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GUERRA

CARLISTA
Reglas de Wargames para la Primera Guerra Carlista

Reglamento elaborado por Jesús Mª Cortes Meoqui (Ediciones 3D)


INTRODUCCIÓN
Para sugerencias o comentarios, dirigirse a : EDICIONES 3D
Comunidad de La Rioja nº5-1º D
31010 BARAÑAIN .
Para más aclaraciones en tablas o formaciones , consultar en Email: jescortes@terra.es
La transcripción vía internet puede contener defectos de formato imputables exclusivamente al
autor .

ESCALA Y ORGANIZACION DE UNIDADES ,FORMACIONES :

La escala recomendada para estas reglas es de 1 figura = 100 hombres o 1 batería, pero otras
escalas son igualmente válidas.
La unidad mínima es en infantería el batallón, en caballería el escuadrón y en artillería la
batería.
Las formaciones que una unidad puede adoptar son :

INFANTERIA

EN TIRADORES / ORDEN ABIERTO:


o o

LINEA DE BATALLA:

COLUMNA DE ATAQUE:

COLUMNA DE MARCHA:

CUADRO:

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Cambiar de formación no requiere orden escrita, y el coste es la mitad de la capacidad de
movimiento de la unidad salvo que se indique otra cosa.

Solo las unidades calificadas como cazadores, Guías, Ligeros, u otras tropas entrenadas para
ello pueden adoptar el orden abierto. Todas las unidades carlistas pueden hacerlo excepto las
que sean de clase milicia.

Formar Cuadro o deshacerlo:


Ejercito Isabelino:
Elite: le cuesta la 1/2 de capacidad de movimiento.
Veteranos y Regulares: les cuesta un turno completo, durante el que están desordenados.
Milicia: Les cuesta 1d6 turnos (el resultado de lanzar 1 dado de seis caras) durante los cuales
están desordenados.
Extranjeros: Les cuesta 1/2 de su capacidad de movimiento.
Ejercito Carlista:
Elite y Veteranos: Les cuesta 1 turno formarlo, durante el cual están desordenado.
Regulares y Milicia: Les cuesta 1d6 turnos durante los cuales están desordenados.
Extranjeros: Les cuesta 1 turno durante el cual están desordenado.

CABALLERIA

Cambiar de formación les cuesta 1 turno completo durante el cual están desordenados.

COLUMNA : COLUMNA DE MARCHA


(1 base de separación entre bases)

LINEA:

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ARTILLERIA

EN BATERIA: EN TREN:

CLASES DE TROPAS

Las unidades se dividen según su entrenamiento, origen ó experiencia en diferentes clases de


tropas con sus peculiaridades:
.-ELITE: Unidades mejor armadas y con prestigio cuya sola presencia en el campo de batalla
produce pánico en el enemigo. Suman siempre un +10% a su tirada de %. No les afecta el test
de huída.
.-VETERANOS: Tropas regulares con experiencia positiva y victoriosa anterior en el campo de
batalla. Suman un 5% siempre a su tirada de %.
.-REGULARES: Tropas entrenadas en marchar y combatir en formación.
.-MILICIA: Tropas de voluntarios ó reclutas con poco o nulo entrenamiento en formaciones y
combate. Restan siempre un -5% a sus resultados de % .
.-EXTRANJEROS: Componentes de cualquiera de las legiones extranjeras que combatieron en
esta Guerra.

SECUENCIA DE JUEGO Y TURNOS

*En primer lugar debe definirse el escenario y año de la batalla. Si se desarrolla en las
provincias del Norte al menos la mitad del campo de batalla debe contener montañas, bosques u
otro terreno difícil.
*A continuación se determina la iniciativa para el turno que comienza, cada bando lanza 1d6 y
se suma al resultado el Valor de Iniciativa del Comandante en Jefe. Aquel que obtenga mayor
puntuación es el que leva la iniciativa ese turno, por lo que decide en la secuencia de disparos y
combate cuerpo a cuerpo el orden de realizar los disparos y combates así como quién debe
lanzar el dado de % primero en cada disparo ó combate.
* Se escribirá el despliegue de las unidades a un máximo de 30 cm. del borde del campo de
batalla. Los jugadores pueden pactar una emboscada o una marcha de flanqueo debiendo
señalar por escrito el turno de llegada del flanqueo. A ese turno escrito se sumará 1d6 turnos,
que será el turno real de entrada de los flanqueadores por el lado de la mesa que se señale. En
este apartado serán los jugadores los que libremente determinen limitaciones ó modificaciones a
la regla.
*Una vez realizado el despliegue en el papel, se traslada a la mesa y se escriben las órdenes
para los generales de Brigada a cuyo mando se hallan las unidades. Para cambiar estas órdenes
estratégicas debe enviarse un Ayuda de Campo ó Mensajero desde el Comandante en Jefe hasta
el destinatario, y debe superarse el test para determinar si la orden ha llegado a destino. Si es
así, comenzará a tener efecto el cambio en el turno siguiente a la recepción del mensaje. Se
declaran emboscadas y llegan las marchas de flanqueo.

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* Cada turno se declaran las cargas para llegar al contacto y luchar cuerpo a cuerpo, test para la
unidad que carga y la atacada; test de carga impetuosa para los carlistas.
* Test para detener huidas ejecutadas en turnos anteriores. Movimientos de Huída y retroceso
así como de carga, deteniéndose éstos a 2 cm. del objetivo.
* Cambios de formación y movimientos voluntarios de las unidades que puedan hacerlos y lo
deseen.
* Disparos.
* Cuerpo a cuerpo de unidades que cargan y han superado el test de carga, si el enemigo
permanece ó ha contracargado (lógicamente para llegar al contacto y declarar una carga es
necesario que las unidades envueltas estén a distancia de carga a simple vista pues no se
permite medir previamente) .
* Test de Moral de Huidas para unidades afectadas por la huida de otras. (Las unidades de Elite
no se ven nunca afectadas por la huida de otras).
*Inicio de nuevo turno desde la fase de cambios de órdenes.

TEST DE CAMBIO DE ORDENES ESTRATEGICAS :

Cualquier mensaje que suponga un cambio en las órdenes estratégicas de la Brigada, para que
se lleve a efecto una vez que el mensajero ha legado a su destino debe superar el siguiente test:

Brigadier destino a 15 cm ó menos del Comandante en jefe: la orden llega con un 95% ó menos
de 16 a 30 cm. 70% ó menos.
de 31 a 50 cm. 50% ó menos.
otra distancia. 30% ó
menos.

Nota: las unidades de una Brigada que se encuentren a más de 30 cm. de su mando se
entienden aisladas y no pueden moverse.

CAPACIDAD DE MOVIMIENTO DE LAS UNIDADES :

GENERALES / CORREOS................................20 CM.


INFANTERIA: COLUMNA DE ATAQUE ...... 10 CM.
COLUMNA DE MARCHA .....15 CM.
LINEA .......................................6 CM.
EN TIRADORES .....................12 CM.
CUADRO ..................................1 CM.
CABALLERIA: LINEA .....................................20 CM.
COLUMNA .............................15 CM.
COLUMNA DE MARCHA......30 CM.
ARTILLERIA : DE MONTAÑA .......................10 CM.
VOLANTE................................ 20 CM.
DE CAMPAÑA/COHETES...... 15 CM.

* ATRAVESAR UNIDADES: Sólo las tropas en tiradores pueden atravesar y ser atravesadas
por unidades amigas sin producir desorden. El resto de unidades que se atraviesen quedan
desordenadas ese turno, no pudiendo cambiar de formación ni combatir.
* MOVIMIENTO EN TERRENO DIFICIL: Se entiende por terreno difícil los bosques,
marismas, huertos, poblaciones, montañas y cualquier otro terreno que los jugadores acuerden
al principio de la partida. El movimiento por este terreno no penaliza a las tropas carlistas,
mientras el ejercito isabelino le cuesta el doble moverse por él (1 cm de movimiento = 2 cm de
capacidad).

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* RETROCESO ENCARANDO AL ENEMIGO: Los carlistas podrán mover como máximo
1/4 de su capacidad normal, los isabelinos la mitad de su capacidad, excepto las milicias que
moverán como máximo 1/4 de su capacidad.

* GIROS: Los giros hasta 45º consumirán el movimiento de la base del giro exterior, para girar
más de 45º las unidades de elite, veteranos y extranjeros les cuesta la mitad de su capacidad, el
resto pierde todo un turno completo. Las unidades que cambian de formación ó se reorganizan
tras la huída pueden encararse hacia donde deseen.

*ARTILLERIA: Las baterías de campaña y montaña así como los cohetes no pueden mover y
disparar el mismo turno, sí pueden girar hasta 45º sin coste. La artillería volante puede mover la
mitad de su capacidad y dispara, restando un -10% a su % requerido para hacer blanco.

* VADEAR RIOS: La unidad se detiene en el borde y el próximo turno permanece al otro lado
desordenada, sufriendo 1 PD si es atacada por disparos ó cuerpo a cuerpo.

MOVIMIENTOS FORZOSOS Y DESORDEN:

Causas de desorden:
.- Unidad atacada por disparos ó cuerpo a cuerpo por flanco ó retaguardia.
.- Unidad atravesada por otra que no esté en tiradores.
.- Unidad que huye.
.- Unidad atacada por fuego ó cuerpo a cuerpo en el turno en que ha cambiado de formación.
.- Unidad atacada por fuego ó cuerpo a cuerpo al vadear un río.
.- Unidad que declara carga y no supera el test de carga.
.- Unidad cargada que no supera el test de carga...
.- Unidad en Columna de Marcha que sufre fuego ó cuerpo a cuerpo

Efectos :
.- La unidad desordenada sufre automáticamente 1 Punto de Desgaste (1 PD) que se tacha de las
casillas atribuidas al principio de la batalla a cada unidad (mínimo de 4 y máximo de 6 como
veremos).
.- No puede declarar cargas ni disparar durante los turnos que dure el desorden.
.- Si la unidad es atacada por disparos ó por cuerpo a cuerpo, se deberá lanzar 1d6 para realizar
el TEST DE REACCION.

TEST DE REACCION:
Resultado: 1 ó 2: la unidad HUYE
3 ó 4 la unidad RETROCEDE
5 ó 6: La unidad permanece sin más penalización.
Factores: General a - 10 cm : + 1 al dado
Elite: + 2 al dado
Veteranos: + 1 al dado
Milicia: - 1 al dado

Retroceso: se entiende por retroceso el movimiento forzoso por el que la unidad en el turno
siguiente debe mover hacia atrás su capacidad total en orden dando el frente al enemigo, y se
detiene, pudiendo en el próximo turno mover y combatir de nuevo normalmente.
Huída: La unidad en el turno siguiente mueve hacia atrás en desorden y de espaldas al
enemigo, en dirección a su línea de partida y esquivando otras unidades, y sufre además 1 PD.
añadido. Sólo volverá a ser operativa cuando supere un test para detener la huída. Cada turno
que ésta continúe sufre un nuevo PD. La capacidad de movimiento en huída es el de Columna

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de Marcha. La columna de marcha que sea contactada por ataque cuerpo a cuerpo huye
automáticamente.

* CARGAS DE CABALLERIA: Cada vez que la caballería realiza una carga, pierde 5 cm.de
su capacidad de movimiento para posteriores turnos , hasta un máximo de 3 veces, a partir de
las cuales ya no pierde más capacidad. Con esta regla se pretende reflejar la fatiga de los
caballos y las limitaciones de este arma. La caballería no puede cargar por terreno difícil

* REACCIONES A LA DECLARACION DE CARGA: La unidad contra la que se declara


una carga debe adoptar la siguiente actitud, salvo que expresamente se les indique una orden
distinta o les obligue un test a otra respuesta:
Carlistas: Infantería y caballería: Contracargar.
Artillería : Permanecer.
Isabelinos: Caballería: Contracargar.
Infantería y Artillería: Permanecer .
Nota: la infantería nunca puede declarar carga contra caballería. La artillería no puede cargar.

* CONTACTO CON ENEMIGOS: No se permite contacto cuerpo a cuerpo con unidades


enemigas salvo que exista previa declaración de carga ó sea consecuencia de movimiento de
persecución ó de test de carga obligatorio, en otros casos la unidad debe detenerse a 2 cm. del
enemigo.

* PERSECUCION: La unidad cuyo enemigo huya tras un combate cuerpo a cuerpo ó por no
superar un test de moral previo a cargar debe realizar en el turno siguiente un movimiento de
persecución en el sentido de la dirección tomada por la unidad que huye. Si son varias las que
han combatido contra la misma unidad que huye, perseguirá sólo aquella que esté a su frente. Si
como consecuencia de la persecución la unidad que persigue choca con otra enemiga, esta
última debe realizar un test como si fuera objetivo de carga, y podrá hacer fuego previamente.
La unidad que persigue debe también pasar un test como si hubiera declarado carga para
determinar si llega al contacto contra su nuevo objetivo. En el caso de unidades de ELITE o de
EXTRANJEROS el jugador podrá elegir si persigue ó no.

* MOVIMIENTO Y DISPAROS: Las unidades de infantería y caballería pueden mover toda


su capacidad y disparar, pero si mueven más de la mitad de su capacidad de movimiento
restarán un -10% al resultado en la tabla de % necesario para hacer blanco, si mueven menos de
la mitad y disparan no tienen penalizaciones .
La artillería de montaña, campaña y cohetes no puede mover y disparar el mismo turno, la
artillería volante puede mover la mitad de su capacidad y disparar, pero restando un -10% a la
tabla de % necesario para hacer blanco.
La unidad que carga no puede disparar.

* CARGAS FORZOSAS CARLISTAS: Para representar la impetuosidad de estas tropas, las


unidades de carlistas que no sean de élite y que estén dentro de la distancia de movimiento de
unidades enemigas, deben cargar contra él obligatoriamente aunque no haya existido
declaración de carga si no superan el siguiente test. Este test se realiza sólo una vez cada turno
con independencia del número de unidades enemigas a alcance, y será el jugador carlista quien
determine contra que unidad se realiza la carga forzosa.
Láncese un dado de % y la unidad cargará si el % obtenido es -/= a un 75%.
Factores a sumar ó restar al dado : + 10% General a 10 cm. de la unidad testada.
+ 10% Veteranos.
+ 10% En edificios o trincheras.

En ningún caso la infantería cargará contra caballería ni la artillería puede cargar contra otras
unidades .

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ELIMINACION DE UNIDADES

Al iniciar la batalla a cada unidad del ejército se le adjudican un número de casillas que vienen
a representar su capacidad de combate, entre 4 y 6, las cuales se irán tachando conforme esa
unidad sufra PUNTOS DE DESGASTE (P.D.) por las causas indicadas a lo largo de estas
reglas (por ejemplo: huídas, sufrir fuego ó cuerpo a cuerpo cuando se cambia de formación, no
superar test de moral...)
Cuando todas las casillas de una unidad han sido tachadas, esta es eliminada y retirada de la
mesa. Salvo que los jugadores acuerden otra cosa, la partida termina cuando un ejército ha
perdido la mitad de su capacidad global de desgaste, calculada sumando todas las casillas de las
unidades del ejército más los Puntos de Iniciativa del General .
Número de casillas recomendado para unidades :
.- Elite y Veteranos: 6 casillas
.- Línea: 5 casillas
.- Milicia y Extranjeros: 4 casillas
.- Artillería: 4 casillas

DISPAROS ; TABLA DE ALCANCE :

DISTANCIA LARGA DISTANCIA CORTA


CARABINA 5 cm. 3 cm
MOSQUETE 10 cm. 5 cm.
RIFLE 15 cm.
5 cm.
ARTILLERIA MONTAÑA 30 cm. 10 cm.
VOLANTE 30 cm. 10 cm.
CAMPAÑA 40 cm. 10 cm.
COHETES 20 cm. 5 cm.

* PRIORIDADES :
Primero la unidad que esta cargando al que dispara debe ser su objetivo preferente Si el general
está en contacto con la unidad, será objetivo la unidad de primera línea del enemigo que el
jugador desee, en otro caso el blanco será la unidad enemiga al frente y más próxima dentro de
su alcance. En todo caso será el jugador que ostente la iniciativa ese turno el que decida el
orden de resolución de disparos y combates, y si lo hace antes ó después que su adversario. Una
unidad sólo puede disparar contra un blanco por turno, sin partir su fuego.

* ANGULOS:
Para determinar el ángulo de disparo se toma desde el centro de la unidad que dispara a la base
más próxima del blanco. El ángulo de fuego es de 45º desde el centro del frente de la unidad,
salvo unidades en Tiradores cuyo ángulo es de 90º.

Abreviaturas en las tablas :


IL: Infantería en Línea IC: Infantería en Columna
IT: Infantería en Tiradores IQ: Infantería en Cuadro
PT: Protección Total PP: Protección Parcial
C: Caballería AR: Artillería y cohetes

* TABLA DE DISPAROS .

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BLANCO / UNIDAD QUE DISPARA
I.L. I.C. I.T. I.Q. P.T P.P. C.
AR.
Inf. en Línea 30/45 20/30 20/30 20/30 35/50 30/45 10/20 40/60
Inf. en Columna 35/60 25/35 25/35 25/35 40/60 35/50 10/20 45/70
Inf. en Tiradores 20/30 15/25 15/25 15/25 30/45 25/35 15/25 35/55
Inf. en Cuadro 35/50 25/35 25/35 25/35 40/60 35/60 15/25 50/75
Protección Total 20/30 10/15 10/15 10/15 15/25 20/30 10/15 30/50
Protección Parcial 25/35 15/25 15/25 15/25 30/45 25/35 15/20 35/55
Caballería 30/45 20/30 20/30 20/30 35/50 30/45 20/30 45/70
Artillería 25/35 20/30 20/30 20/30 35/50 30/45 20/30 45/70

* La unidad que es blanco debe lanzar un dado % y el resultado de este modificado por los
factores descritos a continuación debe ser igual ó superior al indicado en la tabla, en caso
contrario el blanco sufre 1 PD. y debe pasar el Test de Reacción.
* La cifra indicada a la izquierda es el % a igualar ó superar si los disparos se reciben a
distancia larga, y la de la derecha si el fuego se hace a distancia corta.

* FACTORES : A sumar ó restar a la tirada de dado:


Unidad que dispara es Elite: -5%
Unidad que dispara es Milicia: +5%
Unidad que dispara tiene más hombres que el blanco: -5%
Unidad con General en contacto: +5%
Unidad blanco es Elite: +5%
Unidad blanco es Milicia: -5%

PROTECCION TOTAL: son edificaciones, trincheras.


PROTECCION PARCIAL: Son bosques, cercas, huertos.
El CUADRO sólo puede hacer fuego contra un blanco cada turno .
DISPAROS DESDE EDIFICIOS: La unidad que se encuentre en zona edificada sólo podrá
disparar contra 1 objetivo cada turno desde el perímetro de la zona edificada, este perímetro se
tomará como referencia para medir distancias y alcance.
DISPAROS CONTRA PROTECCION PARCIAL: solo podrán ser blanco las unidades
desplegadas en el borde de la zona que delimita la protección (por ejemplo las unidades
situadas al borde de un bosque, no en su interior) y sólo aquellas pueden disparar contra
objetivos situados fuera de la Protección. En todo caso antes de comenzar la batalla se debe
señalar una capacidad máxima de unidades que pueden beneficiarse de las protecciones y
permanecer en su interior.
DISPAROS CONTRA UNIDADES QUE LUCHAN CUERPO A CUERPO: sólo se
permiten disparos en el turno en que se produce el contacto, como si los fuegos fueran
anteriores a dicho contacto.

TABLA DE COMBATE CUERPO A CUERPO :

Una vez declarada la carga (salvo situaciones excepcionales en que estas reglas autorizan al
contacto sin esa declaración previa, como la carga obligatoria de los carlistas) y después de que
se haya realizado el test de moral a las unidades envueltas en la carga si es menester, y se haya
terminado la fase de disparos, las unidades que puedan llegarán al contacto con su enemigo,
resolviéndose el combate cuerpo a cuerpo conforme a la siguiente tabla: la unidad de la
izquierda se enfrenta a la de la línea superior, y aquella debe igualar ó superar el % señalado en
la tabla para poder continuar sin sufrir 1 PD ni el test de Reacción. Cada bando combatiente
lanzará el dado en el orden que señale el jugador que ostenta la iniciativa.

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CONTRA I.L. I.C. I.T. I.C. P.T. P.P. C AR.
Inf. Línea 50 60 30 40 70 60 75 30
Inf. Columna 40 50 30 35 70 65 75 25
Inf. Tiradores 70 75 50 50 75 50 80 20
Inf. Cuadro 60 65 50 -- -- -- 15 --
Protección Total 30 30 25 -- 50 -- 20 --
Protecc. Parcial 40 35 50 -- -- 50 30 --
Caballería 30 35 25 85 80 70 50 20
Artillería 70 70 60 -- -- -- 80 --
FACTORES: al resultado obtenido en el dado se sumarán ó restarán los siguientes factores:
.- Unidad Elite: +10%
.- Unidad Veteranos: +5%
.- Unidad milicia: -5%
.- Unidad con menor número de hombres que el enemigo: - 5%
.- Caballería en segundo y sucesivos combates contra el mismo objetivo sin separarse: -10%
.- Unidad situada más elevada que el enemigo: + 5%

La unidad que en su tirada no iguale o supere el % indicado en la tabla sufre 1 PD y debe


superar el Test de Reacción, así la Infantería de Línea atacada por Caballería debe superar un
75%. Si ambas lo superan quedan enzarzadas y el próximo turno vuelven a combatir cuerpo a
cuerpo.
TEST DE MORAL :
* PARA CARGAR Y CONTRACARGAR :
La unidad a la que se haya ordenado cargar ó contracargar debe superar el siguiente test:
Carlistas: La Elite no necesita test para cargar
Resto unidades: realizar el test de carga obligatorio indicado en sección
anterior.
Isabelinos: Deben obtener con un dado % un resultado =/+ al 50%, al dado se modifica con
los siguientes factores:
-Unidad es Caballería: +30%
-Unidad es Elite ó Veteranos: +10%
-Unidades ordenadas propias a 15 cm: +10% por cada una
-General a 10 cm +10%
-Unidad en terreno llano y despejado: +10%
-Unidad que ha sufrido disparos este turno: -10%
-Por cada unidad en huída (excepto Tiradores y Caballería) a 15 cm: -10%
Si la unidad no supera el test , sufre 1 PD y debe pasar el Test de Reacción.
* PARA PERMANECER :
La unidad cuya orden sea permanecer frente a una carga, ó aquella a la que específicamente no
se le haya dado orden alguna frente a una carga (excepto tropas carlistas que deben realizar el
test de carga forzosa) debe superar el siguiente test para permanecer y soportar la carga en su
actual situación. Se lanzará un dado % y el resultado debe ser =/+ a un 50%, modificando el
resultado del dado los siguientes factores:
.- Infantería no en cuadro contra caballería: -10%
.- Unidad atrincherada ó en edificios: +10%
.- General a 10 cm de la unidad: +10%
.- Unidad Elite, Veteranos ó Extranjeros: +10%
.- Unidad Milicia: -10%
.- Cada unidad propia a 15 cm ordenada: +10%
.- Cada unidad propia a 15 cm en huída (excepto Tiradores y Caballería): -10%
.- Carlistas situados en terreno difícil: +10%
.- Isabelinos situados en terreno llano sin obstáculos: +10%

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.- Unidad situada más elevada que el enemigo: +10%
Este test se realiza una sola vez por unidad y turno, con independencia del número de cargas
que tenga declaradas contra ella. Si la unidad no supera el test, sufre 1 PD y debe realizar el
Test de Reacción.
* TEST DE HUIDA:
La unidad que ve a otra del mismo ejército huyendo a menos de 15 cm, excepto si la que huye
es caballería ó infantería en tiradores, deberá realizar el presente test lanzando un dado % y el
resultado debe ser =/+ al 50%, el resultado del dado se modificará con los siguientes factores:
.- Unidad con general a 10 cm: +10%
.- Unidad Veterana: +10%
.- Unidad Milicia: -10%
.- Unidad que ya ha sufrido 3 PD ó más: -10%
.- Cada unidad amiga que huye a 15 cm (excepto Caballería e Infantería en Tiradores): -10%
.- Cada unidad amiga que permanece ordenada a 15 cm. : + 10%
.- Unidad en edificaciones: +10%
El presente test NUNCA se aplica a unidades de Elite.
El test sólo se realiza para la unidad una vez por turno .
Si la unidad no alcanza el % requerido, sufre 1 PD y debe pasar el Test de Reacción.
* TEST PARA DETENER LA HUIDA :
Las unidades que durante el turno anterior hayan huido, y haya cesado la causa que provocó la
huida y deseen detenerse y reorganizarse, deben superar el presente test: el resultado y factores
a aplicar son los del test de huída, y además:
.- Por cada turno a partir del primero que huyen: -10%
Cada turno que la unidad continúa huyendo sufre 1 PD más
Una vez detenida la huida, la unidad debe permanecer 1 turno sin moverse para reorganizarse,
pudiendo adoptar la formación que desee y el encaramiento, y puede defenderse si es atacada.
La unidad que haya huido como consecuencia de fuego ó cuerpo a cuerpo recibido, no podrá
intentar reorganizarse hasta que deje de sufrir disparos ó pierda contacto con unidades
enemigas, entretanto debe continuar huyendo y sufre 1 PD cada turno que persista esa situación.
PUNTOS DE INICIATIVA DE GENERALES A SUMAR AL DADO PARA
DETERMINAR LA INICIATIVA CADA TURNO
CARLISTAS LIBERALES
Don Carlos V ... 4 Oráa ... 3
Zumalacárregui...5 Lorenzo ... 2
Iturralde ... 3 Valdes ... 2
Zubiri ... 2 Quesada ... 2
Sagastibelza ... 2 Rodil ... 2
Infante D. Sebastian ... 3 Carondelet ... 1
Maroto ... 3 Espoz y Mina ... 3
Elio ... 2 Espartero ... 4
Moreno ... 3 Osma ... 1
Guergué ...3 Figueras ... 1
Casa - Eguía ...3 O' Doyle ... 1
Gómez ... 4 Fernandez de Córdova ... 2
Villareal ... 3 Jaúregui ... 1
Zaratiegui ... 3 Carratalá ... 1
Cabrera ... 5 Evans ... 3
Sanz ... 3 Sarsfield ... 3
Merino ... 2

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ORDENES DE BATALLA Y RELACION DE TROPAS DE DIFERENTES CAMPAÑAS
DEL EJERCITO CARLISTA:

* EXPEDICION DE D. CARLOS ( 11 De Mayo de 1.837 )


Comandante en Jefe: Infante D. Sebastian
Jefe de Estado Mayor: General Moreno .
VANGUARDIA :
Primera División: General Sanz 4 batallones y 1 escuadrón navarros.
GRUESO:
Segunda División: General Sopelana: 4 batallones alaveses
Tercera División: General Cuevillas: 4 batallones castellanos.
Cuarta División: General Quilez: 2 batallones aragoneses, 1 batallón de granaderos y Legión
Francesa.
RESERVA:
General del Prado: 3 Regimientos (9 escuadrones) y un escuadrón de caballería, 2 batallones
infantería
TOTAL:
18 batallones de infantería (11.000 hombres), y 11 escuadrones de caballería (1.000 hombres)

* EXPEDICION DE ZARATIEGUI ( 19 de Julio de 1.837 ) :


Jefe de Estado Mayor: General Elio.
3 Brigadas de 2 Batallones de infantería cada una:
.-Primera Brigada: 4º y 7º Batallón de Guipúzcoa: Brigadier Iturbe.
.-Segunda Brigada: 1º y 7º Batallón de Navarra: Brigadier Oteiza.
.-Tercera Brigada: 5º Batallón de Castilla y 1º de Valencia: Brigadier Novoa
.-Escuadrones 2º y 4º del Primer Regimiento de Lanceros Navarros.
.-Cuadros de oficiales: 120 hombres.
TOTAL: 3.700 hombres de infantería y 220 caballos.
A esta expedición se unió el 27 de Julio del mismo año la fuerza del Brigadier D. Juan de Goiry
que contaba con:
2 batallones vizcaínos, 2 batallones castellanos y 1 escuadrón de caballería cántabro.
TOTAL :
600 hombres de infantería y 110 caballería.

* EXPEDICION DE GOMEZ :( 26 de Junio de 1.837 ) :


Jefe de Estado Mayor: Marqués de Boveda.
5 Batallones de Infantería y 2 escuadrones de caballería.
TOTAL: 2.700 hombres y 200 jinetes.

GUARNICION DEL NORTE DURANTE LA EXPEDICION REAL :


Comandante en Jefe: D. José Uranga .
División de Guipúzcoa: 5 batallones al mando de Guibelalde.
División de Vizcaya: 6 batallones mandados por Berastegui.
División de Navarra: 7 batallones mandados por García.
A ellos sumaremos algunos escuadrones sin determinar.

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INTRODUCCION HISTORICA .
A la muerte de Fernando VII en 1.833, quedó abierta la cuestión dinástica para la sucesión
en el trono de España; por un lado D. Carlos Mª Isidro, exiliado en Portugal, cuyos derechos
habían sido gravemente quebrantados a raíz de la Pragmática de 1.830, donde se reconocía el
derecho de la mujer al trono. Por otro, la futura Isabel II, aún una niña cuyos derechos fueron
protegidos por la viuda de Fernando VII, María Cristina, constituida en Reina Gobernadora.
Pero el problema trascendía de la esfera dinástica entrando en la ideológica pues D. Carlos
seguía profesando los principios absolutistas y foralistas frente al carácter liberal y centralista
de Dña. Cristina. Finalmente, cada uno de los bandos contaba con apoyos internacionales: La
Santa Alianza (Austria , Prusia y Rusia) simpatizaba con la causa de D. Carlos mientras como
reacción se crea la Cuádruple Alianza por Inglaterra, Francia y Portugal en defensa de los
intereses liberales y cristinos.
Los enfrentamientos entre las dos facciones pronto trascienden del nivel de las
negociaciones y el 8 de Julio de 1.834 D. Carlos entra en Navarra tras atravesar diversas
peripecias desde su salida hacia Inglaterra desde Portugal; bajo su mando se aglutinan todas las
partidas de guerrilleros que hasta ese momento habían combatido con más voluntad que
disciplina en defensa de su causa; un factor vital durante esta primera época fue el apoyo de las
armas carlistas en el genial Zumalacárregui, quien entre marcha y contramarcha forzada supo
forjar un ejército que podía enfrentarse en campo abierto a las disciplinadas tropas isabelinas .
Se trata en definitiva de una guerra civil en la que las atrocidades fueron cosa habitual en
ambos bandos, no se daba cuartel a civiles ni militares y los prisioneros eran fusilados por
principio. Sólo tras ratificarse en 1.835 el " Convenio Elliot" ( así llamado por ser ese el
nombre del Lord inglés que impulsó las negociaciones ) se admitió el estatus de prisionero de
guerra para los cautivos del otro bando, pero excluyendo del mismo a los extranjeros que
militaban en ambos ejércitos. Cabrera, general carlista que dominaba Levante apodado "El
Tigre del Maestrazgo", nunca llegó a ratificar dicho Convenio.
A grandes rasgos podemos diferenciar tres etapas que marcan los avatares de esta guerra
Primera Etapa: Desde la llegada de D. Carlos a Navarra hasta la muerte del General
Zumalacárregui en el Primer Asedio de Bilbao .
Segunda Etapa: ó etapa de las expediciones; numerosas columnas carlistas salen del norte para
extender su influencia y apoyar a sus partidarios recorriendo toda España, en ésta fase cabe
destacar la llamada "Expedición Real" que llegó a las puertas de Madrid el 24 de Agosto de
1.837. Durante esta expedición tienen lugar las batallas de Villar de los Navarros y Huesca,
resonantes victorias carlistas.
Tercera Etapa: Nombramiento de Maroto como Comandante en Jefe de los ejércitos carlistas,
hasta el "Abrazo de Vergara" que provoca el final de las hostilidades en el Norte y la salida de
España de D. Carlos; queda sólo Cabrera quien poco a poco sería cercado ante la abrumadora
superioridad de las fuerzas liberales.

BREVE CRONOLOGIA DE LA PRIMERA GUERRA CARLISTA

AÑO 1.833
7 de DICIEMBRE: Zumalacárregui es nombrado en Echarri Aranaz (Navarra) jefe de todas las
fuerzas carlistas del norte.
23 de DICIEMBRE: Victoria carlista de Guernica sobre las tropas cristinas mandadas por Solar
de Espinosa.
29 de DICIEMBRE: Batalla de Nazar y Asarta, Zumalacárregui con 3.000 hombres derrota a
las columnas unidas de Valdés, Lorenzo y Oraá.
AÑO 1.834
27 de ENERO: Zumalacárregui se apodera de la fábrica de armas de Orbaizeta obteniendo
vitales suministros de armas y municiones para sus tropas (hasta entonces no contaban con más
de 10 cartuchos por fusil).

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21 de ABRIL: Batalla de Alsasua, derrota del general Quesada a manos de Zumalacárregui y
2.000 soldados. El ejército cristino estaba formado por dos regimientos de la Guardia Real,
granaderos del mismo cuerpo, y un batallón de provinciales.
26 de JUNIO: Rodil sustituye a Quesada.
9 de JULIO: Entrada de D. Carlos en España por el pueblo navarro de Urdax, esa noche
pernocta en Maya.
15 de SEPTIEMBRE: Fallecimiento de la esposa de D. Carlos, Dña. Maria Francisca de Asís
de Braganza, en Inglaterra.
22 de SEPTIEMBRE: Cese de Rodil, sustituido por Espoz y Mina.
27 y 28 de OCTUBRE: Nuevas victorias de Zumalacárregui en la llanada de Vitoria
(Salvatierra y Alegría) frente a los generales Osma, Figueras y O'Doyle quienes confiaban en
vencer al carlista apoyándose en el terreno abierto y su superioridad de artillería y caballería.
Fusilamiento de O' Doyle.
28 de NOVIEMBRE: Suceso de los Urbanos de Villafranca, una guarnición de milicia isabelina
del pueblo navarro de Villafranca es asediada y desalojada de su reducto en la iglesia de dicho
pueblo.
AÑO 1.835 .
2 de ENERO: Batalla de Ormaíztegui, derrota de Carratalá , que debe abandonar campo con
9.000 hombres de los 12.000 con que inició el combate contra los 3.000 carlistas de
Zumalacárregui.
14 y 15 de ENERO: Batalla de Arquijas: Fernández de Córdova y Oráa son derrotados por los
carlistas.
5 de FEBRERO: Segunda Batalla de Arquijas, El general isabelino Lorenzo al mando de
10.000 soldados es derrotado por Zumalacárregui y sus once batallones.
MARZO: los carlistas toman Echarri Aranaz y Los Arcos. El 14 Mina realiza la cruel acción de
diezmar a los habitantes del pueblo navaro de Lecaroz .
ABRIL: de resultas de sus derrotas y la bárbara represión que realizó durante su gobierno, Mina
es sustituido por Valdés. Del 19 al 24, Zumalacárregui derrota a 25.000 hombres al mando de
valdés en la Batalla de Las Amézkoas. Los cristinos son también vencidos en Guernica. Llega
Lord Elliot a negociar el Convenio para humanizar la guerra.
JUNIO: Operaciones contra diversas villas de las provincias, derrota de Espartero, El Pastór y
Oráa en diversos encuentros. Cerco de Bilbao y muerte de Zumalacárregui por septicemia, de
resultas de una herida recibida en la pierna el día 15.
JULIO: El General Eraso toma el mando del ejército carlista, se levanta el sitio de Bilbao,
Batalla de Mendigorría en que Fernández de Córdova derrota al general carlista González
Moreno, pudiendo acceder a Puente La Reina y Mañeru. Expedición del General carlista
García.
SEPTIEMBRE: Diversas escaramuzas en Arrigorriaga.
OCTUBRE: González Moreno obtiene el mando supremo del ejército carlista.
2 de NOVIEMBRE: Cabrera es nombrado Comandante General del Bajo Aragón. Entrada en
España del Infante D. Sebastian, sobrino de D. Carlos.
21 de DICIEMBRE: Victoria de Cabrera en Terrer, posteriormente sería derrotado en Molina de
Aragón.
AÑO 1.836 :
ENERO: Batalla de Arlabán, de resultado indeciso.
FEBRERO: Los cristinos recuperan más de 300 pueblos en las provincias del norte.
MARZO: Victorias de D. Francisco García frente a los cristinos.
ABRIL: Toma de Lequeitio el día 12, Guetaria . Balmaseda y Plencia caen en manos de los
carlistas que se aprovisionan de artillería, fusiles y municiones en gran número.
MAYO: Muerte del General carlista Sagastibeltza en combate con la Legión inglesa en la línea
de San Sebastián el día 15.
JUNIO: Expedición de Gómez quien recorrerá casi toda la Península.

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OCTUBRE: Nuevo sitio de Bilbao, que finalmente logra levantar el General Espartero, quien
en septiembre se había hecho cargo del mando de las tropas liberales. El infante D. Sebastián
asume el mando de los carlistas.
AÑO 1.837
MARZO: Derrotas cristinas en Oriamendi, donde D. Sebastián aniquila a la Legión Inglesa de
Lacy, y en Barbastro donde es Oráa el derrotado. También obtienen victoria en Huesca frente al
General Iribarren las armas carlistas.
JUNIO: Unión con Cabrera de las tropas del norte en Cherta, paso del Cinca y Batalla de
Agramunt, donde el General cristino De Meer derrota a los carlistas.
24 de AGOSTO: Batalla de Villar de Los Navarros, calificada como "La última batalla
romántica", en que los carlistas derrotan a sus enemigos en toda regla.
12 de SEPTIEMBRE: El ejército carlista a las puertas de un Madrid indefenso, se detiene.
17 de SEPTIEMBRE: Tras renunciar por causas que aún se debaten a entrar en Madrid, D.
Carlos llega a Guadalajara.
29 de OCTUBRE: Proclama de Arciniega, donde D. Carlos a su regreso a las provincias del
norte intenta justificar la falta de resultados de lo que pudo ser el triunfo para las armas
carlistas.
NOVIEMBRE: Guergué toma el mando del ejército carlista y logra reconquistar los 300
pueblos perdidos a manos de los cristinos anteriormente. Sin embargo es posteriormente
derrotado por Espartero en Peñacerrada y pronto sería sustituido por Maroto.
AÑO 1838
25 de ENERO: Cabrera se apodera de Morella y Benicarló.
MARZO: D. Carlos reside en Estella, capital oficial de la causa carlista.
MAYO: Motines diversos en los batallones carlistas debido a la falta de suministros y la
inacción.
JULIO: Oráa sitia Morella con 23 batallones, 12 escuadrones de caballería y 25 cañones.
Cabrera se le opone con 18 batallones y 24 cañones.
18 de AGOSTO: Los cristinos levantan el sitio de Morella.
SEPTIEMBRE: Contraviniendo las órdenes de Maroto, se entablan diversos combates en
Navarra y Castilla con triunfos para los carlistas.
1 de OCTUBRE: Victoria de Cabrera en Maella sobre el ejército del General Pardiñas, que es
herido de muerte.
DICIEMBRE: Una columna cristina es derrotada en Los Arcos, y otra al mando de Espartero
sigue la misma suerte en Lapoblación.
AÑO 1.839
18 de FEBRERO: Maroto fusila en El Puy a los generales García, Sanz, Guergué, Carmona y
Uriz, entre otros ilustres carlistas.
21 de FEBRERO: D. Carlos es enterado de los fusilamientos y declara a Maroto traidor,
destituyéndole de sus cargos. Maroto al frente de varios batallones llega el día 23 a Tolosa.
24 de FEBRERO: D. Carlos revoca su decreto en que declaraba a Maroto traidor ante la presión
de las unidades mandadas por éste. Represalias de Maroto quien lleva a cabo una purga en las
líneas de mando carlistas para favorecer así la negociación con los liberales.
MAYO Y JUNIO: se pierden gran número de plazas a manos de los cristinos.
29 de AGOSTO: Maroto, con el apoyo de los batallones guipuzcoanos, rubrica en Vergara las
conversaciones que desde hace tiempo había llevado con los cristinos, tal acuerdo se sella con
un abrazo entre Espartero y Maroto. Los batallones navarros y alaveses siguen fieles a D.
Carlos.
SEPTIEMBRE: D. Carlos y los restos del ejército del norte cruzan a Francia. Sólo Cabrera
resistirá contra las cada vez más numerosas tropas cristinas hasta el 5 de JULIO de 1.840.

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A CONTINUACION REPRODUCIMOS LAS NARRACIONES HECHAS POR DIVERSOS
TESTIGOS DE BATALLAS QUE TUVIERON LUGAR DURANTE ESTA GUERRA , A
FIN DE SUMINISTRAR DATOS Y SUPUESTOS QUE LOS JUGADORES PUEDAN
SIMULAR EN SUS COMBATES. LOS GRAFICOS QUE LES ACOMPAÑAN *no aparecen
en internet, los interesados pueden solicitarlos vía Email* SON REPRESENTACIONES
ABSTRACTAS DE LOS RESPECTIVOS CAMPOS DE BATALLA .

.-COMBATE DE ARANZUEQUE ( 19 de Septiembre de 1.837 ) .

De regreso la Expedición Real de Madrid, los carlistas eran perseguidos de cerca por los
generales Espartero y Lorenzo; los carlistas sumaban 12.000 hombres frente a 25.000 infantes y
12.000 jinetes cristinos. A las 9 de la mañana los liberales realizan un ataque general contra la
línea carlista que huye en desbandada, quedando cubierta la retaguardia por un batallón navarro
y un escuadrón de lanceros .
Aranzueque está situado al pie de una montaña elevada, de cuyas laderas le separa el Río
Tajuña y un pequeño espacio de terreno abierto. Allí se entabla de nuevo el combate atacando
los liberales por tres lados mientras los carlistas intentan cruzar el puente de Aranzueque. Una
batería rodada cristina es emplazada en el atrio de la iglesia, reforzada posteriormente por otra
batería de campaña que hostigan con su fuego a las unidades carlistas, las cuales se agolpan en
el puente. Finalmente el ejército de D. Carlos logra deshacerse de sus perseguidores.

APLICACION AL WARGAME :
Se trata de la típica situación de una fuerza perseguida por un enemigo superior en número y
moral, que debe ir realizando acciones de retaguardia para retrasar al perseguidor, sin sacrificar
muchas unidades. Este debe acosar a su presa pero sin sufrir pérdidas excesivas que pongan en
peligro una batalla en principio ganada, por ello deberá desplegarse para aniquilar cualquier
resistencia e intentar cortar la única vía de retirada del ejército carlista, capturando el mayor
número de unidades y bagaje con el menor número de bajas.
Los carlistas tienen como objetivo atravesar el puente, situado en un extremo de la mesa, y
los cristinos entrarán en su persecución transcurridos el número de turnos que resulten de lanzar
un dado de 6 caras (1d6). La moral de sus tropas será inferior a la del enemigo, no tienen
artillería y la caballería será 1/4 de la desplegada por los liberales.
El jugador liberal debe buscar la mayor eficacia con el mínimo riesgo. Será éxito total si
logra cortar la retirada por el puente a al menos un tercio del ejército carlista ó capturar a D.
Carlos; se considera victoria parcial si las bajas carlistas duplican el número de bajas propias.
Otro resultado será empate, salvo que el carlista conquiste las baterías enemigas y causa más
bajas al enemigo que las propias.

.- BATALLA DE RETUERTA ( 5 de Octubre de 1.837 ) :

El Diario de Sanz narra con sencillez la batalla: "Con efecto tomaron posiciones en las
inmediaciones de Retuerta, y esperaron (los carlistas) a los contrarios; los atacaron, los batieron
como era de esperar, y les hicieron varios oficiales y soldados prisioneros. El Rey (D. Carlos)
estuvo durante la acción en una pequeña altura de Santo Domingo de Silos y a las seis se retiró
con las tropas a Mamolar".
De otros testimonios extraemos un resumen más extenso y detallado: El combate duró desde
las 7 de la mañana hasta la puesta de sol, con gran ensañamiento por ambas partes; el campo de
batalla es un terreno difícil salpicado de pinos y arbustos en los claros del pinar, despeñaderos,
barrancos y riscos. La carretera une en línea recta los campos donde se desplegaron los dos
ejércitos, y en ella se dio lo principal de la batalla.

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Esta comenzó con fuego entre las avanzadillas, en orden abierto, ocultas entre la maleza y
los abetos. A las 9 se generalizó el combate: el ejército de Zaratiegui formaba el ala derecha
carlista mientras en la izquierda mandaban Sopelana y Von Rahden hasta que Moreno avanzó
hacia allá con la reserva.
En la carretera espaciosa se entabló lucha con la caballería liberal, y en ese combate los
húsares cristinos, uniformados con pellizas blancas y capas azules, iban ganando terreno a la
infantería carlista hasta que recibieron un contraataque de dos escuadrones de lanceros navarros
los cuales a su vez han de retroceder al ser ametrallados por una batería cristina. Durante toda la
refriega los morteros hicieron gran destrozo en las líneas de D. Carlos .
Al caer la tarde Espartero lanzó un vigoroso ataque contra el flanco derecho, haciendo
retroceder a Zaratiegui; Moreno preparó la retirada hasta Santo Domingo de Silos a cubierto por
los batallones alaveses, tropas muy disciplinadas que combatieron a las órdenes del General
Sopelana.

Tropas intervinientes:
Carlistas: 11.000 infantería y 1.000 caballería.
Liberales: 20.000 infantes y 1.800 caballos.

COMENTARIOS Y APLICACION AL WARGAME :


En esta batalla el elemento más decisivo lo constituyó el terreno difícil y quebrado que
impedía las grandes maniobras, pues a la vista del número de tropas intervinientes por ambos
bandos, las consecuencias son más propias de una escaramuza que de una batalla campal. El
esfuerzo de los liberales se encaminaba a desalojar a los carlistas de la carretera, por lo que una
de las condiciones de victoria ha de ser el mantener en todo tiempo el dominio de este punto de
la línea carlista. Debe penalizarse la utilización de la caballería fuera de dicha carretera (y una
franja adyacente), así como el movimiento de la artillería por el terreno boscoso.
También la puntería de los cañones excepto a distancia corta debe reflejar las dificultades e
imprecisión a la hora de alcanzar los blancos señalados, ya que se encuentran ocultos y
resguardados por los pinares. Para reflejarlo se lanzará 1d6 cada vez que un cañón haga fuego
a distancia larga, y si el resultado es un 1, el disparo caerá a 10 cm. al norte del centro del
blanco designado; si sale un 2, la desviación será al sur; un 3 al este y un 4 al oeste,
considerando que el resultado de 5 ó 6 ha hecho blanco sobre el objetivo designado.
La moral de los soldados de ambos ejércitos es similar, tropas veteranas, destacando los
húsares liberales (élite) y los batallones alaveses carlistas (élite).

.- BATALLA DE HUESCA ( 24 de Mayo de 1.837 ) :

El General Iribarren, procedente de Zaragoza, al mando de 7.000 hombres, 600 caballos y 14


cañones se presentó a las 3 de la tarde ante las avanzadillas carlistas que protegían al ejército
acantonado en Huesca. La sorpresa fue casi total y sólo cuatro batallones navarros mandados
por el General Sanz que estaban acampados en la altura del cementerio que domina la carretera
de Zaragoza, resistieron el embate de todo el ejército enemigo, mientras nuevas unidades se
agregaban a la lucha sin concierto, conforme se iban formando, hasta que finalmente los
carlistas lograron estabilizar su frente y mantener las posiciones.
La infantería cristina se había organizado para el ataque inicial en tres columnas de ataque,
al mando de los Brigadieres Conrad (comandante de la Legión Francesa) y Van Halen.
Una vez contenido el ímpetu liberal la caballería carlista pasó al contraataque en el ala
derecha, teniendo los liberales que protegerse formando el cuadro hasta que un regimiento de
coraceros les asistió, lanza en ristre. Esta unidad también tuvo que retirarse al sufrir el ataque de
un batallón carlista que llegó de refresco. Viendo que la línea liberal comenzaba a dar señales
de desorden, el general Sopelana formó en columna de ataque a los cuatro batallones alaveses y
cargó contra el centro enemigo mientras de forma simultánea la caballería de D. Carlos lo hacía
contra el ala izquierda cristina.

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Los coraceros cristinos abandonaron el campo, dejando indefensa a su infantería frente a los
lanceros carlistas, a los que resistieron en formación de cuadro hasta que al amparo del
anochecer pudieron retirarse.
Bajas carlistas: 480 hombres
Bajas cristinos: 2.000 heridos y muertos, entre ellos el propio General Iribarren y el General
León, quien mandaba la caballería y murió de un lanzazo.
El número de tropas que componía el ejército carlista se estima en el doble que su oponente.

COMENTARIOS Y ADAPTACION AL WARGAME :


Las unidades del ejército carlista deben comenzar el encuentro dispersas en sus alojamientos
de Huesca y en situación de descanso ó desorden, a excepción de los cuatro batallones navarros
(9º, 10º y 12º y los Guías de Navarra) que fueron la primera línea de defensa. Los batallones
carlistas deben irse activando según una tabla de tiempo en la cual se refleje una mayor
probabilidad conforme vayan pasando los minutos (por ejemplo, cada turno se lanza 1d10 y con
un 1 se activa un batallón el primer turno, con 1 ó 2 el segundo, y así sucesivamente...). Las
tropas navarras tendrán la calificación de élite y el resto serán tropas normales para reflejar así
la sorpresa de tener que combatir sin esperarlo , y en posiciones no preparadas.
Por parte liberal, la iniciativa les corresponderá durante los primeros turnos de forma
automática, y su grueso debe formarse en columna de ataque. La moral se considerará
veteranos.
En cuanto al terreno, el único obstáculo a resaltar es la colina desde donde los batallones
navarros hicieron frente al enemigo, parece ser que atrincherados en una ermita ó el cementerio;
el resto será llanura con campos de labor, atravesada por la carretera de Zaragoza desde donde
se debe iniciar el ataque cristino.
Ambas caballerías deben tener la moral de veteranos pues la lucha entre ellas fue feroz.
Destacaremos también la disciplina de los liberales, cuyo entrenamiento les permitió formar el
cuadro y ejecutar una retirada en orden tras ver fracasar su ataque, sin que cundiera el pánico.
Como condiciones de victoria: los cristinos han vencido si logran desalojar de Huesca a su
enemigo, mientras los carlistas no sólo deben mantener esa plaza sino que han de conseguir
deshacer la caballería enemiga y causarle mayores bajas de las que sufran ellos mismos para
poder reclamar el triunfo; cualquier otro resultado se considera un empate y victoria marginal
del que mayor número de bajas haya causado a su enemigo.

.- BATALLA DE BARBASTRO ( 2 de Junio de 1.837 ) .

Así narra en su diario D. Florencio Sanz esta importante batalla que supuso junto a Villar de
Los Navarros el punto más alto de las armas carlistas: "Tenía el Rey dispuesta una función de
iglesia en las capuchinas del Corazón de Jesús; pero a las siete de la mañana anunciaron las
cajas que el enemigo estaba próximo; corrieron las tropas a buscarlo, le atacaron a las once y a
las cinco ya lo llevaban en retirada con nuevo y glorioso triunfo. Asistió S.M. a la acción
ocupando la ermita de San Román, y a las seis volvió a la ciudad, pasando por el hospital de
sangre, donde consoló a los desgraciados que la derramaban por una causa tan noble como
santa." La sencillez de este párrafo oculta una lucha cruel y el combate en que las legiones
extranjeras de los respectivos bandos se aniquilaron en combate sin cuartel, como veremos.
El 2 de Junio atacó Oráa seriamente con 18.000 hombres distribuidos en 24 batallones y
2.000 caballos y 20 cañones a la Expedición Real de D. Carlos. Unos montículos cubiertos de
olivos forman un semicírculo cóncavo a unos mil pasos al oeste de Barbastro, que está asentado
en una hondonada. Los liberales debían atravesar una llanura despejada durante una media hora
de marcha para poder llegar a esos olivares, donde se encontraba la avanzada carlista. La línea
de éstos se apoyaba en su ala derecha en una cadena de montañas y el ala izquierda en las
orillas del Río Cinca; la carretera de Zaragoza y Monzón a Barbastro atravesaba
perpendicularmente el centro.

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El centro y ala izquierda de los liberales quedaban desplegados sin apoyo significativo, en
cambio la fortaleza de Monzón ofrecía arrimo y lugar de repliegue a su derecha (ese enclave
recibe el nombre de Cordillera de la Torre de Gracia).
A lo largo del día los ataques de Oráa fueron a estrellarse uno tras otro contra los bien
defendidos olivares, quedando las líneas cristinas desordenadas. En ese punto se encontraba la
Legión Extranjera carlista, en su mayoría franceses y alemanes, la cual tenía en lugar de banda
de música un orfeón. Cuenta el Príncipe Lichnowsky la crudeza de ese combate: "Fue horrible
el momento en que las dos legiones extranjeras se atacaron a la bayoneta entre los olivos.
Muchos de ellos se reconocieron, se llamaron en alemán o en francés y, antigüos camaradas, se
desgarraban las entrañas..."
A la hora del mediodía comenzó el bombardeo cristino mientras en la linde de los olivos se
desarrollaba un terrible combate de infantería. Tras una primera embestida que casi desarbola el
centro carlista, el ataque enemigo fue rechazado por refuerzos. El ala izquierda carlista (donde
se hallaba desplegada la Legión Extranjera) se encontraba mandada por Zabala, y allí como ya
hemos dicho, chocaron con la Legión Extranjera Cristina mandada por Conrad; al inicio de la
batalla esta Legión contaba con 850 hombres, después de la Batalla de Barbastro no acudieron
a filas más de 160 soldados.
Tras repetidos y frustrados ataques, Oráa en persona, al atardecer dirigió todas sus tropas
(entre las que se encontraban unidades de élite como el Regimiento de Borbón, húsares y
lanceros de la Guardia Real) contra el ala derecha carlista, a lo que éstos contestaron cargando
con su reserva de caballería -cuatro escuadrones- intentando flanquear el extremo izquierdo de
la línea de Oráa. esa circunstancia fue aprovechada por el General Moreno, el cual puso en
marcha toda su infantería y avanzó todo el frente carlista pasando al contraataque. Las unidades
cristinas desalentadas por el fracaso repetido de sus ataques, fueron rechazadas y debieron
retroceder abandonando 100 muertos y 650 heridos.

COMENTARIOS Y ADAPTACION AL WARGAME :


Esta es una de las escasas ocasiones en que el ejército carlista adopta una postura defensiva
al abrigo del terreno; sin que los olivares parezca que constituyen otra cosa que un lindero
geográfico, más que un auténtico obstáculo físico, por tanto los consideraremos terreno normal
a efectos de movimiento y protección débil para disparos y combate.
Como regla especial las Legiones Extranjeras una vez que entren en contacto una con otra
no dejarán el combate cuerpo a cuerpo ni pasarán test de moral, sino que irán sumando puntos
de desgaste gasta que una de ellas caiga aniquilada. Ambos ejércitos se muestran en igualdad de
condiciones en entrenamiento y experiencia, por lo que habrá que calificarlos como veteranos.
Condiciones de victoria : los cristinos deben desalojar de sus posiciones al enemigo; los
carlistas obtienen la victoria si al caer la tarde mantienen su terreno sufriendo menor número de
bajas que el oponente. Cualquier otro resultado son tablas, con victoria parcial carlista.

.- BATALLA DE GUISONA ( 12 de Junio de 1.837 )

En esta batalla los cristinos contaban con superioridad artillera, mientras el ejército carlista
se había reforzado con varios batallones catalanes. Así lo narra el cronista en su diario: "Poco
antes de las ocho se presentó el enemigo a legua y media de distancia con 25 batallones y 1.200
caballos. El Rey se trasladó a Iborra, donde entró a las cinco de la tarde, habiéndose detenido en
varios puntos a oír el fuego y recibir noticias de la acción que se había empeñado entre Gra y
Guisona. Estando en Iborra llegó S.A. y manifestó que en lo más brillante de la acción
flanqueó el enemigo por la parte que ocupaba un batallón catalán todavía novicio al fuego de
artillería y cargas de caballería, por lo que fue preciso ceder el campo, y privarnos de un
glorioso triunfo."
Como a continuación veremos, el error carlista fue el independizar los refuerzos catalanes (4
batallones y 2 escuadrones) del ala derecha, que poco acostumbrados a combatir en campo
abierto, no pudieron resistir el choque de la caballería cristina, que irrumpió violentamente en

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sus líneas. Sólo la intervención de los escuadrones de D. Carlos pudo evitar una catástrofe
mayor, pero ya la línea carlista se había fragmentado en pequeños grupos que luchaban por su
vida no cabiendo otra opción al General González Moreno que ordenar la retirada, mientras la
caballería contenía la persecución liberal.
Hacia las nueve formaron las tropas carlistas en orden de batalla en una serie de colinas
pobladas de árboles, que como primer término de elevadas montañas ofrecían un terreno
favorable.
El General De Meer se presentó para dar batalla a los carlistas, tomando Guisona como
punto de apoyo; como ya citamos, a los carlistas se habían unido varios batallones al mando del
General Ros de Eroles de tal modo que las fuerzas de ambos ejércitos totalizaban unos 12.000
soldados cada uno, pero los cristinos contaban con superioridad artillera.
Iniciaron el ataque los carlistas: la infantería formada en columnas y las compañías de
granaderos y cazadores en primera línea desplegados en guerrilla; la caballería en los flancos ya
que en el centro no lo permitía el terreno y no era preciso tener escuadrones en reserva. La
división catalana se colocó en el ala derecha como cuerpo independiente debido a su manera
indisciplinada de combatir: luchaban en guerrillas sin reserva, disparaban a 500 pasos y se
volvían corriendo.
La cuerda del arco que formaban los carlistas sobre las colinas arboladas tenía una longitud
de media legua, desplegándose entre Guisona (ala derecha) y Gra (ala izquierda) con alguna
fuerza en San Martín y La Morana.
Los cristinos apoyaron su ala izquierda en Guisona y su centro y ala derecha estaban en una
altura cuyo declive llegaba hasta las avanzadillas carlistas. Delante de la infantería, los cañones
en batería, y la caballería quedaba oculta en retaguardia.
Se destacó la infantería carlista y cruzó un arroyo que pasaba al pie de sus líneas; los
batallones corrían a paso de carga para romper la línea enemiga, debiendo soportar el
contraataque de 1.500 jinetes liberales durante su avance, los cuales fueron rechazados, pero
esta carga ya había desorganizado las unidades carlistas que al llegar a la línea cristina fueron
recibidos con repetidas descargas de fusilería que les hizo retroceder hasta su punto de partida.
Eran las tres de la tarde cuando la caballería cristina cargó de nuevo, apoyada por tres
compañías del 2º Regimiento de la Guardia Real, contra el ala derecha en la que estaban los
catalanes, éstos echaron a correr desapareciendo en el bosque próximo pues no estaban
habituados a soportar a pie firme la carga de caballería. Ante ese movimiento la línea cristina
avanzó al sonido de sus tambores mientras la artillería redoblaba su bombardeo de las líneas
carlistas. El flanco derecho y el centro de D. Carlos se habían desmoronado y sólo un escuadrón
de lanceros con sus cargas repetidas ponía freno a la persecución de los liberales, la lucha
continuó en el bosque dispersándose los jinetes en grupos de 10 ó 12.
Únicamente los batallones alaveses de Sopelana cubrieron la retirada junto a medio
escuadrón, el repliegue desordenado y la persecución llegaron hasta Cervera; al final de la
jornada los carlistas habían sufrido 2.000 bajas, por unas 700 liberales.

COMENTARIOS Y ADAPTACION AL WARGAME :


El terreno donde se desplegaron los ejércitos era elevado, colinas que no desordenan ni
limitan el movimiento pero a retaguardia de la línea carlista existe una zona boscosa que se
debe calificar de terreno difícil, a efectos de desorden, combate y movimiento. El arroyo que
cubre el frente carlista no tiene mayor relevancia que ser un punto de referencia pues las
crónicas no reflejan ningún otro efecto.
En cuanto a la calidad de las tropas, la división catalana debe ser calificada como milicia,
novatos sin experiencia y con moral débil. Aquí podemos plantearnos un supuesto interesante:
¿Qué hubiera pasado si, en lugar de desplegar esta división agrupada en un ala se hubiera
dispersado entremezclándola con los demás batallones, ya curtidos por anteriores batallas? Es
una posibilidad a explotar en nuestro juego.
La moral del resto del ejército carlista será de veteranos ó entrenados, a excepción de la
caballería y los batallones alaveses que -como en otras ocasiones- salvaron al ejército, éstos
serán calificados como élite.

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Las unidades liberales deben tener la misma categoría que los soldados carlistas en lo
referente a entrenamiento y moral, siendo élite la caballería cuyas cargas repetidas le dieron la
victoria.
Las condiciones de victoria para el carlista están en mantener la línea, a pesar de que fueron
sus batallones los que empezaron la refriega, tal vez para sustraerse al fuego artillero que les
hubiera machacado de no cargar. El liberal para estar a la altura del mando contemporáneo debe
destruir un ala del despliegue enemigo y causar el doble de bajas de las que él mismo sufra.
Si deseamos reproducir fielmente las circunstancias históricas, se debe penalizar en el test de
resistir las cargas que se declaren por la caballería contra las tropas de la división catalana a
éstas unidades para reflejar su bisoñez en el combate contra caballería.

.- COMBATE DE CHIVA ( 15 de Julio de 1.837 )

"A todo esto, y gracias a las detenciones de San Mateo y Villarreal de los Infantes, se habían
reunido las columnas de Oráa, Borso y Nogueras, y estaban cerca por lo que retirándonos de
Burjasot, marchamos el día 13 a Chiva y nos detuvimos allí el 14; el enemigo llegó a Cuarte,
distante unas tres horas, y en nuestro ejército se dio orden general en la noche del 14 para que a
la mañana siguiente se limpiase el armamento... y no teniendo más que unas cargas de
cartuchos que repartidos a la División Expedicionaria y a siete batallones de Cabrera apenas
tocarían dos por plaza" y continúa el Diario de Sanz señalando la batalla que tuvo lugar al día
siguiente:
"15 de Julio: A las seis y media de la mañana cayó el enemigo sobre la primera división, fue
contenido y atraído hacia el pueblo donde se generalizó el combate, que se sostuvo con
bizarría, pero cediendo el flanco derecho por falta de municiones, penetraron por allí los
contrarios y fue indispensable la retirada que se hizo con orden..."
A lo largo del camino de la Expedición Real fuera de su entorno natural en las provincias
del norte, no es la única ocasión en que el ejército carlista es sorprendido por sus enemigos y
sólo a duras penas pueden escabullirse tras duros combates. Resulta por tanto evidente, que
fuera de los territorios citados no contaban con la red de espías y confidentes ni con el
conocimiento del terreno que tan buenos resultados les proporcionaba. No puede entenderse de
otra manera el hecho de que estando el ejército cristino tan cercano, se diera la noche anterior a
la batalla orden de desmontar y limpiar los fusiles; de tal modo que la vanguardia fue
sorprendida en esa tarea de limpieza, huyendo los soldados a excepción de tres compañías de
Guías de Navarra que quedaron prisioneros.
Los cristinos entraron en el pueblo de Chiva sin oposición, teniendo D. Carlos que
refugiarse en un cerro situado tras la villa. El fuego se inició a las 9:30 de la mañana atacando
los cristinos esta vez el ala derecha que estaba al mando de Cabrera, éste se adelantó al
interpretar mal una orden ó tal vez por exceso de ímpetu. En todo caso la brecha producida en
el frente carlista fue aprovechada por las fuerzas enemigas para penetrar por el centro, y sólo
una carga de la caballería logró restablecer la situación.
Los carlistas se replegaron hacia un puente situado en su flanco izquierdo intentando tomar
posición entre el río y la villa, aprovechando la pendiente de las calles cuando comenzó a
hacerse notar la falta de municiones. Moreno en persona mandaba el flanco izquierdo y ordenó
la retirada por escalones apoyándose en unos graneros que eran las últimas edificaciones del
pueblo, situados a 100 metros de la carretera, de construcción sólida, adosados sus muros
laterales y con una especie de proa ó ángulo en común , estando el terreno cubierto de bardales
y cercas.
Los batallones del centro y ala derecha se replegaron hasta un desfiladero, momento en que
Oráa, tras dos horas de combate, decide lanzar toda su caballería (unos mil jinetes) frente a la
carretera. En el momento en que el ejército carlista se hallaba a punto de desintegrarse
aparecieron dos batallones y dos escuadrones colocados al principio tras el desfiladero en
reserva , y dio tiempo a replegar la retaguardia.

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El combate duró 5 horas y los carlistas tuvieron 800 hombres de bajas y 200 prisioneros,
mientras los cristinos perdieron 600 hombres de tropa y algunos oficiales.
COMENTARIOS Y ADAPTACION AL WARGAME :
Resulta asombrosa la capacidad de reaccionar del ejército carlista ante el cúmulo de
circunstancias negativas ó decisiones erróneas que debieron sobrellevar en la batalla, y que
vamos a intentar trasladar a la mesa de juego:
En primer lugar, durante los 5 turnos iniciales los soldados de D. Carlos sólo podrán
combatir a la bayoneta, con su moral reducida a novatos ó milicia para representar la sorpresa y
falta de preparación con que les pilló el enemigo. Además los batallones deberán esparcirse al
azar por el pueblo y sus alrededores, simulando su situación de acantonamiento, y sólo podrán
entrar en línea de batalla cuando sean atacados por el enemigo o se saque un 1 en 1d6. También
durante esos 5 turnos la iniciativa corresponderá de forma automática a los cristinos.
Cada vez que una unidad carlista intente disparar, se lanzará 1d6 y sólo si el resultado del
dado es un número par, la unidad tendrá munición suficiente para disparar, en caso de resultado
impar se entiende que la munición se ha agotado y no podrá hacer fuego (puede endurecerse
más o menos la regla dejando que la unidad lo intente al turno siguiente ó considerando el
resultado desfavorable como definitivo para el resto de la batalla).
El movimiento errático y no ordenado de Cabrera con el ala derecha, causante del hueco por
el que rompieron la línea los liberales, se refleja disminuyendo para esa batalla los puntos de
iniciativa de Cabrera a 1, y además penalizando su capacidad para recibir órdenes. Igualmente
puede marcarse un movimiento forzoso de todas las unidades al mando de Cabrera hacia
adelante si el enemigo se encuentra a menos de 15 cm.
En cuanto a moral y experiencia de la tropa, los cristinos son tropas veteranas y
disciplinadas mientras las unidades del ejército carlista se calificarán de entrenadas pero como
si no tuvieran experiencia, excepto la caballería, los Guías de Navarra y los dos batallones de
reserva que serán élite ó veteranos.
Los dos batallones y dos escuadrones de reserva que finalmente lograron salvar la jornada,
pueden ser escondidos y permanecer ocultos en el punto del despliegue carlista que el jugador
al mando de ese ejército desee.

.- BATALLA DE VILLAR DE LOS NAVARROS ( 24 de Agosto de 1.837 )

Para el escritor D. José María Azcona, esta fue la última batalla romántica, con formaciones
previas, elección del campo, toques de clarín, lanzas y gonfalones: "Los jefes iban poniendo sus
batallones como se ponen las piezas de ajedrez antes de comenzar la partida. Las fuerzas
estaban equiparadas: unos 8.000 hombres a cada lado. Todo ello a menos de quinientos pasos,
bajo un sol de agosto que destellaba en los cañones de los fusiles y en las cazoletas de los
sables, y que lucía con fuerza para que se pudieran ver las columnas..."
Antes de comenzar la lucha hubo desafíos entre la oficialidad de ambos contendientes, en
una de esas escaramuzas estuvo implicado Von Rahden, militar alemán al servicio carlista:
"Millares de soldados se contemplaban en silencio. Los ayudantes de campo galopaban de un
lado a otro llevando órdenes que se podían oír en ambos bandos como en una revista. De pronto
oí voces a mi espalda, en el centro de nuestro ejército. Eran el Príncipe Lichnowsky y el
Coronel Álvarez de Toledo que provocaban a desafío a un escuadrón de húsares enemigos y a
sus oficiales cuerpo a cuerpo..." la carga de la caballería de D. Carlos fue fulminante, arrollando
todo lo que se ponía delante. Todo el tren de artillería, los bagajes, 5.000 fusiles, municiones y
botiquines fueron el botín de guerra de esta victoria carlista.
Contrasta la trascendencia de esta batalla, que dejaba la capital de España a merced del
pretendiente, con lo sucinto de las narraciones que nos han transmitido los testigos que allí
estuvieron. El orden cronológico de la batalla fue el siguiente:
A las 10 de la mañana las tropas de los dos ejércitos se hallaban desplegadas en orden de
batalla; Herrera mandaba los cristinos, a los que una especie de barranco llamado Cañada de La
Cruz separaba de sus enemigos. Los batallones carlistas ocupaban las colinas que dominaban

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Villar de los Navarros, adaptando la línea de despliegue a las ondulaciones del terreno: 4
batallones de Navarra, los granaderos y 2 batallones de Aragón formaban el centro y ala
derecha; un batallón se desplegó en tiradores en vanguardia junto al barranco y en el centro
fueron desplegados 4 cañones de a cuatro libras que componían la artillería de D. Carlos.
Los alaveses formaron en posición cubierta el ala izquierda, y la División de Castilla quedo
en reserva en segunda línea. La caballería se colocó tras el ala derecha, en terreno abierto.
A las 12 el ejército liberal tras unas escaramuzas iniciales entre los mandos de los ejércitos
en tierra de nadie, comenzó a avanzar en formación cerrada (columnas) al paso; eran 7.000
infantes, 800 jinetes y 6 cañones de 8 libras. La batalla comenzó con un intercambio de fuego
de fusil y artillería, 2 piezas carlistas fueron desmontadas y avanzó la infantería cristina
mientras las bajas causadas por la artillería hacían desordenar la línea carlista.
La caballería de D. Carlos atacó el ala derecha enemiga, apoyada por 4 batallones alaveses
que cargaron a la bayoneta haciendo que un batallón de la Guardia Real se replegara; tres cargas
de los lanceros carlistas rompieron las filas enemigas con tal furia que dos batallones de la
Guardia Real y el Regimiento de Ceuta arrojaron las armas al suelo en señal de rendición. El
ataque de la caballería penetró hasta los bagajes de retaguardia y capturó toda la artillería
cristina.
A las 8 de la tarde concluía el combate con la aniquilación total de la fuerza liberal, más de
1.600 prisioneros, y los demás huidos ó muertos.

COMENTARIOS Y ADAPTACIÖN AL WARGAME :


A pesar de la importancia de la batalla, poca o ninguna peculiaridad hay digna de resaltar; es
la clásica batalla campal en una llanura, sin sorpresas y con el mismo número de tropas en
ambos ejércitos. Los alaveses y la caballería carlista deben tener categoría de élite, mientras el
resto de las unidades serán veteranos. Por el bando cristino las unidades que supuestamente
estaban mejor adiestradas, como la Guardia Real, tuvieron un comportamiento frente a la
caballería enemiga impropio de su supuesta calificación de élite, por ello tendrán el mismo
nivel de moral y entrenamiento que los demás batallones; también es interesante resaltar la
aparente imposibilidad de formar el cuadro que sufrieron los batallones liberales frente a las
cargas de la caballería enemiga, más inexplicable por cuanto en otras ocasiones habían
adoptado esa formación con éxito, y por tratarse de terreno abierto y llano donde hubieran
podido prever con tiempo el ataque de los carlistas. Por ello penalizaremos los intentos de esas
unidades de formar cuadro.

.- BATALLA DE ORIAMENDI ( 16 de MARZO de 1.837 )

Los mandos cristinos habían ideado una maniobra encaminada a terminar con el ejército
carlista; la base eran tres columnas que desde San Sebastián (Sir Lacy Evans con la legión
británica), Bilbao (Espartero) y Sarsfield desde Pamplona, convergerían sobre las líneas
carlistas que, incapaces de hacer frente a tres ataques simultáneos, debían ser derrotados. Muy
distinta fue la realidad a las previsiones trazadas, pues pronto las columnas de Espartero y
Sarsfield fueron detenidas y debieron regresar a sus puntos de partida acosadas por los
batallones de D. Carlos. Entretanto el General inglés atacaba la línea de caseríos fortificados
que los carlistas tenían dispuesta rodeando San Sebastián.
El objetivo de los ataques ingleses era capturar la villa de Hernani, y los carlistas
concentraron sus esfuerzos en defender la posición del Monte Oriamendi, que domina desde el
norte la citada población; el ataque tuvo lugar el día 15, y las unidades liberales después de
atravesar el Río Urumea y ascender las empinadas laderas luchando lograron desalojar de sus
posiciones del Fuerte de la Venta y Oriamendi a las tropas de D. Carlos. El ataque se realizó en
el centro por las brigadas de Chichester y Fitzgerald, en el flanco izquierdo Godfrey y Jaúregui
debían capturar el pueblo de Aguirre, punto de apoyo para el ala derecha carlista y finalmente la
división de Rendón, los Royal Marines, una batería de cohetes Congreve y cuatro cañones de
montaña componían el ala derecha de Evans.

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Así pues, los cristinos ahora dominaban las alturas circundantes a Hernani, y habían
derrotado a un enemigo atrincherado en una fuerte posición. Su próximo movimiento previsto
era descender y capturar Hernani, que esa noche fue evacuada por los carlistas. Las fuerzas
liberales pasaron la noche en las mismas posiciones donde se hallaban al terminar la batalla, sin
que los mandos se preocuparan de reorganizar por brigadas aquellos batallones que en el calor
de la lucha habían intercambiado sus posiciones; la previsión era que el descenso hasta Hernani
fuera un auténtico paseo sin oposición pues el mando cristino ignoraba que, tras rechazar la
columna de Sarsfield, el Infante D. Sebastián se había dirigido a marchas forzadas desde
Irurzun en auxilio de la línea de San Sebastián, y ahora las unidades carlistas, cansadas pero con
buena disposición para la lucha, les esperaban para defender la villa.
El despliegue de las fuerzas de Evans se apoyaba en la carretera de San Sebastián a la
derecha donde se hallaban desplegados los lanceros ingleses y los Royal Marines y parte de la
artillería, por ser este terreno más llano y favorable a la maniobra. El flanco izquierdo estaba
cubierto por el cauce del Río Urumea pero en ese punto los cristinos cometieron un error fatal
que les costaría la batalla, ya que dejaron débilmente guarnecido el puente de Astigarraga,
circunstancia ésta que no desaprovecharían los carlistas como veremos más adelante.
El ataque liberal se realizó en el centro por la Brigada de Godfrey, mientras Jaúregui le
apoyaba desplegando parte de sus unidades en tiradores avanzados y el resto procedían a atacar
los altos de Santa Bárbara. Los lanceros carlistas respondieron cargando contra un Batallón de
Chapelgorris, que fueron obligados a retroceder hasta que recibieron el apoyo de la caballería
inglesa.
Mientras se realizaba la maniobra cristina, 5 batallones carlistas atacaban a través del puente
de Astigarraga, cruzando el Río Urumea para tomar por el flanco el dispositivo de Evans;
apoyados por el 6º Batallón de Guipúzcoa que cargó a la bayoneta y aniquiló un regimiento
británico capturando su estandarte. Aún hoy es materia de discusión el que se dejara un punto
tan vital como ese puente, llave de todo el flanco derecho cristino, sin guarnecer; lo más
probable es que dicha posición fuera abandonada en un avance general de los liberales contra la
línea de Hernani, y que la arriesgada maniobra de flanqueo carlista no fuera advertida hasta que
ya era demasiado tarde. Contribuyó a hacer desesperada la situación de Evans la falta de
reservas debido a la dispersión de sus unidades.
El éxito del ala derecha carlista fue fulminante, y el General Villareal ordenó que el centro
carlista avanzara para dar el golpe definitivo al tambaleante dispositivo de Evans. Los intentos
aislados de batallones como el Provincial de Oviedo para detener la desbandada fueron inútiles,
y sólo el ala derecha cristina pudo, merced a su superioridad numérica frente a los 6 batallones
navarros, mantener la carretera de San Sebastián abierta para sus compañeros fugitivos,
viéndose obligados a librar una desesperada batalla con los lanceros carlistas que desde todas
las direcciones les acosaban en su fuga.
Los soldados carlistas no dieron cuartel a sus enemigos ingleses, siendo aniquilada la
Legión Expedicionaria y las casacas rojas de los muertos utilizadas por los vencedores. El botín
comprendió también toda la artillería, 130.000 cargas de cartuchos para fusil, el bagaje y una
marcha militar compuesta por adelantado por los liberales para celebrar la prevista liberación
de Hernani y la derrota enemiga; desde ese día los carlistas lo interpretaron bajo el nombre de
"Himno de Oriamendi".
La batalla concluyó a las 5 de la tarde, dejando los cristinos 400 muertos, 900 heridos y 137
prisioneros en el campo; los carlistas reflejaron en el parte de bajas 70 muertos y 473 heridos.

Tropas intervinientes:
.-Ejercito Carlista:
Comandante en Jefe: Infante D. Sebastián De Borbón.
Jefe de Estado Mayor: D. Vicente Gonzalez Moreno.
Ala Derecha: Brigadier Iturriza: 3 Batallones Guipuzcoanos
Brigadier Sopelana: 3 batallones alaveses
Centro: D. Bruno Villareal: 1º Batallón Alavés, Granaderos del Ejército
Brigadier Perez de Vacas ( Reserva ): 1º Batallón de Navarra, 1º Batallón de Castilla

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Coronel Alza: 3 batallones guipuzcoanos.

Ala Izquierda: Brigadier Quilez: Batallón de Aragón.


Brigadier Iturriaga: 1º y 5º de Guipúzcoa
Brigadier Goiri: 3º y 5º de Vizcaya
3 escuadrones de lanceros navarros y 7 cañones de línea en reductos y 4 cañones de montaña
situados ante Hernani.
Total aproximado: 10.000 hombres.

.- Ejército Cristino:
Comandante en Jefe: De Lacy Evans
Ala Derecha: Brigadier Jaúregui. 5ª División: 5 batallones .
1º de Lanceros ingleses de la Legión Auxiliar Británica, Batallón de Marines y
12 cañones ingleses en apoyo.
Centro: Brigadier Godfrey: 6º y 7º Regimientos de la Legión Británica, Chapelgorris.
Brigadier Rendón: Vanguardia: 6 batallones desplegados por el frente, y 1 en Pasajes y
otro en Amezagaña.
Brigadier Fitzgerald: 8º,9º y 10º Regimientos de la Legión Británica.
Ala Izquierda: Brigadier Chichester: 1º y 4º Regimientos de rifles de la Legión Británica, 1
batería de cohetes Congreve y 4 cañones de montaña
Total aproximado: 13.000 hombres.

COMENTARIOS Y APLICACION AL WARGAME :


En cuanto a las clases de tropas, el ejército carlista debe tener 2/3 de sus unidades como
regulares, y el tercio restante como veteranos; los 6 batallones del ala derecha y la caballería
serán élite. En el bando liberal las fuerzas de la Legión Británica serán calificados como
Extranjeros, y el resto de los batallones españoles como regulares.
El terreno desde donde se despliegan los cristinos será terreno difícil, montañas y bosques,
debiendo colocarse un reducto en su cima (Fuerte O'Donnell). El despliegue de esa fuerza debe
realizarse al azar, mediante un sistema de cuadriculado del terreno donde tienen su punto de
partida, sobre el cual se colocarán mediante tirada de dado ó sorteo los batallones,
representando así el deficiente despliegue inicial consecuencia de los combates del día anterior.
La línea carlista tiene como apoyo Hernani y el Río Urumea, y abarca las laderas de los altos
de Santa Bárbara. Si pretendemos reproducir una situación semejante a la que tuvo Evans, el
jugador liberal debe ignorar que existe un puente en su flanco izquierdo y que cinco batallones
carlistas están preparados para cruzarlo; también deberá tener informaciones que le confundan
en cuanto al número de tropas del ejército contrario (modificadas a la baja) y a su calidad
(rebajando su combatividad y experiencia, no olvidemos que la víspera las había derrotado en
una posición privilegiada). El objetivo de Evans será capturar Hernani mientras los carlistas
deben retomar el Oriamendi si desean obtener la victoria, otro resultado será victoria parcial
liberal si éste causa al enemigo más bajas de las que él mismo sufra.
Los Altos de Santa Bárbara también será terreno difícil a efectos de movimiento, y como
protección débil. La ciudad de Hernani será protección total, pudiendo albergar una brigada en
su interior. El Río Urumea sólo es vadeable por los puentes señalados en Hernani y Astigarraga.
Buscando semejanzas con otras batallas de la historia, vale la pena comparar esta situación
con la que el Duque de Wellington tuvo en las alturas de la Sierra de Busaco; ambos montes
eran una ideal posición defensiva, aunque con insuficiente número de tropas para cubrir todo el
terreno; sin embargo en esta ocasión la actitud del general inglés fue ofensiva, avanzando toda
su línea hacia el valle y por tanto renunciando a lo privilegiado de su posición inicial; sólo el
exceso de confianza o el desconocimiento del terreno puede justificar el error de dejar
desprotegido el puente del Rio Urumea, llave de su dispositivo, y el carecer de reservas que
pudieran apoyar cualquier punto de su línea en dificultades.
El mando carlista, por el contrario, rehuyó lanzar un ataque frontal, a diferencia de los
generales napoleónicos de Busaco; y aprovechando su mayor movilidad y conocimiento del

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terreno realizó una maniobra atrevida (que de no haber tenido éxito se hubiera calificado de
suicida) de flanqueo del despliegue cristino justo en el momento en que estos batallones estaban
en marcha avanzando hacia Hernani. La sincronización del ataque con ese avance fue
providencial, y más aún el apoyo recibido de los batallones del centro que dieron la puntilla a
los liberales. Sólo Federico de Prusia utilizó maniobras de flanqueo similares en el campo de
batalla y con resultados tan espectaculares.
Un supuesto distinto puede permitir que el general liberal conozca la maniobra de flanqueo
enemiga, o coloque una guarnición en el puente si lo desea, o bien retrasar la llegada de los 5
batallones encargados por D. Sebastián del flanqueo, según una tabla en la que el lanzamiento
del dado señale la hora de su entrada en la mesa de juego, ignorando ese extremo el general
carlista que así verá cómo su ansiedad crece conforme va pasando el tiempo.

A CONTINUACION DESCRIBIMOS UNA SERIE DE ENCUENTROS Y ESCARAMUZAS


QUE PUEDEN SERVIR DE INSPIRACION PARA REPRODUCIR SITUACIONES EN LA
MESA DE JUEGO:

.- ASALTO A UN CONVOY (21 de Octubre de 1.834)

En esa feche el Coronel Amor escoltaba un convoy de siete carros; conocedor de esto
Zumalacárregui cruzó el Río Ebro en la mañana del mismo día por Tronago, con un batallón de
Guías, dos batallones de Guipúzcoa, dos de Navarra y un Regimiento de lanceros de la misma
provincia. Zumalacárregui se dirigió a Logroño a marchas forzadas, y llegando a Fuenmayor
divisó al enemigo en las alturas que dominan la población. Sin dudarlo un momento se puso al
frente de un escuadrón de 120 lanceros y una compañía con 60 soldados de infantería y cargó
contra la columna cristina, que se componía de 200 jinetes del Regimiento de Isabel II -
soldados todos ellos considerados de élite- y una compañía de la Guardia Real.
Tras el primer choque la caballería de la Reina apeló a la huída abandonando el convoy y
siendo capturada toda la infantería; a cierta distancia, en la llanura, la caballería cristina logró
reorganizarse y Zumalacárregui ordenó una nueva carga de los lanceros que esta vez fueron
repelidos. No cesó por ello el general carlista quien por tercera vez dirigió a los navarros a la
carga, derrotando de modo definitivo a la caballería enemiga que sufrió 50 bajas.

COMENTARIOS Y APLICACION AL WARGAME :


Esta escaramuza constituye la clásica acción de escolta a un convoy que a lo largo de su
recorrido puede ser hostigado ó emboscado en diferentes posiciones. El objetivo cristino será,
saliendo de un extremo de la mesa, llegar al otro con los siete carros intactos, mientras
Zumalacárregui debe distribuir sus fuerzas en uno ó varios puntos de la mesa en emboscada,
siendo su objetivo la captura del convoy. El terreno deberá ser lo más variado posible, con
montañas, bosques, ríos vados y puentes, etc... y puede incluso jugarse con reglas especiales de
escaramuza a escala 1 figura = 1 hombre.
Debe tenerse en cuenta que estamos en los primeros tiempos del ejército carlista, en el que
su ímpetu y entusiasmo excedía con creces a su instrucción, mientras los cristinos eran tropas
disciplinadas pero sin foguear; por tanto la principal arma carlista es la sorpresa, y sus hombres
pueden compararse con los highlanders en cuanto a fanatismo e indisciplina; un objetivo
importante para el mando carlista será obtener la victoria de forma rápida y con el mínimo de
bajas, por lo que puede señalarse en una tabla que conforme vaya pasando el tiempo exista una
mayor posibilidad de desbandada de los carlistas ó llegada de refuerzos cristinos.

.- SORPRESA DE ALEGRÍA ( 27 y 28 de Octubre de 1.834 )

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Estos dos encuentros supusieron el definitivo bautizo de fuego del ejército de
Zumalacárregui, pues hasta entonces sólo operaba el jefe carlista por medio de golpes de mano
y tácticas guerrilleras cuando el terreno era propicio, y preferiblemente al caer la tarde, para así
poder retirarse más fácilmente si las cosas no iban como él esperaba. Esta vez la batalla fue en
llano, y con intervención de la artillería cristina, pero ello no modificó su desenlace:
Habiendo sabido Zumalacárregui que una columna al mando del General O'Doyle se hallaba
acantonada en Alegría, pueblo de Álava a mitad de camino en la llanada entre Vitoria y
Pamplona, realizó una marcha forzada a través de caminos de montaña desde Zuñiga, donde se
hallaba, hasta Salvatierra para enfrentarse a los liberales. Al mismo tiempo había ordenado al
General Iturralde que, por trochas y veredas sólo por él conocidas, se moviera a fin de aparecer
por la retaguardia del enemigo y cortarle el camino a Vitoria.
Unos disparos hechos por los vigías advirtieron la llegada de los carlistas pero éstos, a la
carrera, dispersaron los efectivos enemigos sin darles tiempo siquiera a utilizar la artillería, ni
siquiera el intento de contraataque de O'Doyle al frente de dos batallones detuvo el ímpetu
carlista.
Cuando la columna cristina emprendió la retirada, Iturralde con el 6º batallón de Navarra, el
3º de Álava y el 2º de Guipúzcoa aparecieron a la espalda de la posición enemiga cortando su
retirada a Vitoria. Los liberales sufrieron 600 muertos, 50 prisioneros y dos piezas de artillería,
además de perder las banderas de los Regimientos 6º y 8º de infantería; sólo 300 soldados
fugitivos se refugiaron en Arrieta, esperando las tropas que desde Vitoria pudieran ser enviadas
en su auxilio.
Al amanecer del día 28 una columna de 3.000 hombres, con caballería y 10 piezas de
artillería salía de Vitoria a las órdenes del General Osma; Zumalacárregui enterado de la noticia
dirigió una arenga a sus unidades: "Los vencidos de ayer quieren conquistar nuestro campo de
batalla. No sé cuántos son; pero se que entre ellos hay milicianos nacionales (milicias urbanas
especialmente odiadas por sus muchos atropellos y vejaciones hacia las familias de los
carlistas) ¿Queréis completar ahora nuestra victoria de ayer, o queréis malograrla hoy?". El
fervor de las tropas fue indescriptible, y abandonando el asedio de los refugiados en Arrieta,
todas las tropas carlistas embistieron a Osma por los flancos pues ni siquiera tuvo el General
Osma tiempo a desplegar de su formación de marcha; sólo la artillería protegida por la
caballería pudo alcanzar las puertas de Vitoria, dejando más de 2.000 infantes prisioneros de los
carlistas.

COMENTARIOS Y APLICACION AL WARGAME :


En estas dos batallas apreciamos las diferencias de movilidad y capacidad de maniobra entre
los dos ejércitos rivales; también el excelente uso del terreno que de forma repetida dio a
Zumalacárregui el triunfo en sus combates.
Para representarlo sobre la mesa, el mando carlista podrá realizar una marcha de flanqueo
con la mitad de su ejército, llegando en el turno que se señale por azar ó siguiendo las
instrucciones de los generales carlistas (según deseéis ponerlo más ó menos fácil). El general
cristino en principio sólo debe creer que se enfrenta a una cuadrilla de desharrapados,
disfrutando de superioridad numérica y por una vez, en campo abierto. Pero debemos penalizar
su capacidad de maniobra para representar fielmente la lentitud en sus despliegues de
formaciones.
El terreno será una mesa cuyos dos lados están cubiertos de bosques y montañas elevadas,
mientras el centro es un valle atravesado por la carretera Pamplona-Vitoria, pequeñas colinas y
caseríos salpican la llanura, y en el centro está Alegría, separada por poca distancia de Arrieta.
Los cristinos tendrán la mitad de su ejército como milicia y la otra mitad como regulares; los
carlistas serán todos veteranos, pero su número será la mitad del enemigo. La iniciativa
corresponde siempre en este encuentro al carlista.
Condiciones de victoria: para el liberal rescatar a los sitiados en Arrieta y lograr despejar la
carretera a Pamplona; los carlistas vencen si causan más bajas a los liberales y capturan al
menos dos cañones.

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.- BATALLA DE ARQUIJAS ( 15 de Diciembre de 1.834 )

Las tropas de la Reina se hallaban acantonadas en Los Arcos y Estella; donde fueron
hostigadas el día 12 por algunos batallones carlistas desplegados en guerrillas. El día 15 los
cristinos bajo el mando del General Córdova marcharon hacia Zúñiga; a media legua de este
pueblo se halla la ermita de Arquijas y junto a ella hay un puente que atraviesa un arroyo, ese
fue el punto elegido por Zumalacárregui para oponerse al enemigo.
A la una de la tarde las tropas de la División de Córdova se hallaban formadas en batalla
cerca de la ermita, en una posición dominante sobre el puente y dispuesta en aquel punto una
batería para cubrir el cruce de los soldados. Inmediatamente envió Córdova una columna al
asalto del puente, defendido por el 4º Batallón de Navarra, que rechazó a los cristinos
causándoles graves pérdidas.
Ante la imposibilidad de atravesar el arroyo por ese punto, Córdova dio la orden al General
Oráa de que vadease por otro lado para así caer sobre la retaguardia carlista, distraídos
entretanto por las maniobras de la División de López por la parte de los altos de Santa Cruz .
Zumalacárregui advirtió al punto la maniobra enemiga y ordenó a la reserva, formada por la
División de Iturralde, que cubriera el flanco ante el nuevo peligro. Al mismo tiempo ordenó un
contraataque a través del mismo puente que obligó a Córdova a retirarse, exponiendo así el
flanco de las tropas de Oráa, lo cual fue aprovechado por los carlistas que, dejando 2 ó 3
batallones en el puente acudieron en socorro de Iturralde que comenzaba a ser desbordado por
la superioridad numérica del enemigo. Los cristinos debieron finalmente ceder el campo,
abandonando 300 muertos y 700 herido, cifra muy similar a las bajas carlistas.
Tropas combatientes: 10.000 cristinos y 6.000 carlistas.

COMENTARIO Y ADAPTACION AL WARGAME :


Es ésta una clásica acción de ataque a un puente defendido, en el que tras fracasar el ataque
frontal, se intenta una maniobra de flanqueo por otro vado ó punto de cruce; en ese momento
dos son los factores que deciden la suerte del combate: que el general que defiende la posición
tenga reservas suficientes para hacer frente a la nueva amenaza, y que las tropas no pierdan su
moral.
En éste encuentro además existe un elemento de especial interés, el genial Zumalacárregui a
pesar de estar en inferioridad de condiciones por el número de sus enemigos, no se contenta con
defender, sino que contraataca por el mismo puente y desaloja al enemigo, volviéndose luego
con rapidez para derrotar a la fuerza cristina dividida. Ha obtenido superioridad local
aprovechando la división de las fuerzas cristinas provocada por el intento de flanquear la
posición carlista .
El campo de batalla estará atravesado de parte a parte por el arroyo y un único puente, junto
a una colina donde estará la ermita serán los accidentes geográficos más destacables. Si el
general liberal intenta flanquear la posición, debe informársele de que existe un vado que ha de
encontrar, obteniendo un número par en una tirada de 1d6 cada vez que toque un punto en la
rivera del arroyo, representando así la búsqueda de dicho vado.
Las unidades carlistas serán veteranas, y las cristinas regulare. Obtiene la victoria el mando
carlista si logra desalojar de la ermita y mantener el puente en su poder al terminar el combate;
los liberales ganan si logran atravesar el puente.

.- TOMA DE LOS ARCOS ( 21 de Febrero de 1.835 )

Los cristinos ocupaban esta localidad navarra, y tenían 500 hombres, la mayoría milicianos,
de guarnición distribuidos entre el cuartel y seis casas fortificadas, contra los cuales se
dirigieron los carlistas con 3 piezas de artillería y 800 hombres.
Al amanecer principió el ataque, apoyado por la artillería, y cayeron sucesivamente 5 casas
fuertes en manos de Zumalacárregui; durante la noche sólo resistía el fuerte, y en los fosos del

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mismo se amontonaron por los asaltantes "haces de paja mezclados con pimientos" para
prenderles fuego si al día siguiente no se entregaba la guarnición; sin embargo los soldados
cristinos esa misma noche y aprovechando una torrencial tormenta, huyeron por una puerta
secreta en dirección a Lerín, abandonando 250 bajas en el pueblo.

COMENTARIOS Y SUGERENCIAS PARA WARGAME :


No he podido resistir la tentación de incluir esta escaramuza, como tal vez uno de los
primeros ejemplos de guerra química de nuestra historia militar; el ingenio de Zumalacárregui
al utilizar el componente irritante de los pimientos como unos primitivos gases lacrimógenos es
excepcional, aunque no tenemos constancia de si verdaderamente hubieran servido de algo.
También es interesante el encuentro pues refleja una situación muy frecuente en ésta Primera
Guerra Carlista, donde en cada localidad se procuraba construir una fortificación ó aprovechar
los edificios más resistentes (generalmente la iglesia) con ese fin; por tanto durante los años que
duró esta contienda son habituales los episodios de asedios y ataques a estos pequeños núcleos
de resistencia, siendo las bajas desproporcionadamente altas para el número de tropas
implicadas.
Si deseamos representar una escaramuza de esta índole, la mesa debe estar llena de casas,
algunas de ellas con mayor ó menor grado de resistencia y con ó sin guarnición; utilizaremos
unas reglas de nivel máximo de compañía y se debe señalar un plazo de tiempo para que las
guarniciones sean desalojadas de sus refugios.

ORGANIZACION Y FORMA DE COMBATIR DE AMBOS EJERCITOS

El sistema de lucha en esas fechas apenas había evolucionado desde las guerras
napoleónicas; se incremente el número de tiradores en orden abierto ó escaramuza, y el valor de
la línea de fuego pero aún el embate decisivo se logra por la carga a la bayoneta en columna de
ataque, y así es reflejado frecuentemente en las crónicas: por ejemplo en Oriamendi las alturas
ocupadas por la Legión Británica fueron ocupadas sin disparar un tiro, empleando el frío acero.
La relativa falta de instrucción de las tropas (especialmente los carlistas) en lo referente a
maniobras en orden cerrado hizo que la columna siguiera siendo en ese ejército una formación
socorrida, y que el cuadro como defensa frente a la caballería no se utilizara, confiando en el
efecto del disparo, en la protección del terreno ó en la proporcionada por unidades amigas del
mismo arma y, en última instancia, en la huída, para poder esquivar las cargas de los jinetes.
No faltan, sin embargo, casos como el de la batalla de Huesca en que los cristinos adoptaron tal
formación frente a los lanceros carlistas, que previamente habían puesto en fuga a los coraceros
liberales que apoyaban a la infantería.
Las peculiaridades territoriales de las diferentes provincias se hacían sentir en el ejército
carlista, y así nos narra un testigo sus impresiones a la vista de la División Catalana de Cabrera:
"...Jinetes medio desnudos, cabalgando a pelo y armados con lanzas, arcos y saetas, llevando
sobre sus muslos una manta de colores. La infantería usaba escopetas, rifles ó espingardas
árabes y un largo cuchillo al costado derecho. Muchas veces no disponían de más de tres ó
cuatro cartuchos. Las provisiones de boca iban metidas en la punta de la barretina y los
cartuchos junto al escapulario..." qué duda cabe que la visión de uno de estos guerrilleros debía
producir asombro al compararlos con el soldado de línea del ejército liberal.
Un observador alemán que acompañaba al ejército de D. Carlos nos informa de que "...No es
posible formar un plan de ataque con antelación pues, de los muchos encuentros con el
enemigo, las dos terceras partes fueron asaltos inopinados ó resistencia obligada. El servicio de
avanzadas no se conoce ó no se practica. Sin plan ni formación, con un modo de luchar que no
está reglamentado en ningún tratado militar, el valor de los soldados y la abnegación de los
oficiales superiores compensaban esa deficiencia. En los primeros momentos del choque los
carlistas solían perder terreno; pero después el mismo peligro y las alternativas del combate
despertaban el ingenio de los soldados. La fuerza moral animaba el espíritu carlista...".

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No debemos creer a pies juntillas lo arriba descrito, pues como es lógico, la forma de
combatir de estas tierras debía resultar muy chocante para la rígida mentalidad prusiana, pero sí
que en esos comentarios se refleja bien lo que fue esta guerra, un continuo ir y venir de
emboscadas y batallas, repliegues y ataques; pero en todos ellos (ó al menos en la mayoría) los
generales de ambos mandos buscaban reunir a su favor el máximo de posibilidades,
conocimiento del terreno y adhesión de su tropa, otra cosa diferente eran los resultados.
En cuanto a organización, la infantería se dividía como unidad operativa básica en
batallones, regimientos (en ocasiones formados por un único batallón), y un número variable de
batallones o regimientos se agrupaban en brigadas, según la estrategia y necesidades del
momento; a su vez las brigadas se articulaban en divisiones.
En cada batallón de línea existía una compañía de tiradores (tropas de escaramuza
semejantes a los voltigleurs franceses) y otra de granaderos; aunque también existían batallones
enteros de tiradores ó ligeros como los Guías de Navarra. También de forma ocasional las
compañías ligeras ó de granaderos de varios batallones se podían organizar en un batallón
provisional. El número inicial de hombres en los batallones era de 800, pero debido a la
deserción, las bajas ó las enfermedades, lo habitual era que rondara las 600 plazas.
Los carlistas se caracterizaban por su falta de disciplina e individualismo, lo cual les hacía
tropas ideales para el combate de guerrillas pero fáciles de dispersar en campo abierto (al menos
en los primeros momentos de la contienda); los cristinos estaban mejor entrenados y podían
adoptar todas las formaciones de orden cerrado, pero en repetidas ocasiones se vieron
sorprendidos por la fiereza y rapidez de un enemigo que "no respetaba las reglas". El fanatismo
y la fe ciega que en la "Justa Causa" de D. Carlos impulsaba a los carlistas les daba en la
mayoría de ocasiones la superioridad moral sobre sus enemigos, compensando así la
inferioridad que de forma habitual sufrían en número, armamento, munición y vituallas.
También existieron unidades de voluntarios (ó milicias urbanas) en el campo cristino,
especialmente odiadas por los carlistas como los llamados "Peseteros" ó los "Chapelgorris", que
normalmente desempeñaban tareas de guarnición.
Los principales focos carlistas eran las tres provincias vascas y Navarra, parte de Castilla
(donde fue especialmente activo el Cura Merino) ,Valencia y Cataluña, preferentemente en las
zonas rurales, por ejemplo el Maestrazgo fue dominio y coto cerrado de Cabrera incluso
después del Abrazo de Vergara, que supuso el final de la guerra en el norte. Cada región tenía
su peculiar uniforme, en ocasiones idéntico al traje regional del campesinado, de tal manera que
un voluntario navarro difería en aspectos sustanciales en su atuendo si lo comparamos con un
voluntario catalán.
No podemos olvidar la presencia extranjera en ambos ejércitos: en el lado cristino la Legión
Inglesa al mando de Lacy Evans, aniquilada en Oriamendi; y las legiones portuguesa y francesa
(de esta última más de 850 desertores formaron parte de las filas carlistas). En el bando carlista
la presencia más numerosa fue de alemanes y franceses, en gran medida con títulos nobiliarios
y con experiencia en combate. Las unidades extranjeras de los dos ejércitos sufrieron graves
pérdidas en la Batalla de Barbastro.
En cuanto a la caballería, los carlistas redescubrieron el valor de la lanza como arma , tanto
por su impacto físico como psicológico, y a pesar de disponer ambos bandos de carabinas y
pistolas, la mayoría de los combates se resolvieron en cuerpo a cuerpo con arma blanca. Los
cristinos disponían de unidades más diversificadas: Guardias a Caballo, Coraceros, Húsares...,
pero finalmente y para resistir mejor las cargas fueron dotadas con lanzas como sus contrarios.
La organización básica era el escuadrón (unos 200 hombres en el mejor de los casos pero
con frecuencia no superaba los 120), y dos ó más escuadrones formaban un regimiento.
La artillería era escasa en el ejército de D. Carlos al comenzar la guerra, debiendo acudir
incluso a reliquias de la Guerra de la Independencia rescatadas de la arena de la playa, como el
famoso cañón apodado "El Abuelo" que fue trasladado por senderos de montaña desde
Guipúzcoa a Navarra. Los carlistas utilizaron también pequeñas piezas fundidas en ferrerías de
los valles Vasconavarros , con resultados decepcionantes pues reventaban a los pocos disparos.
Su principal fuente de abastecimiento en este arma fueron las piezas capturadas como botín de

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guerra en acciones victoriosas al enemigo, que disponía de un tren artillero mejor dotado y más
moderno.
La artillería se puede clasificar en tres variedades: Baterías de Montaña, transportadas a
lomos de mula o arrastradas por soldados, a través de caminos de montaña dado lo abrupto del
terreno donde se desarrolló la mayor parte de la guerra, normalmente cada batería se dotaba con
seis piezas. La segunda variedad eran las baterías volantes, en las que la dotación y las piezas
de movían a caballo dándoles una gran flexibilidad en el campo de batalla. Finalmente estaban
las baterías de campaña, de mayor calibre que las anteriores y también menos manejables; en
estos dos últimos casos el número de cañones por batería era de cuatro.

BIBLIOGRAFIA :

La Primera Guerra Carlista; D. Jaime del Burgo (Diputación Foral de Navarra, 1.979)
De la España Romántica; D. Jaime del Burgo (Gobierno de Navarra, 1.985)
Para la Historia de la Primera Guerra Carlista; D. Jaime del Burgo (Inst. Príncipe de Viana,
1.981)
Oriamendi (Practical Wargamer)
Victorias carlistas de antaño: Reynaldo Brea (La Hormiga de Oro, 1.913)
Dos años en España y Portugal: Carlos Dembowski (Espasa - Calpé, 1.931)
Cuatro años en España, Los carlistas ...:Von Goeben (Editorial Gómez, 1.966)
Recuerdos de la Guerra Carlista: Príncipe Lichnowsky (Espasa-Calpé, 1.942)
Oriamendi: Francisco Apalategui (Imprenta Tradicionalista, 1.949)
Andanzas de un veterano en la Guerra de España: Von Rahden (Diputación Foral de Navarra,
1.965)
El País Vasco-Navarro: Luis de Madariaga (Ediciones Movinter, 1.977)
125 aniversario del inicio de las guerras carlistas (Sociedad Filatelica Coruña, 1.983)

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