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Al preparar el altar para los difuntos, algunas personas montan una ofrenda que incluye
comidas y otros artículos personales favoritos de los difuntos, junto a sus retratos
fotográficos. Tener estos artículos les permite a los seres queridos sentirse rejuvenecidos
después de su largo viaje.
Las ofrendas te dicen mucho sobre los miembros de la familia fallecidos y lo que
disfrutaban durante su estancia en la Tierra.
Apreciable jurado que hoy nos acompaña., maestros presentes, compañeros y demás
público en general, tengan todos muy buenos días, el día de hoy mis compañeros de tercer y
cuarto grado, además de mi maestro y padres de familia, presentamos ante ustedes la
siguiente ofrenda, la cual es una ofrenda tradicional mexicana dedicada a nuestros seres
queridos que ya han partido de este mundo.
Como pueden ver nuestra ofrenda incluye fotos de seres queridos que han dejado este
mundo, personas a las que hoy les rendimos homenaje, junto con flores, incienso, calaveras,
pan de muerto y algunas comidas y prendas de vestir y objetos favoritos de nuestros
difuntos.
1. Fotografías de los difuntos. Es muy común colocar retratos de las personas amadas
que ya no están entre nosotros.
Los demás elementos que nuestra ofrenda contiene, son frutas tradicionales de temporada
que ponemos porque son las que nuestros seres queridos comían en vida, además de
platillos, como el mole, tamales, tortillas hechas a mano, atole, bebidas alcohólicas, como
el agua ardiente, cerveza, refresco, entre otros más, todos estos elementos son cosas que
poco a poco, al paso de los años van formando parte de nuestros altares tradicionales
mexicanos.
Hoy con mucha nostalgia pero al mismo tiempo con alegría recordamos por medio de
nuestra ofrenda monumental, a estos seres queridos, que en vida fueron personas
importantes en nuestras familias, personas que dejaron recuerdos en nuestros corazones y
en nuestras memorias, personas que hoy estamos seguros están en un lugar mejor.
Las ofrendas mexicanas son una manera de acercarnos a nuestros seres queridos, traerlos de
más allá, para recordarlos, recordar, que les gustaba comer, que bebían pero sobre todo, que
aunque ya no están físicamente, estarán siempre presentes en nuestras vidas.