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¿Qué es la tolerancia?

La palabra tolerancia puede tener múltiples significados, que poseen en común un mismo
aspecto: el de admitir y soportar las diferencias, esto es, lo contrario a las reacciones extremas,
violentas, intolerantes.

Por ejemplo, se llama tolerancia a la capacidad del cuerpo humano de lidiar con ciertas
sustancias sin desencadenar una respuesta inmunitaria, o también al margen de error que, a la
hora de fabricar un producto, se considera aceptable o natural del mismo proceso.

Sin embargo, el sentido más común e importante de este término es el de la tolerancia social,
que es la capacidad de una sociedad o un gobierno para respetar las ideas, preferencias y
comportamientos de los demás, especialmente de quienes tienen un trasfondo cultural, étnico
o político diferente.

Este último uso de la palabra tuvo su origen en la Francia de finales del siglo XVI, en el marco
de las Guerras de religión en las que se enfrentaron los católicos y los protestantes.
Inicialmente, tuvo un significado negativo o peyorativo, ya que expresaba la obligación de los
bandos de admitir la existencia del otro, al ser incapaces de erradicarlo por la fuerza.

Sin embargo, en el siglo XVIII el movimiento ilustrado le dio un sentido mucho más positivo a la
aceptación de las creencias ajenas, y la tolerancia pasó a ser uno de los valores fundamentales
del movimiento.

Hoy en día, la tolerancia se comprende como la capacidad para vivir armónicamente entre
personas que provienen de contextos culturales o étnicos distintos, o que profesan religiones e
ideologías políticas diferentes. Es uno de los valores más promovidos mundialmente, en
especial en las naciones multiculturales que reciben importantes oleadas migratorias o de
refugiados.
Tipos de tolerancia
Podemos hablar de varios tipos de tolerancia, de acuerdo al ámbito específico al que aplique
cada uno:

Tolerancia religiosa. Aquella que se refiere a la permisividad del Estado respecto a la práctica
de religiones diferentes a la oficial, o bien a la aceptación de una sociedad de los valores
propios de una tradición mística o religiosa minoritaria. Es un rasgo propio de las naciones que
separaron exitosamente iglesia y Estado, no así de las teocracias ni de los regímenes
fundamentalistas.

Tolerancia civil. Se refiere en este caso a la aceptación de prácticas y conductas consideradas


contrarias a la ética o la moral de la comunidad mayoritaria, o sea, de la que detenta y
administra el control social. Fundamentalmente, se trata de una conducta que es vista con
malos ojos, pero que se acepta porque no existe una alternativa viable.

Tolerancia política. La tolerancia política tiene que ver con la convivencia de distintas fuerzas
ideológicas en el seno de un mismo Estado, algunas ejerciendo el gobierno y otras la oposición,
sin que ello conduzca a enfrentamientos violentos, a la persecución o la ilegalización,
especialmente, de mano de quienes detentan el poder político.
Importancia de la tolerancia
Un filósofo de la Ilustración como John Locke (1632-1704), defendía en su Carta sobre la
tolerancia la importancia de la diversidad de ideas y del espíritu crítico, alejado de todo
fanatismo, como un elemento necesario para el progreso. La Ilustración buscó la tolerancia
como opuesto al fanatismo religioso y el oscurantismo extendidos por la Europa medieval.

Otro filósofo de importancia en occidente, Claude Levi-Strauss (1908-2009), advertía que el


progreso no es exclusivo de ninguna cultura, sino que es fruto justamente del intercambio y el
florecimiento de las diferentes culturas. De este modo, la tolerancia es un valor que nos
permite lograr una apertura hacia el otro, comprender y valorar sus posiciones, sin pensarlas
como una amenaza a las propias.

Levi-Strauss, sin embargo, se mostró pesimista en la materia, ya que el roce y la fricción


intercultural también genera enormes conflictos y enfrentamientos, que hasta cierto punto
parecen ser inevitables en el ser humano. Sin embargo, apelar a la razón es el único método
que puede encauzar dichos conflictos y tornarlos, de algún modo, a nuestro favor.

En el mundo intercultural y global de inicios del siglo XXI, por un lado, la tolerancia se
encuentra tanto exaltada insistentemente. Por otro lado, está bajo ataque de los sectores más
radicales del nacionalismo, especialmente en las naciones que han acogido grandes cantidades
de refugiados de otras latitudes, como los provenientes de Oriente Medio a raíz de la seguidilla
de cruentas guerras que desde finales del siglo XX experimenta la región.
Ejemplos de tolerancia
tolerancia ejemplos

Integrantes de diferentes religiones pueden tolerarse y aceptar sus diferencias.

Como se verá a continuación, no todos los casos de tolerancia son moralmente admirables, al
menos según los estándares de hoy. Algunos ejemplos históricos de tolerancia son:

La tolerancia de la esclavitud. La esclavitud tiene una larga y triste presencia en la historia,


pero al mismo tiempo han existido desde siempre sus críticos: voces que se oponían a ella y la
consideraban inmoral, que eventualmente acabaron triunfando. Pero la esclavitud pudo
sobrevivir durante tantos siglos por la tolerancia de parte de quienes estaban al tanto de que
era una práctica cuestionable, pero soportaban que fuera una actividad económica como
cualquier otra.

El diálogo interreligioso. Se sabe que las religiones predican la verdad divina, y que en su
mayoría se muestran intolerantes respecto a los demás credos. Esto motivó guerras y
enfrentamientos a lo largo de la historia. Sin embargo, ha habido épocas en que la tolerancia
ha reinado y se ha producido un enriquecedor diálogo entre tradiciones religiosas: entre el
islam y el cristianismo, entre protestantismo y catolicismo, etc. Esto es posible sólo si se
respeta el derecho del otro a pensar que maneja la verdad.

El funcionamiento democrático pleno. Cuando una democracia es saludable, en su ejercicio


político reina siempre la tolerancia política: no hay persecución de la disidencia, ni
criminalización de la protesta, ni prohibición de militancias, en general. Ello, no obstante,
implica una cierta reciprocidad: no se puede ser tolerante con quienes promueven la
radicalización y la intolerancia, ni con quienes aspiran a llegar al poder para vulnerar,
justamente, la tolerancia democrática.
INTRODUCCIÓN

En este trabajo desarrollaremos el tema tolerancia, concepto, tipos, importancia y ejemplos.


Se llama tolerancia a la capacidad del cuerpo humano de lidiar con ciertas sustancias sin
desencadenar una respuesta inmunitaria, o también al margen de error que, a la hora de
fabricar un producto, se considera aceptable o natural del mismo proceso.

Tolerancia, la importancia de la diversidad de ideas y del espíritu crítico, alejado de todo


fanatismo, como un elemento necesario para el progreso. La Ilustración buscó la tolerancia
como opuesto al fanatismo religioso y el oscurantismo extendidos por la Europa medieval.
CONCLUSIÓN

La tolerancia se comprende como la capacidad para vivir armónicamente entre personas que
provienen de contextos culturales o étnicos distintos, o que profesan religiones e ideologías
políticas diferentes. Es uno de los valores más promovidos mundialmente, en especial en las
naciones multiculturales que reciben importantes oleadas migratorias o de refugiados.

La tolerancia, es la cortesía de la inteligencia, trata a los demás como quieras que te traten a ti.

¨El único y verdadero espíritu de tolerancia consiste en tolerar conscientemente la mutua


intolerancia¨

(Samuel Taylor Coleridge)


Ministerio De Educación y Ciencias

Escuela Básica Nº 1330 Defensores Del Chaco.

Formación Ética y Ciudadana.

LA TOLERANCIA

MARIA PAZ SANCHEZ AREN

ARNALDO INSFRÁN

2022

AREGUÁ – YUQUYRY
ANEXOS

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