TALLER PARA EL DESARROLLO DE METODOLOGÍAS PARA LA INCLUSIÓN Y LA

DIVERSIDAD

Breve resumen de instrumentos evaluativos1.

A continuación, se expondrá brevemente 3 instrumentos evaluativos que pueden utilizarse para el
trabajo autónomo con el que finaliza el taller que estamos desarrollando.

Uno de estos instrumentos debe ser escogido por ustedes y desarrollarlo respecto de una de las
metodologías trabajadas en las clases durante el taller.

Cada uno de estos instrumentos poseen sus propias condiciones, sin embargo, tienen en común
los siguientes aspectos.
a) El instrumento debe tener un objetivo claro y preciso, ya que es la evaluación de un
desempeño específico. Además, debe ser explicado y conocido por el estudiantado.
b) Para definir el nivel del desempeño, se deben identificar las dimensiones observables de
éste y luego señalar los indicadores que establecerán el nivel alcanzado por el
estudiantado.
c) El ambiente de la clase al momento de aplicar la evaluación debe ser propicio para que
surja el desempeño.
d) La calificación (sumativa o formativa) debe dar cuenta del “hacer” del estudiantado, no es
una evaluación del “ser”.

Para el ejercicio a desarrollar deberán utilizar alguna de estos 3 instrumentos evaluativos:

 Rúbrica.
 Pauta de cotejo.
 Escala de apreciación.

1. Rúbrica:

Es probablemente el instrumento más utilizado en la evaluación de competencias, esto porque

permite evaluar casi cualquier tarea. Su principal fortaleza es que tiene la capacidad de dividir una
tarea compleja en tareas más simples y organizarlas en una lógica progresiva en términos de su
calidad o nivel; por ello resulta
tan idónea para evaluar
competencias. Permite evaluar
habilidades, conocimientos
declarativos, procedimentales y
actitudinales.
La figura 1 es un ejemplo típico
de una rúbrica para evaluar una
exposición oral. Figura 1

1
Todas las definiciones de los instrumentos evaluativos han sido tomadas desde Morales, S., y Hersbberger,
R. (2020). Evaluación por competencias: ¿Cómo se hace? Revista de la Facultad de Medicina de la UNAM, 46
- 56.
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Una recomendación es que para definir los niveles de desempeño se utilicen conceptos que sean
amables, principalmente frente a la retroalimentación. Esto último representa un esfuerzo por
construir y mantener una relación respetuosa con el estudiantado, ya que no es lo mismo señalarle
a alguien que su desempeño es malo a explicarle que su desempeño está en un nivel inicial. En
este sentido, una secuencia que recomendamos sería:

Sobresaliente Competente En desarrollo Inicial

2. Lista de cotejo:

Este instrumento tiene una estructura muy definida y utiliza un esquema dicotómico para evaluar
la presencia/ausencia de un desempeño. En ese sentido permite definir con presición la presencia
o ausencia de una conducta o de una secuencia de conductas. Su principal fortaleza está en la
capacidad de verificar un desempeño específico a través de una serie de ítems que reflejan los
pasos críticos o la secuencia de un procedimiento. Se recomienda especialmente cuando se desea
evaluar si los elementos
esenciales de un desempeño
están presentes en la conducta,
sin calificar el nivel con el que
ésta se llevó a cabo. Igual que en
el caso de la rúbrica, este
instrumento permite evaluar
habilidades y conocimientos
declarativos, procedimentales y
actitudinales.
La redacción de los ítems debe
ser clara, específica, sencilla y
organizados secuencialmente.
Finalmente, la escala con que se
evalúa cada ítems es dicotómica,
tal como sigue: logrado / no
logrado; lo hizo / no lo hizo, etc.

Figura 2

En la figura 2 se observa una lista de cotejo para evaluar la participación en una exposición oral.
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3. Escala de apreciación:

Este instrumento sirve para evaluar niveles de desempeño, así como su presencia o ausencia. Igual
que en los casos anteriores, permite evaluar habilidades y conocimientos declarativos,
procedimentales y actitudinales. Su estructura es similar a la rúbrica, se deben escoger las
dimensiones más relevantes de un determinado desempeño, luego se redactan unos ítems que
reflejen los aspectos más relevantes para cada dimensión. La presentación de los ítems está
siempre organizada en forma
secuencial, incluso dentro de
cada dimensión. De esta forma,
cada uno de los ítems es
sometido al criterio docente y se
juzga en qué nivel de
desempeño se encuentra cada
estudiante. La escala con que se
evalúa cada ítem puede reflejar
desde la calidad de un
desempeño, hasta la frecuencia
con que se presenta una
conducta. En la figura 3
observamos un ejemplo de una
escala de apreciación para una Figura 3
presentación oral.