En Perú en él área de la ciencia las ideas materialistas y positivistas tienen vigencia.

Hacia
1860 el positivismo es introducido en el Perú, logrando su máxima vigencia entre 1885 y
1915. Para 1993 Honorio Delgado y Mariano Ibérico marcan un hito importante para la
psicología de la salud con su obra Psicología aquí se expone un enfoque espiritualista de la
psicología. Delgado se convierte en un pionero de la psicología en el Perú desde 1920 a
1930, generando diversos aportes cómo: la revista de Psiquiatría y Disciplinas convexas ,
da a conocer la prueba de Rorschach, introduce los aportes teóricos alemanes sobre la
personalidad y el carácter e introduce en nuestro país el psicoanálisis, siendo partidario de
Freud. Con el tiempo se abre a influencias y acepta las doctrinas disidentes especialmente
de Jung y Adler. En 1983 se funda la revista de Neuro-Psiquiatria a cargo de Delgado y
Trelles, entre 1944 y 1945 se hacen investigaciones sobre los efectos psicológicos de la
altura en la población que vive permanentemente en estas zonas. Seguín en 1940 se
interesa en la relación de las enfermedades con los factores psicológicos y sociales
evolucionando hasta una corriente fisiológica influenciada por el psicoanálisis. En 1948 y
1956 existe una gran migración hacia las ciudades lo que lleva a los psicólogos a
interesarse en el estudio de estas nuevas comunidades o “asentamientos humanos”. Se
funda la Sociedad Peruana de Psicología en 1954, por otro lado el interés por el aspecto
laboral y la integración del trabajador a la empresa genera que se realicen estudios
evidenciando las conductas de obreros, líderes sindicales y gerentes. Entre 1965 y 1970
egresan las primeras promociones de psicólogos profesionales, y a partir de 1970 se inicia
el positivismo con Skinner. Para 1980 se crea el Colegio de Psicólogos del Perú y a partir de
1984 las actividades psicológicas se orientan a un enfoque clínico asistencial para de esta
manera promover, prevenir e intervenir anomalías y trastornos del comportamiento
relevantes.