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DIVERSION!
CO NT ENI DO:
CON MOVIMIENTO
¡Vamos en moto!
El organizador tiene que sentarse en el suelo y los niños van colocándose detrás,
como si fuesen en una enorme moto. El piloto va dando las indicaciones en voz
alta: “A la derecha. A la izquierda. ¡Cuidado, que freno! ¡Venga, que acelero” y va
girando el tronco a la vez que habla. Los niños tienen que ir girando con él.
Dentro y fuera
Para este juego necesitarás una alfombra bien sujeta al suelo. El organizador del
juego informa a los niños que sobre la alfombra están en la región conocida
como “dentro”, y fuera de la alfombra es la región conocida como “fuera”. Los
niños se sitúan fuera de la alfombra para que el juego comience, y el organizador
va diciendo en voz alta: “dentro, fuera, dentro, fuera…” y los niños tienen que ir
saltando de la alfombra. El juego debe ir cada vez más rápido y de forma
aleatoria: “dentro, dentro, fuera, dentro, fuera, fuera…” Como el tiempo es corto y
a cada cambio de palabra los niños tienen que obedecer y saltar, el riesgo de que
se equivoquen es elevado. Los que se van equivocando, quedan eliminados.
Puedes hacer varias rondas y que el ganador obtenga un punto con cada victoria y
dar un premio al que más puntos logre.
CON MÚSICA
¡Estatua!
El juego consiste en poner música y que los niños bailen. Al parar la música, los
niños tienen que quedar como una estatua en la postura que tenían.
Los oficios
"Me pongo de pie, me vuelvo a sentar porque a los oficios vamos a jugar..." Los
niños van imitando con sus manos diferentes oficios al ritmo de la canción:
costurera, barrendero, planchadora...
*Más juegos con números para aprender a contar pinchando en este reportaje.
DE PISTAS
Gincana
Hay que preparar el juego antes de que empiece la fiesta. Escondes varias pistas
(fáciles) en distintos lugares de la casa y cuando empiece el juego les dices dónde
está la primera (o les das una pista para que la encuentren). Una pista va
llevándoles a la otra hasta que encuentran el tesoro: un baúl lleno de chuches y
caramelos.
A buscar el tesoro
Preparas unos mapas (para los más mayores) y en cada escondite marcamos una
X. En cada escondite habrá otro mapa con otra X que le ayudará a encontrar el
siguiente, hasta que encuentren un baúl con el tesoro.
Maratón de juegos
En el pasado cumpleaños de mi hijo organicé una especie de maratón de juegos.
En distintos puntos de la casa había juegos como poner la cola al burro, encestar
canastas, juegos de anillas...En todos ellos iban sumando puntos y el que más
consiguiese se llevaba el premio más grande, aunque todos recibieron un detalle
por participar, que al final es lo importante. ¡Eso y que se lo pasen bien! Y os
aseguro que lo pasaron bien los niños jugando y los mayores animando.
Probadlo.
CON GLOBOS
Piñata personalizada
Antiguamente la piñata era de cerámica o de cartón, pero hay una manera más
divertida y rápida de prepararla y con la ayuda de los niños: con globos. En
algunos metes caramelos y otros los llenas con harina, agua, arroz, lentejas… ¿Y
para romperlos? Si les das un alfiler o un palillo lo pasarán en grande.
PARA MERENDAR
La campana tragona
Cada vez que preparamos una fiesta infantil aprovechamos la hora de la merienda
para dos cosas fundamentales: que todos los niños coman todo lo que se le pone
y que coman cosas nutritivas, y no sólo golosinas. El juego consiste en: antes de
sentar a todos los niños a la mesa les explicamos que como es un día especial, la
hora de merendar también se aprovechará para jugar. Les enseñamos una
campana que utilizaremos durante el juego. La colocamos en el centro de la mesa
y les decimos: "esta campana es muy importante porque sólo podrá ser tocada por
un comensal que haya terminado de comer. El primero que termine la macedonia
de frutas (el plato va variando y si son platos que sean conflictivos para los niños
les ponemos muy poca cantidad...) será el ganador y podrá tocar la campana
primero”. Luego la irán tocando los que vayan terminando.
1. Atletismo
Además de carreras sencillas en las que premiemos a los más veloces, vamos a
organizar dos juegos en grupo. El primero es una carrera de relevos. Divide a los
niños en grupos con el mismo número de participantes y da a uno de ellos un
testigo. Indícales que den una vuelta al jardín y, al llegar, entreguen el testigo al
siguiente miembro de su equipo. Ganará el equipo que acabe antes la carrera. El
otro juego es el clásico pañuelo. Divide a los niños en dos grupos y otorga un
número a cada pequeño. Colócate en el medio con un pañuelo en la mano y grita
un número. Los dos niños tendrán que correr a por el pañuelo y volver al punto de
salida sin que su rival le alcance. Los pequeños derrotados se van eliminando
hasta que un equipo se quede sin jugadores y pierda. Si quieres incluir pruebas
de salto en tu fiesta, puedes pedirles que hagan carreras de saltitos esquivando
obstáculos que dispongas por su camino o que jueguen a la rayuela.
2. Badminton
Raquetas y una pluma. No necesitas más para organizar un partidillo de
badminton en tu casa. Si no tienes raquetas de este deporte, podéis usar las palas
de la playa. Además del partido tradicional, jugad a "Que no caiga", un juego
todos contra todos en que los niños tienen que luchar por mantener la pluma en el
aire sin que caiga al suelo. A los que se les caiga se van eliminando hasta que
gane uno.
3. Baloncesto
Colar un balón en una canasta real no es nada fácil; pero ¿qué pasará si
disminuimos el tamaño tanto del aro como de la pelota? Divide a los niños en
dos equipos y coloca dos papeleras de boca estrecha a un metro y medio de
altura –los niños no llegarán pero no estará demasiado alto–. El partido se
disputará con una pelota de tenis y con las mismas normas que un partido
convencional. Si preferís un juego individual, organiza "El 21". En una canasta,
establece turnos para que los pequeños vayan lanzando el balón. Si meten desde
un metro de distancia, les das un punto; desde los dos metros, dos puntos, y tres,
si logran un triple. El que antes llegue a 21 puntos aún tendrá dos pruebas más
que pasar: encestar un triple y una canasta de gancho.
4. Balonmano
Es uno de los deportes que más éxitos ha dado al palmarés español en los Juegos
Olímpicos de los últimos años. Además de un partido sencillo, puedes poner a
prueba la puntería de los niños a la hora de lanzar la pelota. Coloca algunas
siluetas pegadas en picas a lo largo del jardín. Por turnos, los niños irán
intentando dar a los dibujos con una pelota. Todos empiezan desde la misma
distancia. Si hacen blanco, les das un punto y se alejan un paso más. Sino, se
mantiene en esa posición. Gane el que antes logre 10 puntos.
5. Natación
Pruebas solo aptas para las casas con piscina y procurando no molestar al resto
de bañistas si lo hacemos en la de la comunidad. El primer juego va a poner a
prueba la velocidad de los niños para nadar y su capacidad para
bucear. Hazte con varios objetos sumergibles –en las jugueterías venden anillas y
bastones para la piscina– y lánzalos al agua. Cuando lleguen al fondo da la señal
de alarma. Los niños tendrán que lanzarse al agua e intentar rescatar todos los
objetos que puedan. Gana el que más "pesque". Si lo prefieres, puedes lanzar
siempre el mismo número de objetos y que los niños se tiren al agua por turnos,
cronometrando lo que tardan y venciendo el más rápido. En nuestro segundo
juego acuático rendiremos homenaje a las sirenas de la natación
sincronizada. Organiza a los niños en grupos, dales un ratito para que practiquen
y que después cada equipo represente su actuación. Las risas estás aseguradas.
6. Equitación
Que sea uno de los grandes deportes desconocidos para los niños no quiere decir
que la equitación no pueda ser de lo más divertida. Traza en una cartulina la
silueta de la cabeza de un caballo y pégala al palo de una escoba o compra uno
de los que venden en las jugueterías. Dispón cojines, cajas y conos haciendo un
circuito. Por turnos, los niños tendrán que ir haciendo ese circuito "a lomos" de su
caballo. Penalízales si rozan los obstáculos, no los esquivan a tiempo... Gana el
que lo haga mejor y en menos tiempo.
7. Fútbol
Un partido, una tanda de penalties, carreras esquivando líneas de conos... Dales
un balón de parches negros y blancos y déjales que jueguen a lo que más les
gusta. Los niños no necesitarán orientación para imitar a Messi, Cristiano y
Casillas. Eso sí, no te alejes demasiado; un árbitro justo y equitativo siempre viene
bien.
8. Gimnasia
Ver a las gimnastas deslizarse sobre el tapiz, tirar y coger mazas, pelotas y cintas,
contemplar sus piruetas... mantiene a grandes y pequeños boquiabiertos delante
de la tele. Vamos a ser menos ambiciosos y limitarnos a disponer varias
colchonetas por el suelo donde los niños puedan hacer volteretas, el pino, saltar
el potro –ellos mismos pueden hacer de potro por turnos– y darles algún balón
ligero y una cinta por si quieren probar a lanzarlo al aire e intentar cogerlo.
Premia al que mejor lo haga.
9. Halterofilia
Unas botellas vacías, llenas hasta la mitad, completas, con arena, más pequeñas
y más grandes... os servirán a modo de pesas para poner a prueba la fuerza de
los pequeños "cachas" de vuestra fiesta. Gana el que sea capaz de levantar más
peso. A caballo entre la halterofilia y el atletismo, podéis organizar una carrera de
carretillas. Divididos por parejas, un niño apoya las manos en el suelo y el otro le
coge los pies y corren así, ganando la pareja que antes complete el recorrido
indicado.
10. Tiro
¿Tienes una diana de juguete en casa? Será suficiente para que tu hijo y sus
amigos practiquen su puntería. Si no dispones de una, dibuja una gran diana en
un papel y pégala en la pared. Dales globos de pequeño tamaño que usarán a
modo de dardos. El juego es mucho más complicado ya que el globo puede variar
su trayectoria. Establece una puntuación para que gane el niño que antes la
alcance.
1. Globos al rincón. Pon muchos globos del color de los equipos en el centro de
la habitación. A la señal de "¡Ya!" y mientras cuentas hasta 5, cada niño debe
recoger globos de su color y depositarlo en el lugar que le corresponda. Gana el
equipo que amasó más globos del color correcto.
2. Veo, veo. Por turnos, los niños deben responder a las preguntas de "veo, veo
algo de color... azul".
3. Guerra de bolas. Haz muchas bolas con papel de seda de los 4 colores.
Repártelas entre los niños que deben alcanzar con ellas un niño del color de la
bola que tienen entre las manos. Cuando ya no tienen, recogen las del suelo y...
¡al ataque!.
4. Mando yo. Divide a los niños en dos equipos y que cada uno de ellos elija un
capitán. Durante cinco minutos, uno de los grupos tiene que obedecer todas las
órdenes del capitán del equipo contrario. "Tocad algo verde", y los niños
dispondrán de 10 segundos para hallar algo de ese color. Da un punto por cada
objeto tocado dentro del tiempo. Después, el equipo que ordenaba pasa a jugar y
gana el que más puntos obtenga.
5. Qué color es. Procúrate una linterna y papel transparente de colores. Los niños
deben adivinar qué color dará si superpones el azul con el amarillo o el rojo con el
azul.
1. Fiesta temática. Una buena opción para conseguir que todos los niños acudan
disfrazados a la fiesta es plantear un tema para el disfraz. Uno que nunca falla
son los “Clásicos Disney”. Informa a los niños de que tienen que ir a la fiesta
vestidos como algún personaje de sus películas favoritas. Aladín, Blancanieves,
Mickey, el pato Donald, Buzz Lightyear… la lista es interminable, por lo que no les
será muy difícil encontrar un atuendo para la ocasión. Y, ya que se trata de una
fiesta temática, la decoración de la casa debe acompañar. Compra platos y vasos
con sus personajes favoritos, corta el pan para sus sándwiches con la forma de la
cabeza de Mickey (es la más sencilla) y, como música, usa las bandas sonoras de
las películas.
4. Gran yincana. Los niños lo pasan en grande con las yincanas. Recorrer la casa
buscando pistas que les lleven a un gran premio final les hace sentir verdaderos
investigadores. Aprovecha para preparar una muy divertida escondiendo pistas
por toda la casa. Si eres capaz de escribir las pistas en verso, quedará más
original. En el caso de que organices una fiesta temática, intenta que las pistas
estén relacionadas con ella. Por ejemplo, en el caso de los “Clásicos Disney”,
las pistas pueden hacer referencia a detalles de las películas. En una pista puedes
escribir: “Si la siguiente pista quieres encontrar, el peine de La Sirenita has de
buscar”, que esconderás en el cajón de los tenedores, donde habrá una nueva
que diga: “La señora Potts te invita a té si encuentras a Chip y acudes a la cita con
él”, llevándoles al armario donde guardes las tazas y así sucesivamente. Al final,
puedes plantear una prueba en la que se decida si les das el premio o no.
5. ¡Arriba el telón! ¿Te has fijado alguna vez en cuántas princesas y superhéroes
se pueden juntar en una fiesta de disfraces? Son los atuendos más repetidos, pero
no los únicos. Os proponemos que agrupéis a los pequeños con trajes
relacionados o completamente diferentes –aún más disparatados–, monta un
escenario cubierto por una sábana colgada del techo y pídeles que escriban y
representen su pequeña obra de teatro. Los aplausos están asegurados.
6. ¿Quién soy? Coloca a todos los niños en un círculo y, por turnos, irán
colocándose en el centro e imitando a alguno de los otros niños. Por ejemplo, si
hay uno vestido de payaso, Superman deberá hacer malabares y tonterías para
que los demás reconozcan a quién está imitando. Gana el que tarde menos en
adivinarlo, que representará en el turno siguiente.
7. Reyes y reinas. Pocas cosas hay tan típicas del Carnaval como la coronación
de la Reina de las fiestas, es que lleva el disfraz más espectacular. Convierte tu
casa en una gran pasarela de modelos sobre la que vayan desfilando los
pequeños y prepara una corona de cartón pintada de dorado y una medalla para
honrar a tu reina y rey.
CHISTES CORTOS PARA NIÑOS
Diversión en casa
A partir de los 5 años, a los niños les encanta contar chistes. Los que te
proponemos son fáciles de contar, entender y repetir.
"¿Lo has pillado, mamá?" A los niños les gusta contar chistes y observar cómo el
auditorio responde a la gracia. Pero contarlos bien es como hacer teatro: dicción,
entonación, ritmo... Aquí van algunos chistes cortos y sencillos para que se vaya
entrenando.
2. Iban dos ratitas paseando por la calle, cuando pasa por encima un murciélago.
- ¿De veras?
- Las doce.
- ¡Qué tarde!
- ¿A ti se te escapa la caca?
- Cuatro.
- Porque he leído que uno de cada cinco niños que nace es chino.
11. Un hombre va al médico.
-¿Por qué?
Sigue nuestros consejos y pasaréis unas tardes inolvidables con los niños.
Unos días antes de la fecha prevista, reúne a los niños para decidir el contenido
del espectáculo. La planificación es fundamental si quieres llevar tu proyecto a
buen puerto. Aquí van algunas ideas:
ESPECTÁCULO DE MAGIA
Entre los 6 y 8 años, todos los niños se vuelven locos con la magia y presentar sus
trucos ante un público entregado les resultará muy emocionante.
Es importante repetirlos mucho para que los resuelvan con soltura. Los niños se
prestarán a ello con entusiasmo. La magia es también teatro y habrá que
enseñarles a crear expectación y engañar al público atrayendo su atención donde
nos interesa.
ESPECTÁCULO DE GUIÑOL
El atrezzo
- Teatro de marionetas. Tienes varias posibilidades: colocar una tela que tape el
cuerpo de los niños entre los montantes de una puerta, cubrir la mesa del comedor
con una sábana y que los muñecos asomen por el borde, situar a los niños detrás
del sofá...
ESPECTÁCULO MUSICAL
El espectáculo preferido de las niñas, la ocasión de lucirse en escena con su
canción favorita. La última de Violeta, la película de moda o el hit del momento.
Para los más pequeños, un espectáculo de canciones mimadas suele arrancar
aplausos a los espectadores más difíciles.
El atrezzo. Procura que los niños canten con micrófono o con música de fondo.
Todo resultará más vistoso. En cuanto a los disfraces, recuerda que unos buenos
maquillajes y peinados hacen maravillas.
ESPECTÁCULO CÓMICO
Unos cuantos chistes graciosos contados por los niños son un espectáculo en sí.
Entre estos chistes para niños podrás completar con adivinanzas divertidas.
Los ensayos
Son parte íntegra del placer de montar un espectáculo. Planifica por lo menos un
ensayo general y crea toda la expectación que se merece el evento.
LAS INVITACIONES
Una vez fijada la fecha, hay que ocuparse de las invitaciones para fiestas
infantiles. Las podrás enviar por correo, distribuir en mano o
No tienen más de cuatro versos para que los niños las resuelvan mejor.
Enséñaselas a tu hijo para que las vaya preguntando entre sus compañeros y
conocidos. Cuando ya las sepa todas podéis practicar estas 5 adivinanzas fáciles
para niños o 5 adivinanzas de animales tradicionales.
1. As no soy,
as no fui,
as no seré
hasta el fin.
Respuesta: el asno.
Respuesta: el caballo.
3. Antes huevecito,
después capullito,
más tarde volaré
como un pajarito.
Respuesta: la mariposa.
Respuesta: el gato.
5. ¿Cuál es el animal,
de campo o corral,
que si una zanahoria le das
sus dientecitos verás?
Respuesto: el conejo.
Respuesta: la abeja.
Respuesta: la araña.
Respuesta: el búho.
Respuesta: el caracol.
Respuesta: el mejillón.
Respuesta: el murciélago.
Respuesta: la oveja.
Respuesta: la rana
3. Explotar globos
Se inflan los globos y se atan a una cuerda que quedará suspendida contra una
pared. Los niños salen con tobillos y manos atados de la línea de fondo. Deben ir
pegando saltitos hasta su globo y explotarlo con el pecho, la espalda, los
dientes… Gana el primero en lograrlo
11. Al cubo
Coloca un cubo a 2 metros de los jugadores. Los niños deben lanzar al cubo los
globos de agua. Los niños que no lo logran quedan eliminados. Para los que sí, el
cubo se aleja y sigue el juego. Gana el que tira el globo en el cubo más alejado.
10 TRABALENGUAS DIVERTIDOS
Juega con el idioma
Juegos de palabra divertidos, pequeños poemas sonoros imposibles de
pronunciar..., los trabalenguas nos hacen reírnos mucho. Practícalos con tu hijo y
¡verás qué risa!
Al principio, pídele a tu hijo que repita el trabalenguas despacio, hasta que lo
entienda y aprenda de memoria. A medida que lo vaya controlando, se trata de
recitarlo cada vez más deprisa hasta tropezar con las palabras. A ver quién lo
repite más veces sin equivocarse.
4. Uno de la r con la t.
9. Uno de amor.
1. De grandes y 'peques'
Seguro que la primera tentación de los niños al ver un espacio al aire libre y un
balón es jugar un partido de fútbol y, aunque vaya a divertirles mucho, ¿qué
tiene de especial si es lo que hacen en los recreos y cada vez que bajáis al
parque? Vamos a darle un toque original a nuestro partido haciendo equipos en
que mezclemos a los niños, los padres y las madres. ¡A ver quién gana!
Seguro que les encanta meter un gol a papá o ver cómo mamá hace un regate.
2. El futbolín gigante
Organiza dos equipos y distribuye a los jugadores en las tres líneas
habituales de un futbolín (prescindiremos del portero): defensas, centrales y
delanteros. Es importante que todas las filas tengan al menos dos niños. Usa una
cuerda para atar por la cintura a todos los miembros de cada línea dejando al
menos medio metro de cuerda entre cada pequeño, así, cuando uno corra en una
dirección para ir a por la pelota, todos deberán moverse como en un futbolín
gigante o irán al suelo. Este juego sólo debe practicarse sobre superficies
blandas, nunca sobre cemento o los niños podrían hacerse daño.
3. Rondo de pelotas
Sienta a los niños en el suelo formando un círculo. Déjales un balón y
anímales a que se lo pasen de unos a otros sin dejar que caiga al
suelo. Cuando lleven un rato jugando con una pelota, echa otra al círculo, así
hasta que no te queden más balones y ellos se vuelvan un poco locos.
4. El mareo
Un clásico de los juegos con pelota. Los niños deben situarse de pie en un
círculo y uno de ellos se coloca en el medio, el que “liga”. Los jugadores deben
ir pasándose el balón sin que el del medio no lo intercepte. Deja claras las
normas antes de empezar: no se puede pasar el balón al jugador que está a
tus lados, cada niño puede dar un máximo de dos toques y el que liga sólo
puede atrapar el balón con el pie o la pierna, nunca con las manos. El jugador
que tocó el balón por última vez antes de que el del centro lo coja es el que liga en
el turno siguiente.
5. Diana-gol
Ahora toca valorar la puntería de los niños. Dibuja círculos concéntricos en
una pared como si fuera una diana y otorga un valor a cada uno de los círculos:
1, 5, 10, 15..., ¡los que tú quieras! Los jugadores se irán situando cada vez a una
distancia y dispararán dos tiros cada uno. Ve anotando la puntuación que logra
cada uno. El que antes llegue a 100, gana.
7. Cabeza pensante
Distribuye a los niños por parejas, con un balón cada uno y colócalos a una
distancia de medio metro. Los niños tendrán que intentar pasarse el balón el uno
al otro usando sólo la cabeza, con las manos detrás de la espalda. Id contando
en alto los toques que hace cada grupo. Gana la pareja que más toques haga.
8. Tulipán
Adaptamos este clásico de los juegos infantiles a su versión futbolera. Cada niño
llevará un balón en los pies e intentará correr por el espacio que hayas
delimitado. El que liga debe conseguir que su balón golpee el de alguno de
los contrarios. Cuando uno de ellos se vea acosado o quiera descansar puede
gritar “¡tulipán!” y colocarse con los brazos en cruz y las piernas
abiertas. Para ser salvado y poder jugar de nuevo, alguno de sus compañeros
debe colar su propio balón entre sus piernas sin ser cazado.
9. El balón futbolero
Este juego no es más que el del balón prisionero pero jugado con el pie.
Delimita dos campos, uno para cada equipo. El que tiene la pelota puede
golpearla con el pie para tocar a un jugador que, si no es capaz de
interceptarla también con el pie, se colocará al fondo del campo contrario. Si
la coge, puede tirarla inmediatamente para cazar a un jugador del otro equipo.
Gana el equipo que antes capture a todos los contrarios.
1. Guerra de almohadas
Un clásico entre los clásicos. Aparta todo lo que pueda peligrar, da la señal de
alarma y que los niños den rienda suelta a su furia guerrera. En este juego no hay
ganador porque todos acaban agotados.
4. A la camita ciega
Si tienes una casa grande y puedes ofrecer una cama a cada uno de los pequeños
que acudan a tu fiesta, no te molestes en hacerles las camas porque vamos a
aprovechar para jugar con ellas. Tápale los ojos y comprueba que no ve
absolutamente nada. Dale un juego de sábanas. El resto de niños tienen que ir
indicándole cómo hacer la cama para que no quede hecha un auténtico desastre.
Gana el pequeño que mejor desarrolle su cometido.
8. El pintauñas giratorio
Reúne pintauñas de diferentes colores y coloca a las niñas formando un círculo.
Coge el primer pintauñas y gíralo. Cuando se pare, la niña a la que apunte deberá
pintarse la primera uña de la mano izquierda con él. Id haciendo lo mismo por
turnos hasta que todas tengan la manicura hecha. ¡Verás el resultado!
9. Todos a cantar
Busca en Youtube vídeos con letras de canciones que todos conozcan, fabrica
micrófonos caseros y organiza un karaoke por equipos. A modo de jurado, ve
dando puntos a los que mejor canten para ver quién gana.
1. El teléfono roto
Coloca a los niños en dos filas, formando dos equipos, y dile una frase al oído al
primero de cada grupo, cuanto más larga y complicada sea, mejor –puedes optar
por un divertido trabalenguas–. Cada niño deberá susurrarla al oído del siguiente.
El último, dirá en voz alta lo que ha entendido y ganará el equipo cuya frase se
parezca más a la que tú dijiste.
2. Caballería
Coloca a todos los niños en una fila. Uno de los pequeños ejerce de caballero,
colocándose enfrente de ellos. Cuando grite “¡caballería!” sus amigos deberán
salir corriendo para llegar a tocar el muro que estará a la espalda del caballero sin
ser atrapados por éste. Todos los “potrillos” cazados se convierten en caballeros y
empiezan también a cazar. El primer jugador atrapado liga en el turno siguiente.
También pueden practicar todos estos juegos relacionados con el deporte.
4. Como en la bolera
Llena varias botellas vacías de agua con un poco de arena y colócalas a unos
diez metros de los niños. Con un balón de baloncesto, tendrán que derribar todos
los que puedan. Organízales por equipos para ver quién gana.
5. ¡Es la guerra (del agua)!
Cubos, globos, gorros, pistolas... ¡Todo vale en la guerra del agua! Entrega a los
niños varios de estos instrumentos, repártelos en dos equipos y ¡que empiece la
guerra! El bando vencedor será el que consiga mojar más al contrario, aunque el
verdadero premio es la diversión de esos minutos. Firmad la paz con una buena
merienda.
6. ¡Vamos en moto!
El organizador, si es una fiesta de cumpleaños puede ser el homenajeado, tiene
que sentarse en el suelo y los niños van colocándose detrás, como si fuesen
en una enorme moto. El piloto va dando las indicaciones en voz alta: “A la
derecha. A la izquierda. ¡Cuidado, que freno! ¡Venga, que acelero” y va girando el
tronco a la vez que habla. Los niños tienen que ir girando con él.
7. El globo irrompible
Los juegos con globos son divertidísimos, ¡sobre todo cuando explotan! Ata un
globo al tobillo de cada niño. Al son de la música salen a la pista. El juego
consiste en pisar el globo del contrario, salvando el propio. Los niños que pierden
su globo salen de la pista. Gana el último en conservar su globo.
8. Baile de disfraces
Los disfraces son una opción muy divertida para que los niños se diviertan.
Prepara varios baúles con prendas viejas o algunas que hayas elaborado con
retales para la ocasión: faldas, pantalones, camisas, pelucas, sombreros,
extravagantes collares y adornos para el pelo… Diles que pondrás la música y
cada uno tendrá que coger una prenda de cada baúl y ponérsela antes de que tú
pares la canción.
9. Carrera de castañas
Clava un clavo en el centro de una castaña, sácalo y pide a tu hijo que clave una
pluma en él. Escoge plumas de color diferente para cada grupo. Cuando tengáis
varias, los niños tendrán que ir lanzando sus castañas desde diferentes alturas
para ver cuál llega antes al suelo.
2. Sombras terroríficas
Cuelga una sábana en el marco de una puerta. Los niños se instalan enfrente.
Sitúa una lámpara de pie detrás de la sábana a metro y medio de distancia. Por
turnos, los niños se colocan de perfil entre la sábana y la lámpara e intentan
asustar a los espectadores con gestos y voces amenazantes. Si los niños están
disfrazados, más vistosas quedarán las sombras.
3. Cazafantasma
Los jugadores están a oscuras. Uno de ellos, el cazafantasma tiene una linterna.
El cazafantasma grita "¡Luz!", enciende la linterna en una dirección y la apaga
rápidamente. A continuación, debe decir el nombre de los niños que ha visto y
estos suman un punto. Al cabo de 10 relámpagos de luz, el ganador es el que
menos puntos ha tenido, que pasa a ser a su vez cazafantasma.
4. ¡Abracadabra!
Se elige un jugador entre los asistentes y se le coloca un sombrero de bruja en la
cabeza. La bruja anuncia a los niños "¡Abracadabra! Os transformo en.... (algún
animal, payasos, deportistas...)". A continuación, coge a cada niño por la mano, da
varias vueltas con él y cuando lo suelta, el niño debe adoptar la pose que se le ha
pedido.
5. Vampiro, ¡fantasma!
Los niños están sentados en círculo. El que empieza el juego camina fuera del
círculo dándoles palmaditas en la cabeza y diciendo "Fantasma, fantasma...". En
un momento dado, dice "¡Vampiro!". El niño elegido se levanta y tiene que
alcanzarlo mientras corren alrededor del círculo para alcanzarle antes de que
ocupe su lugar. Si no lo logra, el vampiro es él.
Se entiende que una fiesta de circo y payasos debe tener juegos de mucha risa.
Prueba los siguientes:
3. Payaso chistoso. Pide a los niños que vengan de casa con algún chiste
aprendido. Si no se acuerdan de ninguno, se lo enseñas en el último momento.
Aquí, encontrarás chistes sencillos para niños. Los pequeños se sientan en el
suelo. Por turnos, deben pasar a escena y contar su chiste.
4. Payasos habilidosos. Apila en una mesa apoyada contra una pared unos
cuantos envases de yogur vacíos formando una pirámide. Coloca a los niños en
fila a cierta distancia. Con 3 pelotas pequeñas, cada niño debe tumbar todos los
botes.
1. ¿Tú quién eres? Una versión de la gallina ciega pero en vez del tacto, el niño
tiene que utilizar el oído. Al ser atrapado, el pequeño debe que rugir, maullar,
ladrar... lo que le corresponda. El que no consigue que se reconozca el animal que
representa ocupa el lugar de la gallina ciega.
2. Ponle la cola al burro. Hay que dibujar una silueta de burro en una cartulina y
aparte, la cola del animal. Cada niño, de uno en uno y con los ojos tapados, da
unas cuantas vueltas sobre sí mismo. Después, debe colocar la cola al burro. Se
marca el intento de cada jugador y gana el que se haya acercado más a la
posición original.
4. Yo soy un... Pon en una bolsa papelitos con el nombre de un animal: un cerdo,
un pez, un ratón, un león, un gato... El niño saca un papelito y debe escenificar en
silencio el animal que le toca para que los demás descubran de cuál se trata.
5. ¿Quién llega antes? Haz dos equipos o más si hay muchos niños. Pon en una
bolsa nombres de animales que se desplazan de forma distinta: un canguro, un
perro, una serpiente, un caballo... Un niño de cada equipo debe recorrer la
distancia hasta la meta como lo haría el animal que les ha tocado. Gana el equipo
que termina antes.
6. El cuento de.... En una fiesta de animales, es muy apropiado contar o
escenificar un cuento o representar un guiñol. La literatura infantil nos brinda
múltiples ideas: el cuento de los tres cerditos, los tres ositos, Pedro y el lobo, etc.
Para animar una fiesta de osos de peluche, hay que organizar juegos de osos.
Aquí te proponemos algunos que encantarán a niños entre 3 y 5 años.
1. La danza del oso. Es una variante del juego de las estatuas. En este caso, los
niños deben bailar como hacen los osos gordotes y torpones al son de una música
alegre. Cuando para la música, se deben quedar como estatuas. Los
desprevenidos que siguen bailando son eliminados.
2. El oso sin pareja. Los niños bailan en pareja, excepto uno que no tiene con
quién bailar. Cuando para la música, todos cambian de pareja a toda prisa para no
quedarse solo.
3. El morro del oso. Dibuja la silueta de un oso de peluche sobre un papel grande
y cuélgalo de la pared. Pinta los ojos, la nariz y la boca. Haz una nariz con una
bola de papel negro o un trozo de corcho pintado de negro. En un lado del morro,
pega un celo de doble cara. Los niños deben colocarlo en su sitio con los ojos
vendados. Apunta el nombre del jugador en el lugar donde lo pega. El ganador es
el que más se acerca al lugar correcto.
5. Pásame el oso. Decora dos globos con cara de oso. Forma dos equipos, cada
uno con su globo. Al son de la música, los niños deben pasárselo. El primero lo
pasa entre las piernas, el siguiente por encima de la cabeza, etc. El último en
recibir el globo corre al principio de la fila y vuelve a pasar el globo al jugador que
tiene detrás. Así hasta que todos hayan corrido. Gana el equipo que termina
primero.
1. ¡Encadenados!
Este truco consiste en encadenar tres clips sin tocarlos. ¡Cierto! Para lograr esta
hazaña, sólo necesitas 3 clips y un billete. Sigue los pasos indicados en las
imágenes. Entrénate varias veces y convoca a tu público.
Con un globo
Ya sabemos que los globos revientan si los pinchas con un alfiler. Pero no en
todos los casos. Vamos a utilizar un truco para dejar a nuestros espectadores muy
sorprendidos.
* Hincha varios globos y prepara los alfileres. En un globo, el tuyo, pega un trocito
de celo en un lugar discreto y facilmente localizable.
* Entrega los globos a algunos espectadores y diles que los pinchen con el alfiler.
Todos reventarán.
* Entonces, saca el tuyo, pronuncia la palabra mágica, pincha en la zona del celo y
no estallará. Importante: para que funcione el truco, no debes sacar el alfiler del
globo.
Consejos
Los trucos de magia son pequeñas puestas en escena. Hay que cuidarlas. Ensaya
delante de un espejo para ponerlas a punto. Has gestos lentos, hablando a tu
público y despertando su curiosidad. La palabra mágica no tiene por qué ser
¡Abracadabra!. Invéntate una, la que sea. Será la tuya.
1. Atletismo
Además de carreras sencillas en las que premiemos a los más veloces, vamos a
organizar dos juegos en grupo. El primero es una carrera de relevos. Divide a los
niños en grupos con el mismo número de participantes y da a uno de ellos un
testigo. Indícales que den una vuelta al jardín y, al llegar, entreguen el testigo al
siguiente miembro de su equipo. Ganará el equipo que acabe antes la carrera. El
otro juego es el clásico pañuelo. Divide a los niños en dos grupos y otorga un
número a cada pequeño. Colócate en el medio con un pañuelo en la mano y grita
un número. Los dos niños tendrán que correr a por el pañuelo y volver al punto de
salida sin que su rival le alcance. Los pequeños derrotados se van eliminando
hasta que un equipo se quede sin jugadores y pierda. Si quieres incluir pruebas
de salto en tu fiesta, puedes pedirles que hagan carreras de saltitos esquivando
obstáculos que dispongas por su camino o que jueguen a la rayuela.
2. Badminton
Raquetas y una pluma. No necesitas más para organizar un partidillo de
badminton en tu casa. Si no tienes raquetas de este deporte, podéis usar las palas
de la playa. Además del partido tradicional, jugad a "Que no caiga", un juego
todos contra todos en que los niños tienen que luchar por mantener la pluma en el
aire sin que caiga al suelo. A los que se les caiga se van eliminando hasta que
gane uno.
3. Baloncesto
Colar un balón en una canasta real no es nada fácil; pero ¿qué pasará si
disminuimos el tamaño tanto del aro como de la pelota? Divide a los niños en
dos equipos y coloca dos papeleras de boca estrecha a un metro y medio de
altura –los niños no llegarán pero no estará demasiado alto–. El partido se
disputará con una pelota de tenis y con las mismas normas que un partido
convencional. Si preferís un juego individual, organiza "El 21". En una canasta,
establece turnos para que los pequeños vayan lanzando el balón. Si meten desde
un metro de distancia, les das un punto; desde los dos metros, dos puntos, y tres,
si logran un triple. El que antes llegue a 21 puntos aún tendrá dos pruebas más
que pasar: encestar un triple y una canasta de gancho.
4. Balonmano
Es uno de los deportes que más éxitos ha dado al palmarés español en los Juegos
Olímpicos de los últimos años. Además de un partido sencillo, puedes poner a
prueba la puntería de los niños a la hora de lanzar la pelota. Coloca algunas
siluetas pegadas en picas a lo largo del jardín. Por turnos, los niños irán
intentando dar a los dibujos con una pelota. Todos empiezan desde la misma
distancia. Si hacen blanco, les das un punto y se alejan un paso más. Sino, se
mantiene en esa posición. Gane el que antes logre 10 puntos.
5. Natación
Pruebas solo aptas para las casas con piscina y procurando no molestar al resto
de bañistas si lo hacemos en la de la comunidad. El primer juego va a poner a
prueba la velocidad de los niños para nadar y su capacidad para
bucear. Hazte con varios objetos sumergibles –en las jugueterías venden anillas y
bastones para la piscina– y lánzalos al agua. Cuando lleguen al fondo da la señal
de alarma. Los niños tendrán que lanzarse al agua e intentar rescatar todos los
objetos que puedan. Gana el que más "pesque". Si lo prefieres, puedes lanzar
siempre el mismo número de objetos y que los niños se tiren al agua por turnos,
cronometrando lo que tardan y venciendo el más rápido. En nuestro segundo
juego acuático rendiremos homenaje a las sirenas de la natación
sincronizada. Organiza a los niños en grupos, dales un ratito para que practiquen
y que después cada equipo represente su actuación. Las risas estás aseguradas.
6. Equitación
Que sea uno de los grandes deportes desconocidos para los niños no quiere decir
que la equitación no pueda ser de lo más divertida. Traza en una cartulina la
silueta de la cabeza de un caballo y pégala al palo de una escoba o compra uno
de los que venden en las jugueterías. Dispón cojines, cajas y conos haciendo un
circuito. Por turnos, los niños tendrán que ir haciendo ese circuito "a lomos" de su
caballo. Penalízales si rozan los obstáculos, no los esquivan a tiempo... Gana el
que lo haga mejor y en menos tiempo.
7. Fútbol
Un partido, una tanda de penalties, carreras esquivando líneas de conos... Dales
un balón de parches negros y blancos y déjales que jueguen a lo que más les
gusta. Los niños no necesitarán orientación para imitar a Messi, Cristiano y
Casillas. Eso sí, no te alejes demasiado; un árbitro justo y equitativo siempre viene
bien.
8. Gimnasia
Ver a las gimnastas deslizarse sobre el tapiz, tirar y coger mazas, pelotas y cintas,
contemplar sus piruetas... mantiene a grandes y pequeños boquiabiertos delante
de la tele. Vamos a ser menos ambiciosos y limitarnos a disponer varias
colchonetas por el suelo donde los niños puedan hacer volteretas, el pino, saltar
el potro –ellos mismos pueden hacer de potro por turnos– y darles algún balón
ligero y una cinta por si quieren probar a lanzarlo al aire e intentar cogerlo.
Premia al que mejor lo haga.
9. Halterofilia
Unas botellas vacías, llenas hasta la mitad, completas, con arena, más pequeñas
y más grandes... os servirán a modo de pesas para poner a prueba la fuerza de
los pequeños "cachas" de vuestra fiesta. Gana el que sea capaz de levantar más
peso. A caballo entre la halterofilia y el atletismo, podéis organizar una carrera de
carretillas. Divididos por parejas, un niño apoya las manos en el suelo y el otro le
coge los pies y corren así, ganando la pareja que antes complete el recorrido
indicado.
10. Tiro
¿Tienes una diana de juguete en casa? Será suficiente para que tu hijo y sus
amigos practiquen su puntería. Si no dispones de una, dibuja una gran diana en
un papel y pégala en la pared. Dales globos de pequeño tamaño que usarán a
modo de dardos. El juego es mucho más complicado ya que el globo puede variar
su trayectoria. Establece una puntuación para que gane el niño que antes la
alcance.
1. Globos al rincón. Pon muchos globos del color de los equipos en el centro de
la habitación. A la señal de "¡Ya!" y mientras cuentas hasta 5, cada niño debe
recoger globos de su color y depositarlo en el lugar que le corresponda. Gana el
equipo que amasó más globos del color correcto.
2. Veo, veo. Por turnos, los niños deben responder a las preguntas de "veo, veo
algo de color... azul".
3. Guerra de bolas. Haz muchas bolas con papel de seda de los 4 colores.
Repártelas entre los niños que deben alcanzar con ellas un niño del color de la
bola que tienen entre las manos. Cuando ya no tienen, recogen las del suelo y...
¡al ataque!.
4. Mando yo. Divide a los niños en dos equipos y que cada uno de ellos elija un
capitán. Durante cinco minutos, uno de los grupos tiene que obedecer todas las
órdenes del capitán del equipo contrario. "Tocad algo verde", y los niños
dispondrán de 10 segundos para hallar algo de ese color. Da un punto por cada
objeto tocado dentro del tiempo. Después, el equipo que ordenaba pasa a jugar y
gana el que más puntos obtenga.
5. Qué color es. Procúrate una linterna y papel transparente de colores. Los niños
deben adivinar qué color dará si superpones el azul con el amarillo o el rojo con el
azul.
1. Fiesta temática. Una buena opción para conseguir que todos los niños acudan
disfrazados a la fiesta es plantear un tema para el disfraz. Uno que nunca falla
son los “Clásicos Disney”. Informa a los niños de que tienen que ir a la fiesta
vestidos como algún personaje de sus películas favoritas. Aladín, Blancanieves,
Mickey, el pato Donald, Buzz Lightyear… la lista es interminable, por lo que no les
será muy difícil encontrar un atuendo para la ocasión. Y, ya que se trata de una
fiesta temática, la decoración de la casa debe acompañar. Compra platos y vasos
con sus personajes favoritos, corta el pan para sus sándwiches con la forma de la
cabeza de Mickey (es la más sencilla) y, como música, usa las bandas sonoras de
las películas.
4. Gran yincana. Los niños lo pasan en grande con las yincanas. Recorrer la casa
buscando pistas que les lleven a un gran premio final les hace sentir verdaderos
investigadores. Aprovecha para preparar una muy divertida escondiendo pistas
por toda la casa. Si eres capaz de escribir las pistas en verso, quedará más
original. En el caso de que organices una fiesta temática, intenta que las pistas
estén relacionadas con ella. Por ejemplo, en el caso de los “Clásicos Disney”,
las pistas pueden hacer referencia a detalles de las películas. En una pista puedes
escribir: “Si la siguiente pista quieres encontrar, el peine de La Sirenita has de
buscar”, que esconderás en el cajón de los tenedores, donde habrá una nueva
que diga: “La señora Potts te invita a té si encuentras a Chip y acudes a la cita con
él”, llevándoles al armario donde guardes las tazas y así sucesivamente. Al final,
puedes plantear una prueba en la que se decida si les das el premio o no.
5. ¡Arriba el telón! ¿Te has fijado alguna vez en cuántas princesas y superhéroes
se pueden juntar en una fiesta de disfraces? Son los atuendos más repetidos, pero
no los únicos. Os proponemos que agrupéis a los pequeños con trajes
relacionados o completamente diferentes –aún más disparatados–, monta un
escenario cubierto por una sábana colgada del techo y pídeles que escriban y
representen su pequeña obra de teatro. Los aplausos están asegurados.
6. ¿Quién soy? Coloca a todos los niños en un círculo y, por turnos, irán
colocándose en el centro e imitando a alguno de los otros niños. Por ejemplo, si
hay uno vestido de payaso, Superman deberá hacer malabares y tonterías para
que los demás reconozcan a quién está imitando. Gana el que tarde menos en
adivinarlo, que representará en el turno siguiente.
7. Reyes y reinas. Pocas cosas hay tan típicas del Carnaval como la coronación
de la Reina de las fiestas, es que lleva el disfraz más espectacular. Convierte tu
casa en una gran pasarela de modelos sobre la que vayan desfilando los
pequeños y prepara una corona de cartón pintada de dorado y una medalla para
honrar a tu reina y rey.
CHISTES CORTOS PARA NIÑOS
Diversión en casa
A partir de los 5 años, a los niños les encanta contar chistes. Los que te
proponemos son fáciles de contar, entender y repetir.
"¿Lo has pillado, mamá?" A los niños les gusta contar chistes y observar cómo el
auditorio responde a la gracia. Pero contarlos bien es como hacer teatro: dicción,
entonación, ritmo... Aquí van algunos chistes cortos y sencillos para que se vaya
entrenando.
2. Iban dos ratitas paseando por la calle, cuando pasa por encima un murciélago.
- ¿De veras?
- Las doce.
- ¡Qué tarde!
- ¿A ti se te escapa la caca?
- Cuatro.
- Porque he leído que uno de cada cinco niños que nace es chino.
11. Un hombre va al médico.
-¿Por qué?
Sigue nuestros consejos y pasaréis unas tardes inolvidables con los niños.
Unos días antes de la fecha prevista, reúne a los niños para decidir el contenido
del espectáculo. La planificación es fundamental si quieres llevar tu proyecto a
buen puerto. Aquí van algunas ideas:
ESPECTÁCULO DE MAGIA
Entre los 6 y 8 años, todos los niños se vuelven locos con la magia y presentar sus
trucos ante un público entregado les resultará muy emocionante.
Es importante repetirlos mucho para que los resuelvan con soltura. Los niños se
prestarán a ello con entusiasmo. La magia es también teatro y habrá que
enseñarles a crear expectación y engañar al público atrayendo su atención donde
nos interesa.
ESPECTÁCULO DE GUIÑOL
El atrezzo
- Teatro de marionetas. Tienes varias posibilidades: colocar una tela que tape el
cuerpo de los niños entre los montantes de una puerta, cubrir la mesa del comedor
con una sábana y que los muñecos asomen por el borde, situar a los niños detrás
del sofá...
ESPECTÁCULO MUSICAL
El espectáculo preferido de las niñas, la ocasión de lucirse en escena con su
canción favorita. La última de Violeta, la película de moda o el hit del momento.
Para los más pequeños, un espectáculo de canciones mimadas suele arrancar
aplausos a los espectadores más difíciles.
El atrezzo. Procura que los niños canten con micrófono o con música de fondo.
Todo resultará más vistoso. En cuanto a los disfraces, recuerda que unos buenos
maquillajes y peinados hacen maravillas.
ESPECTÁCULO CÓMICO
Unos cuantos chistes graciosos contados por los niños son un espectáculo en sí.
Entre estos chistes para niños podrás completar con adivinanzas divertidas.
Los ensayos
Son parte íntegra del placer de montar un espectáculo. Planifica por lo menos un
ensayo general y crea toda la expectación que se merece el evento.
LAS INVITACIONES
Una vez fijada la fecha, hay que ocuparse de las invitaciones para fiestas
infantiles. Las podrás enviar por correo, distribuir en mano o
CON MOVIMIENTO
¡Vamos en moto!
El organizador tiene que sentarse en el suelo y los niños van colocándose detrás,
como si fuesen en una enorme moto. El piloto va dando las indicaciones en voz
alta: “A la derecha. A la izquierda. ¡Cuidado, que freno! ¡Venga, que acelero” y va
girando el tronco a la vez que habla. Los niños tienen que ir girando con
él. Fernanda de Almeida
Dentro y fuera
Para este juego necesitarás una alfombra bien sujeta al suelo. El organizador del
juego informa a los niños que sobre la alfombra están en la región conocida
como “dentro”, y fuera de la alfombra es la región conocida como “fuera”. Los
niños se sitúan fuera de la alfombra para que el juego comience, y el organizador
va diciendo en voz alta: “dentro, fuera, dentro, fuera…” y los niños tienen que ir
saltando de la alfombra. El juego debe ir cada vez más rápido y de forma
aleatoria: “dentro, dentro, fuera, dentro, fuera, fuera…” Como el tiempo es corto y
a cada cambio de palabra los niños tienen que obedecer y saltar, el riesgo de que
se equivoquen es elevado. Los que se van equivocando, quedan eliminados.
Puedes hacer varias rondas y que el ganador obtenga un punto con cada victoria y
dar un premio al que más puntos logre. Daniel Altea Carmona
CON MÚSICA
¡Estatua!
El juego consiste en poner música y que los niños bailen. Al parar la música, los
niños tienen que quedar como una estatua en la postura que tenían. Fernanda de
Almeida
Los oficios
"Me pongo de pie, me vuelvo a sentar porque a los oficios vamos a jugar..." Los
niños van imitando con sus manos diferentes oficios al ritmo de la canción:
costurera, barrendero, planchadora... Erika Saiz García
*Más juegos con números para aprender a contar pinchando en este reportaje.
DE PISTAS
Gincana
Hay que preparar el juego antes de que empiece la fiesta. Escondes varias pistas
(fáciles) en distintos lugares de la casa y cuando empiece el juego les dices dónde
está la primera (o les das una pista para que la encuentren). Una pista va
llevándoles a la otra hasta que encuentran el tesoro: un baúl lleno de chuches y
caramelos. Silvana Sudivert
A buscar el tesoro
Preparas unos mapas (para los más mayores) y en cada escondite marcamos una
X. En cada escondite habrá otro mapa con otra X que le ayudará a encontrar el
siguiente, hasta que encuentren un baúl con el tesoro. Gemma Marquie
Maratón de juegos
En el pasado cumpleaños de mi hijo organicé una especie de maratón de juegos.
En distintos puntos de la casa había juegos como poner la cola al burro, encestar
canastas, juegos de anillas...En todos ellos iban sumando puntos y el que más
consiguiese se llevaba el premio más grande, aunque todos recibieron un detalle
por participar, que al final es lo importante. ¡Eso y que se lo pasen bien! Y os
aseguro que lo pasaron bien los niños jugando y los mayores animando.
Probadlo. Luz Barrios
CON GLOBOS
Piñata personalizada
Antiguamente la piñata era de cerámica o de cartón, pero hay una manera más
divertida y rápida de prepararla y con la ayuda de los niños: con globos. En
algunos metes caramelos y otros los llenas con harina, agua, arroz, lentejas… ¿Y
para romperlos? Si les das un alfiler o un palillo lo pasarán en grande. Antonio
González Mesquias
PARA MERENDAR
La campana tragona
Cada vez que preparamos una fiesta infantil aprovechamos la hora de la merienda
para dos cosas fundamentales: que todos los niños coman todo lo que se le pone
y que coman cosas nutritivas, y no sólo golosinas. El juego consiste en: antes de
sentar a todos los niños a la mesa les explicamos que como es un día especial, la
hora de merendar también se aprovechará para jugar. Les enseñamos una
campana que utilizaremos durante el juego. La colocamos en el centro de la mesa
y les decimos: "esta campana es muy importante porque sólo podrá ser tocada por
un comensal que haya terminado de comer. El primero que termine la macedonia
de frutas (el plato va variando y si son platos que sean conflictivos para los niños
les ponemos muy poca cantidad...) será el ganador y podrá tocar la campana
primero”. Luego la irán tocando los que vayan terminando. Verónica González
15 ADIVINANZAS DE ANIMALES PARA
NIÑOS
Preguntas para ponerle a prueba
Estas adivinanzas son perfectas para los niños a partir de su cuarto cumpleaños.
Además de entretenerles y poner a prueba su astucia le ayudarán a conocer mejor
el reino animal.
No tienen más de cuatro versos para que los niños las resuelvan mejor.
Enséñaselas a tu hijo para que las vaya preguntando entre sus compañeros y
conocidos. Cuando ya las sepa todas podéis practicar estas 5 adivinanzas fáciles
para niños o 5 adivinanzas de animales tradicionales.
1. As no soy,
as no fui,
as no seré
hasta el fin.
Respuesta: el asno.
Respuesta: el caballo.
3. Antes huevecito,
después capullito,
más tarde volaré
como un pajarito.
Respuesta: la mariposa.
Respuesta: el gato.
5. ¿Cuál es el animal,
de campo o corral,
que si una zanahoria le das
sus dientecitos verás?
Respuesto: el conejo.
Respuesta: la abeja.
Respuesta: la araña.
Respuesta: el búho.
Respuesta: el caracol.
Respuesta: el mejillón.
Respuesta: el murciélago.
Respuesta: la oveja.
Respuesta: la rana
3. Explotar globos
Se inflan los globos y se atan a una cuerda que quedará suspendida contra una
pared. Los niños salen con tobillos y manos atados de la línea de fondo. Deben ir
pegando saltitos hasta su globo y explotarlo con el pecho, la espalda, los
dientes… Gana el primero en lograrlo
11. Al cubo
Coloca un cubo a 2 metros de los jugadores. Los niños deben lanzar al cubo los
globos de agua. Los niños que no lo logran quedan eliminados. Para los que sí, el
cubo se aleja y sigue el juego. Gana el que tira el globo en el cubo más alejado.
10 TRABALENGUAS DIVERTIDOS
Juega con el idioma
Juegos de palabra divertidos, pequeños poemas sonoros imposibles de
pronunciar..., los trabalenguas nos hacen reírnos mucho. Practícalos con tu hijo y
¡verás qué risa!
Al principio, pídele a tu hijo que repita el trabalenguas despacio, hasta que lo
entienda y aprenda de memoria. A medida que lo vaya controlando, se trata de
recitarlo cada vez más deprisa hasta tropezar con las palabras. A ver quién lo
repite más veces sin equivocarse.
4. Uno de la r con la t.
9. Uno de amor.
1. De grandes y 'peques'
Seguro que la primera tentación de los niños al ver un espacio al aire libre y un
balón es jugar un partido de fútbol y, aunque vaya a divertirles mucho, ¿qué
tiene de especial si es lo que hacen en los recreos y cada vez que bajáis al
parque? Vamos a darle un toque original a nuestro partido haciendo equipos en
que mezclemos a los niños, los padres y las madres. ¡A ver quién gana!
Seguro que les encanta meter un gol a papá o ver cómo mamá hace un regate.
2. El futbolín gigante
Organiza dos equipos y distribuye a los jugadores en las tres líneas
habituales de un futbolín (prescindiremos del portero): defensas, centrales y
delanteros. Es importante que todas las filas tengan al menos dos niños. Usa una
cuerda para atar por la cintura a todos los miembros de cada línea dejando al
menos medio metro de cuerda entre cada pequeño, así, cuando uno corra en una
dirección para ir a por la pelota, todos deberán moverse como en un futbolín
gigante o irán al suelo. Este juego sólo debe practicarse sobre superficies
blandas, nunca sobre cemento o los niños podrían hacerse daño.
3. Rondo de pelotas
Sienta a los niños en el suelo formando un círculo. Déjales un balón y
anímales a que se lo pasen de unos a otros sin dejar que caiga al
suelo. Cuando lleven un rato jugando con una pelota, echa otra al círculo, así
hasta que no te queden más balones y ellos se vuelvan un poco locos.
4. El mareo
Un clásico de los juegos con pelota. Los niños deben situarse de pie en un
círculo y uno de ellos se coloca en el medio, el que “liga”. Los jugadores deben
ir pasándose el balón sin que el del medio no lo intercepte. Deja claras las
normas antes de empezar: no se puede pasar el balón al jugador que está a
tus lados, cada niño puede dar un máximo de dos toques y el que liga sólo
puede atrapar el balón con el pie o la pierna, nunca con las manos. El jugador
que tocó el balón por última vez antes de que el del centro lo coja es el que liga en
el turno siguiente.
5. Diana-gol
Ahora toca valorar la puntería de los niños. Dibuja círculos concéntricos en
una pared como si fuera una diana y otorga un valor a cada uno de los círculos:
1, 5, 10, 15..., ¡los que tú quieras! Los jugadores se irán situando cada vez a una
distancia y dispararán dos tiros cada uno. Ve anotando la puntuación que logra
cada uno. El que antes llegue a 100, gana.
7. Cabeza pensante
Distribuye a los niños por parejas, con un balón cada uno y colócalos a una
distancia de medio metro. Los niños tendrán que intentar pasarse el balón el uno
al otro usando sólo la cabeza, con las manos detrás de la espalda. Id contando
en alto los toques que hace cada grupo. Gana la pareja que más toques haga.
8. Tulipán
Adaptamos este clásico de los juegos infantiles a su versión futbolera. Cada niño
llevará un balón en los pies e intentará correr por el espacio que hayas
delimitado. El que liga debe conseguir que su balón golpee el de alguno de
los contrarios. Cuando uno de ellos se vea acosado o quiera descansar puede
gritar “¡tulipán!” y colocarse con los brazos en cruz y las piernas
abiertas. Para ser salvado y poder jugar de nuevo, alguno de sus compañeros
debe colar su propio balón entre sus piernas sin ser cazado.
9. El balón futbolero
Este juego no es más que el del balón prisionero pero jugado con el pie.
Delimita dos campos, uno para cada equipo. El que tiene la pelota puede
golpearla con el pie para tocar a un jugador que, si no es capaz de
interceptarla también con el pie, se colocará al fondo del campo contrario. Si
la coge, puede tirarla inmediatamente para cazar a un jugador del otro equipo.
Gana el equipo que antes capture a todos los contrarios.
1. Guerra de almohadas
Un clásico entre los clásicos. Aparta todo lo que pueda peligrar, da la señal de
alarma y que los niños den rienda suelta a su furia guerrera. En este juego no hay
ganador porque todos acaban agotados.
4. A la camita ciega
Si tienes una casa grande y puedes ofrecer una cama a cada uno de los pequeños
que acudan a tu fiesta, no te molestes en hacerles las camas porque vamos a
aprovechar para jugar con ellas. Tápale los ojos y comprueba que no ve
absolutamente nada. Dale un juego de sábanas. El resto de niños tienen que ir
indicándole cómo hacer la cama para que no quede hecha un auténtico desastre.
Gana el pequeño que mejor desarrolle su cometido.
8. El pintauñas giratorio
Reúne pintauñas de diferentes colores y coloca a las niñas formando un círculo.
Coge el primer pintauñas y gíralo. Cuando se pare, la niña a la que apunte deberá
pintarse la primera uña de la mano izquierda con él. Id haciendo lo mismo por
turnos hasta que todas tengan la manicura hecha. ¡Verás el resultado!
9. Todos a cantar
Busca en Youtube vídeos con letras de canciones que todos conozcan, fabrica
micrófonos caseros y organiza un karaoke por equipos. A modo de jurado, ve
dando puntos a los que mejor canten para ver quién gana.
1. El teléfono roto
Coloca a los niños en dos filas, formando dos equipos, y dile una frase al oído al
primero de cada grupo, cuanto más larga y complicada sea, mejor –puedes optar
por un divertido trabalenguas–. Cada niño deberá susurrarla al oído del siguiente.
El último, dirá en voz alta lo que ha entendido y ganará el equipo cuya frase se
parezca más a la que tú dijiste.
2. Caballería
Coloca a todos los niños en una fila. Uno de los pequeños ejerce de caballero,
colocándose enfrente de ellos. Cuando grite “¡caballería!” sus amigos deberán
salir corriendo para llegar a tocar el muro que estará a la espalda del caballero sin
ser atrapados por éste. Todos los “potrillos” cazados se convierten en caballeros y
empiezan también a cazar. El primer jugador atrapado liga en el turno siguiente.
También pueden practicar todos estos juegos relacionados con el deporte.
4. Como en la bolera
Llena varias botellas vacías de agua con un poco de arena y colócalas a unos
diez metros de los niños. Con un balón de baloncesto, tendrán que derribar todos
los que puedan. Organízales por equipos para ver quién gana.
5. ¡Es la guerra (del agua)!
Cubos, globos, gorros, pistolas... ¡Todo vale en la guerra del agua! Entrega a los
niños varios de estos instrumentos, repártelos en dos equipos y ¡que empiece la
guerra! El bando vencedor será el que consiga mojar más al contrario, aunque el
verdadero premio es la diversión de esos minutos. Firmad la paz con una buena
merienda.
6. ¡Vamos en moto!
El organizador, si es una fiesta de cumpleaños puede ser el homenajeado, tiene
que sentarse en el suelo y los niños van colocándose detrás, como si fuesen
en una enorme moto. El piloto va dando las indicaciones en voz alta: “A la
derecha. A la izquierda. ¡Cuidado, que freno! ¡Venga, que acelero” y va girando el
tronco a la vez que habla. Los niños tienen que ir girando con él.
7. El globo irrompible
Los juegos con globos son divertidísimos, ¡sobre todo cuando explotan! Ata un
globo al tobillo de cada niño. Al son de la música salen a la pista. El juego
consiste en pisar el globo del contrario, salvando el propio. Los niños que pierden
su globo salen de la pista. Gana el último en conservar su globo.
8. Baile de disfraces
Los disfraces son una opción muy divertida para que los niños se diviertan.
Prepara varios baúles con prendas viejas o algunas que hayas elaborado con
retales para la ocasión: faldas, pantalones, camisas, pelucas, sombreros,
extravagantes collares y adornos para el pelo… Diles que pondrás la música y
cada uno tendrá que coger una prenda de cada baúl y ponérsela antes de que tú
pares la canción.
9. Carrera de castañas
Clava un clavo en el centro de una castaña, sácalo y pide a tu hijo que clave una
pluma en él. Escoge plumas de color diferente para cada grupo. Cuando tengáis
varias, los niños tendrán que ir lanzando sus castañas desde diferentes alturas
para ver cuál llega antes al suelo.
2. Sombras terroríficas
Cuelga una sábana en el marco de una puerta. Los niños se instalan enfrente.
Sitúa una lámpara de pie detrás de la sábana a metro y medio de distancia. Por
turnos, los niños se colocan de perfil entre la sábana y la lámpara e intentan
asustar a los espectadores con gestos y voces amenazantes. Si los niños están
disfrazados, más vistosas quedarán las sombras.
3. Cazafantasma
Los jugadores están a oscuras. Uno de ellos, el cazafantasma tiene una linterna.
El cazafantasma grita "¡Luz!", enciende la linterna en una dirección y la apaga
rápidamente. A continuación, debe decir el nombre de los niños que ha visto y
estos suman un punto. Al cabo de 10 relámpagos de luz, el ganador es el que
menos puntos ha tenido, que pasa a ser a su vez cazafantasma.
4. ¡Abracadabra!
Se elige un jugador entre los asistentes y se le coloca un sombrero de bruja en la
cabeza. La bruja anuncia a los niños "¡Abracadabra! Os transformo en.... (algún
animal, payasos, deportistas...)". A continuación, coge a cada niño por la mano, da
varias vueltas con él y cuando lo suelta, el niño debe adoptar la pose que se le ha
pedido.
5. Vampiro, ¡fantasma!
Los niños están sentados en círculo. El que empieza el juego camina fuera del
círculo dándoles palmaditas en la cabeza y diciendo "Fantasma, fantasma...". En
un momento dado, dice "¡Vampiro!". El niño elegido se levanta y tiene que
alcanzarlo mientras corren alrededor del círculo para alcanzarle antes de que
ocupe su lugar. Si no lo logra, el vampiro es él.
Se entiende que una fiesta de circo y payasos debe tener juegos de mucha risa.
Prueba los siguientes:
3. Payaso chistoso. Pide a los niños que vengan de casa con algún chiste
aprendido. Si no se acuerdan de ninguno, se lo enseñas en el último momento.
Aquí, encontrarás chistes sencillos para niños. Los pequeños se sientan en el
suelo. Por turnos, deben pasar a escena y contar su chiste.
4. Payasos habilidosos. Apila en una mesa apoyada contra una pared unos
cuantos envases de yogur vacíos formando una pirámide. Coloca a los niños en
fila a cierta distancia. Con 3 pelotas pequeñas, cada niño debe tumbar todos los
botes.
1. ¿Tú quién eres? Una versión de la gallina ciega pero en vez del tacto, el niño
tiene que utilizar el oído. Al ser atrapado, el pequeño debe que rugir, maullar,
ladrar... lo que le corresponda. El que no consigue que se reconozca el animal que
representa ocupa el lugar de la gallina ciega.
2. Ponle la cola al burro. Hay que dibujar una silueta de burro en una cartulina y
aparte, la cola del animal. Cada niño, de uno en uno y con los ojos tapados, da
unas cuantas vueltas sobre sí mismo. Después, debe colocar la cola al burro. Se
marca el intento de cada jugador y gana el que se haya acercado más a la
posición original.
4. Yo soy un... Pon en una bolsa papelitos con el nombre de un animal: un cerdo,
un pez, un ratón, un león, un gato... El niño saca un papelito y debe escenificar en
silencio el animal que le toca para que los demás descubran de cuál se trata.
5. ¿Quién llega antes? Haz dos equipos o más si hay muchos niños. Pon en una
bolsa nombres de animales que se desplazan de forma distinta: un canguro, un
perro, una serpiente, un caballo... Un niño de cada equipo debe recorrer la
distancia hasta la meta como lo haría el animal que les ha tocado. Gana el equipo
que termina antes.
6. El cuento de.... En una fiesta de animales, es muy apropiado contar o
escenificar un cuento o representar un guiñol. La literatura infantil nos brinda
múltiples ideas: el cuento de los tres cerditos, los tres ositos, Pedro y el lobo, etc.
Para animar una fiesta de osos de peluche, hay que organizar juegos de osos.
Aquí te proponemos algunos que encantarán a niños entre 3 y 5 años.
1. La danza del oso. Es una variante del juego de las estatuas. En este caso, los
niños deben bailar como hacen los osos gordotes y torpones al son de una música
alegre. Cuando para la música, se deben quedar como estatuas. Los
desprevenidos que siguen bailando son eliminados.
2. El oso sin pareja. Los niños bailan en pareja, excepto uno que no tiene con
quién bailar. Cuando para la música, todos cambian de pareja a toda prisa para no
quedarse solo.
3. El morro del oso. Dibuja la silueta de un oso de peluche sobre un papel grande
y cuélgalo de la pared. Pinta los ojos, la nariz y la boca. Haz una nariz con una
bola de papel negro o un trozo de corcho pintado de negro. En un lado del morro,
pega un celo de doble cara. Los niños deben colocarlo en su sitio con los ojos
vendados. Apunta el nombre del jugador en el lugar donde lo pega. El ganador es
el que más se acerca al lugar correcto.
5. Pásame el oso. Decora dos globos con cara de oso. Forma dos equipos, cada
uno con su globo. Al son de la música, los niños deben pasárselo. El primero lo
pasa entre las piernas, el siguiente por encima de la cabeza, etc. El último en
recibir el globo corre al principio de la fila y vuelve a pasar el globo al jugador que
tiene detrás. Así hasta que todos hayan corrido. Gana el equipo que termina
primero.
1. ¡Encadenados!
Este truco consiste en encadenar tres clips sin tocarlos. ¡Cierto! Para lograr esta
hazaña, sólo necesitas 3 clips y un billete. Sigue los pasos indicados en las
imágenes. Entrénate varias veces y convoca a tu público.
Con un globo
Ya sabemos que los globos revientan si los pinchas con un alfiler. Pero no en
todos los casos. Vamos a utilizar un truco para dejar a nuestros espectadores muy
sorprendidos.
* Hincha varios globos y prepara los alfileres. En un globo, el tuyo, pega un trocito
de celo en un lugar discreto y facilmente localizable.
* Entrega los globos a algunos espectadores y diles que los pinchen con el alfiler.
Todos reventarán.
* Entonces, saca el tuyo, pronuncia la palabra mágica, pincha en la zona del celo y
no estallará. Importante: para que funcione el truco, no debes sacar el alfiler del
globo.
Consejos
Los trucos de magia son pequeñas puestas en escena. Hay que cuidarlas. Ensaya
delante de un espejo para ponerlas a punto. Has gestos lentos, hablando a tu
público y despertando su curiosidad. La palabra mágica no tiene por qué ser
¡Abracadabra!. Invéntate una, la que sea. Será la tuya.