DEMOCRACIA

PROFUNDA
Hacer uso de este método implica tomar decisiones con atención
y contemplación de otros puntos de vista. No contentarse con una
decisión intermedia. El desafío es buscar el consenso pleno,
confrontar los conflictos y transformarlos, en vez de esconder o
evitarlos.
En la dinámica de grupos suceden muchas situaciones, sobre
todo cuando algunas personas sienten que no se les escucha, o que
no se toma en cuenta su opinión. Cuando no hay espacio para las
ideas que van en contra de la mayoría o del poder establecido se crea
tensión. En general, no solemos abordar esa dinámica en una
conversación abierta, sino que buscamos formas indirectas para
expresarnos: nos quejamos en los pasillos pero en la reunión
callamos. O decimos “sí” a una propuesta, pero después no
cumplimos. Chismeamos, buscamos excusas y perdemos interés.
Cuando, al final surgen a la luz los diferentes puntos de vista,
muchas veces ya se ha creado una brecha fuerte entre el punto de
vista de la mayoría y el de la minoría, con todos los enredos y la
tensión que eso crea en el trabajo.

El Método Lewis de la Democracia Profunda

Es una herramienta poderosa para tomar decisiones y transformar
conflictos dentro de equipos diversos. Facilita herramientas para
decidir colectivamente, sin diluir los puntos de vista ni suprimir los
conflictos