Está en la página 1de 6

ANÁLISIS CRÍTICO DE METODOLOGÍAS Y RESULTADOS

DE LA PARTE CONCERNIENTE A MUESTRAS


SUBMAREALES DEL “ESTUDIO DE IDENTIFICACIÓN Y
DISTRIBUCIÓN DE LAS PARTÍCULAS DE CARBÓN EN LOS
SEDIMENTOS MARINOS DE LA BAHÍA QUINTERO –
SECTOR VENTANA” REALIZADO POR LA UNIVERSIDAD
ANDRÉS BELLO (Informe Final fechado el 9 abril 2021)
[Subtítulo del documento]

Dra. María Eugenia Cisternas S.


Geóloga-Mineralogista U. de Chile.
Dr. Rer. Nature Ruprecht-Karls Universität Heidelberg
mecistern@gmail.com
Tabla de contenido
1 INTRODUCCIÓN .......................................................................................................................................................1
2 ANÁLISIS CRÍTICO DE METODOLOGÍAS APLICADAS AL ESTUDIO DE LAS MUESTRAS SUBMAREALES SUPERFICIALES .1
3 ANÁLISIS CRÍTICO DE RESULTADOS REFERIDOS A LAS MUESTRAS SUBMAREALES SUPERFICIALES ............................2
4 ANÁLISIS CRÍTICO DE LA INTEGRACIÓN DE RESULTADOS EN MUESTRAS SUBMAREALES SUPERFICIALES ..................3
5 DISCUSIÓN DE LAS CITAS A TRABAJOS DE CISTERNAS (2019) ...................................................................................4
6 CONCLUSIONES GENERALES.....................................................................................................................................4

1 Introducción
AES GENER, ha solicitado a quien suscribe, un análisis crítico del “Estudio de identificación y distribución
de las partículas de carbón en los sedimentos marinos de la Bahía Quintero – sector Ventana” (en adelante
Estudio UAB), realizado por académicos de la Universidad Andrés Bello a solicitud de la Dirección General
del Territorio Marítimo y de Marina Mercante (DIRECTEMAR), Armada de Chile.

El estudio está catalogado como Estudio Científico- Informe Final con fecha de entrega 9 de abril 2021.
En la Información Administrativa está consignado el nombre de los responsables: Cristián Rodrigo R.,
Oceanógrafo, quien además es Jefe de Proyecto y Nicolás Phillippi Q., Geólogo. Las casillas
correspondientes a Nº de Licitación y Revisado por aparecen en blanco. Tampoco aparece consignado si
fue revisado por Directemar.

El texto elaborado en el presente informe solamente se hace cargo del análisis crítico a la parte del Estudio
UAB referida a las 22 muestras superficiales de sedimento colectadas en diferentes puntos de la Bahía
Quintero, como indica la Figura 1 del Estudio UAB.

2 Análisis Crítico de metodologías aplicadas al estudio de las muestras


submareales superficiales
Aspectos de menor relevancia:
• El Estudio UAB no contiene las coordenadas geográficas de las estaciones de muestreo
• No se menciona la presencia de residuos de combustión en las muestras de sedimento

Aspectos de gran relevancia (selección de métodos instrumentales)


• DRX: No hay justificación científica para el uso de la técnica de Difracción de Rayos X (DRX) aplicada
a la identificación de carbón en una muestra. Esta es una técnica absolutamente inadecuada para
la problemática, que como condición básica identifica fases cristalinas y el carbón no es un mineral.
• SEM/EDS: Los autores eligen usar muestras tipo briquetas pulidas, inadecuadas para la
problemática. No se justifica en el texto la elección de las partículas que serán estudiadas con
SEM/EDS: solo en 5 muestras seleccionan partículas de carbón, en 2 seleccionan carbón
combustionado y en las 7 muestras restantes seleccionan partículas como piroxeno, hematita,
ilmenita que no guardan relación con la problemática (Tabla 2).

1
3 Análisis Crítico de Resultados referidos a las muestras submareales
superficiales
Hay dos aspectos relevantes en este trabajo que conducen a invalidar resultados y aquellas conclusiones
que en ellos se sustentan.

1) El uso de la técnica de Difracción de Rayos X (DRX).


Esta técnica no debió ser usada para determinar presencia de carbón. Por otra parte es evidente la
ausencia de un mineralogista en el equipo de trabajo que pudiese filtrar los datos que por defecto
aporta el software (Difrac EVA). Los errores relevantes, detectados en el Estudio UAB son:

• Interpretación errada de presencia de carbón en las muestras. En términos generales es frecuente que
el software dé la alternativa de presencia de carbono cristalino del tipo grafito o similares (software
utilizado los codifica como COD 9014004 y C60, código PDF 44-0558) justo en una posición que se
superpone con el peak del cuarzo. Esta es una potencial trampa para alguien sin experiencia en el
tema, pero lo cuestionable es que en el Estudio UAB, además de no conocer esa trampa, se llega al
extremo de traducir esos supuestos porcentajes del elemento “carbono”, como porcentajes de carbón.
• Por el mismo método errado afirman que la “muestra de arena negra” (sic) de varamiento (usada como
muestra de control) contiene un 4,95% de carbono puro más lignito, un error manifiesto aportado por
la información por defecto (default) del software (mezcla de C +sílice), que debiese ser inmediatamente
descartada por un mineralogista (en el ámbito de la petrografía de carbones es impensable identificar
mediante DRX los tipos o rango de carbón, lignito es uno de ellos).
• Con relación a las fases cristalinas supuestamente presentes en las muestras de sedimento submareal,
los resultados consisten en una larga lista de minerales naturales y sintéticos, tal como es entregada
por defecto por el software. Demasiadas especies minerales, considerando que el límite de detección
(LOD) de la técnica es del orden de 1%.

Resultados de % de “carbón” (entre 0,58 y 2,21%) son reportados en 5 de las 8 muestras estudiadas por
DRX. Esos resultados, sin valor científico como ya se explicó, se utilizan para generar el Mapa de tendencia
de la distribución espacial de la concentración de carbón de la Figura 12), que por tanto no es válido, pues
los datos sobre los cuales se construyó son errados.

2) Interpretación de los resultados aportados por el SEM/EDS.


Los autores del Estudio UAB seleccionan en general UNA partícula por muestra para ser estudiada
mediante SEM/EDS.
• En las 5 muestras donde analizan partículas de carbón y en las 2 de carbón combustionado (residuos
de combustión), el % del elemento carbono fluctúa entre 39,98 a 94,53 % C. Al revisar el espectro
de la muestra con 39,98% de C se puede constatar que no corresponde a carbón (muestra QV-BC-E-
6) ya que el contenido elemental arroja un 29,7% de Fe, valor que no es coherente en un carbón.
• Los resultados espectrales de C, O y S en una partícula no pueden ser usados para clasificar el carbón,
por ejemplo, no es correcto decir que es bituminoso. El método normado y validado internacionalmente
de clasificación de carbón en sedimentos es la Reflectividad de Vitrinita, cuando se determina en un
universo mínimo de 100 partículas.

Los autores realizan un mapa de tendencia de la distribución espacial del % de carbono (Figura 13) en, a
decir de ellos, partículas específicas de carbón mineral en 7 muestras. Sin embargo, dos de ellas fueron
calificadas en la Tabla 2 como carbón combustionado, es decir no corresponden a carbón en sentido
estricto, por lo que el universo de datos se reduce a 5 partículas. Este mapa no tiene ninguna aplicación
práctica a la resolución de la problemática, por el contrario, puede causar confusión en quien lo observa,
si pasa por alto que fue construido a partir del % del elemento carbono registrado en sólo7 partículas.

2
4 Análisis crítico de la Integración de resultados en muestras submareales
superficiales
En la Tabla 3 del Estudio UAB, se muestran los resultados comparados según cada metodología, vale decir,
% de partículas de carbón determinado mediante análisis visual (22 muestras), junto con el resultado
(errado, como ya se explicó) del % de carbón obtenido por DRX en 5 muestras y, además, el % del elemento
carbono determinado por SEM/EDS en 7 partículas.

Dada la diferente escala de los diferentes métodos, los autores realizan una normalización de los
porcentajes obtenidos por cada método y además, definen un valor máximo normalizado. Así, los autores
asignan el valor 10 al valor más alto en cada metodología y sobre este calculan los nuevos porcentajes
normalizados. El valor máximo normalizado de la Tabla 3 corresponde al mayor valor normalizado en
alguna de las 3 metodologías de estudio.

El Valor Máximo Normalizado no resuelve el problema de escala entre las metodologías usadas (Figura 3):
lupa binocular, involucra a la muestra completa; DRX se realiza en unos cuantos gramos de la muestra y
SEM/EDS determina el % del elemento una única partícula; tampoco resuelve que se trate, como si fuesen
sinónimos, el % de partículas de carbón y el % del elemento carbón medido en una única partícula.

Con los datos obtenidos del Valor máximo Normalizado, los autores realizan un nuevo Mapa de tendencia
de contenido de carbón (Figura 14) que es considerado inválido por cuanto la metodología utilizada para
generarlo es incorrecta, como se demuestra con el análisis que sigue:

5 muestras fueron calificadas en la observación bajo lupa con 0% de carbón. Una de ellas (QV-03) no fue
analizada por DRX ni SEM/EDS por tanto mantiene su valor 0% carbón. Las otras adquirirán porcentajes
variables de carbón dependiendo de si fueron o no analizadas por DRX y SEM/EDS (Tabla 3). Por ejemplo:
• Muestra QV-1. Quien observó la muestra bajo la lupa dictamina que esa muestra no contiene carbón.
Una fracción mínima de esa misma muestra se estudia con DRX, resultando que tiene un 2,21% de
carbón como se indica la Tabla 3. Como ese 2,21% es el valor máximo “detectado” en todas las
muestras estudiadas con DRX, los autores le asignan el valor máximo normalizado =10. Es decir, en
el Mapa de tendencia de la Figura 14, construido con valores normalizados de las 3 metodologías, la
estación donde fue colectada esta muestra, que no tenía ninguna partícula de carbón (Mapa Figura 11),
pasa a ser considerada como una de las que más carbón contiene. (Mapa Figura 14).
• Muestra QV-21. Quien observó la muestra bajo la lupa dictamina que esa muestra no contiene carbón.
Mediante el SEM/EDS se determinó que UNA partícula de esa muestra contiene 94,53% del elemento
carbono. Como ese es el valor máximo medido en las muestras estudiadas por ese método, adquiere
el valor máximo normalizado =10. Al igual que QV-1, de tener 0% de carbón (Mapa de la Figura 11)
ahora pasa a ser un punto de máximo contenido de carbón en el Mapa de la Figura 14.
• La única muestra a la cual se le aplican las 3 metodologías (QV-BC-E3) presenta los siguientes valores
normalizados: 0,05 (lupa), 5,88 (DRX) y 8,63 (SEM/EDS), indicando con ello que las medidas no son
comparables. Si la “normalización” fuese un buen indicador, deberían estar en un mismo rango.
• Dos muestras (QV-BC-E2 y QV-BC-E3) tienen valores aportados por DRX similares (1.32 y 1.30
respectivamente), a su vez, bajo la lupa se les asignó un 0.2% y 0.01% de carbón, respectivamente.
La diferencia de 200 veces entre ambas demuestra con claridad que la DRX no es un método apropiado
para determinar presencia de carbón.

En directa alusión al Mapa de la Figura 14, que según se ha explicado en los párrafos precedentes no
tiene validez metodológica, los autores indican que (p. 22) Cisternas 2019 (forma correcta de citar habría
sido Cisternas 2019a) detectó carbón mineral en la tubería de descarga de agua de la Unidad 2 de AES

3
GENER, por lo cual, los autores afirman que la presencia del peak de “carbón” (erróneamente determinado
como ya se ha fundamentado previamente) en el área de los ductos tendría relación con la descarga de
esas partículas a través de las tuberías. Esta aseveración no tiene fundamento, pues en el trabajo aludido
Cisternas, 2019a (p.14) indica que la muestra contiene escasas partículas de carbón (una de ellas analizada
por SEM/EDS), y que no presenta ninguna afinidad con la muestra de varamiento analizada en el mismo
Informe, muy por el contrario, es similar a muestras del fondo de la bahía, las cuales contienen el mismo
tipo de partículas carbonosas, que serían succionadas junto al agua de mar que ingresa al sistema de
enfriamiento del CTV.

5 Discusión de las citas a trabajos de Cisternas (2019)


Los autores citan en el texto a Cisternas (2019) como si fuese un solo trabajo, sin embargo en la sección
REFERENCIAS identifican dos, sin distinguirlos entre sí con letras (Cisternas 2019a es distinto de Cisternas
2019b) como está normado internacionalmente (normas APA) cuando existen 2 o más trabajos del mismo
autor y año. En todo caso, se destaca que los dos trabajos citados como Cisternas (2019) fueron realizados
en muestras que no fueron colectadas en el ambiente submareal, por lo cual su eventual comparación debió
tener presente este hecho y ser justificada por los autores.

En el expediente, está incluido el ”Estudio petrográfico comparado de las partículas de carbón y residuos
de combustión en varamientos de Playa Ventanas y en escorias de la Planta Bash del Complejo
Termoeléctrico Ventanas, 5º Región, Chile“. De los resultados petrográficos y de SEM/EDS obtenidos de la
comparación del carbón combustionado (residuos de combustión tipo ceniza de fondo) presente en los
varamientos, con el carbón combustionado (ceniza de fondo) de las Unidades 1 y 2 del CTV la autora de
este estudio concluye que el carbón combustionado de los varamientos se habría generado en una caldera
de menor eficiencia en cuanto a la combustión, que los residuos de combustión producidos en las calderas
de las Unidades 1 y 2 (datos del año 2018).

La frase en el Estudio UAB -no se puede establecer relación directa entre el tipo de caldera utilizada y la
textura del carbón combustionada- solo podría ser tomada en consideración si los autores hubiesen
utilizado las herramientas petrográficas que internacionalmente están reconocidas para determinar la
trazabilidad de los residuos de combustión.

La segunda alusión que hacen los autores a Cisternas (2019) (debería decir Cisternas (2019b) se refiere
a la composición determinada por EDS en partículas carbonosas presentes en varamientos. La cita del valor
80,02% C, que los autores adjudican a una partícula de carbón no es correcta, ese valor fue medido en un
carbón con evidencia de combustión incipiente, razón del alto contenido de C (Muestra 15742, p.19). El
otro valor mencionado, 82, 39 % C efectivamente corresponde a una partícula de carbón (muestra 1488,
p.20).

6 Conclusiones Generales
En el Estudio UAB se advierte desconocimiento de los autores respecto a que es el carbón mineral y cuales
son las técnicas de estudio apropiadas. Al respecto, desconocen que el método de DRX no se utiliza para
detectar presencia de carbón como fase menor o traza entre minerales, debido a que los espectros de las
especies cristalinas se sobreponen con esta fase orgánica. El único uso de la DRX en relación al carbón es
para detectar fases minerales que “contaminan" un cierto carbón, pudiendo afectar su uso industrial.

Por otra parte es inexplicable qué los autores confundan conceptos cómo contenido de carbón en una
muestra y contenido del elemento carbón en una partícula de carbón y generen un mapa de distribución

4
de contenido de carbón en la Bahía Quintero que no tiene ningún sustento científico y que invalida
completamente el cumplimiento de uno de los Objetivos Específicos declarados: Determinar la presencia
de carbón en los sedimentos marinos del fondo de la bahía y su variación espacial y temporal.

Como conclusión general del análisis crítico del Estudio UAB se puede afirmar que, respecto al estudio de
las 22 muestras superficiales, el único producto válido es el Mapa de tendencia de contenido de carbón
construido con las observaciones realizadas bajo la lupa (Figura 11). Por la misma razón, es confiable el
dato que indica que 68% de las muestras submareales superficiales contiene carbón y que el carbón, en
contenido variable entre 0,01 y 2%, se distribuye en toda el área de estudio, con mayores concentraciones
en el sector central del muelle Ventanas, enfrente de los ductos de GENER Unidad 1, 2 y 3, y en el sector
próximo a la playa norte, enfrente de las instalaciones de los pescadores artesanales. No es válida ninguna
de las aseveraciones derivadas de la integración de resultados de las tres metodologías utilizadas
(plasmada en la Figura 14), como que el 83.37 % de las muestras contiene carbón o que los sectores de
mayor concentración se ubican frente a los ductos de descarga de GENER.

Dra. María Eugenia Cisternas


Concepción, 27 de abril 2021

También podría gustarte