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Universidad Nacional Multidisciplinaria

Ricardo Morales Avilés


Recinto - Masaya

"Asegurando la calidad en la formación de los profesionales"

Facultad de Ciencias económicas y Administrativas

Estructura económica de Nicaragua

Tema a desarrollar:
● Dotación de los factores productivos
Docente:
● Orlando Ñurinda

Integrante:
● Neyman Antonia olivas Sánchez

Carrera:
● Banca y finanzas

Turno:
● sabatino

Masaya marzo 08- 03- 2023


OBJETIVOS ESPECÍFICOS
Al culminar la unidad el estudiante.

1.Identificar la riqueza natural que posee la economías nicaragüense para


comprender sus potencialidades de desarrollo.

2.Analizar el crecimiento y distribución población para cuantificar la población


económica activa con que cuenta el país en cada uno de los sectores económicos.

3.Determinar los recursos de capital con que cuenta el país para su desarrollo.
Índice

1. Introducción

2.Población y Desarrollo

3. Distribución territorial de la población desigual distribución población


urbana y población rural.

4. Población económicamente activa según sectores económicos,según


categoría ocupacionales sector informal urbano el desempleo y pobreza.

5. Conclusión.

6. Bibliografía.
Introducción

El presente documento es una versión preliminar de la propuesta que el Centro


Latinoamericano y Caribeño de Demografía (CELADE) - División de Población de la
CEPAL está elaborando para generar un sistema de indicadores para el
seguimiento de las metas del Programa de Acción de la Conferencia Internacional
sobre la Población y el Desarrollo (CIPD) en los países de América Latina y el
Caribe. El CELADE, en estrecha coordinación con el Fondo de Población de las
Naciones Unidas (FNUAP), desarrolla un conjunto de actividades que buscan
responder a la resolución del Comité Especial sobre Población y Desarrollo del
vigésimo octavo período de sesiones de la CEPAL, en la que se encomendó al
CELADE apoyar a los países en la elaboración de sus sistemas de información con
indicadores que permitan monitorear y evaluar la implementación del Programa de
Acción y del Plan de Acción Regional.

Esta resolución se adoptó luego que el CELADE –dando cumplimiento a una


resolución de la Mesa Directiva Ampliada del Comité Especial sobre Población y
Desarrollo de diciembre de 1998– presentó en el vigésimo octavo período de
sesiones de la CEPAL el documento Sistema de indicadores para el seguimiento y
la evaluación de las metas del Programa de Acción de la Conferencia Internacional
sobre la Población y el Desarrollo para los países de América Latina y el Caribe. Un
primer borrador con fines de análisis. (CEPAL, 2000), cuyo propósito era generar
una base común para diseñar un sistema de indicadores, lo que finalmente resultó
un conjunto de 37 indicadores sobre los cuales existe consenso; se agregaron,
además, algunos elementos de base para determinar indicadores
cualitativos.Encomienda al Comité Especial dar seguimiento, de manera continua y
sistemática, a la ejecución del Programa de Acción de la Conferencia Internacional
sobre la Población y el Desarrollo y del Plan de Acción Regional, tomando como
punto de referencia la propuesta inicial de un sistema regional de indicadores
preparada por el Centro Latinoamericano y Caribeño de Demografía - División de
Población de la CEPAL que, ajustándose a las características de América Latina y el
Caribe, alude a los compromisos adquiridos en las cumbres mundiales celebradas
en la década de 1990 y, muy especialmente, en la Conferencia Internacional sobre
la Población y el Desarrollo
2.Población y Desarrollo

La misión de la CEPAL en el área de Población y Desarrollo es ampliar y fortalecer


la capacidad de los países de la región para describir, analizar, entender y atender
la dinámica demográfica y sus interrelaciones con el desarrollo económico y social,
incorporando los factores poblacionales en los programas y políticas públicos,
especialmente los dirigidos a la reducción de la pobreza y la desigualdad.

Conjunto de publicaciones sobre temas relacionados con las interrelaciones entre la


dinámica demográfica y el desarrollo social y económico en América Latina.
Responsable: CELADE-División de Población y Desarrollo. ISSN impreso: 1680-
8991 ISSN electrónico: 1680-9009.

Los clásicos basaban su opinión en que para crecer sólo se necesitaba aumentar
alguno de los factores productivos: recursos naturales, trabajo o capital. Por tanto, al
aumentar la población, aumentaría el factor trabajo y, con ello, la producción de
bienes y servicios.

Estos economistas también defendían que el crecimiento demográfico era en sí


mismo un estímulo para utilizar técnicas de producción mucho más productivas. Así,
si la población crece, las empresas se vuelven mucho más eficientes en sus
métodos productivos, lo que repercute en que la cantidad de bienes y servicios que
produzcan crezca, y esto, evidentemente, se traduce en crecimiento económico.

Existe otra corriente de opinión que es justo la contraria: el crecimiento de la


población y el crecimiento demográfico no están relacionados de ninguna de las
maneras, sino que son otros los factores que dan lugar a que las economías
crezcan.

Para estos economistas, el crecimiento económico depende de otros factores como


la tecnología, la inversión en formación profesional y educación, la inversión en
capital, etc, de forma que son estas variables y no el crecimiento demográfico en sí
las que provocan que aumente la producción de bienes y servicios.
Existirá alguna relación entre el crecimiento de la población y el crecimiento
económico? En la práctica podría parecer que sí. Países como China o India han
aumentado enormemente su población a la vez que las tasas de crecimiento de sus
respectivas economías se han disparado. Sin embargo, la relación entre ambas
variables no está demasiado clara.

Es posible que al aumentar la población de un país concreto durante un periodo de


tiempo mas o menos continuo, esto tenga como consecuencia que su situación
económica mejore. Sin embargo, el razonamiento también podría ser justo al
contrario, es decir, que el crecimiento económico y la buena marcha de la economía
anime a las familias a tener más hijos.

Como vemos, las posturas sobre la relación entre crecimiento económico y


crecimiento demográfico son encontradas. En líneas generales existen tres tipos de
posicionamientos al respecto: los que defienden que sí existe relación, los del no y
los seguidores de Thomas Malthus.

Los defensores de este razonamiento afirman que el aumento de la población de un


país constituye un estímulo bastante importante para favorecer el crecimiento
económico del mismo. Esta era la postura mantenida por muchos de los
economistas clásicos. El más importante de ellos, Adam Smith.
Los clásicos basaban su opinión en que para crecer sólo se necesitaba aumentar
alguno de los factores productivos: recursos naturales, trabajo o capital. Por tanto, al
aumentar la población, aumentaría el factor trabajo y, con ello, la producción de
bienes y servicios.

Estos economistas también defendían que el crecimiento demográfico era en sí


mismo un estímulo para utilizar técnicas de producción mucho más productivas. Así,
si la población crece, las empresas se vuelven mucho más eficientes en sus
métodos productivos, lo que repercute en que la cantidad de bienes y servicios que
produzcan crezca, y esto, evidentemente, se traduce en crecimiento económico.

3. Distribución territorial de la población desigual distribución población


urbana y población rural.

La población en Nicaragua es de 4.357.099[1], el 45,1% está por debajo de la


barrera de los 15 años, el 51,4% tiene entre 15 y 64 años y el 3,5% 65 años y más.
Según estos antecedentes, se puede decir que Nicaragua posee una estructura
poblacional joven, la esperanza de vida estimada para el año 2000, es de 72 años
para las mujeres y de 67 años para los hombres. En el modelo de transición
demográfica, Nicaragua se ubica en una segunda etapa, es decir moderada tasa de
mortalidad y alta natalidad[2]. La población se distribuye según zona geográfica, en
45,6% rural y 54,4% urbana.
La tasa de crecimiento poblacional ha mostrado un ritmo sostenido desde 1950 del
orden del 3% promedio anual, con una tasa bruta de natalidad[3] para ese mismo
periodo de 36,1/000. Las mujeres constituyen el 50,8%[4] del total de la población,
con un índice de feminidad[5] de 101,1. El 18,9% de los hogares rurales está en
manos de mujeres. En hogares no pobres la jefatura femenina corresponde al
17,7%, en tanto que en hogares pobres alcanza el 19,3%[6].

La desocupación, el déficit en salud y educación y la falta de acceso a la tierra son,


en resumen, los factores que han incidido en la migración campo-ciudad. Cuando la
mujer migra, se incorpora en actividades no calificadas. Las que permanecen en las
zonas rurales asumen además de sus actividades tradicionales, la responsabilidad
de las tareas productivas.

Un 69% de la población de Nicaragua es mestiza, un 17% es blanca, un 9% negra y


un 5% indígena. En 1996, la población indígena se estimaba en 183.000 habitantes,
con cerca de un 70% viviendo en áreas rurales. Los seis grupos étnicos de
Nicaragua son: Mestizos, Mestizos, Rama, Mayangna o Sumus, Creole y Garífunas.
De estos grupos, los últimos cinco son los más antiguos pobladores de la Costa
Atlántica nicaragüense, llamada también Costa Caribe.

Educación

En Nicaragua, la tasa de analfabetismo global de la población mayor de 10 años en


el año 2001, fue cercana al 20,5%, siendo mayor en el sector rural donde asciende
a 32,9%. Este indicador no presenta diferencias sustantivas entre hombres y
mujeres: 32,5% y 33,3%, respectivamente

En el área rural, la población de 20 y 21 años de edad que completó 12 años de


estudio, corresponde al 4% de las mujeres y al 5,7% de los hombres. El promedio
de años de estudio alcanzado por la población rural de 25 a 59 años en 1998, fue de
3,2 años; tanto hombres como mujeres alcanzaron un promedio de 3,2 años.

Trabajo

En Nicaragua la tasa rural de participación en la actividad económica para 1999


correspondió a 30,8% para las mujeres y 89,9% para los hombres. Las mujeres
rurales realizan actividades pecuarias y agrícolas tales como el cuidado del ganado
y aves de corral, post-cosecha, recolección y selección de granos, entre otras. Si
bien la participación de las mujeres ha aumentado en las últimas décadas en
América Latina, la mayoría se ubica en sectores de baja productividad[8], siendo
más evidente esta situación en el área rural, donde las mujeres trabajan en empleos
a tiempo parcial, o subcontratadas y en actividades que requieren bajos niveles de
capacitación. Del 24,5% de las mujeres que trabajan en la zona rural, el 6,7% lo
hace sin recibir remuneración[9]. De acuerdo al informe de Población 2001 de las
Naciones Unidas, más de la tercera parte de la ocupación de las mujeres se da en
trabajos no remunerados. Las mujeres rurales ocupadas se distribuyen en el sector
de servicios comunales y personales (33,7%), seguido de los sectores de comercio,
hotelería y restaurantes (28,2%) , agricultura y pesca (27,6%) e industria (10,2%)
[10].

Definición:

Es una medida del grado de concentración de la población urbana y se calcula


haciendo la distribución relativa de la población urbana según tamaño de las
localidades consideradas como urbanas.

El análisis de los factores que orientan la ubicación y patrones de poblamiento del


territorio nacional, sirve para apoyar la elaboración de políticas públicas que
fortalezcan la planeación regional y urbana, por ello, es importante conocer y
analizar los determinantes geográficos, económicos, sociales, políticos, etc. que
influyen en la dinámica demográfica, y que se traducen en diversas realidades, que
van desde la dispersión de la población en pequeñas localidades rurales, hasta la
acentuada concentración de las grandes ciudades y metrópolis. Estas diferencias
son el trasfondo de la desigualdad, exclusión e inequidad, los cuales permanecen
como algunos de los retos más importantes por atender en México
Dónde quiere vivir la gente? Esta pregunta no tiene una respuesta clara. Muchos
factores contribuyen en definir la elección de los lugares de residencia preferidos: la
posibilidad de quedarse cerca del propio lugar de trabajo o de otros centros de
interés, las preferencias hacia entornos donde viven otros ciudadanos con los
cuales compartir las mismas costumbres (teatros, museos, etc.) o que sean de la
misma edad promedio o también querer quedarse lejos de todo centro urbano y
disfrutar de la naturaleza.
 
Este estudio propone una nueva metodología para poder abordar esta cuestión
desde una perspectiva empírica. La literatura económica, normalmente, formaliza el
problema de la elección de lugares de residencia utilizando la idea determinística de
distancia, según la cual las personas eligen su localización en función de la
reducción del coste de transporte para llegar a los sitios de interés. Este enfoque
todavía tiene varias limitaciones y es por esta razón que aquí introducimos una idea
nueva de distancia subjetiva. Nuestra novedad está en modelar la idea de
proximidad no sólo con una variable que represente la distancia física. En nuestra
contribución, la importancia de la distancia física se corrige por otras variables que
pueden tener una gran rol en definir la elección de los lugares de residencia. De
esta manera se modela un mecanismo de interacción entre las variables y el
resultado final (es decir la selección del lugar de residencia) será la combinación
conjunta del papel jugado por cada una de estas variables.
 
Proponemos también una aplicación empírica de nuestro método de análisis
haciendo referencia a la distribución residencial de la población en Massachusetts.
Nos proponemos identificar la distribución de la población de dicho estado
considerando Boston como el principal polo de atracción y así hallar en qué medida
los distintos factores elegidos concurren en determinar dicha distribución. Aunque la
distancia física desde Boston sigue apareciendo como variable dominante, otros
factores como el nivel de renta, la composición étnica, el nivel de educación de las
demás personas localizadas en el mismo entorno así como la presencia de
atracciones paisajísticas juegan un papel importante.
 
Los resultados de nuestras estimaciones permiten alcanzar resultados cuantitativos
novedosos. Claramente la distancia física y la composición étnica del entorno son
las dos variables principales que marcan la distribución de la población. En
particular, a la hora de elegir sus lugares de residencia, la ciudanía valora mucho la
proximidad a Boston pero, al mismo tiempo, esta prioridad está vinculada también a
la propensión a instalarse en áreas donde viven otros individuos pertenecientes al
mismo grupo étnico. En otras palabras, la dimensión etno-racial compite con la
distancia física: a veces las preferencias étnicas pueden más que compensar los
costes de trasporte adicional que un ciudadano debe asumir para residir en un
entorno étnicamente afín a sus preferencias pero lejano de su lugar de trabajo.
4.Población económicamente activa según sectores económicos, según
categoría ocupacionales sector informal urbano el desempleo y pobreza.

Población Económicamente Activa (PEA) o Fuerza de Trabajo: está compuesta por


todas las personas que aportan su trabajo (lo consigan o no) para producir bienes y
servicios económicos, definidos según y como lo hacen los sistemas de cuentas
nacionales durante un período de referencia determinado.

Tegucigalpa, 31 ene (EFE).- La tasa de desempleo en Nicaragua cerró en 2,6 % en


2022, un 0,9 % menor a la de un año antes (3,5 %), informó este martes el
presidente del Banco Central nicaragüense, Ovidio Reyes.

"Al cierre de diciembre de 2022, la tasa de desempleo se ubicó en 2,6 %, 2,2 puntos
porcentuales inferior a la observada previa a la pandemia (primer trimestre de
2020)", afirmó el titular del banco emisor durante una comparecencia ante el pleno
de la Asamblea Nacional (Parlamento).

Además, indicó el funcionario, "el subempleo se redujo hasta 38,3 %".

Es decir, según los datos oficiales, la tasa neta de ocupación en Nicaragua cerró en
97,4 %, 0,9 % puntos porcentuales más que a diciembre de 2021 (96,5 %).

Además, subrayó que la afiliación al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social


(INSS) aumentó en 13.430 trabajadores en 2022, lo que supuso un incremento en el
indicador de formalidad laboral de 23,4 % a 23,5 % de la PEA.EFE

En el segundo trimestre de 2022, la tasa global de participación laboral se ubicó en


66.4%, mostrando una reducción de 0.1 puntos porcentuales con respecto al mismo
trimestre de 2021 y de 0.2 puntos porcentuales con respecto al I trimestre de 2022.

La tasa de desempleo abierto en el segundo trimestre de 2022 se ubicó en 3.1%, en


comparación con el mismo trimestre de 2021 se observa una reducción de 2.0
puntos porcentuales y de 0.7 puntos porcentuales en relación con el I trimestre de
2022.
La elaboración de políticas sólidas basadas en pruebas se basa en la identificación
y cuantificación no sólo de las mejores prácticas en el mercado laboral, sino también
de las ineficiencias, como subutilización de la fuerza de trabajo y los déficits de
trabajo decente. Este es el primer paso para diseñar políticas destinadas a mejorar
el bienestar de los trabajadores y, al mismo tiempo, promover el crecimiento
económico. Esta visión amplia del mundo del trabajo exige una recopilación,
organización y análisis exhaustivos de la información sobre el mercado laboral. En
este contexto, las estadísticas de la población activa y las bases de datos de
ILOSTAT correspondientes sirven de base para el seguimiento y la evaluación de
muchas de las cuestiones pertinentes relacionadas con el funcionamiento de los
mercados de trabajo. 

Esta descripción se centra en los indicadores de población activa (es decir, las
medidas ocupación y subutilización de la fuerza de trabajo ) y se aplica a las
siguientes bases de datos de ILOSTAT:

●Estadísticas de población activa (EPA)

●Estadísticas de población activa a corto plazo (STLFS)

●Estadísticas del mercado laboral rural y urbano


(RURBAN) 

●Estadísticas del mercado laboral de los jóvenes (YouthSTART) - consulte la


descripción de la base de
datos YouthSTART para ver las descripciones específicas de los jóvenes

●Indicadores del mercado laboral de la discapacidad (DLMI): consulte la descripción


de la base de datos de la DLMI para ver las descripciones específicas de la
discapacidad

Indicadores de educación y desajuste (EMI) - consulte la descripción de la base de


datos EMI para ver las descripciones específicas de educación y desajuste
Consulte también las descripciones de los indicadores de ganancias y horas de
trabajo.

Los indicadores de la EPA y de las bases de datos conexas enumeradas


anteriormente se basan en los conceptos y definiciones de la Resolución relativa a
las estadísticas de la población económicamente activa, ocupación, desocupación y
el subempleo, adoptada por la 13ª Conferencia Internacional de Estadísticos del
Trabajo (CIET) en 1983. Esto difiere de los indicadores de la base de datos Work
Statistics - 19th CIET (WORK), que se basan en las normas de la 19ª CIET
adoptadas en 2013. Aunque estas últimas son las normas estadísticas más
recientes, la mayoría de los países siguen actualmente las normas de la 13ª CIET .
Los usuarios también deben tener en cuenta que la mayoría de los datos de la base
de datos WORK no son comparables con los de las bases de datos basadas en la
13ª CIET. Para más información, consulte la página Guía rápida para entender el
impacto de las nuevas normas estadísticas en las bases de datos de ILOSTAT.
La tasa de participación de la población activa es una medida de la proporción de la
población en edad de trabajar de un país que participa activamente en el mercado
laboral, ya sea trabajando o buscando trabajo; proporciona una indicación del
tamaño de la oferta de mano de obra disponible para participar en la producción de
bienes y servicios, en relación con la población en edad de trabajar. El desglose de
la población activa (antes conocida como población económicamente activa) por
sexo y grupo de edad ofrece un perfil de la distribución de la población activa dentro
de un país.

ILOSTAT contiene estadísticas de fuentes nacionales sobre las tasas de


participación de la población activa por sexo y edad, zonas rurales/urbanas y
educación. ILOSTAT también incluye estimaciones de la OIT sobre las tasas de
participación en la fuerza de trabajo por sexo y edad, que contienen tanto datos
informados a nivel nacional como datos imputados, y donde todas las estimaciones
son nacionales, lo que significa que no hay limitaciones geográficas en la cobertura.

La tasa de participación de la población activa es el número de personas en la


población activa como porcentaje de la población en edad de trabajar. La población
activa es la suma del número de personas empleadas y del número de personas
desempleadas.2 adoptada por la 19ª Conferencia Internacional de Estadísticos del
Trabajo, Ginebra, octubre de 2013 Por lo tanto, la medición de la tasa de
participación de la fuerza de trabajo requiere la medición tanto de ocupación como
de desocupación. ocupación comprende todas las personas en edad de trabajar que
durante un período breve especificado, como una semana o un día, se encontraban
en las siguientes categorías: a) ocupación remunerado (ya sea en el trabajo o con
un empleo pero no en el trabajo); o b) autoocupación (ya sea en el trabajo o con una
empresa pero no en el trabajo). Los desempleados comprenden todas las personas
en edad de trabajar que: a) no tenían trabajo durante el periodo de referencia, es
decir, no estaban en ocupación ni de ocupación remunerado; b) estaban disponibles
para trabajar, es decir, estaban disponibles para ocupación ocupación remunerado
durante el periodo de referencia; y c) buscaban trabajo, es decir, habían tomado
medidas específicas en un periodo reciente especificado para buscar ocupación
ocupación remunerado.

La población en edad de trabajar es la población que está por encima de la edad


legal de trabajar, pero a efectos estadísticos comprende a todas las personas por
encima de un umbral de edad mínimo especificado para el que se realiza una
encuesta sobre la actividad económica. Para promover la comparabilidad
internacional, la población en edad de trabajar suele definirse como todas las
personas de 15 años o más, pero esto puede variar de un país a otro en función de
las leyes y prácticas nacionales (algunos países también aplican un límite de edad
superior). 
La tasa de inactividad es igual a 100 menos la tasa de participación de la población
activa, donde la tasa de participación se expresa como un número entre 0 y 100.
ILOSTAT también contiene estadísticas sobre las personas que no forman parte de
la población activa (antes conocida como población económicamente inactiva). La
relación ocupación-población es igual a la tasa de participación de la población
activa después de deducir desocupación del numerador de la tasa.

5. Conclusión

El crecimiento poblacional debe ir acompañado de la provisión de infraestructura y


servicios urbanos, así como de una planificación, para que no se produzca en forma
caótica y desordenada, como ha sucedido con algunos centros en el pasado.A más
de planificar el crecimiento de los poblados más dinámicos, se deben orientar
acciones para mejorar los atractivos y la base productiva del área de influencia de
otros centros, para conseguir un crecimiento más uniforme y aliviar la presión sobre
poblaciones como Orito y Lago Agrio.

La actual estructura administrativa no responde a la evolución regional, ya que


concentra muchas funciones en las capitales de Intendencia y Provincia, sin prestar
adecuada cobertura ni a los sectores de mayor población ni a las áreas rurales. Las
instituciones encargadas de la coordinación tienen poca jerarquía, escasos recursos
y bajo nivel político, sin que puedan cumplir efectivamente su cometido.Las
prioridades de acción se fijan a nivel sectorial, con gran peso en el sector petrolero,
que poco o nada coordina con los otros sectores. En consecuencia, los proyectos e
inversiones poco responden a los enunciados de política y objetivos globales de
desarrollo.Frente a este panorama, se requiere racionalizar la realización de
inversiones y provisión de servicios, fortaleciendo las instituciones de planificación,
coordinación y ejecución de obras 6regionales, principalmente dotándolas de
personal técnico adecuado y recursos económicos suficientes para implementar el
Plan de Desarrollo que se encuentra en elaboración.

Dado que el Plan tendrá componentes binacionales, es fundamental el


fortalecimiento de la Comisión Mixta de Cooperación Amazónica Colombo-
Ecuatoriana (COMCAR) que tiene las funciones de facilitar las relaciones entre los
países y viabilizar la ejecución conjunta de acciones. Esta Comisión deberá contar
con una Unidad Técnica independiente, con personal y recursos asignados
exclusivamente al Plan San Miguel Putumayo, en las fases finales de planificación y
en los períodos de financiamiento y ejecución.Las necesidades regionales son
múltiples, por lo que se debe optimizar la utilización de los recursos disponibles.
Esto sólo será posible fortaleciendo los mecanismos de coordinación regional a todo
nivel, desde el seccional hasta el binacional.
6. Bibliografía

Población y desarrollo | Comisión Económica para América Latina y el Caribe

Estadísticas de población activa (EPA, EPAO, URBAN) - ILOSTAT

https://www.indec.gob.ar/ftp/cuadros/menusuperior/eph/EPH_Conceptos.pdf

https://www.fao.org/3/ad931s/ad931s01.htm

https://www.fao.org/3/ad931s/ad931s01.htm#:~:texto=Un 69%25 de la
población,o Sumus%2C Creole y Garífonas.

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