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Universidad de los Andes

Sociedad Venezolana de Salud Publica


Diplomado en Gerencia de Salud Pública – ULA

Título: Identidad homosexual y contexto familiar heteroparental:


implicaciones en los factores de riesgo para la subversión social
Durante la República y el Imperio Romano, prevaleció un discurso degradante
asociado con la pasividad masculina, mientras que a finales del mismo en el
contexto occidental se produjo una condena abierta de la homosexualidad
(Cameron & Kulick, 2003). En el mundo occidental medieval y moderno, la
homosexualidad se consideraba un delito penal, pero partir del siglo XIX, con el
surgimiento de la democracia liberal y la monarquía parlamentaria, comenzó a
desaparecer del código penal, pero quedó estigmatizada como psicopatología.
Pero fue después que en la década de los 70 cuando comenzó a
despatologizarse, aunque el rechazo sutil continuó (Crompton, 2006; Herek,
2004).

En tiempos más actuales, la orientación homosexual no se considera un delito en


la mayoría de los países occidentales; en cambio, la tendencia a sancionar la
discriminación y las violaciones basadas en prejuicios sexuales se fundamenta en
derechos constitucionales y tratados internacionales que protegen los derechos
humanos (Castañeda, 2006).

En los últimos años, se ha visto cómo ha evolucionado, evidenciando cambios


oportunos para el desarrollo de la comunidad homosexual, en primer lugar la
evolución en cuanto a la inclusión a las sociedades a nivel de derechos,
obteniendo la posibilidad de matrimonio, de adopción, de participar de congresos
como congresistas, de poder participar de escuelas, hospitales y cualquier área
disciplinaria mostrando libremente su identidad sexual. (Seller, 2021)

Ante la visibilidad que tan tenido estos grupos, más sus reclamos sociales de sus
derechos, se han minimizado un poco los prejuicios hacia esos grupos sociales, a
tal punto que las organizaciones públicas están particularmente interesadas en
investigar el prejuicio y la estigmatización que aún persiste frente a las personas
que tienen conductas homosexuales teniendo presente que la homosexualidad es
mucho mas aceptada dentro de los países del continente americano, así como
europeo, mientras que en varios países del medio oriente la practica de
homosexualidad es penada hasta con la muerte.

Esta preocupación se ha visto acentuada por la epidemia del VIH/SIDA, en la que


los hombres que tienen sexo con hombres son el grupo de mayor riesgo de
enfermedades crónicas de origen reciente (Córdova, Ponce, & Valdespino, 2009).
Sabiendo que no solo los homosexuales padecen de estas enfermedades, sino
que actualmente las tazas de incidencia según el ministerio de salud 2020 explica
que el 80

Así mismo la homosexualidad sigue siendo un fenómeno social tan complejo que,
a pesar de los avances mundiales en el reconocimiento de la diversidad y las
culturas más inclusivas y el respeto de las diferencias, sus connotaciones siguen
siendo contradictorias en las sociedades patriarcales, hegemónicas y masculinas.
Los patrones de comportamiento homosexual continúan convirtiéndose en
homofóbicos, un miedo irracional a los homosexuales, lesbianas, transexuales,
bisexuales, queers, o simplemente el miedo a ser descalificados o llamados
"anormales".

Algunos de ellos hoy en día a menudo ven muchas burlas, La homofobia está
involucrada en la génesis de los principales trastornos mentales que presentan los
homosexuales. Ésta no es sólo el simple rechazo a la homosexualidad, sino un
referente fundamental con que se construye el modelo dominante de masculinidad
en las sociedades contemporáneas. La estigmatización de la homosexualidad
genera bajos niveles de autoestima en homosexuales y los hace más susceptibles
a enfermedades mentales. Altos porcentajes de conducta suicida en
homosexuales estuvieron asociados a discriminación y violencia; a intolerancia y
opresión, lo que resalta la importancia del contexto cultural cuya hostilidad causa
problemas de salud mental en homosexuales  en la programación de los medios,
que es el entretenimiento de una sociedad principalmente heterosexual, que no
tiene nada que ver con lo que se ha acostumbrado en patrones culturales y de
discriminación en conflicto. (Moncada, 2019).

Para una mejor comprensión y aceptación del hombre debido a su diversidad, el


tema de la homosexualidad todavía evoca fuertes reacciones emocionales en
muchos, que son percibidas como patológicas, desviadas y peligrosas (Withley,
1987, citado en Caycho 2010). Estas percepciones y comportamientos se estudian
bajo el concepto de actitud, categoría que incluye aspectos emocionales sobre o
hacia un objeto social particular que se manifiesta en nuestras creencias,
sentimientos y comportamiento esperado (Rodríguez, 1976; Myers, 1995)).

Las actitudes homofóbicas se forman por los mismos mecanismos socioculturales


en los grupos homosexuales y heterosexuales, y no se trata sólo de comparar un
grupo con otros, también se da entre los mismos grupos de referencia y puede ser
profunda en otros sexos. La consecuencia de las actitudes homofóbicas en las
interacciones interpersonales es un fenómeno agresivo experimentado por todos
los homosexuales (Dempsey, 1994).

Casi todos los que tienen que articular y aceptar esta orientación sexual están
decididos a pasar por el proceso de aceptación (Troiten, 1988, 1989; Cass, 1990;
Soriano, 1995). En ese sentido y por ese deseo de ser aceptados, la familia
también ocupa un papel fundamental por estar directamente involucrada en este
proceso, siendo los padres los responsables de la asimilación, aceptación o no de
la sexualidad de su hijo o hija.

Actualmente y producto de muchas luchas por el reconcomiento y la aceptación se


han logrado avances significativos en materia de derechos e igualdad de
oportunidades para las personas con una orientación sexual diferente a la
orientación sexual dominante, por ejemplo Simon Nkoli es para muchos el héroe
central de la lucha gay y lésbica en Sudáfrica. Fue un activista antiapartheid, por
los derechos homosexuales y del VIH/SIDA, fundador de la Gay and Lesbian
Organisation of the Witwatersrand (GLOW). En 1990, Nkoli y GLOW organizaron
la primera Marcha del Orgullo de Johannesburgo. También desempeñaron un
papel fundamental a la hora de convencer al Congreso Nacional Africano, el
partido político que gobernaba en Sudáfrica, para que reconociera los derechos de
los gays y las lesbianas del país. Cinco años después, Nkoli declaró que era
seropositivo y empezó a trabajar para desestigmatizar el VIH/SIDA. A través de el
se pudo desarrollar la inclusión de valoración de las enfermedades para las
personas homosexuales. En un segundo ejemplo esta Ifti Nasim fue un poeta
pakistaní gay que se mudó a los Estados Unidos para huir de la persecución por
su sexualidad. Se cree que su colección de poemas, Narman, fue el primer libro
de poesía temática gay escrito y publicado en urdu. También fundó
SANGAT/Chicago, una organización que apoyó a la comunidad LGTB de Asia
Meridional. Nasim fue homenajeado en 1996, cuando lo admitieron en el Chicago
Gay and Lesbian Hall of Fame. Sabiendo que es el pionero de que se incluya la
literatura homosexual por primera vez en la historia obteniendo la inclusión de ella
dentro de los géneros literarios.

Sin embargo, el rechazo sigue siendo una actitud común entre la población, y las
personas son hostiles hacia sus familiares homosexuales, quienes tienen un
miedo casi inconsciente, un miedo abrumador de ser confrontados con prejuicios,
preconcepciones, sistemas de creencias y lo establecido, juicios sobre lo que
significa ser hombre y mujer en cualquier cultura, basados en estereotipos o redes
de ideas conservadas que determinan el comportamiento, las características e
incluso los pensamientos y sentimientos de cada persona (Rocha-Sanchez & Diaz
Loving, 2005).

Sobre todo, la ceptacion debe comenzar en el núcleo familiar por ser un espacio
propisio y adecuado para el desarrollo de sus integrantes independientemente de
la preferencia sexual, por lo que se requiere que todos dentro de ella permitan la
adecuada socialización y aceptación. Es indudable que, dentro de él, las personas
homosexuales y sus familiares van a estar inmersos en situaciones complejas y
una multitud de desafíos, pero es la familia donde realmente de debe encontrar
importante apoyo emocional y social.

Este es un espacio importante, cuando una persona confronta su homosexualidad


es donde primero hace su revelación, proceso que puede convertirse en algunos
casos, una experiencia traumática para la familia (Riesenfeld, R, 2000) al estudiar
los procesos por los que pasan las familias ante la homosexualidad en sus hijos,
señaló que las familias y los padres no siempre reaccionan de la misma manera y
cada uno lo hace dependiendo de sus creencias, de sus percepciones, miedos, y
hasta expectativas.

Continua el autor mencionando que los padres que conocen sobre la


homosexualidad y que la entienden, muy pocas veces rechazaran a un familiar, ya
que la estadística refleja que en cualquier familia puede haber un homosexual, (ya
que de cada 10 personas en el mundo 1 nace con esta orientación sexual.

Otro autor, Marco (2010), afirma que el rechazo muchas veces se debe en el
entorno familiar porque existe un marcado sesgo hacia la cultura de masculinidad
en el mundo, saber que un hijo es gay en la familia puede ser emocionalmente
agotador, dejando al padre muy molesto y confundido. Mencionó que la
homosexualidad es considerada una debilidad o una enfermedad, y ninguna
familia le permite estar orgullosa., lo que hizo que el proceso de aceptación de la
sexualidad de su hijo fuera doloroso y estresante. Montier, S. (2010) quienes
señalan que los padres suelen utilizar la negación como primera reacción, y
cuando la primera impresión desaparece, la mayoría reacciona con violencia.

Todo lo dicho hasta el momento pasa por dos vertientes o incluir al hijo
homosexual en el núcleo familiar o excluirlo del entorno, si ocurre esto último
pudiera pasar que: desarrollar problemas de salud mental y física entre los
jóvenes homosexuales o transgénero (Ryan 2009); generar altos niveles de
ostracismo familiar entre los jóvenes homosexuales y transgénero debido a su
orientación o identidad sexual; aumentar ocho veces el riesgo de suicidio;
aumentar la probabilidad de que los jóvenes consuman drogas y VIH (Pereira
2014).

Además, pueden incidir en el rechazo o la incomprensión de los familiares;


aumentar el riesgo de: anorexia, bulimia, depresión, uso y abuso de sustancias y
altas tasas de intentos de suicidio entre estos jóvenes, así como impulso a la
proliferación de las múltiples parejas sexuales. La aceptación familiar los protege
de posibles suicidios, depresión y abuso de sustancias, y mejora su autoestima y
salud (Cailing, R. 2009).

En caso contrario de que sean aceptados puede ocurrir superación personal, con
motivación en la misma evitando el desarrollo de enfermedades neurológicas, ni
psiquiátricas así mismo, se debe saber que el apoyo consolidara la parte de las
emociones del individuo y esto le permitirá equilibrio mental, así como paz en sus
acciones. No buscando libremente ser aceptado sino buscando la necesidad de
dar más porque el mundo sea mejor.

Es por ello y ante todo lo anteriormente descrito que el investigador, precisa la


necesidad del desarrollo de esta investigación desde una vivencia personal que se
irradia a colectiva en el ámbito laboral, comunitario, así como social. Siendo
imperante el recordar que el ser humano debe ser humano por excelencia, y ante
la elevación de la discriminación desde el entorno familiar que es la base de la
sociedad, por ende se determina el desarrollo de esta investigación.

Justificación

Es por esto que se presenta esta investigación determinando como, mucho se


habla de derechos para diferentes grupos de personas, que pase de los escritos a
los hechos es muy difícil. Sucede lo mismo con los homosexuales, diferentes
factores deben existir para que el entorno social a ellos, los acepte, como ser, el
conocimiento preciso e imparcial de lo que conlleva ser un homosexual.

Estudiar el proceso que involucra la comunicación de los hijos sobre su identidad


sexual, las primeras reacciones, las etapas de aprendizaje y reacomodamiento, la
necesidad de los padres de compartir experiencias con pares a través de la
inserción en el grupo, ofrece un camino interesante para comprender en
profundidad aspectos que no son considerados en otras investigaciones sobre
género e identidad sexual. Otros estudios focalizan su interés en los derechos
políticos, sociales y civiles de las minorías sexuales y en la discriminación a la que
son sometidos, relegando el impacto que produce la noticia de la homosexualidad
de un hijo/a en las relaciones familiares, principalmente en los padres.
Considerando importante este abordaje debido a que son las familias las que, por
medio de un constante intercambio con el medio en el cual están insertas,
transmiten representaciones sobre el género y la homosexualidad, como así
también fijan estereotipos sobre cuales son las prácticas sexuales “correctas” o “a
seguir”. Se pretende así, abrir una nueva línea de indagación que hasta el
momento en el país no ha sido profundamente desarrollada.

Existen diversos estudios sobre el grupo de homosexuales en cuanto a temas


como sexo, comportamiento, SIDA, etc. El interés de este trabajo surge de la
necesidad de conocer el grado de adaptabilidad, cohesión familiar y apoyo social
con que cuentan estas personas, aplicando instrumentos de Medicina Familiar
como el FACES III y DUKE- UNC.

Objetivos

Estudiar el grado de adaptabilidad y cohesión familiar además del apoyo social


con que cuentan las personas homosexuales en el Municipio Cárdenas, Estado
Táchira

Específicos

Determinar la dinámica familiar cuando se tiene un individuo homosexual dentro


del núcleo

Establecer los cambios experimentados desde la perspectiva del homosexual al


revelarse en su núcleo familiar

Describir la interacción social que se tiene con un individuo homosexual dentro de


la comunidad.

Antecedentes

A nivel internacional, específicamente en Estados Unidos de Norte América en el


Año 2018, se desarrolla una investigación a cargo de Fernández y Vásquez que
lleva por título: En torno al rechazo, la salud mental y la resiliencia en un grupo de
jóvenes universitarios gays, lesbianas y bisexuales; donde se estableció un
estudio descriptivo transversal explora aspectos relacionados con la salud mental
y la resiliencia en 44 jóvenes identificados como gays, lesbianas y bisexuales
(GLB). Se realizó una encuesta y una entrevista semiestructurada.
Aproximadamente uno de cada tres jóvenes encuestados mostró pensamientos
suicidas. El 18,2% del total de jóvenes realizó intentos de suicidio, lo que
representó cerca del 50% de los que expresaron pensamientos suicidas. Los
jóvenes encuestados con pensamientos suicidas informaron una puntuación
media significativamente más baja en las escalas de salud mental y vitalidad, pero
una puntuación más alta en la escala de estigma percibido. El 75% de los jóvenes
GLB que respondieron exhibieron altos niveles de autoestima y resiliencia. Estos
hallazgos dan cuenta de la complejidad inherente relacionada con ser aceptado
como gay, lesbiana o bisexual, ya que la persona quiere expresarse, aún con los
costos sociales que ello conlleva e implica.

Así mismo en el Perú, en el Año 2018 los investigadores Histronoza, Uribe y


Requena, desarrollaron una investigación titulada: actitudes de los padres hacia la
homosexualidad de sus hijos, donde La investigación evidencia las actitudes que
asumen los padres/madres ante la revelación de la orientación homosexual de sus
hijos/hijas y describe el rol que asumen en el proceso de acompañamiento en la
integración a una sociedad predominantemente heterosexual, el estudio involucró
60 personas adultas entre padres y madres con hijos o hijas de orientación
homosexual, se aplicó el enfoque mixto y el diseño explicativo secuencial
(Dexplis). Los resultados muestran que el proceso de reconocimiento y aceptación
de la orientación sexual pasa por tres momentos fundamentales: el primero de
auto reconocimiento, el segundo de aceptación familiar y el tercero de integración
a una sociedad predominantemente heterosexual. Los tres momentos implican
una situación de sufrimiento y conflicto traumático. En el segundo momento los
padres se enteran de la orientación homosexual de sus hijos o hijas y las
manifestaciones iniciales son de negación, rechazo sustentado en un prejuicio
social y miedo a la censura, posteriormente luego de un proceso de asimilación y
aceptación asumen un rol de apoyo emocional y soporte social.

Y por último en el 2020, en Buenos Aires, Argentina se llevó una investigación por
parte de Pedrazzolli y Samanes en el instituto de investigaciones Gino Germany
de la facultad de ciencias sociales titulado: Homosexualidad: un asunto de familia.
Transformaciones en las representaciones y vínculos al interior del núcleo familiar.
Respecto a la primera hipótesis de la que partimos, el trabajo de campo nos dio
indicios que las familias no intuyen la homosexualidad de sus hijos. Sin embargo,
perciben cambios de comportamiento o actitudes que llaman la atención. El
discurso de los entrevistados denota que la homosexualidad no está dentro de las
distintas experiencias vividas, por este motivo no existe como posibilidad para la
realidad de su hijo. Se percibe como algo ajeno, algo que pasa en otras familias.

Marco Teórico

Sexo.- Se refiere a las diferencias físicas, los órganos genitales, y las


características biológicas que nos diferencian a hombres y mujeres.

Sexualidad.- Es un proceso que empieza desde el nacimiento y termina con la


muerte e involucra nuestros pensamientos, emociones, afectos y
comportamientos, así como aspectos físicos; comprende las dimensiones
biológica, psicológica, clínica, de conducta social y cultural.

Identidad de cuerpo.- Posibilita la identidad sexual al ser influenciada por la


sociabilización y los modelos socioculturales, se constituye gracias al
reconocimiento del propio cuerpo, estableciendo de esta forma, la aceptación ó
negación de uno mismo.

Identidad de género.- Es la identificación con un modelo sociocultural global e


integrador asumiendo un rol masculino y/o femenino.

Identidad de sexo.- Es el conjunto de características sexuales que nos hace


genuinamente diferentes a los demás como nuestra preferencia sexual,
sentimientos y actitudes.

Identidad homosexual.- Es el conjunto de características afectivas, emocionales,


eróticas y sexuales que se tiene por una persona del mismo sexo. No es una
enfermedad, tampoco es una preferencia o una elección deliberada. Es otra forma
de expresión de la sexualidad humana que varía entre 4 a 10% de la población en
todos los países del mundo.
Identidad heterosexual.- Conjunto de características afectivas emocionales,
eróticas y sexuales que se tiene por una persona del sexo contrario.

Identidad bisexual.- Conjunto de características afectivas, emocionales, eróticas y


sexuales que se tiene por una persona del mismo sexo como del sexo contrario.

Orientación sexual.- Es la atracción sexual que comprende lo erótico y lo afectivo


entre seres sexuales, es un componente esencial de la personalidad, es definida
mediante la identidad y el comportamiento sexual que uno tenga.

Preferencia sexual.- Es la manera en la que decidimos sociabilizar nuestra


orientación sexual. Es como una persona manifiesta a los demás lo que piensa,
siente y hace con relación a la identidad sexual.

Familia.- Podemos entender la familia como una unidad biopsicosocial integrada


por un número variable de personas ligadas por vínculos de consanguinidad,
matrimonio y/o unión estable, y que viven en un mismo hogar.

Apoyo y red social.- En cuanto al apoyo social, Thoits la define como el grado en
que las necesidades sociales básicas como afecto, pertenencia, identidad,
seguridad y aprobación, son satisfechas mediante la interacción con otros.

Caracterización del Homosexual

Por homosexualidad entendemos deseo erótico o sexual hacia las personas del


mismo sexo; sin embargo, la conducta homosexual no siempre se encuentra
arraigada en este interés emocional e interno (sirvan como ejemplos la conducta
homosexual de ciertas culturas no occidentales y los contactos homosexuales en
la pubertad). El interés sexual del homosexual por el sexo opuesto es siempre
inferior al nivel normal o, incluso, inexistente. Los intereses homosexuales durante
la pubertad y la adolescencia pueden ser transitorios, por lo que no procede, y
podría resultar peligroso, tratar los sentimientos homosexuales de los jóvenes de
esa edad como prueba de que 'son' homosexuales (en algunos, dichos
sentimientos proseguirán, mientras que en otros no).

Es dudoso si muchos autores que analizan la homosexualidad desde un punto de


vista sociológico, político o moral se percatan que no existe una variante humana
tal como 'la' persona homosexual, diferenciada de 'la' persona heterosexual. No
hay motivo alguno para que lo afirmado con respecto a 'la persona homosexual' no
sea de igual modo aplicable a los pedófilos homosexuales, los gerontófilos
homosexuales (aquéllos pocos interesados en los ancianos), los transexuales o
los travestidos homosexuales. Si, por ejemplo, en vista de los homosexuales que
prefieren parejas adultas (jóvenes), se sostiene que están en su derecho de
establecer uniones o 'matrimonios' reconocidos socialmente, por cuanto su
inclinación sexual no es sino una variante de la sexualidad humana, no hay
entonces motivos para denegar idéntico derecho a los pedófilos o a los
transexuales (en la práctica, estos 'derechos' han sido ya concedidos a los
transexuales: se les opera para 'cambiar de sexo' -como sucede en una clínica de
la Universidad Libre Calvinista de Ámsterdam- y, más tarde, pueden registrar
oficialmente su 'cambio' de sexo).

Homosexualidad

La palabra homosexualidad fue creada en 1869 por Karl Maria Kertbeny en un


panfleto anónimo que apoyaba la revocación de las leyes contra la «sodomía»
en Prusia. Fue incluida en Psychopathia Sexualis (1886), un estudio de Richard
von Krafft-Ebing acerca de lo que en esa época se consideraba una desviación
sexual. Aunque hoy se emplea de forma generalizada, es oportuno reseñar que la
existencia de la categoría homosexual en sí misma, aplicada a personas, es objeto
de contestación desde diferentes puntos ideológicos. Ya que algunas corrientes
niegan que la orientación sexual de una persona la defina en modo alguno. La
terminación -ismo se considera a veces como peyorativa, tal como sucede con la
palabra homosexualismo. Este sufijo tiene numerosas definiciones, que van desde
«partidario de...» hasta «enfermedad de...», como en el caso de gigantismo. Por
ello, su uso definiría la idea de que el colectivo homosexual tendiese a la
promoción de sus conductas, o incluso de que la condición homosexual debiera
entenderse como una deficiencia mental. Al irse apartando la sociedad de la
creencia de que la homosexualidad es una enfermedad, se fue imponiendo el
término homosexualidad, ya que la terminación -idad únicamente implica «calidad
de...». Hoy, la RAE solo recoge esta última.
Actualmente, el anglicismo gay se refiere a un individuo homosexual masculino; ha
venido a sustituir términos castellanos malsonantes u ofensivos (vg. cueco, culero,
invertido, marica, maricón, puto, sarasa y sodomita; entre otros). La
homosexualidad femenina se llama también lesbianismo o lesbianidad (calidad de
lesbiana). Los adjetivos correspondientes son lésbico(s) y lésbica(s). Este término
proviene de la isla de Lesbos en Grecia y de la poetisa Safo, a quien sus poemas
apasionados, dedicados a sus amigas, y la vida rodeada de otras mujeres le valió
la reputación de homosexual.

Implicancias de la discriminación social en la vida afectiva y el desarrollo integral


de las personas homosexuales

En la medida que la homosexualidad sea condenada socialmente y no se hable de


ella, la reacción lógica y natural de las personas homosexuales será vivir su
sexualidad en privado, con reserva y en el ocultamiento.

La sociedad obliga explícita e implícitamente a que las manifestaciones afectivas


y/o eróticas de la homosexualidad se vivan en "privado", condenando moralmente,
sino en forma legal cualquier manifestación pública de ésta.

Esto conduce necesariamente a vivir una sexualidad en condiciones de mayor


vulnerabilidad, sin la información necesaria para un desarrollo integral. La
afectividad entonces se realiza con mayores dificultades y sin modelos propios,
porque el proceso de socialización y de identificación se ve afectado por
circunstancias sociales adversas.

Particularmente los/as jóvenes adolescentes, al descubrir que se sienten


atraídos/as sexualmente hacia personas de su mismo sexo, viven en proceso de
aceptación a veces tormentoso dado que no se atreven a mencionar lo que les
pasa a sus familiares y mucho menos a sus amistades. Es común que estas
personas oculten o que traten de que "no se note" su orientación sexual, para
evitar de este modo el rechazo, o la agresión del resto de la sociedad.
Vivir en forma permanente en estas condiciones genera, en muchos casos
problemas de la salud tanto física como mental, siendo frecuente los casos de
personas afectadas por angustias, depresión y/o neurosis.

Las situaciones más recurrentes en el ámbito laboral son dos:

1.- Cuando se descubre la orientación sexual de un funcionario se le atribuyen


intenciones no honorables y comienza a desarrollarse una verdadera persecución,
resultando en una desvalorización laboral, incluso inventando causas de despido,
aislando a los funcionarios hasta hacer que su labor se haga prescindible y
finalmente despedirlo por razones de empresa.

2.- Se aplican test de personalidad y se rechaza postulaciones a empleos a


personas con orientación homosexual.

Según Saldareada (2018): Las personas travestís generalmente están cesantes,


están impedidas de encontrar trabajo o de formar una familia puesto que la
sociedad rechaza categóricamente "este cuerpo de mujer con nombre de hombre".
(Pag.63) Los consideran anormales y los expulsan de los caminos o formas de
integración social (estudio, trabajo), por lo que, ante estas dificultades, el comercio
sexual aparece como una alternativa posible para la sobrevivencia.

Factores que explican los altos niveles de malestar emocional en jóvenes GLB

Los significados culturales juegan un papel fundamental en la salud mental. Es


sabido que nuestra sociedad valora de forma negativa la orientación sexual gay,
lesbiana y bisexual, por lo cual existe prejuicio y opresión hacia las personas no
heterosexuales (Ortiz Hernández, 2005). Ortiz Hernández (2005) indica que la
homofobia internalizada se presenta cuando las personas GLB incorporan en su
auto concepto los significados negativos, los prejuicios y los estereotipos
asociados con la homosexualidad y la transgresión de género (TEG), lo que
provoca que tengan actitudes y reacciones negativas hacia su propia
homosexualidad, así como también hacia la homosexualidad de otros, su TEG y la
de otros. Dado que el autor antes citado reconoce un vínculo simbólico entre la
homosexualidad y la TEG, considera que este aspecto debe ser incorporado en la
definición de homofobia internalizada. El temor a ser rechazado y discriminado
está relacionado con el que muchas personas homosexuales opten por callar y
ocultar su preferencia, haciendo particularmente retador para un individuo
homosexual identificarse como tal. El proceso de desarrollo de la identidad sexual
de los/las adolescentes puede ser uno complicado y difícil, más aún si el/la
adolescente se encuentra cuestionando su identidad sexual.

Los profesionales de la psicología están muy conscientes que el estigma asociado


con la salud mental tiene un impacto negativo, no sólo entre aquellos con
problemas de salud mental, sino en toda la sociedad, pues desalienta el que las
personas busquen ayuda para sus problemas emocionales. Pero también estamos
conscientes de que muchos de estos jóvenes demuestran gran capacidad para
revertir los efectos del estigma y el rechazo. Savin-Williams (2005) menciona que
adolescentes GLB pueden ser saludables, resilentes y sentirse orgullosos/as de
quiénes son y de cómo manejan situaciones difíciles.

Factores que contribuyen al desarrollo de la resiliencia en jóvenes GLB

La resiliencia se refiere fundamentalmente a la adaptación positiva o a la habilidad


de mantener o recuperar la salud mental, a pesar de experimentar adversidad
(Wald, Taylor, Asmundson, et al. (2006). Este concepto ha sido un poco difícil de
operacionalizar, en tanto algunos consideran la resiliencia como un rasgo
personal, mientras que otros tienden a verlo como una proceso dinámico. Herman
et al. (2011) luego de una amplia consideración de distintas definiciones de
resiliencia encuentra dos factores comunes a todas: remiten a la existencia de
factores y sistemas que contribuyen a un proceso dinámico e interactivo que
aumenta la probabilidad de resistir adversidad; y puede ser algo que ocurra en un
contexto y tiempo específico y no estar presente a lo largo de la vida. Estos
investigadores plantean que hay muchas vías para desarrollar resiliencia, que
interactúan e incluyen atributos biológicos, psicológicos y actitudinales, en
conjunto con sistemas de apoyo social como lo son la familia, los amigos, la
escuela y la comunidad. Entre los factores personales se incluyen la autoestima, el
funcionamiento intelectual, la flexibilidad cognitiva y la regulación emocional. Así
también la literatura sobre el tema da cuenta de factores ambientales a nivel
macro y micro. A nivel micro ambiental el apoyo social, incluye relaciones con la
familia y los pares, apego seguro con las madres, estabilidad familiar y ausencia
de depresión en la madre. El apoyo social puede venir de los pares, de los
maestros y de otros adultos significativos. A nivel macro y sistémico se señalan
factores comunitarios, tales como buenas escuelas, oportunidades deportivas y
artísticas, factores culturales, espiritualidad y religión.

Específicamente en cuanto al estudio de resiliencia entre la juventud LGB se han


encontrado que hay factores de protección útiles para manejar el ambiente de
rechazo y hostilidad, entre estos se encuentran la autoestima y el envolvimiento
familiar (Blum, McNeely y Nonnemaker, 2002). Toro Alfonso, Varas, Andujar y
Nieves (2006) sostienen que para los jóvenes gays y bisexuales, el apoyo social
se convierte en un espacio de validación principal necesario para el desarrollo de
una identidad y para el logro de metas personales y sociales. Rusell y Richards
(2003) identifican cinco (5) factores que influyen en la resiliencia de jóvenes GLB:
1) perspectiva de ser parte de un movimiento social y entender el impacto de la
homofobia y otras opresiones: 2) capacidad para confrontar la homofobia
internalizada; 3) expresión de emociones (coraje, tristeza asociadas); 4)
aceptación y apoyo familiar; 5) contacto con otros miembros de la comunidad
LGBT. Otras investigaciones encuentran una relación entre autoestima, resiliencia
y revelar la identidad gay y lesbiana (Savin-Williams y Diamond, 2000; Savin-
Williams, 2005). Aunque, a su vez hay otros estudios que señalan que revelar la
identidad sexual GLB se ha asociado con diferentes consecuencias negativas (ej.
síntomas de depresión, ansiedad, altos niveles de ideas e intentos de suicidio,
victimización) en la vida de estos/as adolescentes (Harrison, 2003).

El concepto de identidad sexual gay o lesbiana se ha descrito como “la


representación de una categoría socialmente reconocida que nombra
percepciones, sentimientos y significados que un individuo tiene sobre sus
sentimientos sexuales, atracciones y comportamientos y que se simboliza por
decir “soy gay/soy lesbiana” (Savin-Williams y Diamond, 2000). Se ha teorizado
además que el desarrollo de la identidad gay es un proceso cultural y no universal
(Owens, 1998). Es decir, que es un proceso individual con influencia cultural, que
puede variar de acuerdo al género, puede darse en un continuo a través del cual
la persona pasa por una serie de etapas que van desde la ausencia de
reconocimiento de su homosexualidad o lesbianismo, con una sensación de ser
diferente de los demás, hasta el reconocimiento de su homosexualidad o
lesbianismo, o en algunos casos, no pasar por ninguna etapa (Owens, 1998). Para
Ardila (1998), por ejemplo, hay homosexuales que no salen del “closet”, que no
establecen relaciones de pareja, y que no se sienten orgullosos de sí mismos.
Mohr y Fassinger (2003) señalan que los adolescentes GLB muestran niveles
diferentes de auto aceptación y de auto revelación sobre su orientación sexual.
Pero son más resilentes, los jóvenes que se sienten orgullos de quiénes son y
logran comunicar su orientación sexual a las personas en varios ámbitos,
incluyendo el familiar (Rusell y Richards, 2003). De hecho, la decisión de revelar
su orientación sexual homosexual a sus pares o padres va a depender del tipo de
relación ya existente. Recibir apoyo de sus pares y tener una relación estable y
saludable con su padre y madre puede ayudar al/a la adolescente GLB en el
proceso de aceptar su propia orientación sexual homosexual, pero también en el
desarrollo de la resiliencia.

Aunque la religiosidad ha sido considerado un factor que puede asociarse con


resiliencia en jóvenes heterosexuales, investigaciones recientes encuentran que,
sin embargo, para los jóvenes GLB latinos la religiosidad es un factor que puede
aumentar el malestar emocional, en tanto algunas iglesias señalan y condenan la
homosexualidad como un pecado (Jiménez, Borrero y Nazario (2011).

Entendemos que tanto los factores que contribuyen al malestar psicológico como
los que contribuyen al desarrollo de resiliencia merecen investigación adicional.
Jiménez, et al. (2011) recomiendan continuar ampliando el conocimiento en estas
áreas, en especial con adolescentes lesbianas, pues ellas tienen procesos
diferentes a los de los hombres. Además, enfatizan la importancia de explorar la
posibilidad de desarrollar intervenciones apropiadas para los/as adolescentes GLB
en Venezuela, para su posterior implantación. Borrero-Bracero (2008) destaca que
mucha de las investigaciones sobre la juventud GLB venezolana surge de la
necesidad social de acercarse a las experiencias particulares de esta población en
una sociedad donde hay discrimen, violencia y homofobia. Concluye este autor,
que la investigación futura con estos grupos debe tomar en cuenta la cultura y la
sociedad puertorriqueña, sus experiencias de vida, su familia, sus amistades y sus
fortalezas para, así entender al joven insertado en su contexto familiar y cultural.
Similarmente, otras investigaciones revisadas recomiendan que en contextos
universitarios se incorporen estrategias de prevención de suicidios dirigidas a la
población GLB que consideren las características particulares del contexto cultural
en el cual dichas conductas se manifiestan. (SPRC, 2008; Goldstein, Molock,
Whitbeck, Murakami, Zayas y Nagayama, 2008).

Método y Metodología

Se utilizó un cuestionario que fue administrada a la población en una ocasión,


complementándose con una entrevista personal a cargo de la investigadora.

Cómo técnica se empleó la valoración cuantitativa de los instrumentos de


medicina familiar que se emplearon. Con un nivel de investigación de tipo
descriptivo así como un diseño de la investigación semi-experimental con un corte
transversal.

Variables dependientes: Edad, estado civil, procedencia.

Variables independientes: Adaptabilidad familiar, cohesión familiar, apoyo


confidencial y apoyo afectivo.

De un universo de 75 personas, 52 conforman la muestra de nuestro estudio, 23


cuestionarios fueron desechados por estar incompleto su llenado.

Criterios de inclusión:

Todas las personas que tengan orientación sexual a la de su mismo sexo.

Criterios de exclusión:

Personas heterosexuales.

Resultados
Valoraciones de DUKE-UNC-ll

20% 20% Escaso Apoyo Social


Escaso Apoyo Confidencial
Escaso Apoyo Familiar
Escaso Apoyo Afectivo
16%

44%

Tipo de Estructura Familiar de Origen

Tipo de Familia

27% Nuclear
37% Extensa
Monoparental
Binuclear

19%
17%

Conocen su Orientación Sexual


Conoce su Orientacion

Si
38% No

62%

En cuanto a las personas que cuentan con conocimiento familiar de su


orientación sexual, el grado de adaptabilidad familiar es:

Adaptabilidad Familiar

23% Rigida
Estructurada
38% Flexive
Caotica

19%

19%

Con relación al grado de cohesión familiar:


Cohesion Familiar

29% 31% Conectada


Desvinculada
Separada

40%

Afectación de mayor predisposición

Afectacion Global

20% Laboral
32% Emocional
Social
Familiar

28%
20%

Conclusiones

Se evidencia que en el área periurbana el estudio tuvo más acceso a personas


jóvenes, no así en el área urbana donde los encuestados fueron más bien
personas adultas, lo que lleva a suponer que el área periurbana es una zona
donde más fácilmente dan a conocer su orientación sexual, siendo lo contrario en
zona urbana donde la censura social es más manifiesta.

El hecho de que sepan o no la orientación sexual en las familias, no significa que


no les den apoyo de tipo confidencial o afectivo.

El análisis y la interpretación de los resultados nos permiten elaborar las


siguientes conclusiones:

- El tipo de estructura familiar del cuál provienen las personas estudiadas son
familias nucleares.

- Es importante aclarar que el círculo de amistades predominante de las


personas homosexuales no son exclusivamente de su comunidad gay.

- La adaptabilidad familiar predominante es del tipo de familia flexible esto en


las familias que tienen conocimiento de la orientación sexual y familia caótica
en las que no saben la orientación sexual de la persona estudiada.

- La cohesión familiar predominante es del tipo de familia desvinculada, tanto en


las familias que conocen como en las que desconocen la orientación familiar de
sus familiares.

- El apoyo social que brindan a los homosexuales tanto los que son de su
comunidad como los que no son, en este estudio, es bueno.

Una sociedad puede ser hostil hacia los homosexuales estigmatizándolos y


tratándolos como pecadores o delincuentes en algunos casos, incluso con
sanciones muy severas. En esos casos los homosexuales deciden no decir la
verdad a cerca de sus relaciones sexuales o no tienen la oportunidad de hacerlo.
Por temor a que se les pregunte acerca de sus hábitos sexuales a menudo se
resistirán a hablar de temas como por ejemplo sus síntomas de ITS entre ellas el
VIH Por estas razones todas las actividades de educación sobre el VIH y las
relaciones sexuales sin riesgo, suministro de preservativos y atención médica
apropiada para las ITS y otras enfermedades se ven gravemente entorpecidas. Es
preciso hacer esfuerzos más decididos para modificar la percepción del público y
erradicar la negación y los prejuicios en relación con la homosexualidad.
Corresponde esencialmente valorar no solo la homosexualidad como tal, sino los
factores que se suman al estrés del homosexual, potenciando la autoestima,
afirmando los recursos favorables con los que cuentan, además de movilizar los
soportes familiares y sociales del paciente.

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