Había una vez, una hermosa

princesa que se llamaba Nina,

a ella le encantaba leer y
pasear por los alrededores de
su palacio.
Nina, pasaba horas bajo un
árbol leyendo y leyendo
acompañada de su amigo
fiel Doki y asi escapar del
aburrimiento de las tardes
en el palacio.
Mientras leía, una bruja
malvada la observaba desde lo
alto. Ella planeaba capturarla
y llevarla al bosque, porque no
le gustaba su belleza en
especial su sonrisa
La bruja malvada regreso a
su casa y empezó a preparar
una poción para dormir a la
princesa y asi lograr
llevarla al bosque junto al
feroz dragón.
Al día siguiente, la bruja logra
capturar a la princesa y la
lleva al bosque tenebroso. La
familia real estaba muy
preocupada por Nina y envía a
los guardias a buscarla.
Nina despertó y empezó a gritar
“Auxilio” “Auxilio” “La bruja
malvada me ha secuestrado”.
Inmediatamente aparecieron los
animales del bosque para
ayudarla, pero el feroz dragón los
ahuyenta con sus fuertes rugidos.
Mientras tanto, los guardias la
siguen buscando, pero no logran
encontrarla. Hasta que, un
pequeño pastor se acerca y
empieza a señalar el camino
para encontrar a la princesa.
En poco tiempo los guardias
lograron encontrar a Nina, pero
ellos debían enfrentarse al
dragón para lograr escapar.
Federico, un noble caballero
decide enfrentarse al dragón.
Apenas Federico enseña su espada
el dragón huye rápidamente,
despues de todo no era tan
valiente el dragón al igual que la
bruja, esta fue capturada y
encerrada en el calabozo.
Finalmente, la princesa Nina
regresa al palacio montando
caballo, Nina va a acompañada de
los guardias. Por otro lado, la
bruja fue atrapada y encerrada en
el calabozo