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República Bolivariana de 

Venezuela 
Ministerio del Poder Popular para la Educación 
Universidad nororiental privada "Gran Mariscal de Ayacucho"
Escuela de Derecho.
Núcleo de Monagas.
 
 
 
 
 

LA DEUDA
 

 
 
Docente:                                                     Alumnos:  
Yosmary Romero                                 Sebastian Cedeño
                                                             Mirvida López 
 
La deuda es un término común utilizado en el mundo financiero para representar la cantidad de
dinero que un individuo, negocio o país debe a otra entidad. El concepto de deuda es
fundamental para una economía, ya que impulsa el crecimiento económico y el desarrollo a
través de las inversiones. Sin embargo, el exceso de deuda puede tener consecuencias
indeseables, como la quiebra, la inflación y una recesión económica. En consecuencia,
comprender los tipos de deudas, sus implicaciones y las estrategias para gestionarlas es
fundamental para los individuos, las empresas y los gobiernos.

Tipos de deuda

La deuda se puede clasificar en dos tipos principales: deuda interna y deuda externa. La deuda
interna se refiere a la cantidad de dinero adeudado por un gobierno a sus ciudadanos, mientras
que la deuda externa se refiere a la cantidad de dinero adeudado por un país a entidades
extranjeras. Además, la deuda también se puede clasificar como garantizada o no garantizada,
dependiendo de si un activo la respalda. La deuda garantizada está respaldada por activos,
mientras que la deuda no garantizada no lo está. Además, la deuda también se puede clasificar
como a corto o largo plazo, dependiendo del plazo de pago.

Deuda interna

La deuda interna se refiere al dinero que un gobierno debe a sus ciudadanos y otras entidades
nacionales. Por lo general, se recauda a través de la venta de valores del gobierno, incluidos los
bonos del Tesoro, los bonos del Tesoro y los bonos. El gobierno depende de la deuda interna
para financiar su déficit presupuestario, proyectos de desarrollo y otros gastos. La deuda interna
es generalmente más manejable que la deuda externa, ya que el gobierno puede controlarla a
través de políticas monetarias y fiscales. Las implicaciones de la deuda interna dependen de la
capacidad del gobierno para prestar su servicio. Si el gobierno no gestiona su deuda interna,
puede conducir a la inflación o a un menor crecimiento económico.

Deuda externa

La deuda externa se refiere al dinero que un país debe a entidades extranjeras. La deuda externa
se puede recaudar a través de instituciones de crédito multilaterales, ayudas bilaterales y
mercados internacionales de capital. Aunque la deuda externa es esencial para el crecimiento
económico, plantea riesgos significativos para la economía, especialmente para los países en
desarrollo. La deuda externa suele denominarse en monedas extranjeras, lo que la hace
susceptible a las fluctuaciones de los tipos de cambio. Además, la deuda externa impone
obligaciones significativas al gobierno, ya que tiene que pagar el capital y los intereses. La
capacidad de un país para pagar su deuda externa depende de su crecimiento económico, su
balanza comercial y la estabilidad del tipo de cambio.

Crisis de la deuda externa

Una crisis de deuda externa es una situación en la que un país no puede pagar sus obligaciones
de deuda externa. La crisis de la deuda externa puede tener varias consecuencias, como la
devaluación de la moneda, la inflación y las medidas de austeridad. La crisis de la deuda externa
a menudo es causada por factores como la alta relación deuda/PIB, el bajo crecimiento
económico, la inestabilidad política y los desequilibrios macroeconómicos. La crisis de la deuda
externa también puede conducir a un incumplimiento soberano, en el que un país no puede
pagar sus obligaciones de deuda externa, lo que lleva a dificultades financieras.
La crisis de la deuda externa se desató oficialmente en 1982, cuando el gobierno mexicano
declaró una moratoria de los pagos de la misma, decisión seguida también por otros países. Pero
el problema se venía gestando desde tiempo atrás, con el incremento de la concesión de créditos
y el consiguiente endeudamiento desde finales de los años 60 y, de forma acelerada, durante los
70. Este crecimiento de los créditos se vio favorecido por el ciclo comercial expansivo de la
economía mundial y la ampliación de los flujos financieros internacionales. Los excedentes de
capitales, entre ellos los “petrodólares” obtenidos por los países árabes, buscaban un destino
donde invertirse, de forma que acabaron yendo a los países del Sur (en especial América Latina)
en forma de préstamos en buenas condiciones, que eran nacionalizados directamente o mediante
avales. El deseo de los acreedores de una salida para sus capitales coincidía con la necesidad de
los países del Tercer Mundo de obtener fondos para invertir en su desarrollo  (industrialización,
infraestructuras, etc.), en un contexto de bonanza económica. Los gastos militares, sobre todo de
los países en conflicto, también han sido otra causa importante de endeudamiento.
Los problemas comenzaron en los 80 con el súbito aumento de las tasas de interés y del valor
del dólar, causados en gran parte por las políticas del gobierno de Reagan, que provocaron un
fuerte incremento del servicio o pago de la deuda, por negociarse ésta normalmente en dólares y
a tipo variable. Esta situación, unida a la recesión económica, el freno de los préstamos
bancarios y la bajada de las rentas de exportación obtenidas por los países del Sur, provocó la
situación de suspensiones de pagos y renegociaciones de la deuda que se prolonga hasta hoy.

Globalización

La globalización se refiere a la integración de economías, culturas y sociedades a través de


intercambios transfronterizos de bienes, servicios e ideas. La globalización tiene aspectos
positivos, como el aumento del crecimiento económico, la creación de empleo y la innovación.
Sin embargo, la globalización también ha llevado a un aumento de la deuda externa,
especialmente para los países en desarrollo. La globalización también ha llevado a un cambio
del endeudamiento interno al endeudamiento externo, ya que el costo del endeudamiento es más
barato en los mercados internacionales de capitales. El cambio del endeudamiento interno al
endeudamiento externo ha aumentado significativamente el riesgo de la crisis de la deuda
externa.

Implicaciones de la deuda y la globalización

La deuda y la globalización tienen implicaciones significativas para una economía, tanto


positiva como negativa. Las implicaciones positivas incluyen el aumento del crecimiento
económico, la creación de empleo y la innovación. Las implicaciones negativas incluyen altos
niveles de deuda, devaluación de la moneda, inflación y una crisis de deuda externa. En
consecuencia, la gestión de la deuda y la globalización es fundamental para garantizar el
crecimiento económico y el desarrollo sostenibles.

La deuda es un aspecto crítico del mundo financiero, pero también plantea riesgos significativos
para una economía. La capacidad de un país para gestionar sus niveles de deuda es esencial para
garantizar el crecimiento económico y el desarrollo sostenibles. La deuda interna y externa y sus
implicaciones dependen de varios factores, como el crecimiento económico, la balanza
comercial y la estabilidad del tipo de cambio. La globalización tiene implicaciones tanto
positivas como negativas en una economía, y la gestión de sus efectos es igualmente crítica. Los
gobiernos deben promulgar políticas monetarias y fiscales sólidas para gestionar tanto la deuda
como la globalización para evitar una crisis de la deuda externa.

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