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Jhon Sneider Cañas molina

JERARQUÍAS ENMARAÑADAS Y RIZOS EXTRAÑOS

Partiendo de la idea de que el derecho representa un sistema de reglas conformadas por


grados sucesivos, desde las normas fundamentales hasta las reglas cada vez más
específicas y contingentes. Se aborda las principales manifestaciones de esta
construcción que: la preeminencia del derecho internacional sobre el derecho nacional
representa un principio todavía reciente y de consecuencia bastante incierta, mientras que
la primacía de la Constitución sobre las otras normas jurídicas nacionales parece
comprometida debido al rechazo que la jurisprudencia ejerce cuando controla la
constitucionalidad de las leyes, de modo que esta jurisprudencia reduce a poca cosa el
privilegio real de la Constitución.
M. Virally cuestiona al principio jerárquico en el derecho, el cual establece que algunas
normas tienen una posición superior a otras en una especie de pirámide de normas. Sin
embargo, el autor sostiene que este principio no puede aplicarse de manera universal, ya
que sólo las normas establecidas por un acto jurídico o por principios generales del
derecho podrían integrarse en un montaje jerárquico. Además, propone reemplazar el
concepto de pirámide por uno más flexible, la estratificación, en la que las normas se
distribuyen en estratos superpuestos más que en una jerarquía rígida. En otras palabras,
el autor cuestiona la rigidez del principio jerárquico en el derecho y propone una
perspectiva más flexible que tenga en cuenta la complejidad del sistema jurídico y la
variedad de fuentes de normatividad.
Paul Amselek comenta que la realidad es mucho más compleja, más enmarañada de lo
que supone el esquema kelseniano. Del enmarañamiento es fácil pasar a la circularidad.
No es de por sí necesario disponer de ciertas reglas de derecho para poder afirmar que
tal órgano está habilitado para decir el derecho. Tal situación nos pone en presencia de
una forma de circularidad; la cuestión es saber si se trata de un círculo vicioso. Aquí, Ost
se inclina más por la segunda interpretación que anteriormente lo lleva a hablar de “rizos
extraños”.
La complejidad connota la imprevisibilidad. Un sistema complejo es aquel en el que se
desconocen ciertas informaciones importantes sobre su naturaleza y funcionamiento,
aunque se tenga una idea general de ellos. Aunque parece que hay un desorden aparente
en el sistema, es razonable suponer que hay un orden oculto. Además, la complejidad
también se relaciona con la idea de retroacción, es decir, que el sistema contiene
procesadores que están conectados por relaciones recursivas, lo que significa que
pueden influirse mutuamente y retroalimentarse. Este tipo de relaciones fue el punto de
partida de la cibernética, que busca entender cómo los sistemas se comunican, se
retroalimentan y se adaptan. En lugar de enfocarse en relaciones lineales y
unidireccionales, la complejidad se enfoca en relaciones en "rizo", es decir, relaciones que
son cerradas y recursivas, y que pueden ser recíprocas, conflictivas o de reciclaje.
La imprevisibilidad del sistema complejo se debe en gran parte a la operación de
relaciones no jerárquicas, de vínculos retroactivos. Se explica entonces el éxito de los
modelos de “arborescencia de mando” y la dificultad de razonar en términos de rizos
cuando se trata de reflexionar sobre los fenómenos sociales.
El concepto de “jerarquía enmarañada” es una estructura organizativa diferente tanto de
la reciprocidad como de la heterarquía, y que las tres ideas deben ser entendidas y
diferenciadas para comprender completamente la dinámica de un sistema o grupo, por
medio de la cual Hofstadter busca un programa construido sobre una estructura sin
monitor, compuesto únicamente de redes de transición recurribles y entremezcladas. En
esta hipótesis, toda idea de jerarquía se descarta de entrada. La interpretación de la
Jhon Sneider Cañas molina
JERARQUÍAS ENMARAÑADAS Y RIZOS EXTRAÑOS

“jerarquía enmarañada” le parece a Ost capital para la comprensión de todos los


fenómenos sociales que se reconstruyen en gran parte mediante sistemas de
representaciones, creencias y valores.
El mérito del concepto de rizo extraño radica justamente en que toma en cuenta estas
representaciones como si no hubiera jerarquía enmarañada excepto en la hipótesis de
que, precisamente, la jerarquía presunta encalla a casusa de una retroactividad
inesperada: “algo interior al sistema referido y que actúa sobre el sistema”.
Según Hofstadter, todo sistema constituido por reglas, prácticas, convenciones y jugadas
es susceptible de enmarañarse en la medida en que se instauran “meta-reglas” o “meta-
convenciones” que rigen la interacción de las reglas y las prácticas, o de las convenciones
y los golpes. Pero por esa misma razón parece ilusorio un cierre definitivo del sistema;
esto es lo que Hofstadter llama la “gödelisación” de los sistemas: un sistema sólo puede
cimentarse si se apoya en un conjunto más globalizante.
el paradigma de la complejidad no es algo ajeno al campo jurídico u otros campos, sino
que es una forma de pensar que puede aplicarse en ellos, renovando y enriqueciendo el
concepto de sistema ya establecido. podemos concluir que el verdadero sujeto del juego
no es otro que el juego mismo, es decir, el sistema se completa, con sus mismos
elementos.

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