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PURIFICACION DEL ALMA PARA SAN AGUSTIN Y LOS JOVENES

Maria Camila Rodriguez Montaño

I.E.D La Unión

Lengua castellana

Banezza Contreras Villareal

Abril 3 de 2023
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Resumen

En este trabajo encontraremos las claves fundamentales de la doctrina sobre el alma de san

Agustín de Hipona, dando a conocer los pensamientos del filósofo sobre lo que definía como

buscar su propia alma, adentrarse en su santuario, descubrir la imagen de Dios en ella, su

bondad, su grandeza, su vida para volverla luego a Dios, su origen y meta de todos sus

esfuerzos. Conceptos los cuales al mismo tiempo servirán al joven para alcanzar la tan

anhelada purificación de su alma por medio de la charla y conexión con nuestro Creador.
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La purificación del alma

‘‘Quien conoce la verdad, conoce esta luz, y quien la conoce, conoce la eternidad. La

caridad es quien la conoce’’ (Conf. 7, 10, 16).

San Agustín trajo junto consigo un nuevo punto de vista filosófico en su época por su

riqueza y profundidad, generando un antes y después en el cristianismo. Abordo distintos

conceptos tales como son: la naturaleza de Dios, la espiritualidad, la importancia del

lenguaje, las características de lo humano en su relación con lo divino etc., pero, ante todo,

son los temas que quiero abordar en la presente nota, profundizó en la verdad, la amistad y

el amor.

Su vida, sus luchas, sus pasiones, sus amores, su búsqueda incansable de la

verdad, del amor, de la amistad, son aspectos que incluye en su discurso haciendo que no

solo se le admire, sino que logra que el joven simpatice con él, se sienta identificado en él.

Sin duda vemos un gran enfoque en lo que radica el concepto de verdad, la que

define en si como verdad espiritual abordando nuevos conceptos como lo que es el alma,

hablando de esta como aquella que nos puede conducir hasta la ansiada verdad, pero al

tiempo expresa de su preocupación ante la impurificación de esta gracias a los deseos

impuros del cuerpo. Pero entonces como jóvenes siendo tan fáciles a caer en tentaciones,

pero al mismo tiempo anhelando la dichosa verdad, ¿cómo podemos mantener nuestra

alma pura?, o más bien ¿cómo podemospurificar nuestra alma?

Anteriormente se mencionaba el amor como tema abordado por este filósofo, pero no

debemos enfocarnos en el sentido literal de la palabra amor ya que con amor Agustiniano

quiere dar a entender amor a la sabiduría, lo que le lleva al hallazgo dela Verdad, a abrazarse

a ella misma por amor y proseguir el viaje de la vida ancladoen la Verdad. Para ser claros,

Agustín definía a el amor, un amor personal, bueno ylícito porque es un amor al bien, una

tendencia a buscar el bien para uno mismo y para los demás, el bien, que para San Agustín
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es equivalente a buscar a Dios, es elnivel de amor más alto del ser humano, surge de la fe en

Dios y de la gracia divina.

Pero, el amor no es lo único que nos garantiza la sabiduría, ¿de qué sirve tener amor

sino se teniente precaución de lo que nos la pueda arrebatar?

Es términos simples primero veamos el concepto del hombre de Agustiniano como

unión de alma y cuerpo, pero a diferencia de Platón lo explica como unidad: “Dios creó al

hombre entero, alma y cuerpo, juntándolos para que viviesen en pacífica convivencia, porque

la materia corporal no es mala, ni su unión con ella especaminosa” (Qu. An. 3, 443). “El alma

ha sido creada por Dios” (Qu. An. 1, 2) y esel principio de la existencia, es la mente, la que

posibilita los racionamientos y la adquisición de conocimientos. El cuerpo es gobernado por

el alma y sometido al mundo. Dios es la verdad y el alma la razón, por lo tanto, al buscar la

verdad el hombre se acerca a Dios. La verdad no es algo externo al hombre: Es una realidad

viviente y actuante en el interior. “En el hombre interior habita la verdad […] A la verdad no se

llega pensando o discurriendo, sino que ella misma se manifiesta a losque la desean” (Vera

rel. 47-90).

El alma es una sustancia superior a todas las demás criaturas del mundo sensible.

San Agustín libra a Dios de la responsabilidad del mal explicando en qué sentido elpecador

procede y no procede de Dios. Primero, procede de Dios por la vida que tiene, que no se la

ha dado a sí misma, sino que es don de Dios. Y no procede de Dios cuando actúa mal por su

libertad; no es impelido a pecar por Dios, pues la noción de pecado agustiniana exige que

pueda haber la posibilidad de actuar de otra manera, en este caso mal, lo cual no es ni

siquiera imaginable en Dios (cf. Hipona De, trad. 1986b, 6, 9).

Para San Agustín "el libre albedrío fue concedido al hombre para que conquistara

méritos, siendo bueno no por necesidad, sino por libre voluntad", además, "es soporte de
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todo el orden moral, el principio esencial de un mundo de valores superiores, y, por

consiguiente, un grande bien. Pero a la vez supone la facultad deelegir el mal, es decir, la

facultad de caer, que es una imperfección de la voluntad humana", de aquí la explicación de

que Dios no es el culpable del mal en el mundo.

En pocas palabras nos habla de cómo la libertad hace de que el cuerpo tome controldel

alma llevándola a alejar de su estado puro, la libertad no se entiende como algodado ya en el

ser humano, y en esa medida se contradice porque ser libre, desde esa noción, adquiere un

sentido de pasividad: se gozará o no de la libertad dependiendo del escenario en el que uno

se encuentra. Aunque no se puede negarque por parte del libertinaje tiene razón ya que si nos

dejamos llevar mucho de hacerlo que queramos sin tener en cuenta las consecuencias puede

llevar a arrepentimientos o en palabras de Agustiniano ‘‘Alejamiento de la verdad’’.

"Cada alma sigue la suerte de aquello que ama" (Hipona De, trad. 2005, 7, 1). El

amor es el peso del alma. Donde radique el interés del alma, allí encontrará su felicidad. Mas,

si su fundamento no es estable; si no es Dios, se vaciará, se hincharáde soberbia y no se

librará de las ataduras de este mundo para volar por encima desí.

Desde la doctrina de san Agustín ha sido posible mostrar la existencia del alma, su

inmortalidad, la grandeza de sus potencias y su relación con su Creador, que es suorigen y el

fin al que ha de tender en su esfuerzo por conservar intacta la imagen suya que lleva en sí. Y

ha sido posible también trazar un itinerario de ascensión hasta Dios, itinerario que se concreta

en la misma alma, en la atención a su dignidady excelencia, por medio de la cual Agustín

indica el modo de subida.

Entonces, respondiendo a la pregunta, ¿Cómo purifico mi alma?, desde mi

perspectiva como joven considero que el concepto purificar es incorrecto más biendiríamos

que es limpiar conciencia, porque al final de cuentas pienso que el humanono puede ser puro

en totalidad ni en vida como en muerte, todo está en ser buenaspersonas y arrepentirnos de


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lo que sabemos que está mal, dejando así mismo las malas costumbres, así como

amistades.
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Referencias

 Ottaviani, D. (2011). ¿Qué es el Agustinismo? Criticón, 111–112, 11–24.

https://doi.org/10.4000/criticon.2511

 Saeteros Pérez, T. (2013). Por mi alma subiré a Dios: El concepto de alma de san

Agustín de Hipona. Civilizar, 13(25), 189–210.

http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1657-

89532013000200013

 (S/f). Recuperado el 4 de marzo de 2023, de

http://file:///C:/Users/Usuario/Downloads/MiriamMartinezLibertadFinalidadSanAgustin.

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