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BOBBIO – POLITICA

I. EL SIGNIFICADO CLASICO Y MODERNO DE POLITICA


El termino POLITICA se transmitió por Aristóteles en una obra que se considero el
primer tratado sobre la naturaleza, funciones y divisiones del estado y sobre las varias
formas de gobierno o ciencia del gobierno.
Se utiliza a la POLITICA para indicar la actividad o el conjunto de actividades humanas
que de alguna manera tienen como termino de referencia al estado. La política se ven
los actos como el ordenar (o prohibir) algo con efectos vinculantes para todos los
miembros de un determinado grupo social, el ejercicio de un dominio exclusivo sobre
un determinado territorio, el legislar con normas validas, la extracción y la distribución
de recursos de un sector al otro de la sociedad, etc. Es objeto por lo cual pertenecen a
la esfera de la “P” acciones como conquistar, defender, mantener, ampliar, reforzar,
trastornar el poder estatal, etc.

II. LA TIPOLOGÍA CLASICA DE LAS FORMAS DE PODER


El concepto de política entendida como actividad humana, está estrechamente
vinculada con el poder. El PODER se entiende como medios para obtener alguna
ventaja (Hobbes) o análogamente como el conjunto de los medios que permiten
conseguir los efectos deseados (Russell).
El poder se define a veces como una relación entre dos sujetos de los cuales uno
impone al otro su voluntad, esta definición como relación entre sujetos debe integrarse
con la definición del poder como posesión de los medios que permiten conseguir,
justamente “alguna ventaja” o “los efectos deseados”.
El poder político pertenece a la categoría del poder de un hombre sobre otro hombre
(no el poder del hombre sobre la naturaleza). Esta relación se expresa en formulas del
lenguaje político como relación entre gobernantes y gobernados, entre soberanos y
súbditos, entre el estado y los ciudadanos, ente el orden y obediencia, etc.
Hay formas del poder del hombre sobre otro hombre, el poder político, por ejemplo.
Es la tradición clásica que Aristóteles consideraba sobre todo de 3 formas; El poder
político, el paterno, y el poder despótico. Aristóteles distinguía el interés de aquel favor
en el cual es ejercido el poder.
El interés político en el interés de quien gobierna y quien es gobernado (su
fundamento es el consenso), el interés paterno se ejerce en favor del hijo (su
fundamento es la naturaleza), y el despótico en el interés del patrón (su fundamento es
el castigo por un delito cometido).
El hecho de que el poder político se caracterice respecto al paterno y del despolítico
por estar basado en el consenso o por estar dirigido en el interés de los gobernados es
un carácter distintivo del buen gobierno.
III. LA TIPOLOGIA MODERNA DE LAS FORMAS DE PODER
Con el objetivo de encontrar el elemento específico del poder político existe una
clasificación de las varias formas de poder. Pueden distinguirse tres grandes clases;
El poder económico; (una sociedad dividida entre superiores e inferiores); es el que se
utiliza la posesión de ciertos bienes necesarios, en una situación de escasez, para
incluir a aquellos que no los poseen a tener una cierta conducta, que consiste
principalmente en una ejecución de un cierto tipo de trabajo. Todo poseedor de bienes
abundantes es capaz de condicionar el comportamiento de quien se encuentra en
condiciones de debilidad y de penurias a través de la promesa y la atribución de
compensaciones.
El poder ideológico; (una sociedad dividida entre conocedores e ignorantes); se basa
en la influencia que las ideas formuladas de cierta manera, por una persona con una
cierta autoridad, de este tipo de condicionamiento nace la importancia social en todo
grupo organizado de aquellos que saben, de los conocedores, sean los sacerdotes de
las sociedades arcaicas o los intelectuales o los científicos de las sociedades
evolucionadas, porque a través de estos, se cumple el proceso de socialización
necesario para la cohesión y la integración del grupo.
El poder político; (una sociedad dividida entre fuertes y débiles); se basa en la
posesión de los instrumentos a través de los cuales se ejerce la fuerza física (las armas
de todo tipo y grado).
El poder político es en toda sociedad de desiguales el orden supremo, es decir, el poder
al cual todos los demás están de alguna manera subordinados. En las relaciones entre
los miembros de un mismo grupo social, solo el empleo de la fuerza física sirve, para
impedir la desobediencia de los subordinados. En las relaciones entre grupos sociales
diferentes, el instrumento decisivo para imponer la propia voluntad es el uso de la
fuerza, la guerra.
Esta distinción entre tipos de poder social se encuentra, la organización de las fuerzas
productivas, la organización del consenso y la organización de la coacción. La teoría
marxiana puede interpretarse de esta manera; comprende el sistema económico, la
superestructura, separándose en dos momentos diferentes, comprende el sistema
ideológico y el más propiamente jurídico político.
IV. EL PODER POLITICO
El hecho de que la posibilidad de recurrir a la fuerza sea el elemento distintivo del
poder político, no quiere decir que el poder político se resuelva en el uso de la fuerza.
No cualquiera grupo social capaz de usar, la fuerza, ejerce un poder político. Lo que
caracteriza el poder político es la exclusividad del uso de la fuerza.
En la hipótesis Hobbesiana, que está en la base de la teoría moderna del estado al paso
del estado naturaleza al estado civil es del estado apolítico al estado politico, se
produce cuando los individuos renuncian al derecho de usar uno cada uno su propia
fuerza que los iguala en el estado de naturaleza para colocarlo en manos de una sola
persona o de un solo cuerpo que de ahí en adelante será el único autorizado a usar la
fuerza respecto de los mismos.
En cuanto a la teoría de Marx y Engels, las instituciones políticas de una sociedad
dividida en clases antagónicas tiene la función principal de permitir a la clase
dominante mantener su dominio, puede ser alcanzado mediante la organización
sistemática y eficaz de la fuerza monopolizada ( y esta es la razón por la cual todo
estado es y no puede no ser una dictadura).
En esta dirección la definición de Max Weber “por estado debe entenderse una
empresa institucional de carácter político en la cual el aparato administrativo tiene con
éxito una pretensión de monopolio de la coerción física legitima, en vista de la
actuación de los ordenamientos. Las autoridades políticas, y solo ellas, tienen el
derecho predominante aceptado de usar la coerción y de ordenar obediencia en base a
la misma.
Algunas diferencias que habitualmente se atribuyen al poder político y que lo
diferencian de toda otra forma de poder son: la exclusividad, la universidad y la
inclusividad.
La exclusividad; La tendencia, que los detentadores del poder político manifiestan, a no
permitir en su ámbito de dominio la formación de grupos armados independientes y
además de tener bajo control la infiltración, o las agresiones de grupos políticos
externos.
La universidad; La capacidad que tienen los detentadores del poder político, y de tomar
decisiones legitimas y efectivamente operantes para toda la colectividad respecto de la
distribución u del destino de los recursos.
La inclusividad; La posibilidad de intervenir en toda esfera de posible actividad de los
miembros del grupo dirigiéndoles hacia un fin deseado o distrayéndolos hacia un fin no
deseado a través de normas primarias dirigidas a los miembros del grupo y de normas
secundarias dirigidas a funcionarios especializados, autorizados a invertir en el caso de
violación de las primeras.
V. EL FIN DE LA POLITICA
Una vez que se ha separado el elemento especifico de la política en el medio que
utiliza, caen las tradiciones, definiciones teológicas que tratan de definir la política
mediante el fin o fines que persigue. Respeto de la política y sus fines, si el poder
político es debido al monopolio de la fuerza, el poder supremo en un determinado
grupo social, los fines que se persiguen a través de la obra de los políticos son los fines
que un determinado grupo social considera de vez en vez preeminente. Esto quiere
decir que no son fines de la política establecidos para siempre, y mucho menos un fin
que incluye a todos y que pueda ser considerado el fin de la política. Puede definirse el
carácter político de un grupo social solo a través del medio, pero es en todo caso
especifico e indispensable para su esencia el uso de la fuerza.
Otra manera de evitar dificultades de una definición teológica de política es la de
diferenciar como aquella forma de poder que no tiene otro fin que el poder mismo. A
esta manera de definir la política puede objetársele que no define tanto una forma
especifica de poder sino un modo especifico de ejercerlo, y en consecuencia se aplica
igualmente bien a cualquier forma de poder.

VI. LA POLTICA COMO RELACION AMIGO – ENEMIGO


Entre las más conocidas y discutidas definiciones de la política debe considerarse la de
Carl Schmitt, según la cual la esfera de la política coincide con la esfera de la relación
amigo enemigo. El campo de origen y de aplicación de la política sería el antagonismo y
su función consistirá en la actividad de asociar y defender a los amigos y de dividir y
combatir a los enemigos.
Schmitt y Freund parecen estar de acuerdo en estos puntos: la política tiene que ver
con la conflictividad humana; hay varios tipos de conflictos, sobre todo hay conflictos
agonistas y conflictos antagónicos: la política cubre el campo en el que se desarrollan
conflictos antagónicos.
Dice Schmitt “La contraposición política es la intensa y extrema de todas y cualquier
otra contraposición concreta es tanto más política cuanto más se acerca el punto
extremo el de reagrupamiento basado en los conceptos amigo enemigo”
Dice Freund “Toda divergencia de intereses puede a cada momento transformarse en
rivalidad o en conflicto, y este conflicto, desde el momento que asume el aspecto de
una prueba de fuerzas entre los grupos que representan estos intereses, se convierte
en político”.
Pero apenas se intenta entender en que consiste esta particular intensidad y por lo
tanto se llega a la conclusión de que el elemento distintivo esta en el hecho de que hay
conflictos que no pueden resolverse, en ultima instancia, mas que con la fuerza o por
lo menos que justifica la utilización de la fuerza para dar fin a la contienda. El conflicto
por excelencia del cual tanto Schmitt como Freund exploraron sus definiciones de
política, es la guerra. La definición de política en términos de amigo enemigo no es de
ninguna manera incompatible. Sino que es una especificación y por lo tanto, el ultimo
análisis, una confirmación. En cuanto el poder político se distingue por el instrumento
que utiliza para alcanzar los propios fines, es la fuerza física, este es el poder el cual se
recurre para resolver los conflictos que si no se resolvieran provocarían la disgregación
del estado y el orden internacional.
VII. LO POLITICO Y LO SOCIAL
Contrariamente a la traducción clásica según la esfera de la política entendida como
toda esfera de todo lo que afecta a la vida de la sociedad, incluye todo tipo de
relaciones sociales, de tal modo que lo político coincide con lo social, la forma que se
ha analizado la categoría de la política es sin duda reductiva; resolver, como se ha dicho
la categoría politica en la actividad que directa o indirectamente tiene una relación con
la organización del poder coactivo significa restringir el ámbito de lo político respecto a
lo social, rechazar la coincidencia total del primero con el segundo.
El problema fundamental del estado y de la política es para Hobbes, el problema de las
relaciones entre protestas, de una parte y libertad y la religión por otra.
La libertad; Indica el espacio de las relaciones naturales, donde se desarrolla la
actividad económica de los individuos, el estado de naturaleza.
La religión; Indica el espacio reservado a la formación y la expansión de la vida
espiritual, cuya concentración se produce de una sociedad que por su naturaleza es
diferente de la sociedad política y que no se puede confundir con la misma.
En la filosofía política moderna surgen dos tipos ideales de estado; el estado absoluto y
el estado liberal.
El absoluto tiende a extender, el segundo tiende a restringir respecto a la sociedad
económica y la sociedad religiosa. El fin de la política significa exactamente fin de una
sociedad para cuya coerción son necesarias relaciones de poder político. Fin de la
política significa pura y simplemente el fin de esa forma de organización social que se
sostiene en el uso exclusivo del poder coactivo.

VIII. POLITICA Y MORAL


La política y la moral tiene en común el dominio sobre el cual se extienden, que es el
dominio de la acción y de la praxis humana. Se distinguen entre si por el distinto
principio o criterio de valoración y de justificación de sus respectivas acciones, lo que
es obligatorio en moral no quiere decir que es obligatorio en política y aquello que es
licito en política no esta dicho que sea licito en moral; o que puede haber acciones
morales que son impolíticas y acciones políticas que son inmorales.
Lo que se ha dado en llamar la autonomía de la política no es más que el
reconocimiento de que el criterio de acuerdo con el cual se considera buena o mala
acción política, (acción política; una acción que tenga por objeto por sujeto a las polis)
es distinto del criterio de acuerdo con el cual se considera buena o mala una acción
moral. El criterio para juzgar una acción como moralmente buena o mala es respecto
de una norma cuyo ordenamiento es considerado categórico, independientemente del
resultado de la acción, (“haz lo que debes y que suceda lo que pueda”), el criterio con
el cual se juzga la acción como políticamente buena o mala es el resultado, pura y
simplemente (“haz lo que debes para que suceda lo que quieres”). Los dos criterios
inconmensurables. Esta inconmensurabilidad se expresa mediante la afirmación de que
en política vale el dicho “el fin justifica los medios”; norma que ha encontrado en
Maquiavelo una de sus máximas expresiones y en las acciones de todos los hombres, y
normas de príncipes, donde no hay indicio al cual reclamar.
IX. LA POLITICA COMO ETICA DEL GRUPO
El criterio de la ética de la convicción se emplea habitualmente para juzgar acciones
individuales, mientras que el criterio de la ética de la responsabilidad se emplea
generalmente para simplificar acciones de grupo o cumplidas por un hombre y por
cuenta del grupo, ya sea este el pueblo, la nación, la iglesia, la clase, el partido, etc. La
diferencia entre moral y política, o entre ética de la convicción y ética de la
responsabilidad, le corresponde también la diferencia entre la ética individual y ética
de grupo. Lo que es obligatorio para el individuo no significa que es obligatorio para el
grupo del cual el individuo forma parte. Esta diferencia encuentra su explicación en la
consideración de que el caso de violencia individual casi nunca puede recurrirse al
criterio de justificación de la violencia como extrema ratio (salvo en el caso de legitima
defensa), mientras que en las relaciones entre grupos el recurso a la violencia
justificada como extrema ratio es habitual. No hay necesidad de la violencia individual
porque es suficiente de la violencia colectiva: la moral puede de esa forma permitirse
ser severa con la violencia individual porque se basa en la aceptación de una
convivencia sostenida sobre la practica continua de la violencia colectiva.
Por razón de estado se entiende ese conjunto de principios y de normas de acuerdo a
las cuales acciones que no serían justificadas si las cumplieran un individuo son solo
justificadas sino inclusive en algunos casos exaltadas y glorificadas si las realiza el
príncipe o cualquiera que ejerce el poder en nombre del estado. La afirmación de que
la política es la razón de estado encuentra una perfecta correspondencia en la
afirmación de que la moral es la razón del individuo. Pero cada vez que un grupo social
actúa en defensa propia contra otro grupo social se remite a una ética diferente de que
la que en general es valida para el individuo, es decir a una ética que corresponde a la
misma lógica de la razón de estado.

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