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Los beneficios de la lectura

Leer favorece la concentración y la empatía, alimenta la imaginación, modifica el


cerebro, nos hace progresar y nos prepara para el éxito. Es un bonito pasatiempo
para muchos y una obligación para otros, pero lo que sí es seguro es que leer es
un beneficioso ejercicio mental para cualquier persona. Ayuda a favorecer la
concentración y la empatía, prevenir la degeneración cognitiva y hasta predecir el
éxito profesional, estos son sólo algunos de los muchos beneficios que nos da la
lectura.
La lectura se presentó y quedo guardada en la historia con los primeros
jeroglíficos esculpidos en piedra a la de la tinta de los pergaminos, o a la lectura
digital, el hábito lector ha discurrido de la mano de la historia de la humanidad y
nos ha ayudado a avanzar socialmente, los primeros que leyeron con avidez
fueron los griegos, aunque principalmente los esclavos cuando leían en voz alta
los textos a sus amos.
Ejercitar la mente mediante la lectura favorece la concentración, y nos ayuda a
agilizarnos, ya que leer es el único medio de ejercicio para nuestro cerebro
La actividad de leer, que el cerebro lleva a cabo con tanta naturalidad, tiene
repercusiones en el desarrollo intelectual. “La capacidad lectora modifica el
cerebro”, afirma el neurólogo Stanislas Dehaene. La lectura además de alimentar
la imaginación, favorece la concentración, y ayuda a mejorar algunas habilidades
sociales, como la empatía.
Pero no sólo es más empático quien lee, sino también mejor orador, ya que
gracias a el ayudamos a enriquecer el vocabulario, mejorar la sintaxis y la
gramática; así aprendemos a hablar adecuada y justamente. Hacer un correcto
uso del lenguaje está bien valorado socialmente, por ello, quienes nutren su
dialéctica mediante el hábito lector son percibidos por los otros como personas
con gran capacidad de liderazgo.
El efecto contagio
Las lecturas obligatorias a las que se somete a los más pequeños son
contraproducentes, cada uno debería encontrar su camino y saber qué quiere leer,
qué tipo de narración es la más adecuada para él, así como es el mejor truco para
incentivar la lectura es expandir la curiosidad desbocada, la pasión por descubrir
mundos, por conocer personajes, hechos e historias.
De tabla en tabla
Los primeros escritos se recogieron en vasijas o placas de arcilla. Los moldes
húmedos de arcilla se grababan con la punta de una caña hueca y luego se
dejaban secar
° Tablas de madera, de cera, papiro, pergamino, papel, etc

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