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NORMA CUBANA NC
677- 3: 2009
Prefacio
La Oficina Nacional de Normalización (NC), es el Organismo Nacional de Normalización
de la República de Cuba y representa al país ante las organizaciones internacionales y
regionales de normalización.
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0 Introducción
0.1 Los espacios exteriores urbanos están conformados por los espacios abiertos de la estructura
urbana, por los espacios libres no ocupados por edificaciones, y abarcan desde los espacios
inmediatos a éstas, tales como las áreas de acceso, jardines y aparcamientos, hasta los parques
suburbanos en la periferia de las ciudades. Se ha afirmado que el espacio entre las edificaciones
es tan importante para la vida del hombre como los edificios mismos.
0.2 El diseño del espacio exterior debe expresar claramente la adecuación a las condiciones
climáticas prevalecientes. En los climas cálido-húmedos, es necesario tomar en cuenta la
necesidad de protección contra el soleamiento y propiciar la circulación de las brisas. La
canalización y apropiada infiltración de las aguas de lluvia es otro detalle de marcada importancia,
así como el aprovechamiento máximo de las características de los suelos y del relieve superficial.
0.3 Las plantas y los tipos de plantaciones en el marco de los espacios exteriores urbanos
constituyen componentes de la mayor importancia.
0.4 Las áreas verdes urbanas o verdes urbanos forman regularmente parte de los espacios
exteriores urbanos o espacios públicos, y al igual que las edificaciones, las redes técnicas, las
superficies pavimentadas y otros componentes del entorno construido, su desempeño transcurre
por diferentes etapas en el tiempo y de ellas depende. Igualmente válido resulta para las áreas
verdes dentro de las edificaciones o en sus patios interiores.
0.5 Las normas sobre las áreas verdes urbanas tienen una relación directa con cada etapa. De
forma similar a como ocurre en el caso de las edificaciones, las etapas fundamentales a tener en
consideración y que se toman como referencia son las siguientes:
- Conceptualización y diseño.
- Ejecución.
- Conservación y mantenimiento.
- Producción y suministro de materiales y componentes.
- Refuncionalización, cambio de uso y demolición o destrucción.
0.6 Los documentos que conforman la Norma Cubana sobre las áreas verdes urbanas están
organizados en ocho partes, las partes, 2, 3, 4 y 5 responden directamente a cada una de etapas
del proceso de diseño, ejecución y producción de las áreas verdes para su mejor desempeño; las
partes 1, 7 y 8 son documentos de consulta y cultura general; la parte 6 responde a problemas
específicos relacionados con las zonas y sitios de valor patrimonial de los centros urbanos.
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1 Objeto
Esta Parte 3 de la Norma Cubana Áreas Verdes Urbanas establece los requisitos a cumplir para la
ejecución de las áreas verdes o jardinería y el paisajismo de las obras de arquitectura y urbanismo.
2 Referencias Normativas
Los documentos que se mencionan seguidamente son indispensables para la aplicación de esta
Norma Cubana. Para las referencias fechadas, solo se toma en consideración la edición citada.
Para las no fechadas, se toma en cuenta la última edición del documento de referencia (incluyendo
todas las enmiendas).
NC 219: 2002 Urbanismo — Código de buenas prácticas para el diseño ambiental de los espacios
urbanos
NC 93-06-101: 1987 Sistema de normas para la protección del medio ambiente — Paisaje —
Términos y definiciones.
NC 677-1: 2009 Áreas verdes urbanas — Parte 1 Conceptos generales, términos y definiciones
3 Términos y definiciones
A los fines de esta Norma se aplican los términos y definiciones establecidos en la NC 677-1 y la
NC 93 - 06 - 101.
4 Generalidades
En los procesos constructivos de obras de arquitectura y urbanismo, la ejecución de las tareas de
paisajismo, áreas verdes o jardinería se consideran tareas de terminación y se programan
generalmente para ser acometidas en la fase final de los mismos. En determinadas circunstancias
algunas partes tienen necesariamente que comenzar con antelación, particularmente cuando se
trata de configurar el relieve, colocar piedras de gran tamaño y sembrar árboles adultos o
corpulentos, que requieren del empleo de equipos de construcción a los cuales se les hace difícil o
imposible acceder con posterioridad.
En esta Norma se indican las principales acciones para la ejecución de las áreas verdes urbanas.
5 Replanteo
El replanteo presupone la organización sobre el terreno (in situ) de las acciones de ejecución
indicadas en los documentos del proyecto (planos y memoria descriptiva). Algunos detalles a tener
en cuenta son los siguientes:
1. Garantizar que las redes técnicas soterradas estén colocadas en sus posiciones definitivas.
2. Programar el avance de las obras de paisajismo solo en las áreas donde no se vayan a
producir intervenciones posteriores que afecten o deterioren las siembras realizadas.
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3. Las plantas tales como árboles y arbustos grandes que van a ser introducidas deben estar
preparadas de antemano en los viveros o en los lugares donde se realicen los trasplantes o
moteos. En determinadas condiciones ambientales, se requiere la previa aclimatación de las
mismas en los lugares donde van a quedar definitivamente sembradas.
4. La capa vegetal existente de los lugares donde se llevan a cabo acciones constructivas debe
ser retirada y convenientemente almacenada, evitando que se compacte innecesariamente o
que se contamine con otras sustancias. La tierra apilada debe mantenerse libre de plantas
invasoras.
5. Las profundidades de sustrato vegetal mínimas requeridas para los distintos tipos de plantas
son las siguientes: cespederas (200 mm), coberturas (300 mm), arbustos (600mm) y árboles
(900 mm).
El orden de las acciones de ejecución será, para cada obra, aquel que garantice el menor número
de interferencias y daños colaterales a las instalaciones, senderos o plantaciones efectuadas
previamente o a los remanentes de vegetación original preservados; cumpliendo la NC 219.
2. Introducción en patios interiores y espacios que han de quedar cerrados con posterioridad, de
todos aquellos componentes que requieren del empleo de equipos de transporte y de izar,
como rocas y plantas de gran tamaño.
3. Ejecución de los movimientos de tierra de carácter mayor para la conformación del relieve y el
drenaje superficial del terreno; se incluye la construcción de espejos, cursos, saltos agua y
estructuras similares.
6. Siembra de plantas en envases grandes que requieren ser acarreadas en vehículos de carga
hasta las proximidades del sitio de siembra.
7. Colocación de luminarias y otros componentes del mobiliario de exteriores así como los
dispositivos de riego de las plantaciones.
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Las acciones de mantenimiento para el establecimiento de las plantaciones son aquellas acciones
necesarias que garantizan, bajo los términos pactados en los contratos de ejecución, la entrega en
forma, cantidad y calidad de los proyectos de paisajismo y jardinería. A continuación se describen
los pasos a seguir para diferentes tipos de plantas y procesos de siembra.
a) Las plantas arbóreas obtenidas mediante trasplante se irrigarán hasta saturación durante el
proceso de siembra a fin de garantizar la completa expulsión del aire alojado en la mota o
pella de tierra y el suelo de siembra.
c) Se mantendrá la irrigación frecuente (15 – 60 días) hasta lograr el rebrote de las ramas
podadas o la emisión de nuevas hojas.
a) Se mantendrá el riego frecuente (15 - 30 días) hasta observar la emisión de nuevas hojas y
brotes.
a) Se deberá asegurar que las aguas empleadas en los estanques y canales alcancen la
suficiente estabilidad química, nivel de oxigenación y reducción de la eutrofización.
7.4 Cespederas
c) Se velará por el estado sanitario de las cespederas y se actuará con vigor en caso de
aparición de alguna enfermedad.
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e) Para las cespederas naturales se aplicará el riego de la tierra vegetal colocada, evitando
que se produzcan escurrimientos y arrastres superficiales; con posterioridad, se eliminarán
eventual y manualmente las plantas más altas y leñosas, y a partir de los 15 días se
efectuarán siegas con las cuchillas entre 6 cm y 8 cm de altura durante 30 - 60 días, hasta
alcanzar la compactación de la capa vegetal sobre el terreno.
8.1 Cespederas
1. La superficie del terreno sobre la cual se va a sembrar el césped debe ser ligera y estar
uniformemente apisonada; procediendo a rastrillarla hasta alcanzar la adecuada soltura de la
capa vegetal; las piedras sueltas deben ser retiradas.
2. Una vez concluida la siembra de césped, el terreno debe apisonarse húmedo con un rodillo
ligero o con el empleo de pisones, a fin de lograr un buen contacto entre las raíces de las
hierbas y el suelo subyacente.
3. Alrededor del tronco de los árboles debe quedar un espacio (ruedo) proporcional al diámetro de
los troncos, libre de hierbas; de igual modo, los setos de arbustivas y canteros de coberturas
herbáceas estarán rodeadas de superficies libres de hierbas.
4. Se debe prever el asentamiento gradual del terreno con el paso del tiempo y muy
particularmente en las zonas de contacto de las cespederas con superficies pavimentadas,
muros y otros elementos constructivos; en tales casos, se debe considerar un nivel de
terminación inicial del césped por encima del especificado, o realizar rellenos de compensación
con posterioridad.
5. Es importante evitar la compactación del terreno, lo cual resulta beneficioso para la aireación de
las cespederas, por lo cual hay que impedir el tránsito de equipos pesados de cualquier tipo por
las superficies sembradas
8.2 Árboles
El diámetro de los huecos de siembra de plantas arbóreas debe ser el doble del tamaño de la mota
o pella de tierra, o del envase, y la profundidad no menor de vez y media. El llenado del hueco se
completará durante la siembra con suelo vegetal enriquecido con nutrientes y materia orgánica a
fin de facilitar el mejor desarrollo de las plantas.
Tabla 1
Hueco de siembra Envase 5 gl Envase 15 gl Mota 1 Mota 2
Diámetro 0,6 m. 1,0 m 1,20 m 1,5 m
Profundidad 0,5 m 0,8 m 1,0 m 1,3 m
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1. Los árboles recién plantados con una altura superior a 1,5 m deben anclarse convenientemente
para minimizar el movimiento de las raíces y permitir el desarrollo de nuevos brotes, quedando
protegidos contra golpes imprevistos o acciones vandálicas de algún tipo. El empleo de tutores
y alambres de sujeción es deseable durante un tiempo para permitir que la planta alcance la
necesaria estabilidad.
2. El dispositivo de anclaje asegura la fijación del árbol al terreno en su etapa inicial; pero dentro
del marco urbano y particularmente para las plantas sembradas en ponches dentro del
pavimento es conveniente instalar en torno al tronco, un dispositivo de protección de 1,20 m de
alto, a modo de cilindro o pirámide truncada, conformado por barras metálicas articuladas entre
si. Este dispositivo debe ser retirado una vez que el árbol haya alcanzado el tamaño y las
proporciones adecuados.
3. El cuello del sistema radical tiene que quedar a ras del suelo para evitar un anclaje defectuoso
o la pudrición de tronco.
4. La adecuada compactación del relleno del hueco de siembra garantizará, no solo una sujeción
firme de la planta, sino también evitará que el aire dificulte el enrizamiento y facilite la acción de
las bacterias que pudren las raíces recién cortadas.
5. La colocación de una capa de “mulch” o arrope en la base de los troncos de las plantas recién
sembradas, sobre todo si la siembra ocurre en períodos secos, ayuda a mantener la humedad
y garantizar la emisión de raíces.
Las plantas arbustivas, las herbáceas grandes y las trepadoras, deben plantarse en huecos
amplios, introduciéndolas en los agujeros hasta el cuello de la raíz, donde se localiza la marca del
nivel de tierra original. Los huecos deben rellenarse hasta la mitad, apisonándolos ligeramente, y
luego se coloca el resto de la capa vegetal repitiendo el apisonado. Las dimensiones mostradas en
la Tabla 2 son proporcionales al envase de origen.
Tabla 2
Huecos de siembra Envase 3gl Envase 5 gl Envase 15 gl
Diámetro 0,4 m 0,6 m 1,0 m
Profundidad 0,3 m 0,5 m 0,8 m
2. Las plantas arbustivas que se utilizan en la conformación de setos podados, deben tener
preferentemente hojas pequeñas y follaje denso y compacto, para facilitar las labores de
poda y la configuración de la barrera vegetal.
3. Las plantas herbáceas menores se suelen producir en envases pequeños (1-3 gls) o se
adquieren a partir de órganos vegetativos de plantaciones existentes. La densidad de la
siembra dependerá de las especies seleccionadas, el diseño de la plantación y las condiciones de
la superficie del terreno.
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Las plantas acuáticas carecen, casi absolutamente de resistencia para sobrevivir fuera del agua,
por lo que tienen que ser plantadas en un término no mayor de 4 - 6 horas luego de su extracción
del medio de cultivo original. Otros detalles son los siguientes:
Las plantas suculentas se obtienen regularmente en envases pero con frecuencia se emplean para
las siembras estacas y ramas cortadas de la plantación original. Otros detalles a continuación:
1. Las plantas suculentas soportan prolongados períodos de tiempo después de extraídas, si son
mantenidas alejadas del iluminación solar directa; las heridas de las ramas cortadas secan y
cicatrizan con rapidez y su supervivencia es muy elevada.
2. Las suculentas no soportan la humedad excesiva del suelo, pues carecen de resistencia a las
pudriciones provocadas por de hongos, por lo que el empleo de sustratos ricos en arenas y
gravas resulta muy conveniente.
3. La exposición solar y un drenaje adecuado de los suelos de siembra y de los que se
encuentren alrededor garantiza el éxito de estas plantaciones.
Las epifitas son vegetales que viven sobre otras plantas sin parasitarlas. Cuando se introducen
puntualmente en trabajos de paisajismo y jardinería es necesario observar las siguientes
indicaciones:
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1. Las plantas epifitas se siembran para su cultivo directamente sobre los troncos o las ramas de
plantas arbóreas, en cestos conteniendo un sustrato especial o en fragmentos aislados de
ramas o cáscaras de coco u otros soportes.
3. Se pueden extraer del soporte de siembra y plantarlas sobre los árboles, palmas o piedras, en
sitios donde previamente se han creado las condiciones ambientales apropiadas.
9 Plantas en envases
Las plantas en envases de cerámica o materiales plásticos son empleadas con mucha frecuencia
en la jardinería y en los espacios urbanos; es una práctica con una larga tradición que se mantiene
e incrementa, por lo que se incluyen algunas consideraciones generales sobre la misma.
1. Las plantas en envase se presentan generalmente dentro de los tipos siguientes: maceteros o
macetones grandes, macetas medianas y pequeñas, platos y jardineras
2. Los maceteros resultan apropiados para el cultivo de pequeños arbolitos, palmas juveniles y
arbustos; las macetas medianas y pequeñas para arbustos pequeños y plantas herbáceas y
decumbentes, especialmente cuando son colgadas o colocadas en lugares elevados; los platos
para plantas herbáceas particularmente rastreras, y las jardineras para herbáceas pequeñas de
follaje notable.
3. Las proporciones entre los diámetros de los envases y las alturas o volúmenes de las plantas
debe ser tenido en consideración, a los efectos del recambio y resiembra con una frecuencia
proporcional a la velocidad de crecimiento de la planta.
4. La colocación de maceteros sobre pisos requiere del empleo de bandejas basales donde se
acumule el agua del exceso de riego y así evitar manchas en los pisos.
5. La colocación de una capa de grava basal y el uso de tierra vegetal enriquecida puede
prolongar la vida útil de un macetero hasta por dos años y excepcionalmente tres; a partir de
ese tiempo serán necesarios resiembras, cambios de sustrato y fertilizaciones.
6. El empleo de tutores de troncos de yuraguano y postes de madera puede garantizar el
crecimientote de algunas trepadoras para su cultivo temporal en una maceta. Ese período no
sobrepasa los dos años y entonces será necesario podar las plantas o resembrarlas.
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Bibliografía
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Recreativos.
[2] Editorial de Literatura de Construcción, Moscú 1966, Luntz L. Áreas Verdes Urbanas.
[4] Cuba 1967, Berrayarza Ricardo, Breve descripción de las áreas verdes.
[5] EEUU 1959, Byrd Graf Alfred, Exotica Pictorisl Cyclopedia of Indoor Plants.
[6] Cuba 1951, Woman´s Club of Havana, Plantas floridas de los jardines cubanos.
[10] Cuba, Centro de estudios y control de la vivienda, 1978, Manual Operativo de Áreas Verdes.
[14] Cuba, Instituto del libro, 1962, Ediciones INRA, S. Ordex. Flora apícola de la América tropical.
[16] Cuba, NC 677-1:2009 Areas verdes Urbanas. Parte 1: Conceptos, Términos y Definiciones.
[17] Cuba, NC 50-30: 1987 Planificación física y urbanismo — Parque de descanso y recreación de
la ciudad — Estructura y equipamiento
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