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Obra sobre la importancia de ir tras los

sueños (5 personajes)
Esta es una obra de teatro para 5 personajes que trata sobre lo importante que es creer en ti
e ir tras tus sueños, aunque falles, mientras tengas constancia y disciplina sin importarte la
opinión de lo demás, lograrás el objetivo.

Obra: «¡Yo, soy el Cantante!»


Autores: Yanett Mora y Marvin Merlano

5 personajes:
1. Jaime (niño de 10 años).
2. Juan (niño de 10 años).
3. Mamá de Jaime (Señora de 40 años).
4. Director de la Escuela (Señor de 50 años).
5. Papá de Juan (Señor de 40 años).

Acto I

Ambientación: Cuarto de la mamá de Jaime.


Introducción: Jaime era un niño que le encanta la música. Todas las
tardes, toma lecciones de canto, y aunque reconoce que no es el mejor de
su clase, le encanta aprender cosas nuevas cada día. Después de cada
clase, Jaime adoraba llegar a su casa a cantarle a su mamá quien le
encanta escuchar a Jaime.

Mi madre es un poema
De blanca cabellera
Que tiene a flor de labios
Un gesto de perdón

Cuando tras larga ausencia regreso


Ella me espera
Me abraza como a un niño
Me besa con pasión

Mi madre es pequeñita
Igual que una violeta
Lo dulce está en su alma
El llanto en el adiós

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Es dueña de mis sueños
Aunque no soy poeta
Los versos a mi madre
Me los inspira Dios

Qué linda que es mi madre


Qué suerte es tenerla
Y que dichoso al verla
Feliz en el hogar

La mamá lo interrumpe y le dice…


Mamá (Con voz dulce): ¡Soy tu fan número 1!
Jaime (Con lágrimas en los ojos): ¡Eso me hace muy feliz, mamá!
Salen caminando.

Acto II

Ambientación: Escuela de Música.


Introducción: Una de las tardes en clase, llega Juan, quien es el alumno
más popular de la escuela de canto por tener la mejor voz.
Juan (con alegre): Hola compañeros vengo a deleitarlos una vez más con
mi voz así que preparen sus oídos. Porque cuando sea famoso no se podrán
acercar a mi y hablando de eso…
Repartió invitaciones a todos sus compañeros por su fiesta de cumpleaños.
Cuando le toca a Jaime recibir la invitación de Juan, éste le dice:
Juan (con voz retadora): Espero que no faltes a mi fiesta de cumpleaños,
Jaime, va a estar verdaderamente divertida. Jajaja…
Jaime (con voz de entusiasmo): ¡Por supuesto que no faltaré, ahí estaré!
Suena el timbre y todos van al salón de clase

Acto III

Ambientación: Sala de la casa de Jaime.


Introducción: Esa misma tarde, como cada día, Jaime fue corriendo a su
casa para contarle a su mamá la buena noticia.
Jaime (gritando): ¡mamá! ¡mamá! ¡Tengo que contarte algo!
Abuela (con voz dulce): ¿Qué sucede mi amor? ¿Qué te tiene tan
entusiasmado?
Jaime: Juan, el mejor cantante de toda la escuela entera, hará una fiesta
esta noche por su cumpleaños, ¡y me ha invitado! Cuando se acercó a
darme la invitación, me dijo que no faltara.
Mamá: Mmm… Jaime, ¿no te parece un poco extraño? Tú me has contado
que ese niño nunca ha sido muy amable contigo… y que ahora te invite a su
fiesta de cumpleaños y te diga que no faltes, no me transmite mucha
confianza.

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Jaime: Bueno mamá, quizá siempre se la pasa de mal humor porque está
cansado de tanto practicar y por eso ha sido un poco grosero conmigo, tal
vez ahora quiera reivindicarse y por eso me está invitando a su fiesta de
cumpleaños. Ya mismo escojo la ropa y me preparo para salir mamá. ¡Me
voy a divertir demasiado!
Jaime se va al cuarto y la Mamá canta…
Sabia es mamá
óyeme atenta
el mundo exterior es cruel.
Sabia es mamá.
De alguna manera
algo saldrá mal, lo sé.
Malas amistades,
hay atracadores,
también drogas, ¡oh,
el mal!
¡Sí!
monstruos también,
de largos colmillos...
¡No, no más, que me atormentas!
Madre está aquí,
madre te protege,
¡mi consejo escucha ya!
No hago drama,
mami te ama...
Sabia es mamá.

Mamá (con tono preocupado): ¡Buena suerte mi pequeño Jaime, y por


favor, prométeme que te cuidarás mucho!
Jaime: ¡Así será mamá!

Acto IV

Ambientación: Patio de la casa de Juan.


Introducción: Están todos los compañeros de Jaime bailando. La fiesta se
ve llena de deliciosos dulces, mucha música y diversión.
Juan: Jaime, ¡viniste! Me alegra mucho. ¿Recuerdas que te dije que nos
íbamos a divertir? Pues adivina qué: ¡Ya mismo vamos a empezar con un
concurso de canto!
Jaime: Ehhh, Juan, no creo que sea un buen momento para que todos
cantemos delante de tantas personas que hay, ¿por qué mejor no jugamos
a otra cosa donde todos no nos tengan que ver?
Juan se dirige hacia la tarima que le había construido su papá
especialmente por su cumpleaños. Ordena a los invitados a hacer silencio.
Juan: ¡Silencio! ¡Escúchenme todos! ¡Ya que ahora sí estamos todos aquí,
quiero hacer un juego bastante divertido! Pero este juego solo será entre

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otro contrincante y yo. En este juego, mi contrincante y yo tenemos que
cantar la misma canción, y ustedes serán el público que juzgue al ganador.
Al perdedor, pueden abuchearle y lanzarle bolas de papel... jajaja… MI
CONTRINCANTE PARA ESTA CONTIENDA SERÁ: ¡JAIME! Jajaja…
Las luces de la tarima apuntaban a Jaime, todos en la fiesta lo veían y
empezaron a gritar su nombre. Jaime, muy asustado, consciente de que no
era tan bueno en el canto como Juan, les hacía señas a los invitados para
que por favor dejaran de decir su nombre.
Juan (Con voz de burla): ¡Vamos Jaime! ¿Qué sucede? ¿Acaso tienes
miedo? Pero si todos sabemos que después de cada clase vas corriendo a
cantarle a tu Mamá que está medio sorda. ¡Seguro que debes cantar muy
bien para que ella quiera escucharte todos los días!
Todos los asistentes de la fiesta reían.
Juan canta…

Ya lo pasado pasado, no me interesa


Si antes sufrí y lloré
Todo quedó en el ayer
Ya olvidé (ya olvidé)
Ya olvidé (ya olvidé)
Ya olvidé (ya olvidé)

Pido un aplauso para el amor que a mí ha llegado


Mil gracias por tanto y tanto amor
Vivo enamorado, hoy me he enamorado
Qué feliz estoy
Ya todo he olvidado
Y a todo el pasado
Ya le dije adiós

Los invitados aplauden muy entusiasmados.


Juan: Vamos Jaime, ¡Es tu momento de deleitarnos como a tu Mamá!
Jaime empieza a cantar, sus nervios obvios empiezan a jugar en su contra.
Desafina y al mismo tiempo le cuesta concentrarse.

Ya lo pasado pasado, no me interesa


Si antes sufrí y lloré
Todo quedó en el ayer
Ya olvidé (ya olvidé)
Ya olvidé (ya olvidé)
Ya olvidé (ya olvidé)

Pido un aplauso para el amor…

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Sus compañeros empezaron a reír y abuchear, las bolas de papel no
tardaron en aparecer.
Jaime, aún congelado por el miedo, seguía dando lo mejor de sí, pero la
humillación de sentir cómo le golpeaban las bolas de papel en su cara, no
lo dejaba concentrarse.
Jaime (con la voz quebrada): ¡YA PAREN ESTO! ¿POR QUÉ LO HACES,
JUAN?
Juan (riendo): ¡Pero si es solo un jueguito, Jaime, es mi cumpleaños y se
hace lo que yo diga!
Jaime con lágrimas en los ojos se baja de la tarima y se va corriendo de la
casa de Juan.
Acto V

Ambientación: Sala de la casa de Jaime.


Introducción: Jaime, al llegar a su casa, trata de hacer el menor ruido
posible para que su Mamá no lo escuchara llegar, pero al entrar sin querer
hace un ruido.
Mamá: ¡Oh, ¿quién anda ahí? ¿Acaso eres tú hijo?
Jaime no aguanta más y rompe a llorar abrazando a su Mamá.
Mamá (Sorprendida al ver a Jaime llorar): ¡Jaime! ¿Qué ha sucedido?
Jaime: ¡Tenías razón Mamá, Juan siempre fue malo conmigo y esta vez no
iba a ser la excepción, debí hacerte caso y no ir a su fiesta!
Mamá (con lágrimas en los ojos): ¡Oh mi amor, ya todo está bien, estás en
casa!

Como me apena el verte llorar


Toma mi mano, siéntela
Yo te protejo de cualquier cosa
No llores más, aquí estoy

Frágil te ves, mi dulce bebé


Quiero abrazarte y te protegeré
Esta fusión es irrompible
No llores más, aquí estoy

En mi corazón, tú vivirás
Desde hoy será y para siempre, amor
En mi corazón, no importa qué dirán
Dentro de mí, estarás siempre

Vamos a dormir mi amor. Mañana será un nuevo día…

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Acto VI

Ambientación: Sala de la casa de Jaime.


Introducción: Es de mañana y Jaime se siente mucho mejor.
Jaime: Mamá, ¿Sabes qué? No dejaré que la broma pesada de Juan me
afecte, hoy iré a clases como si nada hubiese pasado.
Mamá: ¡Esa es la actitud hijo!
La mamá despide a Jaime y este se va a la escuela.

Acto VII

Ambientación: Escuela de Jaime.


Introducción: Llegando a la escuela el director llama a su oficina a Jaime
y a Juan.
Director: ¡Jaime y Juan vengan conmigo por favor!
Los compañeros hacen caras de sorpresa. Ambos entran a la oficina del
director de la escuela.
Muchachos, supongo que se preguntarán qué estarán haciendo aquí.
Juan (con voz prepotente): La verdad NO director, estar aquí en su oficina
no le hace bien a la fama que tengo. No seguiré siendo el máximo ejemplo
para mis compañeros que se mueren por ser como yo y sueñan con tener
la gran voz que yo tengo.
Director: Precisamente por eso estás aquí, Juan. La directiva de esta
célebre escuela de música se ha enterado de lo sucedido en tu fiesta de
cumpleaños. Tu comportamiento fue tan reprochable, que no podemos
permitir que alumnos sin moral y sin empatía hacia sus compañeros,
estudien en esta escuela.
Director: Con respecto a ti, Jaime, estuvimos evaluando tu
comportamiento durante el año y al ver tu valentía y tu postura de querer
seguir tras tus sueños, sin importarte las burlas diarias de tus compañeros
por las humillaciones que te provoca Juan, nos has inspirado. Realmente
eres un ejemplo de seguir adelante sin importarte la opinión de los demás,
y exactamente esa postura, ha llamado la atención de un buen amigo mío
que es caza talentos. Al comentarle tu caso, no dudó ni un segundo en
querer conocerte y darte una oportunidad para ser parte de su agencia de
talentos. Con respecto a ti, Juan, desde hoy quedas destituido de nuestra
prestigiosa institución.
Juan (sorprendido y atónito): ¡Esto no puede ser posible, ya mismo
llamaré a mi papá para que los denuncie! ¡No pueden hacerme esto, soy el
mejor cantante que esta escuela ha tenido!
Papá de Juan: Me siento muy decepcionado de ti, Juan.
Para sorpresa de Jaime y Juan, el papá de Juan salió del baño de la oficina
del director.
Juan (sorprendido y atónito): ¡Papá! Menos mal que llegaste. Te quiero
decir que…

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Papá de Juan: Juan, no hagas que me avergüence más. Quise pensar que
tú te disculparías públicamente con Jaime y con todos tus compañeros por
tu actitud poco responsable. Pero nunca sucedió. El director me llamó y
cuando me contó, no podía creer lo que decía, pero ahora que escuché todo
estoy de acuerdo con su decisión.
Juan (con voz fuerte y pretenciosa): ¡USTEDES PUEDEN PENSAR LO QUE
QUIERAN, PERO NADIE PUEDE NEGAR EL EXCELENTE TALENTO QUE
TENGO Y NADIE EN ESTA ESCUELA CANTA MEJOR QUE YO!
Director (con su característica voz sabia): Juan no hay talento que valga,
si éste no viene de la mano con una gran humildad. Puedes ser el más
talentoso de todo el mundo, pero sin humildad nadie te seguirá. En cuanto
a ti Jaime recuerda que nunca deben faltar los motivos para seguir
avanzando en la vida, a pesar de las dificultades y a pesar de los miedos.

Juan mirando al piso reflexiona y arrepentido canta…

Yo, soy el cantante


Muy popular donde quiera
Pero cuando el show se acaba
Soy un humano cualquiera

Y nadie pregunta
Si sufro, si lloro
Si tengo una pena
Que hiere muy hondo

Yo soy el cantante
Por qué lo mío es cantar
Y a mi amigo Jaime
La verdad voy a contar

Juan (arrepentido): Es cierto lo que dice director, me he comportado como


un mal amigo ególatra y sin corazón. Los celos de que mi amigo Jaime se
convirtiera en mejor cantante que yo me llevó a realizar todas esas locuras
que lo hicieron sentir mal y que se convirtiera en la burla de toda la
escuela. (mirando a Jaime) Amigo quiero pedirte perdón y decirte algo muy
importante delante de toda la escuela!

Suena el timbre de salida. Salen al patio del colegio

¡¡¡Escuela quiero decirles que Jaime es un excelente cantante, que lo quiero


mucho y es mi amigo!!!

A veces el miedo te hace dudar


A pocos segundos antes de saltar
No lo dudes

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Solo abre tus alas
Siente el vuelo
A veces las metas tardan en llegar
Te invade la inercia
Te deja llevar
No te olvides
Cómprales un traje nuevo a tus sueños

Y verás que la vida viene y va


Como un vals
Un paso adelante
Y otro paso atrás

Si cada lágrima te hace más fuerte


Muerde la vida con uñas y dientes
Hoy, puede ser, que todo empiece a cambiar
Si cada piedra marca tus rodillas
Y la ilusión se convierte en cenizas
Hoy, puede ser, que todo empiece a cambiar
Y lo mejor, lo mejor está por llegar

A veces te aferras de un viejo disfraz


De aquel que no sufre con la soledad
Corre el riesgo
Amar, aunque te duela siempre es bueno

Y verás, como todo viene y va


La vida es un vals
Un paso adelante
Y otro paso atrás

Si cada lágrima te hace más fuerte


Muerde la vida con uñas y dientes
Hoy, puede ser, que todo empiece a cambiar
Si cada piedra marca tus rodillas
Y la ilusión se convierte en cenizas
Hoy, puede ser, que todo empiece a cambiar
Y lo mejor, lo mejor está por llegar

Y lo mejor, lo mejor está por llegar


Y lo mejor, lo mejor
Está por llegar

FIN.

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