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“La Fundación de Santa Fe como

oportunidad pedagógica”

La revisión de la arquitectura de la historia a través del dispositivo reflexivo y


argumentativo es la posibilidad de configurar el tiempo a través del mismo.

Las retóricas discursivas que favorecen el diálogo con los hitos históricos que
construyen la memoria autoreflexiva reconocen los aspectos epistemológicos,
normativos y prácticos del conocimiento histórico.

El desarrollo historiográfico producido en el marco de diversas intervenciones


registradas susceptible de ser leídos en clave autorreflexiva postula la posibilidad de
considerar los aspectos ético-políticos intrínsecos a la práctica de reconstrucción del
pasado, elucidando algunas de las formas de sus múltiples entrecruzamientos con la
hermenéutica de la comprensión con la potencialidad teórica de la historiografía en un
sentido crítico.

La vinculación entre reflexión sobre la memoria y autorreflexión de la historia se


presenta como un espacio propicio para delinear herramientas analíticas adecuadas
para enfrentar una serie de cuestiones centrales del debate actual sobre la
conformación y transmisión de las memorias colectivas en la trama de continuidades y
cambios que conforman.

La Subsecretaría de Educación Superior tiene el honor de compartir la producción


del Prof. Ricardo González, Supervisor General de la Dirección Provincial de
Educación Privada, quien potencia el conocimiento histórico reflexivo pedagógico
acerca de las miradas sobre “La Fundación de Santa Fe como oportunidad
pedagógica”. Se agradece la generosidad del saber del Prof Ricardo González con el
colectivo del nivel superior.

Subsecretaría de Educación Superior


Mg. Patricia Moscato.

La Fundación de Santa Fe como oportunidad pedagógica.

Si preguntamos a los ciudadanos en general sobre la fundación de la ciudad capital de


nuestra provincia seguramente recurrirán al “recuerdo escolar”, al arcón de las
efemérides aprendidas y su relato estará vinculado a esa experiencia. Tan vaga o
fresca según la edad del consultado, o quien era su maestra de cuarto grado en la
escuela primaria, si pudo o no realizar el viaje tradicional a las ruinas de Cayastá, o si
su gusto por la historia lo hizo desandar otras experiencias. Porque nosotros vemos el
mundo real tal cual lo pensamos, y lo pensamos de la manera que nos enseñaron. De
ahí que la pregunta sobre:  cómo aprendiste historia? Cobra trascendencia. Porque
entraña algo más esencial, cómo le contamos la historia a los niños y niñas en
nuestras aulas?. Siguiendo esa línea de análisis encontramos quienes enseguida
asocian al hecho fundacional con don Juan de Garay, otros que profundizan diciendo
que su emplazamiento no es el actual sino que por diversas razones hubo que
trasladarla y hasta algunos recitan las respuestas de quién, cuándo y los motivos de
su fundación?. Así de complejo es el escenario frente a la efeméride provincial del 15
de noviembre que reclama algo más que un feriado administrativo o el goce de un fin
de semana largo desde la perspectiva de la construcción de la identidad provincial.

Desempolvando recuerdos históricos, siguiendo la versión más tradicional y


escolarizada de nuestro pasado santafesino, encontramos “El primer español en
pisar tierras santafesinas fue Sebastián Caboto, que en 1527 funda el fuerte Sancti
Spiritus en la desembocadura del Río Carcarañá, pero la población no tarda en
abandonarlo. Años más tarde, los españoles decidieron fundar otras poblaciones
sobre la costa del río para "abrir puertas a la tierra", esto significaba fundar puertos
para poder comercializar los productos de la agricultura. Y aquí comienza la historia
santafesina: el 15 de noviembre de 1573 cuando Juan de Garay, por encargo del
gobernador de Asunción, deja oficialmente fundada la ciudad, en la barranca
occidental del río de los Quiloazas, hoy Río San Javier. De acuerdo a algunos
historiadores, Garay llamó a su ciudad Santa Fe en homenaje a la fe católica” (1)

Un texto corto pero que nos interpela profundamente. Ya que nos permite trabajar la
efeméride de la fundación de la ciudad de Santa fe de la Vera Cruz desde lo que Elliot
Eisner llama el “currículum nulo” (2). Es una excelente oportunidad para que nuestros
alumnos reflexionen pero también les habilitemos el “preguntar”. Develando juntos ese
curriculum nulo o ausente que está formado por aquello que la escuela no enseña, lo
cual puede ser tanto o más importante que aquello que enseña. Esta fecha, tan
trascente para nuestra provincia, puede ser un momento único para pensar en forma
integral contenidos de las ciencias sociales con una mirada no parcializada. En éste
mismo párrafo citado encontramos figuras destacadas como Sebastián Gaboto, Juan
de Garay o el mismo Martín Suárez de Toledo quien en nombre del gobernador Juan
Ortíz de Zárate otorga el poder a Garay para salir de Asunción con una misión
fundacional. Y así poder conocer los nombres de aquellos funcionarios españoles y
criollos que estuvieron en el inicio del proceso poblacional y de conquista. No menos
importantes son los temas vinculados al lugar elegido para la fundación ya que no solo
se da cuenta de la geografía litoraleña de nuestra Provincia sino también de la
preexistencia de comunidades de pueblos originarios que se encontraban afincados
allí con miles de años de interrelación con el medio que les había dado una identidad
cultural particular que hoy permanece vigente y en contínua lucha por hacerse visible.
Tarea fundamental de la política educativa. Por otro lado el concepto político de “abrir
las puertas” cobra relieve en la actualidad si lo asociamos al protagonismo portuario-
exportador de nuestra provincia, a la pujanza de la actividad productiva vinculada al
agro, a la situación ambiental y ley de humedales pero también a la posición fijada por
nuestro Gobernador con respecto al funcionamiento y administración de la Hidrovía
Paraná/Paraguay. Tarea que debe completarse con una mirada retrospectiva acerca
del papel que la Iglesia católica y sus órdenes religiosas han desempeñado en estos
448 años a lo largo y ancho del actual territorio santafesino, teniendo presente su
inmensa tarea educativa. Claro ejemplo es el Colegio San Francisco de la ciudad de
Santa fe, la primera escuela en abrir las puertas de la educación formal en el año 1591
a los criollos e indígenas santafesinos,  por sus aulas pasaron Pascual Echagüe,
Mariano Vera, José Ramón Méndez, Francisco Candioti y el Brigadier General
Estanislao López. Desde 1790 funciona en su emplazamiento actual. Un dato de color
es que en la toponimia santafesina hay 31 localidades que llevan nombres de santos o
santas, existen también localidades que refieren a voces indígenas: Timbúes,
Coronda, Calchaquí, Carcarañá, Toba, Aguará o Capivara, pero solo dos hacen
referencia a nombres vinculados con el primer proceso del poblamiento europeo en
nuestro suelo: Puerto Gaboto (departamento San Jerónimo) y Juan de Garay
(departamento 9 de Julio)

Se cumplen hoy 448 años de la fundación realizada por Juan de Garay, al mando de
un puñado de criollos llegados desde Asunción del Paraguay. Eligieron tierras
Quiloazas para instalarse, es un buen motivo para repensar la historia provincial y
resignificar contenidos que pongan de relieve la importancia de responder como
sistema educativo la pregunta inicial: cómo le contamos la historia a los niños y niñas
en nuestras aulas?

Prof. Ricardo González. Supervisor General de la Dirección Provincial de


Educación Privada.

Citas

1. http://www.unl.edu.ar/santafe/index.php/historia.html
2. EISNER, E. W. The educational imagination Third Edition. New York.
MacMillan. U.S.A. 1994.

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