INSTITUCIÓN EDUCATIVA PARTICULAR PARROQUIAL “MUNDO MEJOR”

Promovida por: congregación de Hermanos Cristianos en el Perú

Área : Desarrollo Personal, Ciudadanía y Cívica Bimestre: II

Grado: 4° Sección: A-R -V-N. Profesora: María Morales
TEMA: Autoestima y relaciones afectivas.

Aprendizaje Esperado: Se relaciona con mujeres y varones con equidad y respeto y explica la
importancia de establecer vínculos afectivos positivos basados en la reciprocidad, el cuidado del otro
y el consentimiento, rechazando toda forma de violencia.

Construcción del conocimiento:

Lee y sombrea lo más saltante que consideres del tema archivándolo en tu portafolio virtual.

La autoestima y relaciones afectivas.

El ser humano es un ser social por naturaleza, debido a esto, necesitamos estar
rodeados de nuestros semejantes, y como decía Maslow, necesitamos sentirnos
apreciados y valorados por nuestros iguales y por personas que sean significativas para
nosotros.
Las relaciones con los demás son fundamentales para formar nuestra autoestima. De
esta manera, sabemos que las buenas relaciones sociales potencian nuestra
autoestima y las personas con buena autoestima, crean, fomentan y se vinculan de
manera sana y satisfactoria. Por ende, es fundamental la autoestima en las relaciones
interpersonales.
La base de las relaciones es el justo amor propio. Los seres humanos tienen derecho de ser felices, de desplegar de manera libre
y responsable sus capacidades para vivir plenamente.
La autoestima y las relaciones son dependientes una de la otra, ya que si mejoramos en un aspecto, podemos ver resultados
positivos en el otro.
Para que el amor propio florezca en un joven se necesita un requerimiento imprescindible que debe estar presente desde la niñez:
que el niño haya sido cuidado y protegido por los padres y la familia. El amor propio tiene su inicio en las miradas de admiración y
felicidad que los padres dan a sus hijos. Éste nace de la atención e importancia que los demás demuestran por las iniciativas de
los jóvenes, aunque sean imperfectas. Nace del aplauso, felicitaciones, palabras de motivación, por el dibujo mal hecho en el
colegio, la nota aprobatoria, nace del esfuerzo con que se premia a los chicos por una buena competencia deportiva, aunque haya
llegado último, nace del reconocimiento al esfuerzo.
Pero El amor propio no es una adquisición definitiva, pues la autoestima se nos puede caer en cualquier momento, y tendremos
inseguridades y sentiremos que no somos apreciados por nadie. La autoestima de un adolescente puede alterarse, por ejemplo,
por los golpes continuos de sus experiencias sexuales como el rechazo, abandono, o que fracase en sus primeras experiencias
sexuales al ser ridiculizado por su compañera del sexo opuesto.
En la actualidad hay muchas personas que no les gusta la persona físicamente, pero les gusta cómo se siente cuando están con
esa persona, y eso es lo mejor que se debe practicar.
Una persona que su autoestima está debilitada es muy poco probable que tenga buenas relaciones afectivas: amigos, pareja
generando el aislamiento con la sociedad.
Las amistades, parejas necesitan del autoestima ya que con esto lo que se puede lograr el desarrollo, la valoración y la buena
orientación.
La buena comunicación y una buena autoestima también conllevan a que no surja la desconfianza y dialogar y resolver los
conflictos, y apoyarse mutuamente mediante proyectos comunes.
"Es sorprendente la cantidad de personas que van por la vida y nunca reconocen que sus sentimientos hacia otras personas
están, en gran parte, determinados por sus sentimientos hacia ellos mismos.
Por eso si no te sientes a gusto contigo mismo, no puedes sentirte a gusto con otros". Sidney J. Harris (Escritor norteamericano).

La autoestima
Es un conjunto de pensamientos, evaluaciones, sentimientos y tendencias de
comportamiento dirigidas hacia nosotros mismos, hacia nuestra manera de ser y de
comportarnos, y hacia los rasgos de nuestro cuerpo y nuestro carácter, es la
conciencia individual de la propia valía del valor de cada uno sobre la propia
naturaleza de ser humano.
La autoestima también es conocida como el amor propio, es la consideración y respeto que tiene toda persona de sí misma; una
persona con una buena autoestima esta consciente de sus virtudes y defectos, también acepta las virtudes de los demás, una
persona con una buena autoestima es alguien que se quiere y valora tal como es.
Una persona con autoestima es segura de sí misma, experimenta confianza básica, siente que vale, que tiene sentido el vivir, es
comunicativa con las personas que la rodean, cree en sus capacidades y habilidades, se ama a sí misma, ama a los demás,
acepta sus limitaciones y las áreas que necesita mejorar, en consecuencia si estos sentimientos los experimentamos hacia
nuestro yo, esto mismo podemos sentirlo y darlo a los demás.
¿Por qué es necesaria la autoestima?
La autoestima es condición para el desarrollo armónico de cada persona, porque solamente partiendo de la propia dignidad
puede impulsar su vida con su desenvolvimiento natural que actualice todas sus virtudes.
La autoestima es una toma de conciencia de la propia realidad, en la que cada uno se da cuenta de lo que es y de lo que puede
dar de sí.
No es autosuficiencia, ni mucho menos una tendencia al orgullo o a la soberbia, de quien cree poderlo todo, temerariamente.
Tampoco es una especie de complejo de superioridad ni de inferioridad.

¿En qué se basa la autoestima?

La autoestima se basa en la verdad sobre uno mismo y en la
sinceridad espontánea de proyectar en el pensamiento y en la
acción lo que es uno mismo. Esta verdad no es otra cosa que el
conocimiento de las propias limitaciones y de los talentos que todos
tenemos para conducirnos por la vida correctamente.
Vista de esta manera la autoestima nos conduce a la humildad.
La humildad es la verdad como aceptación del conocimiento propio.
Pero de ninguna manera, el conocimiento de nuestras limitaciones
nos debe llevar al menosprecio personal, a un encogimiento
injustificado ni a un complejo de inferioridad respecto a los demás.
¿Cómo será, pues, la conducta de quien se autoestima?
La conducta de la persona que tiene autoestima respeta una recta jerarquía de
valores. Por ejemplo, una persona vive dignamente cuando puede brindarse a sí
misma la satisfacción de sus necesidades sin necesidad de suplicar a los demás, de
someterse a designios ajenos o de realizar actos contrarios a su moral para
sobrevivir. También se dice que una persona digna es aquella que honra los
compromisos adquiridos, que no se refugia en la mentira o la evasión para no
enfrentar sus responsabilidades. Una persona indigna por el contrario puede ser
alguien que no se respeta a sí misma o que no respeta a los demás, o ambas cosas.
La dignidad que reconoce a la autoestima lleva a la persona a comprender que su
inteligencia descubre los valores inscritos en la propia naturaleza humana que se
desarrolla a lo largo de la vida.
Asimismo, cada persona es consciente de su dignidad y parte de la autoestima
cuando sabe amar a sus padres y hermanos, a toda su familia, cuando acepta voluntariamente un sacrificio para ayudar a un
amigo o cuando comprende un error ajeno.
Se pierde la autoestima cuando se actúa con inseguridad sin motivo y cuando la persona se deja llevar por pasiones negativas,
como pueden ser el odio, el rencor, el resentimiento, la envidia, el espíritu de revancha, el desaliento o la desesperación.
También es contrario a la autoestima no buscar el apoyo, cuando se necesite, en el compañerismo o en la solidaridad, sino más
bien buscar la compasión y la limosna, bajando al nivel de víctima.

Importancia de la autoestima en nuestras relaciones

Reza un viejo dicho: “Si no te amas a ti mismo no serás capaz de amar a
nadie”. Esto guarda una verdad transparente, porque quienes no se quieren
a sí mismos es dificil relacionarse con los demás ya que estará presente la
inseguridad o timidez extrema que los llevará a vivir de manera aislada, sin
amigos y sin la posibilidad de formar una pareja.
Cada persona se relaciona con las demás a partir de la autoestima que
presenta. Cuando tenemos una autoestima fortalecida, nuestras relación con
los demás suele ser respetuosa y honesta. Ello nos permite entablar
relaciones sociales asertivas en las que predomina el diálogo franco y directo
para expresar y defender nuestros pensamientos y sentimientos.
Por el contrario, cuando nuestra autoestima está debilitada, nos sentimos
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desvalorizados. Este sentimiento determina que nos relacionemos de dos formas diferentes: con timidez o con agresividad. Nos
relacionamos con timidez cuando sentimos temor de que los demás nos desaprueben. Por otro lado, nos relacionamos con
agresividad cuando actuamos con imposición y autoritarismo, lo cual da origen a relaciones destructivas y al aislamiento.
¿Qué es una relación afectiva?
Las relaciones afectivas conforman una dimensión importante en la vida de las personas. Sin embargo no todos se preocupan en
procurar relaciones constructivas, sanas y duraderas.
Las relaciones con los demás son fundamentales para formar nuestra autoestima. De esta manera, sabemos que las buenas
relaciones sociales potencian nuestra autoestima y las personas con buena autoestima, crean, fomentan y se vinculan de manera
sana y satisfactoria.
Una “relación” es la interacción entre individuos en los que se crean vínculos. El “afecto” es un proceso interactivo que involucra a
dos o más personas, están íntimamente ligadas a las emociones y calificamos el afecto por la emoción que nos produce, por
ejemplo cuando se dice “me siento muy tranquilo” es una emoción y es algo que produces para ti mismo, al decir “me da mucha
tranquilidad” es un afecto, que sientes recibir de alguien o de algo externo.
El cuidar, ayudar, apoyar, escuchar, comprender, regalar, permitir, etc., son
demostraciones para una buena relación afectiva, sin embargo para mantenerla se
requiere esfuerzo. Tratar de agradar a otro con nuestras acciones es correcto,
siempre y cuando respetes su libertad y su individualidad.
Qué quiero decir con esto? Por ejemplo en una relación de novios o pareja, en la
cual hay una atracción mutua, con ideas y proyectos similares, buena compañía;
sería un grave error tomar su teléfono celular para leer sus mensajes y saber a
quién con quién ha estado hablando; en frente o a sus espaldas no importa,
finalmente se está violando la libertad del otro.
El hombre y la mujer se deben a sí mismos esta consideración y aprecio natural,
sean cuales fueran sus circunstancias personales.
Autoestima y respeto en las relaciones afectivas.
La base de las relaciones es el justo amor propio. Los seres humanos tienen derecho de ser felices, de desplegar de manera libre
y responsable sus capacidades para vivir plenamente. Esto es autoestima. Reconocer lo que somos y lo que valemos es parte del
crecimiento personal. No es posible convivir ni respetar ni amar a los otros si uno no se ama a sí mismo. Guardando la proporción,
una persona que no reconoce su propio valor acabará por negar la valía de los otros.
Es cierto que el compromiso es un componente de la amistad auténtica, pero no debe llegar al sacrificio; no debe negar nuestro
propio valor. La reciprocidad es necesaria para que exista la amistad.
En la amistad, como en todas las relaciones afectivas debe además existir el respeto. Una buena autoestima permite desarrollar
relaciones sanas, en las cuales el respeto es pieza fundamental. Cualquier relación donde se pierde el respeto es perjudicial para
las personas.
Autoestima, reciprocidad y respeto son las claves del compañerismo, de la amistad y, en general, de cualquier relación afectiva.

Fuente:
https://prezi.com/kilnjlnabfgz/autoestima-y-relaciones-afectivas-en-la-adolecencia/
https://opvceinsaindustrial.doodlekit.com/blog/entry/3830361/3la-autoestima-y-relaciones-
afectivas-en-la-adolecencia
https://www.iepp.es/relaciones-interpersonales-y-autoestima/
https://www.crecimiento-y-bienestar-emocional.com/autoestima-relaciones.html
https://www.iepp.es/relaciones-interpersonales-y-autoestima/
Bibliografía:
Desarrollo Personal, Ciudadanía y Cívica 4° Ed. Santillana
Educación Familiar Mons. Juan Luis Cipriani Thorne Ed. Bruño.
El amor en la adolescencia Fernando Maestre Ed. Santillana
https://venezuela.unfpa.org/sites/default/files/pub-pdf/C5%20Relaciones%20afectivas%20en%20la%20adolescencia.pdf

Cierre: Reflexionamos sobre el tema:

Lograste entender que las relaciones con los demás son fundamentales para formar nuestra autoestima. ¿Te
gustaría mejorar y ampliar tus relaciones?.

ACTIVIDADES
 1. ¿Cómo influye la autoestima en la construcción de relaciones afectivas equilibradas?
2. ¿Qué valores deben estar presentes en las relaciones afectivas entre amigos, pareja?
3. ¿Cómo son nuestras relaciones afectivas cuando tenemos una autoestima fortalecida?
4. ¿Consideras que demuestras tu autoestima en el trato con los demás?
5. Te gustaría poder entender por qué algunas personas muestran un trato “especial” a los demás
6. Si todos mostráramos nuestros afectos positivos resolveríamos conflictos sin dañar a los demás