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CULTURA CARAL

La Ciudad Sagrada de Caral-Supe se ubica en la provincia de Barranca,


Región Lima. Constituye la manifestación más antigua de la civilización en el
Perú y en el continente americano debido a sus 5000 años de antigüedad. Está
conformada por 32 edificios monumentales, comprendidos en un complejo
sistema de asentamientos que muestran una fuerte ideología religiosa, entre los
cuales se distinguen edificios ceremoniales, sectores residenciales para gente de
distinto rango social, un conjunto de templos menores y talleres para la
producción.
Caral lideró un sistema de asentamientos que congregó 17 sitios similares,
aunque más pequeños, ubicados en el valle de Supe. 
Expresa la complejidad y el desarrollo de un modelo de organización socio
político y económico temprano durante el Periodo Arcaico Tardío (5000-3800
BP) originado de manera independiente por las sociedades andinas que habitaron
este pequeño valle fértil de la costa central peruana.
Año de inscripción en la Lista de Patrimonio Mundial: 2009.
 

AGRICULTURA, PESCA Y COMERCIO:


Los Caral basaron su economía en la agricultura y la pesca en el litoral
del océano Pacífico, en el denominado puerto Supe. 
En la región, empezaron muy pronto a desarrollarse pequeños
asentamientos entre los años 3000 y 2700 a.C., que interactuaron entre
ellos e intercambiaron productos, incluso con otras poblaciones más
alejadas. 
Se formaron sociedades más complejas y entre los años 2700 y 2550
a.C. se construyó la gran ciudad de Caral, un lugar con una arquitectura
monumental. Fue en ese momento cuando empezaron a aparecer
nuevos centros urbanos en el valle de Supe y en el valle vecino de
Pativilca, entre 2550 a 2400 a.C.
La influencia de la cultura Caral fue tal que llegó hasta el norte de Perú,
como se aprecia en el yacimiento de Ventarrón, en Lambayeque, o en
otros sitios del sur, como en los valles del Chillón, Rímac, Asia, etc.
ECONOMÍA:

En la cuenca de Supe, y en las zonas bajo su influencia, una economía complementaria, pesquero-agraria,
articulada por el comercio, sustentó al sistema social, promovió la especialización laboral, la interacción
interregional, la acumulación de riqueza y el desarrollo. El intercambio de anchovetas secas y mariscos (choros y
machas) por productos agrícolas, industriales o alimenticios (algodón, mate, frijol, achira, zapallo, camote, etc.),
iniciaba la cadena de comercio que, si bien se extendió a las otras regiones, enriqueció a los conductores de las
poblaciones costeñas.

Los pobladores de Supe vivieron en asentamientos nucleados, de diversa extensión y complejidad, distribuidos por
secciones del valle; en cada uno de ellos construyeron estructuras arquitectónicas, residenciales y públicas.
Algunos asentamientos contienen impresionantes edificios monumentales, como en la denominada “zona capital de
Caral”, que congregó a ocho centros poblados, entre ellos a la ciudad más extensa y compleja de la época,
cuidadosamente planificada, con edificios piramidales, grandes plazas y varias agrupaciones residenciales.

Los asentamientos eran conducidos por sus respectivas autoridades pero se hallaban bajo el gobierno del "Huno" o
señor de la cuenca.

JERARQUÍA:

Un sistema social jerarquizado dividía a la población en estratos con diferencias marcadas, que se expresaban en el
tipo de ocupación laboral, en el acceso desigual a los bienes producidos y en el modo de vida.

CONOCIMIENTOS:

La producción de conocimientos por parte de los especialistas (en matemáticas, geometría, astronomía, biología,
etc.) fue aplicada en el diseño urbano; la construcción arquitectónica; la elaboración del calendario y la predicción
del clima; el acondicionamiento de los campos de cultivo y la implementación de un sistema de riego; el
mejoramiento de las especies agrícolas; la administración pública, etc. Los avances científicos y tecnológicos
fomentaron cambios en beneficio, principalmente, de los gobernantes y del estrato social al que ellos pertenecían.

La medición del movimiento de los astros fue plasmada en la construcción de grandes geoglifos y alineamientos de
piedras, que antecedieron en más de tres mil años a los trazados en la Pampas de Nasca.

La información fue registrada mediante cuerdas y nudos; con la civilización se inició el uso del quipu que perduró
hasta el Imperio Inca, más de cuatro mil años después de Caral.

RELIGIÓN:

La religión fue el instrumento usado por la clase gobernante para fortalecer la identidad cultural y la cohesión social.
A través de la religión, las autoridades ejercieron, simultáneamente, el control, justificaron sus privilegios,
mantuvieron el orden y garantizaron la reproducción del sistema social.

Los pobladores participaban periódicamente en actividades colectivas de producción, que se combinaban con otras,
sociales, económicas y religiosas. Así, el tejido de la estructura social fue mantenido y reforzado en eventos
periódicos, donde los trabajos eran asociados con el dictado de disposiciones y regulaciones, con ferias o mercados
y en un marco festivo, ceremonias, ritos, música, danzas, comidas y bebidas.

Todas las actividades emprendidas por los habitantes de Caral estaban, de una u otra forma, asociadas con
ceremonias y ritos.

Se reunían periódicamente en las plazas y los salones ceremoniales con fogones de los edificios públicos y
viviendas, quemaban ofrendas, colocaban objetos en las hornacinas y enterraban cabellos, fragmentos de cuarzo y
otros valores apreciados por ellos.

Modo de entender el mundo

La sociedad de Caral tuvo una cosmovisión del mundo en armonía con la preservación del medio geográfico y sus
recursos, así como, también, con el orden observado en el espacio sideral. Teniendo en cuenta esas dimensiones,
el ser humano ubicó su verdadera condición, de ser parte de la naturaleza y del universo.

Ideología
Todas las acciones de la vida social, en la política, religión, economía, ciencia, etc., estaban relacionadas entre sí.
Los líderes religiosos eran, a la vez, líderes políticos especializados en astronomía o medicina, entre otros campos.

Los señores eran los mediadores entre el grupo social que representaban, y el poder sobrenatural de los ancestros
y dioses. La religión era el instrumento de gran efectividad para la cohesión pero también la coerción de la
población; aseguraba el poder político, la jerarquía y el orden social. La sociedad participaba en las ceremonias
calendarizadas por las autoridades y trabajaba para servir a sus dioses y a las autoridades, que los representaban
ante ellos.

Mitos, ceremonias, ritos y ofrendas

Parafernalia religiosa

Los encargados de las ceremonias utilizaron materiales y objetos a los que dieron significados simbólicos, según el
tipo de celebración. Usaron cuarzos, flautas, figuras modeladas, moluscos, anchovetas y textiles quemados,
artefactos de piedra, hueso, madera, junto con mechones de cabello humano.

También han sido encontrados objetos en forma de inhaladores, elaborados con huesos de camélidos, y
contenedores de conchas de caracol de selva (Megalobulimus spp.). Asimismo, se han hallado ofrendas
compuestas por numerosos caracoles de loma (Scutalus proteus), que viven en parajes desérticos, en asociación
con el cactus San Pedro (Trichocereus pachanoi), conocido por sus propiedades alucinógenas y por ser consumido
tradicionalmente durante los rituales religiosos.

Ofrendas

Gran parte del material arqueológico recuperado ha sido encontrado en contextos de ofrendas. Es recurrente el
hallazgo de conglomerados de vegetales, fragmentos de cuarzo, choros y alimentos, acomodados, enterrados y
muchas veces quemados.

Ofrendas Enrejadas

Se trata de complejas ofrendas, consistentes en ejes florales de cabuya amarrados entre sí a modo de una litera.
Están asociadas con numerosos y diversos componentes: minerales, como cuarzos, vegetales, plumas, fibras,
algodón, así como diversos objetos manufacturados. Ellas revelan un profundo contenido simbólico.

LA IMPORTANCIA DEL ARTE Y LA MÚSICA:

Se han recuperado tres conjuntos musicales, conformados por instrumentos de viento, que ratifican la práctica
musical colectiva y la organización compleja en la sociedad de Caral. Ellos estuvieron asociados con caracoles,
como instrumentos de percusión.

Las actividades religiosas y sociales incluyeron ejecuciones musicales, a cargo de grupos especializados en esta
elaborada expresión artística.

El arte musical tuvo un rol importante en las actividades de la población; esta tradición ha continuado como parte de
la herencia cultural de las sociedades andinas de todos los tiempos.

La práctica musical fue también colectiva; han sido recuperados conjuntos de instrumentos musicales: 32 flautas
traversas, 38 cornetas y 4 antaras.

ORGANIZACIÓN SOCIAL Y POLÍTICA:


El prestigio del sistema social de las poblaciones de Caral y su área de influencia
lo convirtió en modelo y trascendió más allá de su espacio y tiempo; marcó al
proceso cultural en el mundo andino hasta el imperio Inca, último Estado
prehispánico, formado 4400 años después.

La organización social y política de Caral se caracterizó por:

 La división del trabajo, una mayoría dedicada a la producción de


  alimentos y los especialistas encargados de la conducción política y
Mapa Sociopolítico
religiosa de la población, así como de la producción de conocimientos y
su aplicación.
 Una distribución desigual de la productividad económica, en relación
con el ordenamiento jerarquizado de los estratos sociales.
 La organización centralizada de la población, distribuida en
asentamientos urbanos, conducidos por autoridades políticas.

Ayllus
Grupos de familias emparentadas, que trabajaban una misma porción de
tierras en el valle y pertenecían a un determinado asentamiento o
pachaca.

Tuvieron sus autoridades de linaje y su edificio público propio, sede de


actividades multifuncionales, políticas, religiosas, económicas y
 
administrativas. Trabajaban para su propio sustento, ya sea en la
agricultura o en la pesca, y daban a los “principales” parte de los bienes
que producían. Además, de prestar servicios en las tierras asignadas a
los dioses, participaron en las construcciones para la renovación de los
templos.
Curacas y principales
Cada asentamiento o pachaca estaba representado por una autoridad o curaca, además de los “principales” de sus
ayllus.
Estas autoridades retornaban servicios a los principales e integrantes de sus ayllus prediciendo y asegurándoles
determinadas condiciones naturales y sociales. Fueron los conductores de las actividades agrarias, económicas,
religiosas y constructivas.
Pachacas
Los pobladores del valle de Supe estuvieron organizados en centros urbanos de diverso tamaño y complejidad,
mantenidos por una economía autosuficiente, y conducidos en lo político y administrativo por sus propias autoridades,
los curacas. Tenían sus dioses y prácticas religiosas, en los que sustentaban su identidad. Estaban integrados por
vínculos económicos (la tierra y el agua), religiosos y culturales (dioses y ancestros) reforzados en ceremonias
públicas colectivas, de periódica realización.
Sayas
Los asentamientos del valle de Supe estuvieron distribuidos en cada margen del río, en número similar, según el
patrón dual de la cosmovisión de la sociedad de Supe. Cada saya (mitad) estaba integrada por un número de
pachacas (asentamientos), tanto en la margen izquierda como en la derecha.
Icho huari y Allauca huari
Cada parcialidad o saya estuvo bajo la autoridad del icho Huari y del Allauca Huari, la primera o la segunda persona,
como refieren los cronistas.
Huno
Por encima de las autoridades de ambas parcialidades estaba el curaca del valle, que era el Huno o Uno. Este
mandaba sobre las autoridades de las parcialidades, de las pachacas y ayllus, en un sistema jerarquizado;
representaba la unificación de la cuenca y la nacionalidad de sus pobladores; conducía el gobierno del Estado y
residía en la ciudad capital.

La presencia de edificios públicos con plaza circular hundida en casi todos los asentamientos urbanos estaría
relacionada con determinadas funciones públicas, de reconocimiento al Estado.

El poder político del curaca principal mantuvo, sin embargo, descentralizadas las funciones de la pachaca, ya sea en
lo político, económico o ideológico: cada una tenía sus propios señores, especialistas, agricultores y servidores. Al
curaca principal le bastaba el cumplimiento de la tributación, en bienes y, sobre todo, en prestación de servicios. Su
influencia y prestigio se habrían extendido al área norcentral durante este período.

En la sociedad de Caral se dieron las condiciones para que las actividades estuvieran a cargo de grupos
especializados; esto potenció el desarrollo de los conocimientos y las técnicas, que junto a la organización del trabajo
generó una mayor productividad. Los excedentes fueron invertidos en proyectos de beneficio público y en el
mantenimiento de las autoridades, funcionarios y los familiares de estos.

Los estudios sobre las construcciones arquitectónicas y los materiales culturales asociados con ellas, recuperados en
Caral, Chupacigarro, Miraya, Lurihuasi y Áspero (Supe), y Vichama (Huaura), permiten identificar a personajes de la
sociedad, que desempeñaban diversas funciones como:
1. Curacas, quienes fueron los encargados del manejo
político y económico de los asentamientos y de los
servicios religiosos,
2. Especialistas en registro codificado de la información de los
“quipus",
3. Especialistas en astronomía, elaboraban el calendario de
actividades y de
festividades y predecían los cambios climáticos.
4. Especialistas en el manejo de los canales de riego, la
administración de
las aguas y la experimentación para el mejoramiento de la
producción agrícola.
5. Especialistas en medicina.  
6. Especialistas en el diseño y construcción de obras
públicas.
7. Músicos.
8. Comerciantes.
9. Artesanos de textiles de algodón.
10. Artesanos de cestería.
11. Artesanos de adornos personales en piedras
semipreciosas y conchas
12. Artesanos de la piedra.
13. Agricultores.
14. Pescadores.

AVANCES TECNOLÓGICOS:
Los Caral fueron una sociedad avanzada que desarrolló grandes
conocimientos científicos y tecnológicos que transmitieron a otras
culturas vecinas. No vivieron en ciudades amuralladas ni
manufacturaron armas, pero sí intercambiaron recursos, bienes y
conocimientos con poblaciones de la sierra y la
selva. Asimismo, tuvieron acceso al molusco Spondylus, muy
característico de las aguas tropicales del Ecuador y que tuvo un
importante papel en las sociedades andinas; también obtuvieron
sodalita, un mineral que proviene de Bolivia, e incluso replicaron, en el
entierro de un niño, el tratamiento que se daba a los muertos en la
cultura Chinchorro de Chile, lo que demuestra que los Caral se
relacionaron con otras culturas muy alejadas geográficamente.

UNA ARQUITECTURA MONUMENTAL


La importancia de Caral queda reflejada en los elementos de su
arquitectura, de significado simbólico –asumidos a su vez por otras
culturas–: plazas circulares hundidas, hornacinas, puertas de doble
jamba, tecnología resistente a terremotos, plataformas escalonadas... 
Caral fue un complejo urbano formado por distintas
construcciones. Carece de recinto amurallado y se encuentra ubicado
sobre una terraza que lo protegía de posibles desastres naturales.
Los edificios se construyeron con piedra y madera de árboles caídos. Se
conservan seis pirámides, cada una de ellas con una escalera
central que se orienta hacia determinadas estrellas. Todos estos
edificios disponían de un altar con un fuego central (de forma circular o
cuadrangular) y conductos subterráneos que canalizaban la energía del
viento. 
En estos complejos se debían llevar a cabo ceremonias religiosas que
incluían la incineración de ofrendas a las divinidades. Pero unas de las
construcciones que resultan más llamativas son sus dos enigmáticas
plazas circulares, situadas frente a dos edificios piramidales. Muy
posiblemente relacionadas asimismo con ceremonias religiosas.

DESASTRE ECOLÓGICO
Un equipo arqueológico trabaja en 12 asentamientos de esta cultura
con el objetivo de "conocer el sistema social de la civilización Caral y los
cambios que se fueron dando a lo largo de los mil años, de gran
prestigio y desarrollo alcanzado, hasta que entró en crisis y colapsó por
un intenso cambio climático, que transformó el valle productivo de
Supe en tierras arenosas con dunas, afectado por una prolongada
sequía. Condiciones que hicieron que las poblaciones abandonaran los
centros urbanos".
De hecho, y a pesar de su armoniosa relación con la naturaleza, la
cultura Caral sucumbió a un duro cambio climático, catastrófico por sus
efectos. Los arqueólogos han identificado una serie de fenómenos
meteorológicos extremos, como terremotos y lluvias torrenciales
que anegaron la bahía de la ciudad pesquera.
También se ha documentado una sequía extrema que se prolongó
durante varias décadas: el río Supe se secó y los campos de cultivos se
llenaron de arena.
Al final, tras diversas y devastadoras hambrunas que acabaron con esta
brillante civilización, Caral y las poblaciones aledañas fueron
abandonadas hacia 1900 a.C., sin que se sepa qué fue de sus
habitantes.
LA CIVILIZACIÓN DE CARAL: SUPE EN EL PROCESO CULTURAL MUNDIAL
ALGODÓN DE VARIOS COLORES
TEXTILERIA
La Ciudad Sagrada de Caral-Supe se ubica en la provincia de Barranca,
Región Lima.
En 1997, una gran noticia sacudió el mundo de la arqueología mundial. La arqueóloga peruana Ruth Shady,
anunció el descubrimiento de Caral, la cultura pre cerámica más antigua de América.

Reconocida a nivel mundial como la Ciudad más antigua de América, según estudios arqueológicos con una
antigüedad promedio entre 3000 y 1500 antes de Cristo; es decir que perteneció al período Arcaico Tardío, por este
motivo el Perú es considerado como uno de los seis focos civilizatorios a nivel mundial, al lado de Egipto, China,
India, Mesopotamia, y Mesoamérica.

Constituye la manifestación más antigua de la civilización en el Perú y en el


continente americano debido a sus 5000 años de antigüedad. Está conformada
por 32 edificios monumentales, comprendidos en un complejo sistema de
asentamientos que muestran una fuerte ideología religiosa, entre los cuales se
distinguen edificios ceremoniales, sectores residenciales para gente de distinto
rango social, un conjunto de templos menores y talleres para la producción.
Caral lideró un sistema de asentamientos que congregó 17 sitios similares,
aunque más pequeños, ubicados en el valle de Supe. 
Expresa la complejidad y el desarrollo de un modelo de organización socio
político y económico temprano durante el Periodo Arcaico Tardío (5000-3800
BP) originado de manera independiente por las sociedades andinas que habitaron
este pequeño valle fértil de la costa central peruana.

Organización económica
La sociedad de Caral formaba parte de una red de sitios que se extendían y articulaban a lo
largo de la cuenca del río Supe. En esta red había asentamientos costeros y otros ubicados
en zonas más altas (sierra); entre todos ellos se dio un intercambio de productos (comercio
de trueque), siendo la Ciudad de Caral evidentemente el centro de toda esa red. Visto así, se
vislumbra la importancia que alcanzó la especialización, es decir, la aparición de grupos
especializados en determinadas actividades económicas.

PESCA

La extracción de productos marinos (pescado y mariscos) fue la principal proveedora de


proteínas. Se desarrolló principalmente en la localidad costera de Áspero, desde donde se
repartía el producto marino hacia todos los asentamientos del valle. Eran muy buenos
pescadores y pescaban anchoveta.
AGRICULTURA

Los hombres de Caral desarrollaron una agricultura intensiva en el valle de Supe. Emplearon
herramientas sencillas como palos y astas para cavar. Construyeron también canales de riego
muy simples que llevaban el agua del río hacia los campos de cultivo. Las plantas alimenticias
que cultivaron fueron: mate o calabaza, achira, pacae, pajuro, maní, ají, guayaba, lúcuma,
papa, pallar, camote, frijol, palta y maíz. Y de especial importancia fue el cultivo del algodón,
cuya fibra aprovecharon en gran escala.29
COMERCIO

Los pobladores intercambiaban su producto mediante el trueque: los del litoral, brindaban sus
productos extraídos del mar (pescado y mariscos), los de los valles costeños, algodón y
frutas, y los de las zonas altas, sus productos agrícolas (cultivos alimenticios) y de pastoreo
(camélidos). El centro de toda esa red era indudablemente la Ciudad Sagrada de Caral.
Es también evidente que dicha red se prolongó a lugares más lejanos, pues en la zona de
Caral-Supe se han hallado productos de la sierra (palos de lloque, plumas de cóndor), la
selva (congompe, pieles de primates, plumas de aves) y la costa ecuatorial (spondylus). No
solo intercambiaron productos materiales sino también conocimientos y elementos
culturales.30

ORGANIZACIÓN POLÍTICA
Cada asentamiento estaría representado por una autoridad o curaca, además de los
principales de sus ayllus o grupos de familias; lo que constituiría el germen de una forma de
gobierno que habría de prolongarse milenariamente en todas las sociedades andinas. La
clase dirigente se conformaba con recibir la tributación de los habitantes, tanto en bienes
como en prestación de servicios.31

ORGANIZACIÓN SOCIAL
Se ha determinado que existía una gran diferenciación social, es decir, la población se dividía
en clases sociales, cada una de las cuales cumplían determinadas funciones y estaban
organizadas de manera jerárquica. Unos grupos se encargaban de la planificación y la toma
de decisiones (gobernantes y sacerdotes), y otros de las tareas manuales, como la pesca, la
construcción, la agricultura, etc.32

ARTE
ARQUITECTURA

Pirámide de Caral.
Los ejemplos más relevantes de arquitectura monumental se dan en la Ciudad Sagrada de
Caral. Sus edificios principales son pirámides escalonadas o templos, hechas a base de
adobe y piedra; como elementos complementarios, se usaban troncos y fibras vegetales. Son
estructuras de diverso tamaño. El más imponente, tanto en altura como en volumen, es el
llamado Edificio Piramidal Mayor (o simplemente la Pirámide Mayor de Caral). 33
Las paredes de la estructura piramidal están enlucidas con barro y pintadas de blanco o
amarillo claro, y, raramente, de rojo. Cada edificio tenía una escalera central que conducía
hacia la parte superior, donde se hallaban varios cuartos. En el cuarto principal había
plataformas bajas ubicadas en dos o tres de sus lados, y en el centro, un fogón compuesto
por un hoyo en el suelo, recubierto con barro. Los indicios indican que el fogón tenía una
función ritual; allí se quemarían diversos alimentos como ofrendas. 34
ESCULTURA

En Caral no se desarrolló la técnica alfarera (esto es, piezas modeladas en arcilla y cocidas al
fuego). Y es que, en la práctica, los caralinos no necesitaban de cerámica pues contaban con
mates de calabaza como recipientes, cucharas talladas en madera y platos tallados en
piedra.8
Aunque si modelaban pequeños ídolos antropomorfos en arcilla, dejándolos secar al sol.
Estas estatuillas, que representan figuras masculinas y femeninas, se han encontrado
fragmentadas y formarían parte de rituales relacionados con la renovación de los edificios y el
culto de la fertilidad. A base de estas representaciones se puede inferir la vestimenta, el
tocado y el peinado de los habitantes de Caral.35
MÚSICA DE CARAL / INSTRUMENTOS

Se descubrieron tres conjuntos musicales conformados por instrumentos de viento: 13

 Un conjunto de 38 cornetas, hecho de huesos de huanaco y venado.


 Un conjunto de 32 flautas traversas, de huesos de cóndor y pelícano, con diseños
zoomorfos.
 Un conjunto de 4 antaras (flauta de pan), de carrizo e hilos de algodón.
Este descubrimiento sugiere la práctica musical colectiva, así como una organización
compleja de la sociedad de Caral. Posiblemente, la música acompañaba a las prácticas
rituales y sociales.
ORNAMENTACIÓN PERSONAL

Los caralinos se adornaban con collares de cuentas y dijes elaborados con conchas marinas
(como el choro y el mullu o spondylus), huesos de animales marinos, piedras semipreciosas,
minerales como la crisocola, andesita y rodocrosita. Muchos de estos productos eran traídos
desde regiones lejanas. Las conchas eran alisadas, pulidas, y algunas veces grabadas con
diseños sencillos, como el espiral. Otros collares tenían plumas amarradas con hilos de
algodón.36

CIENCIA
MATEMÁTICA

Es evidente que contaron con conocimientos de aritmética y geometría, necesarios para el


diseño y construcción de sus edificios.37
ASTRONOMÍA
Piedra o huanca en Caral.
Se han encontrado evidencias de que los hombres de Caral contaban con conocimientos de
astronomía, que aplicaban en la elaboración del calendario, relacionado con la celebración de
festividades y otras actividades económicas, religiosas y cívicas. Dichos conocimientos lo
aplicaron también en la orientación de los edificios públicos. Se han hallado, por ejemplo,
geoglifos y líneas esparcidos en las planicies desérticas, al lado de piedras talladas dispersas;
así como un recinto subterráneo originalmente techado, que parece ser un observatorio. Es
de destacar también un monolito o huanca hincado en el suelo de una plaza pública, que
habría sido un instrumento de observación astronómica. 37
SISTEMA DE REGISTRO (QUIPUS)

En la pirámide La Galería se ha hallado un resto textil que ha sido interpretado como


un quipu, el conjunto de hilos con nudos que los incas utilizaban como instrumento
mnemotécnico (es decir, como medio de conservación de información estadística o mensajes
para comunicarse). Sería pues, el más antiguo quipu hallado en el Perú y evidenciaría la
antigüedad milenaria de su uso. Como para corroborar el uso del quipu en Caral, se
descubrieron representaciones pictóricas de dichos objetos sobre tres bloques líticos de las
plataformas de la pirámide Menor de Caral.37
MEDICINA

El conocimiento médico está evidenciado por la presencia recurrente de plantas medicinales,


muchas de ellas halladas en contextos funerarios. Por ejemplo, son numerosos los paquetes
de tallos y hojas de sauce, usado contra los dolores de cabeza (es el mismo árbol que
contiene el principio activo de la aspirina). 38

TECNOLOGÍA
TECNOLOGÍA CONSTRUCTIVA

Restos de shicras en Caral.


Los constructores de Caral usaban la técnica de las shicras, bolsas hechas con fibras
vegetales y llenas de bloques de piedra, con las que rellenaban las plataformas de los
templos, colocándolos ligeramente separadas. De esa manera lograban estabilidad en las
estructuras. Al ocurrir un fuerte sismo o terremoto, ese núcleo de shicras que hacía de base
del edificio se movía con la vibración, pero de manera limitada, pues las piedras eran
contenidas en las bolsas. Luego, las shicras se reacomodaban encontrando un nuevo punto
de estabilidad. La shicras tenían pues, una función antisísmica. 1139
TECNOLOGÍA AGRÍCOLA

Las evidencias halladas indican que hubo grupos especializados en mejorar las especies y el
rendimiento de los cultivos alimenticios e industriales. Mediante la experimentación y la
manipulación genética de las diversas variedades de plantas, se produjeron semillas
mejoradas. Ello permitió la producción de plantas con frutos de mejor calidad y tamaño, y más
resistente a las plagas. Un ejemplo sería el algodón, que pasó por un proceso de
mejoramiento genético para lograr una fibra más larga, variedad de colores (pardo, marrón,
crema y beige) y mayor rendimiento.40
TECNOLOGÍA TEXTIL

El desarrollo que alcanzó la textilería se evidencia por el hallazgo de cantidad de semillas y


motas de algodón. Con las fibras de este producto se tejían los vestidos, que eran piezas
llanas, sin decoración. Se empleaba la técnica del entrelazado y el torzal. También elaboraron
calzado, bolsas, sogas, redes de pescar, cordeles, etc. Conjuntamente con la fibra de algodón
se usaron las de otros vegetales, como totora, junco, cabuya, etc.1241

RELIGIÓN

El Altar del Fuego Sagrado en Caral.


La religión, como ya se ha dicho, debió ser el factor de integración social y cultural que
mantuvo unidos a los habitantes del valle Caral-Supe. La clase dirigente debió ser la
mediadora entre el grupo social que representaban el poder sobrenatural de los ancestros y
dioses.42
Por la monumentalidad de sus templos o pirámides escalonadas, la Ciudad Sagrada de Caral
debió ser el centro religioso de esta civilización. Allí debía afluir gente venida de otros sitios
del valle, e incluso de regiones más lejanas, para participar de las ceremonias rituales. Estas
tendrían como centro los fogones de los templos, donde se quemaban ofrendas, que
consistían sobre todo en alimentos (peces y moluscos), algodón, cuarzo, mechones de
cabello y otros objetos. También se enterraban con carácter votivo estatuillas de arcilla
(previamente rotas), y conglomerados de vegetales. 4341

FIN DE CARAL

Todo indica que hacia el 1800 a. C. todos los asentamientos de la cultura caral en el valle de
Supe fueron abandonados. Se ignora las razones exactas, pero se presume que fue a
consecuencia de eventos naturales, como terremotos y el fenómeno de El Niño, que obligaron
a los pobladores a emigrar a otros lugares.24
Efectivamente, se han hallado indicios de fuerte actividad sísmica en diversos templos
monumentales, como en la Huaca de Sacrificios de Áspero y el Templo Piramidal Mayor de
Caral. Muestran grandes grietas y desniveles entre los pisos que posteriormente fueron
cubiertos por nuevas construcciones. Esos sismos debieron ser de una magnitud de 7 a 8
grados en la escala de Richter. 24
Pero posiblemente lo que más afectó fue uno o varios eventos catastróficos de El Niño,
caracterizado por lluvias torrenciales y desbordes de ríos, que causarían sin duda un gran
colapso en la economía agrícola, al quedar convertidos en ciénagas y pantanos las zonas
dedicadas al cultivo; otra consecuencia sería el arenamiento de las playas. También los
vientos inusitados por El Niño ocasionarían grandes tormentas de arena que cubrirían los
campos de cultivo del valle de Supe.24
Los pobladores se verían así obligados a emigrar a otros lugares donde construyeron sin
duda nuevos asentamientos y aplicaron sus tecnologías. Coincidentemente, surgieron por esa
época otros templos y centros administrativos en los valles costeros cercanos a Caral, así
como más al norte y en la sierra. Entre ellos están Vichama (Végueta, Huaura), Sechín, La
Galgada y Huaricoto (Áncash), y Kotosh (Huánuco). Estos centros demuestran, efectivamente
la continuidad de la civilización andina, cuyo foco primigenio es indudablemente Caral. 24
CULTURA CHAVÍN
Chavín de Huántar o cultura chavín es una cultura arqueológica del Antiguo Perú que se
desarrolló durante el Horizonte Temprano (1200 a. C.-400 a. C.)12 Tuvo su centro de
desarrollo en la ciudad de Chavín de Huántar, que está ubicada a 2 km de la confluencia de
los ríos Huachecsa y Mosna, en la cuenca alta del río Marañón (en el actual departamento de
Áncash).

Fue el arqueólogo Julio César Tello quien la descubrió y consideró como la «cultura matriz» o


«madre de las civilizaciones andinas»,3 y que eran de origen amazónico. Sin embargo,
descubrimientos recientes sugieren que la civilización de Caral ―del periodo Precerámico
Tardío― es más antigua que Chavín.4
Julio Cesar Tello planteó que la cultura chavín2 fue de origen amazónico debido a las
múltiples representaciones de la iconografía selvática en sus manifestaciones artísticas,
especialmente en la cerámica. En su máximo apogeo Chavín de Huántar, centro principal
chavín, actual Patrimonio Cultural de la Humanidad,5 fue un importante centro ceremonial y
centro de irradiación cultural cuya influencia se extendió por gran parte de la costa y sierra de
los Andes del Perú.

Ubicación geográfica

El centro ceremonial de la cultura Chavín Chavín de Huántar, se encuentra ubicado en


la Zona de Conchucos, en el lado oriental de la Cordillera Blanca, en la confluencia de los
ríos Mosna y Huachecsa, afluentes del río Marañón; en el actual distrito de Chavín de
Huántar,6 en la provincia de Huari (región Áncash). Tiene como coordenadas 9° 35′ 33.99″ S,
77° 10′ 42.43″ O y una altitud de 3150 m s. n. m.
La cultura Chavín se extendió (extender) por gran parte de la región andina abarcando por el
norte hasta los actuales departamentos peruanos de Lambayeque y Cajamarca y por el sur
hasta los actuales departamentos peruanos de Ica y Ayacucho, por ello es considerada una
cultura panandina. No está claro que en todos los lugares donde se aprecia la cultura chavín,
fuera predominante la lengua y la etnicidad de los habitantes de Chavín de Huántar.

Organización sociopolítica

De acuerdo a algunas teorías, en la sociedad teocrática, chavín, los más hábiles por sus
conocimientos astronómicos, ambientales del tiempo y del clima se destacaron en su
comunidad y terminaron convirtiéndose en autoridades político-religiosas. Se distinguen dos
clases bien diferenciadas:[cita  requerida]

 Los sacerdotes: La casta sacerdotal, la clase dominante, poseía conocimientos


de la astronomía, del tiempo y del clima lo que les proporcionaba gran influencia y
poder, también eran grandes técnicos agrícolas, ingenieros y especialistas en las
artes.
 El pueblo: La clase dominada, conformaba la masa popular, es decir, los
agricultores y ganaderos, al servicio de la casta sacerdotal.
Actividades económicas

Desarrollaron notablemente la agricultura, la ganadería y el comercio a base


de trueques entre los pueblos serranos, costeños y posiblemente con los pueblos
amazónicos.

Agricultura[editar]
Cultivaron diversos productos entre los que figuran el maíz y la papa, otros productos
agrícolas fueron:

 Tubérculos: camote, mashua, oca, olluco
 Leguminosas: frijoles, pallares
 Oleaginosas: maní
 Condimentos: achiote, ajíes
 Granos: kañiwa, quinua
 Hortalizas: palta, pepino, tomate
 Grano:maíz
Entre las técnicas agrícolas destaca el uso de los canales; también se inició la construcción
de los primeros andenes y el uso de la chaquitaclla (arado de pie), que acrecentó la
productividad agrícola.

Ganadería[editar]
Desarrollaron la ganadería a base de los camélidos sudamericanos (llamas y alpacas), así
como la crianza de cuyes.

Manifestaciones culturales

La cultura Chavín representa el primer estilo artístico reconocido y difundido en los Andes. El
arte de Chavín se puede dividir en dos fases: la primera fase correspondiente a la
construcción del "Templo Viejo" en Chavín de Huántar (c. 900-500 a. C.); y la segunda fase
correspondiente a la construcción del "Templo Nuevo" de Chavín de Huántar (c. 500-200 a.
C.).
El arte de Chavín es conocido por su compleja iconografía y su "realismo mítico". 7 Hay
constantes evidencias en todos los tipos de arte (cerámica, alfarería, esculturas, etc.) de
interacciones entre humanos y animales, lo que refleja las interconexiones sociales y cómo la
gente de Chavín se veía a sí misma conectada con "el otro mundo". 8
Alguna otra iconografía encontrada en el arte de Chavín continúa dando una idea de cómo
era la cultura, como la evidencia general del uso de plantas psicoactivas en el ritual. El cactus
de San Pedro se ve a menudo en varias formas de arte, a veces en manos de humanos, lo
que se usa como evidencia para respaldar el uso de la planta. 9
Un estudio general de la alfarería costera de Chavín con respecto a la forma revela dos tipos
de vasijas: una tipo tallada poliédrica y una tipo pintada globular.
El arte de Chavín decora las paredes del templo e incluye tallas, esculturas y alfarería. Los
artistas representaron criaturas exóticas que se encuentran en otras regiones, como jaguares
y águilas, en lugar de plantas y animales locales. La figura felina es uno de los motivos más
importantes del arte chavín. Tiene un significado religioso importante y se repite en muchas
tallas y esculturas. Las águilas también se ven comúnmente en todo el arte de Chavín. Hay
tres artefactos importantes que son los principales ejemplos del arte Chavín. Estos artefactos
son el Obelisco Tello, las cabezas clavas y el Lanzón.
El Obelísco Tello es un eje rectangular vertical con una muesca en forma de escalón en la
parte superior. El obelisco está tallado en relieve en los cuatro lados y consta de dos
representaciones de una criatura de un solo tipo. La cabeza, el cuerpo y la cola ocupan uno u
otro lado ancho, mientras que las piernas, los genitales y otros elementos subsidiarios ocupan
los lados estrechos. Estas criaturas han sido interpretadas como un tipo de criatura "gato-
dragón" (por Tello) y como un caimán (por Rowe y Lathrop). 11 El gran artefacto puede
representar un mito de la creación.
Las cabezas clavas se encuentran en todo Chavín de Huántar y son una de las imágenes
más conocidas asociadas con la civilización Chavín. Las cabezas clavas son enormes tallas
de piedra de cabezas de jaguar con colmillos que se proyectan desde la parte superior de las
paredes interiores.
Posiblemente el artefacto más impresionante de Chavín de Huántar sea el Lanzón. El Lanzón
es un fuste de granito tallado de 4,53 metros de largo que se exhibe en el templo. El eje se
extiende a través de todo un piso de la estructura y el techo. Está tallado con una imagen de
una deidad con colmillos, una imagen recurrente en toda la civilización Chavín. 12 El Lanzón se
encuentra en una galería dentro del Templo Viejo. La escultura se ve reforzada por las cuatro
aberturas de la cámara en la que se encuentra, de modo que solo permite vistas parciales y
segmentadas. En los dibujos desplegables, las figuras representadas son coherentes para los
intérpretes, pero es importante tener en cuenta que no es así como debe verse el Lanzón. 13

Orfebrería
Moldeaban mediante el martillado y el repujado, confeccionando coronas, brazaletes, aretes,
orejeras, cuentas de collar y pequeños adornos. Algunas muestras de estos trabajos fueron
halladas en Chongoyape y Kuntur Wasi. La alta ley del oro hace suponer que procedían de
los lavaderos de los ríos amazónicos.

Textilería[editar]
Utilizando como materia prima el algodón y la lana, se hacían tapices y tejidos. Estos podían
ser simples bordados y con adornos a base de orlas y flecos. En la costa, según Julio C.
Tello:
.aparecen vestigios de hilandería y textilería, como piruros del huso y fragmentos de tejidos de lana y
de algodón. Estos son de técnica primitiva a base de red de malla, gasa, acordonado, anudado,
trenzado, calado, etc., según las muestras encontradas en las cavernas de Cerro Colorado en Paracas,
un trozo anudado procedente de las tumbas de Cerro San Pedro de Ancón y multitud de objetos de
cestería y petatería.

Otro tejido encontrado en Ica es la tela pintada donde se observan los personajes religiosos
de la cultura chavín que, según algunos arqueólogos, sería un catecismo destinado a difundir
el culto religioso de aquella cultura.

Cerámica
La cerámica fue extraordinaria. Es generalmente monocroma, en algunas ocasiones es
decorado con colores rojo y negro-plata. Con añadido de una serie de puntos. Entre los seres
más representados figuran: seres zoomorfos (felinos, monos, lagartos, serpientes y aves),
fitomorfos (tubérculos) y antropomorfos. Los colores más usados fueron: gris, marrón y negro.
De acuerdo al uso, se puede distinguir dos tipos de cerámica: 14

 Cerámica utilitaria: para el uso común de la gente del pueblo.


 Cerámica ceremonial: para las prácticas rituales y ceremonias.
Asimismo de acuerdo al desarrollo temporal, existen dos tipos:

 Época rocas. Cuyas características son: forma globular, base plana, asa estribo
terminando en pico además de vasijas y tazones de hasta 50 cm de diámetro.
 Época ofrendas. En esta fase los golletes (cuellos) son más delgados y su forma
es acampanulada.

Escultura

La escultura chavín se caracterizaba por el uso de piedra (arte lítico), siendo usualmente
de naturaleza monolítica con énfasis religioso. Las esculturas más relevantes son
los monolitos, las estelas y las cabezas clavas. Destaca también las columnas y la losa
voladiza en la Portada de las Falcónidas.
El lanzón monolítico

El lanzón monolítico ―que representa al Dios Sonriente (según John Rowe) o a un dios con
el rostro fiero― es una escultura de 5 m de altura que está clavada en medio de un espacio
reducido de forma cuadrangular, dentro de un crucero que está debajo de la tierra, en la parte
céntrica del Templo Antiguo del complejo arqueológico de Chavín de Huántar. Fue bautizado
como el «lanzón» por su forma de punta de proyectil gigantesca, aunque esta denominación
es errónea, pues en realidad se trata de un huanca (wanka en quechua) o ‘piedra sagrada’,
de primordial importancia en el culto religioso. La razón de su peculiar forma es todavía
materia de discusión; posiblemente fue tallado para simular la forma de un colmillo. En su
superficie está labrada la imagen de un dios con rasgos antropomorfos y zoomorfos (entre
estos últimos destacan los cabellos y cejas en forma de serpientes, la boca con dos grandes
colmillos y las manos con garras felinas). El ser antropomorfo representado lleva la mano
derecha alzada y la izquierda apoyada en el muslo. Posiblemente era la principal divinidad del
Templo Viejo de Chavín de Huántar y al parecer es similar al dios representado en la estela
Raimondi (su principal diferencia con esta es que no lleva báculos).
El obelisco Tello

El obelisco Tello (en cuya superficie se halla labrada la representación de dos deidades
míticas, o en todo caso, un dios doble) es una escultura lítica de forma de prisma, de 2,52 m,
esculpido en las cuatro caras. Representa a una divinidad compleja, existiendo diversas
interpretaciones sobre su naturaleza: una «doble divinidad» o dios hermafrodita con cabeza
de felino (Tello); la unión de dos caimanes (Rowe); o un dios ave con boca de felino o «felino
volador», desdoblado lateralmente (Kauffmann). En toda su superficie se representan multitud
de otros elementos: hombres, aves, serpientes, felinos y plantas (calabaza, ají, maní, yuca,
etc.). La fama del obelisco Tello es atribuible a la riqueza iconográfica chavín que contiene; se
trata de la figura iconográfica más compleja de los objetos chavines. Como ya señalamos, el
arte chavín es básicamente naturalista, y los temas principales son los seres humanos, aves,
serpientes, felinos, otros animales, plantas y conchas. Formas idealizadas de estos
elementos están cubiertas con abundantes elementos más pequeños, a menudo como
sustitución metafórica, en algunas secciones del cuerpo representado en el obelisco Tello. 15
El obelisco Tello representaba los ciclos de la naturaleza y al jaguar, era hermafrodita, es
decir, que tenía dos sexos. Esta es la representación más complicada de la escultura chavín.
Sin embargo, tiene más sentido que el felino representado sea un puma, debido a que fue
este quien compartía territorios con la antigua civilización chavín, no el jaguar.
La estela Raimondi

La estela Raimondi (que representa a un dios con dos báculos en las manos) es un monolito
de granito pulido de 1,98 m de largo por 0,74 m de ancho, tallado en solo una de sus caras.
Representa a un dios con rasgos felínicos con los brazos extendidos sosteniendo en cada
mano una vara o báculo. Similar representación aparece también en otras esculturas de
culturas andinas posteriores, como la Tiahuanaco y Huari, al cual se conoce como Viracocha,
la «Divinidad de los dos báculos» o «Dios de las varas».
Este monolito recibe su nombre como homenaje al naturalista italiano Antonio
Raimondi (1824-1890), quien impulsó su traslado a Lima para su estudio y conservación
(1874). Fue exhibida en el antiguo Parque de la Exposición. Se salvó del pillaje de las tropas
de ocupación chilenas en 1881, al caerse al suelo mostrando solo su parte posterior, que es
lisa, por lo que los saqueadores pensaron que se trataba de una simple losa de piedra sin
ningún valor. Es por esta fortuita ocurrencia que el Perú pudo conservar esta valiosísima
pieza escultórica. Actualmente se conserva en el patio del Museo Nacional de Arqueología
Antropología e Historia del Perú.
La estela de Yauya[editar]

La estela de Yauya es un monolito en forma de prisma en una de cuyas caras se halla


labrada la figura de un ser mítico. Actualmente está quebrantada en cuatro partes. Su
fragmento principal fue descubierto cerca de la localidad de Yauya (Áncash) por Tello en
1919, quien lo bautizó con dicho nombre. Los otros fragmentos fueron descubiertos entre los
años 1960 y 1990. De estos fragmentos se infiere una idea cabal de la forma original del
monolito. Medía 3 m de alto, 50 cm de ancho y 18 cm de grosor. Sobre sus relieves existen
diversas interpretaciones. Según Tello, se trata de la representación de una divinidad
ictiomorfa o con forma de pez; se basa principalmente en los diseños que parecen vértebras
del espinazo de un pez y escamas estilizadas. Según Rowe es la imagen de un caimán.
Según Federico Kauffmann Doig representa a un felino volador, interpretando como plumas lo
que a Tello le parecieron escamas.
Cabezas clavas

Las cabezas clavas son bultos escultóricos que representan a cabezas de deidades, hechas
en diferentes tamaños. Todas cuentan con una estructura alargada en su parte posterior, con
la que eran insertadas en los muros del templo principal o castillo de Chavín. En unos casos
presentan rasgos antropomorfos y en otros zoomorfos (felino y ave de rapiña), o bien una
combinación de ambos, al estilo de la figura del lanzón monolítico.
Sobre su función, algunos investigadores afirman que hacían el papel de fieros guardianes de
los templos, o posiblemente ahuyentaban a los malos espíritus. Según Tello, representan
cabezas trofeos de sus enemigos, costumbre muy arraigada en las zonas selváticas, lo que
encajaba en su tesis del origen selvático de la cultura chavín. Otros estudiosos piensan que
podrían ser retratos de los sacerdotes chavines (en el marco de rituales religiosos en donde
se usaban sustancias alucinógenas, cuyos efectos en los rostros de los sacerdotes estaría
retratado alegóricamente en cada cabeza clava, a manera de secuencia).

Arquitectura

Chavín de Huántar fue el lugar de origen de la segunda entidad política a gran escala en los
Andes centrales, y esto se debe principalmente a la extensa arquitectura del sitio 16 así como
la arquitectura se considera un logro de ingeniería. 17 TEl sitio utiliza arquitectura interna y
externa. La arquitectura interna se refiere a galerías, pasillos, habitaciones, escaleras,
conductos de ventilación y canales de drenaje. La arquitectura externa se refiere a plazas,
montículos de plataforma y terrazas.18 La construcción del "Templo Viejo" tuvo lugar alrededor
del 900 al 500 a. C., y la construcción del "Templo Nuevo", la estructura que fue construida y
agregada al "Templo Viejo", tuvo lugar alrededor del 500 al 200 a. C. La falta de estructuras
residenciales, depósitos ocupacionales, armamento generalizado y evidencia de
almacenamiento hacen que la arquitectura del sitio sea más interesante, ya que se enfoca
principalmente en los templos y lo que hay dentro de ellos. 19
El centro monumental de Chavín de Huántar se construyó en al menos 15 fases conocidas,
todas las cuales incorporan los 39 episodios conocidos de construcción de galerías. La
primera etapa de construcción conocida, la etapa de montículo separado, consistió en
edificios separados18 y no se ajustan, necesariamente, al patrón en forma de U visto en el
Período del Horizonte Inicial y el Período del Horizonte Temprano. Durante la etapa de
expansión, la construcción integró plataformas escalonadas y creó una forma contigua en
forma de U conectando los edificios, que ahora rodean espacios abiertos. En esta etapa, las
galerías están elaboradas en forma y características. Durante la Etapa Blanco y Negro se
construyeron todas las plazas conocidas (Plaza Mayor, Plaza Menor y Plaza Circular).
Cuando la construcción llegó a su fin, las galerías adquirieron un aspecto más
estandarizado.18 Al final del proceso de crecimiento, los edificios se convierten en plazas con
una disposición en forma de U y un eje este-oeste que biseca el espacio cerrado. El eje
también se intersecta con el Lanzón.16
Se realizaron modificaciones durante todas las etapas de la construcción para mantener el
acceso a la arquitectura interna del sitio.18 There was a high level of interest in maintaining
access to internal architecture and sacred elements of the site. The internal architecture was
constructed as part of a single design and was intricately incorporated with the external
architecture.18 La inclusión de un crecimiento lateral y asimétrico permitió que estos elementos
sagrados permanecieran visibles, incluido el Lanzón.
La Galería del Lanzón se creó a partir de una estructura independiente anterior que luego se
transformó en un espacio interno con techo de piedra al construir a su alrededor. El Lanzón
posiblemente estuvo presente antes del techado, ya que es probable que el Lanzón sea
anterior a la construcción de montículos y plazas.16 En general, las galerías siguen patrones
de construcción, lo que indica un esfuerzo masivo en diseño y planificación. Mantener estas
galerías a lo largo del tiempo fue importante para los arquitectos. 18 Se sabe que las galerías
no tienen ventanas, tienen callejones sin salida, curvas cerradas y cambios en la altura del
piso, todo lo cual fue diseñado para desorientar a la gente que camina en ellas. 20
Se utilizó una combinación de simetría y asimetría en el diseño y planificación de la
construcción del sitio y, de hecho, guio el diseño. Hubo ubicaciones centradas de escaleras,
entradas y patios, todos los cuales fueron consistentemente prominentes. En las últimas
etapas de la construcción, debido a las limitaciones, el centrado ya no era posible, por lo que
los arquitectos pasaron a construir pares simétricos. Externamente, los edificios eran
asimétricos entre sí.18
Los principales materiales de construcción utilizados fueron cuarcita y arenisca, granito
blanco y piedra caliza negra. En las plataformas principales se utilizó un curso alternativo de
cuarcita, mientras que la piedra arenisca blanca y el granito blanco se utilizaron
indistintamente en la arquitectura, y casi siempre se cortaron y pulieron. El granito y la piedra
caliza con vetas negras fueron las materias primas utilizadas en casi todo el arte lítico
grabado en el sitio. El granito también se utilizó ampliamente en la construcción de la Plaza
Circular.16
Los montículos de plataforma con caras de piedra en el sitio se hicieron usando un relleno
ordenado de bloques rectangulares de cuarcita en capas niveladas. Las plataformas se
construyeron directamente sobre las piedras de la pared caídas de construcciones anteriores,
ya que hubo poco o ningún intento de eliminar los escombros. 16

Lengua[editar]

La lengua hablada de los chavín2 no es conocida, pero con seguridad es una lengua muerta,
que como mucho está relacionada con las lenguas modernas documentadas en la región. 21
Algunos antropólogos han sugerido, que su lengua podría haber estado emparentada con
el idioma protoquechua, razonando que las lenguas quechuas tienen una morfología y una
sintaxis altamente regular comparada con otras lenguas cercanas, lo cual podría haber sido el
resultado de un proceso de criollización o estandarización, al haberse formado una lingua
franca que comunicara la región.22 Aunque existen dudas sobre esta teoría, Alfredo
Torero sitúa el protoquechua en los primeros siglos del I milenio, que es un período mucho
más tardío que los orígenes de la cultura chavín.
Religión[editar]

El pueblo chavín fue al parecer politeísta. Según Julio C. Tello, la religión chavín habría tenido
influencia amazónica, ya que sus esculturas muestran seres sobrenaturales, con rasgos
felínicos como del jaguar o puma, caimanes, serpientes y diversas aves andinas como
el cóndor y el halcón, o amazónicas como el águila harpía y la anaconda. El culto chavín se
estimuló debido al progreso técnico alcanzado en la producción agrícola, en el desarrollo
textil, en la pesquería (uso de grandes redes de pesca), en la orfebrería y la metalurgia del
cobre. Estos avances técnicos impulsaron el desarrollo económico y condujeron a la
construcción de muchos centros ceremoniales.
El sitio sagrado de Chavín de Huántar fue indudablemente un punto central para los rituales
religiosos. La vestimenta y la música tenían parte importante en las ceremonias. La religión
chavín tuvo como cabeza principal a una casta sacerdotal; es probable que existiese la figura
de un «gran sacerdote», como en la jerarquía religiosa incaica. 23
Para Julio Cesar Tello, el llamado «dios de los báculos» o «dios felino», considerado el
principal del panteón chavín, era la más antigua versión de la imagen de dios Viracocha, que
tiempo después aparece difundida en todo el mundo andino. La más imponente de las
representaciones de este dios chavín aparece en la Estela de Raimondi: tiene una forma
antropomorfa en posición frontal con los brazos extendidos en los cuales sostiene dos
báculos, presenta cabellos en forma de serpientes extendidos y una boca felínica. Pero todo
indica que esta deidad no fue una creación chavín, pues modernos descubrimientos
arqueológicos han sacado a la luz representaciones de deidades similares, con colmillos de
felino, en diversos sitios cronológicamente anteriores al santuario de Chavín (como en Sechín
Bajo y Huaca de los Reyes). Sin embargo, es probable que fueran los chavines los que
difundieron su culto por gran parte del mundo andino. Se le ve también presente en el arte de
la cultura paracas, que coincide con la fase final de Chavín. En el Horizonte Medio ese mismo
dios (o tal vez otro con rasgos similares) se halla representado en el arte tiahuanaco y en el
arte huari.
Según una teoría del arqueólogo Richard Burger,24 la religión chavín implicaba la
transformación del ser humano a otro a través del uso de sustancias alucinógenas. Muchas
esculturas representan la transformación de una cabeza humana a una cabeza de jaguar. El
uso de sustancias alucinógenas para fines religiosos era común según los hallazgos
arqueológicos encontrados. Los sacerdotes chavines utilizaban el cactus de San Pedro y las
semillas de la Anadenanthera, dada sus propiedades alucinógenas. Son a menudo
representadas en las imágenes talladas, por ejemplo en la estela del portador del cactus se
representa un ser antropomorfo que lleva el cactus en la mano como un báculo. 25 Hay
imágenes que representan figuras humanas con fugas de mucosidad de la nariz (un efecto
secundario resultante de la utilización de esos alucinógenos). Las sustancias psicotrópicas
contenidas en las plantas catalizaban en los sacerdotes el estado de trance, y por lo tanto el
estar «más cerca de las divinidades», y otros beneficios, que les permitió mejorar su visión
(dilatación de las pupilas) y penetrar en las profundidades del templo en la oscuridad
absoluta.[cita  requerida]
La iconografía de figuras antropomórficas con rasgos de felino, serpientes y de otros animales
es una característica importante de la cultura chavín. Todas estas deidades son
representadas en las diferentes manifestaciones culturales como en la cerámica, la
metalurgia, la textilería y las esculturas en piedra y hueso.

Iconografía[editar]

Al no haberse conservado los relatos míticos de esa lejana época (hacia 1000-200 a. C.)
existe una diversidad de interpretaciones sobre las figuras representadas en las esculturas
chavines. Se habla así de un «dios jaguar» importado de la selva; otros han visto
representaciones estilizadas de caimán, ave o araña. El arqueólogo Federico Kauffmann
Doig ha hecho notar que esas interpretaciones dispares surgen de la contemplación aislada,
fuera del contexto iconográfico andino del que forma parte Chavín.
Comparando con otras iconografías contemporáneas y posteriores, Federico Kauffmann
Doig sostiene que la divinidad representada en los monolitos de Chavín es básicamente un
ser híbrido: mitad hombre con boca atigrada y mitad ave de rapiña, al cual ha
denominado piscoruna-pumapasim (en quechua: ‘hombre-ave con boca atigrada’). Este
«felino volador» estaría relacionado con el culto al agua, de tanta importancia en las
civilizaciones agrícolas del Perú antiguo.

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