Está en la página 1de 1

ANOTACION PREVENTIVA, CADUCIDAD

Auto Supremo: 940/2015 - L
Sucre: 14 de octubre 2015
Por otra parte, en cuanto al término de la anotación preventiva el art. 1553.I del CC establece que “La
anotación preventiva caducará si a los dos años de su fecha no es convertida en inscripción…”.
Al efecto es preciso señalar que para algunos autores la caducidad de asientos en el registro de la
propiedad es aquella especie de prescripción extintiva que opera automáticamente por lo que es
apreciable de oficio, produce la pérdida de un derecho o de una acción, por su no ejercicio durante el
plazo señalado por la ley o la voluntad de los particulares, no admitiendo más causas de suspensión o
interrupción que el ejercicio por parte del titular.
Sobre la caducidad de la anotación preventiva la jurisprudencia constitucional estableció que: “Las
anotaciones preventivas tienen un carácter provisional, como su propio nombre indica y su finalidad
consiste en caducar o convertirse en inscripciones definitivas, por lo que el transcurso del tiempo las
acerca a su fin. Caduca una anotación preventiva cuando queda sin fuerza o pierde sus naturales efectos
por su singular contenido, que marca ya su duración, o por concepto legal que determine o fije el plazo
de su duración, no siendo necesaria la expresión de voluntad de los interesados para tales efectos o la
declaración judicial o administración de la extinción.
A los efectos de la caducidad, la extinción de la anotación se produce de un modo absoluto y la
caducidad produce efectos tanto respecto de las partes como de terceros. Al caducar una anotación
preventiva, está queda anulada, extinguida, por lo que debe estimarse como si nunca se hubiese
realizado. Es un asiento que ya no tiene vida o efecto jurídico por lo que se le considera inexistente frente
a todos; es decir, es un derecho que ha sido desregistrado y se encuentra en la misma situación que antes
de haberse anotado” conforme a lo expuesto la anotación preventiva es entendida como aquella
inscripción provisional, de efectos más o menos transitorios, cuyo objeto consiste en asegurar las resultas
de un juicio, en garantizar la efectividad de un derecho perfecto pero no consumado o en preparar una
inscripción definitiva y permanente, siendo una medida preparatoria, la doctrina ha establecido  como
características la provisionalidad o provisoriedad, Mutabilidad, Instrumentalidad o subsidiaridad y
Caducidad.
Teniendo presente dicho preámbulo, en el caso en cuestión el Juez de segunda instancia  en cuanto a la
aplicación de dichas normas aludidas, expresa: “ Las anotaciones preventiva de los títulos propietario de
venta de inmuebles en el registro de Derechos Reales con duración de dos años y prorroga de un año
más, son provisionales puede esta anotación preventiva convertirse en inscripción definitiva con efecto
retroactivo a la fecha de la anotación preventiva” “sin embargo de cualquier derecho inscrito  en el
intervalo” la anotación preventiva, como su nombre lo indica, es anotación provisional o si se quiere una
inscripción provisional que recae y grava por un tiempo determinado el derecho propietario del
vendedor, solo  los casos en que la anotación preventiva se convierte en inscripción definitiva, se lo toma
en cuenta para comparar con el título propietario de otros compradores retrotrayendo los efectos   a la
fecha de la primera anotación preventiva siempre que no se haya opera la caducidad de esta por el
vencimiento del plazo de los dos años y su prorroga de un año.”

También podría gustarte