“Simón Rodríguez” Vicerrectorado Académico Dirección de Pregrado Núcleo Barquisimeto
Mediciones del Desarrollo Humano.
Carrera: Educación en Orientación.
Cátedra: Desarrollo Humano Sección: 101. Participantes: María José Suárez. CI: v-30.591.480. Facilitadora: Andrea Benítez El desarrollo humano es un proceso, el cual permite que se amplíen las oportunidades de las personas para así obtener una mejor calidad de vida. Los organismos Internacionales como el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) intentan medir los niveles de desarrollo humano en los países del mundo, utilizando otros indicadores que no sean la balanza comercial, el desempleo o el PBI, pero esto resulta complicado ya que no se tiene la información suficiente de cada país, de este modo se aclara que el desarrollo humano no es lo mismo que crecimiento económico. El índice para llevar a cabo la medición del Desarrollo Humano (IDH) fue publicado en el año 1990 y aún están vigentes, este se trata de un indicador social estadístico el cuál se compone por tres parámetros: vida larga y saludable, la educación y nivel de vida digno. Esta es una medida comparativa de la esperanza de vida, la alfabetización, la educación y el nivel de vida, correspondiente a países de todo el mundo y se utiliza para distinguir el nivel de desarrollo de un país ya sea muy alto, alto, medio o bajo, y también para medir el impacto de las políticas económicas sobre la calidad de vida. Para profundizar acerca de los indicadores del desarrollo humano (IDH) primero debemos saber para que funcionan, estos se pueden definir como una medida sinóptica del mismo desarrollo con los cuales se miden los adelantos medios de un país, mediante los 3 parámetros que fueron anteriormente mencionados. En cuanto al indicador de “Una vida larga y saludable” se refiere a la esperanza de vida la cual refleja una existencia de muchos años y sin enfermedades. El indicador de Educación se basa en los conocimientos de la población, estos son medidos por la tasa de alfabetización de adultos y la combinación de las tasas brutas de matriculación primaria, secundaria y terciaria, y el indicador de una vida digna se refiere al derecho a un nivel de vida adecuado, incluyendo el acceso en condiciones de igualdad (alimentación, salud, vivienda, agua, educación, trabajo, entre otras.) Además de los IDH explicados existen otros en el cual se puede medir el desarrollo humano de un país. Entre esos está el Índice de Adelanto Tecnológico, se trata de reflejar en qué medida un país está creando y difundiendo la tecnología y construyendo una base de conocimientos humanos y, por ende, su capacidad para tomar parte en las innovaciones tecnológicas de la era de las redes, este índice mide los logros más no mide las posibilidades, los esfuerzos o las contribuciones, no es un índice para precisar qué país está a la cabeza del desarrollo de la tecnología en el mundo, sino para determinar en qué medida participa el país en su conjunto en la creación y uso de la tecnología. Otro índice importante es el de la salud, sus índices se basan en mediaciones que resumen las observaciones de individuos en cada grupo observado, es decir, este se encarga de medir la salud en la población. El Índice Demográfico es un conjunto de datos que vinculan el tamaño y crecimiento poblacional con la dinámica de los componentes que intervienen como fecundidad, mortalidad y migraciones, así como los efectos en su composición es decir por sexo, edad, lugar de nacimiento y situación conyugal, y también los hogares, por ello es un indicador muy útil para el desarrollo humano. El índice de alimentación observa la nutrición humana en el mundo en desarrollo, estudia los problemas nutricionales más importantes de los países en desarrollo y sugiere programas y políticas apropiados para su solución, suministra información científica sobre los alimentos, los nutrientes, las causas de la malnutrición, y los desórdenes nutricionales y su prevención. Mariposa Ahora daremos lugar para hablar acerca del Índice de desigualdad en la salud maternal-infantil. Globalmente, todos los países han mejorado sus índices de desarrollo humano (IDH) desde 1990 hasta el 2014. Este hecho tiene una repercusión positiva sobre la salud materna, sin embargo el IDH no diferencia entre mujeres y hombres, por ello, en términos de salud materna, es importante considerar un indicador que dentro del análisis del desarrollo humano, permita identificar las diferencias de género. Esto es necesario en un continente donde las desigualdades entre hombres y mujeres aún son importantes y repercuten de manera negativa en su calidad de vida y potencial de desarrollo. El índice de desigualdad de género (IDG) es un indicador de la desigualdad que intenta demostrar la pérdida de desarrollo humano potencial debida a la disparidad entre los logros alcanzados por hombres y mujeres en dos dimensiones. Además, trata de reflejar la posición de un país con respecto a los ideales normativos relacionados con la dimensión fundamental de la salud de las mujeres. Uno de los índices más importante es el de la educación, este como se puede observar al principio es uno de los tres parámetros en el se miden los logros académicos relativos de una nación, esto se hace en base al nivel de la alfabetización de las personas y de igual forma del nivel de analfabetismo en los ciudadanos. Entre las mediciones del desarrollo humano se encuentra el índice de igualdad o desigualdad económica, la desigualdad económica consiste en un reparto desequilibrado de riquezas y de rentas económicas entre los miembros o grupos de una comunidad, la desigualdad económica se traduce en una disponibilidad de recursos económicos muy dispar entre los individuos de la sociedad, lo contrario de la igualdad que significa que todos los ciudadanos tienen que tener igualdad de condiciones. Con un reparto de riquezas tan discrepante, cada vez es mayor la brecha entre individuos ricos y pobres, y las oportunidades de unos y otros. Además de este, también existe el índice de la felicidad, este toma en cuenta muchos factores tales como: los ingresos, la libertad, la confianza en el gobierno, la esperanza de vida saludable, el apoyo social y la generosidad, para llevar a cabo el indicador se elabora un ranking con 150 países. En la actualidad debido al cambio que se ha visto en el mundo por la pandemia este indicador es mucho más relevante que años anteriores. Por ultimo hablaré sobre la energía y el medio ambiente y cómo actúan siendo indicadores en el desarrollo humano, la energía y el medio ambiente son indispensable para el desarrollo, la demanda de los recursos ambientales más importantes como el agua, los alimentos o el combustible ha crecido significativamente gracias al aumento de la población y el aumento de la taza de consumo en el mundo, por esto el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo ayuda a 135 países en desarrollo promoviendo así los esfuerzos para disminuir los niveles de pobreza.
Conociendo esto, hablaré de cómo ha evolucionado el desarrollo
humano con el paso de los años enfocándonos en el cambio democrático ocurrido en América Latina. La democracia es un sistema que permite organizar un conjunto de individuos, en el cual el poder no radica en una sola persona sino que se distribuye entre todos los ciudadanos, por esto, las decisiones se toman según la opinión de la mayoría de personas. Los procesos de democratización en Latinoamérica empiezan históricamente a partir de los años 80, donde se llevan a cabo transiciones correspondientes al paso del régimen autoritario al democrático. Los países latinoamericanos históricamente se constituían desde 3 matrices sociales de producción económica como: la plantación con trabajo esclavista, la hacienda con trabajo semiservil y la estancia con trabajo asalariado. La invocación a la democracia realizada por los Estados Unidos durante la Guerra Fría se convierte en América Latina, en una política de apoyo a dictaduras de las fuerzas armadas, basadas ideológicamente en la Doctrina de Seguridad Nacional, según esto, los militares latinoamericanos tenían por misión combatir a los enemigos internos que actuaban dentro de las respectivas fronteras nacionales, dejando la lucha contra el enemigo exterior, es decir el bloque de la Unión Soviética y China Popular. A diferencia de las tradicionales dictaduras, las nuevas dictaduras eran el resultado de decisiones de las Fuerzas Armadas, como institución, de tomar por asalto el Estado, desplazar el poder civil y gobernar apelando a mecanismos de selección de los gobernantes decididos y ejercidos por las jerarquías militares. La primera de ellas se da en Brasil, le sigue la “Revolución Argentina”, en los años setenta, la estrategia se aplica en Bolivia, en Chile, en Uruguay, y otra vez en Argentina, en la primera mitad de los años ochenta, esas dictaduras comienzan a ceder. Varios factores se asocian para jaquearlas, entre ellos la crisis financiera de la deuda externa y la pérdida del miedo de la gente. Una de la acciones de las democracias latinoamericanas actuales es ejercida por la corrupción, pero lo novedoso de la década de 1990 es la expansión y la mayor visibilidad de la corrupción estructura, a esta situación se le suma a un contexto que expone las democracias latinoamericanas. Con esto se concluye que desde una perspectiva institucional, la apariencia muestra desde 1980 una consolidación de la democracia, pero esta siendo sólo una formalidad: hay elecciones periódicas, en muchos casos limpias y transparentes, también se ven casos de fraudes y de alternaciones de partidos en el ejercicio del gobierno y aunque la división de poderes está estatuida en todos los países, no es necesariamente respetada.