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A L...G...D...G...A...D...U...

RESPETABLE LOGIA SIMBÓLICA “EXCÉLSIOR NUM. 9 ”

S...F...U...

MUY... R... G... M...


V... G... PAST... MASTER ...
V... M...
VV ... y QQ... HH... TODOS.

“La camara de preparación, su simbolismo, su descripción y su interpretación”

Dentro de la lectura se aborda el tema del simbolismo, que es muy extenso dado que sirve
de apoyo al entendimiento, pues representa las ideas de una forma objetiva, gráfica y
parabólica para nuestro mejor aprendizaje y aceptación de las verdaderas enseñanzas.
También está el lenguaje figurado de la masonería, mismo que se representa
metafóricamente. Entiendo que al ser un aprendiz, se me irán develando muchos
simbolismos conforme demuestre ser digna de recibir estas enseñanzas, como la cámaras
de Compañero y la de Maestro. Por lo que en estos momentos solo podré expresar mi
entendimiento de un ceremonial para aprendices.

Anexa a las cámaras mencionadas, está la cámara de instrucción, misma que el Maestro
Arquitecto tiene bajo su cargo para proporcionar a los demás hermanos una enseñanza
ritualística, dogmática y del ceremonial litúrgico. Están otras cámaras como la del medio,
para animar a un hermano que recibe el tercer y último grado de la Masonería Azul; la
cámara fúnebre donde se conmemora una ceremonia fúnebre de cuerpo presente; la
cámara negra, que hace referencia a la misma ceremonia que la anterior sin los restos del
hermano fallecido y la cámara de dolor, que conmemora un aniversario luctuoso de algún
hermano.

Ahora bien, la Cámara de preparación o reflexiones es una sala la cual, está pintada de
negro, simulando una bóveda, representando con ello las tinieblas, el enigma y el misterio,
dándole un aspecto lúgubre que simbolice la incomprensión de nuestra consciencia, dentro
de la cual existe una ventanita para que el hermano experto observe lo que está pasando
con el candidato a aprendiz. Este saloncito está simbolizando el lugar de donde vinimos y
al cual regresaremos, donde tiene esparcidos piedras y huesos en desorden, un sarcófago
con un esqueleto humano y un ajuar pintado de negro, una mesa triangular que tiene un
cráneo humano, un plato con sal, un plato con ceniza, una lámpara sepulcral, un pedazo de
pan negro, un reloj de arena a punto de agotar su medida, un tintero, una pluma, una
plancha triangular que con tres preguntas escritas y un banquillo de la misma forma.
Sobre la pared se leen las inscripciones: ¡La conciencia es el espejo del alma, es tu juez
inflexible, por eso el crimen jamás queda sin castigo!; ¡Si sientes miedo o tiemblas ante la
verdad, abandona este recinto!; ¡Si eres débil o no tienes voluntad propia, retírate, aún es
tiempo!

En esta ceremonia la hermana experta me llevó con los ojos vendados hasta esta cámara,
se me sentó en el banco y me pidieron que me quitara la venda dándome instrucciones
para leer todo lo que estaba impreso en la plancha y antes de contestar, meditar. Lo cual
aunque pude entender algunos simbolismos, no tenía toda esta información para captar la
importancia de cada uno de ellos. También se me dijo que terminando mi misión allí,
diera tres golpecitos para proseguir con la ceremonia.

Para empezar, estaba convencida de que la mujer que era ayer debe morir cada día, pero
esta bóveda me hizo sentir no solo esa muerte, sino encarar con valor y voluntad el nuevo
conocimiento que vendría a mi y el ponerlo en práctica para renacer como bien dice esta
enseñanza de la ciencia y la verdad, para encarnar las virtudes.

Representando el caos, la desolación y la ruina del ser humano con los huesos, yo
humildemente les digo, no lo ví así, lejos de ver un caos, podía pensar en lo frágiles que
somos como seres humanos, que al volvernos materia cuando pasamos a la muerte, nos
volvemos nada y que al cuerpo solo le da valor el espíritu que contiene.

Dentro de esta enseñanza, me causó una grata sensación leer lo que indica el sarcófago
conteniendo un esqueleto humano: “en esa forma se destruye el hombre, cuando le falta
una mano que le tienda los sagrados lazos, que le conduzcan por la senda del verdadero
destino, librándolo así de la barbarie”, puesto que esto es lo que ustedes hermanos han
hecho conmigo, un lazo que me libra de la ignorancia, lazos que me conducirán por la
verdad, ¡gracias!.

La cámara de preparación coloca al aprendiz en medio de sus propias indecisiones, dudas


e incertidumbres, con la finalidad buscar que con el uso de su inteligencia, se concentre en
su verdadera misión con inteligencia y descubra así su misión.

Ahora bien, dentro de los símbolos que leí, lo que refiere cada uno es lo siguiente:

El cráneo representa la muerte que puede convertir a los hombres en iguales, el plato de
sal como fruto del esfuerzo del trabajo y ser útil a la sociedad, el plato de ceniza como
germen que contiene todas las sustancias de la naturaleza pero igualadas al pasar por el
fuego, donde nuestra Madre Tierra nos da vida, vigor y fuerza. Después viene la lámpara
sepulcral que representa la vida, pero una vida es insuficiente para penetrar en el misterio
de lo desconocido y lo abstracto, apoyándose así de sus hermanos para resolverlos juntos.
El vaso con agua, representa a la esencia, lo que le proporciona una acción fecundante
para formarse, producirse, transformarse y reproducirse; el pedazo de pan negro como el
alimento que necesita el cuerpo físico para mantener su vitalidad y al mismo tiempo, como
en otros elementos, el compartir el pan con todos los semejantes y sus hermanos. El reloj
de arena que representa el tiempo, no desperdiciado, no perdido, no mal utilizado, para
poder tener práctica, pericia y experiencia en todas sus actividades.

El testamento va en un tono simbólico también: trascender la educación, la preparación


intelectual con el objetivo que los herederos puedan servir a la sociedad mediante un
trabajo honorable y honrado, para cumplir con los deberes con Dios, con nuestros
semejantes y con uno mismo. Otorgando estas herramientas en el testamento, se puede
confirmar que: “la felicidad sólo se consigue por medio del talento, del trabajo y aún del
sacrificio propio, en bien de nuestros semejantes, por cuya razón se dice que la verdadera
felicidad, consiste en apreciar la satisfacción del deber cumplido.

Finalmente la plancha triangular, que entrega estas preguntas:

¿Qué deberes tiene el hombre para con Dios? Lo cual honestamente no recuerdo mi
respuesta y hoy que he leído la respuesta me parece tan clara y sencilla: ¡Conocerle,
amarle y respetarle!

¿Qué deberes tiene el hombre para con sus semejantes? Buscando que la respuesta sea
¡conocerlos, amarlos y respetarlos!.

¿Qué deberes tiene el hombre para consigo mismo?, nuevamente entendiendo esto es claro
que siga siendo la misma respuesta: conocerse, amarse y respetarse;

Estos deberes del hombre para con el Ser Supremo, para con los hombres y para consigo
mismo, entiendo hoy, que son los mismos. Que si antes era difícil entender la pregunta y
más aún conocer la respuesta, hoy al tener la verdad, son muy sencillas de comprender, de
hacerlas nuestras, como una consecuencia de tener luz donde antes había oscuridad, de
hacer consciente el conocimiento, el amor y el respeto que muchas veces no nos damos a
nosotros mismos, ni a nuestros hermanos, cómo entonces podremos darlo al Gran
Arquitecto del Universo.

Es cuanto V... M...

F R A T E R N A L M E N T E.

Or...de Veracruz, Ver., a 7 de Abril de 2022 E...V...

A ...M ...

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