0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
7 vistas1 página
El documento critica la falta de acción de las autoridades peruanas para sancionar a los policías responsables de graves abusos durante las protestas de noviembre, incluyendo la muerte de dos manifestantes. También señala que la policía disparó contra manifestantes pacíficos y periodistas, violando sus derechos. El autor pide al Congreso, ejecutivo y policía que asuman responsabilidad y realicen reformas para respetar el derecho a la protesta pacífica.
El documento critica la falta de acción de las autoridades peruanas para sancionar a los policías responsables de graves abusos durante las protestas de noviembre, incluyendo la muerte de dos manifestantes. También señala que la policía disparó contra manifestantes pacíficos y periodistas, violando sus derechos. El autor pide al Congreso, ejecutivo y policía que asuman responsabilidad y realicen reformas para respetar el derecho a la protesta pacífica.
El documento critica la falta de acción de las autoridades peruanas para sancionar a los policías responsables de graves abusos durante las protestas de noviembre, incluyendo la muerte de dos manifestantes. También señala que la policía disparó contra manifestantes pacíficos y periodistas, violando sus derechos. El autor pide al Congreso, ejecutivo y policía que asuman responsabilidad y realicen reformas para respetar el derecho a la protesta pacífica.
Periodista El reciente informe emitido por Human Rigths Watch sobre los graves abusos policiales cometidos durante las manifestaciones ocurridas en el mes de noviembre debe ser un llamado de atención hacia las autoridades que hasta ahora no hacen nada por sancionar a los responsables. Ha pasado más de un mes desde la muerte de Inti Sotelo y Bryan Camargo, ocurrida en las inmediaciones de las avenidas Abancay y Nicolás de Piérola, en el Centro Histórico de Lima, y no hay ninguna acción que vislumbre un sentido a la justicia hacia sus familiares. Pero eso no es todo. El 14 de noviembre y los días que se realizaron las marchas, la policía disparó proyectiles al cuerpo de decenas de ciudadanos, reporteros y fotoperiodistas de diferentes medios de comunicación. Parece que hay quienes aún no entienden que la protesta pacífica es un derecho legítimo de la ciudadanía. Durante las marchas no se respetaron los elementos mínimos de la legislación internacional en derechos humanos. Por tanto, se deben tomar en cuenta las recomendaciones respecto a una reforma integral de los protocolos con los que actúa la policía en estos casos. El Congreso de la República, el ejecutivo y la misma Policía Nacional del Perú deben hacer un mea culpa y ejecutar las acciones correctivas para evitar que las calles se tiñan de sangre a causa de situaciones que pudieron evitarse.