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Luis Alberto Nájera López.

Universidad Autónoma del Estado de Morelos.

Licenciatura en historia.

Primer semestre.

Materia: metodología de la investigación.

Docente: Mtro. Guillermo Nájera Nájera.

La importancia de los braceros en la segunda guerra mundial.

1
Índice:

Introducción ……………………………………………………………………Pág. 3

Motivo de la creación del programa …………………………………………Pág. 6

Tipos de convenios que se manejaron ………………………………………Pág. 9

Consecuencias y deportaciones …………………………...…………………Pág. 12

Conclusión ………………………………………………………………………Pág. 14

Bibliografía ………………………………………………………………………Pág. 15

2
Introducción:

La Segunda Guerra Mundial fue el conflicto bélico más importante del siglo

XX. Entre 1939 y 1945, Europa vivió el enfrentamiento de dos grandes alianzas:

las potencias del Eje, con Alemania, Italia y Japón como principales protagonistas,

y los Aliados, con Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Rusia, entre otros.

Desde el comienzo de la guerra con la invasión de Polonia y las posteriores

guerras relámpago desarrolladas por los nazis hasta el Día de la Victoria, tuvieron

lugar batallas de relevancia como Dunkerque, Stalingrado, o Berlín, así como

asesinatos masivos como el Holocausto o el bombardeo de Hiroshima y Nagasaki.

La pérdida en vidas humanas se cifra entre 50 y 70 millones de personas, al

tiempo que el Viejo Continente quedó dividido en dos bloques antagónicos. Hacía

el año 1941, luego del ataque japonés A Pearl Harbor, Estados unidos se

involucra más fuertemente en la segunda guerra mundial, la cual había estallado

en 1939, y comienza a combatir no solo contra Japón sino también contra

Alemania e Italia, esto afectará de algún u otro modo a todos los países

latinoamericanos. Estados Unidos exigía compromiso con la causa Aliada,

abriendo una mayor ayuda económica a los países de Latinoamérica a cambio de

solidaridad y apoyo a sus necesidades estratégicas, en el contexto de la guerra.

La participación de México en la Segunda Guerra Mundial es un tema

trascendental para la Historia de México, dicha intervención casi siempre está

relacionada con el famoso “Escuadrón 201”, que fue relevante, pero si

observamos a la guerra en su totalidad podemos notar que México se involucró en

muchos más aspectos de este conflicto bélico, como dice Blanca torres:

3
En el terreno económico colocó al país en el umbral del crecimiento
acelerado al imponerle un ahorro nacional forzoso y alentar en buena
medida los procesos productivos, aunque al mismo tiempo permitió o de
hecho obligó a establecer las bases para una relación estrecha con los
Estados Unidos como consecuencia de la creciente cooperación militar y
económica.1

Las negociaciones y las relaciones con Estados Unidos culminaron en

acuerdos y tratados, que no necesariamente repercutieron por completo en el

futuro de los dos países, ya que muchos de estos acuerdos no continuaron su

curso después de la guerra, pero fueron convenientes para los dos gobiernos así

como las soluciones al problema del petróleo y el combustible, fueron otra manera

en la que las relaciones entre este país y México se fueron consolidando para

mostrar, años más adelante, cierto apoyo al vecino del norte a través de políticas

públicas y económicas. México entró al conflicto de manera definitiva, participando

de diversas formas; una de ellas fue a través de la exportación de mano de obra a

los Estados Unidos, ya que debido a que buena parte de los hombres

estadunidenses se encontraban en los frentes de guerra, se requirió de trabajo

externo. Una de las soluciones estadunidenses fue contratar a migrantes, por lo

que en colaboración con el gobierno mexicano se creó el programa bracero (1942-

1964), el cual consistió “en la firma de convenios para regular la contratación de

mexicanos en los campos laborales norteamericanos” 2. Ambos países se vieron

beneficiados; ya que se intentó garantizar que los braceros mexicanos no sufrieran

1
Torres Ramírez, Blanca, México en la segunda guerra mundial, El
Colegio de México, México, 1979, P. 9.
2
Velázquez Flores, Rafael, Factores, bases y fundamentos de la política exterior de México
durante la Segunda Guerra Mundial, Tesis de Licenciatura en Relaciones Internacionales, UNAM,
México, 1988, P. 191.

4
discriminación, y tuvieran garantizados el transporte, el hospedaje, los alimentos y

servicios de salud gratuitos.

5
Motivos de la creación del programa:

Entre 1942 y 1964 se llevaron a cabo una serie de acuerdos

diplomáticos para regular el trabajo temporal de mexicanos en Estados Unidos, lo

que dio origen al llamado “Programa Bracero”. La Segunda Guerra Mundial generó

una crisis en los campos laborales de Estados Unidos debido al traslado masivo

de hombres al frente de las batallas en contra de la alianza del eje (Japón,

Alemania e Italia principalmente) y por consecuencia la falta de trabajadores que

pudieran sacar adelante las cosechas, mantenimiento a las vías del ferrocarril o

mano de obra en las fábricas, y por los motivos mencionados antes en agosto de

1942 se firmó el primer convenio que permitió satisfacer las necesidades agrícolas

estadunidense, y el denominado bracero era aquella persona que trabajaba con

los brazos( usualmente en trabajos de carácter agrícola). Durante 22 años que

perduro el convenio de los braceros, regularon la entrada a Estados Unidos de un

patrón migratorio que se definió por el movimiento de hombres solos, provenientes

de áreas rurales que trabajarían temporalmente, bajo un esquema de

documentación que se fincó en un contrato avalado por ambas naciones, pero es

un hecho que durante el mismo periodo la migración indocumentada por la

frontera vio el tránsito de numerosos hombres, mujeres y niños.

Los Estados Unidos en la guerra aumentó de inmediato la demanda de

mano de obra. No pudo satisfacerla la fuerza de trabajo norteamericana, que

sufría la sangría de decenas de miles de jóvenes reclutados para el ejército. En un

intento de encontrar solución nacional al problema se recurrió primero a emplear el

remanente de desempleados de 1929, a mujeres y a adolescentes, pero no fue

6
suficiente. La agricultura era la más perjudicada por las pronunciadas diferencias

de salarios que existían entre el trabajo industrial y el agrícola y, como

consecuencia, por la enorme inmigración que se produjo de las zonas agrícolas a

las urbanas al ampliarse las fuentes de empleo industriales. Las quejas de los

cosecheros y de las empresas ferrocarrileras por la carencia de trabajadores fue

intensificándose a medida que avanzaba 1942, las peticiones más angustiosas

procedían al principio de los dueños de los plantíos de remolacha del oeste

(Montana, Idaho y California); luego se les sumaron las de los algodoneros de

Arizona y California y las de los cultivadores de frutas y legumbres de este último

estado. Los fruticultores de California fueron los primeros en demandar la

importación de brazos mexicanos tomando ventaja de la atmósfera creada por la

guerra, para convencer a los líderes políticos de abrir la puerta a la importación

legal de trabajadores mexicanos. En realidad, utilizaron la simpatía de la sociedad

por el esfuerzo antifascista de los aliados europeos para tener acceso a los

trabajadores necesarios para consolidar sus intereses económicos, ése fue el

verdadero objetivo de sus esfuerzos. Estados Unidos es un país con una

economía avanzada, la cual requiere de mucha mano de obra barata para

mantenerse. Esta demanda se origina en el lento crecimiento de su población, la

acelerada innovación tecnológica y el alto grado de organización de su fuerza de

trabajo. Todo ello ha ocasionado que los trabajadores estadounidenses rechacen

empleos de bajo estatus social.3

3
González Camacho, Sandra, “Tribulaciones de los braceros y los aspirantes a serlo”, en Boletín
Del Archivo General De La Nación, Vol. 6, Núm. 21, Julio – septiembre, 2008, P. 82.

7
Los factores de atracción habían empezado a manifestarse incluso antes de

que los Estados Unidos participaran directamente en la guerra por el fuerte

impulso que dio a la economía norteamericana la obligación de proporcionar

materiales a los aliados. Ser bracero es primeramente un sello institucional y

luego una experiencia laboral migratoria situada. En otras palabras, dicho

concepto es el resultado de la articulación entre el acto institucional fundante que

consistió en nombrar al otro en tanto inmigrante y mexicano y la apropiación de

este ritual de nombramiento por parte del sujeto migrante. La palabra bracero es

entonces el testimonio de dos operaciones: el nacimiento en 1942 de una

categoría migratoria y la experiencia laboral de la misma entre 1942 y 1964, a

través de la identidad social de entre aproximadamente uno y medio y dos

millones de trabajadores agrícolas mexicanos principalmente oriundos de los

estados de Michoacán, Guanajuato, Jalisco y Zacatecas quienes, en ese

entonces, se fueron a Estados Unidos, esto es, principalmente a los estados de

suroeste de la Unión Americana.4 Los braceros mexicanos fueron impulsados a

salir de México por varias causas: desempleo, bajos salarios, caciquismo, falta de

garantías en el campo, abusos de los comisarios ejidales, concentración de la

tierra en manos de políticos influyentes y algunos testimonios de los braceros

revelaron que éstos emigraron por sus bajos salarios, las exigencias del Banco

Nacional de Crédito Ejidal, la falta de crédito, y el deseo de que el precio de sus

productos se fijara de acuerdo con la oferta y la demanda.

4
Schaffhauser, Philippe, “La figura del migrante como estigma social: el derrotero de los
exbraceros trabajadores migratorios mexicanos (1942-1964)”, Intersticios Sociales, Núm. 12, Julio-
diciembre, 2016, P. 3.

8
“La entrada de México en la guerra y su acto de fe democrática permitía

asimismo justificar la emigración a ojos de la opinión pública mexicana, molesta

por el trato discriminatorio que sufrían los mexicanos en los Estados Unidos”. 5

“Sólo los mexicanos salvarán las cosechas de California”; “Piden en los Estados

Unidos obreros mexicanos”; “Urgen braceros mexicanos en los Estados Unidos”,

señalaba el periódico Excélsior, así la prensa mexicana insistía en la necesidad de

que quienes emigraran fueran protegidos.

Tipos de convenios que se negociaron:

5
Torres, México en la…, 1979, P. 249.

9
El 23 de julio de 1942 se celebró el primer Convenio Bracero firmado por los

presidentes Franklin D. Roosevelt y Manuel Ávila Camacho, los principales puntos

fueron los siguientes:

a) Los braceros únicamente debían cubrir la escasez de mano de obra y no

desplazar a los trabajadores locales.

b) No podían ser reclutados por el ejército estadounidense.

c) c) No habría trato discriminatorio para los mexicanos.

d) Se garantizaba a los trabajadores mexicanos los gastos de

transportación de ida y vuelta, así como los viáticos durante el viaje.

e) La contratación se basaría en un contrato firmado por el trabajador y el

patrón.

f) Se les brindaría hospedaje en habitaciones en buenas condiciones;

g) Atención médica (prestaciones por enfermedades y accidentes de

trabajo).

El primer centro de contratación de braceros se estableció en la ciudad de

México en el Estadio Nacional en la colonia Roma, y poco tiempo después se

instaló en La Ciudadela. Ahí los procedimientos burocráticos para el reclutamiento

fueron motivo de varias manifestaciones de protesta por parte de los aspirantes,

quienes cansados de esperar en las grandes filas deseaban apresurar los lentos

trámites.6debido a la excesiva demanda de personas queriendo cruzara a la

frontera para librarse de la situación de pobreza por las que pasaban empezaron a

ser más frecuentes los trabajadores que pasaban de ilegales, y así los ejidatarios

6
González, “Tribulaciones de los braceros…”, 2008, P. 83.

10
de los campos agrícolas de Estados Unidos se aprovechaban de ellos y les daban

trabajos mal pagados y se ahorraban de las cosas impuestas por el gobierno para

la protección de los braceros, así naciendo los denominados espaldas mojada

(apodados así porque eran braceros ilegales que cruzaban nadando por el rio

bravo usualmente), que al final no solo se limitaban en la ayuda al campo sino que

se podían trabajar en diferentes cosas con un salario bajo, generando también una

competencia entre los mexicanos que ya estaban en estados unidos antes de que

sucediera esta masiva migración, reduciendo el salario ofrecido para cualquier

bando. “Los braceros inevitablemente sufrieron discriminación porque los

estadounidenses los consideraban indeseables, con malas costumbres, y porque

supuestamente corrompían los buenos valores tradicionales de la sociedad”. 7 Los

mexicanos aceptaban esas humillaciones porque buscaban mejorar su nivel de

vida.

Consecuencias y deportaciones:

Sobre las consecuencias negativas de este, las cuales con sus palabras

también fueron numerosas, y de las cuales destacan que la oferta fue mayor a la

7
Ibídem, P. 85.

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demanda, debido a que también estaba en ingresó de los migrantes ilegales y se

estima que durante los 22 años que duro el programa 5 millones de mexicanos

acudieron a este llamado, de forma legal e ilegal y consientes de esta

problemática ambos países no podían encontrar una solución, siendo así que

Estados Unidos culpo a México a que controlara el paso de indocumentados,

generando así la ley McCarran-Walter Act (1952), que decía que era ilegal ayudar,

acoger o encubrir a gente que haya ingresado indocumentada y cuando ambas

partes no pudieron llegar a un acuerdo en 1954, y se canceló el Programa de

manera unilateral, México tuvo que aceptar que era improcedente la pretensión de

impedir por la fuerza la salida de sus ciudadanos y Estados Unidos tuvo que

aceptar que no era conveniente llevar un programa bracero unilateral. 8 Esta

operación, conocida como el secado de mojados, no era otra cosa que una

amnistía realizada al vapor y una medida de presión coyuntural que no pudo durar

mucho tiempo. Incluso después de la operación wetback, en la que se deportaron

a cerca de un millón de indocumentados, el gobierno mexicano supo recomponer

las relaciones y renegociar el Programa. Obviamente, con todas estas presiones

México y los trabajadores iban perdiendo posiciones, pero el convenio se prorrogó

por diez años más.

Otra consecuencia fue los gastos, tramites y la excesiva burocracia en las

áreas fronterizas de ambos países, generando en México corrupción en estos

trámites y como consecuencia los migrantes tuvieron que llenar esos cuecos de

dinero dando de su propio bolsillo. También existió el problema de los centros de

8
Durand, Jorge, “El programa bracero (1942-1964). Un balance crítico” en Migración y desarrollo,
núm. 9, Julio-diciembre, 2007, P. 34.

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reclutamiento, aunque variaba de lugares la logística mexicana no siempre podía

con la cantidad de personas que acudían al llamado, así generando bastantes

problemas en la logística. El programa suponía una serie de gastos, para ambos

gobiernos y para los empleadores. Pero a pesar de las quejas y la resistencia a

conceder ciertas prestaciones, esto no significó la quiebra de ninguna empresa, ni

una escalada de salarios y precios de los productos agrícolas. Distintos reportes

de la época señalan que con el tiempo el Programa fue superando dificultades y

los empleadores empezaron a valorar sus ventajas y a cooperar decididamente

para su buen funcionamiento.9

Conclusión:

La mano de obra mexicana fue fundamental para abastecer a los

estadunidenses en el ámbito alimenticio y trabajos, de un gran esfuerzo ya que

sus hombres partieron hacia la guerra, así se puede decir que como tal el

9
Ibídem, P. 35.

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mexicano con sus materia prima y mano de obra hizo que estados unidos pudiera

mantener la gran masa de gente que tenía en esa época de crisis mundial, y fue

tanto el gusto de que los mexicanos le sirviéramos que duro incluso después de

que la guerra haya terminado, aunque la falta de organización por parte de el

gobierno mexicano por parte de los trámites para mandar a los braceros legales

provoco que una mayor cantidad de braceros ilegales cruzara y una deportación

masiva de estos en años próximos, habla de lo incapaz que era el gobierno ante

un programa de escalas inimaginables para la organización de ese entonces y

también que los ejidatarios de tierras y empresarios se aprovecharan la situación

desesperada de los braceros ilegales para conseguir trabajo, los hicieron trabajar

en exceso lavándose las manos y haciendo que esta “minoría” fuera discriminada,

supuestamente por afectar sus valores americanos, pero en negocio no impidió

que siguieran trabajando y hasta cierto punto si se mantuvieron las cosas

establecidas entre los dos países por un buen tiempo, la excesiva demanda de ir a

trabajar a este países supero a su logística. Así que concluyendo como tal no

pude comprobar al 100 mi hipótesis referente a sustentar los recursos bélicos,

pero en el aspecto alimenticio si fueron un gran soporte para la población

americana.

Bibliografía:

14
 Torres Ramírez, Blanca, México en la segunda guerra mundial, El

Colegio de México, México, 1979.

 Velázquez Flores, Rafael, Factores, bases y fundamentos de la

política exterior de México durante la Segunda Guerra Mundial, Tesis

de Licenciatura en Relaciones Internacionales, UNAM, México, 1988.

 González Camacho, Sandra, “Tribulaciones de los braceros y los

aspirantes a serlo”, en Boletín Del Archivo General De La Nación,

Vol. 6, Núm. 21, Julio – septiembre, 2008.

 Schaffhauser, Philippe, “La figura del migrante como estigma social:

el derrotero de los exbraceros trabajadores migratorios mexicanos

(1942-1964)”, Intersticios Sociales, Núm. 12, Julio-diciembre, 2016.

 Durand, Jorge, “El programa bracero (1942-1964). Un balance

crítico” en Migración y desarrollo, núm. 9, Julio-diciembre, 2007.

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