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Ensartar macarrones

Una tarea de lo más sencilla, pero que va a hacer que los más pequeños ocupen sus manitas de
forma amena. Les daremos un cordel y les pediremos que formen collares o pulseras con
ellos. ¡Incluso una guirnalda! O pídeles que los vayan insertando en otro lugar, como, por ejemplo,
un espagueti.

Estarán encantados de manipular los alimentos, se divertirán y, además, estarán trabajando su


motricidad fina. Incluso las matemáticas si después les pedimos que cuenten cuántas piezas de
pasta hay en cada figura que hayan formado.

También está la opción de darles pintura para que los decoren antes de ensartarlos. El éxito está
asegurado. ¡Crearán auténticas obras de arte!

 Organiza una búsqueda del tesoro

Si sabes que vas a necesitar un ratito para ti, organiza una búsqueda del tesoro que les mantenga
ocupados un tiempo. Esconde un ‘tesoro’ en algún lugar de la casa y prepárales una serie de
pistas que tendrán que seguir para encontrarlo. Puedes, incluso, dibujar un mapa que les guíe en
esta emocionante aventura. ¡Conviértelos en piratas o en policías que tienen que ir en busca de un
botín robado!

Pero deberán seguir todas las pistas. ¡No vale hacer trampas!

RECORTABLES Y MANUALIDADES

De la misma manera, moldeando plastilina para crear animales o personajes, los más pequeños se


divierten enormemente y a la vez están practicando la coordinación motora y su destreza manual.

Si los recursos son más escasos, una revista vieja para hacer recortables y crear en una cartulina
un escenario con muebles y personas a modo de collage (al que incluso pueden añadir algún
ingrediente de la cocina y otros objetos caseros) puede ser una magnífica idea.

DISFRAZARSE

No hay nada más divertido para los niñ@s que disfrazarse para convertirse en un personaje, real o
de ficción.

Y aunque en el mercado hay disfraces muy asequibles, es más interesante y entretenido


confeccionar con los peques su propio disfraz, ofreciéndoles los complementos del atuendo para
que lo empleen a su elección y se conviertan así en un pirata, una princesa o un monstruo.

LEER CUENTOS O LIBROS

Puedes leerlo tú con él o enseñarle. Lo ideal es que sean historias que consigan que se enganche,
sobre temas divertidos o que le puedan interesar. Tras la lectura, puedes hacerle preguntas para
conocer su grado de atención y de entusiasmo: si ha entendido todo bien, qué es lo que más le ha
gustado, cuál es su personaje favorito, etc.

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