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* SESION ORDU Ñ A R IA
Y D E L SEÑOR F E L IS B E R T O F. C A R A M B U L A
( SKOIJXDO VICKPlíTí: p i D E N T E ) ;
CON ASISTENCIA DEL SEÑOR MINISTRO DE GANADERIA V AGRICULTURA, DOCTOR CESAR G, GUTIERRE/
Jaime Gorricho, £ 3.500 (en operación otorgan a sus competidores por la c áu- Yiro Yamazaki, Enviado Extraordinario
hasta el 31 de Diciembre de 1935). sula incondicional e ilimitada de !a na y Ministro Plenipotenciario del Japón en
S. Yamada, £ 1.000 (en operación nas- ción más favorecida. ■?1 Uruguay.
ta e. 31 de Diciembre de 1935). Es además innegable que c-1 imp 1liso Después de este estudio, vuestra Co-
S. Kato y C.o Ltd., £ 30.000 (en opera que darán a .as transacciones entre las m'sión ha resuelto aconsejar la aproba
ción hasta el 31 de Diciembre de 1935).” dos plazas, las garantías que se acuerpian ción, por las razones que a continuación
Es cierto que el comerciante ha teni mutuamente ios dos gobiernos en sus se enuncian.
do que abandonar una parte de sus be respectivas juridicciones se verá alen ta-
neficios provenientes de la importación do por el efecto moral y político que de- El Japón ya no es aquel imperio asiáti
para compensar la falta de interés que be descontarse en el terreno interna io- co, aislado en sus costumbres exóticas y
ofrece el mercado japonés para nuestros nal y para .prc-stigio de nuestro país al en sus tradiciones pintorescas, que tan
frutos; pero este fenómeno se plantea estrechar lazos de amistad con una na-
constantemente en el intercambio del Ja magistralmente describiera Hearn y Gau-
ción de la más elevada cultura y de !>ri-
pón con otros mercados y en todos los thier. Es hoy una potencia formidable, a
mera fila entre las grandes potencia* .
casos el remedio ha consistido en pasar La aprobación de este convenio e ¡fa la que un proceso constante de supera
las pérdidas de la exportación al Japón ría además en concordancia con la or en ción ha convertido en un verdadero em
con parte de los beneficios de su impor tación tradicional de nuestras relacl en es porio de civilización y de trabajo, en el
tación. internacionales cuya tendencia ha sido que viven más de cien millones de labo
El caso de la Argentina nos es bien siempre atraer hacia el Uruguay to Jas riosos habitantes, que cultivan industrias
conocido: nuestros vecinos se han limi las posibles corrientes comerciales ai ro- cuyos productos primorosos todos admi
tado a otorgar una prima do exporta vechando su posición geográfica en el ramos.
ción de 10 oio solventada con lo produ continente. Compenetrado de la importancia del
cido por las diferencias de cambio apli Esta misma orientación tradicional jue Japón como mercado, nuestro Gobierno
cadas a las divisas acordadas para pago nos ha llevado a cultivar vínculos de inició hace tres años una política de pe
de las importaciones provenientes del Ja amistad con todas las naciones, de be netración comercial, de cuyos resultados
pón. Otro caso: La Unión Sudafricana,
guiarnos también para no prescindir de halagadores para nuestra exportación, da
invadida por mercaderías del Japón y un elemento cuya potencialidad ppoli i ca rán suficiente idea las cifras siguientes,
quejosa de que éste sólo le compraba unos
y económica en el lejano Oriente le :un suministradas por la Sección Estadigrafía
7.000 fardos de lana anuales, le cerró sus
fiere una indiscutible supremacía en ios de! Ministerio de Relaciones Exteriores.
fronteras. Los exportadores nipones pro
testan entonces ante su Gobierno, ei cual pueblos asiáticos y le ha colocado en pie
de igualdad frente a las grandes po íen- Exportaciones
resuelve obligar a sus filateras a elevar
sus compras de lanas sudafricanas hasta cias occidentales. i 924 a 1932 (promedio
20.000 fardos, compensándoles de los Como complemento ilustrativo se eijt;an anual) ........ 64.619
500.000 yenes de pérdidas que les produ las siguientes cifras arrojadas por el 9 an- 1933 ............ 541.827
co de la República: ‘‘ De las divisas co n- 1934 .............. 567.853
ce la operación, con un fondo producido
por la elevación de fletes de exportación troladas correspondientes al primer se- 1935 .............. 1.847.841
a la Unión Sudafricana. mestre del corriente año por importa “io-
nes y exportaciones al Japón, se ded|u.ice En cuanto a los meses transcurridos del
Por otro lado, las tarifas de aduana año en curso, permiten asegurar que las
del Japón para los productos uruguayos los siguientes datos:
cifras del año anterior serán superadas.
son uniformes para todos los productos Compras Ventas Es preciso hacer constar,- que las esta
similares de cualquier procedencia. Lo Exporta. Imports dísticas no han ofrecido hasta hace muy
mismo que nuestras tarifas para sus mer poco, sino cifras inferiores a las reales.
caderías. El Tratado no implica, pues, Japón $ 731.590 $ 423. En efecto: antes de entrar en vigor la ley
n'ngún sacrificio arancelario de nuestra
parte. Estas sumas responden: l.o Las c0m- de 9 de noviembre de 1934, cuyo artículo
pras sobre la base de ios porcentajes vi- 4.o obliga a todos los exportadores a de
En cambio, ambos países haft autori
gentes para los productos de exporta i)5n; clarar los destinos definitivos de las mer
zado a sus Poderes Ejecutivo.-: para adop
y 2.o Las ventas sobro la base de: c;¡.al caderías que salen del país, escapaban al
tar medidas de represalias contra '.as im contralor de la estadística nacional los
íiio libre dirigido.
portaciones provenientes de Estados que
hayan discriminado desfavorablemente su Por otra parte a esas cantidad;»; ijen- embarques de frutos destinados al Japón
dríainos que agregar la siguiente ¡ uri a: vía Buenos Aires, lo mismo que las car
producción nacional.
Japón, $ 210.000. Cambio libre (Im nes en conserva almacenadas en los puer
Por lo tanto, y para prevención de portaciones) . tos norteamericanos del Pacífico y desti
eventuales inconvenientes futuros, este nadas a ser distribuidas a través de los
intercambio comercial nuestro con el Ta El movimiento de sumas arriba mjen- mercados asiáticos y entre ellos, principal
pón que se presenta tan francamente cionado, proviene todo de convenios ins mente, el Japón.
próspero, debe ser estabilizado or ñor-, criptos por firmas de plaza con firmas co
merciales radicadas en el Japón.” El Imperio es hoy uno de los compra
mas que protejan su desarrollo y gal an dores fuertes de nuestros productos, ocu
ticen para nuestra producción el trata Cámara de Representantes. pando en orden de importancia por el mon
miento más favorable que pueda otorgar Comisión de Asuntos Internaciona to de sus adquisiciones en nuestro país,
se a los países de produción similqr. el décimo lugar, siendo de esperar que en
Además, el Japón como mercado im INFORME tiempo no lejano se convierta en uno de
portador, tiene que representar la mayor de nuestros primeros clientes, ya que sus
esperanza de las grandes potencias eco Señores Representantes: admirables industrias necesitan materia
nómicas de América del Sur (Argentina Vuestra Comisión de Asuntos Inter prima, que nosotros producimos abundan
y Brasil) quienes fatalmente tendrán que nacionales, ha realizado un detenido es temente.
real’ zar sacrificios arancelarios con el tudio del Tratado de Comercio y Nav ega- El cuadro sinóptico que va a continua
objeto de conquistarlo mientras que el ción, ajustado y firmado el 10 de m:: ¡yo ción permitirá a 'os señores Representan
Uruguay desde ya, sin sacrificio alguno d© 1934, por el doctor Alberto Mané, en- tes, hacerse una idea acabada de la im
estará en condiciones de obtener en opor tonces Ministro Secretario de Estado pa- portancia de nuestra exportación a la pro
tunidad esos mismos beneficios que se ra las Relaciones Exteriores y el se íor gresista nación asiática.
CAM ARA DE REPRESENTANTES N.o 9035 — 9 de Setiembre de 1936
EXPORTACION URUGUAYA A JAPON EN E L AÑO 1935
Unidad
Artículos Peso Cantidad Valor Cantidad Valor
Medida
Carnes—
Cueros—
Salados—