UNA EXPLICACIÓN Y

EVALUACIÓN DEL
DISPENSACIONALISMO

Johannes Geerhardus Vos

 UNA EXPLICACIÓN Y EVALUACIÓN DEL
DISPENSACIONALISMO
Por Johannes Geerhardus Vos

El término Dispensación es una traducción del nombre griego

oikonomia, que puede ser traducida o dispensación o administración. Cuando
es usado con respecto a alguien en autoridad, significa dispensación en el
sentido de plan o esquema. Cuando se usa con respecto a alguien bajo autoridad,
significa administración o responsabilidad asignada.

La Biblia de Referencia de Scofield define Dispensacionalismo como

“un periodo de tiempo durante el cual el hombre es probado con respecto a la
obediencia a alguna revelación específica de la voluntad de Dios”. Esto
manifiestamente es incorrecto, porque en la Biblia oikonomia nunca significa
un periodo de tiempo. La idea de tiempo en conexión con ella es totalmente
incidental, y surge del hecho de que el Antiguo Testamento y el Nuevo
Testamento son consecutivos. Así, mientras que es verdad que una dispensación
puede, de hecho, coincidir con un periodo de tiempo, aún el término
Dispensación nunca significa un periodo de tiempo.

Usando el término Dispensación en el sentido Bíblico de un plan o

esquema en parte de Dios, puede ser dicho que todos los cristianos son
Dispensacionalistas. El error del Moderno Dispensacionalismo no consiste en
creer en la existencia de Dispensaciones, sino en considerar su número y
naturaleza. Todos los cristianos creen en, al menos, dos dispensaciones,
comúnmente llamadas “el antiguo” y “el nuevo”, o aquellos de Moisés y de
Cristo. O podemos expresar más precisamente que la Escritura presenta tres
dispensaciones, uno del Pacto de Obras y dos del Pacto de Gracia. Estos
coinciden con (a) el periodo de la creación del hombre a la Caída; (b) el periodo
desde la Caída a Cristo; (c) el periodo desde Cristo hasta el fin del mundo. En
este sentido, el Dispensacionalismo es Bíblico y también es una doctrina de la
Confesión de Fe de Westminster y otros estándares Reformados. Esto, sin
embargo, es algo muy diferente de lo que comúnmente es llamado
“Dispensacionalismo” hoy en día. La visión Bíblica considera estas
dispensaciones como mutuamente complementarias, como armoniosamente
adecuando partes de un todo orgánico; la visión Dispensacionalista considera las
dispensaciones como mutuamente antitéticas en sus ideas básicas.

La Popularidad del Moderno Dispensacionalismo

El Dispensacionalismo ha sido extensamente promovido y popularizado

en el mundo protestante moderno por la Scofield Reference Bible (Biblia de
Referencia de Scofied) y la Pilgrim Edition of the Holy Bible (La Edición
Peregrino de la Santa Biblia). Hay ambos publicados por Oxford University
Press (Rama Americana). La Biblia Peregrino es una obra posterior que la Biblia
de Scofield, y es destinada como una Biblia con ayudas especiales para personas
jóvenes. Las enseñanzas básicas de estas dos obras son idénticas. Cada uno
consisten de los textos de la King James Versión (Versión Rey Santiago),
acompañado por un sistema copioso de notas explicativas y referencias cruzadas.

Fue un golpe maestro de psicología para Scofield colocar sus

comentarios en las mismas páginas con el texto inspirado de la Escritura. Las
notas de Scofield de ese modo adquirido, en las mentes de muchas personas, que
pueden ser llamados “autoridad por asociaciones”. También la fuertemente
dogmática, tono profético de las notas de Scofield hacen el libro popular.
Scofield nunca argumenta y nunca declara sus razones. Él simplemente afirma
que algo es la verdad. Otra razón para la popularidad de la Biblia de Scofield es
que repica verdadero en las grandes doctrinas fundamentales del Cristianismo
tales como la inspiración de la Escritura, el nacimiento virginal de Cristo y la
expiación sustitutiva. Sin embargo, otra razón puede ser discernida, tal vez, en la
manera en que la Biblia de Scofield y Peregrino son anunciadas por su editor, la
Oxford University Press. Ellas son representadas simplemente como Biblias con
referencias y ayudas. El hecho de que estas dos Biblias están basadas en todo en
un sistema discutible conocido como Dispensacionalismo Darby-Scofield que
nunca es mencionada en la publicidad. El público es así llevado a creer que estas
simplemente son Biblias con ayudas, comparable, dicen, a la Biblia Thompson
con Cadenas de Referencia. Así, el ingenuo comprador paga su dinero y recibe,
sin darse cuenta que, un paquete de propaganda muy dogmática y discutible, en
que los asuntos más discutibles, en que los cristianos sinceros profundamente no
están de acuerdo, son presentadas con certeza profética, y sin una sombra de
sugestión de que alguna otra interpretación es mantenida por alguien o que, en
efecto, es compatible con la fe en la Biblia como la Palabra de Dios.

La Historia del Dispensacionalismo

 El Dispensacionalista ha reclamado a Agustín como uno de su
persuasión, citando en apoyo de esto, una declaración de Agustín del efecto que
si distinguiremos las dispensaciones, la Escritura se volverá armoniosa. No hace
falta insistir, esta observación de Agustín no tiene nada en común con el
Dispensacionalismo como es promovido hoy. Agustín no creyó, ciertamente, en
las siete dispensaciones del Moderno Dispensacionalismo, no creyó que la
dispensación de Moisés es antitética a la de Cristo. Él simplemente quiso decir
que en la interpretación Bíblica adecuada las distinciones deben tenerse en
cuenta, con respecto al Antiguo Testamento y al Nuevo, si el error debe ser
evitado. Así, por ejemplo, la circuncisión fue mandada en el pacto de Dios con
Abraham, pero declarada a ser innecesaria por el Concilio de Jerusalén de
Hechos 15. Esto no involucra ninguna contradicción ni aún algún problema real
si nos mantendremos en la mente en el dicho de Agustín.

También se ha sido reclamado que Pablo fue un Dispensacionalista

porque él escribió a Timoteo instándole a la importancia de “dividir
correctamente la palabra de verdad” (2 Ti. 2.15). De acuerdo a algunos
Dispensacionalistas, “dividir correctamente la palabra de verdad” significa
dividirlo correctamente en un número de dispensaciones antitéticas. Esto
manifiestamente es absurdo; todas aquellas palabra de Pablo a Timoteo lo que
significa es que Timoteo debe esforzarse a interpretar la Escritura de acuerdo con
el principio de sana exégesis.

La historia real del Dispensacionalismo comienza, aparentemente, con

el teólogo Holandés John Cocceius (1603-1669). En algún modo Cocceius fue el
precursor del Dispensacionalismo. Sin embrago, eso no ha sido probado que el
pionero Dispensacionalista del siglo 19 (Darby, Scofield) derivaron sus ideas de
los escritos de Cocceius. Cocceius sostuvo que la ley ceremonial fue impuesta a
Israel como un castigo por el pecado de adorar el ternero dorado en el Sinaí. Él
también mantuvo que la administración del Antiguo Testamento difiere del
Nuevo no solamente en la forma o características incidentales, sino en la esencia
o sustancia básica. Fue esta característica del pensamiento de Cocceius que lo
marca como el precursor del Moderno Dispensacionalismo.

La siguiente etapa en la historia del Dispensacionalismo concierne a

John Nelson Darby, quien nació en 1800 en Londres, de padres Irlandeses. En
1825 fue ordenado en la Iglesia Anglicana de Irlanda, y pronto fue el centro de
una obra asombrosa entre los católicos Romanos irlandeses. Es repostado que
bajo su influencia los católicos irlandeses se convirtieron protestantes en la tasa
de 600 a 800 por semana. En medio de su éxito, Darby se volvió consciente del
mal del Erastianismo (el control del gobierno de la iglesia) que fue
profundamente incrustado en los establecimientos nacionales de la Iglesia
Anglicana en Irlanda. Él se retiró para hacer un balance de la situación y para
estudiar su Biblia. En 1827-8 él se reunió regularmente con unos pocos amigos
cristianos. Este grupo, al final, se convirtió en el movimiento conocido como los
Hermanos.

Más allá de la cuestión si Darby era un cristiano devoto y espiritual, él

también era un erudito real y un voluminoso escritor, empezando a la edad de 28
y continuando hasta su muerte de 82. Él publicó por encima de 40 volúmenes de
600 o más páginas cada uno de todos los asuntos de los temas religiosos. Incluido
en esto fue el productor de una traducción original de toda la Biblia que muestra
un inmenso aprendizaje. El estilo, sin embargo, fue complicado y difícil seguir.

Darby empezó con la doctrina de la Iglesia. Él encontró la iglesia

organizada como él lo vio que sería apóstata, y sostuvo que los creyentes
verdaderos deben retirarse de ella y [estar] en comunión entre ellos mismos. Él
hizo una fuerte distinción entre la verdadera iglesia, que es la “novia de Cristo”,
y el apóstata cristianismo organizado, que él lo llamó “Cristiandad”.

Después, Darby tomó el estudio de la profecía Bíblica. Esto le llevó a un

esquema dispensacional de interpretación de la Biblia. Él expuso siete
dispensaciones, aunque estos no fueron exactamente los mismos como aquellos
mantenidos por los Dispensacionalistas hoy. En sustancia, él sostuvo que en cada
dispensación Dios ha puesto alguna responsabilidad especial sobre el hombre, y
que el hombre totalmente ha fracasado, sin embargo, Dios por gracia llevó la
dispensación a su fin, a pesar del fracaso del hombre en su comienzo. Darby
también mantuvo que ciertas porciones de la Escritura deben ser consideradas
Judías y ciertas otras porciones deben ser consideradas cristianas. Esto fue el
germen del Moderno Dispensacionalismo como existe hoy en las Biblias Scofiel
y Peregrino y la Teología Sistemática de Lewis Sperry Chafer.

Cyrus Ingerson Scofield nació en 1843. Él sirvió en el ejército

confederado durante la Guerra Civil. Después de la guerra él estudió leyes en St.
Louis. Luego él practicó leyes en Washington, D.C., y fue activo en la política.
Durante esta parte de su vida Scofield conoció al Señor. Él se convirtió en un
bebedor pesado. En 1879 él fue convertido, siendo la mediación humana la
influencia de un abogado cristiano quien le visitó repetidamente. Él continuó
como un abogado por tres años más. Luego, sin, incluso, haber tenido alguna
educación teológica formal, fue ordenado pastor de una pequeña Iglesia
congregacional en Dallas, Texas. En 1895 él se volvió pastor de la Iglesia
Congregacional en el Norte de Northfield, Mass., donde D. L. Moody adoró
cuando él estaba en casa. En 1902 él retornó a Dallas para atender a su antigua
iglesia y también trabajar en la preparación de la Scofield Reference Bible
(Biblia con Referencias Scofield). En este tiempo él fue leyendo los escritos de
J. N. Darby. Él se asoció a otros ochos hombre en la editorial de la Scofiel
Reference Bible, entre ellos fueron algunos hombres de distinción en el campo
de estudio teológico.

La Scofield Reference Bible (Biblia con Referencias Scofield) fue

publicada primero en 1909. Una segunda edición apareció en 1917. Desde que
apareció primero, acerca de millones de copias han sido impresos y vendidos en
los Estados Unidos solamente. Desde el tiempo de Scofield, el
Dispensacionalismo ha sido cada vez más popúlarizada por muchas conferencias
de la Biblia e institutos bíblicos. La sede teológica de este sistema hoy es el
Seminario Teológico de Dallas, Texas. La obra estándar de la teología
Dispensacional es la Teología Sistemática de Lewis Sperry Chafer (8 voúmnes,
1948).

En años recientes, el Dispensacionalismo ha llegado bajo serias

investigaciones teológicas y críticas. Por muchos años había pasado,
prácticamente, desapercibido por el mundo teológico ortodoxo. Luego los
artículos y libros empezaron a aparecer. Esta crítica fue amargamente resentida
por los profesores Dispensacionalistas, pero se continuó. Hoy hay literatura
considerable que es crítico del Dispensacionalismo desde el punto de vista de la
ortodoxa teología evangélica y Reformada.

Los siguientes especialmente pueden ser mencionados en el campo de

literatura crítica del Dispensacionalismo:

Albertus Pieters, A Candid Examination of the Scofield Bible

(folleto), Bible Truth Depot, Swengel, Union Country, Penna.

Oswald T. Allis, Prophecy and the Church. 339 páginas. The

Presbyterian and Reformed Publishing Co., Box 185, Nutlry 10, New
Jersey.

Clarence B. Bass, Backgrounds to Dispensationalism. 183 páginas.

William B. Eardmans Publishing Co., 255 Jefferson Ave., S.E., Grand
Rapids 3, Michigan.

C. Norman Kraus, Dispensationalism in America. John Knox Press,

Box 1176, 8 North Sixth St., Richmond 9, Virginia.

Características Distintivas del Dispensacionalismo

1. No Meramente una forma de Premilenialismo. Todo los

Dispensacionalistas son Premilenialistas, pero no todos los Premilenialistas son
Dispensacionalistas. Los errores característicos del Dispensacionalismo no se
encuentran en su origen en las visiones escatológicas, sino más bien, en un
método incorrecto de interpretación Bíblica y un malentendido de la historia
Bíblica.

2. Mala Interpretación de las Dispensaciones Bíblicas. El

Dispensacionalismo difiere de la teología ortodoxa en cuanto al número de
dispensaciones y en cuanto a su naturaleza. En cuanto al número, él mantiene
siete, del cual la teología ortodoxa solo reconoce tres. Estos siete son:

1. Inocencia, antes de la Caída del hombre.

2. Conciencia, desde la caída de Adán hasta Noé.

3. Gobierno Humano, desde Noé hasta Abraham.

4. Promesa, desde Abraham hasta Moisés.

5. Ley, desde Moisés hasta Cristo.

6. Gracia, desde Cristo hasta el Rapto.

7. El Reino, desde el Retorno de Cristo hasta el fin del mundo.

Como ha sido indicado, el Dispensacionalismo yerra al definir una

Dispensación como “un periodo de tiempo”, un significado del término que
nunca tiene la Escritura. Entonces el tal yerra con respecto a la naturaleza de las
dispensaciones. Es dicho de que ellos son periodos de tiempo en cada uno de los
cuales la humanidad es probada con respecto a la obediencia a alguna revelación
especial de la voluntad de Dios. No hay evidencia en la Escritura para esta noción
de pruebas repetidas. Más bien, la Biblia enseña que la humanidad se fue a través
de un periodo de prueba solamente – aquello en que Adán estaba bajo la prueba
del Pacto de Obras. El Dispensacionalismo también yerra al considerar las varias
dispensaciones como mutuamente antitéticas más bien que mutuamente
complementarias. Esto, de hecho, puede ser considerado como la esencia del
Dispensacionalismo en una cáscara de nuez – el establecer del
Dispensacionalismo como periodos de tiempo en la historia Bíblica que son
considerados como mutuamente antitéticos antes que mutuamente
complementarios. La teología Ortodoxa considera todas las dispensaciones como
fundamentalmente idénticas en propósito, todas viniendo bajo el tema patrón
de la gracia divina al traer al elegido de Dios a la gloria. La teología ortodoxa
mantiene que los varios periodos de la historia sagrada difiere en circunstancias,
modos de administración y similares, pero debajo de estas diferencias
superficiales hay una unidad y continuidad subyacente que es más básica que
las diferencias. El Dispensacionalismo, por otro lado, niega la unidad y enfatiza
las diferencias.
 Esta falsa estructura de dispensaciones es la raíz de la cual la escatología
errónea y otros errores del sistema Dispensacional han surgido. Si nosotros
debemos de atacar el sistema efectivamente, debemos tratar con su error más
básico y radical.

3. La Fuerte Antítesis entre la Ley y la Gracia. La teología ortodoxa

considera la ley y la gracia en la Biblia como conceptos mutuamente
complementarios. La ley fue en sí misma un regalo de la gracia. Los Diez
Mandamientos fueron puestos en el arca del pacto sobre el cual estaba la sede
de la misericordia. La ley no era la enemiga de la gracia, ni una sustituta para
la gracia, sino un ingrediente del sistema de la gracia. Dios dio la ley para
aumentar Su gracia, no para contradecirla.

Por supuesto, la ley y la gracia no son la misma cosa, y ninguno nunca

reclamó que lo fueran. Pero la pregunta real es: ¿Cuál es la visión correcta de la
relación entre las dos? ¿Son complementarias o son antitéticas? La teología
ortodoxa dice que ellas son complementarias; el Dispensacionalismo dice que
ellas son antitéticas. Incluso Scofield dice que en el Sinaí Israel aceptó la ley
temerariamente. Un texto estándar Dispensacional es Juan 1:17: “Pues la ley
por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de
Jesucristo”. Este texto es interpretado por los Dispensacionalistas de tal modo
como de hacer la ley y la gracia antitéticas e aun mutuamente exclusivas – dos
cosas que no pueden ser mezcladas, como el aceite y el agua. Sin embargo, la
interpretación correcta es que ciertamente este texto presenta una comparación
que por motivo de énfasis es declarada como si fuera un contraste absoluto. La
ley es más prominente en el sistema asociado con Moisés, y la gracia es más
prominente en el sistema asociado con Cristo. Note que en este verso la “verdad”
está asociada con la gracia; si ponemos la gracia en antítesis a la ley, también
tendremos que poner la verdad en antítesis a la ley. A menudo la Biblia declara
un asunto relativo en términos absolutos por el motivo de énfasis. Por ejemplo,
nos es dicho que si una persona debe ser un seguidor de Cristo, él debe odiar a
su padre y a su madre, hermanos y hermanas, esposa, hijos e incluso su propia
vida. Manifiestamente esto no quiere decir que los cristianos realmente deben de
odiar a sus parientes más cercanos. Lo que se quiso decir es que el amor por el
Señor debe tener prioridad por encima del amor a los parientes humanos. Es
declarado como “odio” para los parientes, cuando el significado es un amor más
profundo por el Señor. Del mismo modo, la declaración de que la ley fue dada
por Moisés, mientras que la gracia y la verdad vinieron por Jesucristo, no quiere
decir que la ley estaba vacía de la gracia y de la verdad, ni se quiere decir que la
gracia y la verdad están sin la ley. Solamente se quiere decir que hay una
revelación de la gracia y la verdad mucho más completa en Cristo que había a
través de Moisés.
 Esta fuerte antítesis entre la ley y la gracia levanta a una de las cuestiones
más serias y difíciles en conexión con el Dispensacionalismo, a saber: ¿enseña
el Dispensacionalismo que hay diferentes formas de salvación en diferentes
dispensaciones? Toda la lógica de los principios básicos del Dispensacionalismo
exige que esta cuestión debe ser respondida afirmativamente, a pesar de todo el
profesor Dispensacionalista, a pesar de la lógica, responde negativamente.

Manifiestamente, si la gracia y la verdad vinieron por Jesucristo, y el

periodo desde Moisés a Cristo estaba caracterizado por la ley, las personas desde
Moisés a Cristo, si fueron salvos, deben haber sido salvados por las obras de la
ley. Con todo, Scofield y todos los escritores Dispensacionalistas afirman que
nunca ninguno fue salvado excepto por la gracia. ¿Cómo puede esto ser
reconciliado con la rígida antítesis entre la ley y la gracia?

Hay un crudo error popular el cual mantiene que los judíos fueron
salvados por las obras pero los cristianos son salvados por la gracia. Los
reconocidos escritores Dispensacionalistas, sin embargo, no son tan crudos, ni
hacen esta afirmación. Por el contrario, ellos rechazan a tal cargo con
indignación. Pero aún su estructura básica por la lógica más inexorable exige esta
conclusión – que la salvación por la gracia está limitada a la Dispensación de la
Gracia, y las personas en la era desde Moisés hasta Cristo o no fueron salvos en
absoluto, o de otro modo fueron salvos por las obras.

Estudiantes serios del Dispensacionalismo han luchado con esta

paradoja y no han salido con una solución satisfactoria. Lo mejor que puede ser
dicho es que Scofield y otros escritores Dispensacionalistas son inconsistentes,
no siguen sus propios principios básicos a los largo de las conclusiones lógicas,
y en realidad mantienen principios que son incompatibles con su sistema básico.
Ellos son así más mejores que su credo, pero por la misma muestra son teólogos
sistemáticos muy pobres. Incluso podemos llamar esto una inconsistencia feliz
por el lado de los Dispensacionalistas.

Una o dos muestras de comentarios sobre esta paradoja

Dispensacionalista puede ser de interés. El hecho es que la enseñanza de la Biblia
de Scofield no es clara y es ambigua en este punto crucial, así que es difícil o
imposible decir exactamente qué enseña ella acerca de la forma de la salvación
en el periodo desde Moisés a Cristo.

Kraus en su libro Dispensationalism in America (Dispensacionalismo

en América) discute en longitud la cuestión de si el Dispensacionalismo enseña
que hay diferentes formas de salvación en diferentes dispensaciones (op. Cit, pp.
117 ff.). Después citando a un dispensacionalista negante de la creencia de
diferentes modos de salvación, Kraus dice que uno no puede escapar a la
conclusión que las notas explicativas de Scofield merece la crítica de que él es
ambiguo en este punto. La ambigüedad se origina de su falta de claridad
concerniente a la fe para la salvación (p. 118). Kraus concluye: “Su tratamiento
completo (de Scofield) carece de sistema y no sigue sus declaraciones para su
conclusión lógica. Como esto se mantiene, es difícil ver cómo los defensores de
Scofield pueden esperar su negación del cargo de que él enseña más que un modo
de salvación que debe ser tomado seriamente” (p. 120).

Bass en su libro Backgrounds to Dispensationalism de igual manera

lucha con la paradoja entre la antítesis Dispensacionalista entre la ley y la gracia
y la negación de que nunca había más que un modo de salvación (pp. 33 ff.).
Después de declarar de que la distinción Dispensacionalista entre la ley y la
gracia “implica que hay dos principios bajo los cuales el hombre ha sido salvado
– la ley y la gracia”, Bass agrega que todos los Dispensacionalistas niegan
vigorosamente esta idea. Entonces él comenta: “Sin embargo, estas afirmaciones
desde un principio único de la salvación simplemente contradice las ideas básicas
del sistema. Sus protestas al contrario, el Dispensacionalismo ha construido un
sistema en que la ley y la gracia trabajan el uno contra el otro, no conjuntamente”
(p. 35). Él también dice que el Dispensacionalismo implica y contiene “no
solamente una inherente base múltiple de la salvación en el pasado, sino que
también en el futuro”. Esto está involucrado en la distinción Dispensacionalista
entre el Evangelio de la Gracia, que está siendo predicado ahora, y el así llamado
Evangelio del Reino, que será predicado después del rapto de los santos de la
tierra. Bass luego continúa: “Una comprensión minuciosa debe ser alcanzada en
este punto. Los Dispensacionalistas insisten que no hay una base múltiple de
salvación en su sistema. No obstante, es legítimo preguntar si su propio sistema
de interpretación no protesta fuertemente contra ellos. Si uno fuera a tomar
seriamente las dicotomías involucradas aquí – Israel-Iglesia, iglesia-reino,
evangelio del reino-evangelio de la gracia, etc., - ¿no concluiría, a pesar de
protestar lo contrario, que la base múltiple es inevitable para uno que orienta su
teología en este sistema”? (p. 36).

4. La Fuerte Antítesis entre Israel y la Iglesia. Es considerado

axiomático por los Dispensacionalistas que “Israel es Israel; la Iglesia es la
Iglesia”. Esto es formulado como una antítesis muy fuerte. La teología
Reformada del pacto mantiene la unidad y continuidad espiritual de la Iglesia
con el Israel del Antiguo Testamento; el Dispensacionalismo los establece
fuertemente uno contra el otro en una relación antitética.

Puede ser preguntado, ¿Cuál es el daño en una antítesis entre Israel y la

Iglesia? La respuesta es: un daño muy grande. La respuesta dada a este problema
afecta toda nuestra interpretación de la Biblia. ¿Cuál es, encima de todo, el tema
o asunto de la Santa Escritura? La teología del pacto responde: El tema o asunto
sobre todo de la Escritura es la revelación y la implementación del propósito
gracioso de Dios de redimir al elegido para la gloria eterna. El tema dominante
de la Escritura, entonces, es la gracia de Dios hacia el elegido. Subordinado a
esto está la historia de Israel, que es relatada para la salvación del elegido como
un medio para un fin. En la teología del pacto, Israel es importante, y el Antiguo
Testamento es importante, porque preparan el camino para la venida del Mesías,
Jesucristo. En otras palabras, Israel es importante como esencial para el origen
del Cristianismo. Pero en el Dispensacionalismo, Israel es importante en sí (para
su propio bien).

El Dispensacionalismo mantiene que el tema encima de todo de la

Escritura es los tratos de Dios con Israel. Subordinado a esto está la Iglesia
Cristiana, que está intercalada como en un paréntesis en los tratos de Dios con
Israel. Es mantenido que la Iglesia es un “misterio” entre paréntesis – que no fue
predicha por los profetas del Antiguo Testamento, sino que fue establecida
cunado Israel rechazó el reino terrenal que fue ofrecido por Jesucristo. Es
declarado que cuando Israel rechazó a su Mesías, el reloj de la profecía paró de
marcar y no ha marcado desde entonces. Pero cuando la Iglesia es raptada del
mundo, entonces el reloj del cumplimiento profético empezará a marcar otra vez,
y Dios reanudará su programa de trato interrumpido con Israel. La Iglesia se irá,
no habrá un solo cristiano nacido de nuevo dejado en todo el mundo, y el poder
del Espíritu Santo también será eliminado. Pero los cristianos nominales serán
dejados atrás aceptarán a Cristo y comenzarán a predicar el “Evangelio del
Reino” y esto resultará en el avivamiento más grande de toda la historia – las
personas serán convertidas en grandes números por la predicación del Evangelio
del Reino. Estas personas serán llamadas “santos de la tribulación” y no serán
miembros de la iglesia en absoluto.

Así el Dispensacionalismo hace del Cristianismo y de la Iglesia

Cristiana, un interludio o un paréntesis en el vasto y profundo programa de los
tratos de Dios con Israel. La Iglesia no existió en los tiempos del Antiguo
Testamento, y no existirá en la tierra después del rapto, al menos hasta que el
Milenio empiece. Esto es conocido como la visión de aplazamiento del Reino.
El Reino fue ofrecido a los judíos, rechazado por ellos, entonces la Iglesia fue
insertada por un periodo de tiempo (la Dispensación de la Gracia), para llamar
para el Señor un pueblo de los gentiles. Después de que la Iglesia es removida
de la escena, el Reino realmente será establecido en la tierra.

5. Escatología. En el asunto de la escatología el Dispensacionalismo

mantiene una visión en minoría muy especializada. La escatología cristiana
(excluyendo las visiones naturalistas y visiones) puede ser dividida en la visión
Posmilenial, Amilenial y Premilenial. De estos, el Dispensacionalismo escoge la
tercera. El Premilenialismo a su vez está dividida en la visión Historicista y
Futurista de la interpretación de la profecía, especialmente el Libro de
Apocalipsis. El Dispensacionalismo escoge la visión Futurista. La visión
futurista además está divida en una visión Tribulacionista y una visión Pre-
Tribulacionista, es decir, que está dividida en aquellos quienes mantienen que la
Iglesia existirá en la tierra durante la Gran Tribulación justo anterior al Milenio,
y aquellos quienes mantienen que la Iglesia será raptada (cogida) fuera del
mundo antes de la Gran Tribulación. El Dispensacionalismo escoge la visión
Pre-Tribulacionista. Pero el Pre-Tribulacionismo mismo existe en dos formas
alternativas – aquellos quienes creen en la visión ordinaria o tradicional del reino
futuro, y aquellos quienes mantienen la Visión de Aplazamiento del Milenio o
Reino futuro. El Dispensacionalismo escoge el último. Así se mantiene una
visión que muchos Premilenialistas no mantienen – sin mencionar a los
Posmilenialistas y Amilenialistas.

Es mantenido que el Rapto puede ocurrir en cualquier momento y que

será secreto en lo que respecta al mundo. Esto será seguido por un periodo de 7
años que es dicho de que es las 70 semanas de la profecía de Daniel. Durante la
primera parte de este periodo, muchos serán convertidos por la predicación del
“Evangelio del Reino”. El Anticristo o el Hombre de Pecado está en poder y hace
un acuerdo con los judíos, quienes han reconstruido el templo de Jerusalén pero
no han aceptado a Cristo. Después de los tres años y medio el Anticristo rompe
este pacto y demanda honores divinos para sí mismo. La persecución ocupa el
segundo de los tres años y medio y llega a ser cada vez más amarga. Al final del
segundo tres años y medio, así como el Anticristo parece haber alcanzado su
objetivo de exterminar a los santos, Cristo aparece otra vez visiblemente con
poder fuerte. Él derrota y destruye al Anticristo, entonces establece el Reino
Milenial. Hay dos resurrecciones, uno de los salvos, al principio del milenio, y
un segundo, del réprobo o malvado, al final del Milenio. El Milenio o será de
1000 años literales, o de otro modo un largo periodo de tiempo en que Cristo
reinará físicamente y visiblemente en la tierra. Durante este periodo habrá tres
tipos de personas en la tierra: (1) los santos resucitados; (2) las personas santas
o piadosas del Milenio quienes todavía no han muerto; y (3) las personas
malvadas quienes todavía no han muerto, pero que son mantenidos bajo control
por el poder de Cristo.

Este Milenio, o Reino de 1000 años, de acuerdo al Dispensacionalismo,

tiene un carácter fuertemente judío. Es el Reino restaurado para Israel. Los
judíos, o en cuerpos naturales o de resurrección, tendrán los lugares de influencia
y tendrán renombre en este Reino.

El Milenio es la Dispensación del Reino. En consecuencia, es el último

de las siete dispensaciones en las cuales Dios es dicho que prueba a la humanidad
con respecto a alguna revelación específica de la voluntad divina. En el Milenio
el hombre será probado como para si él desea obedecer a Dios bajo las
condiciones ideales o ideales cercanos. El resultado, como es usual, es el fracaso
del hombre. Por el tiempo del Milenio el pecado y el mal no serán eliminados
del mundo, sino solamente suprimidas por la fuerza. Al final del Milenio la más
grande de todas las rebeliones contra Dios estallará – el ataque de Gog y Magog,
quienes son capaces de levantar fuerzas militares tan numerosas “como la arena
del mar” y atacar el campamento de los santos, y la ciudad amada”. Así como
ellos parecen ganar su victoria, fuego viene de Dios y los destruye
absolutamente. Esto es seguido por el Juicio del Gran Trono Blanco, después del
cual viene el estado eterno.

Será visto que este esquema es bastante complicado. Esto no necesita ser
una objeción al esquema de si esto puede ser demostrado para ser verdadero.
Pero es evidente que la estructura tiene muchos puntos débiles. En un cierto
sentido, esta es una disputa entre Premilenialistas, pero es interesante para
nosotros notar que se seguirá. La idea de Aplazamiento del Reino, el Rapto
Secreto y el Pretribulacionismo son fuertemente opuestos por muchos
Premilenialistas. De hecho, hay cristianos premileniales quienes casi no
sostienen nada de toda esta estructura excepto la idea de que la segunda venida
de Cristo será seguida por un prolongado Reino de condiciones de ideales
cercanos antes del fin del mundo. El Premilenialismo más antiguo, de eruditos
como Bengel y Alford, no sostuvieron estas ideas Dispensacionalistas. Es el
carácter judío de la Dispensación del Reino así como es mantenida por los
Dispensacionalistas que lo hace tan nocivamente erróneo desde el punto de
visión del cristiano tradicional.

Resumen de las Tendencias Dañinas en el Dispensacionalismo

Moderno
1. El Dispensacionalismo tergiversa el significado verdadero de la
historia de Israel y, por lo tanto, de la Biblia como un todo. Da una respuesta
equivocada a la pregunta: ¿Cuál es el tema o asunto sobre todo de la Santa
Escritura?

2. El Dispensacionalismo compartimenta la Biblia al mantener que

ciertas porciones son “judías” y otras ciertas porciones son “para la Iglesia”. La
verdad es, por supuesto, que toda la Biblia forma una unidad orgánica y el todo
de ella es para todo el pueblo de Dios, aunque no todos los mandos o instituciones
son directamente aplicables para todas las personas ni en todos los periodos.

3. El Dispensacionalismo minimiza la importancia de la Iglesia Cristiana

al limitarla a la Dispensación de la Gracia, desde Cristo hasta el Rapto.
 4. Por su fuerte antítesis entre la ley y la gracia el Dispensacionalismo
incurre en el peligro de un intervalo al Antinominianismo, y algunos cristianos
han caído así bajo su influencia, excusando serias faltas morales por el alegato
de que ellos no están bajo la ley sino bajo la gracia. (Los escritores reconocidos
Dispensacionalistas no podrían condenar tales recaídas morales, por supuesto).

5. Por su enseñanza ambigua y desconcertante acerca del modo de

salvación en otras Dispensaciones que en aquella de la gracia, el
Dispensacionalismo arroja descrédito a la cruz de Cristo, al limitar su eficacia a
la Dispensación de la Gracia. (Este es un cargo que será negado con indignación
por todos los Dispensacionalistas, sin embargo, el carácter desconcertante,
incierto y ambiguo de su enseñanza sobre el modo de la salvación en el periodo
del Antiguo Testamento permanece sin ser aclarada en sus obras y documentos
reconocidos).

6. Por la publicidad y promoción engañosa y no ética de la Biblia de

Scofield y de la Biblia del Peregrino, el Dispensacionalismo trae el reproche de
la deshonestidad sobre el Cristianismo.

7. Por su esquema muy especializado y discutible de escatología, con el

carácter fuertemente judío que está unida a esta, el Dispensacionalismo conduce
a muchos cristianos no informados a visiones falsas y espiritualmente dañinas de
la profecía Bíblica.

8. Su Teoría de Aplazamiento del Reino implica que Cristo no es Rey

hoy, lo cual de hecho deshonra a Cristo e ignora el hecho de que Él fue
entronizado como el Rey de Gloria en Su ascensión cuarenta días después de que
Él fue crucificado.