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LICENCIATURA EN PSICOMOTRICIDAD
Autora:
Valentina Nebel
Docente:
Fecha: 2021
Montevideo, Uruguay
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Índice:
Introducción……………………………………………………………………….............2
Fortalezas y debilidades………………………………………………………………….3
Fortalezas…………………………………………………………………………………..3
Debilidades………………………………………………………………………...............5
Eje 2) Vínculo…...………………………………………………………………...............14
Referencias bibliográficas………………………………………………………………...56
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INTRODUCCIÓN:
El presente trabajo es realizado por Valentina Nebel, dentro del marco de la
obtención del título de Licenciada en Psicomotricidad de la Facultad de Ciencias de
la Salud de la Universidad Católica del Uruguay, bajo la tutoría del Mag. Daniel
Rivero.
La finalidad del mismo, es que la estudiante logre alcanzar una ajustada
integración teórico-práctica de los aprendizajes logrados a lo largo del proceso de
formación, dando cuenta de una capacidad de carácter reflexiva y metacognitiva.
Se buscará a su vez reflejar a través de este, las competencias de búsqueda,
síntesis y análisis de la información que sea ajustada y acorde al desempeño
profesional a desarrollar a futuro. Para lo mismo, se pondrá en juego la creatividad,
así como también la capacidad de crítica y autocrítica.
El trabajo se estructura de la siguiente manera: en una primera instancia se
presentarán las fortalezas y debilidades de carácter personal y profesional de la
estudiante, en segunda instancia se plantearán tres ejes teóricos que hayan sido
claves durante el proceso de formación, cada uno con su respectivo marco teórico.
Los ejes teóricos seleccionados son: comunicación no verbal, vínculo y
estrategias de intervención con familias desde el rol.
A posterior se realizará (partiendo de dichos ejes), un análisis en relación a
cinco trabajos realizados a lo largo de la carrera, que serán presentados a través de
viñetas.
Los trabajos son: una síntesis que corresponde a una vivencia personal en
sala (Formación Personal Vía Corporal III), la realización de un trabajo de
descripción y análisis del rol psicomotriz (Psicomotricidad III), un trabajo sobre la
comunicación humana (Psicología Médica), una observación en sala maternal
(Estimulación Psicomotriz I) y un trabajo de datos relevantes sobre la historia vital
de un niño (Psicomotricidad IV).
A modo de cierre y en última instancia, se desarrollarán las proyecciones y
expectativas a futuro de la estudiante, seleccionándose un área de interés
profesional, siendo esta el abordaje y trabajo con la edad de la primera infancia. Se
remarca en particular el trabajo que es realizado con la familia de los niños y es
destacada la importancia de la intervención con la díada (madre-hijo) en particular,
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además de la realizada con ambos padres y/o cuidadores del niño. En este apartado
mencionado será descrito a su vez, el motivo de la población y área elegida, la
relación de esta con la experiencia y las vivencias a lo largo del proceso de
formación y luego se las vinculará con los ejes que fueron seleccionados.
FORTALEZAS Y DEBILIDADES:
La selección alude a competencias personales y profesionales, las cuales
fueron elegidas basándome en mi proceso de formación y el desempeño que he
tenido como estudiante a lo largo de los años. He considerado para plantearlas: una
reflexión personal sumado al aporte de docentes y compañeros de clase en las
diferentes devoluciones que estos me han dado durante el paso por la Carrera.
Las fortalezas destacadas son: uso de recursos corporales para establecer el
vínculo, capacidad para el trabajo en equipo y el manejo y uso del espacio.
Por otro lado, las debilidades son: el manejo y uso de la voz, símbolo de ley y
seguridad, y la descentración emocional.
Haré referencia a ambas en cuanto a lo observado y vivenciado a lo largo de
mi proceso de formación mencionando con qué población las he visualizado y cuál
ha sido el motivo y por qué de su elección.
Fortalezas:
Una de ellas es el Uso de recursos corporales para establecer el vínculo.
Esta es seleccionada como una fortaleza en cuanto al manejo físico del
cuerpo, para de esta forma poder mostrar interés al otro y frente a este, en
búsqueda de promover su apertura al vínculo y a la interacción.
Con el uso de estos recursos, se habilita al encuentro y a un diálogo, ya sea
por medio de lo verbal como no verbal. Son aspectos importantes y que se ven
involucrados aquí: el manejo de los gestos, los movimientos realizados, la
expresividad y mímica tanto facial como corporal, la mirada y las posturas
adquiridas a la hora de actuar y entrar en relación con otro.
En Menéndez et.al (2017), se remarca que el cuerpo no es únicamente el
origen de todo conocimiento, sino que este en sí mismo es el medio de relación y
comunicación con el mundo exterior. (p.113)
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Destaco a la misma competencia, considerando que ha estado presente
durante mi proceso de formación, en todas las edades con las que he trabajado
(primera infancia, escolares y adultos mayores) así como hoy día en mi desempeño
diario a la trabajar con la infancia en un jardín. Sin embargo, desde mi opinión, esta
a trabajar un poco más con la edad escolar, siendo esta un desafío con el que he
ido trabajando a lo largo del tiempo y seguiré haciendo de aquí en adelante.
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demás, siendo esencial lo remarcado para estar todos enterados y de acuerdo con
lo que sea pensado y decidido.
Desde lo personal siento que he mantenido una participación activa tanto en
los trabajos realizados con compañeras/os en forma escrita, así como en las
diferentes planificaciones e intervenciones realizadas en sala, y el desarrollo y
despliegue de actividades y talleres realizados en conjunto. Destaco aquí aspectos
como: el compañerismo, la escucha, el acuerdo y ajuste a lo planteado y el
desempeño a la par del o los integrantes del equipo o dupla que conformaba.
Debilidades:
Una es el Manejo y uso de la voz: sobre este aspecto Sánchez y Llorca
(2008), consideran que la voz es el mediador más arcaico, planteando que “el
intercambio de sonidos vocales supone un intercambio de tensiones afectivas” (p.
40). Este es un aspecto de gran relevancia dentro de la propia tecnicidad del
psicomotricista, siendo a través de la misma que se logra el establecimiento de un
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vínculo y la implicación con el otro, pudiendo brindarle un acompañamiento en sus
acciones a distancia.
Relaciono este aspecto del rol del psicomotricista con el lenguaje a utilizarse
dentro de la sala; el cual tomando a Camps (2008), debe ser claro, preciso y
enriquecedor, es decir, no invasivo con respecto al accionar y hacer del niño.
Según Urcola (2003) el objetivo de toda comunicación es hacer llegar un
mensaje en sus debidas condiciones para que el que escucha acepte o asimile lo
que se dice. El autor menciona que para que esto se logre es necesario generar
confianza en el que está escuchando, demostrarle que somos competentes para
hablarle, hacerle comprender que lo que le estamos transmitiendo es importante,
interesante y útil.
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El psicomotricista debe significar las reglas haciéndose entender y buscando
la comprensión de las mismas así como de su necesidad. Los límites tienen como
objetivo principal el regular las conductas, advirtiendo hasta dónde se puede llegar
con determinado accionar.
Tomando el planteo de López (2017), la forma en la cual el psicomotricista
utiliza su lenguaje verbal es un aspecto esencial al actuar como símbolo de ley y
seguridad. Lo que menciona el autor, es que al explicarse las reglas estas deben
acompañarse con firmeza y ser libres de ambigüedad, buscando que se entienda el
mensaje de lo que puede hacerse o no dentro de la instancia de sala como de
salón.
Por su parte Aucouturier, Darrault y Empinet (1985), el ser símbolo de ley y
seguridad supone un orden y una seguridad en el espacio, permite mantener
referencias estables, anticipación y confianza.
Lo considero un aspecto el cual con los años he ido adquiriendo de forma
progresiva. Hoy día, se encuentra aún en proceso y a medida que continúe
trabajando desde la práctica, lo iré adquiriendo en su totalidad.
Puedo observar mayormente esta debilidad en el trabajo con los escolares, y
la remarco en cuanto a reconocer aquellos momentos en los que corresponde
implementarla, ya sea desde el habla o lo corporal y el cómo hacerlo, mostrándome
como un símbolo y figura de autoridad, poder lograr el entendimiento de las reglas
en el otro y saber cómo actuar frente a las determinadas situaciones que sean
presentadas.
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El psicomotricista, tomando a Aucouturier et al. (1984), se inscribe (a través
de su “empatía tónica”) en una actitud de escucha la cual habilita y favorece la
comunicación y mantiene una distancia dentro de una atmósfera segura. Esto
implica una “lectura” del cuerpo del sujeto y una observación de su expresividad
motriz, permitiendo así captar sus demandas.
Según el autor la capacidad de escucha significa descentrarse hacia otro:
“aceptar y recibir con más sensibilidad la expresividad del niño, emocionarse y
comprender para no rechazar, juzgar ni condenar” (p.60).
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capacidades, habilidades y actitudes relacionadas con el desarrollo personal e
interpersonal...que capacitarán a los docentes para el ejercicio de su profesión en lo
que respecta a su dimensión afectiva y relacional”.
Saarni (2000) en Bisquerra y Pérez (2007), plantean que este tipo de
competencias se relacionan con demostrar autoeficacia al expresar las emociones
en las interrelaciones sociales, la cual alude a lograr objetivos, y para que suceda,
deben conocerse las propias emociones y regularlas hacia los resultados deseados.
Pienso necesario considerar, que cada niño debe percibirse desde una visión
global, como un todo, y para que se establezca una adecuada descentración, se
precisa del autoconocimiento, identificar las necesidades y los deseos propios, para
así prepararse para el encuentro, evitando que todo aquello que pertenece a la vida
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personal invada la intervención y el desarrollo de esta, lo cual relaciono con mi
elección de esta como debilidad.
También llevada a lo personal, permite poder controlar mi emoción, buscando
que la prioridad sea el niño, aceptando como es sin esperar algo de antemano, y
pudiendo frente a eso buscar e implementar estrategias ajustadas y adecuadas para
la intervención con este.
Eje 1
Comunicación no verbal:
Se selecciona este eje en cuanto a lo mucho que se puede transmitir y
comunicar únicamente utilizando el cuerpo como herramienta y recurso de
expresión.
Para introducirnos en la Comunicación no verbal, debemos tomar a la
Comunicación como concepto previo.
Así, Habermas (1987) en López (2005), plantea que esta es “la interacción de
al menos dos sujetos capaces de lenguaje y acción que (ya sea con medios
verbales o medios extraverbales) entablan una relación interpersonal” (p.7).
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De aquí se desprende la idea de que para comunicar será entonces
necesario: un emisor y receptor y la transmisión de señales verbales o
extraverbales. (López, 2005). Se genera un intercambio y un diálogo ida y vuelta, de
estímulo-respuesta con otro, siendo la comunicación de carácter bidireccional.
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Knapp (1982), comúnmente utiliza el término no verbal para “...describir todos
los acontecimientos de la comunicación humana que trascienden las palabras
dichas o escritas.” (p.41). Se destacan aquí: los gestos, las expresiones, los
movimientos corporales, el contacto visual, todos una serie de señales de gran
relevancia al entrar en relación con las personas.
Knapp (1982), remarca que desde el momento en que el hombre comenzó a
comunicarse, la comunicación no verbal ha sido uno de sus recursos comunicativos
mas grandes, siendo esta aquel medio de expresión que sustenta al lenguaje verbal,
incluso llegando a sustituirlo por completo en ocasiones y situaciones
comunicativas.
Por lo mismo, se entiende que el estudiarla significa saber como interpretar
todo aquello que no se dice con palabras, sino que se dice a través del cuerpo o con
el uso de este.
De León et.al (2000), establecen que los primeros medios de los cuales el
niño se vale, son los provistos por la motricidad de expresión. Estos son: cambios
tónicos, miradas y sonrisas, gritos, expresiones vocales, posturas y actitudes, todas
portadoras de gran contenido emocional.
Estos, son los que utiliza para poder entrar en relación y llevar adelante una
comunicación e interacción, en este caso con su madre, su primer lazo afectivo.
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Cada niño, presenta una capacidad de expresión propiamente suya, única, y
con la cual logra hacer al otro participe de su sensibilidad, pudiendo satisfacer su
necesidad y demanda. Según Wallon entre los individuos se genera una
“comunicación inmediata...fuera de toda relación intelectual”. (p.46)
Continuando con los autores, el lenguaje corporal, desde un inicio, ha
permitido la formación de los grupos sociales, utilizando como generadoras a
actividades que favorecieran la fusión emocional con el otro.
Se plantea según De León et.al (2000), que “es sobre estas bases, donde el
cuerpo, y la emoción, tienen un rol tan fundamental, que se construye todo el edificio
de la personalidad del individuo, y en un sentido filogenético toda la cultura de la
humanidad”. (p.46).
Este proceso permite al niño separarse y construir su propia identidad,
encontrarse y tomar consciencia de sí como una totalidad. A su vez, se va haciendo
independiente, pudiendo enfrentarse al mundo y así relacionarse con él mismo. Se
crea lo que se denomina “espacio de la relación”, entre él y los otros.
Los autores destacan que la expresión corporal, es un momento en la
evolución de la humanidad, así como también en la evolución del niño.
La expresividad motriz acompaña al individuo durante toda su vida, sin
embargo a cierta edad deja de ser el principal modo de relación, reemplazándose
por formas mas evolucionadas.
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todas las edades actúa como posibilitadora para el conocimiento, la expresión y el
aprendizaje.
Se destacan en este eje: mirada, gestos y mímica, los cuales se incluirán en
el análisis de los trabajos, en cuanto al papel que estos cumplen en la interacción
con los otros.
Eje 2: Vínculo:
Pensar en el término Vinculo, nos hace remitirnos a sus orígenes y su
significado como una unión muy fuerte.
El ser humano, es un ser que no podría sobrevivir sin los vínculos que este
forma, necesitando conectarse con su entorno, contexto y el resto de sus
semejantes para poder de esta forma desarrollarse y subsistir.
El desarrollo afectivo del mismo, es la base del desarrollo físico, cognitivo y
social de este, y es posible gracias a la presencia de figuras vinculares presentes e
influyentes en su vida.
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Pichón Riviere (1971), por su parte, opina que corresponde a “una estructura
compleja, que incluye un sujeto, un objeto, y su mutua interrelación con procesos de
comunicación y aprendizaje”. (p.11).
El autor plantea que las relaciones establecidas por el sujeto, presentan una
dirección determinada y que son generadas en base a necesidades, que actúan
como la principal motivación de ese vínculo. En sus palabras “dichas necesidades
tienen un matiz e intensidad particulares, en los que ya interviene la fantasía
inconsciente”.
Plantea a su vez, que para que el vínculo suceda, debe contarse con un
emisor y un receptor, junto a una consiguiente codificación y decodificación del
mensaje. Es por este proceso de comunicación que se involucra a la presencia del
objeto, y el compromiso es una relación dialéctica de este con el sujeto.
En toda estructura vincular, ambos sujeto y objeto interactúan retro
alimentándose mutuamente, siendo acompañados por un canal comunicativo,
signos, símbolos y ruidos. Sucede un reconocimiento tanto personal como del otro,
cada uno se reconoce diferenciado del otro
Se remarca, a su vez, que todo vinculo con un objeto presente va a estar
influido por experiencias anteriores, es decir, experiencias y vivencias que ya se han
tenido con otros objetos.
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García (2000), plantea que el niño va creando una imagen de sí mismo, de su
cuerpo, estando en una permanente relación con los vínculos que se encuentran a
su alrededor. Este es un proceso el cual se da a través de una percepción de las
diferentes sensibilidades, las reacciones tónico-emocionales del cuerpo, el explorar,
los ritmos, la relación con el espacio y con los objetos que se encuentran en el
mismo, la separación/individuación, etc.
El niño va transitando por estos sucesos y momentos de forma progresiva en
el tiempo, pero siempre estando acompañado por otro. Ese otro habilita que el
mismo pueda conocerse y reconocerse.
Calmels (2007), plantea frente a esto, que el cuerpo del niño se construye a
través de una relación con los otros, partiendo de que “...el cuerpo no es algo
autosuficiente; tiene necesidad de otro, de su reconocimiento y de su actividad
formadora.” (p.11)
La primera relación y lazo del niño con el mundo exterior será la establecida
con su madre, o figura materna, siendo esta la que actuará y se encargará de
guiarlo y adentrarlo en el mismo a través de componentes tanto verbales como no
verbales (corporales), junto a una progresiva introducción y presentación de objetos
pertenecientes al mismo.
La primera relación que un ser humano tiene es con sus padres.
Gracias a las diversas experiencias que un niño en crecimiento tiene
con ellos, un lazo emocional muy fuerte, un vínculo, se comienza a
desarrollar desde el nacimiento. (Rev. Cienc. Salud. La importancia
del vínculo en la infancia: entre el psicoanálisis y la neurobiología.
14 (2): 261-280 / 265)
Se plantea que ese vínculo establecido con los padres, es aquel que se
encarga de moldear los aspectos emocionales en la personalidad del niño, siendo el
prototipo de las siguientes y posteriores experiencias emocionales que el mismo
tenga a lo largo de su vida.
Un vínculo adecuado con los mismos, le permitiría al niño en desarrollo
satisfacer sus necesidades de dependencia y de afirmación, lo cual le facilitaría
una orientación hacia el exterior, hacia las nuevas experiencias con personas
reales que pudiesen brindar un contacto y un intercambio emocional.
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Concepto relevante dentro del vínculo y en relación con este es el Proceso
de Constructividad Corporal.
Según González (2009), el Cuerpo es el lugar particular de integración
neurofisiológica-psíquica a lo largo de la historia del sujeto, que configura (en una
unidad relacional) todo lo que se significa estructurando al sujeto.
Esta autora, remarca que como especie humana, no logramos obtener
conocimiento de nuestro propio cuerpo sin la presencia de otro que nos acompañe
durante este aprendizaje.
Así, tomando el planteo de la autora, el cuerpo es una construcción que se
realiza en y para la relación con el otro.
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crear un vínculo con él, haciendo que se actúe en consecuencia, es decir, que haya
un estímulo y una respuesta de uno hacia otro, ejerciendo su acción en el aparato
psíquico de cada uno.
Eje 3:
Estrategias de intervención con familias:
Este eje se selecciona en base a la importancia del rol del psicomotricista con
las familias, tanto al comunicarse con estas como al generar un vinculo para entrar
en relación con las mismas.
Cuando intervenimos, desde el inicio, nos debemos interesar no sólo en el
sujeto con el cual estaremos trabajando, sino que también en su contexto, su
familia.
Las autoras Fusté y Bonastre (2010), remarcan que:
...si queremos una tarea conjunta, debemos entender que
cada padre, madre, con sus propios valores familiares, sean
parecidos o diversos a los nuestros, son los únicos y mejores
progenitores para sus hijos, que son sus primeros y principales
educadores y que debemos confiar en su saber hacer. (p.78)
Se rescata aquí, siguiendo con esta línea, que hay una importancia grande en
educar desde la posición que nos corresponde y partir siempre desde un respeto
hacia las familias involucradas.
Se remarca la principal intervención del psicomotricista/terapeuta con el
cuidador o tutor/familiar, ya sea madre, padre, o abuelos/as tanto en la sala, en
espera fuera de la misma o en las visitas domiciliarias como las realizadas por ellos,
en instancias de contacto, cumpliendo con el rol de aconsejar y guiar a los mismos,
junto a la realización de entrevistas, en sus respectivas instituciones/centros.
Se busca crear un clima habilitador, de escucha, que pueda ser de acogida y
de acompañamiento para las familias. Cuidamos tanto las entradas como las
salidas, intercambiando información durante el transcurso de cada diálogo. Lo
mencionado, significa no atender únicamente a los niños, sino que atender y
entender a la madre, padre, cuidador, los cuales también son importantes
protagonistas del desarrollo de los mismos.
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Se considera Familia a la :
Unión de personas que comparten un proyecto vital de existencia en
común que se quiere duradero, en el que se generan fuertes
sentimientos de pertenencia a dicho grupo, existe un compromiso
personal entre sus miembros y se establecen intensas relaciones de
intimidad, reciprocidad y dependencia (Palacios y Rodrigo, 1998).
Inicialmente las relaciones son establecidas entre dos adultos en los planos
afectivo, sexual y relacional, formándose el núcleo familiar, y pudiendo o no sumarse
a este los hijos, sobre los cuales los padres ejercen las funciones de crianza y
socialización. Estas relaciones se ven reforzadas por finos matices de
interdependencia, intimidad y comunicación, lo que implica un compromiso personal
entre la pareja y con los hijos.
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Camargo Rojas (2010), establece que:
Las alteraciones de la vida familiar son capaces de provocar
alteración emocional, desequilibrio y descompensación del estado de
salud, en todas las etapas del ciclo vital, siendo mayor su influencia
en la primera infancia como etapa de iniciación en el desarrollo
integral de la persona (Louro, 2003).
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como punto de partida), en búsqueda de promover el desarrollo armónico de las
personas, la integración de sus diferentes funciones, y el poder acceder y sostener a
la comunicación, la cual actúa como base de la socialización y el vínculo.
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Son de gran relevancia aspectos como: la forma en la que el mismo se
desarrolla en esta, las relaciones que establece con los integrantes de la misma y
los roles asumidos en su entorno mas cercano.
De esta manera, se entiende que no es posible planificar y llevar adelante
una intervención psicomotriz sin considerar al contexto familiar.
Para la siguiente parte del TFI, he decidido tomar trabajos de las asignaturas:
Formación Personal Vía Corporal (FPVC) III, Psicomotricidad III, Psicología médica,
Estimulación psicomotriz I y Psicomotricidad IV.
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Previo a la realización de cada análisis se expondrá una viñeta de los
trabajos explicando los contenidos destacados y el enfoque del análisis que se
desarrollará.
Título del trabajo y momento del año realizado: “Síntesis 10 de Mayo de 2017”.
Realizado el 31 de Mayo de 2017.
Análisis 1:
Para comenzar se partirá de la importancia de la FPVC (Formación Corporal
Vía Corporal), y luego se tomará esta para adentrarnos en aquellos aspectos que
forman parte de la interacción y el vínculo entre las personas.
Particularmente en este trabajo seleccionado, se remarca la importancia de la
mirada, la influencia de esta tanto en uno como en los otros y el exponerse a través
del uso del cuerpo.
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cuales se sustentan en estrategias tales como: actividades de senso-percepción,
sensorio-motrices, relajación, narración, trabajo en el plano simbólico, entre otras.
A partir de ellas (y en relación a los ejes planteados), se busca que el
psicomotricista tome consciencia de su cuerpo, sus tensiones, su capacidad para
relacionarse, así como también permite el despliegue de los recursos gestuales y
lingüísticos, ampliando el valor expresivo del eje tónico-motriz. Se aprende a su vez
con esta, las posibilidades y dificultades del acercamiento y contacto corporal, junto
a las movilizaciones que este genera.
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nivel tanto consciente como inconsciente, dependiendo del sentido que se le de a la
misma.
Le Boulch (1989), plantea que “Por medio del cuerpo es que estamos
presentes ante los demás y con él ante el mundo” (p.79).
Según este autor, el cuerpo tiene una gran importancia en el relacionamiento
con las demás personas ya que por medio de las actitudes y de sus movimientos es
que aparecemos ante los demás.
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Birdwhistell (1997), en relación a esto, destaca a los ojos, poniendo como
ejemplo la incomodidad que despierta el ser mirado fijamente por otro. Luego
expresa que al observar hacia donde está apuntando la mirada de otro, podemos
descubrir qué es lo que le interesa a esa persona en ese momento.
También relaciona la mirada con la intimidad, sosteniendo que cuando la
mirada de dos personas se encuentran podemos saber cómo está el otro (por esto
también la mirada provoca el sentirse intimidado). La mirada también regula una
conversación, dejando en claro los turnos y explicitando cuando finaliza.
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otro, permite trabajar con el autoconocimiento y captar en el proceso cuáles son las
sensaciones que privilegian, entre otras cuestiones.
Creo que si bien el proceso de cada uno es único y bien personal, las
actividades en la mayoría de las oportunidades se realizaban de forma grupal, lo
que permitió y ayudó a aumentar y mejorar mi relación con los otros y a su vez
también conocerme en función de estos, enriqueciendo y desarrollando en forma
progresiva, clase a clase, las herramientas necesarias para formar un vínculo.
Con esta formación, pude también trabajar la capacidad de descentración
(que remarco como debilidad) necesaria para captar las necesidades de los otros
cada vez más, interpretar desde lo corporal lo que se me transmitía y/o comunicaba.
(Comunicación no verbal).
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Viñeta 2: Psicomotricidad III
Título del trabajo y momento del año realizado: “Rol del Psicomotricista”,
realizado el 7 de septiembre de 2017.
Análisis 2:
Para empezar hablemos del concepto de Rol como tal. La palabra se refiere
según Peña y Ablin (1991), a la “...forma de funcionamiento que asume un sujeto en
un momento y situación específicas, en las que están involucradas otras personas y
objetos” (p. 2).
En psicomotricidad, el rol psicomotriz engloba una serie de estrategias de
intervención y actitudes, utilizándose unas u otras de acuerdo al contexto, viéndose
comprometidos tanto los individuos como los objetos.
La psicomotricidad se propone, como objetivo general, desarrollar o
restablecer mediante un abordaje corporal las capacidades del individuo (Berruezo,
2000).
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Según Bernaldo de Quirós, M. (2012), la formación de un psicomotricista es
compleja y requiere, además de la adquisición de unos conocimientos teóricos, una
formación práctica y una formación personal:
Una formación teórica que incluye todos los contenidos específicos de la
psicomotricidad (técnicas de evaluación psicomotriz, bases metodológicas, técnicas
con mediación corporal) y materias relacionadas (anatomía, neurología, psicología,
pedagogía, etc.).
Una formación práctica que permita la aplicación de los contenidos teóricos,
realizando observaciones con material audiovisual y en la sala de psicomotricidad,
elaborando proyectos terapéuticos para distintos colectivos e interviniendo como
coterapeutas con casos individuales y en grupos, además de la reflexión y el debate
sobre los trabajos realizados.
Una formación personal, ya que el psicomotricista trabaja con su cuerpo y
debe conocerlo antes de utilizarlo en un proceso terapéutico con otro.
Sánchez y Llorca (2001) por su lado, destacan las siguientes dimensiones del
perfil profesional del psicomotricista, remarcando que se debe contar con: una
capacidad de observación y escucha, de expresividad psicomotriz, la capacidad de
utilizar diferentes estrategias de implicación, competencias para elaborar de manera
creativa y ajustada diferentes escenarios, la capacidad de comunicación con la
familia y otros profesionales, y una capacidad de mirarse. Todas estas son
dimensiones que él mismo irá adquiriendo durante su etapa de formación personal y
que implican una formación continua a lo largo de toda su vida profesional.
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encarga de promover en su mayor cantidad posible, el desarrollo de la capacidad
funcional del individuo, entendiéndose este como una totalidad somatopsíquica, y
que se encuentra inserto dentro de un contexto socio histórico y cultural
determinado y específico.
Por su parte Sassano (2003), citando a Rogers (1972), destaca que se busca
facilitar por sobre todas las cosas, el desarrollo personal. Esto es algo que Sassano
remarca como la base de la tarea como psicomotricistas, siendo importante poder
crear y establecer una relación que sea auténtica, de transferencia, en donde el
psicomotricista pueda vivir y apropiarse de sus sentimientos. A su vez, remarca la
necesidad de mantener una cálida aceptación y valoración sobre la otra persona,
tomarlo como una persona diferente, y poder verla tanto a esta como a su mundo de
la forma en la que él lo ve.
De esta forma, es que el individuo podrá experimentar y comprender
aspectos de sí, logrando cada vez mas una integración personal , y ser capaz de
funcionar de forma eficaz, con la posibilidad de enfrentar los problemas de la vida de
una manera mucho más fácil y adecuada.
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Finalmente, la contención refiere a la claridad en la puesta de límites, la
seguridad afectiva y física, mirada periférica y contención a través de la palabra.
Sólo podrá consolidarse a partir de la escucha, el ajuste tónico, la transformación y
la utilización de los mediadores de la comunicación por parte del psicomotricista.
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Viñeta 3: Psicología Médica
Análisis 3:
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Los seres humanos somos primordialmente seres “sociales”, en el sentido de
que pasamos la mayor parte de nuestras vidas con otras personas. Por
consiguiente, es importante aprender a entenderse con los otros y a funcionar
adecuadamente en las diferentes situaciones sociales. Ciertas habilidades de
comunicación nos ayudan a mejorar las relaciones interpersonales.
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otros. Este, repercute sobre la recepción y la reproducción cultural, la integración a
la sociedad así como el desarrollo de la personalidad e identidad del sujeto.
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entiende que el cuerpo refleja información sobre lo que se está diciendo a través de
postura, estilos, rasgos, etc.
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Dentro de la sala, en psicomotricidad educativa, se realizan “juegos de placer
sensoriomotor”, juegos que, según la autora De León en De León et.al (2000) ,
llevan a una movilización de lo imaginario. Es así que basado en esto, se
desarrollaron variadas técnicas de trabajo corporal.
Se hace énfasis en el contacto del niño cuerpo a cuerpo con otro, a través de
actividades lúdicas en movimiento, donde se pueda encontrar placer y comodidad,
así como plenitud al vivenciar el propio cuerpo como una totalidad.
Con este tipo de situaciones y juegos, se busca y tiene como fin que el niño
encuentre al otro, y de esta forma entre en relación abriéndose a la comunicación
con este, haciendo que el placer sensoriomotor sea compartido.
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Viñeta 4: Estimulación Psicomotriz I
Título del trabajo y momento del año realizado: “Sesión Maternal”, realizado en el
mes de Junio de 2015 en el Centro de Atención a la Infancia y la Familia “Los Pitufos”
Enfoque del análisis: Se tomará como central en este análisis el relacionamiento entre
adulto-bebé, haciendo especial énfasis a las formas de comunicarse-vincularse de cada
uno. Se remarcará también el rol del psicomotricista dentro de la sesión y se hablará del
centro como espacio de contención.
Análisis 4:
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riesgo o vulnerables, presentan alguna discapacidad o un trastorno universalmente
reconocido.
[…] la infancia temprana, y en particular el período que abarca
las edades de 0 a 3 años, es cualitativamente más que el comienzo
de la vida, es, en realidad, el cimiento de esta […]. (UNICEF, 2009).
Autores como Sánchez y Llorca (2008), remarcan que en esta edad, el bebé
transita por una construcción de su propia imagen, diferenciando lo que es interno
de lo externo. Debido a esto, es que al trabajar desde este tipo de intervención se
busca ofrecer al mismo estímulos y sensaciones, experiencias, que sean relativas y
correspondientes a su propio cuerpo como también al mundo exterior.
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situar mejor nuestra intervención. La comprensión supone la búsqueda de
significados y de intenciones en la acción del otro y también en nuestra acción.
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consumados [...] en una correlación con las acciones médicas correspondería a las
que impiden la aparición de los signos de enfermedad” (p.118).
Correspondiente a lo mencionado anteriormente, se toman a los signos de
alarma como relevantes a nombrar aquí. Con los parámetros psicomotrices, al
observar al niño, se habilita a detectar estos signos, los cuales reflejan que algo
llama la atención. Al detectarlos, podemos llevar adelante un seguimiento y una
intervención a tiempo, evitando que se generen y aparezcan a futuro alteraciones en
el desarrollo psicomotor del niño.
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o lugar, de un conjunto , o dentro de sus límites. Tiene que ver con varias acciones y
propuestas a través de las cuales se busca brindar ayuda y garantizar el bienestar
de las personas.
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corresponde a los juegos de crianza de sostén, propuestos por Calmels (2007),
donde los balanceos forman parte.
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en próximos encuentros los padres tiendan a omitir u ocultar información, incluso
tergiversarla para no ser, de esta forma, enjuiciados o culpabilizados.
Un contexto donde haya diálogo y preguntas que den lugar a la reflexión,
crean una forma de intervenir que ayuda y facilita el que los padres puedan
cuestionarse a sí mismos, sin sentir culpabilidad, y encontrar nuevas formas de
relacionarse con su hijo.
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Viñeta 5: Psicomotricidad IV
Título del trabajo y momento del año realizado: “Análisis de datos relevantes de un
niño”, realizado el 6 de junio de 2019.
Enfoque del análisis: Tomar como base el caso para destacar la importancia del
vínculo y la familia durante la crianza.
Se hará mención a su vez al proceso de constructividad corporal de González (2009),
remarcándose la fase del cuerpo tónico en cuanto a primeros contactos y lazos de la
familia con la niña.
Análisis 5:
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generándole angustia llevando a que asistiera de forma casi nula a la misma en
cuanto a tiempo y forma. Lo mismo, se creería haber condicionado la adaptación a
la institución, siendo esta una lenta y dificultosa, lo cual sucede nuevamente en la
etapa escolar, a los 7 años, edad en la cual ocurre el suceso de la separación
parental.
Se interpreta y cuestiona que lo mencionado, influyó en el proceso de
separación-individuación de la niña con sus padres con el paso del tiempo, ya que
esta debió enfrentarse no solo a la ausencia de estos durante el tiempo escolar sino
que a su vez a la separación de estos como pareja.
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Bowlby (2012), remarca que, frente a un suceso como es la separación del
niño (en este caso niña) con sus figuras de apego, genera una consiguiente
afectación en el estado natural de este, haciendo que aumente su ansiedad, que
haya padecimiento, sufrimiento y desapego emocional frente a sus referentes.
En relación a esto Bowlby (1976), establece a su vez, que la pérdida de la
figura materna, sea esta por sí misma o en conjunto con otras variables, puede
producir en el niño reacciones y procesos que ofrecen un mayor interés para la
psicopatología. (p.17)
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Cabe hacerse preguntas y cuestionar el vínculo establecido por la niña tanto
con su madre como padre en los momentos previos a la separación así como en los
siguientes, y el como han transcurrido los mismos, datos importantes en relación a
lo mencionado y los cuales no son especificados dentro del caso e historia de J.
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Importa remarcar aquí, la posición de los padres frente a estos, y el abordaje
que hagan de los mismos con las herramientas que poseen, así como las
propuestas, ejemplo las actitudes para priorizar el cuidado, permitiendo que se
pueda transitar el proceso de la mejor manera posible y así brindar una adecuada
crianza y educación a su niña, privilegiando el bienestar por sobre todas las cosas.
Se interpreta que es de carácter esencial conocer acerca de la familia del
sujeto con el cual se trabaja, así como de la estructura mencionada, el ambiente
dentro del cual crece el sujeto y donde se desarrolla y desenvuelve cotidianamente,
para luego entrar en el conocimiento y abordaje de su expresividad motriz.
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Otro concepto de importancia para el caso, es el de Proceso de
Constructividad Corporal, planteado por González.
Según González (2009), el Cuerpo es el lugar particular de integración
neurofisiológica-psíquica a lo largo de la historia del sujeto, el cual configura (en una
unidad relacional) todo lo que se significa estructurando al sujeto. La autora plantea
que, como especie humana, no logramos obtener un conocimiento de nuestro
propio cuerpo sin otro que nos acompañe durante este aprendizaje. El cuerpo así es
una construcción que se realiza en y para la relación con el otro.
González (2009), plantea 3 fases a través de las cuales se da este proceso
de construcción: cuerpo tónico, cuerpo instrumental y cuerpo cognitivo.
Destaco en el caso de J, la primera de las fases, correspondiente al cuerpo
tónico (fase donde se trabaja con las funciones maternales, el sostén, el manejo
corporal, entre otras).
Es una fase caracterizada por el desarrollo de la estructura refleja y la
organización tónico-postural. Las modificaciones experimentadas y evidenciadas en
el tono, caracterizadas según las respuestas del otro, van conformando un primer
código de comunicación entre sujeto y medio, un código tónico-postural, propio y
singular de cada uno. El tono, es el que hace posible la primera modalidad de ser en
el cuerpo, aprehender sobre sí y sobre el otro, y es por ello que esta estructura
tónico-postural, es el primer índice del PCC y una fase significativa aquí.
Se puede decir que en esta fase, se encontrarían ubicadas la forma en la
cual J y su madre llevaron los primeros momentos de relación y adaptación una a la
otra, siendo importantes aspectos como la función de la madre en cuanto al sostén
brindado, el manejo y la manipulación de J, junto a los primeros acercamientos de
esta a lo que la rodea, aspectos relevantes del PCC a ser cuestionados.
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medio circundante…La alteración en la construcción de las
manifestaciones corporales funcionaría como un indicador de
anomalías en el desarrollo. (Calmels, D., 2009, p. 18).
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PROYECCIONES A FUTURO Y ÁREAS DE INTERÉS PERSONAL:
En referencia a las áreas que son de mi interés y llaman mi atención, son las
respectivas a la Primera Infancia y la Intervención con la Familia.
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Considero a su vez que ha sido la población con la cual he aprendido más a
lo largo de los años cursados y siento que esto se ha podido ver reflejado no solo en
mis actitudes y expresividad tanto verbal como corporal al desempeñar el rol, sino
que también a la hora de realizar los trabajos, tanto individuales como en equipo.
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Comunicación no verbal, Vínculo y Estrategias con familias desde el rol,
son tres ejes que se encuentran presentes en el abordaje e intervención psicomotriz
de la Primera Infancia.
Comunicación no verbal, siendo esta la capacidad de transmitir y
comunicar, dar un mensaje, a través del uso del cuerpo como recurso privilegiado y
desprovisto de palabras. Corresponde al lenguaje propio y característico de la edad
seleccionada, la primera infancia, y en la misma se interpreta y puede reflejar lo que
el sujeto es, y aquello que siente.
Vínculo, siendo un concepto esencial al trabajar con primera infancia y a
través del cual se establecen relaciones con el mundo con todos sus componentes,
así como con las personas y objetos que se encuentran en él.
Este además, es de relevancia en cuanto a abordar al niño o sujeto
dependiente de la edad, y a sus respectivos tipos de relaciones: con su familia
(principalmente la madre o figura materna como el primer vínculo establecido, el
vínculo primario), con los objetos con los cuales el sujeto se encuentra, con el
espacio alrededor, la relación consigo mismo y la que se da con los demás.
También importa mencionar aquí la relación terapeuta-sujeto, en cuanto al
vinculo terapéutico con el terapéuta y el que este tiene con el sujeto, destacándose
a su vez aquí el vínculo del terapeuta con la familia.
Estrategias con familias desde el rol, desde el poder con la planificación e
implementación de estas, favorecer, en una colaboración con los familiares y/o
referentes del sujeto, el desarrollo y seguimiento no solo de él mismo sino que
también de su contexto, en cuanto al trabajo dentro del hogar en base a lo
intercambiado y sugerido.
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Desde que finalicé la Carrera me encargué de buscar lugares de trabajo
donde pudiera continuar con mi formación mientras me encontraba realizando este
trabajo. Quise centrar mi atención en esta edad correspondiente a la primera
infancia, pudiendo tomar el papel de acompañar el proceso de desarrollo escolar,
los cuidados que este requiere y demás.
Para este rol he adaptado todo aquello que he aprendido y más, continuando
el estudio sobre el tema y la población día a día, siendo de ayuda el hacerlo.
Considero que hoy en comparación hace unos años, presento una diferente
perspectiva acerca de la infancia y esto puedo verlo reflejado en mi forma de recibir
al niño, las posturas que opto por tener frente a estos, y el posicionar mi cuerpo a
nivel de presencia y actitud frente a al grupo y/o las personas con las cuales he
tenido que trabajar (equipo de maestras y educadoras, así como padres de los
niños).
Sumo a esto el saber cuándo y como acercarme o alejarme, así como el
cuándo decir o no algo. Quiero destacar en este párrafo, que el haber tenido que
duplicar algún año, fue a fin de cuentas algo beneficioso. Por más de haberme
alargado el proceso, me recargó la experiencia que me hacía falta adquirir en ese
momento.
Estas cuestiones mencionadas serán un estudio y formación constante, ya
que es fundamental mantener el conocimiento en modo activo, para cada vez
aportar algo mejor.
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un sustento al mismo desde la teoría, que tan necesaria es para un desarrollo
completo y adecuado de la intervención psicomotriz.
Me interesaría a su vez, como incorporación a mi formación, el poder en un
futuro vincular a la psicomotricidad con la música, actividad que disfruto en su
totalidad desde muy chica.
Concluyendo con este apartado, destaco el rol que han jugado tanto mis
compañeros como de mis docentes a lo largo de toda mi formación en esta carrera,
sin los cuales mi proceso no hubiese sido el que fue hasta hoy.
Me siento expectante a las nuevas oportunidades y vivencias futuras, con
mucha intriga por las experiencias y el aprendizaje que tengo por delante,
continuando con el desarrollo de esta hermosa profesión.
55
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