Juan Felipe Pineda Rey

¿Cuáles son las diferencias y similitudes entre el Estado legislativo y el

Estado Constitucional?
Introducción.
La relación que existe entre el Estado legislativo y el Estado Constitucional no se puede
describir en un solo sentido, estos no son completamente aislados uno del otro, no obstante,
tampoco son lo suficientemente semejantes para llamarlas de la misma manera.
Este trabajo busca identificar cuáles son esas diferencias marcadas entre Estados y qué
podrían entre estos llegar a tener en común. Para la realización de este escrito es necesaria
la descripción de los conceptos anteriormente mencionados los cuales con el fin de
otorgarle mayor objetividad al escrito, se dejarán en manos de algunos de los autores
estudiados en clases anteriores. Así mismo la retroalimentación de los temas emprendidos
en el aula servirán de guía para hacer aquellas nociones más digeribles para el lector.

Definiciones necesarias
Estado Legislativo: Según Tamayo este estado fue una respuesta a las formas en que el
Estado Absolutista venía ejerciendo su dominio. Su fin primordial es el de establecer
ciertos límites al poder para que estos no queden concentrados en una sola persona (el
soberano) sino que el ejercicio de poder dependa de las instituciones así como la ley, de
modo en que y citándolo “que la soberanía no descansase en un sujeto, sino en el pueblo”
Tamayo (2020, pp 66)
Según Tamayo(2020) Es así que termina por ser un Estado simplemente legislativo, en el
cual la constitución pasa a actuar en un segundo plano y por debajo este al tener carácter
político pero no normativo.

Estado Constitucional: “El Estado a diferencia del Estado liberal clásico, no se limita a
reconocer derechos a los individuos, sino que además funda su legitimidad en la eficacia,
en la protección y otorgamiento efectivo de los mismos” (Tamayo citando a Naranjo, 2020,
pp 67)
Siendo este aquel que encarna la dimensión cualitativa del Estado Social de Derecho es
decir aquella que se da gracias a las instituciones y “a través de mecanismos de democracia
participativa, de control político y jurídico en el ejercicio del poder y sobre todo, a través de
la consagración de un catálogo de principios y de derechos fundamentales que inspiran toda
la interpretación y el funcionamiento de la organización política” (Tamayo, 2020, pp 68-
69).
Juan Felipe Pineda Rey