BENJAMÍN NÚÑEZ

El pecado en contra del cuerpo de Cristo: Unidad

I. UNIDAD: EL FUNDAMENTO DEL PROPÓSITO SANTO DE DIOS (FILIPENSES 2:2)

A. El plan eterno de Dios era levantar a un cuerpo compuesto por muchos miembros débiles e
imperfectos. Cuando este cuerpo esté unificado perfectamente éste expresará la vida de Jesús a
toda la creación para la gloria del Padre.

B. Este cuerpo unificado en cada área geográfica es la gloriosa herencia de Dios. Funcionará como
un solo hombre en amor y afectos perfecto. Amor y unidad. Estará perfectamente sometido a la
Cabeza y a los demás.

C. Dios ha llamado a todo su pueblo a unir sus vidas con los demás para servir los propósitos de
cada área en específico. Cada creyente se vuelve inmediatamente responsable de encontrar su
papel específico y su lugar específico en su servicio a los propósitos de Dios en su área (1
Corintios 1:10).

D. Esta unidad específica y práctica está en el mero centro del plan de Dios y su corazón. Esta
posición de unidad es santa y preciosa para el Señor. La actitud de independencia que prevalece
en el cuerpo de Cristo hoy día entristece el corazón de Dios.

E. Debemos luchar juntos con un solo corazón y mente para promover el Evangelio desde esta
posición de unidad (Filipenses 1:27; 2:2). No podemos darnos el lujo de ignorar a nadie o ser
negligentes en cualquier forma.

II. LOS TRES PECADOS EN CONTRA DE LA UNIDAD

A. Pecar en contra de la unidad es pecar en contra del cuerpo de Cristo local. Pecar en contra de la
iglesia local es pecar en contra de la Cabeza. Esto es santo para Dios y él promete juzgar a todos
los que pequen en contra de sus propósitos santos en la iglesia local (1 Corintios 3:16-17; 11:29-
32).

B. Estos tres pecados separan a los miembros individuales de la Cabeza y de los demás miembros.
Esto es serio y fuerte para el corazón de Dios. Esto siempre obstaculiza en los propósitos
venideros de Dios.

C. Los tres pecados:

1. Falsas enseñanzas: nos separan de la Cabeza

2. Rebelión: nos separan de los demás

3. Difamación: nos separan de los demás

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EL PECADO CONTRA EL CUERPO DE CRISTO: LA UNIDAD PÁGINA 2

III. FALSAS ENSEÑANZAS (2 JUAN 9-11; TITO 1:9)

A. Siempre debemos distinguir entre las doctrinas principales que son esenciales para nuestra fe de
las doctrinas que no son necesarias para nuestra salvación (Romas 14; 1 Corintios 8-9;
Colosences 2:16-23; 1 Timoteo 1:4-7).

B. Estar en un error en las doctrinas básicas más importantes es de mucha preocupación y es

realmente tener una imagen errónea de Dios. Es básicamente no saber quién es Dios. Ejemplo:
La resurrección, lo infalible de las Escrituras, la Deidad de Jesús, la expiación de los pecados
como la manera de recibir la gracia gratuita de Dios (Colosenses 2:8-10; 1 Timoteo 6:3-5; Juan
9-11).

C. No debemos aceptar las enseñanzas que no nos permiten estar pegados a la Cabeza (Colosenses
2:19).

IV. REBELIÓN: EL ESPÍRITU INDEPENDIENTE

A. Tal actitud causa que uno ignore y rompa su comunión con los otros miembros del cuerpo y de
las autoridades delegadas.

B. Tal independencia e individualismo ve muy poco valor en la unidad del Cuerpo de Cristo. Estas
personas no ven la realidad de la unidad del Cuerpo como parte de la herencia de Dios (Efesios
1:18).

C. Tal actitud disminuye y desprecia una vasta variedad de enseñanzas del Nuevo Testamento que
hablan del propósito de Dios en los últimos tiempos.

D. Somos juzgados por no estimarnos los unos a los otros ni a la autoridad de Dios entre nosotros (1
Corintios 11:27-32).

E. La revelación de los individuos y el valor del cuerpo local de creyentes nos liberta de la división,
independencia, etc. No podemos funcionar apropiadamente en la obra de Dios hasta que lidiemos
profundamente con el individualismo que hay en nosotros.

F. Somos los guardas de nuestros hermanos y sí tenemos una responsabilidad los unos por los otros
para cumplir los propósitos corporativos de Dios en nuestra área (Génesis 4:9; Filipenses 2:2).

V. DIFAMACIÓN:

A. Este es el pecado más común que los creyentes más “serios” cometen y que da como resultado el
juicio de Dios sobre los creyentes (Santiago 4:11; 5:9; 1 Corintios 11:29-32; 3:16-17; 10:10).
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B. Pablo nos advierte de la calumnia de una manera específica en Gálatas 5:15, “pero si están
siempre mordiéndose y devorándose unos a otros, ¡tengan cuidado! Corren peligro de destruirse
unos a otros.”(Contraste con 1 Corintios 12:7-27; Efesios 4:16)

C. La Palabra de Dios describe el tipo de persona que calumnia y difama en la casa de Dios:

1. El que calumnia es un hombre malo y sin valor (Salmos 50:16, 19-20; Proverbios 6:12,
14).

2. El que calumnia es una abominación para Dios (Proverbios 6:19).

3. El que calumnia es una persona inicua (Proverbios 11:9).

4. El que calumnia es una persona presuntuosa (Proverbios 13:10)

5. El que calumnia es una persona iracunda (Proverbios 15:18).

6. El que calumnia es una persona perversa (Proverbios 16:28).

7. El que calumnia es uno que ama el pecado (Proverbios 17:19).

8. El que calumnia es una persona arrogante (Proverbios 28:25).

9. El que calumnia es una persona enojada (Proverbios 29:22; 30:33).

10. El que calumnia es una persona celosa y egoísta (Santiago 3:16).

11. El que maldice no heredará el Reino de Dios (1 Corintios 6:10).

D. La Palabra de Dios nos manda a nunca difamar (1 Corintios 1:10).

1. Las viudas no deben ser chismosas ni entremetidas (1 Timoteo 5:13).

2. Las ancianas no deben chismorrear (1 Timoteo 3:11; Tito 3:3)

3. Todos están encomendados a desechar todo tipo de calumnia (Romanos 13:13;

Filipenses 2:14; 1 Corintios 10:10; 1 Pedro 2:1).

4. La calumnia obstaculiza la oración (Marcos 11:5-26; 1 Timoteo 2:8; 1 Pedro 3:7).

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5. La calumnia es una señal de un cristiano bebé (1 Corintios 3:1-3; Gálatas 5:19).

E. La calumnia descalifica a un líder. Ser libres de tener una lengua de doble cara es el segundo
requerimiento de un líder porque una casa (iglesia) dividida no puede mantenerse. Un líder con
doble lengua que destruye la casa de Dios es una desgracia para el Evangelio (Mateo 12:25;
Marcos 3:24; 1 Timoteo 3:8, 11 Tito 3:10).

F. Una mujer que es líder, al igual que la esposa de un líder debe también ser libre de la calumnia
con el fin de calificar para el liderazgo (1 Timoteo 3:11).

VI. EL MANDAMEINTO DE DIOS PARA LIDIAR CON EL QUE CALUMNIA

A. Todo aquello que divide la casa de Dios es serio para Dios y requiere un juicio porque su Iglesia
es santa (1 Corintios 3:16-17).

B. La calumnia y difamación es tan seria porque divide la unidad de la iglesia de Cristo, lo cual
destruye al final Su propósito y ensucia Su santa herencia en la iglesia.

C. El mandamiento de Dios es remover al miembro que está difamando:

1. Rechaza al que causa divisiones después de la primera y segunda advertencia (Tito 3:10).

2. Vigila al calumniador y al hombre que divide y aléjate de ellos (Romanos 16:17).

3. No te asocies con un agraviador, uno que difama (1 Corintios 5:11).

4. Remueve al malvado, el que agravia, de la iglesia (1 Corintios 5:11, 13).

5. El agraviador no heredará el reino de Dios (1 Corintios 6:10).

6. Aleja al burlador que produce contención y conflictos (Proverbios 22:10).

7. El que murmura (juzga y se queja) será juzgado por Dios (1 Corintios 10:10; Santiago
4:11; 5:9)

VII. CONCLUSIÓN (1 CORINTIOS 11:29-32)

Violar la realidad del cuerpo de Cristo al pecar en contra de él puede dar como resultado enfermedad,
debilidad (mental, emocional y heridas físicas) y traer muerte prematura. 1 Corintios 11:30 nos dice que
muchos de los santos en Corintio estaban bajo este juicio (1 Corintios 10:10). No debemos preguntarnos
ni sorprendernos de que muchos de los santos hoy día sufren sin necesidad debido a que están pecando
en contra del cuerpo de Cristo.

Honra del hombre es dejar la contienda. (Proverbios 20:3)