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¿CUÁLES SON LAS CONSECUENCIAS

DEL PECADO?
Si has seguido el blog por algún tiempo, sabes que juntas hemos llegado a la
conclusión que el pecado tiene consecuencias. Esto es cierto aun en
situaciones donde sentimos que pecamos y no somos sorprendidas en el
acto. Estoy tan emocionada de que muchas de ustedes están de acuerdo
con nosotras de que aun en esas acciones que consideramos como
“pequeños pecados” impactan nuestra relación con Dios y nuestro
testimonio.
La Biblia deja claro que el pecado es algo muy serio. Pero ¿acaso muestra
las consecuencias específicas de nuestro pecado? ¡Claro que si!
De hecho, entender el costo exacto de nuestro pecado nos puede motivar a
movernos en dirección contraria de las acciones pecaminosas.

1. El pecado nos roba el gozo


“Restitúyeme el gozo de tu salvación, sostenme con un espíritu de poder”
(Salmos 51:12).

2. El pecado nos roba la confianza


“En esto sabremos que somos de la verdad, y aseguraremos nuestros
corazones delante de Él. En cualquier cosa en que nuestro corazón nos
condene; porque Dios es mayor que nuestro corazón y sabe todas las cosas.
Amados, si nuestro corazón no nos condena confianza tenemos delante de
Dios” (1 Juan 3:19-21).

3. El pecado trae culpa


“Porque yo reconozco mis transgresiones, y mi pecado está
siempre delante de mí” (Salmos 51:3).

4. El pecado apaga el Espíritu de Dios


“No apaguéis el Espíritu” (1 Tesalonicenses 5:19).
5. El pecado trae daño físico
“Señor, no me reprendas en tu enojo, ni me castigues en tu furor.
Porque tus saetas se han clavado delante de mí, y sobre mí ha
descendido tu mano. Nada hay sano en mi carne a causa de tu
indignación; en mis huesos no hay salud a causa de mi pecado”
(Salmos 38:1-3).
“Pues mi vida se gasta en tristeza, y mis años en suspiros; mis
fuerzas se agotan a causa de mi iniquidad” (Salmos 31:10).

6. El pecado causa dolor en el alma


“Mientras callé mi pecado, mi cuerpo se consumió con mi gemir
durante todo el día. Porque día y noche tu mano pesaba sobre mí;
mi vitalidad se desvanecía con el calor del verano. Te manifesté mi
pecado, y no encubrí mi iniquidad” (Salmos 32:3-5).

7. El pecado rompe el corazón de Dios


“Y no entristezcáis al Espíritu Santo de Dios, por el cual fuisteis
sellados para el día de la redención” (Efesios 4:30).

8. El pecado abre la puerta a otros pecados


“¡Ay de los hijos rebeldes declara el Señor que ejecutan planes,
pero no los míos, y hacen alianza, pero no según mi Espíritu, para
añadir pecado sobre pecado! (Isaías 30:1)

9. El pecado rompe la comunión con Dios


“He aquí, no se ha acortado la mano del Señor para salvar; ni se
ha endurecido su oído para oír. Pero vuestras iniquidades han
hecho separación entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros
pecados le han hecho esconder su rostro de vosotros para no
escucharos”  (Isaías 59:1-2).

10. El pecado produce temor


“El impío huye sin que nadie lo persiga, mas los justos están
confiados como un león” (Proverbios 28:1).

11. El pecado desea controlar mi vida


“Jesús les respondió: En verdad, en verdad os digo que todo el
que comete pecado es esclavo del pecado” (Juan 8:34).
“¿No sabéis que cuando os presentáis a alguno como esclavos
para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, ya sea
del pecado para muerte, o de la obediencia para la justicia?”
(Romanos 6:16)

Usualmente pecamos porque pensamos que obtendremos placer o beneficio


de ello. Pero estos pasajes muestran claramente que escoger hacerlo
acarrea un alto precio. Y esto ni siquiera es una lista exhaustiva. Hay
muchas, muchas consecuencias potenciales que vienen por nuestros
pecados. Basada en mi experiencia personal yo añadiría a esa lista
relaciones tensas, ansiedad y depresión.
¿Qué consecuencias añadirías tú? ¿Has experimentado consecuencias
en tu propia vida? ¿Cómo crees que reflexionar en estas consecuencias
marca alguna diferencia a la hora de enfrentar una tentación?
¿Estás atrapado en el pecado y no sabes cómo deshacerte de él?

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