ESCUELA DE CIENCIAS JURIDICAS Y POLITICAS

ASIGNATURA:
Seminario de Actualización Jurídica I

Trabajo Final
Ley 20-23 Orgánica del Régimen Electoral.

PRESENTADO AL FACILITADOR:
Alberto Jiménez Monegro.

SUSTENTADO POR EL PARTICIPANTE:

Aida Marina Fadul Solano

Matrícula: 100038237

Santiago de los Caballeros, Rep. Dom.

Marzo 12 del año 2023.
Introducción
La nueva ley 20-23 tiene en su composición 342 artículos, la cual tiene influencias y
enfoques normativos reformados en temas como el deslinde competencial del TSE,
atribuyéndole a este órgano el conocimiento de las resoluciones emitidas por la JCE
con motivo del reconocimiento o disolución de los partidos, el orden de boleta
electoral y el financiamiento público, así como todo lo referido a los actos
administrativos de contenido electoral (artículo 334).
En lo desarrollado a continuación se presenta un análisis crítico y personal, de los
puntos o temas que considere más importante de la Ley 20-23 Orgánica del
Régimen Electoral.

Objetivos específicos:
Analizar la ley 20-23.
Conocer los puntos más relevantes de la ley 20-23.
Elabore un análisis crítico y personal, de los puntos o temas que considere
más importante de la Ley 20-23 Orgánica del Régimen Electoral.

Como todos sabemos el presidente actual de la República Dominicana, Luis

Abinader, promulgó la nueva Ley Orgánica de Régimen Electoral con el numeral 20-
23, mediante la cual se tiene como objetivo principal la regulación del ejercicio del
derecho de la ciudadanía de elegir y ser elegibles; a su vez, regular el procedimiento
y desarrollo del proceso electoral para la conformación del Poder Ejecutivo, el Poder
Legislativo y la elección de las autoridades municipales.
La ley e cuestión fue promulgada el 17 de febrero de este 2023, también lleva
consigo la manera de regular el funcionamiento y competencias de la Junta Central
Electoral (JCE) como máximo ente responsable de la organización de los comicios.
Sabemos que el Congreso Nacional después de aprobar una serie de
modificaciones a la 15-19, dentro de las cuales se encuentran el establecimiento de
una pena de hasta 10 años de prisión para quienes incurran en el delito contra la
integridad de las elecciones, una nueva infracción introducida en la legislación,
permite entonces que la ley 20-23 salga a relucir causando de cierta manera
controversias, más no asombro.
La misma en su haber, le da la potestad a la JCE para suspender las elecciones y
dar lugar a unas extraordinarias, por causa de fuerza mayor, hechos fortuitos u otras
circunstancias debidamente justificadas; a su vez, otorga un plazo de 180 días, de
ser aprobada y entrar en vigencia de la ley, para que la JCE de a conocer el
reglamento de aplicación y todos los reglamentos especiales y particulares
necesarios.
Da a conocer que el sistema automatizado, puede ser tomado en cuenta con la
finalidad de crear un proceso más eficiente y ágil en cuanto a la digitalización,
escaneo y transmisión, automática de resultados en los escrutinios y tramitación de
datos, los cuales pasarían a ser una base más confiable, accesible, verificable y
auditable, proceso que a su vez se verían los resultados desde los puestos de
votación hacia los puestos de recepción de datos, centros de procesamiento de
información, de consolidación de los resultados y de divulgación de los mismos.
Esta ley va en la búsqueda de fortalecer la función administrativa de los comicios de
la JCE y se castigar con una multa de tres veces los gastos a los candidatos a
cargos electivos que excedan el tope del gasto en campaña en un 5%.
La misma dentro de su artículo 331, que, en el Presupuesto General de Estado de
cada año, se consignará un monto que no podrá ser menor del 1.5% del monto
general del presupuesto, sin perjuicio de los gastos extraordinarios para ser
aplicados en procesos electorales, en referendos o plebiscitos.
Hablemos ahora de una manera más realista, luego de conocer lo que abarca la
ley:
La reforma recoge aspectos que por lo regular siempre quedan en el abismo de las
normas en el en las leyes anteriores, como la posibilidad de suspender por fuerza
mayor las elecciones, como aconteció con los comicios municipales de febrero del
2020.
Pero yéndonos a la realidad y pensando como un crítico, pues esta ley solo busca
sacar la mayor ventaja de quien está en el poder, con la finalidad de buscar
permanecer en mandato por el próximo período.
Según la misma hasta busca castigar las campañas que sobrepasen los gastos
estipulados, pero como siempre las cosas queda siempre en la duda de; ¿será
cierto? La misma lleva a la persecución de los crímenes y delitos cometidos en
ocasión de las elecciones, la ley promulgada crea la Procuraduría Especializada
para la Investigación y Persecución de los Delitos y Crímenes Electorales (artículos
321 al 329), regida por la Ley 133-11, Orgánica del Ministerio Público, con
procuradores adjuntos electorales al procurador y fiscalías provinciales y en el
Distrito Nacional dedicadas exclusivamente a esa labor durante los períodos
electorales.
Otro punto que supuestamente hace más llamativa la ley 20-23 es que aboga por el
voto electrónico, supuestamente con la finalidad de que el proceso sea más
eficiente, implementar, se prevé que los mismos deben asegurar la “trazabilidad de
los procesos y el debido mantenimiento de la información en condiciones de
integridad, seguridad, disponibilidad, que sea confiable, accesible, verificable,
auditable y transparente” (artículo 262).
Como todos sabemos el hecho que se implemente en estos tiempos un sistema de
tecnología avanzada, no es garantía de transparencia, pues sabemos que en la
actualidad esos temas son de los más vulnerables, y los fraudes no son inevitables
y de alguna manera se puede ocultar cosas que los demás no ven al n tener acceso
a las diversas plataformas de creación. La República Dominicana, no cuenta con la
madures necesaria para estos métodos.
Es mucho lo que se puede sacar a relucir del pro y los contras de todo lo que esta
ley desata, pues en ella se pone de manifiesto los intereses supuestos de abrir una
reelección de manera transparente y un sistema de votos donde la eficiencia salga a
relucir, pero el mismo no llega a satisfacer las creencias de aquellos que analizan a
fondo las verdaderas intenciones que impulsan la misma, puesto que más allá de
una ley, se ve que son estrategias políticas para seguir cosechando razones para
permanecer en el poder.

Seguir abundando en el tema seria llover sobre-mojado, pues la misma por si sola
da a conocer todo lo que encierra y pues en opinión y análisis, se llega a la
conclusión de que los intereses de permanencia en el gobierno van siempre a
predominar ante los intereses del pueblo, pues por más transparencia que esta ley
quiera declarar nunca serán hechos reales; los fraudes estarán y serán parte de
cada uno de los procesos.
Conclusión

En el desarrollo más arriba citado se ha analizado la ley 20-13 la cual tiene como
meta principal el regular el ejercicio del derecho de ciudadanía de elegir y ser
elegibles; así mismo, regular el procedimiento y desarrollo del proceso electoral para
la conformación del Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y la elección de las
autoridades municipales.
El análisis crítico presentado es con el objetivo de manifestar el pensamiento de la
mayoría de los ciudadanos que les consta que dicha ley solo busca más poder para
quienes están al control.

Bibliografía.
LEY NÚM. 20-23 ORGÁNICA DEL RÉGIMEN ELECTORAL. DEROGA LA LEY NÚM. 15-19,
ORGÁNICA DEL RÉGIMEN ELECTORAL Y SUS MODIFICACIONES