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El documento describe tres tipos de jueces según la filosofía del derecho: 1) Júpiter, que se basa estrictamente en la ley y los códigos, 2) Hércules, que intenta encontrar la única respuesta correcta considerando todos los factores de cada caso, y 3) Hermes, que debe lidiar con una multiplicidad de actores y tipos de normas en una sociedad posmoderna donde el derecho forma una red compleja.
Descripción original:
Tipos de jueces que existen dentro de la filosofía del derecho
El documento describe tres tipos de jueces según la filosofía del derecho: 1) Júpiter, que se basa estrictamente en la ley y los códigos, 2) Hércules, que intenta encontrar la única respuesta correcta considerando todos los factores de cada caso, y 3) Hermes, que debe lidiar con una multiplicidad de actores y tipos de normas en una sociedad posmoderna donde el derecho forma una red compleja.
El documento describe tres tipos de jueces según la filosofía del derecho: 1) Júpiter, que se basa estrictamente en la ley y los códigos, 2) Hércules, que intenta encontrar la única respuesta correcta considerando todos los factores de cada caso, y 3) Hermes, que debe lidiar con una multiplicidad de actores y tipos de normas en una sociedad posmoderna donde el derecho forma una red compleja.
DERECHO. ÍNDICE TIPOS DE JUECES QUE COMPRENDEN LA FILOSOFÍA DEL DERECHO.............................................................2 JÚPITER, LA PIRÁMIDE Y EL CÓDIGO.......................................................................................................... 2 HÉRCULES, EL EMBUDO Y EL DOSSIER........................................................................................................ 2 HERMES, LA RED Y EL BANCO DE DATOS.................................................................................................... 3 Tipos de jueces que comprenden la filosofía del derecho. No existe de manera evidente ningún otro modelo de referencia, ninguna otra definición unívoca de una profesión que tienda a volverse tan multiforme y pluralista”. La constatación, a su vez, se inscribe en la observación de un campo judicial y jurídico definido como “heterogéneo y complejo”, de tal manera que las evoluciones en curso impiden “toda referencia a la idea de un modelo¨.
Júpiter, la pirámide y el código.
Se le conoce como el derecho jupiterino, este derecho adopta la forma de ley, se expresa en el imperativo y da preferencia a la naturaleza de lo prohibido, intenta inscribirse en un depósito sagrado, tablas de la ley o códigos y constituciones modernas, siendo así el mas terrenal y el mas realista.
Modelos de la pirámide o del código, es uno de los modelos clásicos que continúa siendo enseñado en las facultades de Derecho y que mantiene las representaciones canónicas de los juristas, modelos que además conserva alguna forma de aplicación práctica, es el modelos del derecho codificado. La inspiración de tal derecho está ligado a un autor único y supremo: Licurgo, Solón, Justiniano o Napoleón. Jean-Jacques Rousseau
Hércules, el embudo y el dossier.
Es Ronald Dworkin quien sugiere aunque más tarde Francois Ost sugiere la aparición del segundo modelos de juez ¨herculáneo¨ aplicado sobre la tierra, toma la figura de revolución, que hace del juez, la fuente único derecho válido.
En una de las huellas de las diversas corrientes que se declaran realistas pensamos en el “realismo americano” y particularmente en la ¨sociological jurisprudence¨, entra en juego un modelo que calificaría de embudo (pirámide invertida) o de dossier. Este juez herculáneo particularmente se designa para los trabajos agotadores de juzgar y acaba por llevar el mundo sobre sus brazos extendidos, reproduciendo así fielmente la imagen de embudo siendo él modelo de juez más infalible, sabio, capaz de encontrar la única respuesta correcta.
Hay algo trágico en la figura de Hércules, como también en la de Prometeo, que no es ajeno a aquél: ¿No se dice que fue Hércules, precisamente, quien liberó a Prometeo del peñón caucásico al que estaba encadenado por haber robado el fuego de los dioses para regalárselo a los hombres? Hércules, como es bien sabido, fue castigado con la maldición de Hera; él no dejaba de expiar el infanticidio que ella le había incitado a cometer. Su actividad desbordante determinó el perdón de esta falta.
Hércules está presente en todos los frentes, decide e incluso aplica normas como lo hacía su predecesor que se amparaba en la sombra del código (jupiterino); pero también lleva a cabo otros trabajos. En el precontencioso aconseja, orienta, previene; en el poscontencioso sigue la evolución del dossier, adapta sus decisiones al grado de circunstancias y necesidades, controla la aplicación de las penas. (El juez jupiterino era un hombre de ley; respecto a él, herculáneo se desdobla en ingeniero social).
Hermes, la red y el banco de datos.
Hermes es el mensajero de los dioses, el que siempre está en movimiento, está a la vez en el cielo, en la tierra y en los infiernos; es el mediador universal, el gran comunicador, no conoce otra ley que la circulación de los discursos, a diferencia de la pirámide de Júpiter y del embudo de Hércules, Hermes adopta la forma de una red, el juez Hermes es capaz de dar cuenta de la complejidad del ̈derecho posmoderno ̈, un derecho en el que interviene una multiplicidad de actores jurídicos (el protagonismo no lo tiene ya sólo el juez y el legislador, sino también las asociaciones, los particulares etc.) un derecho en el que se actualiza una superposición de funciones (entre la jurisdicción y la administración, las autoridades judiciales y administrativas y los comités de ética, etc) y finalmente un derecho en el que se distingue una variedad de tipos de normas (normas de fin, principios, etc).
La imagen de la red se impone hoy en un buen número de campos. El peligro al que se expone el análisis de este paradigma nuevo y complejo es el de caer en el esoterismo. Se ha evocado, por ejemplo, la estructura en “rizoma”[1], la “hetararquía”[2], o incluso las “anastomosis” del Derecho. El riesgo es grande desde el momento en que se descubre la posibilidad de monopolizar la interpretación, la necesidad de renunciar a toda interpretación y contentarse con registrar una multitud de miniracionalidades en el seno de una racionalidad global incontrolable a partir de ahora.
[1] Sistema sin centro, no jerárquico y no insignificante, sin dirección y sin memoria organizadora o autómata central, únicamente definido por una circulación de estados. [2] Programa de monitores y consistente exclusivamente en redes de transiciones entremezcladas.