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Adam Smith (1723-1790)

Pablo Fucci

Marco histórico
El período histórico en el cual Adam Smith desarrolla su obra es el de los inicios de la Primera
Revolución Industrial cuyos principales inventos (la máquina de hilar, la máquina de cardar y el cronómetro)
produjeron un gran desarrollo de la industria textil en Inglaterra, que por entonces era la potencia hegemónica
de la economía mundial.

Estos cambios hicieron que una de las discusiones más importantes de esos años girara en torno a
cómo era posible aumentar el rendimiento en la producción, a través de la parcelación de las tareas necesarias
en el proceso productivo.

Corresponde a Smith el mérito de haber introducido con claridad en la ciencia económica el concepto
de división del trabajo.

Su principal obra, “La Riqueza de las Naciones”, es publicada por primera vez en el año 1776, en el
cual se producen dos hechos muy importantes: 1) La independencia de EE.UU., hasta entonces la principal
colonia de Inglaterra; 2) La creación del Virreinato del Río de la Plata que acentúa la decadencia del imperio
español y que abre la posibilidad de nuevos mercados para Gran Bretaña al introducir el libre comercio,
eliminándose las trabas monopólicas que hasta entonces imponía España.

Sin embargo, si tuviéramos que marcar los hechos históricos más salientes de la época deberíamos
mencionar la Revolución Industrial que se produce en Europa y no podemos de ninguna manera obviar que la
obra de Smith se publica antes de la Revolución Francesa de 1789. Esto nos va a servir como un referente
histórico muy importante para entender las diferencias entre Smith y Ricardo.

Conceptos Fundamentales
1) Orden natural

La idea de la existencia de un “orden natural” establecido por Dios para el bienestar de todos los
hombres, es introducida en la Economía Política por los fisiócratas.

Smith también va a hacer hincapié en el hecho que ese orden natural no va a pervertirse si se eliminan
las trabas que impidan ejercer libremente las tareas laborales, los oficios y el comercio entre individuos y
naciones.

El punto de divergencia viene dado por el hecho que los fisiócratas sostenían que los agricultores
constituían el único sector social que producía un excedente económico, mientras que para Smith “es el
acervo que se emplea en la búsqueda de ganancias, lo que pone en movimiento la mayor parte del trabajo útil
de la sociedad”, y dicho acervo lo posee el empresario.

Pero lo que prima es la coincidencia en que el orden natural NO debe ser modificado. Tanto para los
fisiócratas como para Smith el sistema capitalista responde a un orden natural.

2) División del trabajo

La primera distinción que debemos tener en claro es que la división del trabajo puede desdoblarse en
División Histórica del Trabajo y División Técnica del Trabajo.

La división histórica del trabajo existió y existe en toda sociedad, ya que la especie humana se
desarrolla en forma desigual y combinada. Desigual porque algunos individuos poseen una mayor habilidad
manual en relación a otros que se destacan por su desarrollo intelectual. Combinada porque de la unión de
esas aptitudes (manuales e intelectuales) es posible aumentar el rendimiento en la producción.

El concepto que introduce Smith es en realidad División Técnica del Trabajo, es decir cómo mejor
aprovechar las distintas cualidades de los hombres en un proceso productivo para mejorar en cantidad y
calidad la producción.

La división del trabajo es la parcelación de las tareas necesarias para la producción de un bien –para
Smith es la consecuencia directa de la propensión a cambiar que tiene la naturaleza humana–. Esto lo
demuestra en su ejemplo de la producción de alfileres en donde la parcelación de las tareas productivas lleva
a un aumento de la productividad y esta es la causa del incremento de la riqueza de las naciones.

3) Leyes del mercado

Podemos sintetizar las proposiciones de Adam Smith en tres cuestiones:

A) La forma natural de un mercado es la competencia perfecta con equilibrio estable. Para las situaciones de
desequilibrio el buen funcionamiento de las leyes del mercado hace que se retorne al equilibrio inicial en
forma automática.

B) En este contexto el fabricante se ve obligado a ser lo más eficiente posible en materia de costos de
producción manteniéndolos en un nivel bajo para de esa forma poder sobrevivir en condiciones competitivas.
También está obligado a fijar un precio no muy lejano al costo de producción, porque de lo contrario no
podrá competir con otros empresarios que fijen precios más bajos para un idéntico producto.

C) Existe una “mano invisible” que hace que el interés particular redunde en el interés general de la sociedad.
Sobre esta “mano invisible” mucho se ha escrito polemizado aunque la interpretación más usual que se hace
del pensamiento de Smith es que la libre concurrencia entre numerosos compradores y vendedores en un
mercado competitivo es beneficiosa tanto para el individuo como para la sociedad en su conjunto.

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