Resolución de problemas

La resolución de problemas es muy importante, pero quienes se dedican a eso, -resolver problemas-
a menudo los interpretan mal. Este informe, -que acá traducimos- propone una “terminología” y
“patrones útiles de pensamiento” a aplicar en la resolución de problemas.

Se debe definir correctamente qué es en realidad “el problema”, ya que este es el primer paso hacia
la resolución del problema. Sin embargo este primer paso es frecuentemente olvidado.

Además, deberemos establecer una terminología en común, para términos tales como Propósito,
Situación, Problema, Causa, Causa Solucionable, Cuestión (o la “problemática” a atender), y la
Solución.

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Incluso los consultores , que debieran ser capaces de resolver problemas profesionalmente, a
menudo se confunden con la terminología de la resolución de problemas. Por ejemplo, algunos
consultores pueden pensar a las Cuestiones como los Problemas a resolver, u otros de ellos
pensar a los Problemas, como las Causas que los originan.

Pero las Cuestiones deberían ser consideradas la proposición a partir de la cuál plantear los
Problemas a resolver. Los Problemas deben planteados como expresiones negativas, mientras que
las Cuestiones deben ser una presentados como una expresión positiva. Para algunos consultores a
este tipo de terminología no la consideran importante, pero una terminología clara resulta útil para
aumentar “la eficiencia” del proceso de resolución de problemas.

En tercer lugar, hay varios patrones útiles de pensamiento, tales como pensamiento estratégico, el
pensamiento emocional, pensamiento realista, el pensamiento empírico y así sucesivamente. El
patrón de pensamiento significa cómo pensamos. Hasta el momento, se identifican catorce patrones
de pensamiento. Si elegimos un patrón apropiado en cada paso en la resolución de problemas,
podremos mejorar “la eficiencia” de la resolución de problemas. La mejora, o el aumento de la
“eficiencia” es una “cuestión” que nos preocupa y ocupa a los ingenieros.

Este informe explica los tres puntos anteriores, tales como la definición de problema, la terminología
más apropiada a emplear en la resolución de problemas, y los patrones útiles de pensamiento.

Definición de problema

Un problema se define en función de los propósitos perseguidos. Si alguien quiere dinero pero tiene
poco dinero, entonces tiene un problema. Pero si alguien no quiere dinero, y tiene poco dinero esto
es un problema.

Por ejemplo, los gerentes de fabricación suelen ser evaluados a través de la “velocidad de la línea de
operación”, que se muestra como un porcentaje de horas de funcionamiento en relación a las
posibles horas de funcionamiento totales. Por lo tanto los gerentes de fabricación a veces operan a
mayor velocidad las líneas sin órdenes de su división de ventas.

Esta operación puede producir una mayor demanda de insumos y generar inventarios excesivos de
productos. Los inventarios excesivos pueden ser un problema para los administradores generales.
Pero para los gerentes de producción, los inventarios excesivos pueden no ser un problema.

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Se utiliza este término de modo genérico como sinónimo de aquellos que atienden y tratan de resolver problemas.

Fuente: http://www.mediafrontier.com/Article/PS/PS.htm
Si existen diferentes propósitos entre los gestores, ellos verán una situación idéntica de diferentes
maneras. Uno puede ver un problema, pero los demás pueden no verlo a ese problema.

Por lo tanto, con el fin de identificar un problema, los consultores deben aclarar si existen
diferencias de propósitos. Pero a menudo, a los consultores se les olvida aclarar las diferencias de
propósitos y se confunden en sus proyectos de resolución de problemas. Por lo tanto, para poder ser
capaces de resolver problemas deberían empezar su resolución definiendo propósito y problema.

Terminología de la resolución de problemas

Debemos conocer la terminología básica para la resolución de problemas. Este informe propone
siete términos: Propósito, Situación, Problema, Causa, Causa Solucionable, Cuestión, y la
Solución.

Propósito
El propósito es lo que queremos hacer o lo que queremos ser, es un término fácil de entender. Pero
los consultores con frecuencia olvidan confirmar el propósito en el primer paso de la resolución de
problemas. Sin fines claros, no podemos pensar en problemas.

Situación
La situación es una circunstancia, que no es ni buena ni mala. Debemos reconocer situaciones de
forma tan objetiva como podamos. Por lo general, casi todas las situaciones no son problemas. Sin
embargo, algunos piensan que todas las situaciones son problemas.

Antes de reconocer un problema, debemos capturar situaciones claramente sin verlas como
problemas o como no problemas. Sin reconocer situaciones objetivamente, la resolución de
problemas puede ser sesgada, porque resolvemos problemas basados en nuestros prejuicios.

Problema
El problema es una parte de una situación que no permite alcanzar uno o más propósitos. Los
consultores a menudo descuidan los diferentes propósitos, y no pueden captar los verdaderos
problemas. Si tenemos un propósito diferente ante una situación idéntica, esto puede ser o no un
problema.

Fuente: http://www.mediafrontier.com/Article/PS/PS.htm
Causa
Es lo que conlleva un problema. Algunos consultores no distinguen las causas de los problemas.
Pero ya que los problemas son una o algunas porciones de una situación, los problemas son más
generales que las causas. En otras palabras, las causas son hechos más específicos, y son los que
dan lugar a problemas.

Sin distinguir las causas de los problemas, la resolución de problemas no puede ser específica.
Encontrar los hechos específicos que causan problemas es el paso esencial en la resolución de
problemas.

Causa solucionable
La causa solucionable es un porcentaje de las causas totales de un problema. Cuando resolvemos
un problema, debemos centrarnos en las causas que tienen solución. Encontrar las causas que
tienen solución es un paso esencial en la resolución de problemas.

Pero los consultores con frecuencia no extraen, -de entre todas las causas existentes- aquellas que
pueden resolverse. Si tratamos de resolver las causas imposibles de resolver, perdemos tiempo. La
extracción de causas que tienen solución es un paso muy útil para la resolución eficiente de
problemas.

Cuestión
La cuestión es la expresión opuesta de un problema. Si un problema es que no tenemos dinero, la
cuestión es obtener dinero. Algunos consultores no conocen este concepto. Pueden pensar en “no
tenemos dinero” como una cuestión. Lo que representaría mezclar los problemas, que deben ser
expresiones negativas, con las cuestiones que deben ser expresiones positivas, dado que hace
mención a lo que resolvería el problema.

Solución
La solución es una acción específica para resolver un problema, así como es una acción específica
identificar una cuestión. Algunos consultores no descomponen cuestiones en acciones más
específicas. Las cuestiones no son soluciones. Los consultores deben analizar las cuestiones y
descomponerlas en medidas concretas que lleven a la solución.

Fuente: http://www.mediafrontier.com/Article/PS/PS.htm