Está en la página 1de 2

LA IDENTIDAD EN CRISTO

Saber quiénes somos en Cristo es fundamental para no marearnos con lo que otros
dijeron que nosotros somos y por sobre todas las cosas por lo que nosotros decidimos
creer que somos.

¿QUIÉN SOY PARA ESTA SOCIEDAD? ¿SOY UNA PROFESIÓN O UN ESTATUS?


- No soy una profesión o una tarea que desempeño, ni un estatus determinado.
- No somos lo que hacemos, ni lo que tenemos.
- Hoy tenemos un rol en el que nos desempeñamos y quizás mañana ya no. Porque
el rol en algún momento de la vida puede llegar a cambiar.
- Nuestra identidad no es un rol o una profesión y mucho menos un estatus.
Descubrir y fluir en nuestra identidad es la máxima razón de la existencia de un ser
humano.

¿QUIÉN SOY? ¿SOY LAS MARCAS NEGATIVAS QUE OTROS DIJERON DE MI?
- Muchos te marcaron de forma negativa y te dejaron una identidad muy frágil.
- Hay que entender que nosotros no somos lo que otros dicen.
- Muchos te deben haber dicho: sos un perdedor, un adicto, un violento, un
alcohólico, un rebelde, un desobediente, un tramposo, un muerto de hambre, un
don nadie, un adicto al trabajo, etc.
- Jamas debemos moldear nuestra identidad por lo que otros dicen que somos.
Genesis 6:5 El Señor vio la magnitud de la maldad humana en la tierra y que todo lo
que la GENTE PENSABA O IMAGINABA era siempre y totalmente malo.
- Lo que la gente piensa e imagina dentro de si mismo, es lo que realmente después
es.
- Por eso debemos tener mucho cuidado de lo que creemos de nosotros mismos en
base a lo que otros dijeron incorrectamente atándonos a una identidad que Dios
no eligió para mi.

¿QUIÉN SOY PARA DIOS?


- Para Dios yo soy SU HIJO, soy un ciudadano del cielo, un linaje especial, soy santo,
soy real sacerdocio, soy escogido por EL antes de que fundase el mundo, soy
embajador de Dios.
- Para Dios soy lo más hermoso que existe, ya que fue capaz de dar la vida de su hijo
Jesús para rescatarme de la muerte eterna, para que yo pudiera estar siempre a su
lado.

¿QUÉ MIRA DIOS EN MI VIDA?


1 Samuel 16:7 Pero el Señor le dijo a Samuel: No juzgues por su apariencia o por su
estatura, porque yo lo he rechazado. El Señor no ve las cosas de la manera en que tú
las ves. La gente juzga por las apariencias, pero el Señor mira el corazón.
- Dios mira continuamente nuestro corazón, El no anda mirando mi exterior, mis
apariencias, lo que tengo, mi profesión, etc.
- El solo mira mi corazón, porque desde mi corazón me convierto en ese niño que
anhela una continua relación con El.
EN CRISTO SOMOS NUEVA CREACIÓN
- El mundo puede habernos distorsionado en nuestra identidad, pero en Jesús
somos nueva creación y esa es nuestra verdadera identidad.
2 Corintios 5:17 y 18 17 Esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha
convertido en una PERSONA NUEVA. La vida antigua ha pasado; ¡una nueva vida ha
comenzado!. 18 (a)  Y todo esto es un regalo de Dios, quien nos trajo de vuelta a sí
mismo por medio de Cristo. 
Se nos regala una nueva vida por medio de Jesús. En esta vida nueva Dios nos
reestablece nuestra verdadera identidad.
Efesios 2:10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras,
las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
- Somos personas destinadas para realizar buenas obras.
- Estas obras fueron preparadas de antemano por Dios para que pudiéramos andar
en esos caminos y no en otros.
Estas obras están en el camino del Espíritu de Dios, y debemos aprender a discernirlos
para que podamos vivir en la plena voluntad del Señor.

EL NOS CONVIRTIÓ A TODOS EN SACERDOTES ESPIRITUALES


1 Pedro 2:9 y 10 9 Pero ustedes no son así porque son un pueblo elegido. Son
sacerdotes del Rey, una nación santa, posesión exclusiva de Dios. Por eso pueden
mostrar a otros la bondad de Dios, pues él los ha llamado a salir de la oscuridad y
entrar en su luz maravillosa. 10 «Antes no tenían identidad como pueblo, ahora son
pueblo de Dios. Antes no recibieron misericordia, ahora han recibido la misericordia de
Dios»
- Somos personas elegidas por El.
- Nuestra nueva identidad es como pueblo santo.
- Podemos ser canales de bendición que muestran la bondad de Dios a otros
llevándolos de la oscuridad a su maravillosa luz.
- Ahora somos el pueblo de Dios.
- Antes no había misericordia sobre nosotros y ahora si.

También podría gustarte