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ESCUELA DE MEDICINA

CATEDRA DE PSIQUIATRIA

NOMBRE:
ANGELICA MARIA PLACENCIO SALDAÑA

MATRICULA:
100405191

SECCION: 15

ASIGNATURA:
Psicología medica

MAESTRO:
Patricia Minerva Reyna Liberato

TEMA:
ENFERMO TERMINAL
1-Diferencia entre paciente terminal y paciente moribundo.

El paciente terminal se ha considerado como aquel paciente quien se encuentra


críticamente enfermo, cuya muerte será inevitable en fecha cercana, a pesar de todos
los esfuerzos a nuestro alcance para mejorar su salud mientras que el paciente
moribundo como es sabido tiene necesidades diferentes a las de otros pacientes, las
cuales pueden ser satisfechas con atenciones especiales. Estos pacientes primero
deben ser identificados. Antes de la muerte, los pacientes tienden a seguir una de 3
trayectorias generales de declive funcional:

 Un período limitado de declive funcional progresivo.


 Un prolongado periodo indefinido de disfunción grave que puede no ser constantemente
progresivo.
 La función que disminuye de forma irregular, causada por exacerbaciones agudas
periódicas y, a veces impredecibles, del trastorno subyacente

2-Cuál es el rol del médico frente a la curación, el sufrimiento y la muerte

Está claro pues que no es nada fácil la tarea del médico frente al sufrimiento de su
paciente a la hora de darle a conocer una enfermedad. Lo que aún no está claro que
atender el sufrimiento del paciente es tarea de su médico. Porque a lo mejor a los
pacientes les gusta pensar que así debe ser, pero el médico puede defender la idea de
que para eso están otros especialistas: el psicólogo, el sacerdote, el tanatólogo, el
paliativista, estos pueden ayudar al paciente hacer la enfermedad más fácil de llevar.

El medido le informa al paciente sobre la enfermedad y las posibles soluciones que


esta puede tener, también le orienta para que pueda estar preparado para lo peor,
pero como dije anteriormente la muerte es una situación difícil de aceptar, por tanto
es bueno que además de seguir las prescripciones médicas el paciente involucre a su
familia en la enfermedad como es el caso de la señora julia Roberts en la película
quédate a mi lado su enfermedad fue mejor de tratar, también es bueno que el
paciente buscar ayudad psicológicas.

3-Como es el manejo familiar del paciente moribundo.

La familia se convierte en un pilar básico en el cuidado del paciente al final de la vida, debe
considerarse como un elemento terapéutico en sí mismo, y como tal debe incorporarse en la
planificación del cuidado, ya que contribuye a aliviar el sufrimiento del paciente al estar a su
lado y acompañarlo en el proceso de morir; sin embargo, la condición de enfermedad terminal
desencadena alteraciones tanto en el funcionamiento como en la dinámica familiar. La familia
desarrolla mecanismos de autorregulación, los cuales a veces no son suficientes y pueden
terminar en un desequilibrio emocional.

La primera respuesta ante el conocimiento de una enfermedad mortal de un ser querido es de


shock, aturdimiento e incredulidad; se puede en un instante percibir la realidad y presentar
una intensa reacción emocional con dolor, rabia y llanto, la familia se siente amenazada,
asaltada en su unidad y estabilidad, así como para manejar esos sentimientos tan agobiantes
entra en un periodo de negación que le permite mantener el control y la estabilidad
emocional. Pero luego el familiar se basa en el bienestar del paciente para que sus últimos días
no sean tan amargos.

4-Manejo sintomático en el enfermo terminal o el paciente moribundo.

El dolor pese a ser el síntoma más temido en el cáncer terminal, no es el único


problema que puede aquejar al paciente, síntomas tales como la disnea, el delirium, el
síndrome anorexia-caquexia-astenia, y diferentes condiciones consideradas como
Urgencias Paliativas deben ser conceptualizadas como parte del manejo cotidiano de
estos casos; mientras que la alternativa de la sedación terminal deberá ser
cuidadosamente valorada en situaciones específicas, considerando todos los posibles
matices bioéticos que conlleva.
El objetivo último del manejo sintomático es mejorar las condiciones de vida y la
calidad de muerte en este colectivo de enfermos. Por todo esto, es imprescindible que
el equipo terapéutico a cargo de pacientes terminales, esté preparado para atender
situaciones de descontrol sintomático con herramientas clínicas de probada eficacia,
protocolos estandarizados de manejo y criterios uniformes de actuación

5-Explique las Teorías de Elizabeth Kübler Ross en torno al enfermo terminal

Cabe destacar que la muerte forma parte de la vida de cada uno y constituye un
momento personal y único.
Negación: la primera reacción que suele aparecer cuando se le comunica al paciente
que padece una enfermedad terminal es una defensa "No, yo no, no puede ser
verdad." Lo más común es negar que esto pueda estarle ocurriendo a uno mismo, pero
esta fase tendrá que ser sustituida, por lo menos, por una aceptación parcial de la
realidad.

Ira: El sentimiento de rabia, ira, envidia y resentimiento es el que sigue a la etapa de


negación, cuando la persona ya empieza a hacerse cargo de su situación, la pregunta
que surge ahora es "¿Por qué yo?". Esta fase es especialmente complicada también
para los familiares cercanos al paciente, ya que la ira se proyecta contra todo lo que les
rodea.
Pacto o negociación: Ante la trágica realidad el paciente recapacita e intenta negociar
para afrontar la enfermedad con una buena conducta, con el deseo y la posibilidad de
que sea recompensado, por lo menos, con una muerte menos dolorosa o unos días
más de vida.
Depresión: en esta etapa la sensación de pérdida se hace más evidente. Suele
manifestarse cuando el paciente tiene más síntomas o está más débil o tiene que estar
más tiempo hospitalizado. La tristeza que provoca la pérdida inminente de todo lo
querido causa al paciente una profunda depresión. En esos casos la tendencia humana
es animar a la persona y hacerle ver el lado positivo de la vida, pero no sería una buena
opción tratar de animar así a un enfermo terminal, ya que sólo aceptando su estado y
dejando que exprese su dolor se puede preparar para la última etapa.

Aceptación: Fase prácticamente desprovista de sentimientos en la que el paciente ya


contempla su fin con relativa tranquilidad. Se alcanza cierta paz y se necesita
momentos de soledad y la desconexión del mundo exterior. Esta fase es quizás más
dura para la familia que para el propio paciente, ya que necesitará ayuda y
comprensión. Sólo los que han pasado por las etapas anteriores y han expresado sus
sentimientos podrán llegar a aceptar la muerte.

Referencia
Quédate a mi lado

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