Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El siglo XVIII, fue el siglo de las revoluciones, las cuales ocasionaron cambios fundamentales en la cultura
de Occidente. La revolución Francesa (1789-1799) y la Revolución Industrial.
Inglaterra fue la cuna de la Revolución Industrial, la cual introdujo transformaciones que afectaron
profundamente la vida del hombre en todas las esferas posibles, cambiando la cultura mundial e
introduciendo la necesidad de integrar diversas tecnologías.
Siglo XVIII: Siglo de las luces / iluminismo. Hijo del renacimiento, individualismo, libertad de pensamiento,
libertad de investigación, la vuelta al humanismo.
Revolución científica:
La nueva astronomía lleva a la desaparición de la concepción del mundo como un todo finito, cerrado y
jerárquicamente ordenado, se ve sustituido por un universo indefinido, infinito.
Organización política:
Surge el nacionalismo, es decir el movimiento que plasman los estados bajo la idea de que cada uno de
ellos es la encarnación de una nación.
El individualismo liberal, según el cual cada hombre es una entidad cerrada sobre si mismo
Nacionalismo e individualismo moderno, coinciden con la necesidad de concretar un proyecto político de
alcance universal, según el cual, el desarrollo de la racionalidad, conlleva el proceso y la homogeneidad
de los hombres, los que serán unificadas en una misma civilización.
El absolutismo, que se inicia a principios del siglo XVII. Da paso a la cultura moderna a través de un
largo periodo de crisis. La revolución francesa, significa el triunfo, es una superación del absolutismo
monárquico.
Cultura:
El iluminismo, amplio movimiento cultural que se expresa en las artes, las letras, en la interpretación
religiosa, en los ideales políticos y sociales. El hombre esencialmente es razón, la concibe ligada a la
experiencia. La razón es un poder de todos los hombres y su resultado más acabado lo constituyen las
ciencias.
La idea de progreso, es el carácter propio de la civilización, la historia humana es un constante
movimiento hacia la mayor perfectibilidad del hombre, un progreso ilimitado e indefinido.
Estas características, hacen que Dios pase a un segundo plano, ahora la reflexión del hombre sobre su
creador debe servir para el esclarecimiento y profundización del mundo, y el mismo, deja de ser el que
abre el conocimiento hacia Dios.
Aumento de la renta agrícola, consecuencia de la ley de cercado de tierras que impulsa el paso de la
tierra del régimen feudal al capital privado (Enclosure Acts)
La multitud de empresarios capaces de sacar partido de las innovaciones técnicas, surgidas de la
investigación científica pura y del elevado grado de especialización
La relativa libertad de la que gozan grupos inconformistas religiosos que se muestran muy activos en la
industria.
El surgimiento de nuevas teorías económicas y políticas que conspiran contra el antiguo régimen
absolutista, y respaldan el nuevo sistema parlamentario.
Liberalismo: (Adam Smith) Nacido con las ideologías democráticas, igualitaria y humanitarias de la
revolución francesa. El punto de apoyo del liberalismo desde el punto de vista económico es la propiedad
privada, y sostiene que toda actividad de intercambio debe desarrollarse sin ninguna interferencia,
siguiendo las leyes del beneficio individual y el libre juego de la oferta y la demanda.
Positivismo: Abandona la búsqueda sobre las causas primeras, dando importancia solo a lo verificable
mediante la experimentación científica. Este hecho sumado al creciente progreso de las ciencias naturales,
produjo un enorme desarrollo tecnológico con la invención de nuevas máquinas capaces de sustituir el
trabajo artesanal y revolucionar los procesos de producción. De este modo el liberalismo se asocia al
industrialismo.
Capitalismo: Sistema económico caracterizado por la propiedad privada de los medios de producción, en
el que el capital detenta una posición dominante, superando a la tierra y al trabajo humano. Según De
Fusco, diversos hechos llevaron al capitalismo.
Al capitalismo se asocian la acumulación de capital, la distribución desigual de la renta y la riqueza, la
importancia del dinero y los mercados financieros, la innovación tecnológica ininterrumpida y el surgimiento
de sociedades multinacionales.
La Revolución Francesa
27 de agosto de 1789 se formularon los ideales de la revolución, sintetizados en 3 principios que produjeron
el cambio de una sociedad aristocrática a una sociedad liberal.
Ferrocarriles y puentes
Una de las principales preocupaciones es la realización de nuevas y eficientes vías de comunicación:
carreteras y canales. Estos cumplen funciones estratégicas y comerciales, vías de transporte para las
materias primas necesarias para la industria y para las mercancías salidas de fábrica.
Las nuevas construcciones viarias requieren gran cantidad de nuevos puentes, estimulando el progreso de
los métodos tradiciones de construcción en madera y piedra, y requiere el empleo de los nuevos materiales
como el hormigón y fundición.
Del diagnóstico y de la terapia de la ciudad, nace por obra de técnicos, legisladores, administrativos,
reformadores y utopistas, la urbanística moderna. Esta puede considerarse generada por tres aspectos
diversos; uno legislativo reformista; otro específico de los utopistas y un tercero que refleja la actitud de los
primeros marxistas.
Siguiendo la vía de las reformas legislativas, se presentan siempre las siguientes fases:
Primero se efectúan encuestas precisas sobre las condiciones higiénicas, sanitarias y residenciales del
patrimonio edificatorio existente.
Segundo se dictan una serie de leyes de salud pública
La tercera fase la refiere a las leyes relativas, a la expropiación de bienes declarados de utilidad pública.
Existen iniciadores de una nueva línea de pensamiento y acción con la que comienza efectivamente una
acción consciente para la reforma del paisaje urbano y rural, y con ello de la arquitectura moderna.
Robert Owen
Es el más importante de los utopistas del siglo. Está convencido de que la industria y la agricultura no
deben quedar separadas y confiadas a distintas categorías de personas. Sostiene que la agricultura debe
constituir la principal ocupación de toda la población inglesa, dejando la industria como apéndice.
Para dar cuerpo a su idea, durante la segunda década del XIX, Owen elabora un modelo de convivencia
ideal, un pueblo para una comunidad restringida de habitantes que trabaje colectivamente en el campo y en
la fábrica y que sea autosuficiente.
El número ideal debe estar comprendido entre 300 y 2000 personas. Se adoptara una plaza amplia en
forma de paralelogramo, en los cuatro lados se colocaran viviendas privadas, y salas de estar para la
población adulta, los dormitorios colectivos para los niños vigilados, los almacenes para las distintas
mercancías, un hotel, etc.
Charles Fourier
Propone una comunidad obrera más cerrada, gobernada por rígidas normas de vida, cuyos dividendos se
repartirían proporcionalmente a la capacidad de trabajo de a cada uno de sus miembros.
En el llamado Falansterio, la vida se organizaba como en un gran hotel, los ancianos se ubicarían en planta
baja, los niños en la primera planta y los adultos en los pisos superiores.
Jean Baptiste Godin
Planea el familisterio, funciona como una ciudad autónoma entre la ciudad y el campo, tiene cuatro pisos o
más con un amplio patio central y además hacen de pasillos para acceder a todas las habitaciones. Es
como un falansterio pero en vez de dividir por edades se vuelve a lo tradicional de dividir por familia.
Etienne Cabet
En 1840 publica la descripción de una ciudad ideal, basada en una organización socialista de la propiedad
y de la producción. La concibe como una gran metrópoli, que reúna la belleza de las ciudades celebres. El
plano será estrictamente geométrico, con calles a 90° y un rio rectilíneo que correrá por el centro.
Violet Le Duc
La aportación francesa al neogótico se centra en la figura de Violet Le Duc. Su conocimiento de la
arquitectura gótica provenía de su experiencia como restaurador. Para el, el medioevo no es la edad oscura
normalmente descripta, es en cambio, un periodo de recursos y de estudios técnicos, de extraordinarias
audacias constructivas, etc.
La arquitectura gótica no es un modelo formal del gusto, ni un ejemplo para la organización ética y social
del trabajo artesanal, ni tampoco un paradigma alternativo a la brutalidad de la moderna producción
industrial.
Violet Le Duc comprarte estos aspectos del gótico, pero para él, importa sobre todo como modelo
constructivo, aun no superado, como la más alta encarnación de los principios constructivos.
Analizando la catedral gótica ve en ella la anticipación de lo que es posible realizar en los tiempos
modernos gracias a la nueva tecnología, especialmente la del hierro.
La hermandad Prerrafaelista
Es un movimiento formado por pintores, poetas y críticos ingleses del siglo XIX, que reaccionaron contra el
arte academicista, produciendo obras cargadas de religiosidad y pasión. El grupo toma el nombre porque
se inspiró en la pintura anterior a Rafael y en el espíritu romántico de la escuela Nazarena, un grupo de
artistas alemanes que se establecieron en roma en 1810 con el fin de restaurar la pureza medieval en el
arte cristiano.
La hermandad prerrafaelista se fundó en 1848, en torno al pintor y poeta Dante G. Rossetti. Pretendía
revitalizar el arte mediante una visión muy simple y positiva. El arte prerrafaelista se distinguió por una
combinación de cualidades arcaicas, románticas y morales.
En literatura, la obra de los prerrafaelistas puede considerarse una fase recurrente dentro del movimiento
romántico. Durante la edad media, coincidieron con el neogótico, liderado por Pugin, que toma al medioevo
como modelo y sostiene que el gótico es el estilo verdaderamente cristiano. Dice que el valor de la
arquitectura está en la expresión de la estructura y no en el enmascaramiento.
Artes Mayores: La pintura, El concepto de artes aplicadas y su separación de las artes mayores, es una
la literatura, la escultura y de las consecuencias de la revolución industrial. Entre el arte y la industria
la arquitectura. se establece una relación unilateral, no un verdadero intercambio de
Artes Aplicadas: Las artes experiencia y la producción se fragmenta en diversos estratos.
aplicadas, a veces también Antiguamente la producción de valor podía distinguirse de la corriente, por la
llamadas artes menores, son excelencia formal y por otras cualidades como la riqueza de diseño, la
aquellas que incorporan los precisión de la ejecución, y los materiales preciosos. Pero la producción
ideales de la composición y industrial hace suyas fácilmente las dos primeras cualidades, la complicación
la creatividad a objetos de del diseño ya no es un obstáculo económico, la precisión del acabado es
uso diario superior a la que se consigue artesanalmente, y los materiales más diversos
pueden imitarse.
De este modo la producción corriente sobrepasa a la de valor, no solo en cantidad, sino que también
desaparecen los factores más evidentes de diferenciación entre ambas producciones, y solo algunos
pueden apreciar el valor artístico puro.
La ciudad jardín
Letshworth, es la primera ciudad jardín que constituye al mismo tiempo la realización de las utopías del
siglo XIX y el documento concreto del nacimiento del urbanismo moderno.
La idea fundamental de la ciudad jardín parte de la comprobación de que es necesario salvar la ciudad y el
campo. Con tal fin de organizan comunidades económicas planificadas para un número determinado de
habitantes, y evitar la expansión de las mismas.
Se trata de ciudades autosuficientes de forma circular abierta por grandes vías de comunicación. Se
conoce como ciudad jardín a un centro urbano caracterizado por tener una vida saludable. Estos espacios
están rodeados de un cinturón vegetal.
El esquema representativo completo de la Ciudad Jardín se planifica alrededor de una ciudad central
comunicada con núcleos de población. En la parte central, se encontrarían los edificios públicos principales
y centros de cultura insertos en una zona de jardines, comercio y almacenes; fuera de éste núcleo se rodea
una zona arborizada y jardines que circunda el ferrocarril y en una extensión concéntrica más alejada de las
vías de transporte, el canal. Alrededor de la ciudad residencial se sitúan las zonas fabriles periféricas,
almacenes, manufacturas y mercados y en el cinturón agrario que rodea a las mismas estarán las zonas
rurales que servirán para auto sustento de alimento a las poblaciones.
Ebenezer Howard
El movimiento de las ciudades jardín, tiene dos fuentes, relacionadas entre sí; Por un lado la tradición de
los utopistas de la primera mitad del XIX, especialmente Owen, que entiende una comunidad perfecta y
autosuficiente, síntesis entre campo y ciudad. Y por otro lado, el concepto de la vivienda unifamiliar con
jardín.
Howard plantea el siguiente razonamiento: La propiedad privada de los terrenos edificables, produce un
valor creciente de los terrenos desde las periferias hasta el centro de las ciudades, en induce a los
propietarios de los terrenos urbanos a una explotación intensiva. Por otra parte, la congestión se extiende
sobre un área cada vez mayor, alejando cada vez más el campo. Si se pudiera eliminar la especulación
privada, los edificios podrían esparcirse en zonas verdes y así se podrían ligar las ventajas de la ciudad (la
vida de relación, los servicios públicos) con las ventajas del campo (zonas verdes, tranquilidad, salubridad).
Nace la idea de ciudad jardín.
El mérito de la obra de Howard radica en haber puesto de manifiesto este problema, además, dejando de
lado la teoría de la autosuficiencia, la ciudad jardín, alcanza el deseo Ruskiano de vivir en un ambiente
físico y más agradable, con mucho verde y el campo a pocos pasos.
Art Nouveau
Vida y cultura de la Belle Epoque
El periodo histórico que abarco desde finales del XIX hasta 1914, ha sido llamado “Belle Epoque”
El creciente progreso y el desarrollo alcanzado por los países europeos, falseo la verdad. La excesiva
confianza en las propias capacidades permitió, a ciertos grupos sociales permanecer indiferentes ante la
gravedad de los riesgos que se corrían. El optimismo y la despreocupación ahogaron la realidad y Europa
avanzaba, hacia la destrucción.
Hacia el fin de este siglo, el avance general fue siempre rápido y múltiple. En las calles resplandecían las
lámparas eléctricas por las noches, los negocios llevaba de las zonas centrales a la periferia su esplendor,
gracias al ferrocarril. Gracias al teléfono ya se comunicaban lugares lejanos, había autos, y la tecnología
seguía avanzando.
Si la arquitectura de la ingeniería había resuelto la relación con la naturaleza aprovechando las cubiertas
transparentes, el Art Nouveau inaugura una relación aún más estrecha, ya que la organicidad de esta
impregna e inspira la propia conformación arquitectónica.
Einfühlung
La estética de Einfühlung, nace del compromiso entre el pensamiento idealista y la investigación
psicológica, para responder a la pregunta de por qué los hombres son atraídos o repelidos por las formas,
tanto del arte como de la naturaleza.
Víctor Horta
Es considerado uno de los primeros que llevó el estilo Art Nouveau a la arquitectura.
Aporto ornamentación original, como también mayor libertad en la distribución en las plantas de viviendas,
creo nuevas técnicas constructivas con materiales como el acero y el vidrio.
Una de sus principales obras, la Casa Tassel se destaca por ser un exponente del estilo Art Nouveau. Es
una construcción simple y lógica, pero que resulta nueva por no expresar una referencia a los estilos
históricos.
La arquitectura de Horta envejece dignamente, se acopla sin esfuerzo al conjunto de construcciones de
Bruselas del siglo XIX. Desea convencer al observador con la coherencia de su arquitectura, no
deslumbrarlo con su extrañeza.
Escocia
Particularmente en Glasgow, se encuentra otro centro de evolución del Art Nouveau. Principalmente visible
en la obra de Mackintosh. Por un lado hereda la tradición del Arts & Crafts, en especial la contribución
arquitectónica de Voysey, y por otro lado elabora una aportación original al nuevo estilo.
Otto Wagner
Afirma la necesidad de una renovación radical de la cultura arquitectónica para ponerla de acuerdo con la
necesidad del presente en el libro Moderne Architektur.
Wagner madura su estilo en contacto con las experiencias de los más jóvenes, y propone una alternativa
coherente al lenguaje tradicional, libre de referencia a los estilos históricos.
Wagner entiende la renovación del lenguaje arquitectónico de forma restringida: no se aparta normalmente
de los esquemas compositivos habituales. No obstante la experiencia de Wagner y sus discípulos no solo
proponen una alternativa coherente a los estilos habituales, sino que ofrecen un método para hacer frente y
transformar a todo el repertorio de formas y hábitos visuales y mentales heredados del pasado.
Joseph Hoffmann
Estudia en la academia con Wagner, se adhiere a la secesión y comienza a trabajar en 1898. El palacio
Stoclet, es su obra más significativa y se trata de una residencia para un rico industrial. La descomposición
del volumen edificado en recuadros, rodeados de listones oscuros, se consigue con un revestimiento de
mármol blanco enmarcado con bandas de bronce. La virtud más destacada es alcanzar la superficie por
medio de la línea.
Se preocupa por la posibilidad de una forma abstracta, interesándose en el cubo y el uso de blanco y negro
como colores dominantes, nunca aparecido en estilos anteriores.
Gracias a él, la tradición de las Arts & Crafts se libera de cualquiera residuo medievalista, y la empresa
impone sus tendencias en toda Europa.
Alemania
El Art Nouveau en Alemania se denominó Jugendstil, y aunque no se manifestó en obras arquitectónicas
dignas de mención, se aplica casi por completo a las artes aplicadas.
Alemania comienza la competición económica con los restantes países, estaba atrasada tecnológicamente.
En el intento de potenciar la naciente producción para competir con los mercados exteriores, el principio
seguido en el sector de las artes aplicadas, fue el que debía instruirse y ponerse al día tanto a los obreros
manufactureros como al público, mediante la visión directa de los objetos y las mayores posibilidades de
confrontación.
Inglaterra
En este país la relación con la tradición posee características diferentes que el resto del continente.
El respeto y conservación hacia las tradiciones naciones están siempre presentes, además, la referencia a
un periodo particular de este pasado, la edad media ligada a las enseñanzas de Morris y Ruskin.
En la primera década del XX los fermentos de vanguardia se agotan progresivamente. La casusa principal
es de orden social, ya que en ese momento las diferencias sociales se expresan en término de lucha de
clases.
Italia
El caso italiano es particular, no vivió la época llena de Art Nouveau, sino que siguió con pocas
excepciones un eco apagado, mediante lo que se denominó un Liberty episódico y decorativista, y luego un
reflejo de la Secesión Vienesa.
La evolución de la arquitectura en Italia se vio comprometida justamente por el hecho de que no se
estableció una vinculación entre la primera época y el periodo racionalista, a causa de que los dos
arquitectos más destacados del Art Nouveau en Italia ( D’ Aronco y Basile), se apartaron de la actualidad
histórica.
El modernismo en España
Constituye uno de los fenómenos más complejos, contradictorios, dinámicos y creativos, relacionado con la
evolución de los estilos. Este estilo, nos puede ofrecer el arte y la arquitectura de las décadas finales del
siglo XIX y primeras del XX.
Según Benévolo, quedaría un contado número de edificios que se acercan al modernismo por la vía del
Gaudinismo, incluyendo las obras del maestro.
El “catalanismo”, definido como la afección por Cataluña, se encuentra en la base de toda una corriente de
exaltación catalanista que, daría lugar al movimiento conocido como Renaixença.
Lo nombres que se relacionan con este fenómeno arquitectónico, son los de Luis Domenech y Montaner, y
Jose Puig y Cadalafach.
Las primeras obras de Gaudí, como las de Domenech y Montaner, crean un arte nuevo capaz de expresar
los anhelos y características de una época distinta.
A un estimando que el Gaudinismo no puede ser considerado como el movimiento más típicamente
representativo dentro del Modernismo catalán, es obvio señalar la existencia en él, de aspectos diversos
que caracteriza igualmente los movimiento europeos de vanguardia de su tiempo.
La tendencia de Gaudí, se inscribe en una tendencia de aumento, de valores subjetivos, que
caracterizarían a todos los movimiento integrantes de lo que podría ser llamado, estilo 1900.
Antonio Gaudí
Al margen del Art Nouveau, pero ciertamente en conexión con el espíritu innovador que recorre Europa,
trabaja en España Gaudí. Su punto de partida es el eclecticismo tradicional, muestra un gran interés por el
gótico y por los problemas estructurales. Desde sus primeras obras, evidencia un amor por los efectos
sensacionales, una capacidad de compresión inmediata de las cualidades de los materiales, que no tiene
antecedente en la tradición más reciente.
Su inventiva de ingeniero lo lleva a armar rocosas formas parabólicas y a desplazar los ejes de las
columnas para hacerles seguir las oblicuas reacciones de los esfuerzos estáticos, pero a ellos se une
alucinante fantasía naturalista y simbolista, y principalmente la necesidad de recrear la unidad plástica de la
caja mural.
El uso abundante de la cerámica de colores, el gusto por las paredes más que onduladas, contorsionadas,
la arbitrariedad de los coronamientos de fachadas y de colocar enormes símbolos totémicos, hallan su
fundamento en un instinto de reintegración figurativa.
Las destrucciones bélicas y la detención de las actividades productivas imponen el problema urgente de la
reconstrucción.
La guerra no cambia los términos del debate cultural pero agudiza la sensibilidad para distinguir forma-
sustancia.
La vanguardia figurativa
El fenómeno del arte de vanguardia es uno de los más típicos de la cultura contemporánea y se presenta
por primera vez en nuestro siglo anticipando y reflejando casi todos los aspectos, las crisis y las
contradicciones. El termino vanguardia indica, acción de un grupo o movimiento artístico que experimenta
formas y temas con anticipación respecto a la producción normal.
Fauvismo
En sus obras estaban excluidos el dibujo y los trazados lineales,
resultando la imagen de la yuxtaposición violenta de zonas de colores
primarios.
No pretendía la representación de los objetos inmersos en la luz solar,
sino de las imágenes más libres que resultaban de la superposición de
colores equivalentes a dicha luz.
Expresionismo
En una aproximación inicial y genérica, podríamos decir que en la pintura del expresionismo decae toda
forma decorativa para dar lugar a la deformación de los objetos representados de expresar, de forma más
evidente, los sentimientos de dolor y de angustia del artista.
Es en Alemania donde adquiere su mayor valor cultural, a pesar de ser un
fenómeno internacional.
Uno de los aspectos principales de los pintores en la negación del positivismo y de
la sensualidad, de ahí la inmensa carga emocional.
El expresionismo afirma decididamente el derecho a una elección libre y a una
deformación expresiva de los vocabularios precedentes, descontextualizándolo de
la cultura originaria.
No apunta hacia la creación de un nuevo vocabulario figurativo que proporcione
orden y capacidad de compresión, se refiere al contenido con el grito más
significativo, con la visión más alucinante de una sociedad disgregada que aguarda
la confirmación destructora de la primer aguerra mundial.
Purismo
Es francés y representa la contrapartida psicológica del expresionismo
alemán, para el cual la posguerra implicaba desesperación, quiebra,
voluntad de destrucción, en cambio para el purismo, el fin de la guerra
significaba ingenuamente el advenimiento de un mundo regenerado, de un
arte ordenando y puro, tendiente a conmover el sentimiento, a hablar al
espíritu, a despertar el pensamiento.
Le Corbusier insiste en la parte seudocientífica de las nuevas formas, busca
una ley de geometría elemental. Todas las composiciones arquitectónicas
se pueden reducir a elementos primarios.
El purismo abandona los encastres de volúmenes y de planos.
Cubismo
Su nacimiento suele adjudicarse al cuadro de Picasso las Demoiselles d Avignon,
de 1907.
Como rasgos compositivos del leguaje cubista podemos señalar los siguientes:
construcción de imágenes mediante una estructura geométrica, representación
plástica de los objetos a través de los planos y las facetas que constituyes su
volumen, multiplicidad e interpretación de las configuraciones que se producen al
variar el punto de vista, representación de la totalidad espacial del objeto,
simultaneidad de las visiones, fusión de la figura con el fondo, en una retícula
geométrica dinámica, en una palabra, una concepción renovada del espacio según
la hipótesis espacio-temporal, verdadera o supuesta.
Futurismo
Surgió en Paris, y fue el primer movimiento de vanguardia propiamente dicho, y
encarno todas las características de esta: la ruptura con el pasado, el
maquinismo, el activísimo, el belicismo, las actitudes provocadoras y
profanadoras. En pintura, traduce en formas plásticas y en colores chillones los
ideales y los mitos de la lucha contra la tradición, del dinamismo, del
mecanicismo, que caracterizan todo el movimiento.
Los futuristas intentaban reproducir una imagen de la velocidad en acción, una
especie de dinamograma de colores, rico a su vez en connotaciones simbólicas.
Neoplasticismo
Nace en Holanda en 1917 con la revista de Stijl. Entra en el núcleo del arte
abstracto, en el que el proceso de constante alejamiento de la naturaleza
llega a la desaparición total de referencias naturalistas, en beneficio de las
formas geométricas, organizas o de pura fantasía.
Las motivaciones del abstractismo pueden reducirse a dos: Por un lado
reconociendo a las formas y a los colores un potencial comunicativo propio,
y por otra parte se pretende poner en crisis el concepto mismo de
representación para sustituirlo por el de configuración.
Suprematismo y Constructivismo
La historia de la vanguardia rusa es todo un entrecruzarse de fenómenos artísticos, políticos, tecnológicos,
sociológicos e ideológicos, como podía esperarse en el clima de renovaciones esperanzas y expectativas
que acompaño a la victoria de la revolución socialista.
El constructivismo muestra un elevado interés por la técnica, por la producción y el compromiso político.
Era un deseo de huir del objeto natural y un sentido de protesta en contra de él, mediante la pintura
reducida a pocos signos de intensidad simbólica. Las pinturas expresan relaciones puras.
Expresionismo en arquitectura
En paralelo con la vanguardia del expresionismo, se desarrolló la arquitectura expresionista, caracterizada
por la manifestación de emociones violentas, por la aplicación, exploración y uso de materiales
innovadores, y por las formas más orgánicas que posibles.
Se caracterizó por el uso de nuevos materiales, suscitado en ocasiones por el
uso de formas biomorficas o por la ampliación de posibilidades ofrecida por la
fabricación en masa de materiales de construcción como el ladrillo, el acero o
el vidrio.
La arquitectura expresionista tuvo un intérprete excepcional en Erich
Mendelsohn, sus diseños curvilíneos representaron una alternativa al estilo
funcionalista en el siglo XX, llamó la atención en 1918 con una serie de
bocetos que aportaban una nueva manera de hacer arquitectura, se basaba en
la utilización de diseños curvos tanto en líneas como en volúmenes.
Futurismo en arquitectura
Rechazó la estética tradicional e intentó ensalzar la vida contemporánea,
basándose en sus dos temas dominantes: la máquina y el movimiento. Su
propósito era despertar al mundo de la pereza cultural en que estaba sumida
desde fines del siglo XVIII, atacaba a los museos y academias, al culto de lo
antiguo y a todo el arte de otros tiempos.
Neoplasticismo en arquitectura
De Stijl dio inicio la tendencia estética neoplástica, aún más cuando pasó del plano a la tridimensionalidad.
Una de sus características más importantes fue la idea del espacio como principio artístico.
Se caracterizó por la descomposición del volumen en planos, de colores, la eliminación de los vanos como
huecos en los muros, disponiéndolos en el espacio que deja libre la superposición de dos planos, la
disposición de planos y volúmenes que impide captar la imagen arquitectónica desde un único punto de
vista. Tanto los arquitectos como los pintores neoplásicos quieren romper con las prácticas artísticas del
pasado. El protagonista indiscutible de las composiciones neoplásicas es el espacio frente a la materia.
G. T. Rietveld es quien consigue de una manera más clara y decidida expresar la austeridad geométrica de
la pintura neoplástica en tres dimensiones.
Constructivismo en arquitectura
Arquitectura constructivista era una forma de arquitectura moderna que
floreció en la Unión Soviética en la década de 1920 y principios de 1930.
Se combina la tecnología avanzada y la ingeniería con una
declaradamente comunista propósito social.
Se trata de una solución que surge de un doble rechazo; por una parte se
rechaza el exceso de carga decorativa y ornamentación, tan propio de la
burguesía y de las clases altas, mientras que por otra se abraza la
tendencia geometrizante y abstracta como rechazo del pasado figurativo, a
la manera en que lo hizo también el futurismo.
Un movimiento que pretendía que el arte se extendía a través del tiempo y
del espacio, adaptándose a la ideología comunista mediante espacios
diáfanos, compartidos y simultáneos, haciendo un igual uso de la luz, el
uso de materiales pobres (hormigón armado, cristal, metal, ladrillo…) y en
general la búsqueda de un nuevo lenguaje para edificar.
Las invariantes
Puesto que la principal característica invariante de este estilo no fue el arte destacado, si no la artisticidad
difusa. La mayor parte de producción de este periodo, no ve la belleza del ejemplar aislado, sino que se
presenta como un acto que tiene en cuenta otras cosas.
Si la arquitectura de la ingeniería había resuelto el arte de la técnica y si el Art Nouveau había intentado
plegar los productos de la técnica a la fantasía del artista, el protorracionalismo, que coincide con la difusión
del hormigón armado, aprovecha las posibilidades de los materiales para conseguir su programa de
simplificación y de máxima economía, siendo la de la economía, otra invariante de este estilo. Este criterio
está marcado por dos orientaciones, una naturaleza estética y otra sociológica.
El rechazo al ornamento es una actitud emblemática general que está motivada más por razones de
naturaleza psicológica, viscerales, y estéticas que por razones ético-sociales.
Nos referimos a las trasformaciones del gusto, con el paso de la familia morfológica de motivos cóncavo -
convexos, a la familia morfológica - geométrica cuyo punto culminante es la abstracción.
Si queremos dar un carácter unitario a los factores invariantes del protorracionalismo, podemos
considerarlo como un estilo fundamentalmente reductivo. Heredo la reducción de la arquitectura a la
construcción de los ingenieros del siglo XIX, la reducción estilística del Art Nouveau, la reducción
económica de todos los estilos precedentes, y sobre todo la reducción a la geometría que aquí asume
acentos definidos.
Las variaciones
Si consideramos el estilo que engloba la producción de algunos arquitectos, como un fenómeno
desarrollado en continuidad o en oposición con el Art Nouveau, resulta que su contribución además de la
individual, comprende tantos aportes respectivos como escuelas.
Tras Perret y Garnier está la arquitectura de la ingeniería del siglo XIX, la invención y el perfeccionamiento
del hormigón armado, el fruto de la investigación tecnológica francesa.
Auguste Perret
Es uno de los primeros constructores que traduce en elementos lineales y en pórticos rígidos, la fluidez
plástica del hormigón, y que consigue el máximo efecto arquitectónico con esto.
Una de sus mayores aportaciones al leguaje arquitectónico moderno, es la de haber definido con absoluta
claridad las relaciones de los elementos de soporte y los soportados, en una condición dialéctica que
caracteriza todas las producciones posteriores.
En su obra se repite la limitación propia de todo el protorracionalismo: las vigas y las pilastras vistas
recuerdan la estructura de los órdenes gigantes del lenguaje clásico del renacimiento, la disposición
cerrada y simétrica de sus edificios, confirma la antigua alianza entre neoclasicismo e ingeniería.
Tony Garnier
Nos proporciona otra versión del protorracionalismo, en la que toda la obra de arquitectura se encuadra en
un programa urbanístico. En el encontramos también las habituales limitaciones de la inspiración clasicista,
le falta la intención de la búsqueda de un nuevo lenguaje, basándose toda su obra en una simplificación
geométrica y en una reducción a un pretendida esencia, que le permite realizar construcciones fuera de
tiempo.
El siglo XV, el comienzo de la colonización europea, teóricamente marca el fin de la época prehistórica
norteamericana. En América se encuentra una principal contradicción entre la cabaña india y las
magnificencias europeas.
Entre 1630 y 1790, prevalece una economía agrícola de carácter medieval. Ingleses, holandeses, suecos,
franceses y españoles extienden la colonización en un complejo cuadro de aportes europeos. Se plantea
entonces el problema de la arquitectura: O se elabora un estilo vernáculo genuino a partir de las
habitaciones indígenas, o bien se repetían en el nuevo continente las formas arquitectónicas de los países
de origen. Se prefiere el camino más fácil: los colonos intentan reproducir los sistemas de construcción
habituales en sus países, pero la mano de obra escasea, aunque los materiales abundan.
Se afirmó entonces la arquitectura colonial, de evidente importación europea pero adaptada a las
necesidades norteamericanas ya que el clima es más duro y la escases de mano de obra obliga a la
simplificación constructiva. Surge entonces un estilo volumétrico.
Por estas razones se utilizan superficies planas, paredes de ladrillo visto, que quedan consagradas ya
como elemento básico; fachadas de madera que se extendieron mucho más y por más tiempo; y fachadas
en piedra que ostentaron la misma sencillez que las anteriores.
Se emplea la madera, desde un principio según una técnica particular llamada “Balloon frame”, se trata de
una estructura sin la habitual jerarquía de elementos principales y secundarios, sino que se basa en
multitud de listones delgados de dimensiones normales colocados a distancias moduladas y fijados con
simples clavos; los vanos, las puertas y ventanas, son múltiplos del módulo fundamental; un entramado de
tablas de diagonal asegura la resistencia al viento de la estructura, y un segundo entramado de tablas
machimbradas defiende el edificio de la intemperie. Esta estructura permite la explotación de la producción
industrial de la madera en dimensiones unificadas, y esta posibilitada también por su bajo costo, por otra
parte, reduce el tiempo de la puesta en obra y no requiere mano de obra especializada.
La casa norteamericana se construye “de adentro hacia afuera”. Es considerada como un organismo que
debe adaptarse a cada caso particular, por eso lo importante no es el estar construida en un determinado
estilo sino para una concreta finalidad.
En 1871, Chicago queda casi completamente destruida por un incendio. La reconstrucción, indecisa en un
primer momento, se hace muy intensa entre 1880 y 1890, y sobre el lugar que ocupaba el antiguo pueblo,
se alzó un moderno centro comercial con edificios para oficinas, grandes almacenes, hoteles, etc. Se
experimentan nuevos sistemas de construcción con insólita audacia, para satisfacer las nuevas
necesidades.
Los protagonistas de la reconstrucción son reconocidos colectivamente como “La escuela de Chicago”
Las construcciones de la Escuela de Chicago, son el conjunto de edificios que constituyeron el centro
administrativo de la ciudad, el Loop, caracterizado por grandes edificios de oficinas, residencias, grandes,
almacenes, locales públicos, a veces reunidos en una misma construcción. El alto precio de los terrenos
edificables fue la causa que determino el nacimiento de rascacielos.
El rascacielos permitía la minina ocupación en planta de la estructura, la máxima utilización de los espacios
interiores, su polifuncionalidad, la mayor luminosidad y abertura, y sobre todo, el mayor aprovechamiento
del suelo edificable.
“El rascacielos constituye otra aplicación típica del procedimiento de abstracción, propio de la cultura propia
americana. He juzgado siempre con rigor desde el punto de vista de la perspectiva, porque es un
dispositivo indefinido, carente de proporciones y unidad … Sin embargo, se trata, de un nuevo
procedimiento mental, que contiene una nueva forma de ver la arquitectura y exige ser juzgado con nuevos
criterios formales” BENEVOLO
Técnicamente el rascacielos se valía de las innovaciones estructurales, derivadas del uso racional de la
construcción en hierro, de los sistemas verticales de transporte, además de instalaciones de teléfono y de
correo neumático. La estructura de esqueleto de acero, permite aumentar la atura sin miedo a tener que dar
un grosor excesivo a los pilares de los pisos bajos, y permite también abrir a lo largo de las paredes,
vidrieras casi continuas. Para soportar las cargas concentradas de los pilares, Baumann propone en 1873,
Sus representantes:
Le Baron Jenney
A William Le Baron Jenney se le considera el iniciador de la escuela de Chicago. Construye el primer
edificio alto con estructura metálica en 1879, el “Home Insurance Company” del que depende la particular
fisonomía del Loop.
Es cierto que en las obras de Jenney el detalle arquitectónico a la conmemoración estética tiene poca
importancia. Precisamente por tales razones fue quien en su edificio Leiter, dio la primera solución al
problema de los grandes edificios con estructura en esqueleto, construcción que por su claridad e
independencia era muy superior a la habitual.
Luis Sullivan
Zevi presenta a Sullivan como “La personalidad más dotada y la más culta figura de la Escuela de Chicago”
Inicia en 1881, después de haber trabajado para el estudio de Jenney.
Su primera obra memorable es el Auditorio de Chicago, en este proyecto influye notablemente la obra de
Richardson. El auditorio es quizás la obra más importante de la escuela “richardsoniana”; el más grande
teatro de Chicago, el más alto edificio de la ciudad, un prodigo técnico por la solución de los problemas
estáticos y acústicos, presenta todas las características de gran vigor estructural que articulan las
superficies de Richardson, y que luego se concretaran en los rascacielos.
Sullivan estudia la aplicación de los principios compositivos a los rascacielos. La característica
constitucional de los rascacielos radica en la existencia de muchos pisos iguales.
En sus escritos promulgo la arquitectura orgánica porque estaba convencido de que un edificio, por estar
destinado a incorporar la vida, debía ser concebido como un ser viviente. Sullivan inicio la rebelión contra
las funciones suprimidas de la arquitectura; suya es la frase “La forma sigue a la función”.
Pero por función no entendió nunca los fenómenos solamente mecánicos y utilitarios, sino el resultado de
todas las realidades intelectuales, espirituales y prácticas, esto es la expresión de la vida interna que se
desarrolla en el edificio.
Una caracterización de Sullivan seria incompleta si no se mencionaran sus cualidades decorativas.
Conquistada racionalmente la estructura y concebida su expresión, Sullivan se opuso a esa inhibición
nudista que había prevalecido en algunas obras de Root; quería que de la estructura misma surgiese el
motivo de una amplia ornamentación, digno de su armonía, ilimitada en la fluencia orgánica y en
plasticidad.
Subraya el ritmo de las ventanas, todas iguales en las seis plantas tipo, limitándose a construir el último
piso más bajo, con los cerramientos retirado. La estructura se proyecta tranquilamente al exterior, sin
ningún refuerzo vertical u horizontal, al quedar suavizadas las relaciones entre las masa, utiliza abundante
decoración que sirve para distinguir la zona del basamento del resto del edificio.
a. La visión urbanística
b. El modo de aplicar la técnica moderna
c. El sentido de lo interno como realidad
d. El plano libre expansible
e. Lo exterior como producto interno
f. La unidad entre exterior e interior
g. La casa como reparo
Estos puntos se podrían agregar a los seis anteriores, demostrando que aparecen coherentemente en toda
la producción de Wright, pero el verdadero secreto wrightiano, consiste en la conquista del espacio.
En lugar de estudiar las funciones aisladas del hombre, se estudia la circulación, los elementos directores
de la planta son las líneas de tránsito, etc.
La planimetría se transforma: se rompe la segregación celular, una habitación se funde con la otra, se
eliminan las divisiones entre sala de estar, salón, estudio y comedor. El espacio interior ha nacido; el
edificio no es más que un bloque de material de construcción a tratar artificialmente desde afuera.
Su pensamiento urbanístico
Lo concretó en Brodacre City. Propone un desarrollo urbanístico en extensión, que ha cada individuo le sea
concedido un mínimo de 4000m2. Centros a la vez agrícolas e industriales, que respondan a la doble
exigencia del mundo contemporáneo y de la libertad individual.
Con Brodacre City industrializa la concepción de la ciudad jardín. La desvincula de función de satélite de la
metrópoli, hace que se sumerja en la continuidad del paisaje.
El hombre tiene sobre todo aire para respirar y libertad para moverse, Wright lleva a la ciudad al campo, es
una solución humana en la que la técnica moderna es aprovechada, no en un diabólico ascensor, sino en
medios de transporte que, en un país como EE.UU, permitan al campesino y al burgués vivir en el campo
sin renunciar a las actividades culturales y sociales.
Extiende los amplios techos horizontales que siguen y acentúan la línea del suelo, emplea materiales
locales y colores naturales en lugar de cajas murarles suspendidas sobre pilotes. La coherencia de Wright
va más allá de la repetición de motivos figurativos y de los mismos principios psicológicos, sociales y
funcionales en que se articula su pensamiento.
Actividad de los maestros, Walter Gropius en Harvard y Mies van der Rohe en el IIT
Colegio de graduados de Hardvard
Cambridge (1949-1950)
Construido por el T.A.C. (The Architects Collaborative),
compuesto por Gropius y sus jóvenes colaboradores. Los
capitales a su disposición eran más bien limitados. No solo por
este motivo la tendencia a lo monumental ha desaparecido
finalmente después de haber sido dada por vencida, sino
también porque se va desarrollando un nuevo aspecto de la vida;
una mayor sencillez, y muy hondas necesidades espirituales, se
pueden advertir en la generación de la posguerra.
Comunicación y participación
Las formas sociales del mañana son la consecuencia de los movimientos de las ideas y de las
trasformaciones técnicas de ayer y hoy. Si ciertas ideas se desarrollaran desde hace cien años, es inútil
creer que hoy se les podrá cerrar la ruta. Si agregamos a esto la dinámica de los hechos sociales, políticos
y religiosos así como la toma de conciencia de capas cada vez más amplias de la humanidad, podemos
trazas unas líneas tentativas para delinear la cosmovisión actual.
Uno de los rasgos más evidentes de nuestra vida social, es la participación masiva del hombre.
La presencia de las masas en la vida pública es un hecho relativamente nuevo en la humanidad, que ha
sido posibilitado por las trasformaciones técnicas y por el movimiento de ideas y su difusión amplia, en
estos dos últimos siglos.
Este fenómeno, la multitud emergente no es “masa”, son “organización humanas”, con un perfil cada día
más claro, en las que sus componentes pueden y deben desplegar sus capacidades humanas como la
inventiva, la lucidez, la solidaridad, en una palabra, donde pueden ejercer su condición humana.
La dinámica social se perfila desde principios del siglo pasado, como un movimiento orgánico, con bases
racionales, propósitos claros y a largo plazo, con una estimación de las dificultades y de los posibles logros.
Esto lleva a una nueva visión del estado, como agente y garante del bien común. La idea de Estado tal
como se fue conformando en la modernidad, tuvo como característica la soberanía e independencia, la
primacía del poder legislativo sobre el ejecutivo.
Louis Kahn
Kahn no solo es la figura crucial en la transición de la arquitectura norteamericana de los años ´50, sino de
todo el panorama internacional en su evolución de la tradición del Movimiento Moderno a la llamada
situación posmoderna.
Le Corbusier fue el arquitecto a quien más admiro. A partir de 1951, fue cuando comenzó a imprimir un
carácter personal en su obra con La Galería de Arte en la Universidad de Yale. En esta obra que aun
predomina el lenguaje internacional de Mies y la planta libre del Movimiento moderno, el volumen de la
escalera empieza a reclamar autonomía propia, y al mismo tiempo por sus muros ciegos y por los
casetones del techo, se produce una sintonía con lo que en Europa se llamara Nuevo Brutalismo.
Philip Johnson
Este personaje singular, tiene una enorme capacidad de ir evolucionando a caballo de cada nueva
propuesta de la arquitectura, siendo incluso el, uno de los que dicta las nuevas modas arquitectónicas.
Durante los año 30 es de los principales impulsores de la arquitectura moderna mediante la simplificación y
las reglas del estilo internacional, a partir de los año 50 se ha comprometido en los primeros giros hacia el
eclecticismo y el historicismo. Defendía la liberación de cualquier sentimiento de construcción estilística,
especialmente del estilo internacional. Fue una figura determinante en la arquitectura americana, y facilito el
ingreso del movimiento moderno en los año 30, luego se convertiría en el precursor del posmodernismo.
Paul Rudolph
Desarrolla un nuevo expresionismo estructural y brutalita con el uso de hormigón visto y la piedra. Parte de
una evidente influencia de Sert, Gropius y Brehuer, y a lo largo de su obra defenderá un desinhibido
expresionismo escultural, que poseerá una gran capacidad de renovación de la arquitectura
norteamericana.
La sobriedad de la Bauhaus se manifiesta en sus primero proyectos. Arquitecto amante de “la forma por la
forma”, lo que se ve en el Centro de Arte y Arquitectura de Yale. Descubrió el conflicto entre arte y función;
Konrad Wachsmann
Su nombre aparece junto con el de Gropius en los estudio de investigaciones sobre normalización y
composición de elementos prefabricados. Se ha dedicado posteriormente por completo al campo de las
grandes estructuras, basadas en los dos elementos principales: La barra y el nudo. Declara que el estudio
de dichos nudos constituye la esencia misma del secreto de construir, y que se tendrá una ordenación
continua partiendo de los elementos fundamentales que originaran los nudos, superficies y estructuras,
edificios, calles y plazas, conjuntos urbanos.
El problema de las grandes dimensiones y la intención utópica, no nacen a partir de una visión global
arquitectónica de las macro estructuras, sino de un proceso puramente aditivo y meramente tecnológico.
Neo-productivismo
Kevin Roche
Una de las obras más representativas es la Ford Fundation en Nueva York, proyectada por Kevin Roche y
John Dinkeloo. A lo largo de los años 70, Roche y Dinkeloo desarrollaron una serie de hitos dentro de la
arquitectura de oficinas, que se basa a la vez, en el alarde tecnológico y en la experimentación de formas
volumétricas puras. Llevan la poética de los rascacielos a un resultado ampliamente expresivo y épico, que
al mismo tiempo, sintoniza con el naciente “minimal art” norteamericano. Prismas puros de cristal que se
levantan desarrollando leves retranqueos
Norman Foster
Fundó en 1965 el estudio de arquitectos Team 4, junto a su primera esposa Wendy Cheesman, Richard
Rogers y la esposa de éste, Sue Brumwell. Dos años más tarde el nombre del estudio fue cambiado y
quedó en Foster and Partners.La arquitectura del maestro Norman Foster se caracteriza por tener un
marcado sello industrial, un gran dominio del espacio, la luz y la materia, y un fuerte compromiso con el
cuidado del medio ambiente, sus habitantes, y los principios que fundamentales de la arquitectura
sostenible.
Peter Eisenman
Los inicios de Eisenman arrancan de la certidumbre de la existencia del mundo cerrado y perfecto de la
geométrica pura y combinatoria, tal como Kahn lo había develado en su obra. Eisenman desarrollara una
arquitectura basada en la forma por sí mismo, siguiendo el dispositivo básico de una arquitectura que parte
de la radical separación entre la escala de lo humano y la escala del mundo autónomo de las formas
geométricas. En segundo lugar, parte de otra premisa crucial: Una arquitectura de total abstracción que
tome como referencia las pautas señaladas por el incipiente arte conceptual.
Enfatizar la arquitectura como trabajo intelectual, vaciado de cualquiera pretensión populista o
contaminación realista. Una arquitectura que deberá partir de premisas formales y concluir en resultados
formales. Una arquitectura sin ninguna pretensión pragmática y sin ninguna pretensión semántica. La
arquitectura no debe tener significado.
John Hejduk
Desarrolla toda su actividad industrial en el campo del desarrollo del diseño y de la arquitectura en su
escuela de Cooper Unión. Su método es mucho más empírico, plástico, sensible y próximo a las
necesidades materiales y simbólicas de la gente.
Los modelos que utiliza inicialmente con mayor intensidad son los de las vanguardias artísticas,
neoplasticismo, en especial las pinturas de Mondrial, el cubismo, el purismo.
Toda su obra se basa en la descomposición de la arquitectura en su forma geométrica más simple y
expresiva, siguiendo sus leyes elementales. Todos los ejercicios de la escuela y sus proyectos partes
siempre de la premisa formal como inicio y final del proyecto.
Richard Meier
En su caso predomina el pragmatismo y la perfección profesional por encima de cualquier experimento
conceptual. Ha desarrollado una obra pulcra, blanca, volumétricamente depurada, que ha tomado como
referencia el purismo geométrico Le Corbusierano.
En su obra se destaca siempre esta pulcritud nada arriesgada, este mecanismo de la repetición de un
lenguaje moderno asimilado, produciendo una sensación agradable, pero a la vez con la frustración de lo
que ya visto, de lo que siempre se puede esperar sin ninguna sorpresa.
Esta posición arquitectónica, conlleva a una serie de consecuencias generales.
La arquitectura de Eisenman y de Hejduk está basada en la sintaxis. Una arquitectura en la que la forma se
basa en la forma y en la que se explicita esencialmente en el hecho de entender la arquitectura como
pensamiento lógico.
Este tipo de arquitectura que pretende no tener ni significado ni carácter histórico, niega la posibilidad de
ejercer la actividad crítica. Aquellas formas que pretenden justificarse como ellas mismas, lejos de criterios
funcionales, constructivos, significativos, sociales o históricos, pretenden huir de la crítica.
Otras de las aportaciones claves que aparecen en el texto es la consideración de los dos elementos
básicos de la ciudad, los dos tipos de piezas que, según la clasificación aristotélica de esfera pública y
esfera privada pueden establecerse. Por una parte, los monumentos, los elementos primarios, aquellos
edificios o espacios públicos, etc. Y por otra parte, las áreas residenciales, las viviendas, que crecen
siempre por áreas, y que conforman el tejido básico de la ciudad.
Otro de los conceptos básicos, reutilizado por Rossi es el de tipología arquitectónica. La reformulación de
este concepto iba relacionada con la importancia otorgada a la trama urbana, con la voluntad de señalar
que aquello que está más cerca de la esencia de la arquitectura es la forma y la estructuración de los
espacios. La analogía es una operación lógico-formal que define este carácter científico, lógico, histórico,
urbano y público, pero al mismo tiempo biográfico, poético, fantasioso y personal que tiene la obra de
Rossi. Se habla de la ciudad como manufactura.
El hombre no solo es el hombre de aquel país o ciudad, sino que es el hombre de un lugar preciso y
delimitado y no hay transformación urbana que no signifique también transformación de la vida de los
habitantes.
Contextualismo
El contextualismo, una tendencia del pensamiento aparecida al final del siglo XX, influye en las ideologías
del movimiento posmoderno en general. El contextualismo se centra en la creencia de que todo
conocimiento es "sensible al contexto". Sus fundamentos son: respetar el entorno; ensamblar lo nuevo para
que no sea una pieza aislada; crear un orden armónico y buscar la integración con el paisaje.
El Contextualismo ofrece una novedosa forma de acercamiento a la obra arquitectónica, dado que la pone
en relación íntima con el "habitar" humano. Ello le exige al intérprete poner de presente no sólo la
contingencia e historicidad de la obra, sino también las relaciones que ésta establece con el entorno.
Tradición
A lo largo de los 70 se fue extendiendo una cierta manera de hacer arquitectura fuertemente enraizada en
la historia. La respuesta a la pérdida de capacidad significativa de la arquitectura del Estilo Internacional,
condujo al recurso de la tradición, a la reutilización de un sistema de convenciones aceptadas. Se pretendía
así asegurar la comunicación con el usuario, el resurgimiento de la capacidad significativa en la
arquitectura.
En los países que la tradición es fuerte o que la nostalgia y la necesidad de precedentes históricos es
predominante, se ha desarrollado un tipo de arquitectura que puede ser llamada “Revivalista”.
No se duda en recurrir de manera literal y cerrada a los lenguajes del pasado, los elementos clásicos
vuelven a reaparecer directamente sin ninguna voluntad de experimentación, reelaboración o abstracción,
sino más bien aprovechando la corriente de aceptación popular que genera la recreación de convenciones.
Los incluidos en la vía del eclecticismo, en cambio, practican una arquitectura hibrida, basadas en las
mezclas y cruces de códigos lingüísticos, no exenta de ironía y con la voluntad de establecer nuevas
figuraciones.
Michael Graves, con su gran habilidad de combinar formas, ha sido capaz de inventar un fantasioso
repertorio posmoderno, hecho a base de fragmentos de arquitecturas clásicas, articulado siempre de
manera pulcra en un organismo claro y unitario.
Estructuralismo
Responde al principio antropológico: se intenta articular los procesos de construcción de manera tal que el
edificio terminado exprese una fenomenología de la construcción utilizando la madera y el hormigón visto:
Aldo Van Eyck
Participacionismo
Responde al principio contextual: postura informal que permite diseñar las construcciones de manera de
relacionarlas inmediatamente con su contexto con expresiones susceptibles de ser comprendidas
inmediatamente: Venturi, Charles Moore
Regionalismo
Se basa en principios simples y específicos y retoma elementos de la arquitectura vernácula sin mezclarlos:
Barcelona, Viena, Buenos Aires
}}
Philip Johnson, arquitecto y ex director del Departamento de Arquitectura y Diseño, coordinado por
Frederieke Taylor organizaron la exposición del MOMA de 1988 titulada Deconstructivist architecture, que
cristalizó el movimiento y dio fama y notoriedad a sus integrantes.
Los proyectos de esta exposición marcan una sensibilidad diferente, una en la que el sueño de la forma
pura ha sido perturbada. Es la capacidad de perturbar nuestros pensamientos sobre la forma lo que hace a
estos proyectos deconstructivos. La muestra examinaba un episodio, un punto de intersección entre
muchos arquitectos donde cada uno construye un inquietante edificio mediante la explotación del potencial
oculto del modernismo.
La voluntad de imitar a aquellos auténticos artistas que se acercan a integrar la realidad los arquitectos
persigue una vía de recuperación de una autenticidad perdida, en la medida en que cada nuevo camino se
ha ido agotando y consumiendo, convirtiéndose en manierismo y artificiosidad.
Todo ello ha movido al arquitecto a intentar desarrollar un método arquitectónico que tienda a aproximarse
a los mecanismos de la creación artística. Se renuncia en principio a la producción en serie y a la
industrialización radical; cada obra, en cambio, será singular, mantendrá una relación única e instrumental
con el contexto, con el usuario y con las arquitecturas preexistentes.
Para estos arquitectos, el método del arte con su rechazo a la producción masiva, a la dictadura de la
tecno-ciencia y al despilfarro, puede ser el camino personal adecuado para orientarse en una época de
dispersión y desorientación.
Frank Gehry
Gehry ha desarrollado una obra basada en el ensamblaje artesanal de diversas formas simples -prismas,
cilindros, esferas, torres, corredores, etc.- en la cual la caducidad y movilidad son términos
complementarios. Su obra constituiría la explicación de la existencia de un área, la de Los Ángeles, con una
clara tendencia a esta arquitectura dúctil, flexible y plástica como el arte.
La obra de Gehry arrancó de la explotación de las cualidades plásticas de materiales de mala reputación
como cartón, alambre, maderas laminadas, telas metálicas, planchas prefabricadas, plomo, estucos
semindustriales, etc. Promulgando una arquitectura táctil, basada en la textura de cada material como todo
ornamento y en la variedad cromática como reflejo de las arquitecturas populares.
Su propia casa en Santa Mónica, California realizada por fases, como “collage” de materiales baratos. Su
método basado por lo general en el choque y la deconstrucción de los diversos volúmenes que forman el
programa del edificio, le permite conseguir una mayor espontaneidad formal y variedad de usos.
A veces recurre a gestos iconográficos. Ha sabido crear una vía nueva en la que los mecanismos del
pop-art nunca degeneran en formas tradicionales, sino que siempre renuevan el repertorio formal y
significativo.
Gehry ha sido el arquitecto que de manera más convincente ha desplegado una obra arquitectónica que
muestra la pérdida de los valores de permanencia y solidez en la arquitectura contemporánea y que se ha
situado en las antípodas del ansia de monumentalidad y trascendencia planteado por Kahn.
Gehry también se sitúa en una vida nueva que no trabaja a partir de ningún a priori tipológico, sino que
desmembrana cada programa, asignando formas a cada función distinta y articulando una estructura
común que mantenga viva la fuerza y tensión de unas formas que conservan todas las posibilidades de
crear, evolucionar y vivir.
Zaha Hadid
Con influencias del constructivismo ruso y movimientos de las vanguardias Hadid utiliza la
tridimensionalidad y su superposición de formas más intensa.
El concepto arquitectónico de Zaha Hadid y su modo de crear el espacio no fue a raíz de ninguna premisa
histórica, sino que se originó en la propia forma, donde el espacio nace con la evolución o el desarrollo de
una idea propia emplazándose en un contexto determinado; creó una espacialidad única, basada en formas
curvas fluidas con alto grado de movimiento y levedad, así como un perfecto trabajo con la luz y relación de
interior / exterior y percepciones visuales.
Coop Himmelblau
Ha llegado a sus propuestas a partir de un arduo trabajo en proximidad al arte, las “performances” y las
acciones, la narración literaria y cinematográfica, y experimentaciones pop con la posibilidad de la alta
tecnología.
The Open House (1983), es su proyecto más emblemático, iniciado con un dibujo garabateado con los ojos
tapados.
Con este proceso se intenta eludir el mecanismo de la razón, partiendo del instantáneo dibujo automático,
haciendo aflorar toda la energía que esconde el inconsciente y condensa la mano. Con el objetivo de
conseguir una arquitectura totalmente libre, se abandona cualquier forma preconcebida y se recurre a un
proceso fenomenológico relacionado con el cuerpo humano y con la abstracción de rasgos físicos.
Rem Koolhaas
Los proyectos de Koolhaas demuestran como se reinterpretan propuestas del Movimiento Moderno, pero a
la vez ya no se pretende recuperar un orden y unos criterios racionales para aplicar a la arquitectura y a la
ciudad. Se es consciente de que los acontecimientos históricos se han encargado de destruir
despiadadamente este pretendido orden.
Koolhaas es un arquitecto que proyecta edificios de clara consistencia física, en los que la masa adquiere
un carácter predominante.
Bernard Tschumi
Ha seguido durante años el camino de las apropiaciones y contaminaciones figurativas. En su caso las dos
fuentes máximas de inspiración han sido la literatura y el cine, intentando plantear una arquitectura
cinematográfica, pensada desde la sensibilidad del siglo XX. La preocupación por la velocidad, el
movimiento y el dinamismo se expresan mejor en lo discontinuo, en lo fragmentario, en un escenario hecho
de montajes, que busca el choque entre imágenes, la violencia y la fricción, la ruptura y la sorpresa.
Persigue una arquitectura que exprese la explosión del potencial deseo reprimido por la sociedad
capitalista.
Sus obras suelen considerarse dentro del deconstructivismo, pero su postura teórica se basa
principalmente en la práctica de la libertad personal del diseñador frente a sus obras.
Daniel Libeskind
El arquitecto entiende la creación arquitectónica como la composición de un libro, de una música o de una
poesía. Su proyecto no tiene nade que ver con los de algunos otros arquitectos deconstructivistas. Cada
elemento de su deconstrucción tiene un porque muy claro y definido, es el significado que da forma a todo
su proyecto. Solo quien conozca el código e intenciones que generaran la obra va a comprender su
mensaje correctamente.
Libeskind explica que “La arquitectura no debe limitarse a comunicar a un ser humano la existencia de un
mero objeto. La arquitectura es una percepción, y también algo que posee una dimensión intelectual. Es
una forma de comunicar algo más allá de la realidad física con la que está construida”
Minimalismo
A principio de la década de los noventa, parece detectarse una nueva posición arquitectónica, cansada
tanto de los excesos decorativos, simbólicos y de lenguaje de la arquitectura ecléctica y posmoderna, como
del intelectualismo, elitismo y formalismo vacío de ciertas arquitecturas de la nueva abstracción formal,
Asistimos a un resurgimiento del minimalismo y el racionalismo, a la aparición de arquitectura que priman la
búsqueda de un sentido común tectónico en el uso riguroso y ascético de los materiales, en la recreación
de espacios directos y puros, en la utilización de formas volumétricas y geométricas, simples, en la austera
utilización de repertorios sígnicos.
Entendemos por minimalismo la búsqueda de una arquitectura unitaria, en la que se utiliza un número de
elementos materiales y lenguajes limitados, articulados de manera esencialista. La ornamentación está
relacionada con la construcción, la función y el significado de cada obra. Aquello que predomina es la
calidad material, tectónica de cada obra.
Tadao Ando
El pensamiento de Tadao Ando está basado en la construcción con formas geométricas simples las cuales
con el uso de la luz y los materiales pueden crear espacios trascendentes.
Hace mucho énfasis en la incorporación de la naturaleza dentro de las construcciones para dejar fuera el
caos de las ciudades y crear un espacio de meditación, serenidad y espiritualidad.
El uso limitado de materiales, y las texturas expuestas, crea una articulación confusa de la función que
tiene el espacio.
En orden de abstraer lo más fundamental de la naturaleza Tadao utiliza especialmente el cielo, y juega un
papel importante en su arquitectura. Pues como el lo dice afecta al interior de la arquitectura. Por lo tanto
Ando busca siempre que el cielo entre a los espacios de manera especial, expresándolo en el concreto,
logrando así la arquitectura de Ando.
Se utilizan para su construcción dos sistemas estructurales. En el primer sistema, cerchas perimetrales a
las plataformas, con una profundidad que abarca varios pisos soportan las cargas de gravedad del edificio.
Las cerchas se apoyan en columnas inclinadas y cuidadosamente posicionadas para aumentar las
oportunidades de contrapeso, con plataformas en voladizo.
El segundo sistema, la rejilla de acero en forma de diamante, forma el exoesqueleto del edificio. La rejilla de
acero proporciona el sistema lateral del edificio, interconecta las cerchas de las plataformas, sirve de
acabado arquitectónico de interiores, y soporta la cortina de vidrio que recubre la construcción.
Conexiones de deslizamiento especialmente diseñadas unen lateralmente la rejilla de acero a las
armaduras de las plataformas.
Nace a partir de la confianza tardo iluminista en la solución mediante la razón de todos los problemas que
plantea la realidad contingente, de la vanguardia figurativa y de la necesidad de afrontar las continuas
exigencias socioeconómicas de la civilización industrial de masas contemporáneas.
La primera influencia de la vanguardia sobre la arquitectura fue la del alejamiento respecto de la naturaleza:
de las composiciones cerradas y de la simetría se llega a una configuración sin adornos, desnuda, artificial,
asimétrica.
La segunda influencia de las vanguardias la constituye una renovada concepción espacial. Al igual que en
aquellas pinturas el espacio no es aquello en lo que se representa una escena sino la articulación del
propio espacio del cuadro, así en arquitectura, dentro de ciertos límites, ya no hay “representaciones” del
espacio - las fachadas principales y secundarias, los puntos de vista obligatorios, los escorzos
“privilegiados”- sino una configuración espacial ligada casi únicamente al valor funcional de los recintos.
Las formas elementales y los rígidos principios de la arquitectura funcionalista pueden interpretarse como
una propuesta contra los motivos “despreciados” y las composiciones “académicas” del historicismo, pero el
Funcionalismo tuvo, sobre todo, un propósito positivo, fundado en una gran fe en el hombre y en la
arquitectura. Poseía tanto el valor como la fuerza para convertirse en un movimiento internacional.
Dos intentos fundamentales determinaron la articulación racionalista: la creación de una unidad de forma y
de función y la recuperación de valores esenciales. El primer propósito se satisfizo mediante la planta libre
que se hizo posible con el uso del esqueleto independiente y el segundo se expresó con la preferencia por
los volúmenes estereométricos (parte de la geometría que estudia las medidas de los sólidos) elementales
y con la eliminación de motivos ornamentales.
El Funcionalismo llevó a una acentuada diferenciación de funciones y de formas. Para definir las variadas
funciones y determinar sus consecuencias formales, el Funcionalismo las aisló y las redujo a sus aspectos
mensurables. Por esto la arquitectura funcionalista degeneró en una yuxtaposición mecánica de partes
La idea fundamental es la utilización de la artesanía no ya como fin o ideal romántico, sino como medio
didáctico para la preparación de proyectistas modernos, capaces de imprimir a los productos industriales
una clara orientación formal.
La inclinación artesanal constituía una de los puntos más fuertes del método educativo del Bauhaus, pues
permitió elaborar un sistema no académico de enseñanza, sistema que no podría haberse basado en un
enfoque mecanicista.
Cuando Gropius estructuraba el segundo orden de las enseñanzas, el orden de la geometría y el análisis
estricto, distaba de ser tan materialista o funcionalista como habitualmente se lo considera; más aún, la
Bauhaus no atravesó por ninguna fase funcionalista hasta tanto ocupó su dirección Meyer.
Aspiraba a crear una arquitectura clara, orgánica, de una lógica interior radiante y desnuda, libre de
revestimientos engañosos y de triquiñuelas. La responsabilidad de la Bauhaus consiste en educar hombres
y mujeres que comprendan el mundo en el cual viven, e inventen y creen formas que simbolicen ese
mundo.
Desde 1924, los productos y edificios diseñados en la institución comenzaron también a ostentar un Estilo
Bauhaus perfectamente reconocible, aunque Gropius y otros hayan negado la existencia del mismo.
Meyer pudo orientar la obra de la Bauhaus hacia un programa de diseño más “responsable socialmente”.
Surgió un mobiliario de contrachapado, sencillo, desmontable y barato, y se produjo una gama de papeles
murales. Se fabricaron más diseños que en cualquier otro momento
Meyer organizó la Bauhaus en 4 departamentos principales: arquitectura, publicidad, producción en madera
y metal, y tejidos.
A pesar de los desvelos para impedir que la Bauhaus se transformara en instrumento de los partidos
políticos izquierdistas, una implacable campaña contra él obligó finalmente al alcalde a pedir su dimisión.
La política municipal y reacción del sector derechista alemán exigían mucho más. Exigieron el cierre de la
Bauhaus y rematar su fachada.
La obra de Gropius fue definida como “superación de la vanguardia”. Los artistas de la vanguardia creyeron
que la reforma arquitectónica podía efectuarse permaneciendo en la esfera del conocimiento, formulando
un nuevo lenguaje distinto de los precedentes.
El nuevo movimiento sale al campo abierto, y extiende su campo de trabajo a todo el ambiente y toda la
gama de objetos que sirven en un momento dado, a la sociedad; renuncia a la idea de alcanzar de golpe la
victoria, trasladando a la realidad un nuevo sistema de formas, y se compromete en un trabajo paciente e
indefinido de mejora de la producción corriente.
1. El proyecto no se concibe ya como una acción simple que ordene la realidad desde arriba, en un
tiempo y a una escala ideales sino como una serie continua de acciones reguladas según el ritmo y
la extensión de los fenómenos reales.
2. Las experiencias del proyecto no son consideradas ya independientes entre sí, sino que forman una
continuidad también en sentido histórico y establecen una especie de colaboración permanente
4. La tarea de la arquitectura no concierne solo sus cualidades, es decir, la concepción de las formas,
ni solo las cantidades, es decir, los procesos técnicos de ejecución y de multiplicación, sino que es
la mediación entre calidad y cantidad, la cual es posible en cuanto exista una medida común entre
ambas esferas; aquí entra en juego la razón, cuyo deber se aclara únicamente con referencia a
esos dos polos.
Mucho más rico y humano, el cubismo de la Bauhaus multiplica las perspectivas por medio de la
yuxtaposición de volúmenes descompuestos y, liberándose de las exigencias de una visión unitaria, puede
tratar orgánicamente las superficies en modo diverso y congruente con los ambientes internos. Volúmenes
y superficies son también aquí los dos únicos instrumentos figurativos, pero, al no estar constreñidos por un
geometrismo elemental pueden desarrollarse en toda la gama de las virtudes figurativas.
Gropius, último arquitecto de la primera época moderna y primer racionalista, participa más tardíamente en
la evolución en sentido orgánico de la arquitectura moderna. Habiendo abandonado la dirección del
Bauhaus, se dedica al estudio de las casas populares y al urbanismo. En sus obras norteamericanas se
advierte una profunda adhesión a la tendencia orgánica
Fábrica Fagus
Baja Sajonia, Alemania (1911-1925)
Para el arquitecto la forma del edificio debía ajustarse a la
función para la que se proyectaba y corresponder a una lógica
constructiva según dicha función, su imagen no debe esconder
su forma sino mostrarla de una manera bella y moderna, la
arquitectura debería adaptarse al nuevo mundo de las máquinas.
Según Gropius, la forma exacta sin enmascaramientos, con
contrastes claros, la secuenciación de formas iguales y la unidad
de forma y color debían constituir la base de la rítmica de la
creación arquitectónica.
En este edifico se encuentran plasmadas estas ideas, un bloque prismático, de tres plantas con base
rectangular y cubierta plana cuya estructura de hormigón armado con los soportes desplazados hacia el
interior permite liberar los muros exteriores de cualquier función portante y cuya planta expresa claramente
sus intereses comerciales modernos y funcionales.
La fachada se articulaba con estrechos pilares de ladrillo, un poco retranqueados, entre los que se
colocaron los marcos de hierro que sobresalían del edificio y albergaban los grandes ventanales generando
un muro cortina de una ligereza nunca vista hasta ese momento, creando un espacio interior con
abundante luz natural y diluyendo en parte los límites interior-exterior. Es especialmente llamativa la
resolución de las esquinas del bloque ya que en éstas convergen dos ventanales perpendiculares con la
única presencia en ellas de la ligera barra metálica de soporte.
La fábrica Fagus de Gropius es donde por primera vez se sustituyeron los muros de una fábrica por cristal.
Este novedoso, para la época, “muro cortina” tiene una altura que abarca los tres pisos del edificio.
Una estructura metálica de barras de hierro sujeta los planos de vidrio que componen dichos ventanales y
unos planos metálicos contribuyen a remarcar la distribución de las plantas.
Sus propuestas arquitectónicas no tienen nada de abstracto, no se inclinan hacia el gusto del puro
esquema geométrico, anchamente difundido en aquel tiempo, sino que parten de una exacta valoración de
las características de los materiales y de los sistemas constructivos.
Así, los diseños realizados entre 1919 y 1923, a pesar de que nazcan en el ámbito de la vanguardia
alemana y reciban distintas sugerencias formales del repertorio expresionista, se alejan de las ambiguas
regiones del sueño, en las que gusta entretenerse los coetáneos de Mies, y apunta decididamente hacia la
realidad. Mies es ajeno al empeño teórico y permanece fiel a su compromiso individual
No importa el ‘que’, sino solo y simplemente el ‘como’. Espiritualmente, no significa nada que produzcamos
mercaderías y con qué medios lo fabriquemos, que construyamos alto o bajo, en acero o en vidrio, que se
tienda a centralizar o a descentralizar en la construcción de las ciudades. Pero es decisiva la cuestión del
valor. Debemos presentar nuestros valores, debemos proponernos finalidades ultimas, para conquistar
nuevas medidas”. Se trata de un razonamiento muy personal que tomado al pie de la letra puede ser muy
peligroso, quizás incluso perjudicial para el propio Mies.
En 1930 reemplaza a Meyer en la dirección de la Bauhauss en Dessau, dos años más tarde la extrema
derecha obliga a trasladarlo a Berlín.
La finalidad primera es la de procurar al estudiante el conocimiento y la habilidad para la vida práctica; la
segunda es desarrollar su personalidad y capacitarlo para el empleo coherente de su conocimiento y de su
habilidad. En su forma más simple la arquitectura depende de consideraciones exclusivamente funcionales,
pero puede alcanzar, a través de todos los grados del valor las esferas más altas de la existencia espiritual.
Mies parece querer empezar desde el principio, examinando los hechos más simples y viendo como de
ellos surgen los valores más simples. El ambiente cultural americano, confuso y discontinuo, pero amplio y
rico en muchas tendencias, acoge con gusto las experiencias de Mies, pero se resiste a su desarrollo;
análogamente el paisaje urbano de Chicago, por lo precario y fragmentario de sus elementos, acoge
fácilmente en su trama los edificios de Mies, pero como episodios cerrados y circunscriptos.
El rascacielos de acero y cristal, la casa con patios interiores abiertos, la gran sala sin pies derechos
sostenida por una estructura externa- han sido puestas en práctica y rinden perfectamente en una serie de
experimentos posteriores.
El tema más extensamente estudiado es el del edificio alto, el “rascacielos” al que introduce extraordinarias
innovaciones. Los edificios de Mies son siempre iguales en sus elementos constructivos.
La discreta pero irresistible eficacia didáctica de su trabajo comienza exactamente en el Seagram Building
Las características volumétricas y constructivas del Seagram, torcidamente interpretadas en un primer
momento, han servido, por el contrario, para esclarecer dos problemas generales de los edificios urbanos
altos.
1. El desplazamiento hacia atrás del edificio con respecto a la alineación de la Par Avene y la plaza que lo
rodea no solo son soluciones para singularizar un volumen aislado, sino que también contienen una crítica
de fondo al rascacielos tradicional que surge de un zócalo que ocupa toda la superficie de la parcela,
repitiendo en su base la continuidad de la calle-pasillo. Mies tiende, en cambio, a desvincular la torre del
tejido urbano. Desaparece así, incluso la distinción entre parcela y calle.
2. El curtain wall del Seagram, construido en bronce y vidrio atérmico de color marrón, confiere al enorme
prisma recto un brillo excepcional, precisamente gracias a la renuncia a cualquier contraste de color entre el
dibujo de la estructura metálica y los lienzos vidriados, que tienden a confundirse en grandes planos opacos
de tonalidad uniforme
Mies reduce los planos a ser elementos de encuentro entre material y estructura, planos de cristal, cemento
y también de mármol. Los elementos de la superficie vienen a ser puntos de enlace entre los elementos
estructurales. La transparencia es obtenida mediante largas hileras de ventanas continuas, sobremontadas
por una lámina de paramento suspendido.
Desde la última obra alemana hasta la primera norteamericana transcurren 10 años. Y el tema es aquí
necesariamente volumétrico. Entonces Mies vuelve a Mondrian y al neoplasticismo bidimensional, pero la
génesis y el método creador son los mismos: construcción de la estructura a la vista; luego introducción en
esta estructura de planos diversos, ya de vidrio, ya de ladrillo blanco, ya de madera.
Pabellón de Barcelona
Barcelona (1929)
Mies se da cuenta que un pabellón para exposiciones no es un edificio como los demás, sino un objeto
esencialmente diferente, que existe solo durante el tiempo que será visitado y en función del público que lo
visita. No lo imagina como un edificio cerrado, sino como un conjunto de partes separadas, aptas para
calificar transitoriamente cierta porción de espacio.
La abundancia de medios le permite, en Barcelona, hacer uso de materiales preciosos como el mármol, el
ónix, el cristal coloreado: así ningún obstáculo se opone al acabado perfecto y a la integridad del resultado
arquitectónico.
Un basamento de travertino, de 8 escalones de altura, que contenía en una esquina un estanque de agua
rectangular, que tenía entre otras, la función de reflejar las restantes partes del edificio y de dar un
“espesor” al propio basamento, dando la impresión de estar “excavado”;
Un muro exento con un banco corrido adosado, que sostenía virtualmente y relacionaba los planos del
techo de las zonas cubiertas del Pabellón, configurando también un seto de separación entre sus espacios
exteriores e interiores;
8 soportes metálicos cromados de sección cruciforme, que soportaban el forjado de hormigón que cubría la
zona de exposiciones propiamente dicha, y cuyo ambiente interior se articulaba por medio de otras
particiones de fábrica o con paneles de acero y cristal;
Otro segundo estanque, más pequeño, del que surgía una escultura figurativa de Georg Kolbe, colocada en
el lado más corto de la construcción y contenida en una especie de patio rodeado en tres de los lados por
muros revestidos en ónice, dando lugar en el exterior no ya a un juego de láminas, sino a un volumen
cerrado;
Los planos tienen los colores propios de los materiales, el brillo del metal cromado, el grano del travertino,
los veteados del ónice. Estamos ante la lógica de la única decoración admitida por Loos, la que deriva
precisamente de la naturaleza de los materiales.
El basamento sobre el cual se levanta toda la estructura, extendiéndose hacia un lado, más allá del área
cubierta por el techo, parece simbolizar “el espacio infinito”. Contribuyen también a este efecto los
materiales, pues el piso de mármol, visible en todas partes subraya la continuidad espacial de todo el
edificio; pero este mármol y el utilizado en las paredes poseen otro significado: el sentimiento de lujo que
imparte el material apoya la idea de transición de cantidad a calidad. Se demuestra aún más la continuidad
por la transparencia de las paredes vidriadas incluidas en diversas partes del edificio, de suerte que la
mirada de un visitante podía pasar de un espacio a otro aunque le fuera imposible hacerlo físicamente;
Mies usó vidrio coloreado de modo de poder apreciar también su materialidad.
Le Corbusier
Permitidos por el uso de la tecnología moderna y en particular por el hormigón armado. Es gracias a estos
recursos por los que es posible sostener una construcción mediante pilares muy delgados, realizar una
cubierta plana capaz de soportar el peso de la nieve, disponer una planta libre de gruesos muros
estructurales, abrir ventanas de la longitud deseada, puesto que el muro de fachada ya no es portante, sino
que apoya en voladizos de los forjados; este último principio constructivo permite disponer de una fachada
libre de elementos verticales de soporte. Este último punto ha contribuido, por su composición, a la
investigación de los trazados reguladores y de la nueva escala dimensional antropométrica, el modulor,
elaborado por Le Corbusier en torno a 1940 en sustitución del sistema métrico decimal.
El tema de la urbanística
En la práctica apunta a la separación de los edificios respecto de la calle, que en las disposiciones
tradicionales funciona como un pasillo; sugiere el distanciamiento de los edificios entre ellos,
construyéndolos lo más altos posibles, y compensando este desarrollo en vertical con amplias zonas
verdes; la simplificación máxima de la red viaria, diferenciando sin embargo las funciones; la disposición de
calles en el propio interior de los grandes inmuebles residenciales, dotados de servicios colectivos, asilos,
espacios para el deporte; la separación de las zonas industriales y los centros direccionales, aún también
con grandes zonas verdes, de las áreas residenciales, con las que deberían estar estrechamente
relacionadas para no crear movimientos pendulares.
Es indudable que las piezas del gran mosaico urbanístico que son sus exponentes, es decir, los rascacielos
cruciformes o en Y, los edificios de pliegues sucesivos, los inmueble-villas, las unités d’habitation, siguen
siendo las propuestas de arquitectura a escala urbana más significativas surgidas en el ámbito del código
racionalista y de todo el Movimiento Moderno.
Encontró la manera más adecuada para su difusión, instituyó la enorme capacidad de penetración de los
eslóganes y de su visualización en el hombre de la calle y en la administración.
Le Corbusier se propone superar el contraste entre progreso técnico e involución artística, define técnica y
arte como dos valores paralelos: El ingeniero inspirado en la ley de la economía y guiado por el cálculo, nos
pone de acuerdo con las leyes del universo; el arquitecto, por la disposición que imprime a las formas,
realiza un orden que es pura creación de su espíritu.
Le Corbusier es el principal protagonista de las polémicas sobre arquitectura moderna y, en consecuencia,
es el primero en sufrir los efectos de la represión que excluye a los arquitectos modernos de los encargos
públicos y de gran parte de la construcción privada.
El concepto de brise-soleil lo pone a punto durante aquellos años; se trata al principio, de una simple
solución técnica, es decir, una pantalla para defenderse de los rayos del sol; más tarde se convierte en una
galería transitable, lo que impone una estructura externa de hormigón armado, dejando en hueco los
tabiques y las vidrieras.
Le Corbusier está armado de una metodología urbanística ampliamente desarrollada en teoría, y su
problema inicial es la búsqueda de la escala adecuada dentro de la cual pueda desarrollarse una
intervención arquitectónica global, que reúna en un organismo unitario cierto número de células
residenciales y sus servicios comunes. Nace así el concepto de la unité d’habitation que Le Corbusier ha
madurado lentamente durante toda su vida.
Después de la guerra asiste a los primeros intentos de reconstrucción brindando las propuestas más
variadas, enuncia sus conceptos arquitectónicos y urbanísticos -el brise-soleil, los cuatro caminos, las
cuatro funciones de la urbanística, los tres asentamientos humanos, el modulor, etc.-.
Llegamos aquí al fondo mismo del credo funcionalista: que los problemas sociales y humanos de nuestra
época son, en gran medida, productos de un entorno falso y deficiente, y que la condición humana puede
mejorarse mediante una nueva arquitectura que reconquiste los valores verdaderos y fundamentales.
El Funcionalismo halló su manifestación más representativa en los proyectos y las teorías de Le Corbusier.
El propuso la “ciudad jardín vertical”, es decir una gran unidad de habitación rodeada de un espacio libre
que conservaba, en una forma nueva, alguna de las cualidades y de la identidad de la aldea tradicional,
restableciendo al mismo tiempo los “goces esenciales”: la luz del sol, el espacio y el verdor.
EL MODULOR: Considera que todos los hombre tiene el mismo el organismo, las mismas funciones, las
misma necesidades. Le Corbusier genera una nueva escala de medida que parte de un hombre ideal, que
puede adaptarse a espacios normalizados.
Nueva escala de medida en relación armónica.
Poco después de 1933, empezó a reaccionar contra la producción mecanizada de la machine à habiter,
Empezaron a aparecer elementos técnicos primitivos en su obra, con una frecuencia y una libertad de
expresión cada vez mayores,
La carga de expresión se desplazó ahora desde una forma abstracta al propio medio de construcción.
Su estilo empezó a moverse en dos direcciones opuestas al mismo tiempo. Por una parte volvió al lenguaje
de lo vernáculo (al menos en su obra doméstica), y por la otra abrazó una monumentalidad de grandeza
clásica.
La yuxtaposición de materiales contratantes se convirtió en aspecto esencial del estilo de Le Corbusier
Casa Dominó
(1914)
Valoró las posibilidades de las estructuras reticulares.
Los forjados de hormigón sostenidos sobre pilares
separados de los muros de cerramientos de dos plantas,
unidos por una escalera, permitían distribuir la planta con
total libertad dentro de la retícula estructural.
Los muros no tienen función estructural, solo sirven de
cerramiento y para expresar la pureza de formas. El
sistema Dom-ino posibilitó llevar a efecto los Cinco
puntos de la Nueva Arquitectura
Casa Citrohan
Este prototipo refleja ya desde su denominación los claros propósitos que guiaron su diseño. Le Corbusier
lo llamó casa Citröhan y se refirió a él como "la máquina de habitar".
Las casas Citrohän representan el primer ensayo importante de Le Corbusier sobre una vivienda en serie
que puede construirse a partir de elementos estandarizados. Intenta direccionar la arquitectura hacia ese
rumbo, con un criterio práctico y racional, convencido que el avance de la industrialización puede ser el
vehículo para satisfacer gran parte de las necesidades del hombre.
Pensada para ser construida en cualquier país, el prototipo Citrohän es una revisión de los conceptos de la
casas Dom- Ino.
La exposición de viviendas coordinada por Mies Van Der Rohe patrocinada por la Deutscher Werkbund,
para este evento, Le Corbusier elabora dos versiones de la casa Citrohan, una variante con dos viviendas
adosadas sobre su lado menor, elevadas del suelo por una serie de pilotis de hierro, y una vivienda
individual, que resume las características de los ensayos realizados desde 1920.
Si bien la arquitectura orgánica tiene aciertos reales, no propone un método como lo hace el racionalismo
con la Bauhaus. No hace escuela de difusión general.
Por otra parte, racionalismo y organicismo implican dos actitudes ideológicas completamente diferentes:
mientras que el primero apunta a un arquetipo de sociedad, el segundo busca la armonía del individuo con
la sociedad.
Esta arquitectura surge de una rica síntesis entre una metodología empírica y con el desarrollo del
racionalismo como método básico de proyectación.
Sven Markelius
En Suecia, las tesis del movimiento moderno son introducidas, por primera vez y de forma polémica por un
grupo de jóvenes arquitectos, entre los que se destaca Sven Markelius. En 1928 construye su discutida
vivienda propia, y en 1932 la sala de conciertos en Hälsinborg. Estas obras, al igual que las de sus
compañeros despiertan las acostumbradas reacciones en la opinión pública y en los maestros de tendencia
romántica.
La discusión se apaga cuando la costumbre hace perder, a las formas sencillas de Markelius y de los
demás la crudeza de la novedad y hace surgir las sutiles referencias a la tradición, que no han faltado
nunca, incluso en las obras que más se acercan al estilo internacional
En el pabellón sueco de la Exposición mundial de Nueva York, Markelius ha demostrado que se adhiere a
la nueva tendencia humanizadora. La disposición abierta de la planta, la elegancia de los colores y de los
detalles el uso delicado de los materiales, daban a esta obra un magnífico sentido de equilibrio.
Dinamarca: Jacobsen
Alvar Aalto
Pasa a dominar la escena de la arquitectura finlandesa durante la década del ‘30 y ha ejercido una enorme
influencia. De hecho Aalto se dedicó a explotar los logros formales de sus primeros proyectos,
desarrollando su feliz síntesis entre forma y diseño racional y moderno por una parte y construcción
autóctona e inspiraciones orgánicas por otra.
Las referencias al clasicismo o a los métodos artesanales se produce sobre una sólida base de modernidad
que le da a sus propuestas un carácter progresivo y humanista que le diferencia de reacciones
neotradicionales.
Supo desarrollar una capacidad ejemplar para otorgar identidad y existencia a cada parte del edificio.
Supo crear conjuntos en que cada función distinta posee un cuerpo diferenciado pero a la vez articulado e
inseparable de todo el conjunto. Al mismo tiempo desarrolló un aprecio por las cualidades concretas de los
materiales, eso le permite realzar en la arquitectura moderna el uso de materiales tradicionales como el
ladrillo y la madera.
Le preocupa la situación del edificio en el entorno, la definición de plataformas, la relación y
compenetración entre los diferentes volúmenes.
Aalto constituye, posiblemente la influencia subterránea más fuerte dentro de la arquitectura de la segunda
mitad del XX. Aporta una concepción de la arquitectura y del método proyectual abierto basado en articular,
desplazar y girar los cuerpos edilicios
La primera característica de Aalto, en comparación con los maestros de la segunda generación, es
justamente la ausencia de fórmulas de composición, de principios teóricos. Por otro lado ello responde a
una diversa situación histórica: los hombres del racionalismo, para crear un movimiento, para imponerse
tenían que fraguar rígidas fórmulas, elaborar un limitado vocabulario figurativo e insistir con él con
disciplina, la tercera generación de arquitectos modernos ha nacido, en cambio, en el clima del
funcionalismo y se ha propuesto liberarse de sus dogmas. El problema fundamental, formulado consciente
o sobreentendido, consistía en hallar un punto de unión entre los dos términos del binomio, utilitarismo
tecnicista y abstracción formal, que la segunda generación había dejado separados
Alvar Aalto, no propuso teorías, sino que estimuló una integral revisión del pensamiento funcionalista
mediante sus cinco obras fundamentales, el Sanatorio de Paimio, la biblioteca de Vipuri, el pabellón
finlandés en París, y en 1939 el de la exposición de Nueva York.
Los más evidentes caracteres distintivos que se pueden observan en estas obras son:
Una mayor modestia.
Una mayor preocupación tecnológica
Una mayor preocupación por la vida del hombre
Una mayor habilidad en los detalles. ...
Un aprovechamiento de los progresos de la producción industrial.
Una liberación respecto al diccionario cubista.
Una nueva conciencia de los espacios interiores
La planta libre del racionalismo uniforma todos los ambientes de un piso, establece una continuidad
planimétrica, pero no una continuidad espacial. La continuidad vertical no tenía caída entre las aspiraciones
racionalistas porque los ideales de volumen unitario y de la lúcida piel la negaban.
Saarinen
La obra de Saarinen, a pesar de basarse en la arquitectura moderna y de difundir el Estilo Internacional en
EEUU, se mueve entre dos polos muy distantes: obras estrictamente racionalistas a base de formas rectas
y simples, de ascendencia miesiana, y otras exageradamente expresionistas, simbolistas y ornamentadas,
basadas en el alarde estructural. De manera incansable, experimentaba para cada uno de sus proyectos
una multitud de soluciones diversas, que se movían entre estos polos formales contrapuestos.
Saarinen fue uno de los primeros arquitectos después del Movimiento Moderno que intentó incorporar la
metáfora a la arquitectura contemporánea, situando en una posición secundaria las exigencias
funcionalistas. Saarinen busca nuevas formas estructurales y de cubrición que comporten un nuevo
repertorio formal, utilizando los nuevos materiales, en especial el hormigón armado y recurriendo a las
claras configuraciones organicistas y referencias simbólicas, como la forma de una gran nave para la
terminal de la TWA.
Las cuestiones estéticas y simbólicas saben estar siempre por encima de las razones meramente
materiales y estructurales, industriales y matemáticas. La búsqueda de formas curvas que sean a la vez
estructura y contenedor que sostiene, define y cualifica los espacios es un recurso que va más allá del
cálculo y las leyes de la estática para explorar aquellos recursos más expresivos, monumentales y creativos
de la arquitectura. Por otra parte, Saarinen superó uno de los prejuicios de la ortodoxia del Movimiento
Moderno al usar diferentes materiales en el mismo plano, y al usar el mismo material para cosas diferentes.
Asplund descarta sucesivamente varias soluciones de estilo y construye la nueva ala de forma
decididamente moderna. Surgiendo a la espalda de un palacete neoclásico y dando a una plaza antigua, el
edificio se halla armónicamente unido al ambiente: los nuevos locales se agrupan alrededor de un patio
cubierto, en contacto con el antiguo, descubierto a través de una gran vidriera. En el exterior en cambio, el
nuevo bloque está subordinado al antiguo del que acepta sus principales vínculos gráficos.
Este es el primer ejemplo de un edificio moderno que se inserta en un ambiente antiguo, sin interrumpirlo
polémicamente, incluso con el propósito de respetar su continuidad
La intervención de Asplund trata especialmente la crujía que une las dos partes para conseguir que la
planta funcione de forma unitaria. En la parte nueva crea un vestíbulo, con luz cenital, anexo al patio del
edificio existente y que repite su forma. El diálogo entre los dos vacíos que abrazan la crujía: patio y
vestíbulo, constituye el núcleo alrededor del cual gira el edificio, rompiendo así la percepción de dos
ámbitos separados.
En el exterior encontramos pequeños detalles que suponen toda una lección de cómo vincular sutil y
respetuosamente dos arquitecturas tan diferentes. El desplazamiento de las ventanas del nuevo edificio
hacia el antiguo y la determinación de realizar el único acceso a través del antiguo edificio hacen que la
fachada hacia la plaza muestre una equilibrada combinación de antiguo y moderno basada en un gran
respeto por el pasado. En el interior los acabados con paneles de fresno junto con una cuidadosa
disposición del mobiliario y objetos decorativos potencian la intención de crear un espacio acogedor.
Cabe destacar la independencia de tratamiento entre el interior y el exterior. Frente a un exterior sencillo,
desprovisto de ornamento y sin alusiones estilísticas, centra su interés en la organización interior y las
proporciones.
El espacio constituye el elemento generador del proyecto y queda determinado por la tensión creada entre
el individuo y la arquitectura. Comenzando por el estudio de los ambientes, los recorridos y los movimientos
del hombre y se llega a la creación de los espacios más indicados. Es en este sentido que la Ampliación del
Ayuntamiento de Gotemburgo es considerada una obra maestra de la arquitectura orgánica, movimiento
BLOQUE V
Unidad 1: La reconstrucción de la segunda posguerra.
La segunda guerra mundial deja en Europa con destrucciones materiales muchos mayores, hacen que los
problemas de las ciudades, destruidas casi totalmente en algunas partes, sea uno de los principales temas
a resolver. Pero la guerra también tuvo su costo en lo político, social, económico, en lo humano y lo moral.
Como el resultado a favor de los aliados (EEUU, Francia, Inglaterra y URSS) se aniquilan los dos
regímenes totalitarios: el nazismo y el fascismo.
La crisis económica junto con las problemáticas de la vivienda no hubiera sido posible de solucionar sin la
pronta ayuda económica de EEUU. Con la puesta en acción del plan marsharll, la ayuda económica se
destinó a reflotar las economías europeas, se destinó a la vivienda y a la acción pública, y todo tipo de
obras públicas de urgencia. Haciendo que EEUU se desarrolle económicamente y expanda en lo
técnico/científico.
Por la ayuda americana, comienza en los países desbastados, un periodo de expansión económica que
impone grandes transformaciones sociales, dado que los ritmos de este proceso se desarrollan de manera
rápida, casi en todas partes se producen conflictos entre las medidas de urgencias requeridas por las
destrucciones y las medidas a largo plazo requeridas por el desarrollo económico: es decir entre la
reconstrucción y planificación.
Cuando la guerra termina, la principal reacción es de simple y elemental alivio. Se extiende un sentimiento
de cansancio, un deseo de evitar cuestiones de fondo, de aferrarse a resultados inmediatos.
El caso inglés como ejemplar: las news towns en sus diferentes fases
En 1942 solo el 3% del territorio británico se encuentra bajo el control de un plan vigente. Los
inconvenientes de eta situación se evidencia por la crisis económica que deja al desnudo los defectos
funcionales de la industria y de la agricultura inglesa. La crisis impulsa al gobierno a intervenir en la vida
económica, formando las condiciones para ejercer, también en el campo urbanístico, una acción más
restringida.
En 1940 se publican las desventajas de la concentración demográfica y económica en torno a las grandes
ciudades; reconoce que las administraciones y las leyes pueden mejorar la ordenación interna de las
ciudades, pero no regular su crecimiento; sugiere la creación de una autoridad central que posea el control
de los terrenos edificables, aconsejando la formación de nuevas ciudades o la ampliación de ciudades
existentes en posición favorable.
Quizá este informe hubiera quedado en una siempre recomendación si la guerra no hubiera intervenido
(como las epidemias para la ley sanitaria)
Mientras prosiguen los estudios, el grupo MARS presenta, en 1942, un proyecto teórico que rompe la
continuidad del tejido urbano y propone una serie de barrios separados por zonas verdes y unidos en forma
de peine a un eje principal que atraviesa el centro histórico y las zonas industriales. En 1944, el country
council se mantiene razonable lejos de todo concepto de regularidad geométrica y toda intervención en las
zonas construidas. Así basándose en una detallada encuentra sobre viviendas existentes, el plan distingue
varias zonas concéntricas:
1. El inner ring → incluye el área de condado de Londres, cuya densidad es excesiva y que debía ser
descongestionada
2. El suburban ring → el suburbio cuya densidad era satisfactoria pero que debía ser reorganizada y
quipada.
3. El Green belt → zona verde que rodea la ciudad, que debia quedar como esta, sin ser invadida por
los edificios.
4. El outer ring → donde deberían levantarse los nuevos centros, en forma de nuevas ciudades y no
como barrios-dormitorios. Para que tenga vida autosuficiente.
5. Y la red viaria basado en un sistema radial rápido, un anillo interno situado en la inner ring y uno
externo al límite de Green bel y outer ring.
En 1946 se aprueba las new towns act: para cada nueva ciudad se crea un ente especial, independiente de
las administraciones locales pero relacionadas con el poder central, con el poder de adquirir terrenos,
planes de uso, etc
En 1947 se aprueba la nueva ley urbanística inglesa, que unifica los métodos de planificación de todo el
territorio. A partir de entonces la realización de los planes y la construcción de las nuevas ciudades se
efectúan rápidamente.
Para 1954 la mitad de la población ya estaba re-ubicada en las 7 nuevas ciudades previstas. A medida que
los planes urbanísticos se traducen a la realidad, aparece una serie de problemas de edificación cuyas
soluciones deben irse encontrando gradualmente.
Los urbanistas trabajaron ene l estudio de las causas estructurales de los defectos constatados y vieron la
necesidad de corregirlos con programas de intervención aún más extensos y radicales.
El mérito máximo de los técnicos y de las autoridades inglesas consiste en no haber considerado la
reconstrucción de los daños de la guerra como un problema asilado, sino como parte indivisible de un
proceso total de planificación; por esto, exceptuando los inconvenientes parciales, la experiencia inglesa
tiene una enorme importancia metodológica y seguida con excepcional interés en todo el mundo.
Entre 1945-1951 se fundaron las primeras 10 new towns, entre las que destacan STEVENAGE y
HARLOW. Formalmente, la arquitectura de las new towns estaba inspirada en la arquitectura sueca
(new empirism) el interés en esta experiencia consiste en el hecho de producirse en continuidad
con la tradición de la ciudad-jardín, por otra parte, y en los nuevos planteamientos del urbanismo
racionalista basado en la planificación estatal, en la segregación de funciones, en la creación de
nuevas ciudades y en la importancia de los espacios verdes, entre zonas, por otra.
Tras las críticas de la primera generación de new towns, en los años ’60 se presentó un nuevo
prototipo, que encontró su plasmación en CUMBERNAULD. Se trataba de crear ciudades más
compactas, aumentando densidades, disminuyendo distancias y estructurando las new towns en
torno a un potente centro cívico.
A principio de los años ’70 se potencio una tercera generación de new towns con una mayor
flexibilidad urbana y una mayor diversidad de tipos edificatorios.
Entre 199 y 1950, gracias a la ayuda américa, se construyen 100.000 viviendas. Desde entonces, la
reconstrucción procede a buen ritmo.
La legislación urbanística deja toda la responsabilidad de la planificación a las autoridades locales, de esta
manera los intereses particulares pesan más, y en ningún lugar se logra realizar una operación de
expropiaciones y reordenaciones a gran escala.
En las ciudades alemanas reconstruidas, se conservan a menudo, y con mucho esmero, todos los aspectos
antiguos y tradicionales supervivientes. Muchos monumentos dañados o arrasados se vuelven a levantar
con gran cuidado, conservando su aspecto primitivo.
Esta forma de entender la reconstrucción se debe tanto al cariño por la imagen de la ciudad tradicional, que
se empeña en reproducir lo más fielmente posible el antiguo uso del suelo. La falta de un adecuado
encuadre urbanístico y el coste elevado de los materiales respecto de la mano de obra, han dado a la
arquitectura alemana, sobre todo en los primeros años de la posguerra, un carácter bastante artesano; pero
siguiendo los pasos del desarrollo industrial, con el mejoramiento de los productos y el aumento de los
costos de la mano de obra, se manifiesta una tendencia opuesta, hacia la arquitectura altamente
industrializada.
Las energías humanas ya no son las mismas que en la primera posguerra: los mejores hombres de la
antigua generación han tenido que abandonar Alemania.
Sin embargo, HANS SCHAROUN, es el arquitecto que permaneció fiel al expresionismo durante toda su
vida y representa una especie de oposición al racionalismo. Las obras que en los años posteriores a 1945
realizan, destacan por ser más agiles (con formas menos rígidas y puristas), por tener mayor variedad de
materiales (volviendo a introducir materiales tradicionales como piedra y madera), por recurrir a formas
curvas (resonancias aaltianas) y por una mayor adaptabilidad al medio. De todas formas, siguen siendo
muy funcionalistas, transparentes, basadas en la repetición y estricta simplicidad y proponiendo unos
grandes espacios libres y unos edificios pensados desde el interior.
HANS SCHAROUN ha sido uno de los arquitectos que mejor ha sabido unir los experimentos de la
transparencia, la luz y la fluidez espacial de la arquitectura alemana de principios de siglo con las
características de la arquitectura de la posguerra. El organicismo expresionista y las referencias a la
arquitectura medieval que se expresan en su obra se sintonizan con las nuevas corrientes de los años ’50 y
’60.
La incertidumbre general, durante el régimen fascista, priva a los mejores arquitectos de la joven
generación, la posibilidad de dar plena medida de sus capacidades, entre ellos, TERRAGANI (el más
dotado). Concentra cada vez más sus fuerzas en una profundización de los problemas formales, debido al
enunciado polémico de arquitectura moderna=arquitectura fascista. Por lo que quita a la arquitectura el
apoyo de una relación funcional concreta y termina por adoptar el juego de volúmenes cerrados y roza el
formalismo.
En el campo de la arquitectura algunos de los que llevaron a cabo la primera batalla por la arquitectura
moderna, y quizás los mejores, han muerto.
Al principio, todas estas incertidumbres se llegan a superar con una nueva e intensa sensación: la de haber
vuelto a tomar contacto con la realidad, de ver con ojos nuevos. De esta nueva sensación a nacido el
llamado “NEORREALISMO”, que ha influido de varios modos en la cultura italiana. La arquitectura de
RIDOLFI en terni y el barrio tiburtino en roma tienen en común el deseo de ajustarse a la realidad cotidiana,
concreta, circunstanciada, con preferencias para las formas populares, el interés circunscripto al ambiente
cercano, el rechazo de las abstracciones y exotismos.
Hasta 1947, el fervor y la actividad de los arquitectos se dirige, sobre todo, a la técnica de la construcción;
dado que no se construye casi nada, se presentan sobre todo estudios y proposiciones teóricas.
Bruno Zevi propone un programa de revisión de la herencia cultural anterior a la guerra, que se suele llamar
con el término contario al racionalismo. Mientras que otros arquitectos insisten con la continuidad anterior a
la guerra, empiezan las polémicas entre orgánicos y racionalistas.
El interés por los procesos constructivos corrientes es sustituido por el interés por las formas en que estos
problemas se han configurado tradicionalmente. El paso de una actitud activa e innovadora a otra
prevalentemente receptiva y retrospectiva.
A distancia de tiempo, solo una pequeña parte de esta actividad vale como contribución a la solución de
algunos problemas marginales de la ciudad moderna, mientras algunas limitaciones implícitas pesan
negativamente.
La costumbre de trasladar las exigencias de continuidad histórica al terreno formal, que ha llevado a
deliberadas imitaciones de formas pasadas
Un concepto estrecho de la composición arquitectónica por la simetría y el centralismo. Este
presupuesto obstaculiza la actividad de NERVI donde su excepcional talento constructivo se ve
obligado a ejercitarse dentro de esquemas geométricos convencionales, ocupándose de lo
acabados en vez de ocuparse de la intervención del organismo estático.
La dificultad de enfrentarse a determinada escala con los problemas que condicionan cada vez más
urgentemente la vida de la ciudad moderna y por lo tanto, la falta de continuidad entre el
compromiso arquitectónico y el urbanismo. (punto crucial)
Debido a la falta de relaciones horizontales con las otras formas de planificación, todas las ciudades, se ven
rodeadas por una periferia donde se repite el desorden y la escualidez propios de los conjuntos paleo-
industriales, debido a la desproporción entre la escala del proceso y los recursos.
El campo de la arquitectura, en los años posteriores a la guerra, está definido por el liderazgo de
arquitectos procedentes de las clases altas. En este contexto surge una enorme diversidad de corrientes
arquitectónicas a finales de los ’40 y principio de los ’50, que viene potenciada tanto por la diversidad
cultural y urbana como por las distintas posiciones políticas. En el contexto romano surge una corriente
neorrealista, arquitectos como QUARONI, RIDOLFI y otros expresan esta corriente de arquitectura
neopopular. El motor era el deseo de utilizar un lenguaje accesible, en oposición a la abstracción y al
hermetismo de las obras de TERRAGANI. En Génova, Milán, Turín surge una arquitectura más elitista y
delicada basada en una cierta recuperación de los materiales y figuraciones de principio de siglo, se la ha
clasificado con el termino neoliberty.
RIDOLFI se estaba defendiendo de un tipo de saber cultural autónomo que no podía ser transferido por
métodos auténticamente modernos, sino que requería de la permanencia de ciertos parámetros
artesanales. Elementos mínimos, al detalle, a la recuperación de la certeza del oficio.
Neorrealismo hay una búsqueda de la verosimilitud tradicional. Nace relacionado con el movimiento hacia
la arquitectura orgánica.
Una de las manifestaciones de los años 50 y 60 la constituyen aquellos esfuerzos dirigidos hacia la
búsqueda de nuevas formas a partir de la técnica y materiales. Se trata de una búsqueda en la que
predominan los objetivos experimentales y expresivos que los productivistas. Se destacarían los trabajos de
ingeniería y arquitectura de NERVI, todo su expresionismo estructural se desarrolla en sus obras. En ellas
se expresan con todo su peso los criterios compositivo de los paradigmas de la arquitectura clásica en
Italia, en especial el panteón. Por ello en sus obras predominan la regularidad, simetría, repetición, solidez
y horizontalidad.
Por otra parte, una situación objetiva que existió en el país durante más de una década, desde el final de la
guerra fue la fuerte demanda de viviendas, la pobreza de la industria, la necesidad de que en la obra de
reconstrucción se utilizase una enorme cantidad de mano de obra no cualificada, fenómenos que llevaron a
aquel emblemático “plan de incremento del empleo obrero-viviendas para trabajadores”, que trataba de
resolver mediante un único recurso una necesidad doble. La reconstrucción de la industria no fue posible
en Italia:
6. Porque en muchas regiones la industria no podía ser reconstruida ya que debía implantarla
7. Porque la construcción de viviendas trataba de reparar no solo el daño causado por la guerra, sino
también la antigua injusticia social
Diferente al neorrealismo (una forma popular, difundida y al alcance de todos) la arquitectura neorrealista
había creado obras importantes pero que no había sido suficiente para determinar una asimilación
generalizada y democrática. Una arquitectura que no había superado los términos de una cultura posbélica
con todas las dudas y las ambigüedades propias del concepto de cultura popular.
A partir de los años 50 puede atribuirse a le Corbusier el concepto de “neobrutalista”. Será la arquitectura
de este último periodo la que tendrá mayor influencia internacional. Le Corbusier es totalmente consciente
de haber superado el límite que separa la metodología del movimiento moderno y unos nuevos patrones
formales para responder a una nueva realidad. La obra más paradigmática, RONCHAMP, constituye una
de la más clara de la revisión formal, en ella se alcanzan los más altos grados de expresividad y épica en
una arquitectura que evocar los valores espirituales de su destino como edificio religioso. En su textura
contrastan el granulado blanco de los muros y el hormigón visto bruto de la cubierta. Queda expresado que
la esencia de la arquitectura está en la idea de lugar, es decir, el espacio cultural definido por la luz, las
formas, los valores simbólicos y las calidades de los materiales.
Pero no hubiera sido posible Ronchamp sin las formas curvas de Oscar Niemeyer o el espacio ondulado de
Alvar Aalto. El edificio exige la contemplación en el exterior y en el interior su carácter épico y expresionista
solo se escapa por una columna que sostiene el enorme voladizo.
Ni en sus últimas obras cesa Le Corbusier de hacer innovaciones, siempre se mantiene en una
inalcanzable búsqueda de un repertorio abierto de formas. De esta manera, en el último Le Corbusier
conviven el arquitecto racionalista que busca modelos repetibles y el artista que renuncia a ello para
alcanzar la dignidad del símbolo y el monumento.
Sus muros pesados y protectores parecen guardar un secreto, que es simbólicamente ofrecido al ambiente
circundante por el techo curvado. También el interior tiene una referencia vertical, gracias a las tres torres
que se elevan para recibir luz.
La síntesis de cerramiento y de apertura no solo satisface la tarea de formar una iglesia sino que también
crea un verdadero centro donde el hombre experimenta la impresión de un retorno a sus orígenes.
Al estar acopladas las unidades de dos en dos, a cada vano doble de la fachada
le sucede verticalmente otro sencillo; de esta manera la serie de balaustradas,
que confieren un carácter horizontal al organismo en su conjunto, se presenta
Convento de La Tourette
Lyon, Francia (1954)
El edificio resulta planimetricamente más unitario y compacto que sus obras prebélicas, refleja una relación
más íntima con el entorno natural y retoma probablemente la distribución de otro convento dominicano.
A pesar de ello, o quizás, precisamente, por estas propias características, el edificio se convierte en
paradigma de muchas obras posteriores.
La Tourette reinterpretaba simplemente este modelo ideal como un esquema bipartito que abarcaba la
iglesia “pública” y el claustro “privado”. Elevada sobre el suelo, esta oposición entre el volumen vertical de
la capilla y el estrato horizontal del deambulatorio quedó dramáticamente expuesta por el declive del
terreno, dejando paso por debajo del edificio a la colina que permite utilizar el espacio liberado para
caminar y meditar.
Tiene un tratamiento brutalista. Todas las piezas están estructuradas en un edificio introvertido, que niegan
algunas de sus vistas al exterior.
Fue construido para ser un mundo autónomo para una comunidad de monjes de claustro. El convento está
formado por un centenar de células individuales, una biblioteca comunal, un refectorio, un claustro en la
azotea, una iglesia y las aulas. Cada una de las cien células cuenta con un balcón orientado hacia el
exterior, con zonas comunes debajo y el claustro corriendo por el techo.
La forma estructural del edificio es de hormigón armado formando una retícula, con superficies de vidrio
situadas en tres de las cuatro fachadas. Los pilotes están en contacto con el terreno pero en algunos,
puntos adoptan formas curvas para adaptarse mejor a la topografía y distribución de cargas.
Éste, junto a otros edificios, construidos íntegramente en hormigón, marcan el punto de giro hacia el
brutalismo, que impregnará la arquitectura de Le Corbusier a partir de los años 50, conjuntamente con una
intensa poética puesta de manifiesto en el juego de los volúmenes.
Todo el edificio se organiza en torno a un patio interior. El monasterio, en forma de “C”, abraza a dicho patio
y la iglesia, con forma de caja, cierra la “C”.
En la última planta se encuentran las celdas de los monjes, relacionando a través de pequeñas aberturas
en los corredores la solemnidad de la vida monacal con los colores y la luz del paisaje. Las celdas han sido
acústicamente aisladas para permitir la meditación. En esta planta también hay salas de estudio, trabajo y
recreación, conjuntamente con una biblioteca
En la planta de acceso se colocaron las zonas comunes y en la planta inferior están el refectorio y el
claustro de cruz que comunica con la Iglesia.
El patio está cruzado por galerías acristaladas que comunican las zonas comunes del monasterio con la
iglesia.
La iglesia no descansa sobre pilotis, se trata de una caja pura que se posa directamente sobre la ladera,
una composición abstracta con el mínimo simbolismo religioso.
Sus paredes interiores son sumamente gruesas, evocando la solidez de la arquitectura medieval. Están
perforadas con aberturas horizontales cerradas con cristales de color que permiten la entrada de luz y
otorgan al ambiente un halo espiritual.
Hasta hace algún tiempo, la producción inglesa se admiraba en el exterior por la urbanística, por el
compromiso social, por la austeridad con la que se establecían justificadas razones de prioridad en el
interior de los diversos campos de intervención. A partir de la segunda mitad de los años ’50, la cultura
arquitectónica británica parece exigir también la calidad, la individualidad, la fantasía, la originalidad.
R. Banham ha denominado con el termino Nuevo Brutalismo esta tendencia: “En la base existía un
sentimiento de frustración, causado en parte por las difíciles situaciones de la edificación inglesa en la
posguerra. Un intento fundamental del brutalismo ha sido siempre el de determinar para cada construcción
una concepción necesaria desde el punto de vista de la estructura, del espacio y de la organización del
material.
Inglaterra ha llegado ahora a su momento más significativo, corrigiendo las distorsiones del racionalismo
producidas por el estilo internacional.
El caso más típico lo constituye la obra de Stirling. El juego del atribucionismo, el que sirve de pretexto a la
obra de Stirling nos propone bastante paradigmáticamente su labor de búsqueda como una operación de
rastreo en la historia de la producción de los últimos 200 años que lleva a cabo cotidianamente cada
arquitecto. Lo más importante es que este enriquecimiento y esta profundización en la historia logran
producir imágenes completamente inéditas. En otros términos, la producción de la Englishness no refleja
una originalidad absoluta, sino unos mensajes siempre cambiantes, pero decodificables en base a
parámetros conocidos, sobre todo en cuanto se refiere a la claridad y legitimidad de la planta, de la
estructura, de los materiales; el único factor de ambigüedad puede radicar en la falta de identificación
inmediata de las tipologías de los usos.
La experiencia británica ha potenciado una cierta relación armónica entre la política industrial y las
aspiraciones sociológicas. Y esta insistencia en lo procesual, material, pragmático y tecnológico ha definido
la gran parte de la arquitectura británica de las últimas décadas. Por esta razón, esta arquitectura se ha
movido entre dos polos. Por una parte la tendencia que se basa en la interpretación neorromanticista de la
arquitectura vernácula mirando hacia los gustos populares, los modelos formales rurales y los materiales
tradicionales. Y por otra parte la tendencia de la arquitectura hipertecnologica o hight-tech3.
La escuela de Hunstanton fue la obra de los Smithson que más fielmente expresaba las ideas clave de lo
que a posteriori se denominó Nuevo Brutalismo, resuelta según una planta ordenada y simétrica, en los
interiores del edificio son los elementos estructurales, de uso y de instalaciones los que, totalmente vistos o
desnudos, otorgan cualidad y expresión al espacio. Es un edificio que se aproxima a la estética de almacen
Las primeras propuestas de Smithson deben situarse que entre 1952 y 1956 desarrollo el Independent
Group, formado por una serie de personajes dispares: críticos, artistas y arquitectos; interesados
especialmente en la creación de imágenes. Su iconografía y planteamientos está basada en la estética del
collage y del consumismo, son otra muestra de la influencia que existe entre la cultura británica y la
norteamericana.
Se introducen 5 nuevos conceptos urbanos para superar los conceptos tradicionales y a la vez realizan
gran parte de los principios del urbanismo racionalista. Estos conceptos son los de modelos de asociación,
identidad, crecimiento, cluster y movilidad. El concepto más representativo es el de cluster, ya que es el
que más se acerca a la idea de estructura formal, es asimilable a la idea morfológica de un racimo.
El objetivo del Team 10, organizador de los trabajos para el congreso, era el de demostrar que se debía
elaborar una forma específica de hábitat para cada situación particular.
Para aclarar este punto, prepararon para el congreso 5 proyectos para situaciones particulares. En cada
uno el modelo de desarrollo era libre y sistematizado. A esta forma de organización llamaron cluster.
La palabra cluster, que sirve para indicar un modelo especifico de asociación, ha sido introducida para
reemplazar grupos de conceptos como “casa, calle, distrito, ciudad” (subdivisiones de la ciudad) o
“manzana, pueblo, ciudad” (entidades de grupo), que en la actualidad están ya demasiado cargadas de
implicaciones históricas. Cluster es una especie de término comodín que se usa durante el periodo de
creación de nuevas tipologías.
Esta visión de la ciudad que defienden los Smithson se basa en la idea de que además de contemplarse
con los ojos disciplinares del técnico, se debe entender como lugar de otras muchas manifestaciones
humanas y materiales: la atmosfera, el color y la luz de cada rincón de la ciudad, la gente y los niños
jugando, los árboles, los automóviles, los autobuses y las cabinas telefónicas: toda una serie de fenómenos
y diseños urbanos que en cada ciudad y cultura son diversos.
En la arquitectura británica, y en especial entre aquellos arquitectos que parten de una continuidad con el
proyecto de la modernidad arquitectónica, toma especial importancia el recurso de la articulación de los
edificios, utilizando para ello la expresividad de las piezas de circulación (vertical y horizontal) que actúan
de rotulas y articulaciones de los edificios.
El recurso de las calles en altura (que los Smithson utilizan a menudo) es totalmente necesario para
enfatizar una idea del edificio como artefacto mecánico que está estructurado por el movimiento interno de
la gente y que incluso puede crecer.
El mayor brutalismo se consigue con la contundencia de la imagen, emocionando, impactando los sentidos.
La arquitectura del Brutalismo tuvo en realidad su principio en el estilo de Mies. Pero fueron solo la
construcción y el material: también las instalaciones técnicas experimentaron un perfeccionamiento bien
sensible, estas construcciones llevan por el exterior, y sin cubrir, tuberías, conducciones eléctricas y otras
instalaciones técnicas. El empleo del hormigón al natural o de estructuras de acero sin pintar es solo un
síntoma de esta aplicación.
Ética o estética? El nuevo brutalismo es ambas cosas, aunque separadamente. Como ética solo es uno de
los eslabones más fuertes de una cadena; como estética fue, aunque renovador, solo una muestra
indefinida de honestidad. No fue un movimiento extremista, ni siquiera pretendió ser original. No tiene casi
nada que ver con la brutalidad. Fue un resurgimiento y un ajuste del código de las primeras ideas morales
estructurales-funcionales. Su éxito se basó en su oportunidad y en el nombre atractivo. Uno comprendía
El verdadero problema que enfrentaron los brutalistas y sus colegas de todo el mundo no fue tanto estético
como practico. Sabían que la heroica “fanfarronería” del brutalismo, para un concurso o para una pequeña
casa, debía modificarse ligeramente cuando se trataba de construir una escuela, más cuando se trataba de
un edificio público, y debía reescribirse casi completamente para el centro de Londres, donde se aprecia
más la piedra tradicional.
De este modo sucedió que cuando los Smithson lograron un éxito mundano con una bella obra de
arquitectura profesional práctica, el Nuevo Brutalismo murió.
El código del movimiento moderno está arraigado en el siglo XX y sus llamados a la conciencia persisten:
llenar la función del edificio en sí mismo y dentro de la sociedad; respetar la naturaleza de los materiales y
las realidades estructurales; llevar la tecnología y metodología hacia niveles superiores de eficiencia;
renunciar a todas las alusiones históricas y embellecimientos insignificantes. Es un llamado a la calidad
básica del edificio. Se requiere que la cosa final expresada sea la verdadera naturaleza del edificio, no el yo
del arquitecto.
El Nuevo Brutalismo aleja al mundo de los seductores placeres estéticos y lo lleva hacia la pura
inteligibilidad del edificio.
El Brutalismo toma en cuenta la realidad, los fines culturales de la sociedad, sus necesidades y técnica, por
esto es que sus realizaciones se preocupan por el carácter de lo urbano.
El edificio The Economist es una continuación de la honestidad estructural y enfoque audaz que caracteriza
a sus arquitectos, llevada adelante con gran sencillez.
Cada una de las estructuras de hormigón de los tres edificios, está articulada con remarcados montantes
que van desde lo más alto de los edificios hasta el suelo, en el cual ocasionalmente se empotran peraltando
Unidad 3: Japón
Durante la guerra Japón sufre terribles destrucciones por los bombardeos aéreos. La reconstrucción
primero lenta, se intensifica tras 1950, cuando se promulga la primera ley para la construcción
subvencionada. En el organismo urbano encontramos una discontinuidad: grandes edificios modernos,
reducto de vidrio y cemento que albergan los complejos más insospechados y a sus pies una ciudad de 8
millones de habitantes construida en madera y papel.
El acoplamiento de estos elementos heterogéneos se hace cada día más difícil a causa del desarrollo
económico y social: en este marco debe colocarse el renacimiento en la arquitectura nipona.
TANGE va a intentar a través de la aplicación y seguimiento de las formas derivadas de los esfuerzos de
flexión y momento, arribar en una expresión arquitectónica apoyada en lo estructural.
El intento es el de lograr un nuevo criterio expresivo aplicando las formas apropiada a cada una de las
técnicas de materialización. Así veremos aparecer los hiperboloides, y las curvas acompañando los
desarrollos funcionales de los edificios.
Tras la segunda guerra mundial aparece otro foco: Japón. A partir del MM, la arquitecura japonesa se
destaca por su adscripción al estilo formal y un inusitado vigor formal. El expresionismo formal se enriquece
a partir de los años ’50 con la sabia capacidad de integrar a la continuación del MM japonés elementos
formales de la arquitectura tradicional –idea abstracta de espacio domestico tradicional, cubiertas ligeras y
expresivas, estructuras de madera y, en definitiva, una especial sensibilidad constructiva-. Todo ello se
refuerza con la utilización brutalista del hormigón armado. Es decir, los japoneses, saben desarrollar con su
arquitectura que exalta el protagonismo de la estructura, una afinidad electiva entre arquitectura moderna y
arquitectura tradicional japonesa. Ostentosa geometricidad elemental.
Destaca la enorme influencia de le Corbusier en la medida que la arquitectura de este se corresponde con
las exigencias del momento que la cultura japonesa seguirá viviendo.
En sus primeras obra, TANGE, opta por una arquitectura contundente, dura y repetitiva. En la medida que
para él el “espacio precede a la función”, cae muchas veces en cierto formalismo gratuito, que se basa en
la exaltación de las funciones estáticas.
La búsqueda de un nuevo tipo de ciudad que TANGE lleva adelante, encuentra su expresión en los
“metabolistas”. El grupo metabolismo fue creado en 1960 por la influencia de TANGE, y constituye el
momento más destacado y culminante de toda la evolución de la arquitectura moderna en Japón. Su idea
básica es plantear propuestas, desde el diseño industrial hasta el urbanismo. Los planteamientos de este
grupo surgen como reacción a la falta de planificación urbana típica del Japón. Frente a una arquitectura
condenada al aislamiento, a la expresividad individual y al caos urbano siempre creciente piensan nuevos
organismos a escala urbana tales como urbes oceánicas, ciudades aéreas, unidades agrícolas, unidades
residenciales móviles o estructuras helicoidales. Quieren expresar con su nombre la visión de la sociedad
como continuo desarrollo y mutación de un proceso vial y tecnológico. De esta utopías el plan bahía de
Tokio de tange es la propuesta mas representativa de la confianza en los valores de la metrópolis, en él
destruye todo resto de orden tradicional de la ciudad.
A partir de los años ’70, TANGE va perdiendo la capacidad de innovación de sus propuestas y la intensidad
de sus primeras obras. Sus grandes proyectos se vuelven repetitivos y faltos de capacidad para acercarse
a la escala humana y al desarrollo de los detalles. Esto es consecuencia de una arquitectura que por su
megalomanía y gigantismo presta solo atención a la composición general.
La mentalidad oriental no ve las cosas solamente bajo el aspecto que se presentan sino ve la continua
mutación den las cosas. En una vivienda japonesa la vida se expresa en términos del dinamismo de
nuestra existencia. Brinda un espacio que es eminentemente cambiable y por lo tanto funcionalmente
flexible. Poseen cualidades que se presentan más aun en las propuestas metabolistas con su
prefabricación de elementos estructurales, los cuales al ser coordinados modularmente, brindan una total
funcionalidad a las partes de cerramiento y permiten:
En el aspecto técnico la ruptura con el pasado es obvia. El amor de los japoneses por la novedad los ha
hecho expertos en el uso de materiales constructivos que, como el aluminio, aún están poco difundido en
otros países.
El culto a la “manera” es el común denominador de toda actividad que eleva a través de la experiencia, a la
categoría de arte. Al aparecer nuevos materiales de construcción, por más lejanos que estos parezcan de
los tradicionales, al ser tratados por los japoneses parecen cambiar de identidad; el hormigón armado o el
aluminio, en sus manos, no parecen los mismos materiales utilizados en otro país.
Los nostálgicos empecinados añoran el Japón de la arquitectura orgánica; les parece una traición el
reemplazo de la madera, el papel, la paja por el hormigón, el vidrio y el aluminio. Pero observando la
estética y la técnica tradicionales siguen habitando en las buenas obras actuales como si se tratase de un
espíritu, perceptible en sus espacios.
El establecimiento de los medios para englobar en una sola unidad orgánica tanto la estructura de
la metrópolis como el sistema de transporte y la arquitectura urbana;
En el separatismo funcional, la calle y el edificio están totalmente segregados, no se descubre razón alguna
para reunir sus dos funciones (Europa).
Sin embargo el metabolismo surge de una analogía con lo viviente, no con la máquina. Las principales
diferencias entre un objeto viviente y una maquina son l apotencialidad de crecimiento a partir de los
individual y la existencia de funciones que se refuerzan mutuamente.
La calle es una arteria de transito que conecta los espacios donde se realizan actividades reales: vivir, jugar
o trabajar. Pero deben cumplir una función más amplia que la de canalizar el tránsito. Debe ser un lugar do
juego de los niños, un sitio donde se realicen distintas actividades.
La vida se está desarrollando en las calles. La arquitectura de la calle se propone convertir en un realidad a
estas áreas que hasta ahora llamadas vacías.
Tal como sugiere la expresión “ciudad de la información”, de ahora en adelante los elementos industriales
perderán importancia. Llamamos metrópolis, ciudad dentro de la ciudad, a esta última etapa de la ciudad.
Las investigaciones sobre metabolismo de la materia implica encontrar las relaciones entre la
independencia espacial y la unidad natural, estableciendo condiciones que unían un espacio con otro. En
primer lugar consideremos a la gente, a las cosas como información, y tratamos de definir sus estructuras
fluyentes y en segundo lugar combinamos estas estructuras fluyentes de manera flexible; por ultimo
ordenamos las relaciones entre las estructuras de información y las unidades espaciales.
Interiorización y metamorfosis
La metamorfosis es el proceso esencial para el momento en que las partes se intercambian y en que los
agregados al equipamiento, junto con el metabolismo de las nuevas unidades espaciales, ha llegado a una
situación de la cual la vieja organización ya no puede hacer frente.
Para cambiar los espacios interiores y exteriores hay que conformar elementos interiores a partir de los
exteriores (plazas, estaciones, centros de información, lugares para espectáculo). También debemos
interiorizar el entorno natural que existe fuera de edificios y ciudades.
El mensaje es:
1. La necesidad de un cambio de actitud que evite la perpetuación de las estructuras existentes en las
grandes capitales y que no se limite solamente a mejorar y a aumentar los servicios.
2. La necesidad de integrar la infraestructura de la ciudad con los diversos elementos estructurales
BLOQUE VI
Unidad 1: La problemática contemporánea: décadas del 50 y 60
Este fenómeno plantea una difícil solución, por ejemplo el neomaltusianismo, propone una disminución
drástica y al cualquier precio de los nacimientos; el marxismo teórico, en cambio, es natalista.
La industrialización y explosión demográfica han producido otro hecho característico de nuestro tiempo: la
urbanización creciente. Lo cual significa:
El cambio cultural que vivimos, se realiza principalmente bajo la ciencia y la técnica, y se manifiesta de
hecho en forma de una nueva relación entre el hombre y la naturaleza, modelándola a su imagen y
poniéndola a su servicio. La ciencia con sus consecuencias en la técnica, que ha revolucionado interna y
externamente al mundo como ningún otro acontecimiento. La ciencia ha creado nuevos fundamentos para
toda la existencia humana.
Nuestro tiempo continua su desarrollo tecnológico e inicial, la era de la automatización. Las maquinas
cibernéticas son capaces de percibir una influencia externa y de suscitar y controlar sus propios
movimientos.
Todas las consecuencias de esta cibernética, no las conocemos, no obstante podemos señalar:
Lentamente va naciendo una sociedad humana universal. A pesar de las diferencias y divisiones, el mundo
percibe con intensidad su unidad, gracias a los adelantos técnicos y a los medios de comunicación, ya que
es posible el dialogo entre pueblos y culturas; la tecnología aumenta las relaciones de interdependencia y
solidaridad entre los pueblos, al tiempo que posibilita que los hombres nos demos cuenta que debemos
vivir unidos en solidaridad. Sabemos que lo que está en juego es la grandeza o destrucción del hombre
sobre la tierra.
Esta idea de solidaridad pareciera inalcanzable si se observan los profundos antagonismos que nos
afectan. El fenómeno de violencia pareciera que adquiere proporciones universales: subversión. Guerrilla,
pobreza.
Comunicación y participación
Uno de los rasgos más evidentes de nuestra vida social, es la participación masiva del hombre, entendido
por participación en lo referente a los modelos de organización y decisión, y lo referente al usufructo de los
beneficios de todo lo que brinda la civilización. El advenimiento de los contingentes obreros a la vida
pública provoco y provoca, un estremecimiento en las estructuras existentes. Esta presencia se caracterizó
despectivamente como “masas”, surgiendo lo amorfo e impersonal. Este hecho fue saludado por unos
como la aurora del verdadero hombre, fue detestado por todos como ruina de los valores culturales, y en
Estas “masas” son organizaciones humanas, con un perfil cada día más claro, que pueden y deben
desplegar sus capacidades humanas. Este movimiento organizado del mundo del trabajo va creando las
bases de transformaciones en todo el ámbito de la cultura (arte, derecho, política, etc.)
Esto lleva a una nueva visión del estado, como agente y garante del bien común. Todos los pueblos, y en el
interior de los estados, todos los estamentos reclaman la justicia, el respeto, la igualdad, la libertad. Este
movimiento tiene como base el reconocimiento de determinados valores que reclaman ser realizados.
Se realizan en los países más desarrollados edificios que utilizando al máximo las posibilidades de la alta
tecnología han aportado cruciales innovaciones. Dos de los contextos nacionales donde este tipo de
arquitectura tendrá un desarrollo más importante serán gran Bretaña y EEUU.
En gran Bretaña se hará solida el HIGH-TECH influida por las fantasías de Achiran, pero a la vez basada
en un gran rigor y pragmatismo. Se trata de una arquitectura tecnológica tremendamente impositiva e
intolerante respecto al medio, continuando la prepotencia de la arquitectura del MM. Una arquitectura que
prefiere cambiar el ambiente existente antes que interpretarlo y revalorizarlo. Dicha arq. propone crear su
propio clima en el interior del edificio.
El país que más desarrollo una arquitectura productivista, aprovechando al máximo las posibilidades
plásticas y materiales de la tecnología fue Norteamérica, una arquitectura que puede tender a ser cada vez
más transparente, hermética, climatizada, interactiva, resistente, ligera, ágil, versátil y atractivamente
tecnológica.
A lo largo de los años 60, ROCHE y DINKELOO, desarrollaron una serie de hitos dentro de la arquitectura
de oficinas que se basan a la vez en el alarde tecnológico y en la experimentación de formas volumétricas
puras. Llevan la poética de los rascacielos a un resultado altamente expresivo y épico que, al mismo
tiempo, sintoniza con el naciente “minimal art”.
A partir de la segunda guerra mundial encuentra su expresión en las teorías y actividades de una nueva
generación de arquitectos italianos que continuarían el esfuerzo por construir una necesaria teoría de la
arquitectura contemporánea en respuesta a las exigencias internas de la disciplina, alineada a favor de los
objetivos sociales, culturales, políticos de la oposición de izquierda y en contra del crecimiento especulativo
del capitalismo de posguerra.
Entre ellos, ALDO ROSSI, quien partiría en gran medida de los contenidos propuestos por Ernesto Rogers:
las preexistencias ambientales, el papel crucial de la historia de la arquitectura, la centralidad de la
discusión sobre tradición en la ciudad europea, la idea de monumento, la responsabilidad del artista y del
intelectual dentro de la sociedad moderna así como el deber de continuar las enseñanzas de los maestros
del MM.
La arquitectura de la ciudad
La arquitectura de la ciudad proponía toda una serie de criterios metodológicos que muy pronto fueron
adoptados por una gran parte de la arquitectura contemporánea.
Otra aportación es la consideración de los dos elementos básicos de la ciudad. Por una parte, la
esfera pública, los monumentos, los elementos primarios que crecen siempre puntualmente y que
están promovidas por destacado esfuerzo colectivo. Y por otra parte la esfera privada, las áreas
residenciales, viviendas que conforma el tejido básico de la ciudad. Cada una de estas tipologías
está pensada desde la lógica de la repetición, que han tenido una enorme trascendencia y es un
instrumento básico para la intervención en la ciudad histórica. La revalorización del monumento
como hito privilegiado para definir la imagen y carácter de la ciudad. Si estudiamos los edificios
públicos que surgen en las periferias de toda ciudad industrial parte de lo que se ha denominado lo
equipamientos de poder, comprobamos que no responden en su forma a la idea de singularidad de
los monumentos. Una arquitectura pública pero más funcional que monumental.
En esto, su lógica morfológica está más próxima a la lógica de repetición y adición de las residencia
que a la de la singularidad de los monumentos. Sus grandes espacios interiores se basan en la
flexibilidad e indeterminación. Su lenguaje responde a una lógica productiva alejada de los estilos
cultos y monumentales.
Otro de los conceptos básicos es el de tipología arquitectónica. Siempre que existe una cierta
voluntad clasificatoria, y por lo tanto académica, se recurre a conceptos como el tipo y modelo. En
el caso de ALDO ROSSI la reformulación de este concepto iba relacionado con la importancia
otorgada a la trama urbana (cada tipología arquitectónica debe entenderse en función de la
morfología urbana). Para ROSSI el tipo se trata de un arquetipo, de un principio lógico e inmutable.
Por ello, se convierte en instrumentos esecial, no solo del análisis sino también del proyecto. Como
base del momento analítico de la arquitectura, como instrumento del proceso proyectual.
La crítica tipológica reutiliza este concepto académico desde la nueva óptica del estructuralismo,
intentando que se individualicen las formas espaciales invariantes.
La arquitectura siempre se ha valorado sobre todo por proveer orden y estabilidad. Con producir objetos en
los que toda inestabilidad o desorden hayan sido excluidos. Las formas contribuyen armónicamente a
formar un todo unificado. Esta estructura geométrica se convierte en su pureza formal como garantía de
estabilidad estructural. Cualquier desviación del orden estructural, cualquier impureza, se entiende como
amenaza frente a los valores formales representados por la armonía, la unidad y la estabilidad, y por tanto
se aísla de ella, tratándolo como puro ornamento.
Los proyectos de esta exposición representan una sensibilidad diferente. La forma se ha contaminado. Es
esa habilidad para alterar nuestras ideas sobre la forma lo que hace que estos proyectos sean
deconstructivos. Cualquier diseño arquitectónico provocador que parezca deshacer la estructura ha sido
El arquitecto deconstructivo identifica los síntomas de una impureza reprimida. Cada proyecto utiliza
estrategias formales desarrolladas por la vanguardia rusa de principios del siglo XX. El constructivismo ruso
constituyo un hito clave en el que la tradición arquitectónica fue tan radicalmente torcida que se abrió en
ella una fisura a través de la cual ciertas posibilidades arquitectónicas inquietantes fueron visibles por
primera vez. La vanguardia rusa significo un reto para la tradición al romper las reglas clásicas de la
composición, en las que la relación equilibrada y jerárquica entre las formas crea un todo unificado. Las
formas puras se utilizaban ahora para producir composiciones geométricas impuras y torcidas. Tanto los
suprematistas, liderados por Malevitch, como los constructores de obras tridimensionales, principalmente
Tatlin, situaban formas simples en conflicto para producir una geometría inestable e intranquila.
Los significados de la deconstrucción se pueden entenderse, en parte, partiendo del análisis de los diversos
enfoques de las vanguardias rusas:
La forma sigue a la función: la pureza formal como signo de la eficiencia funcional. La forma no sólo
sobrevive a la tortura, sino que sale fortalecida con ella, dando origen a un nuevo y complejo organismo
como instancia crítica defectiva que propone empezar de nuevo.
“Enfoco la arquitectura de modo diferente. Examino la obra de los artistas y me valgo del arte como vía de
inspiración. Procuro que tanto yo como los miembros de mi equipo quedemos libres de la carga cultural
para buscar nuevas formulaciones. Quiero ser una persona abierta a todo. No hay reglas, no existe lo
correcto ni lo incorrecto. No tengo claro qué es feo y qué es bonito” Frank Gehry.
El deconstructivismo es una arquitectura que intenta destruir todos los posibles sistemas de lectura por las
cuales se puede hacer comprensible.
Se trata de una arquitectura experimentalista e innovadora que considera que las ideas constituyen la razón
de la arquitectura, pero que arrastra consigo una serie de peligros: el formalismo, que boicotea cualquier
crítica racional; el elitismo, que cree que la situación de las grandes metrópolis capitalistas es la que vive la
entera humanidad; la arbitrariedad de la arquitectura planteada por ella misma, es decir, el arte por el arte.
Una arquitectura que fuerza siempre a la realidad, que cae en el intelectualismo, haciéndose solo
comprensible a aquellos que disponen de las difíciles claves para entenderla.
En los años ¨80 se ha conformado dos direcciones dentro de las neovanguardias: una más metodológica
que tiende a la abstracción formal (Eisenman, Koolhaas, Tscumi) y otra más artística y creativa que recurre
a la exploración del inconsciente (Gehry, Coop Himmelblau)
Otra de las aportaciones es su fuerte capacidad para renovar la representación arquitectónica; se explotan
las posibilidades de múltiples combinaciones: perspectivas con plantas y alzados simultáneos, collages,
secciones abatidas, etc. no se plantea una tendencia hacia una construcción convencional de las formas
sino hacia su perversión, distorsión, deconstrucción y subversión.
Deconstrucción es un término desafortunado que, si bien sirve para señalar la recuperación del
constructivismo ruso, insiste solo en aspectos formales y superficies de una parte de la arquitectura actual:
la poética del ensamblaje, el fragmento y la colisión. Detrás de esta apariencia plástica existen cuestiones
mucho más profundas (idea de espacio dinámico, método proyectual, referencias interdisciplinares, etc.)
que son las que realmente permiten delimitar posiciones arquitectónicas.
La deconstrucción en arquitectura no es solo el desmontaje de obras, aunque pueda que lo incluya. Estos
enunciados sin explicación, ni sustento, han llevado a confusiones hasta tal punto que cualquier sistema
desestabilizante y provocador, cualquier objeto interceptado, cualquier sistema bloqueado o con trazados
superpuestos, ha sido denominado alegremente “deconstructivo”.
El intento de poner de manifiesto las fallas estructurales, no tiende a provocar el colapso de un objeto, más
bien lo que intenta es producir el colapso de la idea y a través de este morir y renacer, trata de crear y
entender una visión diferente de la estructura, donde las fallas formen parte de la misma, produciendo
como resultado que cualquier intento de eliminación de los defectos, lleve inexorablemente a la eliminación
del todo.
La estrategia de la vanguardia rusa, era romper con las reglas básicas de la composición, para obtener a
través de estas rupturas, la aparición de nuevos horizontes formales.
La posición greco-latina-renacentista sobre el objeto arquitectónico, fue puesta en crisis. Las relaciones
clásicas y equilibradas que tendían a proyectar en un universo conocible y perceptible, fueron dejadas de
lado a favor de nuevos quiebres, nuevas formas puras, que producían ahora nuevos resultados impuros
(torcidos, vertebrados, atectonicos y desequilibrados).
Diseñadores constructivistas rusos como Malevich o Tatlin utilizaron formas simples a las que por simple
adición o sustracción, se les iba modificando para producir inestabilidad, intranquilidad, sensación de
inseguridad, todo ello en los tres planos direccionales que manejamos en el espacio.
La pureza de las formas tradicionales no era cuestionada, lo que se intentaba era manipular dentro de las
nuevas estructuras que se iban creando o encontrando.
La deconstrucción obtiene toda su fuerza del desafío que hace a los valores mismos de la armonía, la
unidad y la estabilidad, proponiendo a cambio una visión diferente de la estructura. En ella los errores son
vistos como inherentes al lenguaje.
El arquitecto deconstructivista localiza los dilemas de los edificios, identifica los síntomas de una impureza
redimida, somete a un severo interrogatorio de formas y utiliza formas puras para producir composiciones
geométricas impuras y torcidas.
Es una arquitectura de disloque, ruptura, desviación y distorsión. La forma no sigue a la función, sino que
“la función seguirá o no a la deformación”.
Frank Gehry
Gehry ha desarrollado una obra basada en el ensamblaje artesanal de diversas formas simples (prismas,
cilindros, esferas, torres, corredores, etc.) en la cual la caducidad y movilidad son términos
complementarios: una arquitectura dúctil, flexible y plástica como el arte.
La obra de Gehry arranco con la explotación de las cualidades plásticas de materiales de mala reputación
como cartón, alambre, maderas laminadas, telas metálicas, planchas prefabricadas, etc. promulgando una
arquitectura táctil, basada en la textura de cada material como todo ornamento y en la variedad cromática
como reflejo de las arquitecturas populares.
Ha desplegado una obra arquitectónica que muestra la perdida de los valores de permanencia y solidez en
la arquitectura contemporánea. Gehry se sitúa en una vida nueva que no trabaja a partir de ningún a priori
tipológico, sino que des membrana cada programa, asignando formas a cada función distinta y articulando
una estructura común que mantenga viva la fuerza y tensión de las formas.
Lo que pretende Gehry es que su obra no sea valorada por los atributos tradicionales de durabilidad o
monumentalidad, sino que sea capaz de permanecer por el valor que le da el ser considerada una obra de
arte y por el sentido que los usuarios le otorgan con su uso, instrumentalidad y satisfacción.
Peter Eisenman
Los planteamientos iniciales le conducirán a defender drásticamente una arquitectura de la ausencia, libre
de la nostalgia por sistemas que tuvieron un sentido en el pasado, una arquitectura que acepten la
ausencia de sujeto, de historia, de lugar y de significado.
A diferencia del Movimiento Moderno, que pretendía establecer un orden racional sobre la ciudad, para
estos arquitectos lo atractivo de esta es su caos, su mestizaje, sus densidades, su congestión, su carácter
laberintico y contradictorio.
Eisenman, que ha partido siempre de una crítica al realismo y al funcionalismo y de una decidida búsqueda
de formas abstractas y conceptos que faciliten la ruptura hacia una nueva época, culmina con el escrito “El
fin del clásico”. Insiste en el fin de tres ficciones convencionales: la de la representación, la razón y la
historia.
Tras la caída de estas tres funciones no hay modelo alternativo. Los mecanismos han de ser los de
simulación, la máscara y la arbitrariedad. Eisenman siguiendo los mecanismos del arte conceptual,
basados en la negación de la obra como producto final y acabado, insiste en que se trata de un espacio
eterno en el presente, sin ninguna relación determinada con el futuro ideal o un pasado determinado.
A la negación de la topografía, del lugar, la ha determinado “atopia”: la ciudad y el lugar son tomados más
como pretexto arbitrario y como pista de pruebas abstractas que como real contexto a interpretar.
Coop Himmelblau
The Open House es su proyecto más emblemático, iniciado con un dibujo garabateado con los ojos
tapados, se intenta eludir el mecanismo de la razón, haciendo aflorar toda la energía que esconde el
inconsciente y condensa la mano con el objetivo de conseguir una arquitectura totalmente libre.
Sus obras se basan por lo general en un cuidado y calculado contraste respecto a los edificios antiguos y el
trazado de la ciudad tradicional. Sus juegos de vigas en voladizos, paneles inclinados y lucernarios
tecnológicos se insertan cuidadosamente en cada obra. Ninguna de sus obras pueden entenderse sin su
relación con el contexto histórico. Por ello, este método empírico genera que cada obra sea singular e
Rem Koolhaas
La relación que se mantiene respecto a la gran ciudad es de morbosa fascinación, con crítica y admiración
a la vez. Una premisa básica es la de partir del gusto por lo artificial que reemplazaría a una realidad
naturalista. y su principal referencia arquitectónica serían las propuestas de los constructivistas soviéticos.
Su entusiasmo por las posibilidades de las propuestas de las vanguardias, su admiración por la estética de
las modernas estructuras y su fascinación por la densidad y eclecticismo del universo metropolitano. A esto
añadieron una peculiar interpretación hedonista de la arquitectura del movimiento moderno. En definitiva los
proyectos de Koolhaas demuestran cómo se reinterpretan propuestas del movimiento moderno, pero a la
vez ya no se pretende recuperar un orden y unos criterios racionales para aplicar a la arquitectura y a la
ciudad. Se es consciente de que los acontecimientos históricos se han encargado de destruir
despiadadamente este pretendido orden.
Zaha Hadid
El concepto arquitectónico de Zaha Hadid y su modo de crear el espacio no fue a raíz de ninguna premisa
histórica, sino que se originó en la propia forma, donde el espacio nace con la evolución o el desarrollo de
una idea propia emplazándose en un contexto determinado; creó una espacialidad única, basada en formas
curvas fluidas con alto grado de movimiento y levedad, así como un perfecto trabajo con la luz y relación de
interior / exterior y percepciones visuales.
Destaca por su fusión con el paisaje y el espacio circundante. Apuesta por la plasticidad, la arquitectura
orgánica, el movimiento, las líneas curvas, las terminaciones angulosas, la luz lograda a través de grandes
fachadas acristaladas, materiales modernos como fibra de vidrio, poliéster y el color blanco. Reta a la
gravedad.
Esta artista de la arquitectura, lleva las construcciones hacia lugares de magia y encanto, consiguiendo
ondas, patrones y formas que alteran el prototipo normal de edificación y produce un quiebre de belleza y
estética a la vista.
Bernard Tschumi
Ha seguido durante años el camino de las apropiaciones y contaminaciones figurativas. En su caso las dos
fuentes máximas de inspiración han sido la literatura y el cine, intentando plantear una arquitectura
cinematográfica, pensada desde la sensibilidad del siglo XX. La preocupación por la velocidad, el
movimiento y el dinamismo se expresan mejor en lo discontinuo, en lo fragmentario, en un escenario hecho
de montajes, que busca el choque entre imágenes, la violencia y la fricción, la ruptura y la sorpresa.
Persigue una arquitectura que exprese la explosión del potencial deseo reprimido por la sociedad
capitalista.
Daniel Libeskind
Tan alejada como el deconstructivismo del estilo más tradicional, la denominada arquitectura high-tech o de
alta tecnología, aparece desde finales de la década de los ’80 como otra alternativa más surgida dentro del
panorama de la posmodernidad. De esta estética singular y sorprendente, este tipo de arquitectura basa
sus diseños en la tecnología más evolucionada, tanto en lo que se refiere a los materiales utilizados,
habitualmente componentes prefabricados, como al método de construcción. Además, en muchos casos,
Las obras de parís del bicentenario como expresión de las relaciones entre poder
político y arquitectura
Minimalismo
La arquitectura moderna que ha sido más representativa es aquella que se basa en las aportaciones de la
ciencia, la industria y la técnica.
La arquitectura de nuestro siglo se despide con el sentimiento de la insatisfacción. Ha tenido en sus manos
un enorme caudal de posibilidades y, sin embargo, no ha sido capaz de mejorar ni el entorno ni las
ciudades. Al contrario, el entorno natural y construido cada día están más degradados. Los mecanismos y
el impulso de la civilización mecánica han ido alejando al hombre de una posible situación de plenitud
personal y de felicidad colectiva.
A principios de la década de los noventa, parece destacarse una nueva posición arquitectónica, cansada
tanto de los excesos decorativos, simbólicos y de lenguaje de la arquitectura ecléctica y posmoderna, como
del intelectualismo, elitismo y formalismo vacío de ciertas arquitecturas de la nueva abstracción formal,
también llamada deconstrucción. Asistimos a un resurgimiento del minimalismo y el racionalismo, a la
aparición de arquitectura que priman la búsqueda de un sentido común tectónico en el uso riguroso y
ascético de los materiales, en la recreación de espacios directos y puros, en la utilización de formas
volumétricas y geométricas, simples, en la austera utilización de repertorios signicos.
Entendemos por minimalismo la búsqueda de una arquitectura unitaria, en la que se utiliza un número de
elementos materiales y lenguajes limitados, articulados de manera esencialista. La ornamentación está
relacionada con la construcción, la función y el significado de cada obra. Aquello que predomina es la
calidad del material, tectónica de cada obra. Pero es siempre una arquitectura que extrapolada de su
contexto original, pierde su significado primitivo y su razón de ser, ya que esta tendencia al minimalismo
está estrechamente relacionada con la voluntad de insertar cada obra en un paisaje concreto.
Se trata de recuperar una poética de la sencillez, del silencio y del contextualismo. Mies Van der Roe, Le
Corbusier, Louis Kahn, Kenzo Tage aparecen como mentores de un camino ya estrictamente personal, en
el que continua la nueva tradición moderna, conciliándola con el respeto por el contexto demográfico y
natural y con la reinterpretación de los valores históricos y culturales locales.
Tadao Ando
Los rasgos característicos de su arquitectura son las formas simples de hormigón visto, tanto exterior como
en interiores. Aunque por fuera sus viviendas son cerradas, sus generosos patios interiores acristalados
permiten la percepción del viento y del clima.
“Cosas como la luz y el aire tiene solo un significado cuando penetran en una casa en forma de fragmentos
del mundo exterior. Las proporciones aisladas de luz y aire reproducen la naturaleza entera.”
Es un arquitecto portugués. Los principales rasgos de su arquitectura son el rigor y la precisión en las
formas, así como una profunda sensibilidad hacia el contexto. Se preocupa mucho por el emplazamiento
que rodea a sus obras, cuida los detalles y la selección de los materiales locales, jugando muy bien con el
hormigón, la piedra, la madera y el aluminio.
En el pensamiento de este arquitecto, construcción y contexto son dos constantes; el premio Pritzker,
reconoce la labor de un arquitecto con talento, visión y compromiso y que contribuye al desarrollo de la
humanidad con su obra arquitectónica.
Souto de Moura cree que lo que cambian son los materiales, los medios y los sistemas de construcción,
pero que la idea de una casa es un concepto universal que no ha evolucionado mucho a lo largo de la
historia.
De ahí que las claves para comprender sus diseños sean desde percibir como ha integrado la estructura
del lugar, ya sea urbano o rural, y como integra los muros o paredes, hasta su interés por crear edificios de
una o dos plantas diáfanas.
Antonie Predock
Como resultado del esfuerzo colectivo y global, de la búsqueda de un marco conjunto que permita luchar
contra el cambio climático, se acordó el protocolo de Kioto, un acuerdo internacional que se deriva de la
Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático. Fue negociado en 1997 y pretende que 37
países desarrollados reduzcan sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en un 5 por ciento para
el año 2012, con respecto a sus niveles de emisiones de 1990.
La puesta en marcha de Kioto ha permitido una reducción del 22,6% en las emisiones de gases de efecto
invernadero con respecto a los niveles de 1990 en 37 países industrializados y la UE, cuando el
compromiso inicial era de una disminución del 5%.
La unión estructural se ha realizado con tubos horizontales y barras tirantes diagonales de acero inoxidable;
Renzo Piano describe la estructura diciendo que son curvadas semejantes a las chozas, construidas con
nervios y vigas de madera; recipientes arcaicos, cuyos interiores están equipados con todas las
posibilidades que ofrece la tecnología moderna.
El viento es precisamente uno de los protagonistas principales del día a día del edificio, de sus atractivos y
de su éxito. La estructura de madera filtra el viento habitual del océano y lo convierte en su forma de
ventilación y refrigeración natural.
La obra de Piano trata claramente de un conjunto de edificios contemporáneos, del producto de modernos
análisis, tanto de las fuerzas estructurales como de las corrientes de aire, interior y exterior, así como
también de la mejor capacidad constructiva y artesanal contemporánea. Responde casi perfectamente a las
consideraciones de la arquitectura sustentable, ya que se analizaron cuestiones climáticas, ambientales,
culturales, etc.
La comprensión del desarrollo de la cultura Kanak era una parte vital de este proyecto, familiarizarse con la
historia, las costumbres, el medio ambiente y las creencias hicieron posible el diseño de un edificio que
encajaría dentro de este contexto y lleve a las cabañas a un nivel monumental.
Renzo Piano considera al clima como el contexto en el cual se va a situar el edificio, y por ende abarca
cuidadosamente el clima tanto atmosférico como cultural. En un clima cálido y húmedo como es el de
Nouméa, es necesaria la ventilación con el fin de suministrar correctamente aire fresco, para el enfriamiento
del cuerpo, y para la refrigeración propia del edificio.
El diseño del proyecto tiene la intención de aprovechar adecuadamente los vientos naturales que vienen del
Océano Pacífico; las fachadas exteriores están compuestas de madera como una primera capa y vidrio
como segunda, la cual filtra perfectamente el viento a través de persianas, que pueden
abrir y cerrar la ventilación natural.
Art Deco
El art déco fue un movimiento de diseño popular a partir de 1920 hasta 1939, que influyó las artes
decorativas tales como arquitectura, diseño interior, y diseño gráfico e industrial, también a las artes
visuales tales como la moda, pintura, grabado, escultura y cinematografía.
Las influencias provienen del constructivismo, cubismo, futurismo, del propio art nouveau, del que
evoluciona, y también del estilo racionalista de la escuela Bauhaus.
El Art Decó tiene como elementos fundamentales a las formas geométricas y a las líneas simples y rectas.
El Art Decó no presenta exuberancia y exageración como sí lo hacía el Art Nouveau ya que el contexto
sociopolítico de la época de entreguerras era muy complejo y suponía una búsqueda de la simplicidad y de
las formas más auténticas antes que del lujo y del gasto. Sin embargo, si bien las formas son más simples y
planas, el interés por la belleza y el arte nunca fueron dejados de lado.
La Exposición de Artes, fue una Exposición Internacional celebrada en París en el año 1925 que tenía
como finalidad mostrar los adelantos industriales y en las artes decorativas, donde se acuño el término Art
Deco.
El éxito de la exposición de 1925, del que se hace eco la prensa, permite al art deco propagarse en Francia
y en el mundo entero.