con sobre carga: Sobre la cuña del suelo
que produce empujes en los muros de contención, pueden actuar sobrecargas de
diferentes tipos, distribuidas o concentradas, las cuales producen empujes adicionales
sobre los muros, que deben tomarse en cuenta en el diseño. Estas sobrecargas son
ocasionadas generalmente por el acopio de materiales, construcciones cercanas, paso de
vehículos, depósitos de líquidos, equipos de construcción, etc.
En el caso de una sobrecarga uniformemente distribuidas q, la resultante del
empuje activo adicional E´ estará ubicada en la mitad de la altura del muro y su
magnitud es:
E´a=q * H * Ka
En este caso que haya aplicada en una longitud igual o mayor a L y los esfuerzos
𝜎a y 𝜎p resultan:
𝜎a = (𝛾H +q) Ka – 2 c√Ka
𝜎p = (𝛾H + q) Ka – 2 c√Kp
9
✓ Empuje de suelos cohesivos con nivel freático: El parámetro
perfectamente liso de un muro de un muro de altura H. El peso efectivo de la arena seca
es γd y el de la arena sumergida es γ´, el peso unitario del agua es γw. La superficie
horizontal del terreno soporta una carga uniformemente distribuida q por unidad de
área. El nivel freático esta a una profundidad H 1 debajo de la cresta del muro. Los
ángulos de fricción interna de la arena seca y de la arena sumergida se imponen iguales
a ∅ para ambas.
Si el muro se desplaza de la posición ab a la posición a1 ´b, la presión sobre su
parámetro interno disminuye, del empuje unitario de la tierra en reposo, el empuje
unitario activo de Rankine. El efecto total que la presión del agua de los poros ejerce
sobre las presiones efectivas que actúan en la arena puede ser tomado en cuenta
considerando para su peso unitario el peso γ ´ del material sumergido. Hasta la
profundidad H1 el empuje del suelo está representado; a una profundidad cualquiera Z´
por debajo del nivel freático, la presión vertical efectiva en una sección horizontal está
dada:
Pv= H1γ + Z´γ´
El empuje total efectivo por debajo del nivel freático viene dado entonces por el
área, A este empuje debe agregarse el originado por el agua:
Pw= ½ γw H22
Que actúa en la parte inferior del paramento. Si el terraplén soporta una carga
unitaria uniformemente distribuida q por unidad de área, es esfuerzo vertical efectivo Pv
aumenta, a cualquier profundidad, en dicho valor q, y el empuje activo unitario de
Rankine aumenta en:
∆Ph= q Ka
10
Estabilidad de taludes
Los taludes además serán estables dependiendo de la resistencia del material del
que estén compuestos, los empujes a los que son sometidos o las discontinuidades que
presenten. Los taludes pueden ser de roca o de tierras. Ambos tienden a estudiarse de
forma distinta.
11
❖ Angulo de inclinación: Muchas excavaciones se inician con un corte
vertical. Algunos suelos se mantienen erectos hasta profundidades considerables,
cuando se cortan verticalmente; pero la mayoría se desploma. Cuando los taludes
verticales se desploman hasta un ángulo estable, grandes bloques de material pueden
caer al fondo de la excavación.
En general, en los suelos arenosos, la arena tendera a deslizarse y desplomarse
durante el proceso de excavación. Por lo común, esta se estabiliza a un determinado
ángulo, sin riesgos importantes. No obstante, los suelos limosos, arcillosos o de arena
cementada se excavan a veces hasta profundidades considerables, antes de que los
grandes bloques de material se deslicen hasta el fondo.
Durante las excavaciones se puede calcular el ángulo al que puede esperarse que
se mantenga el suelo temporalmente. En la tabla 11.1 se presentan algunos ángulos
aproximados y empíricos.
Tabla 11.1
12
❖ Socavaciones: Después de cortar un talud, a veces es necesario socavarlo
para introducir cimentaciones o líneas de servicio público. Cuando es necesario socavar
y no es posible lograr un ángulo estable para el talud, la socava con deberá hacerse en
secciones estrechas. La parte superior del talud deberá descargarse todo lo que sea
posible y no deberá encima ningún equipo de construcción.
A veces, los taludes se socavan en el proceso de excavación. El suelo se
desploma y corre hasta la máquina excavadora. Esto no es muy peligroso en arena
limpia, que se deslizara hasta su ángulo de reposo; no obstante, puede resultar peligroso
en suelos cementados, arena mojadas, con aparente cohesión, o limos y arcillas que
permanecerán verticales temporalmente y, luego, un gran boque se desprenderá y caerá
como un deslizamiento de tierras.
❖ Agrietamientos:
El agrietamiento de las laderas excavadas en pendientes muy inclinadas puede
plantear un problema grave, como resultado de la desecación del suelo. El suelo tendera
a desmoronarse y desplomarse. Lo que es todavía peor es que las grietas puedan hacer
que se deslicen grandes bloques de material. A menudo, los taludes parecen encontrarse
en una pendiente segura; pero puede caer algún gran bloque de material que se
desprenda de la pared de la excavación, lo cual suele provocar muchos daños y heridos.
❖ Cargas en las partes superior del talud: Es natural que los contratistas
depositen maquinaria en la parte superior de los taludes, amontonen el exceso de
13
materiales de excavación en el suelo, o bien, almacenen materiales de construcción en la
parte superior de las laderas. Además, la maquinaria pesada puede causar vibraciones
que aumenten los riesgos de desplome de las laderas.
La estabilidad de un talud con una sobrecarga agregada en el borde, se puede
analizar. Por otra parte, los códigos de la construcción o los estatales y federales de
seguridad pueden establecer limitaciones de carga en los bordes de las excavaciones.
También es posible calcular una “distancia segura hacia atrás” del borde, para colocar
cargas.
La distancia hacia atrás del borde superior de una ladera puede estimarse como
guía aproximada, suponiendo que el talud podría considerarse seguro, si fuera más alto;
pero se situara en el ángulo de inclinación utilizando al efectuar la excavación. Si ese
ángulo de inclinación es de ¾ a 1, por ejemplo, y el peso sobre las bases de una unidad
del equipo es de 500 lb/pie2 (2,440 kg/m2), esto equivaldría a hacer que la excavación
tuviera 5pies (1.5m) más de profundidad. Esto ilustra en la figura 11.1ª. Puesto que el
equipo se puede utilizar para levantar cargas, puede aumentar la presión máxima
ejercida sobre la base más cercana a la excavación. Al efectuar los cálculos, este
aumento debe agregarse a la carga de las bases. Po ejemplo, si al elevar alguna carga la
carga, de las bases se debe incrementar a 1,00 lb/pie2 (4,880 kg/m2), la altura
equivalente de suelo nuevo es de 10 pies (3m). Como se muestra en la figura 11.1b, los
pies (3m) de suelo nuevo se pueden reemplazar con un bloque de material. El borde del
bloque se encuentra aproximadamente a 4 pies (1.20 m) de distancia del borde de la
ladera. La base de la grúa debe mantenerse también por lo menos a 4 pies (1.20m) de
distancia del borde de la excavación.
Figura 11.1ª
14
Durante el funcionamiento de equipos en posiciones precarias en la parte
superior de pendientes, debe darse a alguien la tarea específica de inspeccionar con
frecuencia la parte superior del talud. Se deberá observar si hay señales de
agrietamientos a una distancia del borde igual a la altura del talud. Asimismo, se
deberán observar los hinchamientos en el centro o al pie de la ladera y las partículas de
tierra que se desprendan del talud por debajo de la maquinaria.
Altura = 2 x cohesión
Peso del suelo
15
✓ Desagüe: En muchos casos la extracción de agua muy atrás de las
pendientes, utilizando pozo o “well points”, hace aumentar la estabilidad de las laderas.
✓ Cubierta de gunite: Si la ladera no tiene una pendiente excesiva, una
cubierta de gunite retendrá a veces la humedad del suelo y agregara cierta resistencia.
✓ Productos químicos: Cuando es necesario cortar laderas muy escarpadas
en zonas con grandes limitaciones de espacio, es posible estabilizar algunos suelos,
inyectándoles productos químicos.
✓ Apuntamiento: Con frecuencia los taludes se estabilizan por medio de
apuntamientos.
16
pudiera juzgarse como “tierra selecta”, es posible volver a compactarlo adecuadamente.
Es preciso volver a compactar todo el fondo de la excavación.
Las heladas y las fuertes lluvias también pueden ablandar el suelo del fondo de
las excavaciones. La protección contra las lluvias debe incluir diques o pequeñas
barreras en torno al perímetro de la excavación, para evitar que el sitio se convierta en
un sumidero de toda la zona adyacente. Asimismo, al menos en un caso, durante la
temporada de lluvias un contratista evanto una lona de circo sobre el sitio. Es más difícil
la protección contra las heladas. A los suelos arenosos no les afecta mucho, pero los
limosos o arcillosos se pueden dilatar cuando se congelan y convertirse en lodazales
cuando se deshielan. Es muy poco conveniente construir cimentaciones sobre terrenos
congelados, porque durante la primavera siguiente se asientan mucho cuando se produce
el deshielo. Si no es posible evitar las heladas, cubriendo el terreno con tierra o
calentándolo, será necesario excavar todo el suelo congelado bajo las zapatas y
reemplazarlo con grava o concreto delgado. Esos costos deberán incluirse en la
cotización.
17
Figura 11.2
18
comportándose el terreno como un «pseudolíquido». Se produce, entre otros terrenos,
en rellenos mineros.
Según Varnes (1978) tenemos los siguientes tipos de fallas comunes en los
taludes:
- Caídas
- Vuelco
- Deslizamiento
- Escurrimiento
- Flujo
✓ Define la línea del talud natural como la que partiendo del vértice B del
trasdós del muro, forma un ángulo φ (que es el de rozamiento interno del terreno) con la
horizontal.
✓ Define la línea de dirección como aquella que pasando por B forma un
ángulo φ + δ con el paramento del muro.
El método de Cullman dice que si a partir del punto B, que hemos considerado
como origen de coordenadas, llevamos sobre la línea de talud natural BD, la magnitud
del peso del prisma ABC a una determinada escala, nos dará el punto J . Si ahora por JB
se traza una paralela a la línea de dirección cortara a la línea BC en el punto N. Este
19
valor JN representa a la escala indicada para la fuerza el valor del empuje activo
producido por el prisma ABC.
BJ= valor del peso del prisma ABC.
JN= valor del empuje sobre el muro producido por el prisma ABC.
1- Como primer paso, se traza una recta b por el pie del paramento interno
del muro, que forme un ángulo f, con la horizontal que pasa también por el punto b. La
recta bS, es conocida como “Línea de pendiente”, ya que representa la pendiente natural
del suelo.
2- Se traza la línea de empujes bL, colocada por debajo de la línea de
pendiente y formando con la misma, el ángulo q, igual al que forma la vertical con la
línea de acción del empuje Ea. El ángulo q_ depende del ángulo d de fricción entre
muro y suelo y de la inclinación b del paramento interno del muro.
3- Para determinar el empuje E1, ejercido por el suelo situado dentro de la
zona delimitada por un plano de deslizamiento arbitrario bc1, es necesario computar
primero el peso W1 de la cuña de suelo que, en cualquier escala conveniente, es luego
20
representado sobre la línea bS. Se obtiene así el punto d1, por el cual se traza la recta
d1e1 paralela a bL.
El peso puede determinarse gráficamente calculando el área de la cuña abc1
trigonométricamente o gráficamente con un programa Cad y luego multiplicándolo por
el peso especifico unitario de la arena en condiciones naturales, es decir: W1 = Área del
triangulo abc1. g
Este peso así determinado es un peso por longitud unitaria de muro
4- Para determinar el empuje activo Ea, se repite la construcción para
diferentes planos bc2, bc3, etc y los puntos e1, e2, e3, etc, que se obtienen son unidos
por medio de una curva conocida como “Curva de Culmann”.
5- Se traza la tangente a la Curva de Culmann paralela a bs y la distancia ed
(multiplicada por la escala que elegimos para graficar los pesos de las cuñas de rotura
W) representa el empuje Ea. La superficie de deslizamiento pasa por el punto e.
6- Finalmente, podemos determinar el punto de aplicación del empuje
activo sobre el muro. Un vez encontrada la superficie de deslizamiento abc, que como
mencionamos pasa por el punto e, debemos hallar el baricentro G de esta superficie y
trazar por el mismo una recta paralela a la línea. El punto de aplicación del empuje
activo es la intersección de la línea del paramento interno del muro ab con la línea
paralela a bc que pasa por el baricentro G.
Taludes inclinados
21
W es el peso de la masa potencialmente inestable, que se descompone en dos
fuerzas Wn y Wp. La componente Wp de dirección paralela al perfil del estrato
impermeable, es la que provoca el deslizamiento, mientras que la Wn debida a la
cohesión y fricción de suelo, es la que se opone al deslizamiento.
Excavación sobre superficie en la que al menos tiene un frente abierto a nivel del
ataque de la maquina, ejecutadas en condiciones naturales de iluminación, ventilación y
drenaje, realizada con medios manuales y/o mecánicos, que en todo su perímetro queda
por debajo del nivel del suelo., quedan excluidos los terrenos que precisan de explosivos
y los lodos o fangos; cuando el ancho/diámetro de la excavación es más de 2 m
estaremos ante una zanja o pozo.
La clasificación es la siguiente:
Todos los trabajos pueden hacerse en seco o con agotamiento, nivel freático por
debajo del plano de excavación. En este tipo de excavaciones es fundamental la elección
del equipo idóneo para transporte y carga. Como norma general hay que considerar que
el equipo de transporte debe ser cargado entre 3 y 6cargadoras o ciclos del equipo de
carga. Los puntos a tener en cuenta para seleccionar el equipo de transporte son:
✓ Recorrido
✓ Distancia
✓ Pendientes y curvas
✓ Material a transportar
✓ Producción requerida
✓ Equipo de carga disponible
22
Los correspondientes al equipo de carga, por orden de preferencia, son:
Producción requerida, zona de trabajo o carga (amplitud y condicionantes),
características del material a cargar (en banco, ripado, volado), disponibilidad requerida,
equipo de transporte a utilizar.
23
.
Tipos de entibación
24
ninguna cohesión, deberán hincarse las tablas verticales en los citados tramos antes de
proceder a la excavación de las tierras alcanzándose la profundidad prevista en
sucesivas etapas.
Los puntuales entre las paredes de la zanja son “puntales” que se pueden ajustar
de modo que queden firmes entre los apoyos. Los puntales de madera, ajustados con
cuñas en los extremos, son igualmente efectivos como los metálicos
Las entibaciones u otros sistemas de apuntalamiento utilizados en cualquier
parte de una excavación, terraplén, obra subterránea, pozo, galería o túnel sólo deberían
construirse, modificarse o desmontarse bajo la supervisión de una persona competente.
Los apuntalamientos deben ser instalados, modificados o desmantelados sólo por
obreros especializados bajo supervisión. Dentro de lo posible, se deben erigir antes de
haber cavado hasta la profundidad máxima de la zanja, hay que empezar antes de llegar
a los 1,2 m. La excavación e instalación de soportes deberá continuar entonces por
etapas, hasta llegar a la profundidad deseada.
Los trabajadores se caen con frecuencia dentro de las excavaciones. Deben
colocarse barreras adecuadas, de altura suficiente (por ejemplo, cerca de 1 m) para
prevenir estos accidentes. Tal como se muestra en la imagen anterior, la proyección
vertical de los soportes de las zanjas frecuentemente se puede utilizar con este fin.
25
Bibliografía
26