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Facultad de Educación

Profesorado de Enseñanza en ____________________________________________________________


Ciclo I-2022
Taller de Lectura y Escritura EVALUACIÓN PARCIAL 1
Facilitadora: Inga. Claudia Valdés

NOMBRE: _______________________________________________________ CARNÉ_______________


SERIE ÚNICA (5 puntos)
INSTRUCCIONES: Lea cuidadosamente el siguiente párrafo y resalte la respuesta correcta entre las
opciones que se le presentan posteriormente. Solamente puede elegir una respuesta o la pregunta será
inválida. Si no conoce la respuesta deje su pregunta sin responder. UNA RESPUESTA MALA LE RESTARÁ
UNA PREGUNTA BUENA.

Fragmento de “EL PROFETA”


(Gibrán, 1923)

Los Niños
Y una mujer que sostenía un niño contra su seno pidió: Háblanos de los niños.

Y él dijo:

Sus hijos no son hijos suyos.


Son los hijos y las hijas de la Vida, deseosa de sí misma.
Vienen a través de ustedes, pero no vienen de ustedes.
Y, aunque están con ustedes, no les pertenecen.
Pueden darles su amor, pero no sus pensamientos.
Porque ellos tienen sus propios pensamientos.
Pueden albergar sus cuerpos, pero no sus almas.
Porque sus almas habitan en la casa del mañana que ustedes no pueden visitar, ni siquiera en
sueños.
Pueden esforzarse en ser como ellos, pero no busquen el hacerlos como ustedes.
Porque la vida no retrocede ni se entretiene con el ayer.
Ustedes son el arco desde el que sus hijos, como flechas vivientes, son impulsados hacia delante.
El Arquero ve el blanco en la senda del infinito y los doblega con Su poder para que Su flecha vaya
veloz y lejana. Dejen, alegremente, que la mano del Arquero los doblegue. Porque, así como Él ama
la flecha que vuela, así ama también el arco, que es estable.

El Dar
Entonces, un hombre rico dijo: Háblanos del dar.

Y él contestó:

Dan muy poca cosa cuando dan de lo que poseen.


Cuando dan algo de ustedes mismos es cuando realmente dan.
¿Qué son sus posesiones sino cosas que atesoran por miedo a necesitarlas mañana?
Y mañana, ¿qué traerá el mañana al perro que, demasiado previsor, entierra huesos en la arena sin
huellas mientras sigue a los peregrinos hacia la ciudad santa? ¿Y qué es el miedo a la necesidad sino
la necesidad misma?
¿No es, en realidad, el miedo a la sed, cuando el manan tial está lleno, la sed inextinguible?
Hay quienes dan poco de lo mucho que tienen y lo dan buscando el reconocimiento y su deseo
oculto malogra sus regalos.
Y hay quienes tienen poco y lo dan todo.
Son éstos los creyentes en la vida y en la magnificencia de la vida y su cofre nu nca está vacío.
Hay quienes dan con alegría y esa alegría es su premio.
Y hay quiénes dan con dolor y ese dolor es su bautismo.
Y hay quienes dan y no saben del dolor de dar, ni buscan la alegría de dar, ni dan conscientes de la
virtud de dar.
Dan como, en el hondo valle, da el mirto su fragancia al espacio.
A través de las manos de los que como esos son, Dios habla y, desde el fondo de sus ojos, Él sonríe
sobre la tierra.
Es bueno dar algo cuando ha sido pedido, pero es mejor dar sin demanda, comprendiend o.
Y, para la mano abierta, la búsqueda de aquel que recibirá es mayor goce que el dar mismo.
¿Y hay algo, acaso, que puedan guardar? Todo lo que tienen será dado algún día.
Den, pues, ahora que la estación de dar es suya y no de sus herederos.
Ustedes dicen a menudo: "Daría, pero sólo al que lo mereciera." Los árboles en su huerto no dicen
así, ni lo dicen los rebaños en su pradera.
Ellos dan para vivir, ya que guardar es perecer.
Todo aquel que merece recibir sus días y sus noches, merece, seguramente, d e ustedes todo lo
demás.
Y aquel que mereció beber el océano de la vida, merece llenar su copa en el pequeño arroyo de
ustedes.
¿Y cuál será mérito mayor que el de aquél que da el valor y la confianza -no la caridad- del recibir?
¿Y quiénes son ustedes para que los hombres les muestren su seno y se descubra su orgullo , para
que así vean sus merecimientos desnudos y su orgullo sin confusión?
Miren primero si ustedes mismos merecen dar y ser un instrumento del dar.
Porque, a la verdad, es la vida la que da a la vida, mientras que ustedes, que se creen dadores, no
son sino testigos.
Y ustedes, los que reciben -y todos ustedes son de ellos- no asuman el peso de la gratitud, si no
quieren colocar un yugo sobre ustedes y sobre quien les da.
Elévense, más bien, con el dador en su dar como en unas alas.
Porque exagerar la deuda de ustedes es dudar de su generosidad, que tiene el libre corazón de la
tierra como madre y a Dios como padre.

PREGUNTAS
1. En la lectura, la palabra “inextinguible” significa:
a. Que no desaparece
b. Que no se apaga
c. Que no tiene extinguidor
d. Ninguna de las anteriores respuestas
2. En la lectura, la palabra “flecha” significa:
a. Los padres
b. Los hijos
c. Dios
d. Ninguna de los anteriores respuestas
3. En la lectura, la palabra “senda” significa:
a. Ruta
b. Uno para cada una
c. Bolsa
d. Ninguna de las anteriores respuestas
4. Cuando dice en la lectura: “Es bueno dar algo cuando ha sido pedido, pero es mejor dar sin
demanda, comprendiendo” se refiere a:
a. Dar generosamente, pero esperando gratitud
b. Dar siempre porque comprendemos la situación de las personas
c. Si se nos demanda es mejor dar inmediatamente
d. Ninguna de las respuestas anteriores
5. Cuando dice en la lectura “Dan como, en el hondo valle, da el mirto su fragancia al espacio”,
significa que:
a. Hay que dar en el hondo valle
b. Hay que dar fragancia a todos.
c. Hay que darle al espacio
d. Ninguna de las anteriores respuestas
6. Cuando dice en la lectura “…mientras que ustedes, que se creen dadores, no son sino testigos”,
significa que:
a. Lo que tenemos o damos, en realidad no nos pertenece
b. Dadores es lo mismo que testigos
c. Para dar necesitamos testigos
d. Ninguna de las anteriores respuestas
7. Cuando dice en la lectura “…qué traerá el mañana al perro que, demasiado previsor, entierra
huesos en la arena sin huellas…”
a. No hay que guardar por guardar, si realmente se usará lo guardado
b. No hay que guardar en la arena como el perro
c. No hay que dejar huellas en la arena
d. Ninguna de las respuestas anteriores
8. Cuando en la lectura dice”…así como Él ama la flecha que vuela, así ama también el arco,
que es estable….” Se refiere a que:
a. La flechas y los arcos son iguales
b. Siempre van arcos y flechas cuando alguien los ama
c. Dios ama por igual a los hijos y a los padres
d. Ninguna de las respuestas anteriores
9. Cuando en la lectura dice: ““Daría, pero sólo al que lo mereciera." Los árboles en su huerto no
dicen así, ni lo dicen los rebaños en su pradera.” Se refiere a que:
a. Los árboles no hablan en el huerto
b. Los árboles dan frutos a todos, sin preguntar si lo merecen.
c. Los árboles dan frutos a los rebaños en su pradera
d. Ninguna de las respuestas anteriores
10. Cuando en la lectura dice: “Todo aquel que merece recibir sus días y sus noches, merece,
seguramente, de ustedes todo lo demás.” Se refiere a que:
a. Si pasan el día y la noche pidiendo merecen recibir
b. Si reciben sus días y sus noches, también merecen recibir de nosotros
c. Seguramente reciben de nosotros de día y de noche
d. Ninguna de las respuestas anteriores.

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