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Perdiguero de Burgos

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Perdiguero de Burgos

Región de origen

Características

Tipo perro

Otros datos

Federaciones FCI1

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El Perdiguero de Burgos es una raza de perro autóctona de España.


Originaria de Castilla, sobre todo de la provincia de Burgos, esta raza rústica se
destina a la caza y posee unas características excepcionales para la caza
menor.
Se trata de una raza de perro de muestra, (también llamada pointer o
perdiguera).

Índice

 1El origen del perro doméstico


 2El origen del perro de muestra
 3El origen del perdiguero de Burgos
 4Historia de 1911 a la actualidad
 5La raza a partir de 1911
 6Referencias
 7Véase también
 8Enlaces externos
El origen del perro doméstico[editar]
Para hacernos una idea de los orígenes del perro doméstico, del que
descienden todas las razas actuales, la hipótesis más aceptada es que procede
del lobo2.3
Cánidos y humanos hace 15.000 años seguían a los rebaños de otras especies
de las que se alimentaban, y en ese tiempo, bien fuera porque los hombres
observaron que podrían utilizar las habilidades de los cánidos para la caza, o
bien porque estos aprendieron a alimentarse de los restos de las cacerías
humanas, surge el primer contacto entre ambas especies. 4
Las primeras aportaciones del perro al hombre fueron dos: por un lado, la ya
mencionada colaboración en la caza, y en segundo lugar, la protección de los
campamentos. En este momento ya surge la necesidad de dos tipos de perros:
uno formado por perros de caza y (…) otro formado por perros de guarda. (…)
Pero pronto surge la domesticación de la oveja, que fue la segunda especie en
hacerlo, y con ello aparece el perro de tipo Pastor (…), que colabora con el
hombre en las labores de manejo (…).
Por tanto, se puede admitir que estos fueron los principales troncos originarios
del Perro Doméstico, y a partir de cruces, y de duros procesos selectivos
apoyados en una gran variabilidad genética de partida, se ha llegado a
nuestros días con la gran diversidad racial que conocemos (…).”
Hasta aquí hemos visto cómo surgieron los primeros perros domésticos.

El origen del perro de muestra[editar]


El origen del perro de muestra, antes de la aparición de las armas de fuego,
está en la caza con red y en la cetrería como ayudante de las rapaces.
El perro de muestra nace ligado a la caza con red y la cetrería –en este último
caso en España primero bajo influencia visigoda y musulmana después-, pero
el siglo XVIII, época del nacimiento o consolidación definitiva de nuestra raza, se
caracteriza por un abandono casi total de las actividades de cetrería, ya que no
existen citas en la bibliografía de dicho periodo, por lo que la opción más lógica
es ligar al perdiguero de Burgos con el establecimiento general de las armas de
fuego que tiene lugar en esas fechas. De hecho, en el cuadro que veremos en
el submenú siguiente se plasma perfectamente esa relación.

El origen del perdiguero de Burgos[editar]


La imagen más antigua que existe de perros de la raza aparece en el cuadro
titulado “Retrato en traje de caza del Príncipe Carlos”, realizado por Rafael
Mengs en 1765. En la parte inferior izquierda del cuadro nos encontramos con
la inconfundible estampa de un perdiguero de Burgos: se representa
perfectamente un perro de la raza ya en 1765. Aunque, como ya hemos visto,
el perro de muestra nace ligado a la caza con red y la cetrería, en el siglo XVIII,
época del nacimiento o consolidación definitiva de la raza –pues no existen
citas ni representaciones anteriores-, la opción más lógica es ligar al perdiguero
de Burgos con el establecimiento general de las armas de fuego que tiene lugar
en esas fechas. De hecho, en el cuadro se plasma perfectamente esa relación.
El perdiguero de Burgos nació ligado a las clases privilegiadas, ya que
entonces el pueblo común tenía restringida la actividad cinegética, y debe
asociarse por lo tanto, como en el propio cuadro se representa, a clases
económicamente pudientes, aristocracia y clero, que son las que además
pueden con mayor facilidad dedicarse a una labor de selección, ellos mismos o
a través de sus Guardas de caza, para crear un perro adaptado y poder
disfrutar de sus privilegios en la caza.
La primera persona en exponer el origen de la raza en 1956 fue Don Fernando
Huerta Ramírez, un gran defensor del perdiguero de Burgos. 5
Nuestra raza no surgió por casualidad: nuestros antepasados buscaban un
perro que compaginase las virtudes de un perro de muestra con las de un perro
de rastro. De hecho, del sabueso ha adquirido la facilidad de seguir los rastros,
su afición a las piezas de pelo e incluso la caza mayor, su ladrido tan
característico y las líneas cráneo-faciales divergentes, típicas de la raza. Del
perro de muestra ha adquirido la capacidad de muestra, su sistema de caza,
siempre pendiente del dueño, y el cobro o entrega de la pieza al cazador.

Historia de 1911 a la actualidad[editar]


Dispersión geográfica de la raza y el patronímico “de Burgos”. El apellido de la
raza parece que intenta circunscribir al perdiguero a una zona determinada,
cuando su dispersión geográfica históricamente ha sido mucho más amplia, y
el único argumento a su favor es que en dicha zona la densidad de perros de la
raza a comienzos del siglo XX era la más elevada en España. Durante finales
del XIX y principios del XX era normal encontrar perdigueros en Madrid,
Cataluña, distintas provincias de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Aragón,
La Rioja, Navarra, y en general en el valle del Duero y valle del Ebro. Por lo
tanto yerra quien intente circunscribir el ámbito del perdiguero a comienzos del
1900 en una zona determinada, si bien su origen está indudablemente entre
ambos valles.

La raza a partir de 1911[editar]


El perro Perdiguero de Burgos es una raza canina que posee un origen, al
menos para mí, un tanto confuso, pues la ausencia de datos escritos y las
escasas noticias que sobre ella poseemos nos inducen a creer que
cinófilamente hablando es una agrupación étnica relativamente reciente, si la
comparamos con otras razas caninas.
Si cierto es que la evolución de las razas de perros de muestra ha tenido una
marcha paralela a la que ha seguido el desarrollo de las artes y armas de caza,
no es menos probable también que ciertas razas son el origen de las que
posteriormente se han derivado de ellas.
Los cazadores primitivos no conocían el perro de muestra y fueron
precisamente los pueblos mediterráneos los que primero nos han dado noticias
sobre el hecho de que el perro se quedase parado ante la presencia de la caza.
El cazador apreció rápidamente la gran ventaja que suponía esta parada del
perro, que dejaba a las piezas en una inmóvil atención que el hombre
aprovechaba para lanzar la red sobre los animales y así capturarlos. Fueron
aquellos primitivos perros capaces de pararse y parar a su vez la caza, los que
inicialmente fueron seleccionados por el cazador hasta conseguir que la
muestra rudimentaria que casi todos los depredadores poseen antes de
lanzarse sobre su víctima se hiciese en ellos particularmente definitiva y firme.
Los autores, como frecuentemente sucede, no logran coincidir en las teorías
sobre orígenes de animales y mientras unos afirman que el perro de muestra
es originario de Italia, otros opinan que de Francia o España (según la
nacionalidad del autor) la que los vio nacer.
Sobre la formación del actual perro Perdiguero de Burgos las noticias son nulas
y únicamente podremos aplicar los parámetros que se estudian para formar
una raza, que son:

 Tiempo y lugar de formación.


 Base genética aportada a la raza.
 Adaptación al medio en que nace.
 Aislamiento geográfico y consanguinidad operada.
En cuanto al primero de ellos, al no ser una raza creada ex proceso por el
hombre, con medidas dosis de una u otra sangre, tanto el tiempo como el lugar
de formación son inciertos. Una raza no se cimenta en espacios de tiempo
cortos y al no tener una selección inicial en un solo punto, no podemos pensar
que el lugar de nacimiento ha sido solamente un determinado lugar.
¿Nació el Perdiguero en Burgos únicamente? Rotundamente: ¡No! Esta raza
nació en la zona de Castilla que corresponde a lo que hoy es la mitad de la
meseta norte. El nombre patronímico que hoy acompaña a la raza pertenece a
la historia moderna. Más adelante explicaremos por qué.
Para precisar el tiempo nos tendremos que guiar por noticias escritas y
bibliografía en general, y aun así, como a continuación veremos, las
descripciones de las razas son escasas y genéricas.
La palabra «perdiguero» se repite con frecuencia en textos clásicos sobre
venatoria y su referencia corresponde al perro cazador genérico de perdices,
«perdicero» o «perdiguero», pero no se puede presuponer a la ligera que fuese
ese perro un perdiguero de Burgos. En numerosos textos actuales podemos
leer diversas teorías sobre el origen de la raza. El más absoluto confusionismo
se desprende de su conjunto una vez analizados por separado. Los errores
más frecuentes que demuestran una pobre labor de investigación son las
siguientes:

 Asociar la palabra perdiguero a la raza Perdiguero de Burgos.


 Creer que los perros de muestra, según nos hablan los clásicos españoles,
eran Perdigueros de Burgos y olvidar que fuesen otras razas.
 Definir como Perdiguero de Burgos a los perros que autores desde
Velázquez a Goya han ido plasmado en numerosos lienzos donde se
reproducen perros de caza.
 Definir incomprensiblemente y a la ligera al Perdiguero de Burgos como
origen del pointer inglés, o bien en un alarde de entusiasmo patriótico,
considerarlo además como el padre de todos los bracos europeos.
Remitiéndose a los clásicos, encontramos que el Rey Alfonso XI en su Libro de
Montería y el francés Gaston Phoebus, en las postrimerías del siglo XIV, nos
hablan el primero de sabuesos y el segundo de un perro de pluma que el autor
francés denomina "español", pero de pelo largo, de extraordinaria sagacidad
para la caza de aves y que realizaba la muestra.
Diálogos de Montería, manuscrito anónimo que se conserva en la Biblioteca del
Escorial (s. XVI) en conversación mantenida entre los contertulios Montano y
Silvano, nos da una interesante localización geográfica como cuna de buenos
perros: Navarra. Nos habla también (página 467 y siguientes) de los perros
agozcados – de la raza Goth- de los perros navarros y del cruce de ambas
razas que nos dará como resultado un excelente perro de perdiz.
Llegamos a la conclusión, tras hablar con numerosos hispanistas, incluso
eminentes traductores y lingüistas de la Universidad Complutense, de que la
palabra Goth significaba «godo» y que los perros agozcados eran los perros de
caza de una minoría étnica humana conocida como Agotes y que vivían y viven
en un barrio de Arizcum, llamado Bozate, en Navarra. El diccionario
enciclopédico Espasa Calpe nos confirmó nuestra teoría. «En el valle de
Baztán, en Navarra, existe una minoría étnica conocida como agotes en
Bazote.»
Los agotes navarros están racialmente emparentados con los agots o cagots,
grupos étnicos que habitaron en Francia, desde Bayona a Bretaña. De
cualquier forma estos nombres derivan de la palabra goth, godo. Estas
agrupaciones étnicas se cree que descienden de los visigodos. Hace
doscientos años se les intentó trasladar a una zona cercana a Madrid, llamada
Nuevo Baztán, pero todos regresaron a Navarra. Su censo en 1949 era de 209
individuos (Espasa Calpe).
Indudablemente la raza de perros que estos hombres poseían debía ser una
subraza parecida al perro de muestra de pelo largo del Pirineo o simplemente
la misma extendida en ambas vertientes de los Pirineos. Esta similitud entre
razas pirenaicas queda avalada por la que existe entre pastores catalanes y
pastores del Pirineo, mastines y montañas del pirineo o simplemente entre
razas como los antiguos bracos d´Arriège y Carlos X y nuestros antiguos
pachones como lo demuestran las fotografías que se muestran en el libro del
Conde de Bylandt (finales del s. XIX).
Juan Vallés en 1556, capítulo XVI, de su Tratado de Montería y Cetrería, nos
habla de las mutilaciones en las orejas y cola de los perros para perdices, pero
tampoco se refiere a la raza del Perdiguero de Burgos.
Martínez del Espinar en 1644, en su libro El Arte de Ballestería y Montería
(Pág. 58) nos cita el perro navarro o francés, ya que como antes decíamos se
distribuía en ambos lados del Pirineo y nos presenta a un perro lento y
cilíndrico (se refiere al tronco), pero de excelente nariz.
Más adelante (Pág. 240 y siguientes) nos informa de los «perros de muestra»,
tam

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