Está en la página 1de 19

“Siempre seguir adelante”

5 personajes:

1. Jaime (niño de 10 años)

2. Juan (niño de 10 años)

3. Abuelo (señor de 80 años)

4. Director de la Escuela (señor de 50 años)

5. Papá de Juan (señor de 40 años)

Acto 1

Abuelo:

¡SOY TU FAN NÚMERO 1!

JAIME:
ESO ME HACE MUY FELÍZ,
ABUELITO

Acto 2
Juan:
Espero que no faltes a mi fiesta de
cumpleaños, Jaime, va a estar
verdaderamente divertida

Jaime:
¡por supuesto que no faltaré, ahí
estaré!
ACTO 3

Jaime:
¡Abuelito! ¡Abuelit0! ¡Tengo que
contarte algo!

Abuelo:
¿Qué sucede mi pequeño Jaime?
¿Qué te tiene tan entusiasmado?

Jaime:
Juan, el mejor cantante de toda la
escuela entera, hará una fiesta este fin
de semana por su cumpleaños, ¡y me
ha invitado! Cuando se acercó a
darme la invitación, me dijo que no
faltara.

Abuelito: Mmm… Jaime, ¿no te parece


un poco extraño? Tu me has contado que
ese niño nunca ha sido muy amable
contigo… y que ahora te invite a su fiesta
de cumpleaños y te diga que no faltes, no
me transmite mucha confianza.

Jaime: Bueno abuelito, quizá siempre


se la pasa de mal humor porque está
cansado de tanto practicar y por eso
ha sido un poco grosero conmigo, tal
vez ahora quiera reinvindicarse y por
eso me está invitando a su fiesta de
cumpleaños.
ACTO 4
Jaime:
¡Abuelito! ¡Abuelito! Ya me voy a la
fiesta de cumpleaños de Juan. ¡Me
voy a divertir demasiado!

Abuelit0 (con su voz preocupado):


¡Buena suerte mi pequeño Jaime, y
por favor, prométeme que te cuidarás
mucho!

Jaime: ¡Así será abuelitO!


Acto 5
Juan:
Jaime, ¡viniste! Me alegra mucho.
¿Recuerdas que te dije que nos
íbamos a divertir? Pues adivina qué:
¡Ya mismo vamos a empezar con un
concurso de canto!

Jaime:
Ehhh, Juan, no creo que sea un buen
momento para que todos cantemos
delante de tantas personas que hay, ¿por
qué mejor no jugamos a otra cosa donde
todos no nos tengan que ver?
Juan:
¡Escúchenme todos! ¡Ya que ahora sí
estamos todos aquí, quiero hacer un
juego bastante divertido! Pero este
juego solo será entre otro
contrincante y yo. En este juego, mi
contrincante y yo tenemos que cantar
la misma canción, y ustedes serán el
público que juzgue al ganador. Al
perdedor, pueden lanzarle estos
pastelitos con espuma que les están
repartiendo en estos momentos. MI
CONTRINCANTE PARA ESTA
CONTIENDA SERÁ: ¡JAIME!

Juan (Con voz de burla):


¡Vamos Jaime! ¿Qué sucede? ¿Acaso
tienes miedo? Pero si todos sabemos
que después de cada clase vas
corriendo a cantarle a tu abuelo que
lleva años en cama y está medio
sordo. ¡Seguro que debes cantar muy
bien para que él quiera escucharte
todos los días!

Juan:
Vamos Jaime, ¡Es tu momento de
deleitarnos como a tu abuelito!

Jaime (con la voz quebrada): ¡YA


PAREN ESTO! ¿POR QUÉ LO
HACES, JUAN?

Juan (riendo): ¡Pero si es solo un


jueguito, Jaime, es mi cumpleaños y
se hace lo que yo diga!
Acto 6
Abuelito: ¡Oh, quién anda ahí?
¿Acaso eres tú mi pequeño Jaime?

Abuelito (Sorprendido al ver a Jaime


llorar con toda la ropa sucia):
¡Jaime! ¿Qué ha sucedido?

Jaime:
¡Tenías razón abuelito, Juan siempre
fue malo conmigo y ésta vez no iba a
ser la excepción, debí hacerte caso y
no ir a su fiesta!

Abuelito (con lágrimas en los ojos):


¡Oh mi pequeño Jaime, ya todo está
bien, estás en casa! Acuéstate aquí
conmigo que ahora es mi turno de
cantarte a tí.

Acto 7
Jaime:
Abuelito, ¿Sabes qué? No dejaré que
la broma pesada de Juan me afecte y
volveré a ir a mis clases como si nada
hubiese pasado.

Abuelo:
¡Esa es la actitud mi pequeño Jaime!
Director:
Muchachos, supongo que se
preguntarán qué estarán haciendo
aquí.

Juan (con voz prepotente): Si


director, estar aquí en su oficina no le
hace bien a mi curriculum y no me
ayuda a darle el ejemplo a mis
compañeros a que sigan queriendo
ser como yo.

Director:
Precisamente por eso estás aquí,
Juan. La directiva de esta prestigiosa
escuela de música se ha enterado de
lo sucedido en tu fiesta de
cumpleaños. Tu comportamiento fue
tan despreciable, que no podemos
permitir que alumnos sin moral y sin
empatía hacia sus compañeros,
cursen en esta escuela.

Director:
Con respecto a tí, Jaime, estuvimos
evaluando tu comportamiento
durante la semana posterior a lo
sucedido en la fiesta, y al ver tu
valentía y tu postura de querer seguir
tras tus sueños, sin importarte las
burlas diarias de tus compañeros por
la humillación que te provocó Juan,
nos has inspirado. Realmente eres un
ejemplo de seguir adelante sin
importarte la opinión de los demás, y
exactamente esa postura, ha llamado
la atención de un buen amigo mío
que es caza talentos. Al comentarle tu
caso, no dudó ni un segundo en
querer conocerte y darte una
oportunidad para ser parte de su
agencia de talentos. Con respecto a ti,
Juan, desde hoy quedas destituido de
nuestra prestigiosa institución.

Juan (sorprendido y atónito):


¡Esto no puede ser posible, ya mismo
llamaré a mi papá para que los
denuncie! ¡No pueden hacerme esto,
soy el mejor cantante que esta
escuela ha tenido!.

Papá de Juan:
Me siento muy decepcionado de ti,
Juan.

Papá de Juan:
Juan, quiero que sepas que yo vi todo
lo que sucedió en tu fiesta de
cumpleaños, pero no hice nada
porque quise pensar que tú te
disculparías públicamente con Jaime
y con todos tus compañeros por tu
actitud poco responsable. Pero nunca
sucedió. El director me llamó y
cuando me contó, le dije que ya
estaba al tanto de toda la situación, y
que estoy de acuerdo con su decisión.

Juan (con voz pretenciosa):


¡USTEDES PUEDEN PENSAR LO
QUE QUIERAN, PERO NADA ME
QUITARÁ MI EXCELENTE
TALENTO PARA EL CANTO!

Director (con su característica voz


sabia):
No hay talento que valga, si éste no
viene de la mano con una gran
humildad.
Director: Nunca deben faltar los
motivos para seguir avanzando en la
vida, a pesar de las dificultades, a
pesar de los miedos.

También podría gustarte