Santiago, dieciséis de diciembre de dos mil veintiuno.
A los escritos folios N°s 141731-2021 y 166843-2021:
estése a lo que se resolverá.
Vistos:
Se reproduce la sentencia en alzada, con excepción de
los fundamentos séptimo a décimo tercero, que se eliminan.
Y teniendo además presente:
Primero: Que el recurso de protección establecido en
el artículo 20 de la Constitución Política de la República
constituye jurídicamente una acción de carácter cautelar
destinada a amparar el legítimo ejercicio de las garantías
y derechos preexistentes que en esa misma carta magna se
contemplan, mediante la adopción de medidas de resguardo
que se deben tomar ante un acto arbitrario o ilegal que
impida, perturbe o amenace ese ejercicio.
Segundo: Que en la especie se ha ejercido acción de
cautela de garantías constitucionales en contra de la
Subsecretaría de Energía, impugnando la Resolución Exenta
RA N° 115515/130/2020 de 30 de noviembre de 2020, por cuyo
intermedio no se prorrogó su contrata, en circunstancias
que acorde con el texto del acto impugnado, es claro que
los fundamentos en que se basa dicha decisión, mencionan
la necesidad de renovar dicho vínculo, pero con la rebaja
del grado que en la Escala Única de Sueldos corresponde a
las funciones que debe prestar, de manera que de estar
encasillado en un cargo grado 5° debería pasar a otro
situado en el grado 7°, cuestión que torna el acto en
ilegal además de arbitrario, al carecer de motivación dada
la evidente contradicción entre lo resuelto y las
consideraciones tenidas en vista para resolver de aquel
modo, vulnerándose las garantías constitucionales de los
números 2, 16 y 24 del artículo 19 de la Constitución
Política de la República.
Tercero: Que, al informar, el recurrido refiere que a
diferencia de lo que sostiene el recurrente, dicho servidor
no ha sido desvinculado, en vista de que contratado para
la anualidad del año 2021, tal como consta de Resolución
Exenta RA Nº 115515/145/2020 de 17 de diciembre de 2020,
empero, se reencasillaron sus labores asimilándolas a un
cargo del grado 7° fundada en su desempeño deficiente,
agregando que los empleos a contrata carecen de una
posición remuneracional específica.
Cuarto: Que conforme al mérito de los antecedentes
acompañados es posible tener por establecido que el actor
se ha desempeñado como profesional a contrata en la
Subsecretaría de Energía, sin solución de continuidad,
desde el año 2014, asimilado al grado 5° de la Escala Única
de Sueldos, siendo prorrogada en similares condiciones
durante los años 2015 y 2020.
De igual modo, es posible asentar que con fecha 30 de
noviembre de 2020, según se lee Resolución Exenta RA Nº
115515/130/2020, denominada “DECISIÓN DE NO PRORROGAR” la
autoridad recurrida decidió no renovar la contrata del
recurrente para la anualidad siguiente -2021-, al resolver:
“DECIDO NO PRORROGARSE LA DESIGNACION A CONTRATA DE DON
ALBERTO ENRIQUE GONZALEZ ARANEDA, en el cargo profesional
grado 5º Escala Única de Sueldos con jornada de 44 horas
semanales, de la planta de profesionales, a contar del 1
de enero de 2021”. Sin embargo, a pesar del término de la
contratación en cuestión, sus fundamentos redundan sobre
la necesidad de renovar la contratación del actor pero
rebajando el grado al que están asimiladas sus funciones,
puesto que el desempeño de las labores encomendadas fue
deficiente.
Quinto: Que, desde esa perspectiva, tal como se
observa de la Resolución Exenta RA N° 115515/130/2020 de
30 de noviembre de 2020, el sustento fáctico del acto
impugnado en autos a todas luces resulta ser insuficiente,
amén de incongruente, puesto que no permite comprender a
cabalidad las razones que la autoridad administrativa tuvo
en vista para disponer la no renovación de la contrata del
actor, en tanto sus fundamentos se basan en la necesidad
de renovar el vínculo funcionario pero en un grado inferior
al que gozaba.
Sexto: Que llegados a este punto resulta apropiado
subrayar que la motivación constituye uno de los elementos
del acto administrativo, pues a través de ella se
exteriorizan las razones que han llevado a la
Administración a dictarlo, exigencia que se impone en
virtud del principio de legalidad. En efecto, en nuestro
ordenamiento jurídico, la Ley N° 19.880 consagra los
principios de transparencia y publicidad, en cuanto permite
y promueve el conocimiento del contenido y fundamentos de
las decisiones que adopten los órganos de la Administración
del Estado, calidad que precisamente detenta el organismo
demandado. Es así como el artículo 11 inciso segundo del
referido texto legal, previene la obligación de motivar en
el mismo acto administrativo la decisión, mencionando los
hechos y fundamentos de derecho, en el caso que afectaree
los derechos o prerrogativas de las personas. A su turno,
también el artículo 41 inciso cuarto del aludido texto
legal dispone que las “resoluciones contendrán la decisión,
que será fundada”. Proceder que, por lo demás, se hace
enteramente exigible por mandato del artículo 8° de la
Constitución Política de la República.
Séptimo: Que los elementos de juicio expuestos en lo
que precede, dejan en evidencia los problemas de motivación
que afectan al acto recurrido, proceder no se condice con
las exigencias previstas para una resolución como la que
ha sido impugnada, pues la fundamentación del acto
administrativo es un elemento de su esencia, cuya
existencia siempre está bajo el control de la judicatura,
tanto más si se considera que la actuación de la
Administración exige la exposición clara y concreta de
motivos que den sustento y racionalidad a sus actos, en
lugar de otorgarle una mera apariencia de seriedad,
regularidad y razonabilidad.
Octavo: Que, en consecuencia, por carecer el acto
censurado de todo fundamento que permita entender y que
entregue soporte a la decisión contenida en él, forzoso es
concluir que la Resolución Exenta N° 115515/130/2020 es
ilegal, pues en su emisión no se cumplieron las exigencias
previstas en los artículos 11 y 41 de la Ley N° 19.880,
desde que carece de fundamentos de hecho que expliquen,
verdaderamente, la decisión allí adoptada, pese a que por
su intermedio se afectan los derechos de un particular.
Décimo: Que establecido lo anterior cabe consignar,
asimismo, que la resolución impugnada no sólo constituye
un acto ilegal, sino que además resulta arbitraria, puesto
que la referida ausencia de motivos que justifiquen la
determinación en ella contenida demuestra que ha obedecido
al mero capricho de la autoridad que la expidió.
Undécimo: Que el acto censurado en autos vulnera, en
consecuencia, el derecho de igualdad ante la ley
contemplado en el artículo 19 N° 2 de la Constitución
Política de la República, toda vez que establece un
tratamiento distinto entre los demás funcionarios
dependientes de la Subsecretaría de Energía y el actor,
quien ha visto alterada su situación funcionaria, sin que
se haya hecho valer elementos de juicio que expliquen de
manera suficiente semejante decisión, razón por la que el
recurso de protección debe ser acogido.
Duodécimo: Que, por último, cabe destacar que no
resulta ser óbice a lo concluido, el que con posterioridad
al acto recurrido en autos, la autoridad haya emitido una
resolución diversa, esto es, la Resolución Exenta RA N°
115515/145/2020 de 17 de diciembre de 2020, mediante la
cual se designa a contrata al actor por la anualidad del
año en curso, pero rebajando el grado al que están
asimiladas sus funciones.
Décimo tercero: Que, como surge de lo relacionado
precedentemente, a contar del 1 de enero de 2021 el
recurrente desarrollará labores como profesional
asimiladas a un cargo grado 7°, basado únicamente en el
mal desempeño demostrado en la ejecución de sus funciones,
desconociéndose las funciones asignadas al actor con
antelación a la adopción de dicha decisión, así como la
eventualidad de una nueva asignación de labores, concretada
a contar del 1 de enero del año en curso.
Así pues, el encasillamiento de su empleo en un grado
inferior de la escala respectiva, sin que se evidencien
que las actividades y responsabilidades encomendadas al
recurrente sufrieron alguna alteración, la Subsecretaría
decidió rebajar la calificación remuneracional de su
trabajo, asimilándolo a un cargo del grado 7°. Dicha
determinación se basó, empero y de manera inexplicable, en
el deficiente desarrollo de funciones; en otras palabras,
y no obstante que las circunstancias reinantes al año 2020,
fecha en que se encontraba contratado como profesional de
grado 5°, no habían variado y, más aun, se mantuvieron,
dado que ninguna consideración de la Resolución Exenta RA
N° 115515/145/2020 alude a tal circunstancia, la autoridad
reencasilló sus labores para la anualidad siguiente -año
2021-, asimilándolas a un cargo del grado 7°, cuestión que,
al igual que en el caso del acto impugnado en estos autos,
le torna carente de motivación.
Por estas consideraciones y de conformidad,
igualmente, con lo previsto en el artículo 20 de la
Constitución Política de la República y el Auto Acordado
de esta Corte sobre la materia, se revoca la sentencia
apelada de veintidós de marzo de dos mil veintiuno, dictada
por la Corte de Apelaciones de Copiapó y, en su lugar, se
declara que se acoge el recurso de protección deducido por
don Alberto Enrique González Araneda, en contra de la
Subsecretaría de Energía, por lo que se deja sin efecto la
Resolución Exenta RA N° 115515/130/2020 de 30 de noviembre
de 2020, debiendo mantener al actor en sus funciones,
encasillado en un cargo grado 5° y procederse al pago de
las diferencias de las remuneraciones devengadas en razón
del cambio de grado.
Regístrese y devuélvase.
Redacción a cargo de la Ministra señora Vivanco.
Rol Nº 25.408-2021.
Pronunciado por la Tercera Sala de esta Corte Suprema
integrada por los Ministros (as) Sr. Sergio Muñoz G., Sra. Ángela Vivanco M., Sra. Adelita Ravanales A., Sr. Mario Carroza E. y por el Abogado Integrante Sr. Pedro Águila Y. No firma, no obstante haber concurrido al acuerdo de la causa, el Ministro Sr. Carroza por estar con permiso.